ANÁLISIS 2011

FECHAS CLAVE
Egarcíaber

Con la Lunación dorifórica del mes de Marzo, la tensión debería aumentar a la par que se va
estrechando la doriforia [1].

En los 40 grados de arco comprendidos entre 28º57’ Acuario, donde se ubica Neptuno, y 8º 38’
Aries donde encontramos a Júpiter, hallaremos entonces nada más y nada menos que 7 astros:
Neptuno, Marte, Luna, Sol, Mercurio, Urano y Júpiter. El signo de Piscis estará entonces “cargado“
de planetas, hasta 5 astros trasladarán el centro de gravedad al duodécimo signo del zodíaco en
reposo, presentando un gran desequilibrio que debería notarse en incremento del desgaste, tal vez
en cuanto al clima sea donde más podamos apreciar esa presión inicial, pero posiblemente no haya
que temer más noticias de alcance, ni acontecimientos demasiado relevantes aun. Para eso habrá
que esperar al mes de Abril. Entonces Neptuno habrá hecho acto de presencia, tras una espera de
165 años, de nuevo en su signo.

Marzo otorga, mediante el estrechamiento dorifórico, un protagonismo extraordinario a Piscis. Un

anticipo de que su señor Neptuno regresa a sus caóticas aguas, que percibiremos como aumento de
la presión imperante, pero sin plasmarse en hechos concretos. La doriforia no estructura, si
exceptuamos la cuadratura Júpiter – Plutón, sino que presenta un desequilibrio en cuanto a grado
de ocupación planetaria en el último signo zodiacal.

En principio cualquier grado de los 365 grados de la eclíptica tendría idénticas probabilidades de ser
ocupado por un planeta, he ahí la anomalía, que representa que todos los planetas , exceptuando a
Saturno en 16º2’ Libra, se encuentren ubicados en 91 grados de arco, una cuarta parte de todo el
círculo zodiacal.

La lunación anticipa las tensiones que veremos durante todo el mes de Abril, que sin duda será uno
de los periodos negros de 2011.

A continuación hacemos un ejercicio de prospectiva basado en tres parámetros:

1 La situación celeste de cada momento vista independientemente.

2 Los tránsitos que las anteriores posiciones aplican a la carta Cero Aries de 2011.
3 las progresiones del MC y ASC en el mapa del Ingreso Solar en Aries.

Estos creemos serán los momentos cumbre del año astrológico 2011 (Marzo 2011- Marzo 2012)

-1-
 LUNACIÓN
4 Marzo 2011

12 al 20 de Abril 2011
Aunque consideramos todo el mes de Abril como muy conflictivo, debido a la presencia y
protagonismo de Marte en ese signo, su domicilio diurno, estando como estará escoltado por todo
un Stellium, que se traslada de Piscis a Aries, otorgando a este último signo plenos poderes de
acción, ya que Aries, el más activo de los signos contará además en su seno con la presencia de
Marte para actuar, y este con el apoyo de las energías de Urano, Mercurio, Júpiter y Sol, planetas
sobre los que gobernará como dispositor directo, planetas a los que se añadirá puntualmente la
Luna y en último extremo Venus, componiendo una extraordinaria “marcha celeste” que chocará
frontalmente con Saturno en Libra, todo ello bajo la atenta mirada de Plutón, quien actuará como
Apex virtual, ya que el orbe con Saturno es demasiado amplio en su cuadratura geométrica, pero no
en la domal, cuadrando por oriente a parte del Stellium, donde encontramos la maléfica, según
rezan los aforismos del gran astrólogo musulmán Al-Biruni, conjunción Mercurio-Júpiter, justo la
conjunción que se opone más estrechamente a Saturno.

Al-Biruni fue un matemático, astrónomo, físico, filósofo, viajero, historiador y farmacéutico persa,
uno de los intelectuales más destacados del mundo islámico.

Al Biruni nació en Uzbekistán, y falleció en Afganistán.

-2-
 Sello postal (1973) afgano con una Sello postal (1973) soviético, de 6 copecs, Sello postal (1973) iraní con una
imagen artística de Al-Biruni, con una imagen artística de Al-Biruni. imagen artística de Al-Biruni,
a 1000 años de su nacimiento. a 1000 años de su nacimiento.

