Módulo I

Clase lI. Competencias, habilidades

y conocimientos mínimos
del emprendedor
Lo que necesitas saber
Perfil del emprendedor

Nadie nace siendo emprendedor, a ser emprendedor se aprende. Por tanto, cada
caso de emprendimiento es único en sí mismo, sin embargo, existen
competencias, habilidades y conocimientos básicos que caracterizan a todos los
emprendedores exitosos.

Competencias del emprendedor

El concepto de competencia es multidimensional e incluye distintos niveles de

aptitud y conocimiento práctico. Estos son: cómo saber (datos, conceptos,
conocimientos), saber hacer (habilidades, destrezas, métodos de actuación),
saber ser (actitudes y valores que guían el comportamiento) y saber estar
(capacidades relacionadas con la comunicación interpersonal y el trabajo
cooperativo). En otras palabras, la competencia es la capacidad de ejercer un
buen desempeño en contextos complejos y auténticos, es decir, que se posee la
capacidad de lograr bien algo. Por tanto, una competencia implica la integración y
activación de conocimientos, habilidades, destrezas, actitudes y valores.

En los distintos estudios que hemos realizado, encontramos que hay al menos
diez competencias comunes entre los emprendedores exitosos de origen
mexicano. Éstas son:

1. Crear motivación e inspiración: es la competencia que te permite hacer

que las personas colaboren en torno a una idea o un objetivo común, más
allá de una mera retribución económica. Los emprendedores son referencia
y ejemplo de lo que se quiere lograr, por tal, son capaces de generar
equipos multidisciplinarios de alto desempeño y comprometidos con un el
objetivo común.

2. Tolerancia a la frustración y manejo de la adversidad: el fracaso

simplemente no es una opción. La adversidad y las dificultades suelen ser
oportunidades de aprendizaje y mejora.
 Los emprendedores exitosos no se dan por vencidos, pero tampoco son
personas necias o inflexibles. Son persistentes en sus sueños y
ambiciones.

3. Crean y comparten una visión: los emprendedores tienen un sentido de

urgencia permanente, hacen que las personas compartan esa necesidad de
acción y van creando metas específicas de corto y largo plazo que puedan
llegar a ser cumplidas permiten llegar a cumplirlas.

4. Liderazgo: no se trata de hacer que otras personas obedezcan al

emprendedor; eso lo hace un dirigente, alguien con poder. El emprendedor
tiene una capacidad extraordinaria para hacer que todas las personas a su
alrededor asuman su propia responsabilidad en el trabajo común y den lo
mejor de sí mismos.

5. Creatividad y capacidad de innovación: de forma constante el

emprendedor exitoso encuentra nuevas formas de hacer las cosas a menor
costo o de mejor manera. Suelen ser personas que conjuntan eficacia
(cumplir con el objetivo) y eficiencia (hacer las cosas al menor costo
posible, haciendo un uso correcto de los recursos) y encuentran soluciones
como comúnmente se dice, fuera de la caja.

6. Capacidad de aprendizaje: el emprendedor exitoso constantemente está

en busca de nuevos conocimientos, tal vez lo hace de una forma
desordenada, pero al final, como Steve Jobs, es capaz de unir los puntos.

7. Trabajo en equipo: el emprendedor no es un llanero solitario. Es un

coordinador natural de un equipo de alto desempeño, multidisciplinario y
plural.

La capacidad de coordinar y liderar un equipo de alto desempeño es quizá

la competencia más relevante del emprendedor exitoso.
 8. Planeación y organización: el emprendedor sabe lo que quiere lograr, la
forma en que lo va a hacer y es capaz de estructurar sus recursos. Además
su tiempo lo organiza en metas específicas de corto y largo plazo, flexibles
y dinámicas.

9. Comunicador extraordinario: el emprendedor exitoso es una persona

central, que dialoga permanentemente con proveedores, socios,
inversionistas, clientes y diversos involucrados. Él mismo es el mensaje.

10. Negociador nato: el emprendedor crea acuerdos en los el que las partes
no se sienten excluidas, ni derrotadas y generan la confianza para poder
seguir interactuando. El emprendedor se concentra no en un trato o evento,
sino en la creación de relaciones duraderas.

Estas son las diez competencias que hemos identificado hallado presentes en
todos los emprendedores con los que hemos interactuado. Todas ellas se
aprenden, ninguna es innata a la persona. Pero hay una adicional, extraordinaria,
con la que todos empiezan: la capacidad de ser dueños de su tiempo, de su
agenda.

