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D E L F O N D O D E C U LT U R A E C O N Ó M I C A  J U L I O - A G O S T O D E 2 0 1 6

Bibliotecas hoy

Además 
BIBLIOTECA
MEXICANA:
50 TÍTULOS

547 AQUILES
548 O EL GUERRILLERO
Y EL ASESINO
Fotografía: ©A N D R E A G A R C Í A F LO R E S

547/548 E DI TOR I A L

3 Laude
M I N E RVA M A R G A R I TA V I L L A R R E A L
Bibliotecas, comunidad, democracia

U
7 Biblioteca Mexicana: na de las consecuencias menos advertidas
de la crisis de las finanzas públicas
50 títulos en gran parte del mundo es el recorte
presupuestal de las bibliotecas públicas
y la desaparición de muchas de ellas. Esto
ENRIQUE FLORESCANO
es cierto incluso en países como el Reino
Unido y los Estados Unidos, cuyos sistemas
9 Celebración bibliotecarios fueron considerados los mejores
y más abiertos del mundo durante siglos.
de Biblioteca Mexicana Un argumento aducido para esta política
es el avance de la revolución tecnológica digital, que, al poner al alcance
de los usuarios grandes volúmenes de información, estaría volviendo
PABLO BOULLOSA
redundante la biblioteca tradicional. El hecho es que ésta, lejos de
rezagarse ante la tecnología digital, la adopta para mejorar su propia
10 El desconocido taller eficiencia y la pone al servicio del usuario de manera libre y gratuita.
Las bibliotecas públicas son algo más que acervos de libros y salas de
de edición de un lectura; son lugares de confort, tranquilidad y socialización que invitan
a la cordialidad y al diálogo en un ambiente de valores propios de la vida
historiador insólito civilizada. Por lo mismo, son oasis para el cultivo del espíritu y la
esperanza en un mundo confuso y convulso por rivalidades políticas,
económicas, sociales y de otro tipo, donde privan las relaciones
G E N E Y B E LT R Á N F É L I X
abstractas y de competencia entre los individuos.
Como institución al servicio de los libros, la lectura y la difusión de la
11 Aquiles, cultura, esta casa editorial no puede menos que apoyar la multiplicación
y el mejoramiento constante de nuestras bibliotecas públicas, en
nuestra tragedia particular la biblioteca comunitaria bien surtida, actualizada y
conectada al mundo digital, con los servicios básicos de atención al
usuario que hagan de su estancia una experiencia decente y placentera.
JULIO ORTEGA
Aspiramos a una biblioteca pública que sea en sí misma el modelo de
vida reflexiva y de relaciones sociales civilizadas del México del siglo xxi,
13 Reinventar la biblioteca una institución que sea considerada por los usuarios como centro de la
comunidad, una alternativa poderosa a la rutinaria estolidez enajenante
de los campeones del rating.
ALBERTO MANGUEL
Una biblioteca pública así concebida sería quizá el mayor activo de
una democracia fundada en la diseminación, apropiación, recreación y
14
Biblioteca Vasconcelos, uso del conocimiento universal.
El antecedente de esta aspiración es la escuela rural del México
territorio de las posrevolucionario, que llegó a ser centro efectivo de la comunidad en las
décadas de 1920 y 1930.
infinitas posibilidades La ciudadanía de una democracia vigorosa es una ciudadanía
informada, alerta, propositiva e intelectualmente orientada.W
Entrevista a
Daniel Goldin
AGUSTÍN GENDRON

16 NOVEDADES José Carreño Carlón


D I R E C TO R G E N E R A L D E L F C E

Roberto Garza León Muñoz Santini


E D I TO R D E L A G AC E TA ARTE Y DISEÑO

18 Nuevos procesos Ramón Cota Meza


R E DAC C I Ó N
Teresa Ramírez
Víctor H. Romero

editoriales
C O R R E C C I Ó N D E E S T I LO
Martha Cantú, Adriana Konzevik,
Susana López, Socorro Venegas, Andrea García Flores
Rafael Mercado, Karla López y F O R M AC I Ó N
ERNESTO PRIANI SAISÓ Octavio Díaz
E ISABEL GALINA RUSSELL C O N S E J O E D I TO R I A L Ernesto Ramírez Morales
V E R S I Ó N PA R A I N T E R N E T

Impresora y Encuadernadora

22 TRASFONDO Suscríbase en
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Progreso, sa de cv
IMPRESIÓN

lagaceta@fondodeculturaeconomica.com
RICARDO POHLENZ www.facebook.com/LaGacetadelFCE

La Gaceta del Fondo de Cultura Económica


es una publicación mensual editada por el Fondo de Cultura Económica, con domicilio en Carretera Picacho-Ajusco 227,
Bosques del Pedregal, 14738, Tlalpan, Ciudad de México. Editor responsable: Roberto Garza. Certificado de licitud de título
8635 y de licitud de contenido 6080, expedidos por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas el 15 de
febrero de 1995. La Gaceta del Fondo de Cultura Económica es un nombre registrado en el Instituto Nacional del Derecho
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0206. Distribuida por el propio Fondo de Cultura Económica. ISSN: 0185-3716.
—————————
I L U S T R AC I Ó N D E P O R TA DA : © L E Ó N M U Ñ OZ S A N T I N I Y A N D R E A G A R C Í A F LO R E S
JULIO -AGOSTO DE 2016

2 JULIO-AGOSTO DE 2016
BIBLIOTECAS
P O ES Í A HOY

La voz parece emplear la palabra latina “laude” en sus dos sentidos,


alabanza y lápida, para nombrar su sentimiento contradictorio de plenitud
y desconsuelo: plenitud en su comunión con el Ser supremo, y desconsuelo
por la realidad terrena de una vida destruida que se mete en sus venas
y que ni siquiera Dios puede redimir.

Laude
M I N E RVA M A R G A R I TA V I L L A R R E A L

Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes 2016

Mientras me como esta manzana


Dios viene a bendecirme
parpadeante de sol
desciende
al vuelo
de la paloma
con su piel
su pelo alborotado
y un joven
que conduce a la puerta
del programa de los doce pasos
El muchacho es adicto
De cada diez
uno no recae:
La impotencia de sus labios
por mi sangre
fluye

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Fotografía: ©A N D R E A G A R C Í A F LO R E S

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JULIO-AGOSTO DE 2016
DOSSIER

Bibliotecas
hoy
Presentamos en este número dos textos
sobre bibliotecas, las que ahora enfrentan los embates
del recorte presupuestal y la competencia de la revolución digital
en muchas partes del mundo. Ante esta situación, el FCE ratifica
su compromiso con estos recintos de cultura y vida civilizada:
“Las bibliotecas son la meca de la autoayuda, las más abiertas
de las universidades abiertas […] donde no hay exámenes de
admisión ni diplomas y a las que pueden ingresar libremente
personas de todas las edades”, como dijo el bibliotecario
e historiador Daniel J. Boorstin. Incluimos tres textos breves
sobre la colección Biblioteca Mexicana, esfuerzo editorial
coordinado por el historiador Enrique Florescano para poner
al alcance del lector común el conocimiento acumulado en diversas
ramas del saber en México. Esta colección ha completado 50 títulos.
Julio Ortega nos entrega su texto de presentación de la novela
póstuma de Carlos Fuentes Aquiles o El guerrillero
y el asesino, publicada por esta casa editorial.
Presentamos un poema de Minerva Margarita Villarreal,
la última entrega de un ensayo sobre el libro electrónico,
una variada colección de reseñas de novedades y un ameno
relato de Ricardo Pohlenz en la sección Trasfondo.

JULIO-AGOSTO DE 2016 5
Fotografía: © L E Ó N M U Ñ OZ S A N T I N I

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JULIO-AGOSTO DE 2016
BIBLIOTECAS H
HOY
OY

A RTÍ C U LO

Biblioteca
Mexicana:
50 títulos
Enrique Florescano,
editor responsable de la colección
Biblioteca Mexicana, expone los propósitos
y circunstancias que condujeron
a la creación de esta ambiciosa
empresa editorial.
ENRIQUE FLORESCANO

G
abriel Zaid dice, recordan- 100000 ejemplares. En su elaboración han participa- Biblioteca Mexicana se remonta al 26 de abril de
do las palabras del filósofo do 470 autores de la más amplia gama de disciplinas, 1995, cuando Rafael Tovar y de Teresa, entonces
José Gaos, que toda biblio- así como de las diferentes corrientes de pensamiento presidente del Consejo Nacional para la Cultura y
teca personal es siempre que han nutrido las ciencias sociales y las humanida- las Artes (Conaculta), Enrique Florescano, Adolfo
un proyecto de lectura. La des. En sus páginas conversan autores consagrados, Martínez Palomo, José Sarukhán, Julia Carabias,
colección Biblioteca Mexi- que han renovado los campos de la investigación, con Guillermo de la Peña, Adolfo Castañón y Carlos
cana nació hace más de 15 las nuevas generaciones de especialistas. Esta plura- Bazdresch se reunieron con Miguel de la Madrid
años como un proyecto de lidad de enfoques y miradas hace de la Biblioteca Hurtado, entonces director general del Fondo de
lectura que ofreciera una Mexicana un compendio equilibrado, rico y diverso. Cultura Económica (fce), para considerar la impor-
ventana hacia los conoci- Entre otros colaboradores se encuentran Carlos Mon- tancia y urgencia de crear una colección que ningu-
mientos alcanzados a lo largo del siglo xx y lo que va siváis, Charles A. Hale, Néstor García Canclini, Mar- na universidad o editorial se había propuesto hacer
del xxi en distintas ramas de las ciencias, las huma- ta Lamas, Rita Eder, Pablo Latapí, Héctor Aguilar hasta ese momento: una serie que ordenara y difun-
nidades, las artes y la tecnología, con el objetivo de Camín, José Woldenberg, Jean Meyer, Xavier Velas- diera los conocimientos acumulados en nuestro país
poner esta información al alcance del amplio público co, Guillermo Fadanelli, Rosa Beltrán, José Joaquín al término del siglo xx. Enrique Florescano fue nom-
lector. En el transcurso de estos años, la colección se Blanco, Mauricio Merino, Ana Clavel, Víctor M. Tole- brado editor responsable de la colección.
ha convertido en un espacio para el análisis y la dis- do, Erika Pani, Ruy Pérez Tamayo, Cristina Rivera En 2015 se publicó el título número 50: Las redes
cusión de los temas más importantes en la actuali- Garza, Enrique Cabrero, Luis F. Aguilar, Alfredo Ávi- sociodigitales en México. En este volumen especialis-
dad. Se trata de un esfuerzo singular por integrar un la, Ana García Bergua, Rodrigo Martínez Baracs, tas de diversas áreas analizan las transformaciones
compendio de la creatividad y el pensamiento mexi- Erik Velásquez, Aurora Gómez Galvarriato, David que las nuevas tecnologías digitales y prácticas so-
canos, que sirva de instrumento para la formación Olguín, Pablo Escalante, Lucina Jiménez, Luis Medi- ciales relacionadas han introducido en la vida coti-
de las nuevas generaciones. La Biblioteca reúne y na Peña, Mario Bellatin, Graciela Márquez, Jenaro diana de los mexicanos, cómo los usuarios pueden
sintetiza el conocimiento que nos identifica e inclu- Villamil, Eduardo Antonio Parra, Jorge Volpi, Raúl aprovecharlas como medios de participación ciudada-
ye estudios que, haciendo a un lado el estilo de los Trejo Delarbre y José Ramón Cossío. na y los importantes temas de la privacidad, la intimi-
especialistas, dan a conocer al público general la re- La colección es resultado de un esfuerzo conjunto dad y la naturaleza de la sociabilidad en ellas.W
novación experimentada en múltiples disciplinas. del Fondo de Cultura Económica, principal edito-
La constancia en el cumplimiento de estas metas rial de habla hispana, y el Consejo Nacional para la
se muestra en los 50 títulos formados por casi 600 Cultura y las Artes, hoy Secretaría de Cultura. A és-
ensayos de análisis de nuestra realidad, títulos que se tos se sumó la colaboración de instituciones aca-
han reimpreso una o más veces hasta superar los démicas de diversas partes del país. El origen de la Ciudad de México, mayo de 2016.

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Ilustración: ©A N D R E A G A R C Í A F LO R E S

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JULIO-AGOSTO DE 2016
BIBLIOTECAS HOY

Palabras pronunciadas por el escritor y animador cultural Pablo Boullosa


en la celebración de los 50 títulos de la colección Biblioteca Mexicana
el 28 de enero de 2016 en la librería Octavio Paz del FCE en la Ciudad de México.

