La contabilidad es un sistema de información que el hombre utiliza desde hace
muchos años, con el fin de llevar un control de los movimientos financieros. Por consiguiente, teniendo en cuenta la participación que hizo en la Evidencia: “El sistema financiero”, de esta guía de aprendizaje, y los conocimientos adquiridos en esta actividad de aprendizaje, participe en el foro dando sus aportes en torno a las siguientes preguntas: 1. ¿Considera importante que el sector financiero cuente con un sistema contable? RTA: Por supuesto que es importante que el sector financiero además de contar con un sistema contable, que este se desempeñe de la manera más eficiente, además debe ser muy efectivo, porque su actividad se basa esencialmente en operaciones contables, como prestamos, retiros, notas de débito.
2. ¿Qué aspectos primordiales se deben tener en cuenta en la
contabilidad bancaria? RTA: 1. ACTIVOS: Son aquellos bienes, derechos y otros recursos controlados económicamente por la empresa, resultantes de sucesos pasados, de los que se espera que la empresa obtenga beneficios o rendimientos económicos en el futuro. 2. PASIVOS: Aquellas obligaciones actuales surgidas como consecuencia de sucesos pasados, para cuya extinción la empresa espera desprenderse de recursos que puedan producir beneficios o rendimientos económicos en el futuro. A estos efectos, se entienden incluidas las provisiones. 3. PATRIMONIO NETO: constituye la parte residual de los activos de la empresa, una vez deducidos todos sus pasivos. Incluye las aportaciones realizadas, ya sea en el momento de su constitución o en otros posteriores, por sus socios o propietarios, que no tengan la consideración de pasivos, así como los resultados acumulados u otras variaciones que le afecten. 4. INGRESOS: incrementos en el patrimonio neto de la empresa durante el ejercicio. A raíz de entradas o aumentos en el valor de los activos, o de disminución de los pasivos, siempre que no tengan su origen en aportaciones, monetarias o no, de los socios o propietarios. 5. GASTOS: decrementos en el patrimonio neto de la empresa durante el ejercicio, ya sea en forma de salidas o disminuciones en el valor de los activos, o de reconocimiento o aumento del valor de los pasivos, siempre que no tengan su origen en distribuciones, monetarias o no, a los socios o propietarios, en su condición de tales.