El tiempo es el recurso más escaso, el bien más preciado del emprendedor, por lo
que el emprendedor es, ante todo, dueño de su agenda: empieza por
administrarse a sí mismo; sabe en dónde y cuándo actuar de forma personal.

No te preocupes si sientes que no posees todas las características no todas las

tienes: cada una de ellas pueden ser desarrollarlas y este curso es el primer paso
para ello.

Habilidades socioemocionales, no cognitivas

Las habilidades socioemocionales permiten al emprendedor exitoso identificar y

regular sus emociones, sentir y mostrar empatía por los demás, establecer y
desarrollar relaciones positivas, definir y alcanzar metas personales, además de
tomar decisiones asertivas y responsables. Éstas son las habilidades para la vida
que ayudan al emprendedor a regularse como persona, a interactuar positiva y
proactivamente con los demás y resolver así, problemas complejos con creatividad
y flexibilidad. Hay varias teorías que desde la psicología, la economía y la
pedagogía han descubierto la relevancia de estas habilidades. Las cinco más
relevantes son:

1.- Locus de control: la persona percibe que los eventos ocurren principalmente
como efecto de sus propias acciones, es decir, la percepción de que el
emprendedor no es controlado por su entorno.

2.- Mindset: concepto desarrollado por la profesora Carol Dweck (2006) de la

Universidad de Stanford, éste establece que existen dos tipos de mentalidades:
una fija y otra de crecimiento. El emprendedor exitoso suele tener una mentalidad
de crecimiento, es decir, que cree que la mayoría de sus habilidades se pueden
desarrollar a través de la dedicación y el trabajo duro como punto de partida. Aquí,
hay un amor por el aprendizaje y la recuperación ante la adversidad.

3.- Grit o tenacidad: muchos lo conocen también como psicología positiva, pero
esencialmente es la perseverancia y pasión para desarrollar metas a largo plazo.
Este concepto es desarrollado por la profesora Angela Duckworth (2016) de la
Universidad de Pensylvannia, ella encontró que la correlación entre la
autodisciplina y los logros era dos veces mayor que la correlación entre el
coeficiente intelectual y los logros. Es decir, pasión y perseverancia es mejor que
inteligencia y riqueza.

4.- Rasgos de personalidad: en psicología, el modelo de los cinco grandes es un

modelo que analiza cinco factores o dimensiones de personalidad. Algunos
autores consideran que existen más de cinco dimensiones, pero este modelo es
extraordinariamente sencillo.
Los cinco factores son: apertura a nuevas experiencias, responsabilidad o
conciencia, extroversión, agradabilidad y neuroticismo. Todos tenemos en mayor o
menor medida estos rasgos de personalidad, pero en el emprendedor exitoso
resultan particularmente relevantes los rasgos de apertura a nuevas experiencias
y de conciencia. Este modelo tiene tanta importancia que incluso el premio Nobel
de Economía James Heckman lo ha utilizado para explicar el éxito académico.

5.- Proactividad: es la capacidad que tienen las personas para generar ideas,
acciones y sensaciones por sí mismas, sin necesidad de una referencia externa.
Se requiere audacia y confianza en sí mismo para ser proactivo pues implica que
no se necesita de una orden o aliciente externo para actuar.

Estos cinco ejemplos de habilidades socioemocionales pueden servirte para

conocerte mejor. Ninguna es condicionante de éxito o fracaso, pero suelen
encontrarse en los emprendedores que logran cumplir sus objetivos, por eso, te
hemos incluido un cuestionario de autodiagnóstico con ellas, así como una breve
explicación de tus resultados.

Conocimientos técnicos básicos

Para maximizar las posibilidades de éxito y minimizar los riesgos al momento de

emprender, hemos visto que es extraordinariamente útil y aconsejable que
cuentes con un conocimiento profundo de tu producto y/o servicio y del mercado
en el que te piensas desarrollar: tú no eres el que más sabe, sino el que sabe en
donde están las oportunidades de crecimiento y de innovación. Adicionalmente,
hemos visto que es importante que cuentes con conocimientos mínimos generales
en cinco rubros, todos ellos desarrollados en el presente curso de forma general:

1. Gestión de proyectos y habilidad directiva: un proyecto de

emprendimiento inicia siendo algo tan básico como un plan de negocios y
se vuelve una empresa.
 2. Elementos básicos de finanzas: su importancia radica en la necesidad de
administrar de manera eficaz y eficiente los recursos económicos con que
se cuenta. Recuerda que estos no son ilimitados.

