LA VIRTUD

2 P. 1:5-9
Guatemala 11 de Julio de 1999
No. 265
INTRODUCCIÓN: La Biblia nos enseña que existen formas de poder crecer en la fe y fortalecernos en ella, vemos
que el apóstol Pedro indica que debemos añadirle a nuestra fe virtud, conocimiento, dominio propio, perseverancia,
piedad, afecto fraternal y amor, las cuales nó nos dejaran estar ociosos ni estériles en el conocimiento de
Jesucristo.
DESARROLLO: Es muy interesante saber que cuando el Apóstol Pedro decía qué cosas debemos añadir a nuestra fe,
utiliza la palabra griega epichoregeo que significa: fortalecer, nutrir, alimentar; esto nos enseña que por medio de
estas siete características fortaleceremos, nutriremos, alimentaremos nuestra fe. También vemos que la palabra
virtud se traduce del griego arete y significa excelencia moral, es el poder moral, energía moral, vigor del alma; esto
es, es tener sanidad, pureza, santidad, excelencia en nuestra forma de pensar, en nuestra conducta y en nuestra vida;
veamos a la luz de Filipenses 4:8, como podemos alcanzar este tipo de virtud, para poder agradar al Señor en todo:
 TODO LO QUE ES VERDADERO: Verdadero se traduce del griego alethes que significa: amar la verdad, hablando
la verdad, lleno de verdad; este es el primer aspecto que debemos buscar para obtener virtudes:
a Un camino verdadero, Gn. 24:48: Jesucristo es el camino (Jn. 10:10); y hemos sido llamados a andar en un
camino llamado de santidad (Is. 35:8), este nos conduce a la sabiduría (Pr. 4:11), a la vida (Pr. 5:6) y a la
inteligencia (Pr. 9:6).
b El pan verdadero, Jn. 6:32: El pan es figura de la Palabra de Dios, con el cual debemos alimentarnos y
nutrirnos, por eso es necesario que sean los ministros de Dios quienes nos traigan el alimento para sustente
nuestra vida.
c Verdadero apóstol, 2 Co. 12:12: Los apóstoles han sido delegados de parte de Dios para que edifiquen al
cuerpo de Cristo, que es la Iglesia, pero los falsos buscan de igual manera confundir al enviar un evangelio
distinto al que nos fue presentado (Gá. 1:6-9).
 TODO LO DIGNO: Digno se traduce de semmos y significa: honesto, serio, solemne. Dentro de esta
característica podemos encontrar:
a Cuerpo en santidad y honor, 1 Ts. 4:4: Dios ha prometido que los miembros de su Cuerpo (la Iglesia) que se
consideran con menos honra, serán vestidos con mas honra (1 Co 12:23), además, nuestro cuerpo es Templo
del Espíritu Santo, por lo que debemos de cuidarlo (1Co 6:19)
b Anciano digno de doble honor, 1 Ti. 5:17: Esto es de dos formas, respetando a todo aquel que es avanzado en
edad y tiene corona de canas y además, a aquellos que ejercen el privilegio de anciano en la congregación
(Lv. 19:32; Hch. 23:5).
c Los diáconos dignos, 1 Ti. 3:8: Dentro del servicio en la Iglesia se debe llamar a personas que tienen
características definidas para poder ejercerlo, por eso los apóstoles en la Iglesia del principio llamaron a
varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y sabiduría, para que realizaran las tareas de las
mesas en lo que ellos se dedicaban a la oración y la Palabra (Hch. 6:3).
 TODO LO JUSTO: Justo se traduce del griego dikalos que significa: honrado, recto, correcto. Las cosas justas
las podemos obtener practicando algunos aspectos que la Biblia nos enseña:
a Obedeciendo a nuestros padres en el Señor, Ef. 6:1: El primer mandamiento con promesa es el de honrar a
los padres. Vemos en el libro de los Hechos como Timoteo honraba a su madre y a su abuela con su
conducta, la cual era reconocida en la Iglesia.
b Justos con los siervos, Col. 4:1: Esto se puede llevar a cabo, cuando no se retiene los salarios de los
empleados (Stg. 5:4); la relación que debe existir hacia todos es todo cuento queráis que os hagan los
hombres, así haced también vosotros con ellos (Mt. 7:12).
