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Relación entre la caries dental y la obesidad en niños de 5 a 9 años de edad

Natalie Mena Arrieta, Universidad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología,


agosto 2014

Resumen: A nivel mundial, la obesidad en el sector infantil es uno de los


problemas de salud pública que se presenta con más frecuencia; ésta es descrita
como una acumulación anormal excesiva de grasa que puede ser perjudicial para
la salud. Por tanto, se procederá a realizar una entrevista a 50 niños y niñas entre
los 5 y 9 años de edad que asisten a la Escuela Pitalito Sur de Aguas Zarcas, San
Carlos. La obesidad en niños es un grave problema, en el cual no importa si es de
la alta sociedad o si es de escasos recursos; ha ido progresando en los últimos
años, especialmente en el sector urbano, aunque se puede observar que es
menor en el sector rural debido a que dichos niños tienen menor acceso a las
comida chatarra y a los dulces, es importante insistir en la promoción y prevención
de la salud oral, en especial en el sector infantil.

Palabras clave: Obesidad, hábitos de higiene, caries dental, prevención,


promoción.

Abstract: Globally, obesity in childhood sector is one of the public health problems
more often; it is described as an abnormal accumulation of fat that can be harmful
to health, so we will proceed to conduct an interview 50 children between 5 and 9
years of age attending the Escuela Pitalito to Aguas Zarcas, San Carlos. Obesity in
children is a serious problem that no matter one’s social level has progressed in
recent years especially in urban areas, but you can see that is lower in the rural
sector because these children have less access to junk food and sweets, it is
important to emphasize the promotion and prevention of oral health, especially in
children's sector.

Key words: Obesity, oral habits, caries, prevention, promotion.


Introducción

En los últimos años, la prevalencia de la obesidad en niños ha aumentado


bruscamente en los países desarrollados. Según la OMS, la obesidad es una
enfermedad crónica que se caracteriza por el exceso de grasa en el organismo y
se presenta cuando el índice de masa corporal en un adulto es mayor de 30
kg/m2, en cambio en un niño se considera que tiene sobre peso cuando su peso
sobrepasa el 20% de su peso ideal.

En el presente trabajo se efectuará una revisión bibliográfica acerca de la relación


entre la obesidad infantil y la caries dental en niños de 5 a 9 años de edad, a
causa de diversos motivos; estos son los más susceptibles a padecer dichas
enfermedades por el nivel en que se encuentran, debido a que sus padres no
logran controlarlos mientras asisten a la escuela. Se definirán los términos de
obesidad infantil y caries dental y su debida importancia a su debida edad así
como se explicará la importancia que tiene el régimen alimentario en el paciente y
finalmente, se mencionará la promoción y la prevención de este tipo de
enfermedades en niños.

La promoción y prevención de la salud en la infancia es de mucha importancia,


pues como dice el dicho: lo que bien se aprende, nunca se olvida. Por lo tanto, en
este periodo de la vida se puede iniciar, aprender y consolidar aquellos valores,
conocimientos y hábitos que garanticen buen estado de salud bucodental y
general de acuerdo con una dieta saludable.
Revisión bibliográfica

Tanto la caries dental como la obesidad infantil tienen factores de riesgo en


común. Por ejemplo, malos hábitos alimenticios, nivel socioeconómico y cultural,
entre otros. El punto de encuentro es una alimentación rica en azúcares sobre
todo de bebidas y alimentos chatarra, que ayudan a las bacterias en la tarea de
corroer el esmalte y, al mismo tiempo, favorecen la obesidad. Además, la mala
higiene dental, la ausencia de flúor y la propia genética, provocan, como ha sido
demostrado, la aparición de caries en niños y, si a esta situación se agregan
factores como el sedentarismo por falta de ejercicio físico o el pasar muchas horas
frente al televisor o la computadora, el resultado final es la aparición de caries
dental y obesidad (Martínez Menchaca & Rivera Silva, 2012).

