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Los elementos de la relación obligatoria – Messineo Francesco

A. Los sujetos
Los sujetos deben ser al menos dos: deudor y acreedor. Los sujetos son determinados,
desde el momento en que nace la obligación, pero también se constituye si uno de los
de los sujetos es indeterminado, siempre que en la misma relación obligatoria estén
contenidos los elementos para determinarla.
Ejemplo: las obligaciones ambulatorias, las obligaciones de título de crédito, las
obligaciones de promesa al público, venta de transportes y el seguro “por cuenta a quien
le corresponda”
Los sujetos de la obligación pueden ser más de dos, tanto desde el punto de vista pasivo
como el punto de vista activo. Junto al acreedor puede existir el adiectus solucionis
causa, junto al deudor puede haber un tercero (responsable) dador de hipoteca o
prenda.
De ordinario la persona que es acreedor coincide lo que suele llamarse sujeto del interés
y sujeto de la voluntad. Pero puede existir que alguien ejercicio el derecho de crédito en
interés de otro. Lo mismo ocurre en el lado debitorio, mientras que en ordinario quien
cumple es el deudor en interés propio, puede ocurrir que cumpla otro por él
(cumplimiento de la obligación ajena.
B. El deber del deudor
El llamado deber de prestación expresa el hecho de que el deudor está obligado al
cumplimiento y el acreedor debe valerse del conjunto de los medios puestos a su
disposición para conseguir igualmente el contenido de la obligación, o su equivalente en
caso de incumplimiento. El estar obligado contiene una significado de naturaleza
patrimonial. La limitación de la liberta psíquica del deudor lo induce a cumplir con la
obligación.
C. El poder del acreedor
Jurídicamente el acreedor adquiere un poder: exigir la prestación y en el incumplimiento
de esta de ejercitar acción sobre el patrimonio del deudor. El derecho de crédito es
actual: ene l sentido que, aun no esté vencido todavía, se halla ya en el patrimonio del
acreedor, salvo su realización. Se dan figuras de créditos futuros siempre que exista en
acto una relación jurídica de la que se pueda derivar y encuentre su propio origen.
D. El objeto de la obligación
Según el autor se prefiere distinguir entre objeto y contenido de la obligación. El objeto
es aquello sobre lo que se exterioriza el derecho del acreedor, o aquello que se refiere
el contenido del derecho de crédito.
El objeto de la prestación es de ordinario una cosa. Existen, sin embargo, obligaciones
sin cosa, pero no si objeto. Pueden ser objetos de la obligación de actividades humanas
y abstenciones e incluso sujetos dentro del limite de licitud.
La cosa constituye el objeto de la obligación pero no siempre ni necesariamente como
materia de enajenación, pueden ser de uso, goce o garantía. También la utilidad de la
cosa, los deberes relativos a la cosa o el valor de la cosa constituyen el objeto de la
obligación.
Son objeto idóneo las cosas presentes y futuras; sin embargo, deben tratarse de cosas
que estén en el comercio. También la cosa ajena (a veces) Puede ocurrir que los objetos
de la obligación sean varios.
Obligación de género y especie
Se llaman obligaciones de género a las que tiene por obligación a un género o sea una
cantidad de cosas que se toman en consideración o se designan con referencia a su
pertenecía a un género. La obligación de género tiene hasta el momento en que sea
cumplido un objeto que es indeterminado en su individualidad. El riesgo del parecimiento
es a cargo del deudor mientras que las cosas no sean separadas del género que forman
parte
Obligaciones de especia son las que tengan por objeto una o varias cosas que son
determinadas. El riesgo de padecimiento es a cargo del acreedor porque la cosa entra
inmediatamente a su patrimonio
Los intereses
Los intereses que son un caso de frutos civiles consisten en una suma debida por el
acreedor o a título de resarcimiento en el retardo de la obligación pecuniaria o a título
de compensación, o sea de indemnización por goce.
Los interese son legales contenido en la tasa o medida que la ley fija o convencionales
cuando interviene la voluntad de las partes. Cuando los intereses exceden la medida
legal se denominan interés usuarios
Intereses sobre intereses
Se da cuando interés ya vencidos se convierten en bien capital y sean susceptibles de
producir intereses a su vez. Esta posibilidad depende de una demanda judicial o una
convención posterior sobre el vencimiento de intereses; y presupone que se trate de
interés debidos por lo menos de seis meses.
SUJETO ACTIVO Y SUJETO PASIVO
Es forzoso que exista en toda obligación un sujeto activo y un sujeto pasivo. Todo sujeto
de derecho está en condiciones de ser titular de crédito, aunque no lo ejercite por si
mismo, según ocurre para los incapaces
El acreedor puede ser único como pueden ser varios puedan exigir la prestación, puede
corresponder esta facultad indistintamente o servir para una división de titulares. La
indeterminación del acreedor debe cesar en el momento de cumplirse la prestación.
Objeto
La prestación se entiendo a todo en cuento pueda formar el contenido de la categoría
jurídica. Dicha palabra esta utilizada en las fuentes con un sentido limitado. “Prestare
significaba para los romanos entregar un objeto con el propósito distinto de constituir
sobre él derechos reales, como realizar un arrendamiento, comodato, lo mismo para
establecer un deposito. Para constituir derechos reales se decía era un “dare”, “facere”
y “non facere” concernían a hechos y omisiones.
Existen problemas en la terminología como lo señala Windsched entendiéndose al
objeto como voluntad del deudor, la cosa que en definitiva se procura el acreedor en
consecuencia del acto exigible, la “finalidad” y la “prestación” en cuanto a lo que puede
exigirse a consecuencia del derecho creditorio.
Caracteres, difieren los autores en los requisitos que han de concurrir para una
prestación eficaz

 Posibilidad: no se debe compeler a nadie para que ejecute lo imposible


 Licitud: debe ajustarse a los preceptos vigentes, como a la moral y a las buenas
costumbres
 Determinación: el objeto puede no aparecer formado el nexo, pero debe estarlo
en el momento de la exigibilidad y de su cumplimiento
 Coercibilidad: el carácter compulsivo
 Interés: según la doctrina contemporánea no es de menester que sea pecuniario,
con tal que encuadre con lo legítimo
Valor patrimonial: Los autores sostienen un postulado que la prestación debe cubrir
siempre un valor patrimonial. Para ello bastaba con atribuir a los derechos creditorios el
papel de una rama dentro de los bienes; de suerte que las prestaciones de otras índoles
entraran en lo moral o en el derecho de familia. De acuerdo con Gottingen el ser humano
no obedece solo a móviles pecuniarios, ni el derecho civil ampara solo el patrimonio, de
suerte que cuando lesionan los anhelos, o los afectos, debe también existir una manera
de reparar el daño. Existe preponderancia en el elemento patrimonial de los derechos
creditorios, y aun dentro de los tratos entre los hombres, no impiden que jueguen
sentimientos de otra índole.
Prestaciones excluidas:
Las relaciones de índole meramente mundano: se dan en el plano del trato corriente.
Nunca es sancionado de carácter civil, aunque sí recibe sanciones represalias sociales
Las de mera complacencia o amistad: no determina un vínculo susceptible de ejecución
compulsiva, ni una demanda de resarcimiento.
Cuando falta interés en quien recibe la promesa: el profesional ante el incumplimiento
del consejo retira la asistencia o el patrocinio.

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