DISCURSO

Celebración
de Biblioteca
Mexicana
PABLO BOULLOSA

H
ace 101 años, cuando es- raciones, nuestro país, al igual que el mundo contem- xi-cá-no, título que también forma parte de esta
taba en Madrid, Alfon- poráneo, es altamente colaborativo. Los académicos colección. Tampoco es casualidad que esta colección
so Reyes escribió Visión mexicanos pueden hacer investigación porque otros pueda verse como una extensión natural del trabajo
de Anáhuac, uno de sus mexicanos están cultivando la tierra, otros más están de toda una vida, la vida fértil de Enrique Floresca-
textos más conocidos. generando riqueza en la industria y el comercio, otros no, dedicada a dar cuenta de las historias de nues-
En ese breve ensayo, más administrando los servicios del Estado, todos tro maíz y nuestra agricultura, nuestros mitos y
Reyes emplea dos ex- ellos pagando impuestos. A fin de cuentas, sin restarle nuestros símbolos, nuestra imaginación y nuestro
presiones que me pare- mérito alguno a las mentes más fecundas de México, patrimonio, nuestras maneras de representarnos a
ce conveniente repetir hemos de considerar siempre la comunidad de esfuer- nosotros mismos y de interpretar nuestro pasado.
en el aniversario y fes- zo y la obra de acción común. Si los espejos nos devuelven imágenes, y colo-
tejo de la colección Biblioteca Mexicana, dirigida por Por supuesto, los alcances de esa obra mexicana cados frente a frente las multiplican, desde hace
Enrique Florescano y publicada por el Fondo de Cul- de acción común son vastísimos y acaso inabarca- muchos años Enrique Florescano ha estado fabri-
tura Económica y la Secretaría de Cultura. Esas dos bles. Lo que puede hacer una colección de 50 títulos cando y colocando los espejos de nuestra memoria,
expresiones son “comunidad de esfuerzo” y “obra de es apenas dar una noción general de dicho esfuerzo y animando a muchos otros a continuar luchando
acción común”. La colección Biblioteca Mexicana colectivo. Y en este sentido, esta colección es como contra el desvanecimiento de las imágenes, es de-
refleja y ayuda a divulgar, precisamente, la gran co- un mapa que nos permite visualizar lo que hemos lo- cir, contra el olvido.
munidad de esfuerzo de los mexicanos en las tareas grado juntos los mexicanos. En Murano, una pequeña isla al norte de Venecia,
importantes que llevamos a cabo. Salvo aquellos mapas desmesurados que imaginó se fabricaron, a partir del siglo xiv, los primeros espe-
Una nación no es solamente un territorio físico Borges y que tenían exactamente las mismas dimen- jos de vidrio transparente y fondo de azogue que tan
poblado de personas, ni una entelequia mitológica, siones que el territorio que representaban, la carac- nítidas imágenes nos ofrecen. Esos espejos alentaron
mucho menos una estadística demográfica o econó- terística esencial de los mapas es la reducción. Si la reflexión y la autocrítica, y sin ellos acaso Europa
mica. Tampoco es tan sólo un matrimonio, bien o pensamos, por ejemplo, en la música en México en el no habría dominado el mundo a partir del siglo xv. De
mal avenido, entre una población y un cuerpo legal y siglo xx, es obvio que no toda la información respec- acuerdo con López de Gómara, en su momento los
político. Me parece que una nación es, por encima de tiva cabe en un solo volumen. Pero resulta que Aure- indígenas prefirieron esos espejos al oro, algo perfec-
todas sus demás características y facetas, eso que lio Tello emprendió su reducción y por eso contamos tamente racional. La experiencia de mirarnos a noso-
dice Alfonso Reyes: una comunidad de esfuerzo y con el volumen correspondiente de la colección que tros mismos es inmensamente importante. “Ay de los
una obra de acción común. hoy celebramos. Por otro lado, el mapa no agota su que no han osado descubrirse a sí mismos”, dice tam-
Cuando hablamos de los logros de los mexicanos, función en la reducción, sino en el momento en el bién Alfonso Reyes, a quien Enrique Florescano lla-
con frecuencia acuden a nuestra mente los nombres que el usuario vuelve a darle, al menos mentalmente, ma “el más universal de nuestros escritores”.
de grandes sabios y de grandes creadores. Preferi- su dilatada dimensión. De la misma manera, todos Quiero terminar con una frase interrogativa del
mos no imaginarnos un México sin Lucas Alamán, los títulos de esta colección invitan a pensar en ám- mismo, universal Alfonso Reyes. En México en una
sin Amado Nervo, sin López Velarde, sin José Vas- bitos muy dilatados. nuez, texto leído por primera ocasión en Buenos Aires,
concelos, sin Diego Rivera, sin Octavio Paz, sin Juan Ya hemos acudido a otra metáfora cuando hemos Reyes se hace una pregunta que sin duda muchos
Rulfo, sin Mario Molina. dicho que la colección Biblioteca Mexicana es un lectores de los volúmenes de la colección Biblioteca
Pero esas grandes figuras son sólo el fruto más re- “reflejo” de nuestra grandeza colectiva. Pero no exis- Mexicana también se habrán hecho, y muchos otros
finado de un esfuerzo que es también colectivo. La te reflejo si no existe también el espejo. Ahora, habrán de hacerse en el futuro. La pregunta es la si-
inteligencia siempre tiene un altísimo componente ¿cuánto cabe en un espejo? Todo lo que la luz nos guiente: “¿de suerte que todo esto teníamos en casa y
social; cuando nacieron nuestros grandes escritores, permita poner en él. Desde lo invisiblemente pequeño no lo sabíamos?”
las potencias de la lengua española ya estaban allí, hasta lo invisiblemente lejano (pues los microscopios Gracias por su atención.W
como esperándolos. Y cuando nacieron los grandes y los telescopios funcionan con espejos), pasando
científicos de nuestro tiempo, algunos de ellos mexi- por nuestra realidad cotidiana y, desde luego, por
canos, ya se habían descubierto la tabla periódica y nuestro propio rostro. La colección Biblioteca Mexi-
la excitación de los electrones. cana está hecha de espejos y ella misma es, al refle- Palabras pronunciadas el 28 de enero de 2016 en la
Pero además de que la inteligencia individual sólo jarla, espejo de la nación. librería Octavio Paz, durante la celebración de los 50
puede desarrollarse con las herramientas cognitivas No es sólo una casualidad heptasilábica que En- títulos de la colección Biblioteca Mexicana, publicada
que han sido creadas en común por innúmeras gene- ri-que-Flo-res-cá-no sea el autor de Es-pe-jo-me- por el FCE y la Secretaría de Cultura.

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A RTÍ C U LO

El desconocido
taller de edición
de un historiador insólito
Discípulo de Enrique Florescano
en el taller de edición de Biblioteca Mexicana,
Geney Beltrán Félix destaca los valores
de rigor, pluralidad de enfoques,
pertinencia y lectura accesible
de esta colección.
G E N E Y B E LT R Á N F É L I X

10 JULIO-AGOSTO DE 2016
BIBLIOTECAS HOY

E
stamos a mediados de la dé- cultural y editor están gobernados por rasgos inso-
cada de 1990. Tenemos a un bornables. Se trata de un magisterio fincado en al- Aquiles, nuestra tragedia
historiador respetado por sus gunos de los atributos que le conocemos a su obra de
colegas y con presencia entre investigación histórica, llevados en esta deriva hacia Reproducimos el texto leído por el destacado crítico
los lectores, con una obra la faceta creativa del trabajo editorial: el rigor, la y editor peruano Julio Ortega durante la presentación
consolidada que ha abierto precisión, la curiosidad y la defensa del lector. de Aquiles o El guerrillero y el asesino, novela
caminos al conocimiento del La Biblioteca Mexicana ha sido en estas dos déca- póstuma de Carlos Fuentes coeditada por
pasado de México. Es un in- das el secreto taller de edición de un historiador in- el Fondo de Cultura Económica y Alfaguara.
vestigador curioso, acucioso y sólito. No sólo porque Florescano no redujo los temas
obsesivo, con un prurito exi- de la serie a los de sus propias pesquisas historiográ- P OR J U LI O ORTEG A
gente por el rigor documental y la solidez argumenta- ficas sino porque los abrió a especialistas de otros
tiva, además de un sostenido interés por sacar sus ámbitos de las ciencias sociales, las humanidades,
exploraciones del cubículo universitario y llevarlas a las ciencias exactas y las artes. Siempre me sorpren-
la tribuna abierta con muy buena prosa, para enrique- dió su vasta curiosidad. En ocasiones llegaba a la
cer la conversación comunitaria sobre nuestros anda- oficina con los ojos chispeantes, inquieto por poner
res pretéritos. Para ese momento, el historiador no en marcha un nuevo proyecto en torno a un tema
sólo ha escrito libros; también ha fundado una revista que se le había cruzado en sus lecturas o había sur-
emblemática de la discusión literaria y política, ha par- gido en una conversación. Recuerdo su insistencia
ticipado en la formación, como maestro, de sucesivas en desarrollar un proyecto sobre la situación de la
generaciones de historiadores y ha estado al frente de juventud mexicana en la actualidad. O sobre la pro-
instancias académicas e instituciones oficiales dedi- blemática del campesinado. O en torno al pensamien-
cadas a la preservación del patrimonio histórico. Con to conservador en la sociedad mexicana. Persistente
una trayectoria así, cualquiera podría sentirse satisfe- como es, Florescano no se sentía tranquilo hasta no
cho y dedicarse a recoger los laureles merecidos. encontrar el perfil de los investigadores más adecua-
No así Enrique Florescano. Para 1995, el autor de dos para llevar a una realización óptima los libros en
Memoria mexicana, quien ha sido fundador de la revis- cuestión, hasta no recibir y revisar las primeras

L
ta Nexos, profesor de El Colegio de México y la unam versiones de los textos y así hasta que los tomos no a novela póstuma de Carlos Fuentes, Aquiles
y director del inah, asume la coordinación de la co- salieran de las prensas a las librerías, y a veces ni en- o El guerrillero y el asesino (Alfaguara y Fon-
lección Biblioteca Mexicana bajo los auspicios del tonces. Así fue como los tres temas que acabo de do de Cultura Económica), que me ha tocado
Conaculta y el Fondo de Cultura Económica. Con la mencionar se concretaron en los volúmenes Los jóve- editar, nos propone una pregunta inquietan-
distancia que otorgan 50 títulos y 100000 ejemplares nes en México, El campesinado y su persistencia en la te sobre el lugar de la tragedia en la cultura política
—ambas cifras alcanzadas a finales de 2015—, es facti- actualidad mexicana y Conservadurismo y derechas hispánica y contemporánea. Hoy que vemos a tan-
ble definir esta colección como un proyecto sigiloso en la historia de México, coordinados, respectiva- tos líderes trágicamente devorados por las fuerzas
en su realización y paciente en sus tiempos, diverso en mente, por tres brillantes investigadoras: Rossana que desatan y no controlan, este Aquiles de Fuentes,
sus temas, plural en sus colaboradores y, lo más im- Reguillo, Tanalís Padilla y Érika Pani. basado en la perturbadora historia del guerrillero
portante, efectivo en sus alcances. Para enmarcar la Otra de las directrices del taller de edición de Flo- colombiano Carlos Pizarro, asesinado por un joven
aportación de la Biblioteca Mexicana a la educación y rescano es la generosa apertura a la interlocución sicario cuando había depuesto las armas para ser
la cultura actual, convendría tener en mente las cir- entre diferentes generaciones. En la tradición de Da- candidato a la presidencia de su país, aparece como
cunstancias en las que se difunde —o se difunde mal— niel Cosío Villegas, Florescano ha dado a la serie un un necesario aguafiestas.
la investigación académica. perfil riguroso y al mismo tiempo incluyente, que lo Una tragedia es contemporánea porque nos dice
Uno de los propósitos de la colección es la necesidad ha llevado a convocar a estudiosos de trayectoria que el sujeto (personaje o lector) es vulnerable y que la
de establecer puentes entre el saber especializado y el consagrada en sus áreas respectivas con otros que en vulnerabilidad es una condición mutua. No se trata
lector común. La parcelación del conocimiento acadé- el momento de aceptar la encomienda de enriquecer sólo de la naturaleza mortal del yo sino de la fragilidad
mico es una deriva inevitable, fomentada incluso por los anaqueles de la Biblioteca Mexicana se encontra- misma del otro. Hoy que entendemos la ética no como
las instituciones dedicadas al apoyo de la investiga- ban en el ingreso a su primera madurez. Así, nom- la estima de nuestros actos sino como el lugar del otro
ción, como el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnolo- bres de larga y respetada carrera intelectual como en ti, demandamos de nuestros aspirantes al liderazgo
gía. Sin embargo, este fenómeno no tendría por qué Néstor García Canclini, Héctor Aguilar Camín, Ruy la tolerancia por el rival como prueba de su propia in-
impedir el diálogo entre el erudito y el lector común. Pérez Tamayo, Aurelio Tello, Marta Lamas, Guiller- tegridad. La política no debería volvernos a la jungla.
¿Hay utilidad en que las exploraciones de las ciencias y mo de la Peña, Roberto Blancarte, Rita Eder, José El guerrillero de esta novela de Carlos Fuentes es
las humanidades se mantengan en un entorno cerrado, Ramón Cossío o Mauricio Merino, conviven con el guerrero, alguien que cree que las armas son la úni-
en publicaciones inaccesibles y a menudo escritas en pensadores e investigadores como Cristina Rivera ca vía de dar al otro un lugar en el nosotros. Su muer-
lenguaje críptico para el lego? La Biblioteca Mexicana Garza, José Antonio Aguilar Rivera, Rodrigo Martí- te sería la prueba de su riesgo extremo pero, justa-
ha convocado a especialistas e investigadores de nu- nez Baracs, Alfredo Ávila, David Olguín, Rogelio mente cuando renuncia a las armas y organiza su
merosas universidades e institutos de México y el Guedea, Johannes Neurath o las ya mencionadas Re- candidatura, es liquidado. Las fuerzas en disputa tra-
extranjero, así como a intelectuales y pensadores guillo, Padilla y Pani. man su muerte desde la oscuridad del sistema. La no-
que desde la arena pública reflexionan sobre los te- No es frecuente, si somos sinceros, que se presente vela devuelve su identidad imaginaria al héroe asesi-
mas nacionales, y les ha acercado un foro plural en un fenómeno así. La vida intelectual mexicana ha sido nado, recuperándolo en el lenguaje donde cobra vida
que sus aportaciones se abren al camino amplio de la presa a menudo de una tendencia comunal muy cerra- bajo la luz de asombro de nuestra lectura.
divulgación. da en la que los intereses de grupo pesan más que los Todas las víctimas de una guerra civil, declarada
Esto por un lado. requerimientos de calidad y pertinencia intelectual. o no, desde los milicianos republicanos hasta los
Por el otro, detrás del concepto de la Biblioteca Con un vistazo al listado de los 50 títulos que la inte- normalistas mexicanos, si son todos por fin exhu-
Mexicana se encuentra la noción, tan humilde cuanto gran, es fácil constatar que la Biblioteca Mexicana ha mados, serán devueltas al lenguaje, donde recupera-
necesaria, del compendio. Ya traten sobre música, ido contra esa celosa costumbre. Pero si vamos más rán su nombre y lugar. Para que las heridas históri-
teatro, literatura, ciencias exactas, economía, derecho allá y leemos con detenimiento este o aquel título, es cas, que a veces son la matriz de nuestro feroz len-
o política, los volúmenes están regidos por la exigen- posible advertir cómo, al abrirse a una multitudinaria guaje político, finalmente cierren, se requiere que
cia de lo sucinto y lo actualizado. Sin caer en la esque- nómina de coordinadores y colaboradores, con expe- las víctimas adquieran nombre, memoria y piedad.
matización ni en la frivolidad, la Biblioteca Mexicana riencias, formaciones y acercamientos teóricos a veces La novela de Carlos Fuentes es trágica porque el hé-
se planteó desde el inicio concertar los veloces, múlti- contrapuestos, la Biblioteca Mexicana ha ofrecido una roe obtiene su identidad desde la muerte. Esa radical
ples avances del conocimiento en áreas específicas y visión plural y crítica de nuestra historia, nuestra cul- versión de su vida lo define trágicamente. Por eso
resumirlos en uno o dos libros. No es extraño por esto tura y nuestra realidad. No encontraremos otro ejem- esta novela fue para su autor tan laboriosa, compleja
que compilaciones como Un siglo de educación en Mé- plo así en el México reciente. y fragmentaria, como quizá no podía ser de otro
xico, coordinado por Pablo Latapí Sarre, El patrimonio Antes de poner fin a estas líneas, me interesa men- modo, siendo una metáfora poética del desmembra-
nacional de México, ideado y organizado por el propio cionar un atributo del Florescano editor que para miento político.
Enrique Florescano, o Un siglo de teatro en México, nada es insignificante: la defensa del lector. Al darle Fuentes, sin embargo, no se detiene en la victimi-
bajo la coordinación de David Olguín, se hayan con- forma a ese puente entre el cubículo universitario y la zación y tampoco se propone descubrir a los crimina-
vertido ya en libros de referencia. Son volúmenes que, calle, entre el estudioso y el lector de a pie, el director les. Más bien se propone representar el patetismo de
bajo el rubro que los editores llamamos long-sellers, de la Biblioteca Mexicana se ha exigido poner en equi- la tragedia y nos hace testigos de la misma para con-
cada cuatro o cinco años exigen una silenciosa pero libro el saber de uno y el deseo de conocimiento del vocar nuestra piedad. Y se imagina sentado cerca de
impostergable reimpresión. otro. El erudito entrega en cuartillas el conocimiento Pizarro en el vuelo donde el sicario lo mata. Algunos
Lo que he dicho sobre la Biblioteca Mexicana no actualizado, pero es labor del editor hacer llegar esas lectores me han preguntado si Fuentes iba efectiva-
es imparcial pero tampoco queda a deber en el ren- cuartillas de la manera más clara, orgánica y com- mente ahí. Yo creo que ese pasaje de la novela es ver-
glón de lo ecuánime. No es imparcial porque trabajé prensible a los ojos y la inteligencia del lector. En este dadero aunque no sea real.
en dos distintos periodos en el equipo de Proyectos rubro, he de añadir que mi aprendizaje en el casi des- Ésta es, por ello, una novela política que a nombre
Históricos encabezado por el doctor Florescano, conocido taller de edición del insólito doctor Flores- de la polis nos pide darle un lugar al tú del guerrero,
dentro de la Dirección General de Publicaciones del cano fue fundamental, y lo agradezco. La lección es recuperado por nuestra lectura. No para ser justifica-
hoy extinto Conaculta, y por lo tanto puedo decir esta: son muchos los recursos financieros públicos y do sino para devolverlo a la política como el arte de do-
que conozco la serie y sus diversas líneas desde energías humanas que se requieren para que un libro minar la selva, la irracionalidad dominante donde la
adentro, con todo el prejuicio favorable que esto im- salga de la imprenta y llegue al lector; hagamos el me- paz no acaba de ser firmada porque uno de los nego-
plica. Alegaría, con todo, que esta valoración es jor esfuerzo para que el producto sea un libro inteli- cios de la guerra, ese oficio sin futuro y sin lengua po-
ecuánime debido a una razón: quienes han trabajado gente y estimulante, sí, pero también cuidado, cortés sible, es impedirla. Se trata, nos dice Fuentes, de re-
en algún momento bajo las indicaciones de Enrique y transparente en su expresión para contribuir de la cuperar a los Carlos Pizarro de este mundo median-
Florescano saben, como lo aprendí yo, que los mejor manera a la tarea educativa que en este país, un te la pregunta por su vida, no por la respuesta de su
valores y coordenadas de su magisterio como gestor siglo después de Vasconcelos, no ha terminado.W muerte.W