En su texto: “El Libro de Instrucción sobre los Elementos del Arte de la Astrología”, Al Biruni hace
hincapié en la negatividad extrema asociada con una cuadratura o conjunción Mercurio – Júpiter (la
oposición también, pero menos de lo esperado, supuestamente debido al hecho de que estos dos
planetas saben bien como manejar una oposición entre sí, por el hecho de que los dos signos que
rige cada uno están en oposición a los dos signos que rige el otro). Ciertamente que el aforismo
parece funcionar, observamos en casi todas las ocasiones que se presenta una tristeza
extraordinaria y tragedias asociadas a estos aspectos Mercurio – Júpiter.

Hemos pues levantado la carta para el día 16, como centro del periodo, basándonos en la resonancia
que encontramos al progresar la carta Cero Aries de 2011, encontrando que el MC progresado de la
misma se halla el día 15 sobre Saturno, y el día 17 sobre a Luna. Éste último periodo lo hemos
aumentado prudentemente, con una amplitud de orbe de +/- 3 días.

-3-
16 Abril 2011

-4-
CERO ARIES 2011

-5-
CERO ARIES 2011 TRÁNSITOS
16 Abril 2011

-6-
PROGRESIONES EN LA CARTA DE CERO ARIES 2011

1 día = 1 año
24 horas = 365,25 días
1440 minutos = 365,25 días

MC PROGRESADO CONJUNCIÓN SATURNO

25,7998 Días = 15 Abril 2011

-7-
 Hora original Ingreso Solar en Aries el 20 Marzo 2011= 23h 20 m 32 seg

Hora progresada 21 Marzo 2011= 01 h 02 m 15 seg

Como nos vamos al día siguiente le sumamos + 24 h quedando la hora:

Hora progresada = 25 h 02 m 15 seg

Hora progresada = 25 h 02 m 15 seg

- 23 h 20 m 32 seg
RESTA = 01 h 41 m 43 seg

01 h 41 m 43 seg = 1,69527 h X 60 =101,716 m

365,25 dias ------------------- 1440 minutos

X dias --------------------101,716 minutos

X= 101,716 x 365,25/1440 = 25,7998 días

Tenemos en coclusión que el Medio Cielo progresa sobre Saturno

25 , 7998 días después del 20 de Marzo de 2011.

Esto nos da una fecha de cumplimiento de la progresión

para el día 15 de Abril de 2011

-8-
MC PROGRESADO CONJUNCIÓN LUNA
28,1377 Dias = 17 Abril 2011

-9-
 30 de Junio a 11 de Julio

El periodo se abre con la lunación del 1 de julio. Una dura configuración en forma de Cruz Cósmica
que anticipa un difícil ciclo lunar, A favor tenemos que Marte juega favorablemente, apoyando la
descarga de la lejana oposición Saturno – Urano, mediante un trígono con el primero y un sextil con
el último. Por otro lado Plutón recibe el trígono de Júpiter, mientras Urano lo recibe de Mercurio y
Neptuno de Venus. Salvo estos apoyos que en mayor medida resultan pasajeros exceptuando quizás
el compuesto por Júpiter y Plutón.

Las progresiones de la Carta Cero Aries resultan bastante más concluyentes, presentando para el
primer día de Julio, la explosiva conjunción de su ASC progresado sobre el partil Sol/Urano,
mientras el día 9 del mismo mes el MC progresa sobre Plutón. Sin duda que habrán sorpresas en ese
periodo, que consideramos, por nuestra parte como el tercero en peligrosidad tras el de Abril y el de
Septiembre que estudiamos a continuación.

