Você está na página 1de 1

LA REPRESENTACIÓN DE UNA FILOSOFÍA POLÍTICA COMUNAL

DE LA NACIÓN AYMARA
IVAN RODRIGO USNAYO LIMACHI
Una de las representaciones que muchas veces obviamos al realizar una
interpretación son las del ámbito rural. Significa para el analista entrar en un
mundo muy diverso, un campo que no se mueve al ritmo de lo urbano, es decir de
la ciudad. Esto nos lleva a conocer características que representan un sentido, un
modo de vida y una realidad actual que se está viviendo en lugares donde habitan
diferentes pueblos.
El análisis de realidades en los pueblos que se encuentran en el territorio boliviano
es muy diverso. Tiene diferentes horizontes y eso constituye diversas formas de
interpretarlas. Una de ellas es a través del conocimiento de su historia, que ha
marcado varios puntos de referencia para el análisis de lo político, cultural y
económico. Otra manera de análisis es también a través del conocimiento de la
cultura en su profundidad y situarse en todos los aspectos que maneja la
comunidad.
El manejo del poder tiene que ver con el sentido más político, este sentido puede
ser representado por una variedad de autores que definen el poder como una
forma de dominación, otras como formas de vida y otras como un diario vivir.
En las comunidades aymaras, la representación del poder se simboliza con el
diario vivir. Pero, primero se constituye en una filosofía de pensamiento propio del
aymara. Esta filosofía representa el territorio donde vive, y las formas de vida que
lleva y la manera que tiene de hacer frente a la realidad de la ciudad que son
catalogadas como reproducciones de la colonia.
El ejercicio del poder en las comunidades, en especial en el mundo aymara se
determina en su pensamiento. Es decir, como este pensamiento se mueve en el
manejo de la política y como va desarrollándose en el ejercicio del poder dentro de
sus miembros quienes la conforman.
Las formas de llegar al poder en las comunidades están relacionadas con el diario
vivir de sus integrantes. Este diario vivir no es algo del día, es decir del hoy; es
una construcción que ha ido marcada durante muchos años de su historia.
Asimismo, esta construcción ha tenido que ser mantenida por los miembros de la
comunidad a través de las rotaciones en el manejo del poder, dejando atrás el
sistema tradicional de representación.
Esta acción ha costado miles de muertes y mucho derrame de sangre frente a una
imposición colonial, que aun quiere acabar con todas formas de vida que llevan los
pueblos. El ayni, la phayna y otras formas de representar el poder se mantiene
firmes en algunas comunidades de nuestro país.

Você também pode gostar