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La estructura de la norma moral es entendida como la forma en que se desarrollará algún valor
moral, esto quiere decir, que habrá un emisor y un receptor. El primero será el quien da el
mando y espera que se obedezca, y el segundo el quien recibe la orden y obedece.
Las posiciones filosóficas afirman que existen 4 emisores de los mandatos morales: la
burguesía (Marxismo), Dios (según la religión), la sociedad (Auguste Comte) y el sujeto mismo
(Fiedrich Nietzche). Por otro lado el receptor, es el “yo”.
Las normas morales necesariamente son obedecidas por el emisor, ya que este es el que emite
las normas.
Lo contrario pasa con el receptor, ya que este puede elegir o no cumplir alguna norma, pero a
la vez si alguna norma es establecida por el receptor necesariamente tiene que cumplirla.
Según Piaget el juicio moral está divida en 2 partes: Fase heterónoma (4-8 años) y la fase
autónoma (9-12 años), la primera es donde el niño sigue o cumple ciertas reglas que están
establecidas por alguna autoridad, por ejemplo los padres, y la segunda en donde el
cumplimiento de las reglas está modificada por la conducta de otros, además, el niño busca la
igualdad.
El ethos democrático:
Autonomía
Dentro del sistema educativo, hay un arduo trabajo por conseguir que los alumnos sean seres
autónomos y capaces, libres de poder elegir ante una situación, respetar sus decisiones y las
del resto, y que gracias a esto puedan convivir armoniosamente con su comunidad y consigo
mismo. Pero esto se logrará cuando las instituciones educativas puedan promover la
autoestima dentro de los alumnos.
Esta idea, también apoyada por Piaget, para el autor autonomía es la libertad con el que el
hombre piensa, pero con la capacidad de analizar y entender ciertos conocimientos que
representa el mundo, teniendo en cuenta diferentes opiniones no solo en el ámbito moral,
sino también en el intelectual.
Autoestima
Branden (1995), señala que la autoestima es la facultad por el cual el hombre hace frente a los
problemas o dificultades de la vida, por lo cual el hombre debe sentirse satisfecho y mostrar
optimismo frente a la vida.
La autonomía emocional se refiere a la libertad que tienen las personas de tomar sus propias
decisiones tanto en el ámbito afectivo, emocional e intelectual. Las decisiones que se toman
sean buenas o malas conlleva a que se tiene que tener la responsabilidad para hacer frente a
las consecuencias de nuestros actos. Uno de los estados afectivos de las personas es la
autonomía emocional, que es la seguridad que se tiene al tomar las decisiones, además, es
manejar nuestras propias emociones.
El bienestar de las personas tiene mucho que ver con la autonomía emocional, ya que cuando
se tiene eso, uno actúa adecuadamente y demuestra la capacidad y tranquilidad con el que
actúa frente a los problemas, de acuerdo con las normas morales. Por ejemplo, si una persona
trata de decir frases destructivas o cosas negativas, la actitud que tiene que tener uno debe ser
lo contrario a lo que la otra persona espera de mí.
La autonomía emocional es un estado que se puede aplicar dentro de problemas como drogas,
alcoholismo, violencia, etc.
La educación emocional debería ser un rasgo importante que debe incluirse durante la
educación en casa y colegios, para poder desarrollar las relaciones inter e intrapersonales;
además, para poder tener la predisposición de tomar propias decisiones. Por ejemplo, cuando
un grupo de personas caen en el consumo de drogas, la persona debería actuar con autonomía
emocional y decidir sobre lo que quiere, y no actuar por presión del grupo.
La educación que se hace para que la persona tenga autonomía emocional, no debe actuar de
forma dependiente, sino de la mano con otros valores o estados afectivos como la asertividad,
la autoestima, la conciencia emocional, las habilidades sociales, etc. Este proce4so no solo
llevará a que las personas puede tener autonomía, sino también que puedan tener
competencias emocional en comparación.
La vinculación afectiva:
La vinculación afectiva son las relaciones afectivas que se establecen con otros seres humanos,
estos se desarrollan mediante las emociones. Y se mantienes gracias a la disponibilidad que
tiene la otra persona.
Kant habla sobre el desarrollo de la autonomía gracias a la voluntad libre que tiene el ser
humano, y no como personas obligas a seguir leyes morales establecidas, esta obligación sigue
un proceso que se da gracias a los mecanismos de la naturaleza, algunos de los cuales son los
afectos y los sentimientos, condicionados según las leyes, pero que no ayudan a la formación
de la conciencia moral. La respuesta que hace Kant, así como otros autores que son Piaget y
Kholberg frente a la necesidad de responder de cómo deberíamos comportarnos frente a esas
emociones, es que las personas deberíamos hacer un juicio cognitivo.
