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Sri Parvathi Kumar. Conferencias en la Biblioteca Teosófica de Buenos Aires.

12,13
y 14 de Septiembre del 2003.

SEGUNDA CONFERENCIA.
Durante estos tres días, antes de la conferencia, se hacía un alineamiento de conciencia
comenzado por uno de los hermanos del servicio y continuado por P. Kumar donde, en
la apacible atmósfera del salón de conferencias, se entonaban mantras , himnos y
saludos, además de un silencio de quince minutos. La música sagrada y el aroma de los
sahumerios completaban una escena atemporal. Un marco perfecto para que Sri Kumar
vertiera la miel del genuino Conocimiento a los ávidos escuchas.
“Saludos fraternales de corazón a los hermanos y hermanas” .
En el Gita se nos dice que esencialmente existe en la Creación la Ley. Conocer la Ley es
una vía de esplendor y de paz.
La evolución es de lo denso a lo sutil, la involución de lo sutil a lo denso. Esto es parte
de la ley de Alternancia. Cuando el agua se evapora no es visible, pero no por ello
concluímos que el agua no existe. Todo tiene su estado de existencia. No existe la total
desaparición o la no existencia. Son simplemente cambios de estado.
Al despertar nos convertimos en conciencia. Esos pensamientos dan como resultado la
acción. Al dormir, lo que hemos creado durante el día cesa de existir para nosotros y nos
transportamos a una región más sutil.
Estamos familiarizados con este proceso, y nos parece lo más normal; pero este proceso
es análogo a otros procesos de manifestación e inmanifestación.
Mencioné el plano electrónico como el plano donde se desmanifestó el correo postal
ordinario. Igual los billetes en relación a los valores: las transacciones vía ordenador han
reemplazado a los billetes y monedas, todos fenómenos relacionados a la vibración de la
Era de Acuario.
El conducto entre el sueño y el despertar es llamado el conducto entre el cero positivo y
el cero negativo, una de las claves de esta Era de Acuario.
El manejo de las técnicas que se desprenden de este conocimiento debe estar centrado y
acorde con la Ley Cósmica Mayor, caso contrario, los resultados pueden ser nefastos.
Comprender la Ley y comportarse de acuerdo a ella es el salvoconducto en los distintos
planos. Si nos involucramos en actividades fuera de la Ley, podemos sufrir retrasos de
diversa gravedad.
Se dice que todos nosotros somos viajeros en el planeta. Vinimos a la Tierra a celebrar
un pic-nic... y nos quedamos apegados aquí. Nuestro origen es solar, y ese es también
nuestro destino.
La belleza no es para apegarse o poseer, sino para alegrarnos y disfrutar. Cuando
poseemos, somos poseídos. Así es la ley. Si mi mano toma algo, se aferra a ello y ya no
tengo disponibilidad de esa mano. Lo mismo ocurre con la energía .
Viajar sin equipaje sería más cómodo, o solo con lo estrictamente necesario.
El tercer capítulo del Bhagavad Gita dice que no dejemos de hacer, pero que no
tengamos el instinto de poseer.
Si hacemos en sintonía con la Ley, la Naturaleza se siente atraída hacia nosotros, y no al
revés. Es el camino de la libertad. Pero la posesión conspira contra la libertad.
Muchos grandes iniciados han sido un ejemplo de esplendor por su carencia de
posesiones. La gran energía ahorrada les permitió inspirar a otros, sanar a otros.
Una vez, Jesús caminaba por las orillas del Jordán acompañado por un discípulo que no
dejaba de hacerle preguntas, y el Maestro le enseñaba...
Hacia el mediodía, el discípulo comenzó a sentir hambre y le preguntó al Maestro qué
comerían. Jesús respondió: “mi alimento es espiritual. Al hablarte de sabiduría no siento
sed ni hambre. Pero puesto que tú tienes hambre, veremos qué nos ofrece la naturaleza”.
A lo lejos vieron un árbol con dos frutos. El discípulo quiso arrancar uno de los frutos,
pero Jesús cuestionó su actitud: -“¿acaso has regado ese árbol? - ¿lo has plantado o
protegido?” . “Es que tengo hambre” –dijo el discípulo - ...”y ahí hay un fruto...”.
“Esa no es la Ley” – repuso el Maestro . “Al menos, deberías pedirle permiso.
Pregúntale al árbol”. El discípulo dijo perplejo: - “yo no sé cómo hablarle al árbol”.
Jesús tocó el árbol y le propuso que si quería darles algo, el fruto cayera. Ambas frutas
cayeron.