3. Diseño del plan de negocios: con esto podrás identificar los fundamentos
mediante los cuales debes realizar elecciones estratégicas para la creación,
captura y distribución del valor del producto y/o servicio que vas a ofrecer.

4. Leyes y trámites para iniciar tu negocio: recuerda que todo lo que haces
está dentro de un marco legal, por lo tanto, resulta importante tener
conocimiento de los procedimientos que debes seguir para no incurrir en
actos ilegales.

5. Comercialización: gran parte del éxito depende de la forma de vender,

debes lograr que el público desee y encuentre ventajas en lo que ofreces,
es la única forma de que tu producto o servicio sea adquirido.

Todos estos conocimientos puedes ponerlos en práctica en la elaboración de un

modelo de negocios, éste debe cubrir cuatro áreas básicas: clientes, oferta,
infraestructura, y viabilidad económica. En el módulo cuatro, te explicáremos con
mayor detalle cómo hacerlo.

Hasta ahora, hemos hecho un breve recuento de las competencias, habilidades y

conocimientos básicos comunes en todos los emprendedores exitosos. ¿Hay algo
más que esté presente en todos ellos?, sí, y es muy importante. En los
emprendedores exitosos hay otras dos características que debes tener presentes:
la capacidad de creación y uso creativo de sus redes personales; y la
existencia de un mentor.

Los emprendedores exitosos son creadores permanentes de redes: son personas

vértices, las aristas que unen nodos que usualmente no se conectarían, el fin es
crear redes de alto valor. Éstas son las que los hacen únicos e indispensables en
el ecosistema de emprendedores, pues no es que sólo ellos tengan los contactos,
es que sólo ellos saben cómo utilizarlos en todo su potencial y cómo ponerlos en
acción.

El emprendedor muchas veces está actuando en altos niveles de complejidad y

con constante estrés, frecuentemente requiere consejos y ayuda, por eso, los
emprendedores exitosos recurren a mentores. El mentor es una persona a la que
respetan, quien tiene experiencia o conocimientos relevantes que pueden resultar
útiles para una idea de negocio, es importante que él no esté dentro de la
organización, así podrá dar una perspectiva amplia.

El mentor tiene una relación personal con el emprendedor, a veces de amistad,

pero sobre todo, de credibilidad, admiración y de respeto profesional. La existencia
del mentor le permite al emprendedor tener una voz que lo acompaña
estratégicamente y puede ser un miembro de la familia, un ex jefe o un antiguo
profesor, o a veces, sólo un amigo con situaciones similares.

En la sesión anterior, hicimos tres preguntas para elaborar un primer borrador de

la propuesta de valor: ¿quién es mi cliente?, ¿qué necesidad satisfago? y ¿cuál es
el precio relativo de mi producto o servicio?

En el proceso de elaborar tu propuesta de valor y eventualmente, tu plan de

negocios, el profesor Bill Aulet (2015) del Tecnológico de Massachusetts tiene seis
preguntas muy sencillas que te permiten ir mejorando tu propuesta de valor y tener
los primeros elementos de un plan de negocios.

Estas seis preguntas son:

1.- ¿Quién es tu cliente?, no le vas a vender a todos, ni a cualquiera. El cliente

es la persona que va a adquirir tu producto y/o servicio a un precio mayor del que
te cuesta producirlo porque encuentra valor en él, es decir, porque obtiene un
beneficio personal mayor a lo que paga por otro.
2.- ¿Qué puedes hacer por tu cliente?, es decir, qué problema le solucionas y
por qué está dispuesto a pagar.

3.- ¿Cómo adquiere tu cliente tu producto?, no sólo cómo lo compra, sino cómo
se informa, contra quién compara, en dónde y cómo lo vuelve suyo. Es decir,
debes conocer el proceso que lleva a la adquisición de tu producto y/o servicio. No
basta con hacer algo nuevo, mejor o más barato, hay que ponerlo al alcance de tu
cliente.

4.- ¿Cómo obtienes utilidades de tu producto?, adquirir un cliente o que

vendas tu producto no necesariamente implica utilidades. También debes conocer
tu estructura de costos, hacer un análisis de competencia y de posibles sustitutos
y complementos a tu producto, así como tener una estrategia de fijación de
precios.

