Você está na página 1de 7

Cuerpos cetónicos

El hígado posee la capacidad enzimática de derivar parte del acetil-CoA procedente de la


β-oxidación de los ácidos grasos (oxidación ya que proporciona energía, β porque el
carbono que se oxida es el segundo de la cadena, empezando a contar por el extremo
carboxílico) o del ácido pirúvico, sobre todo en períodos de excesiva formación de acetil-
CoA, hacia la producción de ácido acetoacético, transportado por la sangre hacia los tejidos
periféricos.
El ácido acetoacético, la acetona y el ácido 3-hidroxibutírico, sintetizado a partir del acetil-
CoA, son los llamados cuerpos cetónicos.

Los cuerpos cetónicos desempeñan un papel importante en la homeostasis del organismo.


En estados en los que la glucemia es baja (como en el ayuno o en dietas pobres en glúcidos)
o en casos donde la glucosa no puede ser utilizada (como en la diabetes), la concentración
de ácidos grasos y cuerpos cetónicos en el plasma aumenta. Ambas sustancias sustituyen
a la glucosa como combustible favorito para obtener energía por parte de la célula.
Conviene recordar que la gluconeogénesis, en animales, utiliza distintos precursores como
aminoácidos, lactato, glicerol o ácido pirúvico para conseguir fabricar glucosa, pero que los
ácidos grasos no pueden convertirse en azúcares.
Así, por ejemplo, células como los eritrocitos o las constituyentes del cerebro obtienen su
energía mayoritariamente de la glucosa, ya que sus mitocondrias tienen poca capacidad
para oxidar los ácidos grasos y en situaciones de ayuno o casos de diabetes los cuerpos
cetónicos constituyen unos magníficos sustratos energéticos sustitutivos de la glucosa.
En general, todos los estados en que está activada la β-oxidación comportan un aumento
de la síntesis de los cuerpos cetónicos.
En algunos casos, como los que anteriormente he citado, estos cuerpos cetónicos se
acumulan en la sangre y en líquidos intersticiales. Se produce así, un estado patológico,
que se llama cetosis o cetonemia. Aumenta al mismo tiempo la cantidad de cuerpos
cetónicos excretada (cetonuria).
Cuando en una persona normal desaparece la reserva de glúcidos, por ejemplo, durante
un proceso febril, aparecen en la sangre y en la orina los cuerpos cetónicos. El enfermo
experimenta los efectos narcóticos de la acetona. En parte, ésta es eliminada por el pulmón;
sin embargo, es conveniente tomar azúcar.
Resulta curioso, al menos, remarcar que en el caso de los esquimales, cuya alimentación
incluye sólo grasas durante alguna época del año, se ha desarrollado un mecanismo de
adaptación que les permite metabolizar una mayor cantidad de ácido acetoacético sin
consecuencias negativas.

Papel de los cuerpos cetónicos en ciertos tejidos y órganos.


Cerebro: hasta hace poco tiempo se pensaba que la glucosa era el único sustrato
energético utilizable por el cerebro. Hoy sabemos que en los casos de ayuno utiliza los
cuerpos cetónicos durante el periodo de la lactancia, ya que es una época de dieta rica en
grasas.
Músculo: El Corazón es el músculo que más consume cuerpos cetónicos, como sustrato
metabólico, mientras que en el músculo esquelético son escasos, ya que utiliza ácidos
grasos libres para sus necesidades energéticas.
Riñón: Es uno de los órganos donde los cuerpos cetónicos proporcionan una mayor
aportación energética.
Tejido Adiposo: Puede metabolizar cuerpos cetónicos como sustrato energético y como
precursor lipogenético. Sin embargo, durante el ayuno está inhibida la lipogénesis y, por lo
tanto, hay poca síntesis liṕidica a partir de los cuerpos cetónicos.
Mención especial merece el metabolismo de los cuerpos cetónicos en las estructuras
fetales especialmente durante el ayuno; aunque el feto no los sintetiza, le llegan
procedentes de la madre a través de la placenta, por la que pasan libremente.
Efectos hormonales sobre el metabolismo lipídico.
Insulina. Estimula la utilización de glucosa, provoca la síntesis de unos ácidos grasos, y por
tanto, incrementa la lipogénesis. Por otro lado, disminuye la liberación de ácidos grasos por
el tejido adiposo, este fenómeno reduce la cetogénesis. (proceso metabólico por el que se
producen los cuerpos cetónicos a partir del catabolismo de los ácidos grasos)
Si por el contrario, falta insulina, aumenta la síntesis del colesterol, porque dispone de más
acetil-CoA.
Adrenalina. Estimula la lipasa de los adipocitos y favorece la liberación de ácidos grasos.
Además, inhibe la captación de glucosa sanguínea por el músculo, que consume
preferentemente ácidos grasos.
Glucocorticoides. Estimulan la oxidación de los ácidos grasos y la cetogénesis.
ACTH. Aumenta la movilización de los ácidos grasos del tejido adiposo y, con ello, la
cetogénesis.
METABOLISMO DE LOS CUERPOS CETÓNICOS