LUNACIÓN
1 Julio 2011

- 10 -
CERO ARIES 2011

- 11 -
CERO ARIES 2011 TRÁNSITOS
LUNACIÓN
1 Julio 2011

- 12 -
8 julio 2011

- 13 -
CERO ARIES TRÁNSITOS
9 Julio 2011

- 14 -
ASC PROGRESADO CONJUNCIÓN URANO
103,145 Días = 1 Julio 2011

- 15 -
MC PROGRESADO CONJUNCIÓN PLUTÓN
111,0926 Dias = 9 Julio 2011

- 16 -
Antes de analizar el periodo que consideramos como segundo en importancia en el año que
estudiamos, nos detendremos en la configuración que se produce bajo el cielo del plenilunio de
Agosto el día 13. Sin ser una figura Mayor, dentro de las estructuras disonantes del año, no deja de
entrañar su peligro potencial indudable. Por contra tenemos el apoyo positivo de Júpiter en la
tensión entre Marte y Plutón, aunque dicho aspecto podría jugar también favoreciendo la
disonancia, amplificando la tensión polar, como sabemos que Júpiter funciona en ocasiones. Sin
embargo, finalmente, esta figura no viene apoyada por progresiones, lo cual la relega a un segundo
plano a nuestro entender.

PLENILUNIO
13 Agosto 2011

- 17 -
CERO ARIES TRÁNSITOS
13 Agosto 2010

- 18 -
30 Septiembre 2011

- 19 -
 25 Septiembre a 2 de Octubre

El periodo se inicia con la lunación del 27 que inicia la formación de un Stellium compensatorio al
de Abril, justo en el signo que lo enfrenta: Libra, resultando con ello que interpretamos que se
tratará de un proceso dividido en dos fases. La primera se desarrollará en Abril, para completarse
finalmente en Septiembre, cuando el mes toque a su fin.

Las progresiones de la Carta Cero Aries nos proporcionan la fecha del 30 de Septiembre, para el
cumplimiento de la progresión del MC sobre el partil Sol/Urano del mapa del Ingreso Solar en Aries,
fecha que coincide casi matemáticamente con la formación y aspectos masivos de oposición, que se
dan por tránsito con ese mapa astral.

Aun así para cubrir posibles deslizamientos añadimos un orbe moderado de +/- 2 días, para este
periodo que estimamos será el segundo en importancia en cuanto a disonancias se refiere.

LUNACIÓN
27 Septiembre 2011

- 20 -
CERO ARIES TRÁNSITOS
27 Septiembre 2011

- 21 -
CERO ARIES 2011 TRÁNSITOS
30 Septiembre 2011

- 22 -
 CERO ARIES 2011
STELLIUM EN LIBRA
27 Septiembre 2011
LUNACION Y CIERRE COMPENSATORIO STELLIUM DE ABRIL

- 23 -
- 24 -
MC PROGRESADO CONJUNCIÓN SOL/URANO
193,9967 Días = 30 Septiembre 2011

- 25 -
 23 al 25 de Diciembre de 2011

Última figura del estudio. Realmente la consideramos como última en relevancia. La tensión viene
gestionada por la cuadratura Urano - Plutón –Hades, que el resto de figuras armónicas del periodo
parecen compensar.

Estimamos de una importancia ciertamente menor esta figura comparativamente a las vistas
durante el año analizadas más arriba.

LUNACIÓN
24 Diciembre 2011

- 26 -
0º ARIES - LUNACIÓN DICIEMBRE 2011 TRÁNSITOS
24 Diciembre 2011

- 27 -
APÉNDICE

- 28 -
 [1] La Doriforia de los planetas
por Tito Maciá

(Publicado en el número 18 de Cyklos - Invierno 1998/1999)

Fuente: http://www.cyklos.net/doriforia.htm

La Doriforia es la agrupación o el acompañamiento especial de planetas entre sí, similar a lo que

conocemos como Stellium pero con los matices de la orientalidad u occidentalidad de los planetas,
la aplicación o separación de dichos planetas por cuerpo o por aspecto y el uso de las estrellas fijas.

La palabra Dorifona se origina en la imagen de un soldado armado de lanza que acompañaba y

defendía a las autoridades o personajes en sus cortejos o visitas a otros lugares e iba con ellos como
escolta. La mejor explicación sobre este tema nos la ofrece Morín de Villefranche en su Astrología
Gálica, traducida por Pepa Sanchis, libro XIX capítulo IV titulado:

“De la Doryphoria de los planetas o acompañamiento”

«La Doriforia de los planetas está en relación con las aplicaciones o separaciones: en efecto, no es
otra cosa que la unión -o aplicación- o la separación de los planetas, pero con una peculiar y notable
consideración. Además, la Doriforia es doble: evidentemente, por cuerpo y por aspecto y ambas
deben ser consideradas tanto en las luminarias como en los planetas menores, al menos los de
mayor importancia y trascendencia en la figura.»