JULIO-AGOSTO DE 2016 11
Ilustración: ©A N D R E A G A R C Í A F LO R E S .

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BIBLIOTECAS HOY

JULIO-AGOSTO DE 2016
BIBLIOTECAS HOY

En casi todo el mundo las bibliotecas están bajo asedio,


a veces porque no se entiende su función, a veces porque la miopía
administrativa las hace padecer recortes presupuestarios, pero quizá
la principal amenaza estriba en que ellas mismas no han sabido explicar
y defender su principal razón de ser. He aquí una sensata apología
de esta milenaria institución a cargo de uno de los mayores estudiosos
de la cultura del libro.

A RTÍ C U LO

Reinventar
la biblioteca
ALBERTO MANGUEL

S
egún narra Platón en el Timeo, dad entera, un espacio luminoso donde los lectores es guardería ni parque de diversiones (la Seneca East
cuando el estadista Solón, uno podían aprender el arte de la atención, el cual, según Public Library en Attica, Ohio, ofrece pijamadas),
de los hombres más sabios de Hannah Arendt, es una definición de la cultura. No tampoco proveedor principal de apoyo social y aten-
Grecia, visitó Egipto, un viejo sa- obstante, desde mediados del siglo xx las bibliotecas ción médica (servicios que, sin embargo, los bibliote-
cerdote le dijo que los griegos no ya no parecen tener este significado simbólico, sino carios estadunidenses ofrecen habitualmente).
eran más que niños, pues care- que se tienen por simples almacenes de una tecnolo- Todas estas actividades son benéficas y apropia-
cían de verdaderas tradiciones gía supuestamente caduca y no se consideran dignas das, además de que podrían devolver a las bibliotecas
antiguas y de conocimientos de ser financiadas ni preservadas adecuadamente. su papel central en la sociedad, pero debemos estar
“encanecidos por el tiempo”. En El número de bibliotecas ha ido en descenso en la preparados para invertir más recursos en el sistema,
Egipto, continuaba el sacerdote mayor parte del mundo anglosajón —pero no de ma- y no al revés, para hacer que su reinvención sea posi-
con orgullo, “desde antiguo registramos y conserva- nera significativa en la mayoría de los países latino- ble. Los bibliotecarios no están entrenados para
mos en nuestros templos todo aquello que llega a americanos—. En el Reino Unido se han cerrado ejercer funciones de trabajadores sociales, cuida-
nuestros oídos acerca de lo que pasa entre vosotros, aproximadamente 350 bibliotecas en la última déca- dores, niñeros o médicos. Todas estas labores adi-
aquí o en cualquier otro lugar, si sucedió algo bello, da. En Canadá, el ex alcalde Robert Ford amenazó cionales dificultan, si es que no imposibilitan, que
importante o con otra peculiaridad”. con cerrar las bibliotecas públicas de Toronto que se los bibliotecarios trabajen como bibliotecarios, es
Esta aspiración colosal se consolidó bajo la dinas- salvaron in extremis gracias a una campaña dirigida decir, que revisen que las colecciones permanezcan
tía ptolemaica. En el siglo iii a.C., más de 50 años por Margaret Atwood. En los Estados Unidos, aun- coherentes, hagan pasar los catálogos de las edito-
después de que Platón escribiera sus diálogos, los re- que la cantidad de bibliotecas desaparecidas no es riales por un tamiz, ayuden a los lectores a leer y
yes ordenaron que se reuniera todo libro que hubiera notablemente grande, las bibliotecas públicas han lean ellos mismos. Las nuevas funciones que se les
en el mundo conocido y se colocara en la gran biblio- visto mermadas sus reservas y han sufrido recortes han impuesto son las obligaciones que toda socie-
teca que habían fundado en Alejandría. A excepción de presupuesto, de personal y de horarios de servicio. dad civilizada tiene con sus ciudadanos y que no
de su renombre, no se sabe casi nada de ésta: ni su Aun así, las bibliotecas son resilientes. En su in- deberían asignárseles de forma irresponsable. Si
ubicación —quizá era una sección del museo—, ni el tento por sobrevivir en una época en la cual la activi- cambiamos el papel de las bibliotecas y los bibliote-
uso que se le daba, ni siquiera cómo llegó a su fin. dad intelectual ha perdido prácticamente todo su carios sin preservar la centralidad del libro, nos
Aun así, la Biblioteca de Alejandría, uno de los fan- prestigio, se han convertido en grandes centros so- arriesgamos a perder algo imposible de recuperar.
tasmas más célebres de la historia, se convirtió en el ciales. Hoy en día, la mayoría de ellas se usan más La primera medida que se toma en todas las crisis
arquetipo de todas las bibliotecas. como refugios contra climas severos y para encon- económicas es el recorte a los presupuestos de cultu-
Las bibliotecas pueden tener formas y tamaños trar trabajos en línea que para pedir libros presta- ra. Pero el desmantelamiento de nuestras bibliote-
incontables. Pueden ser como la Biblioteca del Con- dos, y es admirable que los bibliotecarios se presten cas y la transformación de su naturaleza no es sólo
greso de los Estados Unidos o tan austeras como la a ofrecer estos servicios realmente necesarios que un asunto económico. En algún momento de nues-
del campo de concentración de niños en Auschwitz- normalmente no corresponden con la descripción de tra época, comenzamos a olvidar el significado de la
Birkenau, donde las niñas mayores se encargaban de su puesto. Se podría esbozar una nueva definición memoria, individual y colectiva, así como la impor-
los ocho volúmenes que debían esconderse cada noche del papel de los bibliotecarios al diversificar el terri- tancia de los símbolos comunes que nos ayudan a
para evitar que los guardias nazis los confiscaran. torio bajo su mandato, pero tal restructuración tam- entender nuestra sociedad.
Se pueden construir bibliotecas con libros encontra- bién debe garantizar que su función principal, la de Para que las bibliotecas, además de depositarias
dos en la basura, como el Yiddish Book Center en guiar a los lectores hacia los libros, no se olvide. de la memoria de la sociedad y símbolos de su iden-
Amherst, Massachusetts —construido por el joven Las bibliotecas siempre han sido más que un lu- tidad, puedan ser el núcleo de centros sociales am-
de 24 años Aaron Lansky a partir de volúmenes des- gar donde los lectores van a leer. Sin duda, los biblio- pliados, los cambios deben efectuarse de manera
echados por las generaciones más jóvenes, las cuales tecarios de Alejandría coleccionaban otras cosas consciente desde una institución intelectualmente
ya no hablaban la lengua de sus mayores—, o se pue- además de libros, tales como mapas, obras de arte o sólida que reconozca su papel ejemplar y que nos en-
den catalogar en la mente de sus lectores exiliados, instrumentos, y es probable que los lectores no sólo señe lo que los libros pueden hacer: mostrarnos nues-
con la esperanza de resurrección, como es el caso de acudieran a consultar libros, sino también a lectu- tras responsabilidades recíprocas, impulsarnos a
las bibliotecas saqueadas por los soldados israelíes ras públicas, a conversar entre ellos, a enseñar y a cuestionar nuestros valores y debilitar nuestros pre-
en los territorios ocupados de Palestina. La natura- aprender. Pero incluso así, la biblioteca permaneció juicios, darnos el valor y el ingenio para continuar vi-
leza de las bibliotecas es adaptarse al cambio de las principalmente como un lugar en el que se almace- viendo juntos, así como proveernos de palabras que
circunstancias y a las amenazas, y todas las biblio- naba todo tipo de libros para ser consultados y para nos permitan imaginar tiempos mejores. El historia-
tecas viven en el peligro constante de ser destrui- preservar las antiguas tradiciones y “conocimientos dor griego Diodoro Sículo relata que la entrada a una
das por guerras, plagas, incendios, agua o idioteces encanecidos por el tiempo”. Otras instituciones, ta- de las antiguas bibliotecas que vio en Egipto tenía ins-
burocráticas. les como hospitales, asociaciones filantrópicas o critas las palabras “Clínica del alma”.W
Sin embargo, el principal peligro que afrontan gremios, desempeñaban las tareas complementa-
ahora no surge de amenazas de este tipo, sino de rias necesarias en una sociedad civilizada. Este artículo apareció en The New York Times el 23
cambios mal planeados que pueden convertirse en Los bibliotecarios contemporáneos se ven obliga- de octubre de 2015. © 2015, The New York Times. Lo
la causa de que pierdan su papel triple: el de guar- dos a asumir una variedad de funciones que su socie- reproducimos aquí con autorización de los editores.
dianas de la memoria de nuestra sociedad, el de pro- dad no cumple por avaricia o desdén, y el uso de sus
veedoras de relatos de nuestra experiencia —así escasos recursos para cumplir con esas obligaciones Traducción de Bárbara Pérez Curiel.
como de herramientas para navegarlos— y el de sím- sociales esenciales disminuye los fondos con los que
bolos de nuestra identidad. cuentan para adquirir libros nuevos y otros materia- Alberto Manguel, escritor, traductor y editor
Desde los tiempos de Alejandría, las bibliotecas les. Pero una biblioteca no es un refugio para perso- canadiense nacido en Argentina, es autor de El
han cumplido una función simbólica. Para los reyes nas sin hogar (en la biblioteca St. Agnes de Nueva viajero, la torre y la larva. El lector como metáfora.
ptolemaicos, la biblioteca era un emblema de su poder. York fui testigo de cómo un bibliotecario le explicaba Actualmente dirige la Biblioteca Nacional de
Con el tiempo, se volvió símbolo general de una socie- a una usuaria por qué no podía dormir en el suelo), no Argentina.

