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Uno diría ¡JEHOVA lo perdono con todas las cosas malas que hizo! Y
no fue sin intensión si no por ofenderlo, como que se ve difícil,
¿verdad?
Pero que sucede con nosotros a uno le hacen daño no por ofendernos
sino por equivocación y nosotros no estamos dispuestos a perdonar es
como si nos consideráramos superior a JEHOVA como si
dijéramos que nosotros valemos más que JEHOVA, y decimos el
me la hizo y no le voy a perdonar y eso es algo sumamente peligroso.
Por qué no estamos perdonando e inclusive asta guardamos rencor.
De hecho eso podemos compararlos con la polilla, pero que pasa con
la polilla, la polilla ataca la madera, puede ser una puerta, una silla,
inclusive este mismo atril, usted lo ve muy bien en buenas condiciones,
pero sabía usted que la polilla puede estar aquí mismo sin que se dé
cuenta y es porque ingresa por un hueco muy pequeño y ataca la parte
inferior de la madera donde a simple vista uno no pueda verla y usted
puede estar ocupando este atril cuando de repente se desbarata, se da
cuenta que está totalmente hueco, con nosotros los siervos de
JEHOVA sucede lo mismo, nosotros podemos parecer muy buenos
cristianos, quizás dando muy buenos comentarios, participando en
todas las reuniones, asistiendo al ministerio, nos mostramos
bondadosos, pero si en nuestro corazón existe la polilla del orgullo, la
polilla del rencor, estamos huecos y no sería honroso a los ojos de
JEHOVA que una persona que sirva a Jehová dentro la congregación o
que tenga muchos años en la verdad guarden la polilla del rencor en el
corazón.
Esto es algo muy delicado hnos., a penas veamos que están surgiendo
pensamientos dañinos en nuestro corazón y mente debemos apartarlos
de nosotros y buscar la ayuda de Jehová, para que de esa manera no
afectemos nuestra relación con él.
El rencor es una semilla amarga que produce frutos venenosos