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La
sonda se introduce en la uretra para llegar a la vejiga y así permite un drenaje continuo de la
orina.
Los fines para los que se utiliza esta herramienta son variados. Puede utilizarse, como hemos
detallado al principio, para facilitar la expulsión de la orina, para controlar la diuresis (cantidad
de orina en un tiempo específico), tratar intra o postoperatorio en ciertas intervenciones
quirúrgicas, en casos de escaras genitales se controla la higiene adecuada o para los
tratamientos de enfermedades crónicas en las que hay dificultades para orinar.
Las sondas vesicales se pueden encontrar en diferentes calibres tanto para hombres como
para mujeres.
Según el calibre:
Los calibres deben seleccionarse según el sexo, la edad y características del paciente:
Adultos. Existen sondas desde el calibre 8 al 30. Los calibres que se utilizan con más frecuencia
son:
Varones CH 16-18-20-22.
Pediátricas: CH 06–10.
Según la longitud:
Masculinas: 40 cm.
Femeninas: 20 cm.
Pediátricas: 20 cm.
Además del calibre del catéter (tubo delgado que se utiliza), su longitud y el material del que
están hechos, que dependerán de su uso pediátrico o bien en adultos hombres o mujeres, se
pueden clasificar según el tiempo de permanencia:
1. Intermitentes
2. Permanentes
Cuando el catéter está fijado a la vejiga con un balón lleno de aire (u otro dispositivo de
fijación). Se utiliza principalmente en aquellos pacientes que han sido sometidos a
intervención quirúrgica, para el control de la cantidad de orina secretada o bien para
maniobras de drenaje continuo de la vejiga. En este caso la instalación de la sonda requiere la
intervención de personal sanitario cualificado.
¿De qué materiales están hechas las sondas vesicales?
Las sondas pueden ser de muy diferentes materiales, y los más utilizados son el látex, el látex
siliconado, la silicona pura, el polivinilo y los poliuretanos.
Látex. De uso muy frecuente, sin embargo las sondas de látex pueden provocar alergia en las
personas alérgicas al látex. Para evitarlo existen sondas de látex recubierto por una capa de
silicona.
Silicona: Los catéteres de silicona son los que presentan mayor biocompatibilidad y a igualdad
de calibre exterior, mayor calibre funcional (luz interior), por lo que pueden ser más finas y
tener por tanto mejor tolerancia.