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Resumen: El cultivo de concha de abanico, es una actividad que esta adquiriendo importancia en
la bahía de Samanco. Sin embargo, se conoce poco sobre los impactos (positivos y negativos)
que podría tener esta actividad en el ambiente. En este informe se analizan los posibles impactos
que tendría el cultivo de concha de abanico en la bahía de Samanco.
I. INTRODUCCIÓN.
La producción mundial de pectinidos se estima que en el año 2003 fue alrededor de 1 700 000 t
(concha entera), de las cuales unas 700 000 t proceden de la acuicultura y 1 000 000 t de bancos
naturales. Es importante destacar que los mayores bancos naturales de esta especie se encuentran
en USA, Canadá, Islandia, Rusia, Japón, México, Brasil, Venezuela, Argentina y Perú, mientras
que los principales países productores de pectinidos mediante acuicultura son China, Japón,
Chile y Nueva Zelanda (Intrafish, 2003).
El cultivo de “concha de abanico” (Argopecten purpuratus) es una actividad acuícola que viene
adquiriendo una gran importancia. En los últimos años, esta especie se ha constituido en el
principal producto de exportación de la acuicultura peruana, siendo los destinos tradicionales
Francia y USA.
Como toda actividad humana, el cultivo de “concha de abanico” también origina una serie de
impactos ambientales (positivos y negativos), los mismos que puede beneficiar o perjudicar al
ambiente en el cual se desarrolla la actividad. En este sentido, Uribe & Blanco (2001) indican
que el cultivo de bivalvos y en general las grandes agregaciones de organismos bentónicos,
pueden provocar un significativo impacto en los nutrientes y también en el ciclo de energía de
los ecosistemas marinos.
Por otro lado, los beneficios positivos de la acuicultura, y en particular del cultivo de “concha de
abanico”, si se han documentando, siendo los más destacados la generación de empleo y divisas,
además de contribuir con el desarrollo en zonas rurales y de aportar a la seguridad alimentaria.
En este sentido, esta monografía tiene como objetivo identificar los diferentes impactos
ambientales que viene originando el cultivo de “concha de abanico” en la bahía de Samanco, con
la finalidad de proponer medidas de mitigación para los impactos ambientales negativos.
Entre los impactos positivos del cultivo de “concha de abanico” podemos destacar: una
contribución significativa al abastecimiento de recursos hidrobiológicos para los mercados
internacionales, generación de empleo (directo e indirecto), calificado y no calificado, beneficios
a los consumidores de los mercados a donde se destina las exportaciones, por la disminución de
los precios del producto final, disminución de los riesgos de salud para las personas que tienen
problemas con el colesterol, foco de desarrollo rural y beneficios económicos significativos en el
lugar en que se desarrolla.
Tal como se aprecia, los beneficios del cultivo de “concha de abanico” se dan principalmente en
el contexto social y económico. No obstante, en la parte cultural, se ha presentado un cambio
significativo , como es el caso de los pescadores artesanales, quienes hace algunos años veían al
cultivo de “concha de abanico” como una amenaza, debido a que esta actividad estaba creciendo
y ocupando sus áreas tradicionales de pesca. No obstante, en los últimos años la percepción de
este grupo ha cambiado, tal es así que ahora cuentan con áreas de poblamiento y repoblamiento
para el cultivo de “concha de abanico”. En la actualidad, un buen número de pescadores
artesanales se están convirtiendo en maricultores.
Por otro lado, la actividad del cultivo de “concha de abanico” esta ayudando a dinamizar la
economía local, la cual es dependiente de la actividad pesquera industrial, actividad que se
encuentra en crisis. De acuerdo a estimaciones de la Sociedad Nacional de Pesquería, el cultivo
de “concha de abanico” genera empleo directo no calificado para 2 personas por cada hectárea.
En este sentido, el cultivo de “concha de abanico” emplea a 2080 personas (calculado de acuerdo
al área instalada).
El cultivo de “concha de abanico” viene generando una serie de impactos ambientales negativos
en el ecosistema de la bahía de Samanco, esta se ve potenciado por prácticas insostenibles entre
las cuales se incluyen:
- Arrojo de combustibles por parte de las embarcaciones. Aun cuando se toman las debidas
precauciones para evitar el derrame de combustibles, estos ocurren continuamente y se ve
agravado debido a la existencia de gremios de pescadores artesanales, quienes también emplean
este tipo de combustibles para sus embarcaciones. El derrame de combustibles sobre la
superficie marina genera impactos sobre los organismos acuáticos.
ICES (2002) indica que la productividad de los lugares en donde se cultiva moluscos esta
limitado por la disponibilidad del alimento planctónico, aunque los impactos ambientales están
empezando a identificarse. Las zonas en donde se cultiva moluscos producen cantidades
significativas de heces y otros desechos.