JULIO-AGOSTO DE 2016 13
Fotografía: © L E Ó N M U Ñ OZ S A N T I N I

BIBLIOTECAS HOY

ENTR EV I STA

Conversación
con Daniel Goldin

Biblioteca
Vasconcelos,
territorio
de las infinitas
posibilidades
AGUSTÍN GENDRON

L
a Biblioteca Vasconcelos es el plios ventanales que los reflejan y, por supuesto, lecto- ¿Cuál es la misión y qué caracteriza a la Biblioteca
cuarto recinto cultural más vi- res, desde un bebé que apenas camina y me tiende un Vasconcelos?
sitado del país, sólo después de libro para que se lo lea en voz alta (“Lo hacen con to- Nosotros solemos decir que la misión de la BV es de-
Teotihuacan, Chichén Itzá y el dos los adultos que entran en la bebeteca”, me informa sarrollar proyectos bibliotecarios (educativos, infor-
Museo Nacional de Antropolo- la sonriente y joven encargada), hasta un grupo de an- mativos, culturales) que contribuyan a la igualación
gía. En 2015 recibió cerca de cianos que han llegado juntos y consultan una pila de de oportunidades de la población, a la mejora de la
dos millones de visitantes y hoy publicaciones periódicas. Se constata, en fin, que algo calidad de vida de sus usuarios y a la innovación de
es la biblioteca con más segui- ocurre allí: miles de historias se desarrollan y entrela- los servicios bibliotecarios del país.
dores en Facebook en el mun- zan en un silencio que apenas esconde la bullente acti- Si algo singulariza a la Vasconcelos frente a otras
do. Quien acude a ella constata, vidad del sitio. Para intentar una mirada un poco más bibliotecas es su diversidad, de públicos, de acervos y
además de su monumental arquitectura, que es un lu- profunda a este fascinante ámbito, cuyos usuarios de servicios, y su voluntad de experimentar y com-
gar lleno de vida, alejado de los estereotipos asociados consideran parte importante de sus vidas, conversa- partir los conocimientos que contiene. Atendemos a
a un recinto bibliotecario tradicional: un grupo de jó- mos con Daniel Goldin, director de la biblioteca, es- centenares de miles de usuarios presenciales y nos
venes ensaya una obra de Aristófanes en la plaza fron- critor y ex editor del Fondo de Cultura Económica. comunicamos con muchos otros a través de nuestros
tal del edificio; hay músicos tocando en los jardines, espacios virtuales. Un porcentaje importante son jó-
bailarines ensayando coreografías frente a los am- venes de entre 17 y 30 años, pero también hay bebés,

14 JULIO-AGOSTO DE 2016
Fotografía: ©A N N A VO N B R Ö M S S E N .
BIBLIOTECAS HOY

Daniel Goldin, director de la Biblioteca José Vasconcelos


de la Ciudad de México, describe la actividad cotidiana de este recinto,
su diversidad de usuarios y actividades, el significado moderno
de una biblioteca de este tipo, su concepción arquitectónica
y el parentesco entre el bibliotecario y el editor.
ancianos, niños. Muchos son estudiantes o lo han sido, táneamente en situaciones de lectura que ocurren a mos a vislumbrar, pero nos fuerza a establecer
pero también hay población que jamás ha ingresa- diario en esta biblioteca. comparaciones.
do a la escuela. En este sentido no sólo buscamos con- Históricamente, la cultura escrita se ha asociado
servar y difundir conocimiento e información, sino Ha mencionado la hospitalidad pero no solemos aso- a la voluntad de permanecer, en oposición a la pala-
reconocer saberes. ciar esta idea a una biblioteca… ¿podría abundar sobre bra oral, que se desvanece. Ahora vemos una nueva
Como es pública y no patrimonial, todos sus acer- lo que significa esto para usted? identificación de la cultura escrita con aquello que es
vos son accesibles y la mayor parte pueden ser toma- En mi concepción, la hospitalidad es paradójica: su- fugaz y con una capacidad de almacenar informa-
dos en préstamo. pone por un lado que uno tiene el deber primordial ción prácticamente ilimitada. ¿Cómo podemos cons-
Físicamente, la Vasconcelos es un espacio muy pe- de recibir al extranjero (ese ser esencialmente dife- truir pensamiento, cómo podemos sustentar proce-
culiar. De entrada representa la convivencia entre rente de uno), respetando su radical diferencia. Pero sos civilizatorios, cómo podemos informarnos o
natura y cultura: tiene 26 mil metros cuadrados de por el otro, la hospitalidad te muestra que tú no eres crear ciudadanía en un mundo donde todo se regis-
jardines; hay en ella mucha luz; es un recinto cuya es- dueño de ese espacio que habitas. tra y el registro es una forma del olvido? No tengo
tructura pende del techo, como los racimos de la vid, En este sentido, la hospitalidad es la piedra an- respuesta a estas y muchas otras preguntas pero
está situada en una zona a la que llegan personas de gular de una ética de la esperanza, que parte del re- me parece que la biblioteca es un buen lugar para
toda el área metropolitana de la Ciudad de México: conocimiento de cualquiera de ser diferente de los hacérselas.
únicamente el 15% de los usuarios reside en la dele- demás y de sí mismo. Pero también de una política Asistir a la biblioteca es implícitamente una rebe-
gación Cuauhtémoc; otro 15% proviene de la delega- que busca poner al descubierto y potenciar el valor de lión contra la cultura digital que descorporiza. Cada
ción Gustavo A. Madero, otro 30% de los municipios la diversidad y la diversidad como un valor. Es, des- visita a la biblioteca es una rebelión contra los otros
conurbados del Estado de México. Los demás vienen de luego, una estética: la realización del arte está en espacios. Los espacios angostos y clausurados de la
de diferentes lugares de la zona metropolitana. ese tiempo por venir que, sin embargo, ejerce su po- casa en primer término. La biblioteca es un reducto
El reto de la Biblioteca Vasconcelos es concebir der en el presente. de libertad para los jóvenes que se sienten agobiados,
la inclusión como algo diferente a la homogeneiza- pero también para las mujeres que encuentran en
ción; ante todo, valorar lo diverso y reconocer el de- ¿Acudir a una biblioteca significa una experiencia sin- ella un espacio para dejar de ser mujeres de la casa.
recho de cada persona a ser quien quiera ser y a ser gular e irrepetible en otros ámbitos? Lo es para los hombres retirados que en su casa no
distinta de los demás. Acudir físicamente a una biblioteca como esta cons- hacen nada y aquí pueden elegir entre una cantidad
tituye una experiencia singular que apenas comen- de opciones, desde pintar con acuarelas hasta tocar
¿Qué ocurre cuando un editor pasa a dirigir una bi- zamos a entender. Te menciono algunas interrogan- el piano. O para los que lisa y llanamente no tienen
blioteca? ¿Existe una relación o correspondencia entre tes elementales: ¿cuándo se inicia y cuándo culmina otro espacio para descansar, dormir, no ser molesta-
los dos ámbitos? la experiencia bibliotecaria, en el momento en que dos. Para todos ellos la visita a la biblioteca es una
Hay muchas formas de ser editor y de ser director sales de casa y te enfilas a la biblioteca o cuando cru- forma de reinstalarse en su cuerpo, de habitar su cir-
de una biblioteca. En mi caso no veo una ruptura, zas su puerta? ¿Cuándo tomas prestado un libro o cunstancia, para ser menos extranjeros ahí donde se
sino una relación de continuidad entre los princi- cuando lo devuelves? Quizá no hay una sola res- mueven.
pios que me guiaron como editor y los que me guían puesta. Cada caso es una experiencia particular. Pero la biblioteca es también un espacio público
como bibliotecario. Pero creo que en todos ellos la experiencia bibliote- en muchos sentidos: un recinto físico que acoge a to-
Entré a dirigir la Biblioteca Vasconcelos impulsa- caria es mucho más compleja que el hecho de acudir dos, un ágora que propicia diálogos, un espacio don-
do por el anhelo de ver qué pasa del otro lado de la a tomar prestado unos libros, utilizar una computa- de se discute lo que nos concierne. Hay que usarla
página. Pero al lector siempre lo había tenido pre- dora o asistir a una actividad programada. Siempre para eso: para experimentar (tener experiencias y
sente. Cuando trabajaba como editor —tanto en las hay algo que desborda. Aún no tenemos la capacidad producir experimentos), para discutir y difundir.
colecciones para niños como en las dirigidas a lecto- de comprender (vaya, ni siquiera de nombrar) con
res adultos— imaginaba la página del libro como un claridad lo que nos acontece cuando acudimos a un ¿Qué emoción o qué imágenes llegan a usted al entrar
dispositivo de producción de pensamiento y emocio- recinto que, esencialmente, se caracteriza por ofre- al espacio físico de la biblioteca?
nes, y procuraba lograr un equilibrio entre el negro y cer gratuitamente algo más de lo que buscamos. Pero El edificio de la Biblioteca me provoca efectos para-
el blanco de esa página: entre el espacio que se ofrece me resulta claro que para poder hacerlo debemos dójicos, un efecto futurista e industrial al tiempo
al lector para habitar la página y el contenido que se considerar el espacio y el cuerpo, dos cuestiones que que puede verse como un jardín bucólico, tanto por
le brinda. la cultura digital ha obviado. Cultura digital signifi- la presencia vegetal como por sus ensamblajes metá-
Ahora, cuando miro la Biblioteca Vasconcelos ca la desaparición del hic et nunc, del aquí y el ahora, licos: semeja ruinas industriales al tiempo que natu-
como espacio arquitectónico e institucional, pienso pues hoy todo es ahora y la presencia real se ha con- raleza desbordada. Una visión futurista imaginada
en ese mismo equilibrio: en el balance entre lo que vertido en fantasmagórica. O, como dice Paul Virilio, en el pasado. De la misma manera es colosal pero no
ofertas y lo que propicias. Asimismo, en el respeto ra- “¡Ya no existe el aquí, todo es ahora!” La experiencia aplasta, ofrece resquicios, recovecos. Es un edificio
dical a la hospitalidad que significa conseguir que el bibliotecaria busca restituir el cuerpo y el espacio al asombroso.
visitante pueda hacer lo que quiera en este espacio sin ámbito de la producción y difusión del pensamiento,
saturarlo. Como lector, me siento atosigado cuando y del reconocimiento y la producción de saberes. Finalmente, ¿por qué una biblioteca es un espacio tan
me enfrento a un libro que no respeta este principio; Podemos registrar el sentido vital que tienen los especial, tan necesario y tan simbólico?
que no me da un espacio de descanso para recrearme. acontecimientos que suceden en la biblioteca. Las Las bibliotecas son los recintos donde se acumula y
Lo mismo me pasa cuando entro a algún edificio. Por complejas maneras en que cada usuario se va trans- resguarda el conocimiento. Templos del espíritu que
tanto, cuando me toca editar un libro o dirigir una formando al asistir a la biblioteca. no fenece como el cuerpo. Son, pues, espacios de ve-
institución, procuro que eso no les pase a otros. Justo porque van cambiando, los usuarios al cabo neración del devenir humano. Si todo lo humano
La biblioteca acoge a muchos lectores, pero tam- de un tiempo pueden acceder a otras posibilidades puede entrar en un libro, en las bibliotecas se preser-
bién a otras personas que buscan en ella un refugio. En que la biblioteca siempre les había ofrecido. Pongo va el trabajo —las fatigas, los esfuerzos, los gozos—
esto nos parecemos a otras bibliotecas en el mundo un ejemplo: una mujer que llegó para aprender in- de los humanos por habitar este planeta que nos es
que son recintos para personas en situación de calle, glés porque su hija había emigrado a Inglaterra. siempre un lugar extraño. Y todo ello se presenta
que acuden a ella a descansar o a protegerse, incluso Luego, por casualidad asistió a un curso de lectura como susceptible de reactivarse y cobrar nueva vida.
a dormir. Desde luego, no se trata de convertir la bi- en voz alta. Pero al leer en voz alta descubrió —por El bibliotecario, como el editor, tiene la función
blioteca en un dormitorio. Pero si las personas no caminos quizá no tan misteriosos— que ella tam- de preservar el trabajo de los creadores, al tiempo
pueden tener un espacio para descansar, ¿cómo pue- bién podía escribir y comenzó a redactar. Lo rele- que lo pone a conversar con otros. Mostrar o inven-
den pensar, estudiar, recrearse? vante es que sólo entonces se permitió conversar tar relaciones. Expandir los mundos posibles.
Para mí hay continuidad entre la concepción del con otros usuarios que siempre habían estado ahí… Estar en una biblioteca es provocar lo inesperado.
libro-refugio y la biblioteca-refugio. Leer en voz alta fue para ella una forma de escribir Es una manera de entrar en un territorio donde se
con tinta transparente frases inimaginables en el unen las posibilidades de ser uno mismo y de ser
Y si un libro representa un refugio, ¿una biblioteca re- diario más recóndito. Un cuaderno secreto que no se otro; de desconocerse y de reconocerse. Aquí, lo in-
presenta un refugio de refugios? atrevía siquiera a reconocer que existía. Y ese acto le actual se convierte en actual, al menos por unos
Como editor imaginaba a mis lectores inmersos en permitió conversar con personas que antes no había instantes.W
esas situaciones de sofocamiento que tan a menudo registrado.
hemos padecido en la infancia. Y podía sentir que
abrir el libro sería como abrir una ventana. Alcanza- Con el advenimiento de la era digital pasamos de la fal-
ba a sentir el aire fresco y la llegada de otras presen- sa profecía del fin de los libros en papel a la falsa uto-
cias, silenciosas y secretas pero extraordinariamente pía del acceso universal al conocimiento. ¿Qué retos
poderosas. plantea este nuevo paradigma al ámbito bibliotecario?
Actualmente, me fascina ver cómo la metáfora del El impacto de la era digital en nuestra forma de vivir,
libro como refugio hospitalario se corporiza espon- pensar y organizarnos es algo que apenas empeza-

