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INTRODUCCIÓN
La radiación ionizante es un tipo de energía liberada por los átomos en forma de ondas
electromagnéticas (rayos gamma o rayos X) o partículas (partículas alfa y beta o
neutrones). La desintegración espontánea de los átomos se denomina radiactividad, y la
energía excedente emitida es una forma de radiación ionizante.
Los elementos inestables que se desintegran y emiten radiación ionizante se denominan
radionúclidos.
Exposición a la radiación ionizante
La exposición a la radiación puedes ser interna o externa y puede tener lugar por
diferentes vías.
-Exposición interna: Se produce cuando un radionúclido es inhalado, ingerido o entra de
algún modo al torrente sanguíneo. La exposición interna cesa cuando el radionúclido se
elimina del cuerpo, ya sea espontáneamente o por algún tratamiento.
-Exposición externa: se puede producir cuando el material radiactivo presente en el aire
(polvo, liquido o aerosoles) se deposita sobre la piel o la ropa. Generalmente, este tipo de
radiactivo puede eliminarse del organismo por simple lavado.
Radiación y riesgos para la salud
El daño que causa la radiación en los órganos y tejidos depende de la dosis recibida,
o dosis absorbida, que se expresa en una unidad llamada gray (Gy). El daño que
puede producir una dosis absorbida depende del tipo de radiación y de la sensibilidad
de los diferentes órganos y tejidos.
Aunque se ha demostrado que algunos tipos de exposición a radiación de baja potencia
es beneficiosos para los tratamientos médicos, es probable que la radiación
electromagnética con un nivel de energía suficientemente alto pudiera ser perjudicial
para la salud humana.
A) Sistema nervioso central
Un estudio epidemiológico probó que la exposición a radiación tiene efecto sobre la
calidad del sueño; además, un experimento animal investigó que el período de descanso
se redujo marcadamente, las razones de estas disfunciones cerebrales inducidas por la
radiación no están claras, pero pueden implicar síntesis anormal y liberación de
neurotransmisores, así como actividad eléctrica desordenada en las células nerviosas.
B) Sistema cardiovascular
Hay un aumento significativo en la aterosclerosis localizada después de la radioterapia
para cáncer de cabeza y cuello y esto resulta por la inflamación crónica de la arteria tras
una disfunción endotelial que puede ser causada, por ejemplo, por lipoproteínas de baja
densidad elevadas y radicales libres. Los resultados de la inflamación crónica en función
alterada de los macrófagos y linfocitos, cuya activación provoca la liberación de citocinas
y factores de crecimiento que conducen a un aumento del daño, la inestabilidad
genómica y el envejecimiento celular, la apoptosis celular, necrosis local, y una
alteración de flujo sanguíneo.
C) Sistema reproductivo
La influencia de la radiación ionizante en el sistema reproductivo se ha mostrado que
produce malformación fetal (microftalmia, encefalocele, hendidura facial e hipoplasia
maxilar). Adicionalmente, otra investigación epidemiológica reveló una incidencia
significativamente mayor de síntomas anormales de reproducción masculina en
radiografías de SW.
D) Sistema endocrino
El sistema endocrino juega un papel importante en la regulación de diversas funciones
fisiológicas, y numerosos estudios se han centrado en el efecto de la radiación
electromagnética sobre la secreción de melatonina, la hormona gonadal y la adrenalina.
La melatonina es secretada por la glándula pineal y juega un papel importante en la
modulación del sueño con niveles sanguíneos más altos durante la noche. La secreción
de la hormona gonadal afecta diversos comportamientos fisiológicos, tales como
apareamiento
En total, si la radiación SW es dañina para los sistemas biológicos está estrechamente
relacionada con la dosis o parámetros de radiación. Sin embargo, estudios previos no
han llegado a una conclusión concordante sobre la relación dosis-efecto entre la
radiación SW y los organismos vivos.
Estrategias para reducir la exposición a la radiación de los procedimientos de
diagnóstico por imágenes
-No pedir un estudio de dosis de radiación más alto si un estudio de dosis más baja (o
un estudio de imágenes que no usa radiación ionizante) puede proporcionar la
información clínica necesaria.
-Todas las solicitudes de estudios de imagen deben estar justificadas (por ejemplo,
cuando se consideren todos los beneficios y riesgos, se espera que el estudio haga más
bien que daño).
-Remitir a los pacientes que requieren estudios de imagen a una instalación que se
esfuerza por optimizar la dosis de radiación, de modo que la imagen se realiza con la
menor cantidad de radiación necesaria para proporcionar una calidad de imagen
adecuada.
CONCLUSIÓN
BIBLIOGRAFÍA
Joen Lannucci. (2003). Radiología dental, principios y técnicas. Ohio: McGraw Hill.
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