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PENSAR LA NACION: INTELECTUALES COLOMBIANOS, POBLACION Y TERRITORIO, 1920-1940 Alvaro Villegas Universidad Nacional de Colombia-Sede Medellin La historia intelectual es un campo de investigacién complejo, atrave- sado por las particularidades de las diversas historiografias naciona- les y con fronteras porosas con la historia de las ideas, la historia de las. mentalidades y la historia de las representaciones. No obstante, acadé- micos sumamente diversos coinciden en hacer de los procesos de sig- nificacién, el objeto de estudio central de este campo.’ Si bien todas las personas construyen, comunican y se apropian del sentido social, algunas de ellas se especializan en cumplir estas tres tareas, legando a formar un conjunto heterogéneo internamente pero mds o menos diferenciado de otros sectores de la sociedad. Son los integrantes de este conjunto a quienes se denomina aqui intelectuales. Su funcién social los acerca constantemente al mantenimiento, a la re- forma y al rechazo del orden social y, por ende, a la politica y al Esta- do. Al describir y prescribir el mundo, los intelectuales se convierten, o ' CHARTIER, 1996, JAY, 2003 y WHITE, 1992. 299 300 Teas) TENDENCIASDECA HISTORIA INTELECTUAL EN AMERICA LATINA buscan convertirse, en los legitimos legitimadores y productores de las posiciones de los grupos a los cuales pertenecen, y en esta medida estan enfrascados en la tarea de construir formas de visién y divisién legitimas, en cuanto legitimadas, del mundo, y de los grupos sociales y sus territorios. * En América Latina, el dominio de la letra y de los letrados fue central en los proyectos de formacién de los Estados nacionales. ? Sin embargo, la ausencia de una verdadera esfera piiblica enclaustré a las elites ilustradas del siglo XIX dentro de las murallas de su ciudad le- trada, limitandolos a una discusién entre pares y clausurando la posi- bilidad de llegar a un puiblico mas amplio, requisito necesario para denominarlos intelectuales. * Los letrados colombianos no fueron ajenos a la tarea de fundar, consolidar y expandir la nacién. Su preocupacién central fue el ingre- so de la republica al concierto de Jas naciones civilizadas. No obstante, un siglo después de la emancipacién, las elites temian que este objetivo no se hubiera logrado. En efecto, Colombia habia entrado al siglo XX bajo la mas cruenta de sus guerras civiles, la cual tendria como epilogo la desmembracion del territorio nacional Durante la celebracion del Centenario de la Independencia en 1910, los sectores hegeménicos parecian haber aprendido bien la lec- cién, La Guerra de los Mil Dias (1899-1902) y la pérdida de Panama (1903) habian servido para consolidar una posicién civilista entre los miembros de los partidos Conservador y Liberal, especialmente en quienes hacian parte de la denominada Generacién del Centenario, quienes, en su mayoria, se intentaron separar tajantemente de lo que consideraban las posiciones intransigentes y obsoletas de la dirigencia letrada decimonsnica a quienes atribuian buena parte del fracaso del proyecto civilizador. Forjar y dirigir la sociedad hacia el progreso, fue el objetivo que un conjunto de intelectuales emergentes en las primeras décadas del siglo XX y vinculados orgdnicamente a los partidos tradicionales * se impuso asi mismo. Este propésito, definido ante todo como patridtico y > BOURDIEU, 2001 *RAMA, 1984. * ALTAMIRANO, 2006. * SANCHEZ, 34 (Bogoté 1998): 99-119 y URREGO, 2002. Auwano VILLEGAS 301 civilizador, permitia que las diferencias partidistas se velaran sin des- aparecer. Lo importante era examinar los dos factores principales -raza y territorio- que formaban la entidad denominada Colombia, para con- cluir, a partir de este examen las medidas que le permitieran conser- varse y perfeccionarse. El escrutinio realizado por estos intelectuales se concentré alre- dedor de dos ejes: la fragmentacién regional y racial de la nacién, y Ia necesidad del mejoramiento fisioldgico y mental de la poblacién. El consenso, sin embargo, se acababa alli; las descripciones, pres- ctipciones y proscripciones, enunciadas fueron dispares, como corres- pondia a un conjunto heteréclito de personas, en un momento en el cual, la expansion de la alfabetizacién y de los medios de comunica- cién, hacian posible la conformacién de una incipiente esfera pitblica en la cual los expertos modernos, generalmente médicos e ingenieros, ocupan poco a poco los espacios de los letrados de viejo abolengo. Colombi: na nacién fragmentada La historiograffa sobre Colombia ha considerado la fragmentacion re- gional como uno de los principales obstaculos para la conformacién y consolidacién del Estado nacional. Desde esta perspectiva, el fracaso de la nacién se fundamentaba en la imposibilidad de superar las difi- cultades que los accidentes geograficos y la debilidad estatal impo- nian a la integracién territorial y a la creacién de fuertes vinculos de identificacién entre los ciudadanos. Investigaciones recientes” han planteado, por el contrario, que en el siglo XIX la formacién de la nacién estuvo enmarcada en Ia in- vencién de una geografia que regionalizé la nacién y vinculé cada re- gién a ciertas particularidades raciales. Tanto la formacién de la na- cién y la construccion de las regiones fueron procesos simulténeos e ininteligibles el uno sin el otro. En las primeras décadas del siglo XX la regionalizacién y la racializacién legaron a su punto maximo con la continua mencidén de razas departamentales. * La invencién de dichas razas, oper como un * GOMEZ, 1928/1970: 24. 7 APPELBAUM, 2003, ARIAS, 2005 y VILLEGAS VELEZ, 26(Bogoté, 2005): 209-252. * Los departamentos en Colombia son las unidades de mayor escala dentro de la divi- sién politica administrativa de la replica

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