Para Piaget el respeto hacia sí mismo y hacia los demás es un elemento primordial de la
moralidad. La moralidad es un término que se va adquiriendo a través de las relaciones que se
tiene con uno mismo y con los demás. Además, es la relación de procesos cognitivos ligados a
las reglas, estos procesos llevarán a que la persona podrá desarrollar su personalidad.
Dentro de los fundamentos de la sociedad existe la subjetividad individual m el cual está lejos
de encontrar la autonomía en el desarrollo moral. El individualismo se da por medio de que la
persona piensa tener una “libertad”, pero en el sentido de que satisface sus propias
necesidades y deseos, y se encierra en sí mismo, sin comprender que solo la socialización con
los otros permite el desarrollo de sus capacidades y competencias.
Cuando se habla de autonomía moral, Kant habla sobre la conciencia de la libertad que es uno
de los ejemplos más claros para entender la autonomía. Kant manifiesta que tomamos
conciencia de esa realidad por medio de la ley moral, que está presente dentro de cada
hombre, además, la ley moral está relacionada junto a la ratio essendi (razón de ser) y la ratio
cognoscendi (razón de conocer). Esta conciencia de la libertad permite que el hombre tenga la
ley moral dentro de sí mismo.
Por medio del análisis de algunos conceptos, Kant deduce que el mayor principio de la
moralidad se encuentra dentro de la autonomía de la voluntad, que es un principio Kantiano,
el cual se refiere a la capacidad que tiene el hombre para crear propias normas morales. El cual
se convierte una ley para sí misma. Por otro lado la heteronomía es todo lo contrario ya que
plantea los principios de la ley moral pero fuera de lo establecido de la ley. Por lo tanto, la
autonomía y heteronomía se asimilan ya que estas se utilizan para un uso público o privado,
pero a la vez con diferentes usos de aplicación.
La autonomía, es usada a través de un uso público que viene a ser la razón o pensamiento, por
lo tanto, esto sería lo que todo ser humano utiliza. La heteronomía y autonomía existen al
mismo tiempo pero de una manera diferente: como ya se había explicado, la heteronomía
existe en el ámbito de la jerarquía u orden social y que solo tiene un sentido, que es el del
poder (unilateral); mientras que la autonomía está en el ámbito de los ¨doctos¨, en donde se
utiliza la razón como uso para todos.
Durkheim busca las características de la formación social, en ese proceso hace que la
heteronomía sea el eje de la moral. También, explica que al individuo se le imponga las reglas
exteriores, esto explica la idea anterior. Para Durkheim, el hombre está regido por la ley, pero
exterior a sí mismo, por lo tanto la voluntad individual que el hombre hace no es por parte
suya. Esta idea tiene fundamentos, pues cuando el hombre nace la idea de la moralidad ya
está regido por la jerarquía o el ordenamiento social, es así como los principios que
determinada este mundo no son producto de nosotros mismos, sino del paso de los años y la
trascendencia de las leyes. Esta idea obedece a la idea que se dio al comienzo, ya que la
moralidad gira en torno a la heteronomía. No obstante, Durkheim reconoce que la conciencia
protesta contra ese régimen, y tratar de buscar autonomía cada vez mayor.
Autonomía y Heteronomía. El desarrollo moral de los seres humanos: Ángels Varó
(https://www.nodo50.org/filosofem/IMG/pdf/etica3c.pdf)
La moral existe gracias a las costumbres que hace una persona o grupo y nuestra manera de
ser se construye de esa manera, pero además está regida por los comportamientos que
hacemos. También, la vida es un proyecto del cual no sabemos el destino, ya que esta no está
definida por algo o alguien, si no que se construye poco a poco, así la vida es un ¨quehacer ¨y
la moralidad está relacionada a eso, ya que la idea de moralidad se construye con hábitos que
el individuo hace.
Xavier Zubiri hace una reflexión interesante a cerca de la existencia de la moral, y da dos
ejemplos claros: entre los animales y los seres humanos. El primero tiene un comportamiento
innato, se podría decir que actúa de acuerdo a la interacción con el ambiente, mientras que los
seres humanos actuamos de una manera instintiva, lo que nos hace diferentes a los animales
es la “inteligencia” y la situación real que consideramos cuando realizaremos un acto. Gracias a
eso el hombre actúa en el ámbito de la libertad y la posibilidad. Lo que quiere lograr Zubiri con
esta distinción es que la moral es propiamente humana, ya que el hombre actuará seguir
principios y leyes que existen según las estructuras psicobiológicas.