Al respecto, a continuación se detalla los potenciales impactos negativos generados por el cultivo
de moluscos bivalvos.
Algunos autores manifiestan que el cultivo de bivalvos filtradores tienen una serie de impactos
positivos en el ecosistema; tal es así que Shumway et al. (2003) indican que los bivalvos
filtradores remueven el material particulado, lo cual reduce la turbidez y directamente e
indirectamente remueven el nitrógeno y otros nutrientes; vía este proceso, los bivalvos son
altamente eficientes purificadores de agua, que remueven o reducen la materia orgánica,
nutrientes, cieno, bacterias y virus. Además estos investigadores afirman que los bivalvos no solo
remueven el nitrógeno de la columna de agua, sino que incorporan una alta proporción de este
nitrógeno en sus tejidos.
Por otro lado, el ICES (2002) indica que el efecto de liberar los nutrientes en la columna de agua
es poco conocido, debido a la rápida dispersión por las corrientes, de las sustancias disueltas
(desechos) en el agua; esto hace que el efecto de la liberación de nutrientes se de en el ámbito
regional y no solo se circunscriba a la granja. Al respecto, debemos manifestar que la dispersión
de la materia orgánica va a depender de la dinámica de las corrientes predominante en la zona de
cultivo, y por ende de la cantidad de deposición de las heces y pseudoheces de los organismos en
cultivo.
Bartoli et al. (2001) encontró que en las zonas de cultivo de “almeja” Tapes philippinarum en
Italia, que los flujos del oxígeno, dióxido de carbono, amonio, silicatos y fósforo eran
estimulados debido a las actividades de respiración y excreción de las almejas; estos autores
determinaron que en promedio la demanda de oxígeno del sedimento y la producción de
CO2 fueron estimulados por factores de 1,8 y 3,3, respectivamente, mientras que la liberación de
nutrientes fue 6,5 veces mas alto para NH4+ y 4,6 veces mas alto para PO4-3.
Al respecto, debemos indicar que no existen investigaciones referidas al aporte de nutrientes del
cultivo intensivo de “concha de abanico” en el Perú; no obstante, si advertir que el aporte de
nutrientes podría ser elevado, debido a la elevada densidad de organismos en cultivo y a la
cantidad de área de cultivo dedicada a esta especie.
En este sentido, una alternativa para mitigar este impacto en determinar la capacidad de carga de
la bahía de Samanco; esto nos permitirá conocer cuantas hectáreas de “concha de abanico” se
pueden cultivar sin que ello perjudique la sostenibilidad de la bahía.
Uno de los impactos positivos del cultivo de bivalvos, esta relacionado con la capacidad que
tienen para controlar las proliferaciones algales nocivas, mediante la remoción de las células,
antes de que estas se acumulen a niveles perjudiciales para el ambiente (Shumway et al., 2003).
No obstante, este beneficio puede convertirse en un problema cuando los organismos han
alcanzado la talla comercial y está próxima la cosecha, debido a que no se podrá comercializar
los organismos con elevadas concentraciones de toxinas generadas por las proliferaciones algales
nocivas.
Por otro lado, Smaal et al. (2001) encontraron, en la zonas en la cual se implementaban el cultivo
de mejillones (Mytilus edulis) en Canadá, que si bien la productividad primaria permanecía
constante, la composición del fitoplancton variaba e incluso se incrementaba. No obstante,
Pilditch et al. (2001) examinaron los factores que afectan el abastecimiento de seston al cultivo
suspendido del ostión (Placopecten magellanicus) en Canadá, llegando a determinar que las
poblaciones grandes de bivalvos pueden reducir la concentración del seston, limitando así la
producción natural. Esto finalmente afecta la disponibilidad de alimentos para otras especies
filtradoras que conviven en el mismo ecosistema con los cultivos de bivalvos.
Barg (1994 in Lujan, 2003b) indica que el cultivo de los organismos bivalvos, puede disminuir la
productividad primaria de las zonas costeras, compitiendo por ende con las poblaciones naturales
de organismos herbívoros planctónicos. Adicionalmente, los bivalvos producen pseudoheces y
heces (biodeposición) que constituyen desechos orgánicamente ricos que impactan sobre el
bentos, lo que genera problemas debido al incremento de los sedimentos; constituyéndose un
grave problema para el cultivo la resuspensión del sedimento compuesto por heces y
pseudoheces (Tang & Fang, 2002, in Lujan, 2003b) y la producción de metabolitos y gases del
proceso de degradación de la materia orgánica.