Las aplicaciones y separaciones, o lo que es lo mismo los aspectos aplicativos o separativos están
explicados en un capítulo anterior por Morín, donde entre otras cosas acaba diciendo:

«Finalmente, cuando algún planeta, al acercarse a otro, alcanza el orbe de su influencia con su
propio orbe de influencia, se dice que le hace un aspecto aplicativo hasta la conjunción partil...
pero, al alejarse de esta conjunción con el mismo planeta, se dice que le hace un aspecto
separativo... Así la aplicación sería lo mismo que una aproximación y la separación lo mismo que un
alejamiento... la aplicación es más fuerte que la separación y el cuerpo (la conjunción) es más fuerte
que el aspecto.»

Las Dorifonas son los planetas que acompañan al Sol, que van detrás de éste o que salen por el
horizonte, por el Este, antes que él, o los que acompañan a la Luna y se ponen por el horizonte, por
el Oeste, después de ella, formando un grupo de conjunciones largas u otro tipo de aspectos que
descarguen en el lado correspondiente. Morín en primer lugar empieza por describir las Doriforias
del Sol y la Luna:

«La Doriforia es doble: evidentemente, por cuerpo y por aspecto y ambas deben ser consideradas
tanto en las luminarias como en los planetas menores, al menos los de mayor importancia y
trascendencia en la figura.

La Doriforia de las luminarias por cuerpo es cuando uno, dos, o más planetas acompañan al Sol o a
la Luna, de tal modo que éstos no distan del acompañante, o del más cercano de los acompañantes,
más de ambos semidiámetros del orbe de influencia (1), pero los otros acompañantes están en
iguales condiciones entre ellos, aunque los antiguos astrólogos admiten entre el Sol -o la Luna- y el
planeta acompañante 30 grados de distancia, lo cual, sin embargo, no es una Doriforia por cuerpo,
sino por aspecto de dodecil. Pero, cuantos más planetas haya como acompañantes y cuantos más
cercanos estén al Sol -o a la Luna- y entre ellos, fuera de los límites de la combustión, tanto más
notable será la Doriforia y producirá sucesos mayores y muy poco frecuentes si es absoluta.”

Cuando dice “absoluta” alude a una distinción entre un tipo de Doriforias y otras. Morín concede
mayor importancia a las Doriforias del Sol, en las que los planetas acompañantes son orientales -

- 29 -
que pueden verse antes de la salida del Sol por el horizonte naciente-, luego a las de la Luna si tiene
planetas occidentales dentro de su orbe de influencia. La Doriforia de la Luna es como el espacio
que recorre la Luna a lo largo de un día y los planetas, los aspectos y las estrellas fijas por las que
irá pasando. A continuación sitúa a las Doriforias en las que los planetas implicados son de la
misma condición y sexo que el propio luminar -obviamente, masculinos y diurnos para el Sol, pero
femeninos y nocturnos para la Luna-, pues según afirma Morín:

«En el caso de que concurran todos estos factores, la Doriforia será insigne y poderosa y promete
grandes cosas acerca de los hechos particulares significados por aquellos planetas a los que domina
con su determinación el luminar que tiene la Doriforia, sobre todo si dicho luminar está en los
ángulos.»

Este concepto de la Doriforia, no ha sido bien comprendido por los autores de nuestro siglo.
Nicholas Devore, por ejemplo, describe a las Doriforias como un planeta que se comporta como una
especie de guardia de corps o de Juan Bautista que sale poco antes que el Sol, en el mismo signo o
en el contiguo. Sin embargo el concepto de Doriforia es mucho más amplio como estamos
observando.

