Você está na página 1de 6

Asignatura: Contratos

Unidad 2: Contratos reales


Tema 10: El depósito

Sesión 15: El Depósito. Generalidades: definición y naturaleza jurídica. Especies de


depósito. Obligaciones del depositario. Momento de restitución. Obligaciones del
depositante. El secuestro

Generalidades

Definición, caracteres
El depósito (depositum) es un contrato por el cual una persona “llamada depositante
(deponens), entrega una cosa mueble a otra, llamada depositario (depositarius), quien se
obliga a custodiarla (deponere, servandum o custodiendum dare) y a restituirla al depositante
en cualquier momento en que éste lo solicite” (Montes, 2005, p. 283). Es definido en el Código
Civil no como contrato sino haciendo referencia a la relación jurídica depósito, en la norma
contenida en el artículo 1.749: “acto por el cual una persona recibe la cosa ajena con
obligación de guardarla y restituirla.” Señalándose –en el artículo que le sigue– que existen dos
especies de depósito, el depósito propiamente dicho y el secuestro (Vid. Artículo 1750).

El depósito como relación jurídica puede tener origen contractual o extracontractual, la


normativa del Código Civil –en general– se circunscribe a regular la naturaleza y contenido del
contrato de depósito, al cual se hará referencia. En efecto, atendiendo a su origen
contractual, dentro de la clasificación general de los contratos, el contrato de depósito es un
contrato real, pero no produce efectos reales, por tanto, no es traslativo de propiedad; es de
carácter unilateral, nominado y principal, que puede adoptar la forma de gratuito u oneroso,
este último llamado depósito remunerado.

A diferencia del comodato, el contrato de depósito no es de naturaleza civil, también existen


normas especiales que lo regulan en su modalidad de depósito judicial, por ejemplo:

“… con respecto al depósito judicial …omissis… el Dr. Abdón Sánchez Noguera, en su


obra “MANUAL DE PROCEDIMIENTOS ESPECIALES CONTENCIOSOS”, Ediciones Paredes,
2da edición, Caracas - Venezuela, 2005, páginas 45-46, así:
(…Omissis…)
“El depósito judicial, si bien no es definido por el Código Civil, conforme al contenido
del artículo 2 de la Ley Sobre Depósito Judicial puede decirse que es el acto por el
cual el Juez, en ejecución de una medida preventiva o ejecutiva, hace entrega y
pone en posesión de los bienes o derechos objeto del secuestro, embargo, ocupación
o comiso a un depositario legalmente autorizado o designado por él, confiándoselos
para su guarda, custodia, conservación, administración, defensa y manejo, con la
obligación de devolverlos a quien el mismo tribunal autorice.
La diferencia fundamental entre el depósito propiamente dicho y el depósito judicial
radica en que mientras el primero es producto del acuerdo de voluntades de las
partes, el segundo produce como consecuencia de una decisión judicial.
Si bien el depósito judicial aparece regulado en el Código Civil, algunas de sus normas
han sido derogadas como consecuencia de la sanción de la Ley Sobre Depósito
Judicial del 13 de diciembre de 1966 y del nuevo Código de Procedimiento Civil de
1987, constituyendo las normas de éste una repetición innecesaria de las disposiciones
del Código Civil y de la Ley Sobre Depósito Judicial” (…Omissis…)
Asimismo, considerando el depósito judicial como un acto procesal de aseguramiento
del proceso, en el cual el depositario judicial se considera como un auxiliar de justicia,
que sin ser funcionario judicial propiamente dicho, presta su colaboración a la
administración de justicia, y su actividad está regida por normas de carácter especial,
preceptuadas en la Ley…
Disponible en: http://jca.tsj.gov.ve/decisiones/2009/julio/530-14-10.949-S2-129-09.html

Cuando el depositario tiene permiso de servirse o usar de la cosa depositada, el contrato


cambia de naturaleza y ya no es depósito, sino mutuo (si se tratan de cosas fungibles), o
comodato desde que el depositario haga uso de ese permiso (Vid. Artículo 1759).

En otro orden de ideas, los Tribunales de la República respecto al contrato de depósito han
explicado que el mismo:

… se desnaturaliza cuando el depositante pretende guardar la cosa y retirarla a su


conveniencia, puesto que ello impediría al depositario responder por la guarda de la
cosa, justamente el depósito se caracteriza porque la cosa mueble se entrega al
depositario para que éste la guarde y cuide y la restituya a su requerimiento. Por tanto
dado que en el presente caso la demandante podía retirar el vehículo del
estacionamiento cuando lo desease con la sola obligación de participarlo luego de
haber ingresado en la tarde, en caso de necesitar retirarlo nuevamente en virtud del
espacio reducido del estacionamiento, es forzoso concluir que no se trata de un
contrato de depósito.
Disponible en: http://merida.tsj.gov.ve/decisiones/2010/abril/2116-14-AH11-V-2003-
000134-.html

Especies de depósito

El depósito propiamente dicho


Artículo 1751.- El depósito propiamente dicho es un contrato gratuito, salvo
convención en contrario, que no puede tener por objeto sino cosas muebles.
No se perfecciona sino por la tradición de la cosa.
La tradición se verifica por el mero consentimiento, en caso de que la cosa
esté ya en poder del depositario por cualquier otro título, y de que se
convenga que quede en depósito.

