DUELOS O SÍNTOMAS DE LA ADOLESCENCIA NORMAL SEGÚN ARMINDA
ARBERASTURY:
Arminda Arberastury plantea que la adolescencia presenta una serie de
síntomas o duelos que normalmente deberían aparecer en la adolescencia, para volverse ésta, normal. Los presenta en diez duelos que se dividen en: 1) búsqueda de sí mismo y de la identidad; 2) tendencia grupal; 3)necesidad de intelectualizar y fantasear; 4) crisis religiosas que pueden ir desde el ateísmo más intransigente hasta el misticismo más fervoroso; 5) desubicación temporal, en donde el pensamiento adquiere las características del pensamiento primario; 6) evolución sexual manifiesta que va desde el autoerotismo hasta la heterosexualidad genital adulta; 7) actitud social reivindicadora con tendencias anti o asociales de diversa intensidad; 8) contradicciones sucesivas en todas las manifestaciones de la conducta, dominada por la acción, que constituye la forma de expresión conceptual más típica de este período de la vida; 9) una separación progresiva de los padres, y 10) constantes fluctuaciones del humor y del estado de ánimo. 1-BÚSQUEDA DE SÍ MISMO Y DE LA IDENTIDAD: El adolescente buscar ser individual tanto biológicamente como socialmente, por lo tanto debe de encontrar su identidad. El no encontrar una identidad en algunos adolescentes puede llevar a adquirir una identidad negativa (como pandilleros o adictos a drogas), porque antes de no tener ninguna identidad es preferible tener una así, piensan ellos. La identidad adolescente está caracterizada por ciertas identidades que pueden irse dando durante el cambio y principalmente a causa de la separación de sus padres: las identidades transitorias son las adoptadas durante un cierto período, como por ejemplo el lapso de machismo en el varón o de la precoz seducción histérica en la niña (querer llamar la atención de los varones); las identidades ocasionales son las que se dan frente a situaciones nuevas, como por ejemplo en el primer encuentro con una pareja, el primer baile, etc., y las identidades circunstanciales son las que conducen a identidades parciales transitorias que suelen confundir al adulto, sorprendido a veces ante los cambios en la conducta de un mismo adolescente que recurre a este tipo de identidad como por ejemplo, cuando el padre ve a su hijo adolescente, de acuerdo a como lo ven en el colegio, en el club, etc., y no como él habitualmente lo ve en su hogar, y en su relación con él mismo. Una buena relación o una buena interiorización de los cambios que se están dando van a dar como resultado una buena relación con el medio que rodea al adolescente. 2-TENDENCIA GRUPAL: En la búsqueda de la uniformidad el adolescente suele adherirse a grupos de forma muy arraigada; el adolescente encuentra en el grupo al que pertenece una identidad, unos seres que siente como sus elementos más similares y cercanos a él, incluso se siente más parte del propio grupo que de su familia, siente más cercanos a sus amigos que a sus padres. La dependencia que se tenía de sus padres se transfiere al grupo; el grupo constituye así la transición necesaria en el mundo externo para lograr la individuación adulta. Después de pasar por la experiencia grupal, el individuo podrá empezar a separarse de la “barra” y asumir su identidad adulta. El adolescente va a buscar a quien someterse en su grupo, es decir, va a buscar un líder al cuál obedecer que representaría a los padres, si no lo encuentra, el mismo se convierte en el líder del grupo. 3-NECESIDAD DE INTELECTUALIZAR Y FANTASEAR: El adolescente se encuentra ante un sentimiento de frustración por la pérdida del cuerpo infantil, a los padres y al rol que cumplía; frente a dicha pérdida, el individuo empieza a crear mecanismos de defensa interiores como el fantaseo (imaginar cosas, fantasear con historias de amor, etc.) y la intelectualización, que se refiere a la canalización de ese dolor en algo productivo como por ejemplo el centrarse en el estudio (son los clásicos adolescentes que saben mucho sobre una materia, es decir, son eficientes en el estudio), en la creación de obras artísticas o desarrollar interés por algún tipo de ideología política, entre otros. La función del fantaseo es mantener al ello (instinto) dentro de ciertos límites; la función de la intelectualización es la de canalizar los fenómenos instintivos en algo ideativo, creativo, para ser más fáciles de dominar y ser accesibles a la conciencia. Todo esto permite un reajuste emocional para el individuo, y teniendo una buena relación con los objetos interiores (de lo que se habló anteriormente) es posible que se forje una personalidad satisfactoria. En este período es en el cual surgen los grandes movimientos artísticos, surgen los poetas, los pintores, los grandes movimientos políticos o revolucionarios ya que se fortalece la parte intelectual- creativa del individuo. 4-LAS CRISIS RELIGIOSAS: El adolescente frente a la etapa de cambios que sufre, y en la búsqueda de su verdadero yo puede experimentar sensaciones de extremo ateísmo o fervoroso misticismo (creyente fervoroso); no encuentra una posición media e incluso puede fluctuar entre una y otra posición, sin saber qué es lo que realmente quiere. Luego de superada la adolescencia es probable que encuentre un punto más flexible además de inclinarse por alguna de las dos cosas quizá. 