Los expertos calculan que el 80% de los niños y adolescentes obesos continuarán
siéndolo cuando lleguen a adultos si no se adoptan las medidas oportunas. En los
últimos 40 años, la obesidad infantil se ha duplicado en Estados Unidos, mientras
que, en España, más de la mitad de los adultos son obesos o tienen sobrepeso,
trastornos que afectan al 28% de los niños españoles, quienes podrían ver
mermada su esperanza de vida por ello (García Feijo, s.f.).

El régimen alimentario tiene un importante papel en la prevención de las


enfermedades bucodentales, entre ellas la caries, los problemas de desarrollo, las
enfermedades de la mucosa oral. La dieta con alto contenido de azúcar cambia la
composición química y microbiológica de la placa dental, lo cual podría explicar los
diferentes patrones de caries observados en dentición primaria. Se ha demostrado
que una dieta rica en carbohidratos, en poblaciones con hábitos de higiene
inadecuados y falta de flúor en las pastas dentales, es un factor crítico en la
aparición de caries. Por lo que la caries dental y la obesidad son enfermedades
que se dan frecuentemente en la población infantil, lo cual está influenciado
principalmente por la ingestión de una dieta con alto contenido de azúcar
(Martínez, 2010).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha definido el índice de masa corporal
(IMC) como el estándar para la evaluación del riesgo asociado con el exceso de
peso tanto en niños como adultos. El IMC es una forma sencilla y confiable que
brinda la relación entre el peso corporal y la estatura (OMS, 2014). El sobrepeso,
además, puede tener consecuencias negativas sobre el desarrollo emocional de
niños y adolescentes. La obesidad, a pesar de su prevalencia, no está bien vista
socialmente y puede generar en las personas que la padecen, y especialmente en
aquellos cuya personalidad no está formada, sentimientos de inferioridad y baja
autoestima. Pueden sentirse rechazados y aislarse, además de desarrollar
actitudes antisociales y depresión infantil. El aislamiento social lleva a
mayor sedentarismo y a una ingesta superior de calorías, lo que cronifica el
problema (García Feijo, s.f.).

Tanto la caries dental como la obesidad infantil tienen factores de riesgo en


común. Por ejemplo, malos hábitos alimenticios, nivel socioeconómico y cultural,
entre otros. El punto de encuentro es una alimentación rica en azúcares, que
ayudan a las bacterias a desgastar el esmalte y, al mismo tiempo, favorecen la
obesidad. Además, la mala higiene dental, la ausencia de flúor y la propia
genética, provocan, la aparición de caries en niños, si se agregan otros factores
como lo es el sedentarismo por falta de ejercicio físico da como resultado final la
aparición de caries dental y obesidad. El problema principal de la caries dental y la
obesidad infantil radica en la falta de prevención y detección temprana.

Podría parecer imposible que un bebé desarrolle tal problema, ya que siempre lo
asociamos a niños mayores o adultos, con lo que las visitas al dentista infantil o al
pediatra se demoran hasta que, a veces, resulta demasiado tarde. Los médicos
generales en algunos casos no reconocen los primeros síntomas de esta
asociación, por lo que se debe crear conciencia en médicos generales y personas
en general para alertar sobre la obesidad en niños. Los bebés y niños pequeños
tienen una gran probabilidad de desarrollar caries también en sus dientes
definitivos, y si se agrega el problema de sobrepeso, que sin la atención pertinente
se convertirá en obesidad, el resultado es un problema bastante grave (Martínez,
Rivera, 2012).
Una evaluación médica completa, se recomienda a los signos y síntomas
indicativos de identidad de la enfermedad respiratoria significativa, así como
cualquier historia de la vía aérea difícil durante la sedación previa / anestesia.

La caries es definida como una enfermedad infecciosa, progresiva y multifactorial,


caracterizada por la degradación del tejido duro (esmalte) del diente en la cualse
interrelacionan varios factores que favorecen su comienzo y progresión: el diente
en su ambiente oral (la existencia de dientes susceptibles o predispuestos), dentro
de la cavidad bucal, el tipo de alimentos (sobre todo una dieta rica en azúcares),
bacterias productoras de ácidos (la principal es Streptococcusmutans) y la
persistencia de los tres factores mencionados durante un tiempo considerable
(Martínez, Rivera, 2012).