Así es la Ley: querer extraer algo forzosamente produce bloqueos o desgracia.
“Observa cómo funciona toda la Creación”. “ El planeta funciona en beneficio de los
seres que saben cómo comportarse de manera correcta, para permitir la evolución de
toda la Vida”.
El sol da luz, el sol da vida...¿y qué compensación recibe de nosotros?.
El tercer capítulo del Bhagavad Gita nos habla de que hay dos modos de acción: uno
egoísta, que es una vía de apego; y otro altruista, basado en distribuir y compartir.
La función de congregar, poseer, acumular, es la función del polo negativo, y nos
mantiene en los centros más bajos de la conciencia.
El otro modo es trabajar para los demás, donde cuidamos y somos cuidados a medida
que ascendemos. Así, Jesús ascendió porque vivió en beneficio de los demás. Al igual
Moisés.
Para elevarnos y no quedar prisioneros del plano material debemos servir a los demás y
encarnar una energía altruista más que una egoísta. La ley es muy científica y precisa , y
hace que ,aquellos que dan , avancen más velozmente en su conciencia sutil.
Uno debe trabajar para los demás, desinteresadamente. Esa es la Ley.
Cuando el Creado creó toda esta Creación, Los seres le preguntaron: -“¿cómo quieres
que vivamos?” –“ ¿cómo podemos evitar las crisis y los problemas?” .
“Haced como yo hago” –dijo el Creador – “Yo creé todo para vuestro gozo”. “Por Amor
y Compasión he hecho todo esto para vosotros”. Esto dice también el tercer capítulo.
La consagración a trabajar por los demás es el sacrificio voluntario, y es lo que nos da
sutileza, libertad y alegría. Por el contrario, el egoísmo genera miedo y desconfianza.
La clave de una vida armoniosa es orientarla al servicio para con lo demás. Al trabajar
en beneficio de los demás, no te preocupes demasiado por los resultados. Tú sigue
haciendo. No te dividas entre la acción y el resultado de la acción. Una mente dividida
así no puede realizar plenamente su tarea. Concentra la mente en la acción, sin estar
pendiente del resultado.
Esto se aplica a muchas áreas. Por ejmplo, al estudio o al trabajo.
Lo importante es la profundidad que uno puede alcanzar mediante la actitud de
concentrar la energía.
Arjuna y otros cien estudiantes enfrentaron una prueba: debían disparar al ojo de una
figura de un pájaro ubicada en la rama de un árbol. A cada estudiante el maestro le
preguntaba: “¿qué ves?”. Y ellos contestaban –“el árbol”, -“¿qué más?” – “la rama”-
-“¿qué más?” – “el pájaro”- -“¿qué más?” – “el ojo del pájaro”... y el maestro no les
permitía disparar. Cuando le preguntó a Arjuna, el contestó –“el ojo del pájaro” .
-“¿No ves el pájaro?” –repuso el maestro. –“No”- “¿La rama?”. –“No”...-“¿el árbol?”.
“No. Solo veo el ojo del pájaro” – dijo Arjuna. El maestro entonces le permitió disparar
y la flecha dio en el blanco.
Uno debe trabajar disfrutando lo que hace, con alegría, sin dudar que la retribución
llegará.
Krishna dice: “goza de la acción. No te preocupes por el resultado”.
En la acción desinteresada está el gozo. La mayoría de la gente no conoce la alegría de
la acción. Su mente está escindida entre el pasado y el futuro, perdiendo la noción
objetiva del presente.
La vida entera de Krishna está llena de momentos en que el experimentaba una alegría
completa, y El se lo transmitía a los demás.
No intentar manipular nunca una acción, porque se pierde la virtud y la pureza. Esta es
la tercer clave: trabajar para los demás, actuar sin pensar en recompensa, y ser honestos
e íntegros. Esa es la ley.
El cuarto principio es que , cuando hagamos actos por los demás, sin esperar los
resultados y sin intentar manipular nada, se producirán grandes cosas…. Debemos una
vez más evitar el apego. Ese es un gran peligro respecto de la acción. Fascinarnos por lo
que surje de la recta acción es otra clase de apego, que debemos evitar.
Uno debe dedicarse plenamente a beneficiar a los demás.
“Arrojar el cuerpo alos buitres” quiere decir ofrecer todo como alimento para otros, sin
hacer distinciones de ninguna clase.
En el cuarto capítulo, el Señor habla de doce modos de utilización de lo material en
beneficio de los demás seres, hasta llegar a la plenitud.