Henri J. Gouchon tampoco lo aclara mucho. Dice que la Doriforia significa escolta, pero él mismo
declara que la definición que da Julevno atribuida a Ptolomeo es muy complicada y poco clara.
Añade que parece designar un encadenamiento o acercamiento a las luminarias (sobre todo al Sol)
por astros bien dispuestos. Continúa diciendo que el Sol debe estar en la Casa X o en la I. Se pueden
tener en cuenta los aspectos que caigan en el vecindario del Sol. Esto significará, según él, grandes
éxitos en la vida. Pero a mi juicio y por lo que dice más adelante Morín, el párrafo del Sol en las
casas X o I, es incorrecto, pues puede haber Doriforias con el Sol en otras posiciones domales. Se
habla de Casa X y I en las Doriforias en las que se sustituyen a los planetas por estrellas.

Para distinguir la interpretación que se debe dar a las distintas Doriforias Morín añade otras
explicaciones que permiten diferenciar este tipo de combinación planetaria. Para ello expone como
ejemplo su propio tema natal, diciendo:

«Pero si todos los factores que concurren son contrarios, la Doriforia será pésima y presagia un mal
muy grande, sobre todo si está en las casas desdichadas de la figura... Por ejemplo, en mi carta natal
están Mercurio, Venus, el Sol, Saturno y la Luna conjuntos al principio de la duodécima casa, y
Venus -regente de la primera- y Mercurio -regente de la tercera- están orientales al Sol, Júpiter y
Saturno occidentales; pero la Luna está occidental a Saturno -regente del Medio Cielo- y los demás
orientales; ademas, Júpiter, Venus y Mercurio son benéficos y bien afectados, en cambio Saturno es
maléfico por naturaleza, pero, por determinación, en parte bien y en parte mal afectado; por fin,
Mercurio es el único que está en signo masculino, pues todos los demás planetas están en signos
femeninos, y, sobre todo, Venus es de sexo femenino. Pues par ello ocurre que la historia de mi vida
y de mi fortuna es asombrosa y nada corriente, famosa evidentemente por las numerosas desdichas
y hechos afortunados, de cuerpo y alma, y los numerosos peligros que expondré más detalladamente
en otro lugar.»

En otro lugar expone una parte de la interpretación de este encadenamiento planetario, dice:

«...Esta disposición de los planetas significa que, o bien el efecto de la conexión de los extremos se
logrará mediante las cosas o personas representadas por el intermedio, o bien que el efecto
representado por la conjunción del intermedio con aquél al que aplica se originará por las causas
significadas por el planeta del que se separa, o bien que el efecto significado para la conjunción del
intermedio con aquél del que se separa desembocará en el efecto significado por el planeta al que
aplica, o, por fln, que para el efecto significado por el del medio concurren las cosas o personas
representadas por los extremos.»

Soy consciente de que la manera de expresarse de Morín es difícil o muy complicada, sin embargo,
como en muchas ocasiones ofrece ejemplos para aclarar estos conceptos:

«Por ejemplo, en mi carta natal Mercurio está a 27º 55’ de Acuario, en sextil partil con el
Ascendente, Venus en el grado 1 de Piscis, el Sol en el 4º 19’ de Piscis, Júpiter en el grado 4º 48’ de

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Piscis, y por eso Venus se separa de la posición de Mercurio y aplica completamente -por posición y
cuerpo- al Sol y a Júpiter. Así pues, cuando llegó al Medio Cielo Mercurio por dirección, en el año
1629, se me nombró Profesor Real de Matemáticas; cuando llegó Venus, regente de la I y del Parte
de Fortuna, recibí 4000 libras de dos prohombres, por la Trigonometría y la solución del problema
del terremoto que habla publicado; y cuando llegó el Sol y Júpiter en el año 1635, volví a recibir
1000 libras y alcancé una gran fama, incluso en el extranjero, por la teoría de las longitudes
descubierta por mí, pero también me gané con ello muchos enemigos ocultos. Me puse en contra a
comisarios y a un prohombre de primer orden, el cardenal Richelieu, porque, arriesgándome a
perder mi reputación y la remuneración prometida, quise velar por mi honor y exponer
públicamente, sin desfallecer, la justicia de mi causa.