JULIO-AGOSTO DE 2016 15
Fotografía: ©A N D R E A G A R C Í A F LO R E S

A veces se retraen, hibernan como sea la empatía del autor con los temática criminal, las novelas de
algunas bestias, esperan el momento escritores que analiza, señaladamente espionaje y la miríada de teorías
oportuno para reaparecer: el Franz Kafka y Walter Benjamin. conspirativas que nutren la red global
pensamiento mide su tiempo. La idea Starobinski sostiene que la parálisis constituyen una nueva forma de
que parecía muerta en un cierto contemplativa de los escritores plantear y problematizar la realidad, y
tiempo renace en otro…” absortos en reflexiones sombrías exploran las contradicciones
La presente edición está anotada, puede evolucionar hacia dos aspectos inherentes a ella. Las vicisitudes
identifica las fuentes que el autor usó complementarios de la “experiencia del conflicto entre ambas realidades
o transformó en cada pasaje y melancólica”: el vagabundeo sin fin y constituyen el núcleo de este original
enmienda más de 250 erratas. el confinamiento que interrumpe y certero libro. A través de una
todo compromiso activo con el mundo amena y documentada exploración
obr as reunidas vi exterior. Ambos aspectos, sin de la obra de los grandes maestros de
nuevo mundo narr ativo,
editor responsable: julio ortega, con la embargo, pueden trascender la mera las novelas de espías y detectives —
colabor ación de ana gonzález tornero. depresión para convertirse en entre ellos G. K. Chesterton, Arthur
TERRA NOSTRA 2016; 829 pp. expresión de la “alegría de estar Conan Doyle, John Le Carré y
triste”. Graham Greene— Boltanski
CARLOS FUENTES demuestra de manera contundente
colección historia que estos productos de la
1ª ed. en español, 2016; 360 pp.
Con satisfacción, el Fondo de Cultura imaginación literaria nos revelan
Económica publica la edición algo fundamental acerca de
definitiva de la novela Terra nostra de la naturaleza de las sociedades
Carlos Fuentes, correspondiente al VI modernas, y por lo tanto, del
volumen de sus obras reunidas, 40 Estado moderno.
años después de la primera edición
por Joaquín Mortiz. colección sociología
1ª ed. en español, 2016; 360 pp.
De acuerdo con el destacado crítico
Julio Ortega, “No estamos
acostumbrados a las demandas de una
novela enciclopédica […] que nos exige
trabajos de lectura para los que no
hemos sido educados. Por eso, postula LA TINTA DE LA MELANCOLÍA
una tribu de lectores utópicos, capaces
de creer que una novela puede ser un JEA N STA ROBINSKI
mapa de un mundo por hacerse […]
Esta es una novela que no hace mucho El título de este libro proviene de un ENIGMAS Y COMPLOTS
aprendimos a leer. Cuando apareció poema escrito en el siglo xv por Carlos
[…] los lectores no estábamos de Orléans y hace referencia al origen LUC B OLTA N S K I
preparados para subir a esa pirámide.” etimológico griego de la palabra
En ese entonces, Terra nostra fue melancolía, que significa “bilis negra”. La figura de la conspiración se ha
calificada como “nueva novela El connotado médico y filósofo suizo convertido en nuestros días en punto
histórica”. Julio Ortega nos dice que Jean Starobinski se une a una esencial de todas las sospechas
es algo más que eso: “Lo que busca destacada lista de autores que han concernientes al ejercicio del poder. TEMAS DE LA LIRA Y EL BONGÓ
Terra nostra es forjar un nuevo lector. abordado el tema pero, a diferencia de Las preguntas que aparecen una y
Y esa poética funciona mejor en este muchos de ellos, su ágil y elegante otra vez son: ¿dónde se encuentran los ALEJO CARPENTIER
siglo de lecturas menos genealógicas y prosa es un despliegue de verdadera verdaderos mecanismos del poder?
más trasatlánticas. Es una novela que erudición que despoja al tema de las ¿Quiénes los ejercen realmente, las Cuando Daniel Cosío Villegas le
no termina de leerse porque empieza a reducciones simplistas de que ha sido autoridades nacionales solicitó a Alejo Carpentier una
ser leída cada vez mejor […] es un objeto. El autor enlaza de manera muy presumiblemente responsables u historia de la música cubana hace
curso universitario completo. Todos atractiva el mito del Judío Errante otras entidades que actúan desde las setenta años, quizás no sospechaba
los mexicanos deberían leerla y con la obra de escritores del siglo xx, y sombras? Estas interrogantes han que alcanzaría a colmar una de las
obtener un título de licenciatura en de esta manera define la auténtica servido de andamiaje a grandes aspiraciones de cualquier
mexicanidad moderna, crítica y creatividad como una combinación de construcciones políticas que postulan editor: la publicación de un clásico,
celebratoria”. melancolía —sentimiento asociado la existencia de una realidad doble: la pues La música en Cuba, editada en
Como lo dice un personaje de la desde tiempos inmemoriales a la oficial, casi siempre superficial, y la 1946 por el Fondo de Cultura
novela misma: “Las ideas, sabes, inspiración—, vivacidad e ingenio. Tal oculta, siempre más profunda y Económica, permanece como uno de
nunca se realizan por completo. vez el rasgo más notable de este libro amenazante. Las obras de ficción con los títulos fundamentales en la

16 JULIO-AGOSTO DE 2016
NOV EDA D ES

historia de la musicología. La notable


sensibilidad literaria y musical de
Carpentier se nutrió en un hogar
donde la práctica de la música excelsa
era cotidiana: su padre fue alumno de
Pablo Casals; su madre, aficionada al
piano; su abuela, discípula de César
Franck. A Carpentier, amigo y
compañero de faena de Darius
Milhaud, Edgard Varèse y Heitor
Villa-Lobos, director de estudios
fonográficos en París y realizador de
importantes programas radiales,
nunca le fue ajena la poderosa
presencia de la música cubana, ni PUNKZILLA ROSA Y LA BANDA EL BOSQUE DENTRO DE MÍ
dejaban de inquietarlo sus misterios. DE LOS SOLITARIOS
El presente volumen es una selección A DA M R A PP ADOLFO SERR A
de 78 textos: crónicas, cartas, COLAS GUTMAN
artículos y ensayos publicados en Punkzilla es un adolescente de VÍCTOR GA RCÍA BERNA L Con este álbum, el ilustrador Adolfo
revistas, periódicos y antologías, que catorce años que acaba de desertar de Serra ganó la XIX edición del
prueban la vocación de servicio por la la academia militar Buckner a donde Rosa es una niña inteligente y emotiva Concurso de Álbum Ilustrado A la
música que animó durante más de sus padres lo enviaron por cometer que habla de una forma muy peculiar Orilla del Viento. El también autor de
cincuenta años la obra de este gran algunos delitos menores y probar y graciosa. Debido a esto, sufre Caperucita Roja, publicada en 2013
escritor. drogas. Después de su huida, y gracias bullying de sus compañeros, lo que la por el fce, construye de nuevo una
a aventones de extraños en carretera, obliga a mudarse de escuela y ciudad historia narrada sólo por imágenes, en
colección popular llega a vivir a Portland, hasta que un frecuentemente. En el nuevo colegio, la que un niño descubre en el reflejo
1ª ed., 2016; 656 pp.
día recibe una carta de su hermano Rosa arruina su presentación frente al del agua algo más que su propio
Peter en la que le cuenta que está grupo pero no le da mucha rostro. Animado por su imaginación,
muriendo y le pide que lo visite. La importancia a esto, pues piensa que el personaje emprende un viaje a
trama nos narra la misión que tiene pronto se cambiará de ciudad y través del bosque, el cual se va
Punkzilla de recorrer Estados Unidos, escuela nuevamente. A la hora del poblando de sus sueños pero también
desde Oregon hasta Memphis, para recreo se refugia en el muro de los de sus miedos. En su recorrido lo
encontrarse con su hermano enfermo solitarios, donde conoce a Momo, acompañará un enigmático personaje,
de cáncer. La historia se desarrolla quien la invita a jugar con Steve y quien le muestra el camino para
entre moteles de mala muerte, Elena. Juntos, se convertirán en la avanzar en la espesura y lo acompaña
estaciones de autobuses y largos banda de Los Solitarios. Steve le a la ciudad, donde nuevas preguntas lo
paseos en carretera. Es una novela advierte que no se acerque a la reja sorprenden hasta que el niño decide
epistolar, construida con las cartas que divide a la primaria de la volver sobre sus pasos.
que Punkzilla le escribe a su hermano, secundaria, pues del otro lado hay Con la intención de crear un libro
a su familia y a sus amigos a lo largo estudiantes que atrapan a los abierto que fomente la imaginación de
del viaje. Durante la travesía, el pequeños para golpearlos; pero Rosa los niños —y de cualquier lector—,
protagonista intentará encontrar su no tiene miedo, ella adora poner en su Serra construye en este álbum silente
BIOCOMBUSTIBLES identidad al mismo tiempo que lugar a los buscapleitos, así que un día un escenario que se muestra al lector
Sus implicaciones energéticas, conocerá a peculiares personajes, se acerca a la reja prohibida… de manera inquietante, invitándolo a
ambientales y sociales enfrentará situaciones peligrosas y En este nuevo libro, Colas Gutman develar la historia y a reflejar en ella
tendrá encuentros desafortunados —quien publicó con el fce ¿Para qué sus propias emociones y sentimientos
JOAQU Í N P É R E Z PA R I E N T E que estarán presentes hasta llegar a su sirve un niño?— juega con el lenguaje de para, finalmente, construir un relato
destino, pero que en ningún momento la pequeña protagonista, cambia las único que le pertenezca sólo a él.
La convergencia en el tiempo de la le robarán las esperanzas de ver a su palabras y nombra a los objetos de Con una paleta reducida de colores
previsible escasez de petróleo y el hermano antes de que suceda lo acuerdo con su lógica. Sus diálogos —donde predominan los tonos grises y
cambio climático son las causas inevitable. La obra fue reconocida por resultan enigmáticos y divertidos, azules— y una provocadora portada, el
principales del desarrollo de la American Library Association con nada convencionales en contraste con autor crea un mundo fantástico donde
combustibles alternativos para el el premio Michael Printz, otorgado a los de los otros niños. Al principio, ningún detalle está puesto al azar.
transporte. Una de las opciones es la novelas juveniles. Rosa piensa que esto la aleja de los “Hay que arriesgar para que
utilización de carburantes obtenidos demás, pero gracias a la fuerza de su avancen los libros”, opina Serra, y esta
de la biomasa, los denominados a tr avés del espejo rirá que, por el
carácter descubrirá obra es justo eso: una apuesta
1ª. ed. en español, 2016; 160 pp.
biocombustibles, con el objetivo de er diferente la hace
contrario, ser arriesgada que necesita la mirada del
sustituir de manera progresiva los especial y única y no habrá razón papara lector para completarse. El bosque
obtenidos de fuentes fósiles. En la estarr sola nunca más. dentro de mí significa adentrarse en
práctica, esos biocombustibles son el uno mismo, y emprender el recorrido
etanol —sustituto de la gasolina— a la orilla del viento implica descubrir nuestros miedos y
1ª. ed. en español, 2016; 80 pp.
obtenido de cultivos como el maíz o la ssueños, es decir, conocernos a
caña de azúcar, y el denominado no
nosotros mismos al tiempo que
biodísel, obtenido a partir de aceites cons
construimos nuestra identidad.
vegetales de cultivos como la soya, la
colza o la palma aceitera. los especiales
espec de a la orilla del viento
1ª. ed. en el fce,
fc 2016; 64 pp.
Los biocombustibles ya son parte de
la vida cotidiana de muchos países, al
ser utilizados en automóviles y otros
medios de transporte como sustitutos
parciales o totales de los derivados del
petróleo. El autor analiza los
argumentos más extendidos a favor de
entos,
su uso, así como los cuestionamientos,
como el hecho de que requieren en
ductos
ingentes cantidades de productos
imento, y
vegetales que también son alimento,
compiten por lo tanto con su
disponibilidad en un mundo en ell que
enas
una buena parte de la población apenas
consigue alimentarse o pasa hambre.
¿Cuál es la viabilidad de los
biocombustibles como alternativa
energética aceptable? Este ensayo
ofrece un conjunto de argumentos y
evidencias para encontrar respuesta a
esta pregunta.
la ciencia par a todos
1ª. ed., 2016; 256 pp.

JULIO-AGOSTO DE 2016 17
Ilustración: ©A N D R E A G A R C Í A F LO R E S

BIBLIOTECAS HOY

A RTÍ C U LO

NUEVOS
PROCESOS
EDITORIALES
Esta sexta y última entrega sobre el desarrollo
del libro electrónico concluye con una serie de preguntas
sobre el futuro del proceso editorial, la producción y lectura de libros,
su distribución y modificación, la formación y función de las comunidades
de lectores, la transformación del libro en obra abierta y otras cuestiones
que se desprenden de los cambios que la industria
ya está experimentando. Toda una revolución cultural.