Su cuerpo no es para sí, sus sentidos alertas por las necesidades de los demás, su mente
pensando cómo hacer el bien.
Si somos astrólogos, la gente viene para que la beneficiemos, igualmente si somos
sanadores. No se debe pedir nada a cambio, sino disfrutar de servir a otros.
Alguien así está en el mundo, pero no es del mundo.
El capítulo quinto del Bhagavad Gita habla de este tipo de la conciencia. Uno ha
superado el condicionamiento material simbolizado por el número cuatro. Es canal de
otra energía, creativa y vital.
Krishna dice a Arjona : -“ en todos los planos, yo no tengo obligación para contigo. El
gesto que tengo contigo lo hago porque beneficiar a otros es mi naturaleza”.
Así, aprendemos a recibir verticalmente, y adistribuir horizontalmente. Si recibiéramos
únicamente de modo horizontal, se construirían prisiones y la energía no fluiría.
La ley consiste en intentar dar más de lo que recibimos. Los círculos se ensanchan y
expanden, caso contrario, somos aprisionados. Esto está simbolizado por el principio de
Saturno, y en directa relación con el tipo de karma al que estamos sometidos.
Cuando uno beneficia a otros, la gente responde con amor. La gente debería comprender
que la verdadera riqueza es el ser humano, no el dinero. El amor y el afecto son el valor
supremo. Así llega una vida de libertad. Una vida de amistad recíproca. Esa es la
libertad que se describe en el quinto capítulo. Sannyasa es trabajar en el mundo, pero no
estar oprimidos por él. El quinto capítulo es sobre el desapego, sobre el no estar
apegado. El cuarto hablaba sobre la alegría de ayudar a los demás, el tercero habla de la
acción. El cuarto capítulo se llama Jnana Yoga. La belleza del conocimiento de la acción
en pos de los demás. Esa persona es un sannyasin, un renunciante, que ha renunciado al
egoísmo y al autoengaño.
En el sexto capítulo, puesto que ya no hay nada que lo condicione a uno desde lo
externo, es fácil internalizarse. Uno comienza a trabajar con un cuerpo de herramientas
internas. Para acceder a esto, se deben seguir los pasos mencionados.
En el Yoga de Patanjali, este es descripto como un estado confortable y reposado de la
mente.
Volviendo al sexto capítulo del Bhagavad Gita, llegamos a la Contemplación Interna,
porque ya estamos acostumbrados a recibir energía verticalmente y a distribuírla
horizontalmente. Esto nos permite trabajar directamente con el Prana. Concientemente
entramos en nosotros mismos con la inhalación, y salimos de nosotros con la
exhalación.
De esta manera, nuestra conciencia accede al corazón, toca nuestro Ser Interno en el
corazón , y ahí estamos íntimamente enfocados. Allí tenemos a nuestro Residente
Interior . La pulsación tiene la tendencia de elevarse de Anahata Chakra a Ajna Chakra.
De eso trata el quinto capítulo.
En el sexto, se habla de Contemplación en el sentido vertical de Sushumna, lo que nos
posibilita la comprensión directa de la Ley, y nos conectamos con otros niveles de
percepción. Este capítulo sexto contiene muchos detalles en él: comprenderéis los
planos de Luz, os encontraréis con seres de luz que os brindarán mucha información
sobre ese plano búdhico, tal como es. Tantas revelaciones dejan a uno boquiabierto, y
tanto más sabe uno, más humilde se vuelve. Conocimiento y orgullo no pueden
convivir.
El fuego del Conocimiento purifica por completo.
En Cuestión de purificación, no hay nada mejor que el Conocimiento.
Cuanto más humilde sea uno, más receptivo será a la luz vertical. En la medida que
recibamos de lo Alto, podremos expandir nuestra conciencia, percibiendo una vibración
en el centro de la pituitaria. Esta es una experiencia que se vive en solitario.
La postura mental es estable y confortable, fija en un lugar sagrado. Ubicarse en el
centro sagrado del entrecejo es el consejo vertido en el sexto capítulo.
Mientras nos movemos del centro del corazón hacia arriba, llegamos a áreas
relacionadas con el Conocimiento Objetivo. Durante el sueño , comenzamos a entrar en
profundas meditaciones que nos conectan con otros seres de luz y nos permiten acceder
a otros niveles internos. Servicio y estudio se han convertido en brazos y piernas para la
práctica de la meditación.
Mañana continuaremos. Gracias por su excelente y dulce presencia y mejor escucha.

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