c La oración eficaz del justo, Stg. 5:16: Debemos orar, pero no para la búsqueda de nuestros deleites sino con
el propósito de edificar y bendecir a otros. Intercediendo por las autoridades, por los hermanos, por la
familia, etc. (1 Ti. 2:1)
 TODO LO PURO: Puro se traduce del griego hagnos que quiere decir: casto, limpio. La Biblia nos enseña que
todas las cosas son puras para el puro, es pues la mente limpia la que va a permitir ver y escuchar sin malicia
algunas cosas.
a Consérvate puro, 1 ti. 5:22: Esto lo podemos lograr cuando no estamos imponiendo con ligereza las manos, ni
estamos participando de pecados ajenos, apartándonos del pecado y así impediremos que las
contaminaciones vengan a nuestra vida.
b Ancianas enseñen a las mas jóvenes a ser puras, Tit. 2:5: Definitivamente las Jóvenes van a imitar en todo lo
que las ancianas imitan a Cristo. El apóstol Pablo decía a Timoteo que lo que había escuchado delante de
muchos testigos esto enseñará a hombre fieles (2 Ti. 2:2). Ser puro puede ser una enseñanza que recibiremos
de parte de la Iglesia y que podemos llevar a la practica.
c Conducta casta y respetuosa, 1 P. 3:2: Cada actitud que tengamos permitirá que algunos se maravillen de lo
que actualmente somos, así como el apóstol Pablo decía que muchos al escuchar de su vida antigua
glorificaban a Dios por el cambio que había en él (Gá. 1:22-24).
 TODO LO AMABLE: Se traduce del griego prosphiles que significa: aceptable, agradable. Esta actitud nos
permite tener un trato adecuado y agradable hacia las demás personas:
a El que anhela obispado debe ser amable, 1 Ti. 3:3: Esto permitirá al que anhela servir a Dios, que la relación
pueda ser amistosa con las ovejas que debe tratar, dirigiendo sin tener señorío de ella (Hch. 20:28; 1 P. 5:3),
recordando que la Iglesia fue comprada con la preciosa sangre de Jesucristo.
 El siervo de Dios debe ser amable para con todos, 2 Ti. 2:24: No debemos ser amables solamente con algunas
ovejas, sino que con todas porque cada uno de nosotros valemos la sangre de Cristo., y además con todas
las personas, aunque no sean cristianas.
 TODO LO DE BUEN NOMBRE: Buen nombre se traduce del griego euphemos que significa: buen reporte,
hablando favorablemente. Todas nuestras palabras deben ser sazonadas con sal (santidad), hablando siempre
de aquello que es digno (Col. 4:6) recordando que de toda palabra que salga de nuestra boca daremos cuenta a
Dios. (Mt. 12:36).
a Hablar verdad cada cual a su prójimo, Ef. 4:25: Nuestra conversación debe ser basada en la verdad, en
ningún momento debemos de utilizar la falsedad en ellas porque eso no edifica a ninguno.
b La palabra de Cristo more abundantemente en nosotros, Col. 3:16-17: De la abundancia del corazón habla la
boca, y sí en nosotros hay abundancia de Palabra de eso hablaremos, de lo que oigamos y creamos es de lo
que hablaremos (Sal. 116:10).
c Ejemplo en Palabra, 1 Ti. 4:12: Debemos llenarnos de la Palabra y dejar que haga su Obra en nosotros,
expresando todo aquello que sea para la edificación mutua, pero los pecados de otros ni siquiera deben
nombrarse entre el pueblo de Dios.
CONCLUSIÓN: Dios desea que seamos como Él, por eso es necesario que dejemos que el Espíritu Santo nos cambie
dejando que forme el carácter y la persona de Jesucristo en nosotros y en este caso, obedeciéndolo para tener virtud
en nuestra forma de pensar, y así pensar de la misma forma como lo hace el Señor, es por eso que la Biblia nos
enseña que tenemos a nuestra disposición la mente de Cristo (1 Co. 2:16).