Otro de los impactos negativos que genera el cultivo de bivalvos, es el incremento de la materia
orgánica, tanto en la columna de agua, como en el fondo sobre el cual se ubica el cultivo. En este
sentido, Uribe & Blanco (2001) trabajando con trampas de sedimentación instaladas en la bahía
Tongoy a 20 m de profundidad en zonas en donde se cultiva “ostión” (“concha de
abanico”) Argopecten purpuratus, registraron las mayores capturas en el mes de febrero con mas
de 7,0 g m-2dia-1 de materia orgánica, mientras que valores menores a 2,0 g m-2dia-1 se detectaron
en el mes de octubre, obteniéndose un valor promedio de 3,5 g m-2dia-1. Tal como se aprecia
existe un aporte significativo de materia orgánica, la misma que va a variar dependiendo de la
temporada del año.
Por otro lado, León et al., (2004) trabajando el impacto de las bateas de cultivo de mejillón de
España en la sedimentación de la materia orgánica, encontraron diferencias estadísticamente
significativas entre los sectores en los cuales existían bateas de cultivo de mejillón (biodepósitos)
y los sectores en donde no existían. Este tipo de impactos se podría aplicar a los generados por el
cultivo de “concha de abanico” en corrales; está tecnología de cultivo viene siendo empleada por
los gremios de pescadores artesanales, en la implementación de sus áreas de poblamiento y
redoblamiento.
De acuerdo a LeBlanc et al., (2002) las excretas de los organismos del fouling no parece tener
gran impacto en el sedimento en una zona de cultivo de mejillón en Canadá. Al respecto, nos
parece que esta conclusión debería someterse a una evaluación más exhaustiva.
Si tomamos en cuenta los datos proporcionados por Disalvo (1998 in Lujan, 2003b), en el
sentido de que el cultivo de “concha de abanico” (ostiones) producen 28,8 g m-2 año-1 de heces y
pseudoheces, ello representaría hipotéticamente una producción de 288 kg ha año-1; de esta
forma en la bahía de Samanco, de acuerdo a las hectáreas destinadas para el cultivo de concha de
abanico, se estarían produciendo 288 t de heces y pseudoheces al año, que estaría acumulando en
el fondo y una parte podría estar siendo aprovechada por otro organismos como las algas. La
materia orgánica en descomposición origina un incremento en la demanda bioquímica del
oxígeno, además de problemas de anoxia y de generación de gases como el ácido sulfhídrico. En
este sentido, se deben realizar investigaciones para determinar la posibilidad de realizar
policultivos, con la finalidad de aprovechar las heces y pseudoheces generados por la “concha de
abanico”.
Una alternativa podría ser el cultivo de “concha de abanico” – “algas” o “concha de abanico” –
“choritos”.
2.2.4. Efectos del cultivo de bivalvos en la comunidad macrobentónica
El cultivo de bivalvos genera una serie de impactos en los organismos bentónicos, debido a que
los desechos (heces y pseudoheces) se depositan en el fondo marino, con lo cual cambian la
estructura de las comunidades macrobentónicas que habitan estos lugares.
Este tipo de impacto generado por el cultivo de bivalvos es el que ha recibido mayor atención; en
este sentido, ICES (2002) indica que mientras que los bajos niveles de carbono incrementan la
productividad bentónica, los altos niveles asociados con la acuicultura generalmente conduce a
una disminución de la biodiversidad y a un cambio de la producción bentónica y bacterias.
Chamberlain et al. (2001) evaluó el impacto del cultivo suspendido de mejillones Mytilus
edulis en la comunidad macrobentónica, encontrando que la estructura de la comunidad, en
zonas cercanas a la granja, se alteraba por el enriquecimiento orgánico. Como consecuencia de
ello se apreciaba una disminución en la biodiversidad en las zonas cercanas a la granja de
mejillones. Asimismo, Stenton-Dozey et al. (2001) trabajando en bateas de M.
galloprovincialis en España, encontraron que la biomasa de la macrofauna bentónica se redujo y
los grupos taxonómicos se vieron alterados.
De acuerdo a los estudios de León et al. (2004) el principal impacto del cultivo de organismos
marinos se produce sobre el lecho marino y la fauna macrobentónica. En este sentido, Vita et al.
(2002), reportan que el incremento de la materia orgánica origina cambios fisicoquímicos en el
sedimento, lo que ocasiona una reducción de la diversidad biológica de los macroorganismos.
Las poblaciones bentónicas de los cultivos en suspensión, como el del cultivo de “concha de
abanico” pueden verse afectados desde una reducción en la biodiversidad y el incremento de
especies tolerantes a la contaminación y oportunistas, hasta la ausencia de la macrofauna
(GESAMP, 1991, Barg, 1994 in Lujan, 2003b).
