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ESCUCHANDO A DIOS
Génesis 26:2-3 “Y se le apareció Jehová, y le dijo: No desciendas a Egipto;
habita en la tierra que yo te diré. Habita cómo forastero en esta tierra, y
estaré contigo, y te bendeciré: porque a ti y a tu descendencia daré todas
estas tierras
Cuando enfrentamos tiempos de adversidad, casi que por instinto de
salvación reaccionamos diseñando rápidamente un plan a seguir, procurando
superar la crisis que atravesamos.
De ésta manera reaccionó Isaac, pues Génesis. 26:1 nos dice que: “hubo
hambre en la tierra” y él planeó ir a Egipto, como hacían las personas de la
época ante ésta situación.
Asia q de igual manera Isaac estaba por hacer lo mismo.
Sin embargo Dios le habla, no sólo para prevenirlo sino para conducirlo al
lugar de la bendición.
Esto implicó un desafío para Isaac, sabe la importancia de mantener un
corazón sensible a Dios para seguir Su voz, y a la vez esta aquello que él está
viendo, tangible, y es la carencia que hay en la tierra en ese momento,
Sabe lo que está por venir ante una escasez, pero el Señor le dice: “habita
en la tierra que yo te diré”
Para quienes hemos leído la historia sabemos que Isaac fue obediente, tuvo
fe en lo que Dios le estaba diciendo aunque sus ojos y la lógica le decían algo
diferente.
Creo que si invirtiéramos más tiempo para poder ser sensibles a la voz de
Dios y hacernos obedientes de su mandato a nuestras vidas, mucho de los que
están hoy aquí tal vez no se hubieran movido de su país de origen, o bien
nuestra iglesia tendría más gente.
Y créame que muy probablemente estaríamos haciendo cosas que para el
mundo serian ilógicas o casi imposibles.
Leamos Génesis 26:12 Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó aquel año
ciento por uno; y le bendijo Jehová.
Comienza así: “y sembró Isaac en aquella tierra”, frase que nos dice cosas
muy importantes,
AMEN
Rosamaría Segura
ILA
Bellevue, Wa. Octubre 05 2014
Fecha del servicio:
10/05/2014