5.- ¿Cómo diseñas y produces tu producto?, esto es cómo logras que tu

producto o servicio sea viable en relación con tu cliente, es decir, cómo haces que
éste tenga un precio en el que tú obtienes utilidades y tu cliente reconoce su valor
al precio adquirido.

6.- ¿Cómo haces crecer tu negocio?, piensa que tú estás aquí para quedarte, el
largo plazo es importante.
Bibliografía

Bill, A. (2015). La disciplina de emprender: 24 pasos para lanzar una startup

triunfante. España: LID Editorial. Colección: Acción Empresarial.

Duckworth, A. (2016). Grit: the power of passion and perseverance. New York:
Scribner.

Dweck, C. (2016). Mindset: The new psychology of success. New York: Ballantine
Books.
Módulo I
Clase lI. Competencias, habilidades
y conocimientos mínimos
del emprendedor
Lo que necesitas saber

- Handout
Perfil del emprendedor

Nadie nace siendo emprendedor, a ser emprendedor se aprende. Por tanto, cada
caso de emprendimiento es único en sí mismo, sin embargo, existen
competencias, habilidades y conocimientos básicos que caracterizan a todos los
emprendedores exitosos.

Competencias del emprendedor

El concepto de competencia es multidimensional e incluye distintos niveles de

aptitud y conocimiento práctico. Estos son: cómo saber (datos, conceptos,
conocimientos), saber hacer (habilidades, destrezas, métodos de actuación),
saber ser (actitudes y valores que guían el comportamiento) y saber estar
(capacidades relacionadas con la comunicación interpersonal y el trabajo
cooperativo). En otras palabras, la competencia es la capacidad de ejercer un
buen desempeño en contextos complejos y auténticos, es decir, que se posee la
capacidad de lograr bien algo. Por tanto, una competencia implica la integración y
activación de conocimientos, habilidades, destrezas, actitudes y valores.

En los distintos estudios que hemos realizado, encontramos que hay al menos
diez competencias comunes entre los emprendedores exitosos de origen
mexicano. Éstas son:

1. Crear motivación e inspiración: es la competencia que te permite hacer

que las personas colaboren en torno a una idea o un objetivo común, más
allá de una mera retribución económica

2. Tolerancia a la frustración y manejo de la adversidad: el fracaso

simplemente no es una opción. La adversidad y las dificultades suelen ser
oportunidades de aprendizaje y mejora.

3. Crean y comparten una visión: los emprendedores tienen un sentido de

urgencia permanente, hacen que las personas compartan esa necesidad de
 acción y van creando metas específicas de corto y largo plazo que puedan
llegar a ser cumplidas permiten llegar a cumplirlas.

4. Liderazgo: no se trata de hacer que otras personas obedezcan al

emprendedor; eso lo hace un dirigente, alguien con poder. El emprendedor
tiene una capacidad extraordinaria para hacer que todas las personas a su
alrededor asuman su propia responsabilidad en el trabajo común y den lo
mejor de sí mismos.

5. Creatividad y capacidad de innovación: de forma constante el

emprendedor exitoso encuentra nuevas formas de hacer las cosas a menor
costo o de mejor manera. Suelen ser personas que conjuntan eficacia
(cumplir con el objetivo) y eficiencia (hacer las cosas al menor costo
posible, haciendo un uso correcto de los recursos) y encuentran soluciones
como comúnmente se dice, fuera de la caja.

6. Capacidad de aprendizaje: el emprendedor exitoso constantemente está

en busca de nuevos conocimientos, tal vez lo hace de una forma
desordenada, pero al final, como Steve Jobs, es capaz de unir los puntos.

7. Trabajo en equipo: el emprendedor no es un llanero solitario. Es un

coordinador natural de un equipo de alto desempeño, multidisciplinario y
plural.

La capacidad de coordinar y liderar un equipo de alto desempeño es quizá

la competencia más relevante del emprendedor exitoso.

8. Planeación y organización: el emprendedor sabe lo que quiere lograr, la

forma en que lo va a hacer y es capaz de estructurar sus recursos. Además
su tiempo lo organiza en metas específicas de corto y largo plazo, flexibles
y dinámicas.
 9. Comunicador extraordinario: el emprendedor exitoso es una persona
central, que dialoga permanentemente con proveedores, socios,
inversionistas, clientes y diversos involucrados. Él mismo es el mensaje.

10. Negociador nato: el emprendedor crea acuerdos en los el que las partes
no se sienten excluidas, ni derrotadas y generan la confianza para poder
seguir interactuando.