Formación de cuerpos cetónicos.


Los cuerpos cetónicos son compuestos químicos producidos por cetogénesis en las
mitocondrias de las células delhígado. Su función es suministrar energía al corazón y al
cerebro en ciertas situaciones excepcionales. En la diabetes mellitus tipo 1, se puede
acumular una cantidad excesiva de cuerpos cetónicos en la sangre, produciendo
cetoacidosis diabética.
Los compuestos químicos son el ácido acetoacético (acetoacetato) y el ácido
betahidroxibutírico (β-hidroxibutirato); una parte del acetoacetato sufre descarboxilación no
enzimática dando acetona (una cantidad insignificante en condiciones normales);1 los dos
primeros son ácidos y el tercero, una cetona.
El ácido acetoacético, la acetona y el ácido 3-hidroxibutírico, sintetizado a partir del acetil-
CoA, son los llamados cuerpos cetónicos.
Papel de los cuerpos cetónicos en ciertos tejidos y órganos:
Cerebro: hasta hace poco tiempo se pensaba que la glucosa era el único sustrato
energético utilizable por el cerebro. Hoy sabemos que en los casos de ayuno utiliza los
cuerpos cetónicos durante el periodo de la lactancia, ya que es una época de dieta rica en
grasas.
Músculo: El Corazón es el músculo que más consume cuerpos cetónicos, como sustrato
metabólico, mientras que en el músculo esquelético son escasos, ya que utiliza ácidos
grasos libres para sus necesidades energéticas.
Riñón: Es uno de los órganos donde los cuerpos cetónicos proporcionan una mayor
aportación energética.
Tejido Adiposo: Puede metabolizar cuerpos cetónicos como sustrato energético y como
precursor lipogenético. Sin embargo, durante el ayuno está inhibida la lipogénesis y, por lo
tanto, hay poca síntesis liṕidica a partir de los cuerpos cetónicos.
Mención especial merece el metabolismo de los cuerpos cetónicos en las estructuras
fetales especialmente durante el ayuno; aunque el feto no los sintetiza, le llegan
procedentes de la madre a través de la placenta, por la que pasan libremente.
Desarrollo del metabolismo de los cuerpos cetónicos:

Durante la última etapa de la gestación, el feto acumula glucógeno en el cerebro de una