Algunas condiciones pueden comprometer el sistema respiratorio, como la apnea


del sueño, síndrome de hipo ventilación, o enfermedad pulmonar restrictiva, tienen
que ser considerados antes de que el paciente dental pediátrica debido al
aumento del riesgo de complicaciones intraoperatorias. Aunque los trastornos
cardiovasculares asociadas a la obesidad son improbables en los sujetos jóvenes,
los adolescentes obesos pueden tener condiciones sistémicas como la diabetes o
la hipertensión, que pueden aumentar el riesgo del tratamiento. Más importante es
el aumento del potencial de trastornos respiratorios de promover cambios hipoxia
asociada en el ritmo o la función cardiovascular (Baker, 2006).

Obesidad infantil es la acumulación excesiva de grasa corporal, del tejido adiposo,


sobre el cual se observa un aumento mayor a 20% del peso corporal ideal, según
edad, talla y género del individuo. Para calcular el peso ideal de un niño entre dos
y seis años de edad, hay que multiplicar la edad en años por dos más ocho, este
método no es tan exacto, sin embargo es sumamente útil para hacer un cálculo
rápido. Hay un método que recurre a indicadores más precisos, como el índice de
masa corporal (IMC), el cual es el equivale a peso/talla (kg/m2).La obesidad es
una enfermedad muy compleja, de larga evolución y relacionada con diversos
factores como hábitos alimenticios inadecuados, falta de ejercicio, problemas de
conducta, nivel cultural, estrato socioeconómico, trastornos genéticos y
metabólicos, así como la ingesta de fármacos que propician la acumulación de
grasa y en algunos casos a enfermedades endocrinas, en la mayoría de los casos
este problema suele iniciarse en la infancia y la adolescencia (Martínez, Rivera,
2012).

El problema principal de la caries dental y la obesidad infantil radica en la falta de


prevención y detección temprana. Podría parecer imposible que un bebé
desarrolle tal problema, ya que siempre lo asociamos a niños mayores o adultos,
con lo que las visitas al dentista infantil o al pediatra se demoran hasta que, a
veces, resulta demasiado tarde (Martínez Menchaca & Rivera Silva, 2012).

Los médicos generales a menudo no reconocen los primeros síntomas de esta


asociación, en parte porque tampoco es su labor (ésta correspondería a médicos
pediatras y a dentistas infantiles). Por lo que se debe crear conciencia en médicos
generales y personas en general para alertar sobre esta situación. Los bebés y
niños pequeños tienen una gran probabilidad de desarrollar caries también en sus
dientes definitivos, y si se agrega el problema de sobrepeso, que sin la atención
pertinente se convertirá en obesidad, el resultado es un problema bastante grave
(Martínez Menchaca & Rivera Silva, 2012).

Los azúcares son los principales elementos de la dieta diaria, estos influyen en la
prevalencia y el avance de las lesiones cariosas. La sacarosa se considera el
azúcar mas cariogénico, no solo porque su metabolismo produce ácidos, sino
porque el Streptococcusmutans lo utiliza para producir glucan (polisacárido
extracelular que le permite a la bacteria adherirse firmemente al diente) inhibiendo
las propiedades de producción de la placa. Una alta frecuencia en el consumo de
azúcares favorece la formación de ácidos por las bacterias cariogénicas, los
cuales desmineralizan la estructura dentaria dependiendo del descenso absoluto
del pH y del tiempo que este pH se mantenga por debajo del nivel crítico
(Vaisman, Martínez, 2004).

La prevención de la obesidad infantil debe comenzar en los primeros años de vida


del niño, ya que unos correctos hábitos alimenticios y un estilo de vida saludable,
inculcados desde la infancia, son más fáciles de mantener durante la adolescencia
y la adultez, y constituyen las mejores armas para evitar el sobrepeso.
La escuela juega un importante papel en la prevención de la obesidad ofreciendo
a los niños información sobre los aspectos nutricionales de los alimentos y cuáles
son los hábitos alimentarios que deben adoptar para mantener una buena salud,
como el comer verduras ( García Feijo, s.f.).