5-DESUBICACIÓN TEMPORAL: El adolescente no logra tener una percepción exacta del tiempo, puede ver cosas cercanas como muy lejanas o por el contrario, cosas muy lejanas como fenómenos a punto de suceder; por ejemplo, un adolescente que tiene un examen en dos días lo puede ver lejos, como que todavía queda tiempo para estudiar; otro ejemplo es cuando el individuo tiene una fiesta en dos meses, pero se preocupa por la ropa y demás detalles como si la fiesta estuviera por suceder ya. 6-EVOLUCIÓN SEXUAL DESDE EL AUTOEROTISMO HASTA LA HETEROSEXUALIDAD: El pasaje del adolescente por períodos de fluctuación entre la homosexualidad y la heterosexualidad, procesos masturbatorios, entre otros, constituyen la evolución sexual de la persona hasta llegar a un período en el que se estabiliza y toma las relaciones genitales como actos reproductivos responsables, es decir, la persona que no es responsable en cuanto a las relaciones genitales, puede que todavía no haya madurado sexualmente y aún permanezca adolescente en este sentido. El fenómeno que más se da, y, el que caracteriza a este síntoma (duelo 6), es el de constante pasar de actividades genitales con otras personas y actividades de tipo masturbatorio, que constituyen un proceso de maduración; es como todo lo que caracteriza a la adolescencia, un constante soy una cosa y soy la otra, una constante duda, cambio, dado que se debe de pasar de un estado a otro; la pérdida de la bisexualidad infantil genera un sentimiento doloroso en el adolescente que lo canaliza con la masturbación, también se puede ver actividades de tipo homosexual, muy características de esta etapa, que, pueden fijarse de esta forma (es decir, la persona en un futuro es homosexual) o simplemente sea una etapa de exploración que en un futuro desaparezcan (la persona en un futuro es heterosexual). También aparecen las fantasías, en el hombre de penetrar y en las mujeres de ser penetradas, que posteriormente será el modelo que como adultos van a adoptar en su vida. La fase exploratoria en esta etapa es muy característica, que se da gracias a la curiosidad sexual, que generalmente lleva a los juegos de contacto físico, las constantes peleas violentas (que se dan por una necesidad de tocarse), el darse abrazos, andar de la mano, sentarse en la falda entre otras cosas (que se da en adolescentes mujeres entre edades aprox. de 13-15 años). 7-ACTITUD SOCIAL REIVINDICATORIA: No toda la adolescencia depende del adolescente mismo, si no que depende del contexto, incluyendo los padres; tantos los padres del adolescente como los demás adultos ven al adolescente como una amenaza ya que en un futuro los va a sustituir, lo ¨marginan¨ mediante estereotipos. El adolescente necesita libertad, y puede liberarse del súper yo (todo los límites que se le ponen) mediante rebeldía (hacia sí mismo). Cambia la relación con los padres, y ese cambio le provoca dolor ya que pierde la relación que tenía con ellos; cambia la visión idealizada de los padres, cambia esa modalidad y se da cuenta de que ellos también se equivocan, los ve como un factor negativo, como que lo único que hacen son cosas malas contra él, posteriormente esta relación se estabiliza y se da cuenta de las cosas buenas de los padres además de los errores, es decir, los empieza a ver como personas más cercanas ya que son más similares a él, y empieza a entender los comportamientos y actitudes que éstos tienen. 8- CONTRADICCIONES SUCESIVAS EN TODAS LAS MANIFESTACIONES DE LA CONDUCTA: Se caracteriza por una bipolaridad en la conducta de los adolescentes; un ir y venir en la conducta, no es normal una actitud lineal, una actitud que siempre es la misma; en cambio, lo normal es que el adolescente esté siempre cambiante, con períodos de tranquilidad y períodos agresivos, períodos de pasividad y períodos muy activos. El adolescente ¨bueno¨ en la clase, tiene que tener períodos en los cuales se ¨libera¨, no es esperado un adolescente lineal, que siempre se comporte igual, la normalidad en un adolescente es el constante cambio en su actitud. 9- SEPARACIÓN PROGRESIVA DE LOS PADRES: El adolescente empieza a ver a los padres como seres sexuados, que tienen relaciones coitales como cualquier pareja; lo reconoce de forma progresiva. Aparece la ambivalencia dual, los padres tratan de ponerse en el lugar del adolescente para acompañarlo en el proceso; ambas partes realizan el duelo de separación; los padres también tratan de entender que sus hijos son seres sexuados. Necesitan encontrar una figura estable, si no la encuentran en los padres, la buscan en otra parte. Comienzan las fantasías con los profesores por ejemplo, buscando la imagen de los padres. 10- CONSTANTES FLUCTUANTES DEL HUMOR Y ESTADOS DE ÁNIMO: Tiene constantes cambios de buen y mal humor; sentimientos de éxito y de gloria; sentimiento de depresión y de alegría; a veces el adolescente se vuelve introvertido y a veces extrovertido, el lugar seguro a veces para él, es dentro de sí mismo, es por dicha razón que el individuo se encierre ciertas veces con momentos de soledad.