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Toda esta propuesta integra un nuevo avance hacia los detalles más cultos de
Oswaldo Reynoso quien es considerado uno de los mejores escritores en la
generación del cincuenta, a este círculo de estudio, que recién se ha
formado(COLOR)los jóvenes, estudiantes de la Villareal; promueven el concepto de
someterse al mundo de la investigación y bajo la guía de la profesora Judith se ve
el prometedor desenlace de su trabajo pero como un circulo de investigación,
plantean entonces el desarrollo, en un futuro, desiertas cuestiones que tienen de
base lo dejado por Oswaldo. Es así que empieza su análisis
Tras su obra: Aladino y el goce de la piel, los cuales son los primeros en ser
examinados, vemos la relación del lenguaje como algo sexualmente aceptable que
generan en los sujetos, en el cual el sexo o género surge o culturalmente de una
reiteración de las normas hegemónicas
Sacas a relucir en sus dos obras ese ímpetu que tiene por ejemplo a no dejarse
someter por las leyes, también dan la posibilidad de ser negadas y dan esa idea de
ser formadas mediando un juzgamiento introspectivo en contra la corriente ayuda a
sacar la verdadera naturaleza del personaje para romper las reglas impuestas frente
a esto se habla también de la poesía de los poetas que viven la realidad de una lima
calda donde los versos no animan la melancolía de sus calles, de esa vida cotidiana
del migrante, de los problemas sociales y la desaparición de esa arcaicidad rural de
aquella Lima.
Esto se muestra más en los años cincuenta a sesenta un cierto anonimato frente a
nuestra ciudad, donde da asco las calles, el smog; es así que se logra representar
en algunos versos realistas; mostrado en la generación del 50 un profundo
sentimiento de frustración y desesperación con este golpe duro que dan los
escritores por medio de sus escritos podemos sacarnos la venda de los ojos y decir
que lima ya no es la ciudad de los reyes sino es la ciudad horrible, llena de
canalladas y salvajadas por esto fue también que se erradico a ser tomados a estos
escritores como personas de ideologías fuertes frente a la política que imperaba la
psicología de sus personajes y el ambiente en toda su utopía del caos, calo en la
hegemonía de aquellos años. Las importancias de nuestros escritores surcaron este
proceso de lo que ahora somos, una sociedad con fantasmas imposibles de olvidar
la corrupción. Lo paradigmático de todo esto es que permanecen los prejuicios
moralistas y son los escritores como Oswaldo Reynoso quienes hacen aparecer
estas cadencias para posteriores generaciones.
JUEVES 13 JUNIO