La caries es una enfermedad infecciosa transmisible; la comprensión de la


adquisición de los microbios cariogénicos es necesario mejorar las estrategias
preventivas. La transmisión vertical es el paso de microbios del cuidador con el
niño, y el principal reservorio de la cual los niños adquieren las bacterias
cariogénicas es la saliva de la madre. El éxito de la transmisión y la colonización
resultante de la EM materna puede estar relacionado con varios factores,
incluyendo la magnitud del inóculo, la frecuencia de pequeñas inoculaciones de
dosis y una dosis mínima infecciosa. Los bebés cuyas madres tienen niveles altos
de MS, a consecuencia de caries no tratadas, están en mayor riesgo de adquirir el
organismo antes que los niños cuyas madres tienen niveles bajos. Las madres
que tienen niveles altos de MS, a consecuencia de caries no tratadas, están en
mayor riesgo de adquirir lo orgánico antes que los niños cuyas madres tienen
niveles bajos. Lo ideal sería que estas intervenciones se iniciaron en el período
prenatal. La transmisión horizontal de la EM también se produce. La eliminación
de actividades de intercambio de saliva puede ayudar a disminuir un infante de
adquisición o del niño de microbios cariogénicos (American Academy of Pediatric
Dentistry, EBSCO HOST, 2010).

La prevención y combate es primordial para que las personas que tengan a su


cargo el cuidado de un niño, sigan una dieta balanceada y tengan una buena
higiene para disminuir considerablemente el riesgo a tener caries dental y de paso
se evita la obesidad infantil. Una vez diagnosticada la caries dental y la obesidad
infantil se debe seguir un tratamiento para detener el desarrollo y evitar cualquier
tipo de complicaciones; para ello es recomendable realizar lo siguiente: usar pasta
dental con una pequeña cantidad de flúor, pues este reduce y previene caries
dental (usar este de manera moderada debido a que el exceso puede causar
fluorosis dental), realizar un cambio en la dieta (consumir frutas, verduras y agua),
incorporar en la rutina actividad física (Martínez, Rivera, 2012).

En la actualidad, tanto la caries dental como la obesidad infantil son auténticos


problemas de salud pública, por lo que la asociación de ambas enfermedades se
convierte en un peligro real para la población infantil. Es indispensable tomar
medidas de prevención dirigidas, principalmente, a los niños en edad preescolar,
puesto que esta asociación se detecta principalmente durante la edad escolar y
adolescente. Crear y difundir una cultura de hábitos higiénicos y dietéticos sanos
en la población permitirá enfrentar el serio problema que padece en lo referente a
este cuadro clínico de caries dental y obesidad infantil (Martínez Menchaca &
Rivera Silva, 2012).
Métodos

El presente trabajo se realizará mediante una comparación de encuestas (anexo


1) realizadas a 50 niños, dicha encuesta fue entablada por 6 preguntas realizadas
tanto mujeres como hombres, en un rango de edad entre los 5 y 9 años de edad,
los cuales serán valorados en su lugar de estudios en la Escuela Pitalito Sur,
Aguas Zarcas, San Carlos, durante el mes de Julio de 2014, mediante el
consentimiento previo de sus padres o encargados, a su vez se realizara un
estudio cuantitativo entre la relación que hay en un paciente con obesidad infantil y
la caries dental, para determinar si dicha enfermedad va a afectar en la salud oral.
Al finalizar dicha encuesta, los resultados fueron trasladados a una tabla de
Microsoft Excel, en donde se procedió a realizar un análisis de la situación y
seguidamente se pasa a gráficos para representar los resultados.
Resultados

Entre las interrogantes, se realizado un cuestionario de alimentos en la que se le


preguntó a los niños lo que comen en un día, esto es importante debido a que los
alimentos tienen una relación directa en la aparición de caries y el sobrepeso. En
estos niños es importante establecer una combinación de comidas para reducir el
riesgo de caries y erosión, ingerir los carbohidratos fermentables y otros azúcares
durante las comidas y evitarlos entre horas, añadir vegetales y frutas para
aumentar el flujo salivar, evitar el exceso de sal y de otros condimentos fuertes en
la preparación de las comidas y mantener la textura adecuada a la capacidad de
masticación del niño en cada etapa. Es esencial reducir la frecuencia de consumo
de azúcar y productos azucarados, a favor de la utilización de edulcorantes, y el
de alimentos pegajosos o viscosos, ya que se adhieren más a los dientes.