En el libro El criterio moral en el niño (1932), sostiene que la moralidad de los individuos
pertenecen a los estadios ¨naturales¨, esto podría ser desde un punto netamente biológico o
psicobiológico, ya que el ser humano posee la capacidad cognitiva que es la inteligencia, y no
netamente cultural, pues como lo sostienen otros autores la moralidad nace de costumbres o
hábitos que realiza ciertas personas o grupos. Esta idea que plantea Piaget, es parte de que la
moralidad está entendida como un sistema de reglas o leyes, por lo tanto el individuo tiene
que respetarlas mientras las va adquiriendo.
La aportación que da Piaget es que en el desarrollo moral, se adapta a dos conceptos que son
la heteronomía y la moral, en el primero porque serán las leyes o reglas que están
preestablecidas en la sociedad y la segunda por el respeto de la autonomía.
Para Piaget la conciencia moral nace a partir del poder externo que la sociedad obliga a
cumplir, tanto las leyes como las reglas. Pero esta conciencia moral seguirá un proceso
evolutivo donde en un determinado momento el individuo llegará a la autonomía, pero sin
dejar de lado que esta va de la mano junto con la inteligencia, ya que gracias a la razón buscará
la libertad propia, esto quiero decir que si no se tiene una suficiente maduración cognoscitiva,
no se desarrollará adecuadamente la conciencia moral. Por otro lado, las normas morales no
son innatas del ser humano, ya que esto se desarrollará de acuerdo a las relaciones sociales
que se tiene y por medio de la experiencia; dentro de las relaciones sociales se darán las reglas
sociales y las relaciones cooperativas, el primero se dará de manera más genérica, mientras
que la segunda permitirá que el individuo desarrolle la autonomía con respeto mutuo.
Autonomía (re)versus heteronomía. Dinamismo de los derechos humanos
1. Autonomía
Partiendo desde una premisa religiosa se distinguen dos aspectos fundamentales que son:
persona y conciencia, la primera aparece como una obligación a una respuesta teológica, la
relación que hay entre hombre y Dios hace el ser humano tenga una dignidad moral, antes del
conocimiento que Dios exista, pero esta idea también parte de que en esta relación se
encuentre una nueva moralidad: libertad, igualdad y dignidad. Por otra parte, la conciencia
viene a ser la relación intrapersonal, ya que el hombre es un ser particular que da cuenta de las
facultades que posee, sobre todo de la conciencia moral que reconoce en sí, y cómo esta nse
relaciona con el Ser Supremo.
Por otra parte, la autonomía del ser humano está ligado con la voluntad, libertad y razón con la
que interactúa, ya que el hombre actuará de acuerdo a sus necesidades innatas: la buena
voluntad y el bien común. Aquí se da la idea de los derechos humanos, ya que la libertad del
hombre buscarán el bien para la sociedad a través de la imposición de las ideas o de la mejora
que se quiere para el desarrollo universal. Además, esto es lo que cada generación busca: ün
mundo diferente¨, pero teniendo en cuenta que la vida y los seres humanos somos seres
dinámicos y que las reglas que están establecidas dentro de la sociedad son perennes a
nosotros.
2. Heteronomía
(file:///C:/Users/Compaq/Downloads/Dialnet-Autonomia-2267971.pdf)
La autonomía es un concepto que fue tratado ampliamente por Kant, la idea de autonomía es
atribuido como un concepto positivo, pero que dentro de la filosofía el concepto de autonomía
es tratado ambiguamente o se puede entender de distintas maneras.
La noción de autonomía viene un tanto disfrazada ya que dentro de ese concepto existe la
separación entre la moral y el derecho, ya que la moral viene a ser el constructo de las
personas de una forma racional, mientras que el segundo es tratado como una manera de
entender que todos los seres humanos somos iguales. Kant explica que la autonomía de la
voluntad es el único principio de la moralidad, ya que el hombre es el que tiene la capacidad
de crear reglas o normas, este principio se contrapone a la heteronomía, ya que esta no puede
referirse directamente el cumplimiento obligatorio de las reglas o normas superpuestas.
Nicolai Hartmann, está en contra de la autonomía moral que propone Kant. Según Hartmann la
voluntad obedece o corresponde al hombre real, más no a la voluntad absolutamente pura
que dice existir Kant. La voluntad es propia del ser humano, esta se va desarrollando y a lo
largo de nuestras vidas toma un valor universal, por lo que todo ser pensante debe someterse
a ellas.