Y en consecuencia se verifican aquí las cuatro cosas citadas, pues, primero, la celebridad de mi
nombre en astronomía, enfonces los enemigos por las cosas representadas por Mercurio y el Sol
aparecieron por Venus: si ésta no me hubiese dado el dinero necesario para la Tipografía, no me
hubiese ganado ningún enemigo, porque debería haber soportado pacientemente la afrenta inferida
y, expuesto al escarnio público por su envidia e iniquidad, hubiese hecho el sacrificio de mi fama.
Segundo: la conjunción de Venus con el Sol y Júpiter representa para mí bienes de parte de
prohombres por causa de Mercurio, por mí y mis obras matemáticas. Tercero, los bienes
representados por la conjunción de Venus y Mercurio desembocaron en enemistades ocultas,
incluso de un temible Prohombre. Cuarto, para los bienes significados por Venus debían concurrir
unos prohombres con el apoyo de la inteligencia, por el Sol y Mercurio unidos a partir de allí a
Venus. Ast pues el evento se ajustó en todo a la constitución celeste.»

En su caso, Morín, centra la Doriforia en el Sol y la Luna y encuentra paralelismos en su vida que
pueden considerarse asombrosos y lo que dice que expondrá detalladamente en otro lugar se refiere
también a su vida íntima en la que no obtuvo resultados demasiado satisfactorios, antes bien al
contrario, a causa de las mujeres y de sus amores con ellas Morín estuvo a punto de perder la vida
en más de una ocasión.

Más adelante expone las Doriforias de los planetas menores y dice así:

Doriforias de los planetas

«La Doriforia de los planetas menores por cuerpo es, igual que se ha dicho antes, cuando uno o
varios planetas acompañan a otro planeta, sobre todo si éste está ubicado en su domicilio o en su
exaltación y es de primordial o notable relevancia en la figura (como, por ejemplo, si se trata del
regente natal, o del Sol, la Luna, el Parte de Fortuna, el Ascendente o el Medio Cielo). Y esta
Doriforia también presagia grandes y notables bienes, ciertamente insignes si el planeta
acompañante está bien y es de su mismo sexo y condición. Pero si el planeta de primera
importancia en la figura está en su exilio o caída y le acompañan uno, dos o más planetas maléficos
por naturaleza o determinación, mal afectados y contrarios por su sexo y condición, dicha Doriforia
presagiará males muy grandes.»

Doriforia de los regentes de la XII y la VIII

También tiene en consideración las Doriforias que se pueden formar en torno a los planetas
regentes de casas importantes como son la VIII y la XII, diciendo así:

«Además, hay que prestar especial atención a la Doriforia de aquellos planetas que rigen la
duodécima u octava casa, pues éstos significan singulares calamidades y muertes ilustres.

Por fln, todo concurso de planetas en alguna casa de la figura hace al nativo conocido y famoso por
los significados de esa misma casa, como se evidencia en mi propio caso, por el concurso de 6

- 31 -
planetas al principio de la duodécima casa, en lo que se refiere a enfermedades, servidumbre y
enemigos ocultos; en el nobilísimo D. Ludovico Tronson, por el concurso de los cuatro planetas -
Luna, Júpiter, Venus y Mercurio- en la décima casa (de éstos, los tres últimos eran occidentales a la
Luna y orientales al Sol, situado cerca del principio de la duodécima) en las dignidades, honores y el
feliz éxito de sus acciones; en el ilustrísimo D. Carlos Dalbert, condestable de Luynes, por el
concurso de 4 planetas en la tercera casa, en cuanto a sus hermanos, allegados y muchas cosas
más.»

Morín se centra en las Doriforias del Sol, de la Luna y de los planetas y dice que las Doriforias son
notables sobre todo de tres maneras.

«Primero, cuando a un planeta angular; en su domicilio o exaltación, le aspecta otro planeta, situado
también en su domicilio o exaltación, naciendo su rayo antes que el del primer planeta. Y esta
Doriforia hace la carta ilustre y asegura grandes cosas, sobre todo si el planeta angular está en el
Ascendente o en el Medio Cielo y es benéfico por aspectos.»

Con esta frase Morin quiere decir que el aspecto del segundo planeta debe recaer delante del planeta
que forma la Doriforia

«Segundo, si a un planeta situado en el Ascendente o en el Medio Cielo le acompaña un planeta de la

misma condición, que lanza su rayo a la parte anterior a oriente, respecto al Sol, o posterior a
occidente, respecto a la Luna.»