La encuesta fue realizada en una pequeña escuela en la zona de Aguas Zarcas,


San Carlos y se entrevistaron a 29 niños y 21 niños, en un rango de edad que
varía de los 5 a los 9 años de edad, los chicos que fueron entrevistados se
encuentran en su mayoría en un buen estado de salud y esto se puede relacionar
con que en las rurales no hay tanta venta de comida chatarra, por ende, a lo único
que éstos niños tienen acceso es a los confites y azúcares que les dan en los
hogares y otro factor que influye es que son personas de escasos recursos, por
tanto se puede también descartar que tengan mucho acceso a comer muchos
dulces.
1. Clasificación del IMC

El gráfico #1 hace referencia al índice de masa corporal (IMC) en los niños de 5 a


9 años de edad, éste se obtiene mediante las medadas de peso en Kg., estatura
en c m2, en dicha encuesta se ha obtenido como resultado que un 52% de los
niños encuestados se encuentran dentro del rango “normal”, un 23% dio con bajo
peso y un 25% presenta sobrepeso, la Organización Mundial de la Salud clasificó
el IMC en 6 tipos distintos (bajo peso, normal, sobre peso u obesidad tipo l, ll o lll)
según sea el peso del niño.

1. Clasificación de IMC

23% 17%

Bajo peso

60% Normal

Sobrepeso

2. ¿Con qué frecuencia consume dulces al día?

El gráfico #2 se incorporó a la encuesta con la intención de analizar los hábitos


que tienen los niños respecto a los dulces que consumen diariamente, ya que los
caramelos son un factor trascendental para el aumento de las caries en estas
personas. Como resultado se obtuvo que un 5% de los encuestados nunca
consumen dulces durante el día, un 35% dijo que consumen 1 ves al día algún tipo
de confites, el 50% refirió que consumen 2 veces al día y el 10% de los niños
describieron que consumen mínimo 3 veces al día algún tipo de dulces.

2. Frecuencia en consumo de dulces al día

4%

22%
Nunca
30%
1 vez
2 veces
3 veces o más

44%

3. ¿Por qué razón o motivo visitó al odontólogo?

Es importante saber la razón y por qué los niños han asistido al odontólogo, y
como han sido sus experiencias ya que de ahí se van a derivar el comportamiento
en las siguientes visitas a las clínicas odontológicas. Es muy importante
implementar la prevención dental desde que se es niño para crear la costumbre y
así poder evitar la pérdida de piezas dentales. Como resultado, obtuve que un
33% de los niños encuestados refieren que han visitado al odontólogo por
prevención dental, mientras que el 52% ha tenido que acudir a una clínica dental
por molestias dentales, lo cual es un gran porcentaje y el 15% restante dijo que
han acudido a la clínica dental por diversos motivos, por ejemplo, limpiezas
dentales.
3. ¿Por qué razón o motivo visitó al odontólogo?

prevención Dolor Otra razón

15%
33%

52%

4. ¿Ha tenido caries o alguna restauración?

