INTRODUCCION

Históricamente, la raza humana, en sus múltiples procesos de desarrollo, ha construido de varias

formas un conocimiento vasto acerca de su entorno y las interacciones que con este tiene.

Los procesos evolutivos han llevado al hombre por caminos trazados por la biología que a nivel
primario brinda el sentido de ser físico que poseemos hoy en día. Acompañando este proceso
biológico, el ser humano ha evolucionado en torno a la observación, que equivale directamente a la
generación de ideas. Estos procesos en la intelectualidad humana, nos ubican en un inicio primitivo
en el que como raza somos carentes de habilidades físicas naturales, pero poseemos la habilidad de
crear a partir de la observación y exploración del entorno. Es así como, objetos como la rueda, la
lanza, el fuego, el abrigo, formaron los cimientos de varias civilizaciones que evolucionaron
culturalmente en distintos tiempos y lugares pero que en conjunto reservan grandes similitudes
respecto al concepto y conocimiento del universo y del planeta en que vivimos.

El conocimiento, de cómo estas civilizaciones tan distanciadas y diferentes entre sí, llegaron a una
misma consciencia del universo, es uno de los temas a tratar en este ensayo. Por consiguiente,
evaluar el proceso evolutivo de civilizaciones como los Mayas, Aztecas o Incas nos permitirá ver en
mayor detalle nuestros cambios como raza dominante en el planeta.

DESARROLLO

Las teorías de como el hombre llego a poblar América, se sustentan en numerosos argumentos
recolectados a través de la historia. Partiendo de este concepto, encontramos que las teorías mas
recurrentes al momento de hablar de la forma en como América fue poblada, son la teoría
autoctonista y la teoría migracionista, siendo la ultima la mas acertada y valida respecto a distintas
fuentes científicas e históricas.

De acuerdo a la teoría migracionista, se plantea que la raza humana surgió en África, un argumento
comprobado, ya que los cimientos evolutivos se trazaron ahí. Desde África salen las primeras
migraciones y por consecuente los primeros asentamientos en otros lugares del mundo. La llegada
del hombre a América, se relaciona directamente con estas oleadas migratorias de algunas
civilizaciones provenientes de Asia, que, pasando por el estrecho de Bering, hicieron su llegada al
continente hace más de 15.000 años.

América ha sido desde siempre un territorio con abundante biodiversidad, a la vez que resulta ser
bastante hostil. Colonizarlo y aprender a vivir bajo las condiciones climáticas, geográficas que ofrecía
el territorio fue un proceso bastante arduo. Desde la llegada de los primeros pobladores por el
estrecho de Bering, su camino migratorio continuo en dirección Sur hasta llegar al extremo final del
continente. En algún punto de este proceso migratorio, parte de la población, se estableció en la
zona de centro América, siendo en un inicio cazadores poseedores de armas líticas. Con el tiempo
el asentamiento de estas colectividades, dio paso a estructuras mucho mas complejas y organizadas.

Es aquí donde tiene importancia la observación y la creación de ideas que refieren a la manipulación
y adaptación al entorno. La astronomía en los inicios de estas poblaciones toma relevancia ya que,
al observar el comportamiento del sol y la luna, el movimiento de los astros en el cielo, y como se
relacionan estos factores con sus actividades cotidianas, se establecen patrones de comportamiento
denominados semanas, meses o años, que proporcionan en conjunto una herramienta primordial:
EL CALENDARIO.

Entender el concepto que representaba el calendario para las primeras civilizaciones en el

continente americano, significa entender la razón ínfima por la cual estas civilizaciones prosperaron
en estos territorios. El manejo del calendario, proporcionaba a los pobladores datos claves para
empezar una siembra o cosechar los frutos de las anteriores, la cría de ganado, la subienda de peces,
la recolección de granos para abastecerse durante periodos hostiles. Desde la observación, a la
organización de estos análisis en un calendario útil para la agricultura y otras labores, hasta el
establecimiento de grandes poblaciones que prosperaron alrededor de sus creencias y sus prácticas.

A partir de este planteamiento, la primera gran civilización en el continente americano que lograron
desarrollar un vasto conocimiento acerca de los astros y relacionarlo con sus actividades fueron los
olmecas (1200-400ª.C), cuya ubicación en el golfo de México, les brindo el ambiente propicio para
el estudio de los astros. Aunque no se sabe mucho de esta civilización, guarda una estrecha relación
cultural con civilizaciones posteriores como los Mayas, que, aunque surgieron mucho tiempo
después (1500-1524 d.C), también desarrollaron un calendario, y el estudio del comportamiento de
los astros fue muy similar al efectuado por los olmecas. Los Aztecas (1328-1521d.C) siendo la última
población de Mesoamérica, tenían también una estructura calendárica que, si bien no era igual a la
de las civilizaciones anteriores, tenia similitudes sorprendentes respecto a los Olmecas o Mayas.

Pero resulta ser sorprendente, que poblaciones de centro América, tengan tanta similitud con una
civilización que, aunque en el mismo continente, este en extremo alejada: Los Incas.

Los Incas ubicados en la región de sur América, guardan semejanzas en la forma como organizaban
su calendario, aunque de estructura muy distinta, el contenido era acertado, conciso, y verídico al
igual que las civilizaciones de Mesoamerica.

El enigma es como poblaciones tan alejadas en tiempo y distancia, con ubicaciones relativas
totalmente distintas, tienen tantas semejanzas en sus conocimientos sobre el espacio. Pues bien, la
observación, el análisis, y los métodos de estudio usados, proporcionaron juicios organizados que,
sin importar, la geografía o el tiempo, correspondían a factores constantes que en cualquier punto
podían ser observados proporcionando datos similares. El tratamiento de estos datos, además de
brindar una base astronómica, deriva en las creencias teístas de cada civilización,
http://www.smu.org.uy/elsmu/comisiones/reencuentro/conferencia_primeros_pobladores_ameri
ca.pdf

http://bdigital.unal.edu.co/1666/1/gonzaloduqueescobar.20093.pdf