Morín aclara una vez más la diferencia entre un Stellium, que es una agrupación de planetas en una
Casa, y las Doriforias, en la que los planetas o los aspectos deben de ser orientales al Sol u
occidentales a la Luna, e igualmente las Doriforias de planetas masculinos, como Marte, deben de
ser de planetas orientales -o de aspectos que sean orientales al mismo-, u occidentales si se trata de
planetas femeninos como Venus.

«Tercero, cuando, a un planeta situado en el Ascendente o en la casa X, le acompañan los planetas

diurnos, en un nacimiento diurno, o nocturnos, en un nacimiento nocturno, siendo el rayo anterior
o posterior; según el planeta sea per se diurno o nocturno. El Sol y la Luna también pueden
acompañar a planetas de su misma condición o naturaleza situados en los ángulos. En cambio habrá
discrepancia y desacuerdo en el efecto significado si los planetas nocturnos acompañan a los
diurnos, o los diurnos a los nocturnos, a no ser que los acompañantes sean benéficos y bien
afectados. Por lo demás, la tercera Doriforia, o mediana, se puede deducir de los dos tipos
anteriormente expuestos: es, evidentemente, cuando a un planeta le acompañan otros, los unos por
cuerpo, los otros por aspecto».

Doriforias con las estrellas fijas

Por último añade otro tipo de Doriforias en las que utiliza a las estrellas fijas de cierta magnitud
como escoltas del Sol, la Luna o el planeta que se implique en la Doriforia.

«Además de las Doriforias explicadas anteriormente, aún hay otra ignorada de los antiguos, que es
así: Si el planeta regente del Ascendente o del Medio Cielo, o el Sol, o la Luna, o sus regentes, por
fin, algún otro planeta de especial relevancia en el tema -y sobre todo si se trata de los planetas
superiores- está acompañado por tres o cuatro estrellas fijas ilustres -y especialmente en la casa I o
X- dicho planeta, el rodeado, produce efectos sorprendentes, como demostraremos en la práctica de
la astrología con asombrosos ejemplos de este siglo tan fértil en prodigios. Y por eso los planetas, o
sus aspectos, o las estrellas fijas -únicamente las ilustres- o las mezclas de unos y otros pueden
constituir, para el Sol, Doriforias admirables en cuanto a sus efectos».

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 Ejemplos de Doriforias.
Las Doriforias más fáciles de captar son las que forman el Sol o la Luna como en los ejemplos que
vemos a continuación.

En el tema de Miguel Hernández se aprecia una Doriforia absoluta. El Sol está escoltado por cuatro
planetas orientales. Este ejemplo nos sirve doblemente; por un lado para observar que los planetas
que acompañan al Sol, salen por el horizonte este, justo antes que el Sol; por otro lado aquí se
aprecia la diferencia entre un Stellium y una Doriforia. En el Stellium los planetas pueden estar
situados a cualquier lado del Sol, pero en la Doriforia deben ser orientales si se forma con el Sol o
planetas masculinos y occidentales si es una Doriforia de la Luna o de un planeta femenino.

Esta Doriforia de Miguel Hemandez nos habla de elevación y de sucesos importantes. De un

muchacho que fue pastor de las cabras que poseía su familia y se ganaba la vida repartiendo leche a
domicilio, hasta convertirse en uno de los grandes poetas de habla hispana.

En el tema de Dolores Ibarruri “La Pasionaria”, se observa una Doriforia muy larga que se inicia con
Venus en el primer grado de Escorpio y en la cúspide de la XII. Su voz fue la primera voz pública
que llamó a las armas al pueblo en 1936. El orbe de influencia de Venus llega hasta el grado 13 de
Escorpio y el de Saturno hasta el grado 7, enlazando así la Doriforia de Venus a Saturno, luego a
Marte, después Mercurio y finalmente el Sol. Ésta es una de esas Doriforias que, aun indicando
sucesos o prometiendo grandes cosas, al estar implicados los maléficos, redunda en grandes
desgracias o destierros, pues están implicados los dos planetas considerados maléficos, como son
Marte y Saturno.

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