En el gráfico #3 se ha cuestionado si los encuestados han padecido caries alguna


vez y se ha obtenido como resultado que hay un gran porcentaje de niños que han
presentado caries dentales y por tal motivo han tenido y q asistir al odontólogo
para que les hagan restauraciones como tratamiento dental respectivo. En dicha
encuesta se obtuvo que el 88% de los niños hayan asistido a una clínica dental
por diversos motivos y lo cual se puede asociar a que dio un ran porcentaje de
niños dijo que si consumían más de un dulce al día. Y el 12% restante dijo q nunca
ha tenido caries dentales, por tanto no han tenido que realizarse ningún tipo de
restauraciones dentales.
4. Ha tenido caries o alguna restauración
Sí No

12%

88%
Discusión

Mediante los resultados de esta revisión bibliográfica se pretende encontrar una


relación entre la obesidad infantil y la caries dental; sin embargo, los resultados
son muy limitados, debido a que en los niños es un poco complicado determinar
esto porque difiere mucho no solo la edad, el peso, pues están en crecimiento
constante y pasan en movimiento constante por lo que gastan más energías de lo
normal, sino que también interfieren los factores sociales, económicos y culturales
que hay en cada núcleo familiar.

En la actualidad se pueden encontrar cientos de investigaciones relacionados con


las caries dental relacionada a la obesidad en el sector infantil. Por lo tanto, se ha
logrado obtener en dicha literatura que no es indispensable tener caries para ser
obeso, más si se puede encontrar que hay un gran porcentaje de niños con
obesidad que padecen de caries dentales que en niños con un peso normal o con
bajo peso, esto es debido a que dichas enfermedades van de la mano a la mala
alimentación o al consumo excesivo de alimentos azucarados y acompañados de
la mala higiene oral.
Conclusión

Es muy importante conocer que la dieta tiene un papel fundamental en la aparición


y desarrollo de la caries dental por tanto esto va influir en la obesidad infantil. La
total o parcial sustitución de la sacarosa por edulcorantes no criogénicos
existentes en el mercado es la mejor opción para la salud dental, teniendo en
cuenta que la frecuencia de ingestión de azúcar tiene más influencia en el
desarrollo de la caries que el total consumido.
Dentro del rango de niños encuestados se ha podido concluir que un gran
porcentaje consumen en gran cantidad todo tipo de dulces y esto se puede ver
reflejado en que un 23% presentan un algún grado de sobrepeso, así como que un
80% ha asistido al odontólogo y un 52% ha sido por molestias dentales. Esto es
debido a que solo un 5% ha dicho que no consumen dulces durante el día, con
estos resultados, se puede concluir en que es muy importante inculcar la
promoción y prevención de la salud oral en los niños para mejorar su higiene oral
introduciendo programas de promoción de la salud y así lograr crear una cultura
habitacional desde que son niños.
Los adultos deben de tomar conciencia con los niños y su higiene oral desde
temprana edad, ya que las estructuras dentales destruidas no se regeneran; sin
embargo, el tratamiento puede detener el progreso de la caries dental y evitar que
un niño pierda sus dientes permanentes a temprana edad. El objetivo es preservar
el diente y evitar complicaciones a futuro. En las encuestas realizadas se pudo
observar que fue la minoría respondió que sus padres o encargados los llevaron al
odontólogo sin ellos tener ninguna molestia, es decir, por prevención; hay que
promover más en los padres la prevención de la salud oral en sus niños, pues es
muy importante y necesaria para la salud en general.
Anexos

Anexo 1

Este cuestionario se realiza con fines investigativos en donde el objetivo es


analizar si existe relación entre la nutrición y la salud oral en niños de la Escuela
Pitalito Sur, Aguas Zarcas, San Carlos. El tiempo requerido para contestarla es
menos de 10 min y la realización del mismo no conlleva ningún riesgo ni beneficio
del mismo. Este trabajo se realizará de forma confidencial, su participación es
voluntaria.

Nombre:

Edad: Peso: Estatura:

IMC:

Diario de dieta semanal:

Alimentación
Domingo Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado
diaria
Granos
Vegetales
Frutas
Lácteos
Carnes
Ejercicios

¿Con qué frecuencia consumen dulces al día?

Nunca
1 veces
2 veces
3 veces o más
¿Ha asistido al odontólogo? ¿Cómo fue su experiencia?

¿Por qué razón o motivo visitó al odontólogo?

Prevención
Dolor
Otra razón:

¿Ha tenido caries o alguna restauración?


No
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