E R N E ST O P R I A N I S A I S Ó
E ISABEL GALINA RUSSELL

18 JULIO-AGOSTO DE 2016
Ilustración:: ©
BIBLIOTECAS HOY

EL CORRECTOR, EL REVISOR DE ESTILO, papel. Lo central, sin embargo, es que el equipo que participa en la producción de
EL FORMADOR Y OTROS INVOLUCRADOS ebooks debe estar familiarizado con las características del texto digital —espe-
El perfil de una plaza de diseñador de productos digitales de la empresa Andrews cialmente con sus particularidades editoriales: a qué se le puede dar forma y a
McMeel Publishing, de Kansas City, es el siguiente: qué no, qué tan flexible es, cómo se pone o se quita un hipervínculo, cómo se es-
tablecen subrayados y negritas, etcétera— y con los lenguajes de programación
El diseñador de Producción Digital diseñará y ejecutará formatos de conteni- de los ebooks. Por supuesto, el corrector de estilo no necesita ser experto en los
do digital (incluyendo el desarrollo de interfaces de usuario) para la publica- lenguajes y en los programas digitales, pero en la medida en que entienda sus
ción de libros ilustrados. El ocupante será el responsable de la originalidad y la funciones, los tipos de procesos que permiten y cómo puede identificar errores
creatividad necesarias para el éxito de los productos, incluyendo ebooks, apps, de producción, su trabajo tendrá mejores resultados.
juegos y demás. La persona será también responsable de garantizar que todos El punto central es que la producción de contenido digital de ebooks y apps
los proyectos electrónicos utilicen la línea de producción más efectiva y la tec- forma parte de un cambio cultural con el que deben familiarizarse todos los par-
nología más actualizada. ticipantes del campo editorial digital, pues cada fase del trabajo y la calidad del
resultado dependerán de su comprensión de lo que hacen.
Responsabilidades: La producción de libros en nuestros días es resultado de 500 años de cultura
• Diseño y creación de libros digitales y de otros paquetes de contenido digi- editorial. Cada parte del proceso está claramente regulada por procedimientos
tal (apps, juegos, descargables, etcétera). que han sido probados durante años. Podríamos decir que quienes trabajan en el
• Identificar los profesionales independientes apropiados para el diseño y campo de la edición han entendido ya los códigos y las formas que gobiernan su
la creación de libros y contenido digital. campo y buscan, sobre todo, la perfección. Pero no pasa lo mismo con quienes co-
• Tener perfecta comprensión de los ebooks actuales y de las tecnologías di- mienzan a trabajar en el mundo de la edición digital, donde no hay reglas firmes.
gitales, con habilidad para aplicarlas a libros ilustrados. El cuidado del texto y la preocupación por el diseño adecuado para la lectura y
• Trabajar con directores artísticos, editores y diseñadores para establecer el atractivo del libro no cambian; lo que cambia es cómo se alcanzan esas perfec-
y crear layouts y características de los productos digitales para lograr su ciones. Pero no es sólo que las herramientas cambien, sino que la forma de los
mejor calidad en las plataformas y los equipos existentes. dispositivos se ha vuelto inestable, pues éstos cambian constantemente. La modi-
• Trabajar con el director artístico y el gerente de operaciones para estable- ficación constante de las funciones de los dispositivos implica en ocasiones cam-
cer la línea de producción digital. bios en la formación y la producción de los libros. Algunas evitarán que libros
• Supervisar todos los proyectos electrónicos de la división de libros y ase- formados hace un par de años se desplieguen en la misma forma que los libros más
sorar a la vicepresidencia y al productor ejecutivo de oportunidades de actuales. El problema, de hecho, es que estas innovaciones no serán permanentes
desarrollo digital. sino que la gran mayoría desaparecerá en tiempo muy breve, mientras otras ven-
drán a sustituirlas. Siendo el de los libros un campo más bien conservador, en el
Habilidades: que se busca sobre todo el dominio del arte y la perfección, los libros digitales
• Fuertes antecedentes digitales y al menos tres años de experiencia dise- vienen a introducir algo que le es extraño: la innovación constante en la concep-
ñando y produciendo websites, ebooks y otros productos digitales para ción y formación de los productos.
contenido ilustrado.
• Importantes habilidades técnicas y de diseño, incluyendo diseño de pági- MÁS ALLÁ DEL LIBRO ELECTRÓNICO
nas con software Mac OS (QuarkXPress y Adobe Creative Suite), diseño Prever el futuro es también darle forma. Una serie de artículos sobre el libro elec-
de páginas web con software (Dreamweaver) y generación de productos trónico que no concluya con una especulación sobre el futuro del libro y la lectura,
complejos técnicamente. y las posibilidades abiertas por la digitalización del texto, sería incompleta. En
• Experiencia en los actuales estándares de ebook (xml, html, css, ePub 3) este momento, en muchas partes del planeta hay personas imaginando los libros
y en los formatos especiales ofrecidos por varios ambientes de lectura del futuro, la manera en que serán leídos, la forma de las bibliotecas, cómo inter-
(por ejemplo, iBooks Author, Kindle Panel View, Nook Comics, etc.) y ha- cambiaremos los libros, qué otras cosas podrán hacerse a partir de que los libros
bilidad para producir contenido de alta calidad para esas plataformas. son electrónicos. En lo que sigue pondremos nuestro grano de arena a estas
reflexiones.
No es difícil darse cuenta de que este perfil es nuevo en el mundo editorial. Es un En todos lados es posible encontrar fantasías sobre lo que vendrá para el libro,
perfil propio con habilidades técnicas específicas que provienen de un campo de sobre todo en internet. Comenzaremos tomando una de ellas como punto de par-
conocimiento y trabajo distinto al de la edición tradicional. Pero lo importante no tida. Queremos también responder algunas preguntas clave sobre el futuro del
son tanto las diferencias como el hecho de que la inclusión de un perfil de este tipo libro y hacer una reflexión final sobre la revolución que estamos viviendo. Las
en un equipo de producción editorial suele resultar disruptiva porque domina he- preguntas, creemos, son una guía eficaz para adentrarse en el tema porque son
rramientas que el resto del equipo no conoce a profundidad o quizás ignora, y por- suscitadas por lo que está ocurriendo ahora y surgen de las preocupaciones y de-
que puede proponer soluciones que chocan con la tradición editorial en papel. seos de quienes leen o trabajan en crear las formas de lectura del futuro pero, por
Aspectos tan simples como el hecho de que en los distintos formatos digitales otro lado, señalan también las áreas donde pueden ocurrir los cambios que mar-
el tamaño de letra es decisión del lector y, por lo tanto, el diseño y el cuidado edi- carán el porvenir. En este orden, vayamos primero a la imaginación.
torial deben tomar esta variable en consideración, pueden provocar confronta-
ciones innecesarias con quienes están habituados a editar en papel, donde el 2020: todos los libros serán interactivos y multiplataforma. Los libros futuros inte-
diseño incluye el tamaño de la letra. A fin de cuentas, el grado de control sobre la grarán soundtracks, motivos musicales, gráficas 3d y video en streaming. Estarán
imagen del texto en la pantalla no es tan grande en el mundo digital como lo es en enriquecidos con subrayados sociales, citas en línea y alertas sobre quiénes han

JULIO-AGOSTO DE 2016 19
BIBLIOTECAS HOY

NUEVOS PROCESOS EDITORIALES

comprado en tu localidad el mismo libro que tú mediante una app de geolocaliza-


ción: cualquier cosa para que tú no tengas, de hecho, que leer… Los autores harán
su propio marketing, los lectores serán los responsables de la distribución, la sabi-
duría de las masas cuidará la edición y la mano invisible del mercado llevará a
En este momento, en muchas partes
artes
cabo la escritura.
del planeta hay personas imaginando ndo
2030: todos los libros serán hechos por crowdsourcing y estarán en la nube. Los no-
velistas comenzarán diseñando sus personajes como muñecos de vinil; si éstos
los libros del futuro, la manera en quee
producen suficiente runrún, los fans empezarán a producir la novela colaborati-
vamente en una wiki. Según vayas leyendo, cámaras térmicas medirán tus signos
s
serán leídos, la forma de las bibliotecas,
psicológicos, incluyendo el movimiento de ojos, la contracción de los músculos fa-
ciales y el ritmo cardiaco para determinar hacia dónde quieres que la historia
cómo intercambiaremos los libros, qué
avance —se espera que la historia se lea a sí misma, se explique y discretamente
hile tus mensajes de texto en el diálogo—. Podrás conocer detalles finos de cómo
otras cosas podrán hacerse a partir
los personajes son digitalmente representados, dispararles y (cuando sea impera-
tivo) tener sexo virtual con ellos.1
de que los libros son electrónicos.
El texto de Timothy McSweeney’s Internet Tendency ironiza, por supuesto, algunas
En lo que sigue pondremos nuestro
de las creencias más populares de lo que podría ser el futuro del libro: algo así
como una película o un audiolibro cada vez más cercano a la realidad virtual. Es
grano de arena a estas reflexiones.
común escuchar que el libro será enriquecido por otros elementos también digita-
les, como el video y la música, lo que de hecho ya ocurre en algunas apps de libros.
Lo mismo puede decirse de la tendencia a desaparecer al escritor y sustituirlo por Compartir es otra palabra clave para el futuro de la lectura. Lo ha sido en el
la popularidad o incluso por un no escritor, una muchedumbre o incluso un algo- pasado, lo es en el presente. A pesar de las restricciones legales y técnicas para
ritmo, de modo que el libro responda a lo que tiene éxito entre los consumidores. compartir libros electrónicos, un campo de experimentación e innovación es el
¿Será así? ¿La lectura como la conocemos está a punto de desaparecer para ser de los servicios para compartir la lectura. Se da así una paradoja si se piensa en
sustituida por objetos de video/audio/lectura? ¿Los libros dejarán de ser libros y los pocos sistemas disponibles para compartir libros —salvo Amazon, que ofre-
llegarán a ser objetos complejos que tendrán otro nombre y con los que nos rela- ce la posibilidad de regalar libros electrónicos y, en algunos casos, prestarlos—.
cionaremos de otra forma? De modo que, si la lectura no puede compartirse como se hace todavía con los li-
El Instituto para el Futuro del Libro, www.futureofthebook.org, organización bros en papel, el futuro de su socialización se está desarrollando en la formación
vinculada con la Biblioteca Pública de Nueva York y ramas independientes en In- de comunidades como Goodreads, Readmill, BookGlutton, aNobii, por mencio-
glaterra y Australia, ha propuesto algunas preguntas sobre el porvenir de los li- nar algunas de las más populares. Compartir la lectura en un futuro ¿significa-
bros. Las retomamos aquí para confrontar esta visión irónica y organizar nuestro rá socializar subrayados, opiniones sobre los libros, alguna cita? ¿O qué signifi-
viaje más allá del libro electrónico. cará socializar? ¿Cómo participarán estos dispositivos en la definición de la lec-
tura? ¿Qué hábitos inducirán?
PRIMERA PREGUNTA: ¿CÓMO SE LEERÁ EN EL FUTURO? Un último tema en esta búsqueda del futuro de la lectura: el beta reader, figu-
Esta pregunta refleja la doble inquietud de querer entender lo que está pasando ra que aparece en la fan ficción, término que describe las obras literarias escritas
ahora, pensando también en cómo serán las cosas más adelante, no sólo en cuanto por los lectores de obras muy populares, como Harry Potter, siguiendo el modelo
al acto de leer, sino a la forma misma de relacionarnos con la escritura como tota- del original. Puesto que se trata de una producción literaria al margen del mer-
lidad. En The Book Was There. Reading in Electronic Times, Andrew Piper reflexio- cado editorial y floreciente a partir de la publicación digital y de la formación de
na sobre este fenómeno y confronta la visión del futuro del libro con la inclusión de comunidades de lectores, el beta reader es una suerte de editor o de primer lector
otros medios en él. Su pregunta no es por la tecnología y sus posibilidades, sino de manuscritos en una relación de producción comunitaria de libros. ¿Crecerá
por el significado de la página en tiempos del ebook. Al respecto escribe: “Aquí es esta figura en el futuro y dará lugar a un nuevo lector, uno que corrija la obra que
donde yo pienso que necesitamos cambiar los términos del debate. Lo que importa lee? ¿Se leerá para colaborar en el mismo acto en la construcción de una obra
no es la habilidad para agregar vínculos o contenido visual o de audio. Esto me cons- colectiva?
terna porque parece ser un abandono, y no un enriquecimiento, de la lectura. En
cambio, lo que debería estar en el centro es cómo nosotros podemos o no reconcep- SEGUNDA PREGUNTA: ¿CÓMO EVOLUCIONARÁ EL CONCEPTO DEL LIBRO?
tualizar la estructura formal de la lectura. Es por eso que reflexionar sobre la natu- Con lo que hemos dicho hasta ahora, hay más preguntas que respuestas al ima-
raleza de la página, en lugar de hacerlo sólo sobre la tecnología, es tan importante.”2 ginar el futuro del libro. Pero, como sugiere Bret Sandusky, “comencemos con
Sin páginas, ¿habrá libros en el futuro? O, pensando que se mantengan, ¿cuál una hipótesis: los ebooks, como los conocemos hoy, son una paso artificial e in-
será su futuro? ¿Cuáles serán sus márgenes, sus bordes? Estas preguntas, que se termedio en el desarrollo digital de la industria editorial. Como son hoy,
siguen de la reflexión a la que nos invita Piper, son clave para imaginar las posibi- desaparecerán.”3
lidades futuras de la lectura. ¿Se mantendrá ésta ceñida a la pantalla o pasará a Es fácil imaginar que todos los aspectos del libro electrónico hoy conocidos
otros espacios para generar otros ambientes de lectura? ¿Se producirán, como ya cambiaran significativamente en el futuro. Mejoras en el software y en los dis-
se trabaja en ello, hojas electrónicas y se simularán libros con ellas? Siendo la pá- positivos de lectura, mejores herramientas de lectura, muchas de las cuales
gina del ebook la adecuación de un texto continuo a una pantalla, parte de su futu- tienen hoy un desarrollo incipiente por conflictos de copyright, como el subra-
ro estará atado a la evolución de las pantallas mismas, pero ¿cómo serán éstas yado, la toma de notas o la posibilidad de utilizar un texto en otro texto. Pero
después? La idea de página tendrá que ver también con el hardware: páginas que podemos imaginar algo de esa transformación por lo que es posible ver hoy. To-
se adecuen mejor al ojo; que sean manejadas visualmente, respondiendo a los memos el caso de los diccionarios.
movimientos oculares; que tengan un brillo más afín a nuestros ojos, con otras De manera cada vez más común, los dispositivos electrónicos de lectura in-
funciones visuales, además de aumentar el tamaño de la letra… Ligado con esto cluyen un diccionario. De modo que el diccionario, como lo conocemos hasta
aparecen las condiciones físicas de la lectura. Cosas como el peso del dispositivo ahora, como libro independiente y distinto, converge ya con la novela o el ensa-
de lectura, la postura al leer, los lugares donde leemos —son conocidas las desven- yo, como parte de ellos. Esto ya ocurrió con las enciclopedias, que cedieron su
tajas de leer en dispositivos electrónicos bajo el sol y las ventajas de leer de noche lugar a Wikipedia y que, poco a poco, se convierten también en sistemas de re-
bajo una lámpara—. ¿Seguiremos leyendo donde lo hacemos hoy? ¿Se extenderá la ferencia dentro de los libros digitales. No es remoto pensar que para algunos
lectura a otros lugares y horarios? libros clásicos, como el Quijote, el libro electrónico incluya toda una estructu-
Pero está también el tema de fondo: cómo se escribirá para esas pantallas, esos ra de instrumentos de lectura, como un diccionario de términos del español de
lugares y esos horarios, y qué cosas de nuestro entorno personal y cultural cam- Cervantes y pistas de las relaciones entre los personajes o incluso explicacio-
biarán conforme cambie la lectura. Porque leer una novela del siglo xx en las nes de los pasajes, para quien se interese en otros aspectos de la lectura, en un
condiciones materiales de los libros de esa época hacía de la lectura un proceso sentido mucho más amplio y popular, que el de las ediciones académicas
prolongado que requería concentración absoluta en espacios adecuados y cuyo re- anotadas.
sultado era un conocimiento casi íntimo de los personajes. Una lectura que, a juz- Es posible concebir el enriquecimiento de los libros de una forma diferente a
gar por lo que dice Piper, ha desaparecido ya, se ha transformado en otra cosa. En la inclusión de archivos de video o de sonido, por ejemplo con la incorporación
su lugar “y como un estudio tras otro afirma, entre más tiempo estamos leyendo de herramientas de lectura como las que se han mencionado y mediante su
pantallas, menos tiempo destinamos a leer unidades individuales de textos. Echar vinculación con otros textos que los complementen o los extiendan. Porque el
una ojeada es lo normal y nuevo” (posición 394). Extraer de la lectura lo funda- reto está en imaginar el libro como algo más que el libro, pero sin pretender
mental sin completarla, no recorrer todas las palabras del libro, avanzar al final, sustituir la lectura.
saltarse uno o dos capítulos, leer el tercero, regresar… Los hábitos de lectura De este modo, es factible pensar que el libro se volverá más complejo en va-
¿serán procesos de colecta con instrumentos construidos para ello? ¿Qué herra- rios sentidos y quizás en varias dimensiones. Pues podrá irse enriqueciendo
mientas utilizaremos para tomar notas, mezclar lo leído, preservarlo? ¿Podemos con instrumentos que extiendan la lectura, pero también con el hecho de que la
considerar la lectura a distancia entre estos instrumentos? El concepto viene del escritura electrónica no necesariamente implica un cierre, un final, sino que
campo de experimentación de las humanidades digitales y se utiliza para descri- abre la posibilidad de continuarla. Podemos pensar el libro del futuro no nece-
bir procesos de lectura de grandes volúmenes de información mediante herra- sariamente como una obra acabada y terminada en todas sus partes, sino abier-
mientas de visualización como Ngram Viewer o Voyant Tools, entre otras. Un ta y en proceso, como las novelas por entregas de los periódicos del siglo xix,
campo donde la página cede su lugar a los datos, pues los procesos de digitaliza- pero con posibilidades de continuación potencialmente infinitas.
ción significan la transformación de las palabras en datos que se pueden estudiar También habrá que considerar que la lectura de libros digitales está arrojan-
y leer masivamente. do muchos datos sobre la forma en que leemos los libros: completos, fragmenta-
dos, brincándonos capítulos. Y, claro, la lectura es diferente dependiendo de si
1 Timothy McSweeney’s, Internet Tendency, 24 de marzo de 2014. Consultado en www.mcsweeneys.net/arti-
cles/the-future-of-books.
2 Andrew Piper, The Book Was There. Reading in Electronic, The University of Chicago Press, 2012, posición 3 Brett Sandusky, “User Experience, Reader Experience”, en Book: A Futurist’s Manifesto. Consultado en
794 (edición electronica). book.pressbooks.com/chapter/user-experience-reader-experience-brett-sandusky.