forma sustancial, este glucógeno puede dar cuenta del requerimiento urgente de energía
que se produce durante el nacimiento. Sin embargo, el glucógeno cerebral se consume
rápidamente en las dos primeras horas de vida extrauterina. En la primera hora de vida
extrauterina no hay glucosa en la sangre de la rata y en el humano en la primera media
hora. Dado que la gluconeogénesis no es plenamente activa hasta las 12 horas de vida la
nomoglucemia no se alcanza sino entre el 3-4º día de vida. En estas circunstancias, los
requerimientos energéticos del cerebro son suplidos por los cuerpos cetónicos sintetizados
por el propio feto a partir de los lípidos lácteos. Por consiguiente, el recien nacido sufre un
retraso en la llegada de nutrientes, que comprende desde el momento del parto hasta el
establecimiento de la lactancia, período denominado, prelactancia.
Es conocida la contribución de los cuerpos cetónicos plasmáticos al metabolismo
energético del cerebro de neonato, así como a su incorporación a los lípidos cerebrales y
aminoácidos. Tanto en la rata como en el hombre, la concentración sanguínea de cuerpos
cetónicos es muy baja en el momento del nacimiento (alrededor de 0.2 mM), pero
experimenta un fuerte aumento a partir de las primeras horas de vida extrauterina,
alcanzando valores de aproximadamente 1-2 mM, a lo largo de la lactancia. El desarrollo
de la vía cetogénica en el hígado neonatal junto con el aumento de la disponibilidad de
sustratos para la misma son responsables de la alta concentración plasmática de cuerpos
cetónicos observados durante la lactancia. En estas circunstancias la concentración de 3-
hidroxibutirato es superior a la del acetoacetato, aproximadamente 4 veces. Además, en
condiciones de malnutrición neonatal prolongada, dichos valores aumentan en plasma y
constituyen el soporte principal del metabolismo oxidativo cerebral.
El cerebro humano ya es capaz de metabolizar 3-hidroxibutirato entre las 12-21 semanas
de gestación. Así, a las 22 semanas de gestación, ya estan presentes la 3-hidroxibutirato
deshidrogenasa (EC 1.1.1.30), la 3-cetoácido-CoA transferasa (EC 2.8.3.5) y la acetoacetil-
CoA tiolasa (EC 2.3.1.9). Durante el desarrollo postnatal en cerebro humano, los cuerpos
cetónicos cubren un 10% de las necesidades energéticas, aunque dicha contribución
disminuye más adelante, a medida que se consolida la BHE. Se piensa que los ácidos
grasos de cadena media son los principales precursores de los cuerpos cetónicos en estas
circunstancias.
CETOGENESIS:
El acetil-CoA producido por la oxidación de los ácidos grasos en las mitocondrias del hígado
puede ser completamente oxidado vía el ciclo del ácido cítrico. Pero una fracción
significante de este acetil-CoA tiene otro destino.
FORMACIÓN DE CUERPOS CETÓNICOS:
Este proceso ocurre principalmente en las mitocondrias del hepatocito, en las cuales
el acetil-CoA es convertido en acetoacetato o D-b-hidroxibutirato. Estos compuestos junto
con la acetona, son referidos como cuerpos cetónicos,
Que sirven como importantes combustibles metabólicos para muchos tejidos periféricos.
Por ejemplo, el cerebro normalmente utiliza glucosa como fuente de energía (los ácidos
grasos no pueden atravesar la barrera sanguínea cerebral), pero durante ayuno
prolongado, los cuerpos cetónicos son la mayor fuente de energía del cerebro. Los cuerpos
cetónicos son los equivalentes hidrosolubles de los ácidos grasos.

Cetólisis: El hígado libera acetoacetato y b-hidroxibutirato que son llevados por el torrente
sanguíneo a los tejidos periféricos para ser usados como combustibles alternativos, donde
son convertidos a acetil-CoA
En la reacción catalizada por la 3-cetoacil-CoA-transferasa( también conocida como
tioforasa), puede participar como donador del grupo CoA del succinil-CoA, el cual puede
ser convertido a succinato con la síntesis acoplada de GTP en la reacción catalizada por la
succinil-CoA sintetasa, enzima que participa en las reacciones del ciclo de Krebs. Este es
una desviación o rodeo (bypass) del acetoacetato el cual necesita de la hidrólisis de un
GTP. El aceto acetil CoA es hidrolizado y convertido en dos moléculas de acetil CoA por
acción de la tiolasa. El hígado carece de 3-cetoacil-CoA-transferasa (tioforasa), por lo cual
los cuerpos cetónicos no pueden ser degradados allí, lo cual permite abastecer de estos
compuestos a otros tejidos que los utilizan como fuente importante de energía.
En los períodos de inanición, en la diabetes mellitus no controlada y en las personas que
mantienen una dieta rica en grasas y pobre en glúcidos , la concentración del oxalacetato
disminuye debido al déficit relativo de ácido pirúvico, que es su precursor en el proceso de
anaplerosis y porque dicho cetoácido, en estas condiciones, se utiliza en la
gluconeogénesis. El acetil-CoA no puede incorporarse en cantidades suficientes al ciclo.
En estas condiciones, las cantidades de cuerpos cetónicos que se producen son mayores
de las que se degradan en la cetolisis y se produce un trastorno clínico-metabólico conocido
como estado de cetosis (hipercetonemia con acidosis metabólica, cetonuria y aliento
cetónico).

Você também pode gostar