Estas son las diez competencias que hemos identificado hallado presentes en
todos los emprendedores con los que hemos interactuado. Todas ellas se
aprenden, ninguna es innata a la persona. Pero hay una adicional, extraordinaria,
con la que todos empiezan: la capacidad de ser dueños de su tiempo, de su
agenda.

Habilidades socioemocionales, no cognitivas

Las habilidades socioemocionales permiten al emprendedor exitoso identificar y

regular sus emociones, sentir y mostrar empatía por los demás, establecer y
desarrollar relaciones positivas, definir y alcanzar metas personales, además de
tomar decisiones asertivas y responsables.

Hay varias teorías que desde la psicología, la economía y la pedagogía han

descubierto la relevancia de estas habilidades. Las cinco más relevantes son:

1.- Locus de control: la persona percibe que los eventos ocurren principalmente
como efecto de sus propias acciones, es decir, la percepción de que el
emprendedor no es controlado por su entorno.

2.- Mindset: concepto desarrollado por la profesora Carol Dweck (2006) de la

Universidad de Stanford, éste establece que existen dos tipos de mentalidades:
una fija y otra de crecimiento. El emprendedor exitoso suele tener una mentalidad
de crecimiento, es decir, que cree que la mayoría de sus habilidades se pueden
desarrollar a través de la dedicación y el trabajo duro como punto de partida. Aquí,
hay un amor por el aprendizaje y la recuperación ante la adversidad.

3.- Grit o tenacidad: muchos lo conocen también como psicología positiva, pero
esencialmente es la perseverancia y pasión para desarrollar metas a largo plazo.

4.- Rasgos de personalidad: en psicología, el modelo de los cinco grandes es un

modelo que analiza cinco factores o dimensiones de personalidad. Algunos
autores consideran que existen más de cinco dimensiones, pero este modelo es
extraordinariamente sencillo.

Los cinco factores son: apertura a nuevas experiencias, responsabilidad o

conciencia, extroversión, agradabilidad y neuroticismo. Todos tenemos en mayor o
menor medida estos rasgos de personalidad, pero en el emprendedor exitoso
resultan particularmente relevantes los rasgos de apertura a nuevas experiencias
y de conciencia.

5.- Proactividad: es la capacidad que tienen las personas para generar ideas,
acciones y sensaciones por sí mismas, sin necesidad de una referencia externa.
Se requiere audacia y confianza en sí mismo para ser proactivo pues implica que
no se necesita de una orden o aliciente externo para actuar.

Conocimientos técnicos básicos

Para maximizar las posibilidades de éxito y minimizar los riesgos al momento de

emprender, hemos visto que es extraordinariamente útil y aconsejable que
cuentes con un conocimiento profundo de tu producto y/o servicio y del mercado
en el que te piensas desarrollar: tú no eres el que más sabe, sino el que sabe en
donde están las oportunidades de crecimiento y de innovación. Adicionalmente,
hemos visto que es importante que cuentes con conocimientos mínimos generales
en cinco rubros, todos ellos desarrollados en el presente curso de forma general:
 1. Gestión de proyectos y habilidad directiva: un proyecto de
emprendimiento inicia siendo algo tan básico como un plan de negocios y
se vuelve una empresa.

2. Elementos básicos de finanzas: su importancia radica en la necesidad de

administrar de manera eficaz y eficiente los recursos económicos con que
se cuenta. Recuerda que estos no son ilimitados.

3. Diseño del plan de negocios: con esto podrás identificar los fundamentos
mediante los cuales debes realizar elecciones estratégicas para la creación,
captura y distribución del valor del producto y/o servicio que vas a ofrecer.

4. Leyes y trámites para iniciar tu negocio: recuerda que todo lo que haces
está dentro de un marco legal, por lo tanto, resulta importante tener
conocimiento de los procedimientos que debes seguir para no incurrir en
actos ilegales.

5. Comercialización: gran parte del éxito depende de la forma de vender,

debes lograr que el público desee y encuentre ventajas en lo que ofreces,
es la única forma de que tu producto o servicio sea adquirido.

Hasta ahora, hemos hecho un breve recuento de las competencias, habilidades y

conocimientos básicos comunes en todos los emprendedores exitosos. ¿Hay algo
más que esté presente en todos ellos?, sí, y es muy importante. En los
emprendedores exitosos hay otras dos características que debes tener presentes:
la capacidad de creación y uso creativo de sus redes personales; y la
existencia de un mentor.