20 JULIO-AGOSTO DE 2016
BIBLIOTECAS HOY

NUEVOS PROCESOS EDITORIALES

el libro es una
u novela, una colección de cuentos o ensayos o un estudio de co- critura. Imaginar que, al final, algunas obras sean elaboradas por un conjunto
cina. ¿Có
¿Cómo afectará este conocimiento al pensar los libros del futuro? Por amplio de autores o completadas por sistemas automatizados, no es del todo im-
ejemp
ejemplo, podrían ser formados por partes independientes que uno pudiera ir in- pensable, en la medida en que su producción no estará restringida al estudio del
te
tegrando. Pensemos, sólo por fantasear, en que aparece un estudio actual con autor, sino que se abrirá al ámbito más público de la distribución en línea.
más de 15 capítulos sobre las últimas reformas políticas. ¿El lector podrá com-
prar sólo 5 o 10 capítulos y formar su propio libro? Luego agregarle otros seis QUINTA PREGUNTA: ¿CÓMO SE EDITARÁN LOS LIBROS EN EL FUTURO?
capítulos que aparecen en una edición posterior, o incorporar capítulos de otro Si somos capaces de imaginar que el proceso de escritura será colectivo y
libro escrito de manera independiente, pero que el lector desee reunir. abierto, es natural pensar que su proceso de edición será de la misma forma.
Frente al libro electrónico, ¿es el libro en papel una forma rígida y cerrada? Las plataformas como las de fan fiction convierten la escritura, la edición y la
¿Es posible pensar que el libro se volverá un objeto más flexible en términos de publicación en un mismo acto. ¿Qué tan factible es que esta forma de edición
su integridad como obra? ¿Podríamos imaginar nuestra biblioteca personal y distribución se generalice? ¿Qué otras formas de edición sacarán ventaja
como una colección de obras que se comunican entre sí y generar las opciones de esta convergencia de todo el proceso de producción de libros en el plano de
para rastrear las conexiones entre los libros que leemos? ¿Libros que son entida- internet?
des abiertas a otros libros para formar nuevos volúmenes? Ya antes habíamos comentado cómo Amazon había puesto en línea su sistema
de autopublicación kdp, y cómo ha crecido el mercado de la autopublicación en el
TERCERA PREGUNTA: mundo. ¿Será este el futuro: libros publicados por uno mismo y puestos a la ven-
¿CÓMO ENCONTRARÁN LAS PERSONAS NUEVOS LIBROS EN EL FUTURO? ta directamente? Lo que en todo caso parece previsible es un cambio en la inter-
Un rasgo de internet, al que ha venido a abonar el libro electrónico, es la sensa- mediación de los libros, en la forma de elegirlos, trabajarlos y ponerlos a la venta.
ción de tener acceso a casi cualquier cosa. Ante esto, una pregunta estratégica Una compactación y una reinvención de esos procesos.
es: ¿cómo encuentro un libro? De los millones de libros a la venta en Amazon,
por ejemplo, ¿cómo encuentro uno que me interese? ¿Cómo descubro cuál me SEXTA PREGUNTA: ¿CUÁL ES EL FUTURO DEL MERCADO EDITORIAL?
será más útil? ¿Cuál podrá gustarme? La pregunta refleja la incertidumbre de Es difícil imaginarlo cuando parece complicado describirlo hoy. Quizás el cam-
cualquiera que se aventura a encontrar un libro y, por lo tanto, busca anticipar bio más significativo hasta este momento, como señala Rüdiger Wischenbart, es
cómo podríamos encontrarlos en el porvenir. Para algunos, los lectores no ten- la mundialización del mercado del libro. Es decir, el paso de un mercado que se
drán que buscar los libros: serán éstos quienes buscarán a los lectores de una desarrollaba sobre todo de manera local, a través de formas de comercialización
manera agresiva, introduciéndose en sus bibliotecas e invitándolos a ser leídos, que atendían las especificidades de comunidades locales, a la aparición de gran-
quizá desplegándose en su pantalla a partir de las búsquedas, tuits o cambios de des distribuidores a nivel mundial, capaces de proveer libros en casi todo el pla-
estados en la plataforma del momento. La impresión de que las promociones neta. En este momento, sin embargo, “los ebooks son sólo una parte de este nue-
de libros tomarán ventaja del acceso de los distribuidores a nuestros dispositivos vo ecosistema de escritura, publicación y lectura, donde hay casas editoriales y
no parece sorprendente. Pero aun cuando esto pudiera ocurrir, si no es que ya librerías, y en muchos mercados europeos representan sólo un pequeño porcen-
está ocurriendo, no resuelve el problema. ¿Cómo encontraremos los libros que taje de las ganancias de la industria del libro nacional. La distribución de los li-
nos interesan? Porque debemos recordar y reiterar que los libros no son sólo las bros se encuentra, de hecho, a la mitad de un complejo campo de batalla econó-
obras de ficción y particularmente las novelas. Los libros son todos los libros: ya mico, político y cultural, donde gobiernos nacionales, la Comisión Europea y los
hemos hablado de los diccionarios y de las enciclopedias, pero debemos incluir actores digitales globales como Amazon, Apple y Google luchan por el poder y
los atlas y los libros de texto, por no hablar de las numerosas variedades de libros control de la economía digital de la siguiente década.”6
científicos, de actualidad, de negocios… En realidad, como muestran las cifras Es difícil prever quién ganará esa batalla, aunque el resultado será un merca-
de Goodreads4, sitio para que lectores compartan sus opiniones sobre lo que do editorial probablemente muy distinto al que conocemos, pues habrá nuevos y
leen, los 5 mil libros más populares en esa red social representan sólo el 56% de grandes actores globales que podrían transformar nuestra relación con el libro
los títulos disponibles. —pensada hoy todavía como íntima y cercana a la librería de barrio—, conforme
La dificultad de encontrar los libros que necesitamos está en contar con he- el mercado del libro digital siga creciendo.
rramientas para hacerlo en los ámbitos que nos interesan. Es aquí donde las En las proyecciones de escenarios de Cerlalc para América Latina 7, serán los
apps de lectura que hemos mencionado podrían jugar un papel importante si en manuales los que en un periodo de tres décadas serán leídos y producidos de ma-
torno a ellas se forman verdaderas comunidades de lectores en todos los cam- nera digital en su totalidad. Un escenario semejante se prevé para diccionarios y
pos, no sólo en el literario. enciclopedias. No es el caso, sin embargo, de la literatura, donde Cerlalc prevé un
En el fondo, la lectura ha sido también siempre una experiencia social: pres- desarrollo mucho más lento de la producción y la lectura digital de textos. De he-
tamos los libros, hablamos del gusto o el desagrado con que los hemos leído, di- cho, en comparación con el resto del mercado editorial, la literatura apenas alcan-
fundimos las ideas que consideramos valiosas, los enseñamos y los estudiamos. zará un equilibro entre la producción analógica y la digital al final de esta década
Y éstos han sido medios para inducir a otros, o para que nosotros mismos sea- en América Latina y no se prevé el momento en que se tornará completamente
mos inducidos a leer ciertos libros, en parte porque hay con ellos una relación digital.
personal, un interés compartido o una relación de autoridad. ¿Se trasladarán
estas conversaciones a las apps? ¿Se mantendrán estos principios sociales de ¿YA NO HAY VUELTA ATRÁS?
formación de afinidades? ¿Serán sustituidos por algoritmos que detecten nues- El crecimiento del mercado del libro electrónico hace parecer irreversible la dis-
tros intereses y preferencias? De acuerdo con Goodreads5, las formas de descubrir minución de la producción de libros en papel. Pese a que se especula cuándo éstos
los libros en su comunidad son diversas, pero las principales son la búsqueda y la dejarán de producirse definitivamente y que algunos nieguen que eso vaya a ocu-
recomendación. Sin embargo, cabe notar que las búsquedas parten del conoci- rrir en un futuro cercano, lo cierto es que el libro electrónico está cambiando muy
miento previo del libro o del autor, de modo que la mayoría de las formas de en- rápidamente el panorama editorial en el mundo.
contrar libros están fuera de la comunidad en línea, en las formas tradicionales Esta reconfiguración es un cambio que, como hemos dado cuenta a lo largo de
de conocimiento y descubrimiento de lecturas. estas entregas, altera y modifica numerosos aspectos de la producción de libros.
Es previsible que estos sistemas evolucionarán y se segmentarán para aten- Pensamos, sin embargo, que se trata no sólo de una revolución en términos de for-
der a diversas comunidades de maneras más efectivas que las actuales. Pero es mato, producción, mercado y protección de derechos, sino una revolución cultural
factible pensar que su éxito no dependerá de qué tan bien hagan promoción de que, a largo plazo, quizá contemplemos como equivalente a la producida por Gu-
autores nuevos, sino de qué tan eficaces sean en responder a los intereses de las tenberg en el Renacimiento. Los alcances de esta nueva revolución apenas co-
comunidades que atiendan. mienzan a sentirse, pero es innegable que, en este momento, cada uno de nosotros
tiene un mayor acceso a libros en cualquier idioma que nunca antes en la historia.
CUARTA PREGUNTA: ¿CÓMO SE ESCRIBIRÁN LOS LIBROS? Además, la naturaleza digital del texto y la capacidad de los sistemas en que los
Esta pregunta puede parecer extraña, sobre todo si imaginamos que los libros leemos están posibilitando análisis a gran escala de los datos contenidos en los li-
son escritos por autores sentados frente a su computadora (antes la máquina de bros y, a la vez, generando un conocimiento más agudo de las maneras en que lee-
escribir y mucho antes la pluma y el papel). Este modelo de autoría, como hemos mos. Estos dos factores modificarán en definitiva nuestra forma de estudiar los li-
dicho, entra en conflicto con el texto digital de muchas maneras. Este conflicto bros y la decisión de cómo los escribiremos en un futuro no muy lejano.
justifica preguntar si continuaremos hablando de autores y de cómo éstos No es posible adivinar hoy cómo serán las cosas, ya no en un horizonte de 50 o
escriben. 100 años, sino en uno de cinco o 10. La velocidad con que está ocurriendo la susti-
Comencemos por considerar que la forma en que se escriban los libros tendrá tución del libro en papel es mayor a la imaginada, gracias entre otras cosas a la di-
que ver con la forma de los libros futuros. Con qué elementos nuevos serán enri- námica de innovación en casi todos los aspectos relativos a la lectura digital y al
quecidos, pues de ello dependerá si un libro será obra de una o de varias perso- hecho de que, se quiera o no, el libro electrónico es mucho más accesible que el de
nas, pues un libro enriquecido con otros elementos de lectura, como dicciona- papel en términos de precio y disponibilidad. Esto incluye comunidades que aún
rios, enciclopedias o con relaciones con otro tipo de escrituras, será un producto no acceden al libro electrónico como tal, pero que, por ejemplo, comparten libros
colectivo. escaneados en pdf y con ellos van conformando bibliotecas electrónicas y gene-
No es este el único cambio concebible en el proceso de la escritura. Ya habla- rando accesibilidad a un número muy alto de volúmenes, algunos de los cuales son
mos de la fan fiction y del beta reader. Esta literatura sigue un proceso de creación inaccesibles por otros medios.
abierta a través de sistemas como FanFiction.net, donde los autores escri- Nuestra mayor responsabilidad es estar conscientes de la naturaleza del cam-
ben sus novelas a partir de la opinión de sus lectores. Amazon ha desarrollado bio para colaborar a que tome la forma más adecuada para los intereses de la hu-
su propia comunidad de fan fiction llamada Kindle Worlds, que, si bien opera de manidad, pues el libro, como sea que vaya a ser en el futuro, deberá seguir cum-
manera diferente, busca sacar ventaja de la nueva tendencia. Es posible imagi- pliendo la función de transmitir y comunicar, más allá del espacio y del tiempo, las
nar, pues, que en el futuro una parte de los libros tendrá forma de producción ideas, los pensamientos, las emociones y los conocimientos de la humanidad.W
abierta y colectiva. Porque lo mismo está ocurriendo en la academia, donde,
como ya anotamos, la publicación en línea de entradas en blogs, artículos o par-
tes de libros genera discusiones que hacen cada vez más abierto el proceso de es-
4 O. Chandler, “Goodreads—How People Discover Books Online”, presentación en Tools of Change 6 Rüdiger Wischenbart et al., Global eBook: Current Conditions & Future Projections. Rüdiger Wischenbart
Conference, 15 de febrero de 2012. Disponible en www.slideshare.net/PatrickBR/ Content and Consulting October 2013, p. 5. Consultado en www.global-ebook.com.
goodreads-how-people-discover-books. 7 Richard Uribe, Escenario apuesta para el sector editorial 2020, Cerlalc. Consultado en www.cerlalc.org/
5 Idem. Prospectiva/Escenario_apuesta_2020.pdf (25 de julio de 2014).

JULIO-AGOSTO DE 2016 21
Ilustración: ©A N D R E A G A R C Í A F LO R E S

Homenaje sosegado a Bob Dylan, el cantante,


p entemente desmañado
el poeta y el hombre, escrito en tono aparentemente
pero riguroso, contra el mundo superficial y olvidadizo
de la sociedad del espectáculo.

