Y a su lado al discípulo amado Dice a su madre Mujer, ahí tienes a tu hijo Después le dice al el discípulo Ahí! Ahí tienes a tu Madre
Si se acaba el vino en tu vida hoy
Ahí tienes a tu Madre Si solo hay tinajas pero no hay amor Ahí tienes a tu Madre Si estás buscando acercarte a Dios Ahí tienes a tu Madre Ahí tienes a tu Madre
Ahí tienes a tu Madre, Ahí tienes a tu Madre
Ahí tienes a tu Madre, Ahí tienes a tu Madre
Si no sabes cómo hacer una oración
Ahí tienes a tu Madre Si la cruz te pesa para caminar Ahí tienes a tu Madre Si no hay pentecostés en tu corazón Ahí tienes a tu Madre Ahí tienes a tu Madre
Si está viviendo fuerte, la hora del dolor
Ahí tienes a tu Madre Si estas padeciendo una enfermedad Ahí tienes a tu Madre Si te encuentras sumido en desesperación Ahí tienes a tu Madre, Ahí tienes a tu Madre SALIENDO DEL PRETORIO
Saliendo del pretorio, marcha una procesión,
con rumbo hacia el calvario sufriendo va un varón
la cruz en su espalda, que a veces se le cae
no puede caminar.
No puede dar un paso y cae por el camino
recibe un latigazo sobre su cuerpo herido
no puede avanzar se escucha solo un grito:
"levántate maldito"
NO, No puede ser maldito aquel que en su dolor
Exclama con un grito, perdónale señor
Perdónales sus faltas no mires más su error
Señor ten compasión.
Sed tengo de un hermano, sed tengo de un amor
sed tengo amigo que sienta compasión
que acepte esta sangre, que derramando estoy
para su salvación.
Fue grande el suplicio, que padecí en la cruz
Hoy ábreme tu alma, quiero vivir en ti
Quiero llenar tu canto de un profundo amor y darte bendición.
NO, No puede ser maldito pues en su corazón
Existe solo un grito, perdónale señor
Perdónales sus faltas no mires más su error
Señor ten compasión… Señor ten compasión.
DIOS MÍO, DIOS MÍO
El señor Jesús está pagando,
Por todos mis pecados
El león se ha convertido en un cordero
Perfecto y sin pecado
En sus espaldas trae la culpa
De la humanidad.
El creador del mundo en un madero,
Clavado de sus manos
Con espinas en su frente
Y con un hierro clavado en su costado
Y soportando el dolor eleva una oración.
Dios mío, Dios mío,
¿Por qué me has abandonado?
Dios mío, Dios mío,
¿Por qué me has abandonado?
Abatido Él y afligido por sus trasquiladores
Él por nuestras rebeliones fue herido, llevó nuestros dolores,
Nos ha sanado por su llaga, curó nuestro dolor.
Él que no peco, se hizo pecado, su cuerpo fue clavado,
En la cruz con los ladrones fue contado, ved al crucificado,
Desde el madero abrió su boca, clamando una oración.
ESTA ES LA LUZ DE CRISTO
LA LA7 RE LA
Esta es la luz de Cristo; yo la haré brillar.
LA Fa#m Sim MI7
Esta es la luz de Cristo; yo la haré brillar.
LA LA7 RE LA
Esta es la luz de Cristo; yo la haré brillar.
RE LA MI7 LA
/Brillará, brillará, sin cesar./ (bis)
Soy cristiano y esta luz, yo la haré brillar.
Soy cristiano y esta luz, yo la haré brillar. Soy cristiano y esta luz, yo la haré brillar.
Llevo mi luz por la ciudad, yo la haré brillar.
Llevo mi luz por la ciudad, yo la haré brillar. Llevo mi luz por la ciudad, yo la haré brillar.
Nunca la ocultaré, yo la haré brillar.
Nunca la ocultaré, yo la haré brillar. Nunca la ocultaré, yo la haré brillar.
Siempre la defenderé, yo la haré brillar.
Siempre la defenderé, yo la haré brillar. Siempre la defenderé, yo la haré brillar.
Toma hermano esta luz y hazla tú brillar.
Toma hermano esta luz y hazla tú brillar. Toma hermano esta luz y hazla tú brillar. TÚ ESTÁS AQUÍ