Napan (2003 in Lujan, 2003b) evalúo el impacto generado por el cultivo suspendido de A.
purpuratus sobre el medio marino en Guaynuma - Casma, concluyendo que este cultivo genera
impactos negativos en la biodiversidad y la calidad de agua, evidenciándose en el incremento de
los sólidos en suspensión, en la disminución del la concentración de oxigeno del fondo, en el
incremento de la DBO5 y la variación de los índices de biodiversidad. Asimismo, las curvas ABC
elaboradas por Napan (2003 in Lujan, 2003b), mostraron una perturbación moderada del cultivo
suspendido de concha de abanico, sobre el bentos de la zona de cultivo.
De acuerdo a Barg (1993 in Lujan, 2003b) las estructuras de cultivo modifican la velocidad y
dirección del movimiento de agua. Smaal et al., (2001), reportaron que el inicio del cultivo de
mejillones Mytilus edulis, en zonas en donde no existían, genero cambios en la hidrodinámica
del ecosistema de Oosterschelde, Canadá. Al respecto, Grand & Bacher (2001) evaluaron el flujo
de la corriente en una zona de cultivo de bivalvos y kelp, encontrando que los cultivos
suspendidos reducen hasta un 20% la velocidad de la corriente en las zonas aledañas a la zona de
cultivo y hasta un 54% en medio del área de cultivo.
En este sentido, debemos conocer la dinámica de las diferentes corrientes que existen en la bahía
de Samanco; con la finalidad de identificar adecuadamente el impacto de las líneas de cultivo y
para determinar el número adecuado de líneas por hectárea de cultivo.
Otro de los conflictos identificados entre los pescadores artesanales y los empresarios
maricultores, es por el uso de la zona costera, principalmente de la Playa Caleta Colorada. El
conflicto se da porque las empresas de maricultura usan este lugar para el lavado de sus sistemas
de cultivo, lo que ha originado problemas de contaminación ambiental y ha impactado en la
disminución de visitantes a esta Playa, perjudicándose de esta forma los pescadores artesanales
quienes trasladaban en sus botes de pesca a los visitantes.
Por otro lado, uno de los mayores conflictos, es el que tienen los pescadores artesanales -
maricultores y los pescadores industriales, debido a que estos últimos ingresan a realizar faenas
de pesca industrial dentro de la bahía de Samanco (aun cuando existen prohibiciones en la
legislación peruana) lo que perjudica por un lado las actividades de los pescadores artesanales y
por el otro afecta a las empresas de maricultura. Esto ha llevado al surgimiento de
enfrentamientos entre estos grupos.
La bahía de Samanco, tiene playas (Dorado, caleta Colorada, Atahualpa, Vesique) que son
visitados, principalmente durante la época de verano (enero-marzo), por la población de la
ciudad de Chimbote.
Estos visitantes acuden a las playas en busca de esparcimiento. En este sentido, el cultivo de
“concha de abanico” genera un impacto ambiental negativo en el paisaje, debido a la disposición
de la infraestructura de cultivo (líneas, catamaranes, almacenes, etc).
Por otro lado, una de las prácticas insostenibles es la disposición de boyas y linternas de cultivo,
colonizadas por el “fouling”, en zonas de la playa (Caleta Colorada) para ser secados y por ende
que facilite la extracción de los organismos incrustantes. Esto ha generado el incremento de las
moscas y de los malos olores, perjudicando la calidad natural de las playas.
Una forma de mitigar este impacto ambiental negativo, es que las empresas implementen
medidas para el secado y lavado de sus aparejos en espacios cerrados, tal como lo vienen
haciendo algunas empresas.
III. CONCLUSIONES
- Los impactos positivos del cultivo de “concha de abanico” se dan principalmente en el aspecto
social (generación de empleo), cultural y educativo (conversión de pescadores a maricultores).
- Se hace necesario realizar investigaciones para identificar los efectos sobre el medio ambiente
del impacto del cultivo de “concha de abanico” en la bahía de Samanco; originados por la falta
de disposición de la materia orgánica de diferentes procedencias.
IV. RECOMENDACIONES
- Adoptar medidas de policultivos para mitigar el impacto ambiental negativo del cultivo de
“concha de abanico” en la bahía de Samanco.
V. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
Alva, J., J. Arenas., O. Galindo & D. Flores. 2002. Cultivo de “concha de abanico” Argopecten
purpuratus. ABPAMG – BIOFOR. 86p
Bartoli M., D. Nizzoli, P. Viaroli, E. Turolla, G. Castaldelli, E. Fano & R. Rossi. 2001. Impact of
Tapes philippinarum farming on nutrient dynamics and benthic respiration in the Sacca di Goro.
Hydrobiologia. 455(1-3).
Chamberlain, J., T. Fernandes, P. Read, T. Nickell, & I. Davies. 2001. Impacts of biodeposits
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Journal of Marine Science 58: 411-416.