Güero sobre güero:


50 años después
todavía Bob Dylan
R I CA R D O P O H L E N Z

E
ra el verano de 1966, un día velocidad, convertido en una ráfaga dijo a Paul J. Robbins de la L. A. Free comercio o porque se hubiera
cualquiera de julio, Bob estridente que atraviesa el verde de la Press que se llamaba Bob Dylan Off empecinado en hacerlo. Puedes verlo
Dylan iba en moto en floresta. Dylan es uno con la máquina The Record. Le explicó que había escribir a máquina en la película que
carretera cerca de y no. Mientras acelera sabe que otra escrito canciones que iban un poco hizo D. A. Pennebaker sobre su paso
Woodstock, donde tenía su casa. El máquina —inmensa— le viene a la más allá; lo describió como una por Gran Bretaña, cuando todavía
ruido de la máquina reverberaba bajo zaga y busca darle alcance. Una sucesión prolongada de versos y “cosas estaba escribiendo el libro. Así, por
los arces, los pinos, los robles y las máquina hecha de acontecimientos y así”. Le pregunta a Paul J. Robbins si ejemplo, ponía en el papel “Passing the
hayas. Los olmos se habían responsabilidades, abusos y sabe algo de los recortes literarios tipo sugar to the iron man of the bottles who
extinguido —como los dinosaurios— desmanes, que se ha articulado a su William Burroughs, el otro le dice que arrives with a grin and a heatlamp and
a principios de los sesenta. Los olmos alrededor como una migala gigante sí. Le contesta entonces que de eso se heˇs pushing ‘who dunnit’ buttons this
son picados por un insecto. Vaya cosa que se extiende como un incendio trata, que al menos “eso significa”. year and he is a love monger at first
esa, de que a los olmos los pique un forestal y que se alimenta de su Cuando Nora Ephron (¿o habrá sido sight”, y seguía, con licencias líricas
insecto. Este insecto, conocido como hálito, como llama que se extingue a Susan Edmiston?) le pregunta de qué rimbaudianas aprendidas de Allen
barrenillo —en inglés se le llama, tal falta de gas. trata el libro, le contesta sin más, “es Ginsberg, Bill Burroughs y Jack
cual, escarabajo de la corteza— viene Si sólo le hubiera puesto otro título un libro de palabras”. Kerouac.
y pica al olmo, le mete un hongo en los al libro, pero siempre tuvo facilidad Cuando Bob Dylan escribe a El libro circuló por años de mano
vasos conductores de salvia y el olmo para decir una cosa y la siguiente, máquina lo hace con todos sus dedos. en mano, en fotocopias del original
se muere, así de rápido. Pero fueran de un tamaño o de otro, podía No escribe con los dedos índices y el mecanografiado. Lo sobaron, lo
seguramente Dylan no iba pensando hilarlas con una ligereza que no dejaba pulgar para dar espacios, un poco al leyeron con fruición, con la ilusión que
en la ausencia de olmos ni en el hongo de ser compulsiva, una suavidad tanteo, un poco a toda velocidad. viene del desencanto, como nuevo
que los mató. No es que esté pensando frenética que tenía algo de fatal. El Escribe con celeridad y parsimonia. oráculo sin naipes ni monedas, con
“mira que a los olmos no les hacen libro no se llamaba así, se llamaba de Como si lo hubiera aprendido en la Aretha Franklin no como personaje
bien el hongo” mientras corría a toda otra manera. Mientras lo escribía, le secundaria o en una escuela de sino como fantasma vivo, invocada

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GÜERO SOBRE GÜERO: 50 AÑOS DESPUÉS TODAVÍA BOB DYLAN

su Triumph Tiger 500 con botas y vez? Como Walt Whitman celebra el podía dejar todo lo demás. Seguirla
Bob Dylan chamarra de cuero, haciéndola de cuerpo eléctrico, el cable como cordón haciendo de Dylan y no, convertido en
jinete en un wéstern que no se sabe umbilical entre la voz y el estruendo. aparición, roto y despojado, siendo el
ha sido siempre posmoderno, emulando al último de ¿Es el sonido y la furia? Es más bien otro de sí mismo. Tendido en el suelo,
sus avatares, James Dean. Cuando le William Shakespeare citado por con el cuello roto, piensa, y sí, hace
claro. Bob Dylan preguntaban si se las daba de James William Faulkner. mucho calor.
Dean, no le daba la vuelta, decía que sí, Bob Dylan ha sido siempre claro. Después de eso, Bob Dylan se
dice las cosas como que siempre le había gustado, que Bob Dylan dice las cosas como son; las desafanó. Pasaron casi ocho años
quería ser como él: la chamarra, los explica cuando puede, y cuando no, no antes de que volviera a salir de gira.
son; las explica lentes, la actitud. Le confesó a Sam las explica y ya. Corre sobre la Años después saldría en una gira que
Shepard que la única razón por la que carretera y sabe que, de algún modo, no terminaría jamás. Empezó en 1988
cuando puede, se había ido a Nueva York era porque corre sobre un mapa donde todo tiene y todavía sigue. Seguirá mientras dé
James Dean había estado ahí. Sam un nombre y un lugar, como las vueltas la tierra, aunque decir eso es
y cuando no, no las Shepard tontea después con una botellas en los anaqueles de la botica o demasiada presunción. A los diez se
teoría sobre las diferencias de ritmo la mercancía en el mostrador: una había escapado para irse con un circo,
explica y ya. Corre entre hombres y mujeres. Le explica a etiqueta que dice lo que eres, que dice vivía en medio de la nada, al norte de
Dylan que las mujeres se mueven de cuánto cuestas. Una y otra vez han Minnesota. Se seguiría escapando, lo
sobre la carretera un lado a otro y que los hombres de tratado de encasillarme, como ficha sigue haciendo una y otra vez. En 1997
arriba a abajo; Dylan le pregunta si en el tablero de juego, seré el sombrero casi se nos va. Salió rápido del hospital
y sabe que, de algún como un caballito volador. Lo que da de copa sólo de paso en la cárcel del y no tardó en volver a las andadas. Los
pie a una serie de lugares comunes Monopoly, un caballo que traza eles en Traveling Wilburys recuerdan de
modo, corre sobre metafísicos sobre las partes no siendo el ajedrez, del blanco al negro, del algún modo esa vocación gringa por la
partes (uno es uno con la motocicleta, negro al blanco, línea fuerte, línea manifestación de lo canónico, la suma
un mapa donde todo uno es uno con la carretera, uno es uno débil, siempre cambiando, siempre en en escena de dos o más estrellas que
con el paisaje que se pierde, que se mutación, como en el I Ching. Un emulan la proyección histérica de lo
tiene un nombre atraviesa, que queda por delante) y que caballo que salta, que derrapa sobre el que ahora les da las películas en las
todo es lo mismo, que igual sientes una asfalto, mientras me pega el aire lleno que juntan superhéroes. Se nos fue
y un lugar, como las cosa que la otra, que igual te vas para de insectos que se estampan sobre mis Roy Orbison, se nos fue con Elvis.
un lado que para el otro. Sam Shepard lentes como pequeños pilotos Bruce Springsteen tuvo el descaro de
botellas en los se desmarca, dice “bueno, es una kamikaze. No es que sea un poeta decir que Bob Dylan había liberado la
teoría”, como si con esas palabras se como François Villon o como Allen mente de la misma forma que Elvis
anaqueles encogiera de hombros. Ginsberg (el Allen Ginsberg de había liberado el cuerpo. Bob Dylan
Bob Dylan sigue por ahí, de Dios y Kaddish, no el otro, el de Aullido) que se había liberado de sí mismo y, aun, se
de la botica o la el Diablo pasa a la verdad y a la me recitan un verso y el siguiente resignaba a ese otro que, como
mentira; pone como ejemplo la última dentro de mi cabeza, como si fantasma, había dejado atrás en una
mercancía en el escena de James Dean en Gigante estuvieran en un rincón, apercibidos carretera de Nueva York. Hizo lo que
cuando, borracho y humillado, de la línea que separa lo que está quiso y siguió haciéndolo. Lo acusaron
mostrador: una tropieza con la mesa, le dice que nunca dentro de cuadro de lo que está fuera. una y otra vez de vendido, y bueno él,
le gustó esa escena, que siempre la Allen Ginsberg está dentro de cuadro, frente a sí mismo ya había sido, podía
etiqueta que dice sintió falsa, pero que no lograba apenas, apoyado en un báculo, parece venderse todo lo que quisiera: armó
desentrañar lo que le molestaba. Sam un monumento de sí mismo por la una tocada para Karol Wojtyla, hizo
lo que eres, Shepard está de acuerdo, le dice que a ilusión de pedestal que provoca una anuncios de lencería, coches y
él nunca le gustó tampoco. Bob Dylan caja de madera dispuesta delante refresco de cola. En 2014 salió en un
que dice cuánto le pregunta si sabe qué era lo que le suyo; conversa con Bob Neuwirth, anuncio de Chrysler diciendo: “Así que
parecía falso. La película no deja de también con bastón, su mérito es ser deja que los alemanes elaboren tu
cuestas. tener ese hieratismo (por no decir un viejo amigo de Bob Dylan, quien cerveza, que los suizos hagan tu reloj,
impostura) surreal del technicolor con la greña al viento está en primer que los asiáticos ensamblen tu
hollywoodense, y por ahí se va Sam plano mostrando y tirando letreros teléfono. Nosotros te armamos tu
Shepard; le dice que si es el maquillaje con las palabras en las que se lee lo coche”. Detroit es un pueblo fantasma.
o las canas falsas de James Dean. Bob que va diciendo su voz en off mientras A los porsches los ensamblan en otra
como venus negra que canta, que Dylan se refiere a otra cosa que te canta el blues de la nostalgia parte. Una güera con lentes oscuros en
piensa, todo bajo la mesa, bajo la salta, pero que no sabes por qué. subterráneo (o del extrañamiento el asiento del copiloto. Una güera de
superficie, bajo las grandes aguas de George Perry lo revela en su biografía subterráneo): sótano, medicina, lentes oscuros al volante. Una güera
los grandes lagos que yacen como de James Dean. La película se pasó un pavimento, gobierno, gabardina… En que habla sobre lo güero mientras
ballenas inmensas en medio del año en postproducción. Algunas algún momento las palabras escritas recorre la carretera, que como el
continente. Un rastro que seguir hasta líneas de James Dean en esa escena no coinciden con las palabras dichas. tiempo, no puede recorrerse dos
el momento en que Macmillan lo estaban mal grabadas y no se oían Igual fue por un error al acomodarlas, veces. Una güera que está a cuadro,
publicó en 1971 y se pierde (en la red bien. Cuando estaban editando la era mejor dejarlo así que volverlo a con lentes oscuros, nada más para
circula un pdf con el original mecano- escena, James Dean ya estaba muerto, filmar. Igual fue hecho a propósito, poner en evidencia su “güeritud”. No
grafiado, pero son tantas cosas que murió en un accidente, no de para que quedara en evidencia el gafe: una güera güera, sino una güera
pueden hacerse hoy, tantas cosas que motocicleta (tenía una Triumph como el corto circuito en la percepción de pintada como Edie Sedgwick quien
pueden fingirse y darse por buenas). la de Dylan, Dylan la tenía por James una palabra que sustituye a la dice que vino a Nueva York a ver lo que
Yo me doy por bueno, se dice Dylan Dean), sino de coche. Iba a toda siguiente y, que, por lo mismo, acaba pudiera ver —eso viene en un libro
mientras corre montado en su corcel velocidad en su porsche por la por ser la siguiente, significar lo que para niños, ¿no?— y encontrar la parte
de acero. A veces no me reconozco, carretera, siempre hay otro que se significa la siguiente. Igual nadie se viviente.W
pero bueno, me doy por bueno. En su pasa al carril de alta, indolente, sin daba cuenta.
reseña para el New York Times Review saber que está siendo azuzado por las El ruido de la máquina lo acompaña
of Books, Robert Christgau aceptaba parcas. Fue Nick Adams, amigo del como ángel de la guarda. Es el
que la literatura puede haber engen- actor (que tuvo un papel secundario en estruendo de lo nuevo, el paisaje que
drado la mística dylanesca, pero fue la Rebelde sin causa) quien repitió esas se continua, el pequeño gafe que te
música la que la alimentó. Insiste que líneas. Por eso suenan falsas, por eso sale de la cabeza para que te preguntes
recordemos esos versos (tú sabes, no te acabas de creer la escena, no es si es un ave, si es un avión, si es
cosas como “How many years can a James Dean el que habla, es sólo su supermán y en ese titubeo perderlo
mountain exist / Before it's washed to fantasma, manipulado por la fe gringa todo, no perderlo todo. Tendría que
the sea?” o “… how many years can que mueve montañas donde se dejen. haber sido en un porsche, como James
some people exist / Before they're Bob Dylan acelera y piensa que si se Dean, la chamarra de cuero y los
allowed to be free?”) que se nos pegan matara en ese momento sería con la lentes oscuros, y no. Se estampa,
de tan manidos porque los oímos una misma moto que tiene Dylan, con derrapa, traza en la inercia el vuelo de
y otra vez, muchas veces sin la misma chamarra, con las mismas Ícaro al sol. Es el sol, es el sol, repetía
escucharlos verdaderamente, botas y los mismos lentes oscuros. No Rimbaud, todo parece moverse en
“absorbiendo de todos modos el ritmo son, pero como si lo fueran, una calca cámara lenta porque así nos han
de la distorsión prosaica”. del modelo original, de modelo rol, del enseñado a percibir esos breves
Christgau lamenta que las “joyas” rol a seguir, del rocanrol, después de la momentos capitales del melodrama de
que descubrió en Tarántula nunca revisitación de la carretera 51, nuestra existencia. Y así acaba todo
llegarían a convertirse en un álbum. peregrino motorizado que rueda como para volver a empezar. Se trata de una Ricardo Pohlenz es poeta, escritor y
Abre su reseña diciendo que el libro no canto de piedra, después de la güera segunda oportunidad y no. Bob Dylan crítico y ha sido colaborador de
era un acontecimiento literario sobre güera que queda (igual podía ya había sido Bob Dylan, le quedaba diversas publicaciones dentro y fuera
porque Dylan no era una figura haber sido güero sobre güero, o mejor, morirse o seguir, como continuación del país. Es autor de La vocación de
literaria. Esto no ha sucedido todavía huero sobre huero). ¿Qué no puede de sí mismo en la larga coda que submarino (Aldus, 2015), el libro de
mientras Dylan se abre paso a través uno aburrirse de estar tocando la todavía está por terminar. Si había relatos Lounge (Magenta, 2010) y el
del trazo negro que tizna la floresta en guitarrita y la armónica una y otra podido dejar su nombre atrás, bien poemario Cetacea (Acapulco, 2015).

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