El depósito voluntario (Artículo 1752.- “El depósito es voluntario o necesario”)


Aquel que se efectúa por el espontáneo consentimiento del que da (depositante) y del que
recibe (depositario) la cosa en depósito (Artículo 1753). La capacidad de las partes
contratantes es la exigida por el derecho común, sin embargo, el legislador ha establecido
que en el supuesto de que una persona capaz (que tenga capacidad legal para contratar)
acepta el depósito hecho por otra incapaz, queda sujeta a todas las obligaciones de un
verdadero depositario, y pueden perseguirla el tutor, el curador o el administrador de la
persona que hizo el depósito, o esta misma, si llega a tener capacidad (Artículo 1754). Caso
contrario, cuando sea el depositario una persona incapaz, y el depositante capaz, este sólo
tendrá acción para reivindicar la cosa depositada (Artículo 1755).

El depósito necesario
Es aquél que “hace alguna persona apremiada por algún accidente: como ruina, incendio,
saqueo, naufragio u otro imprevisto” (Artículo 1775), asimismo será depósito necesario el de los
efectos (equipaje) introducidos por los viajeros en las posadas, fondas o mesones donde se
alojan, o en las naves y demás vehículos que los conducen (Artículo 1777). Este tipo de
depósito se rige por las reglas establecidas para el depósito voluntario, pero siempre se podrá
demostrar a través de la prueba de testigos (Vid. Artículo 1776).

Extensión de la responsabilidad en este tipo de depósito: “Los posaderos, fondistas, mesoneros,


patrones y conductores, responden de los efectos como depositarios” (véase artículos 1778,
1777, 1779).

Obligaciones del depositante

- Reembolsar al depositario los gastos que haya hecho para la conservación de la cosa
depositada.
- Indemnizarle los daños que le haya causado el depósito al depositario (Vid. Artículo 1773).

De lo cual se deduce que el contrato de depósito, en principio puede ser calificado como
unilateral, pero no obsta a que dado el supuesto establecido en la norma pase a ser un
contrato sinalagmático imperfecto. En caso de que el depositante no proceda en
consecuencia –conforme a lo previsto en la norma supra– tendrá el depositario derecho de
retención sobre la cosa dada en depósito (véase Artículo 1774 en concordancia con el 1702. Y
se tendrá como acreedor privilegiado conforme a lo dispuesto en el ordinal 5, del Artículo
1871).

Obligaciones del depositario

- Devolver idénticamente la cosa que ha recibido en el estado en que se halle al tiempo de


la restitución (Véase Artículos 1761, 1762, 1763).
- Poner en la guarda de la cosa depositada la misma diligencia que en la de las cosas que
le pertenecen (Artículo 1756) salvo que deba poner la diligencia de un buen padre de
familia: cuando se haya convenido expresamente en ello; cuando el depositario se ha
ofrecido para recibir el depósito; cuando se trate de depósito remunerado; y, cuando el
depósito se ha hecho únicamente en interés del depositario (Artículo 1757).
- Es responsable de accidente producido por fuerza mayor, cuando se haya constituido en
mora para la restitución de la cosa depositada (Artículo 1758).
- Si le han confiado cosas en cofre cerrado o bajo una cubierta sellada el depositario no
debe tratar de conocer cuáles son las cosas depositadas en su poder (Artículo 1759), salvo
que se trate de depósito necesario de cosas de valor para efectos de la responsabilidad
en su custodia (Artículo 1779).
- Debe entregar los frutos que haya percibido de la cosa; pero no debe intereses del dinero
depositado, sino desde el día en que se haya constituido en mora de hacer la restitución
(Artículo 1764).

“Todas las obligaciones del depositario cesan desde que descubre y prueba que es suya la
cosa depositada.” (Artículo 1.772).

¿A quién debe restituir la cosa dada en depósito?


En principio a quien se la entregó y no deberá exigir que el depositante pruebe ser propietario
de la cosa depositada (Vid. artículos 1765 y 1766), sin embargo, habrá que atender a las
siguientes situaciones:

Primera: Hacer la entrega a quien haya sido designado para recibirlo.


Segunda: Tratándose de un incapaz debe procederse conforme a lo dispuesto en el Artículo
1.754 (Artículo 1765).

Tercera: Si llega a descubrir que la cosa es hurtada, y quién es su verdadero dueño, debe
hacer saber a éste el depósito. Si éste descuida reclamar el depósito, el depositario se liberta
válidamente por la entrega del depósito a aquel de quien lo haya recibido, con tal que haya
hecho la entrega después de vencido el tiempo determinado y suficiente, dado por él al
verdadero dueño para su reclamación (Artículo 1766).

Cuarta: En caso de haber muerto el depositante, la devolución deberá hacerse a su heredero.


Si hay dos o más herederos y no se ha hecho la partición, deberán ponerse de acuerdo sobre
la devolución del depósito. Después de la partición, se devolverá a quien según la misma
resulte tener derecho (Artículo 1767).

Quinta: Si por un cambio sobrevenido en su estado pierde el depositante la capacidad para


administrar sus bienes, después de constituido el depósito, éste no debe restituirse sino a quien
tenga la administración de los bienes del depositante (Artículo 1768).

Sexta: Si el depósito se ha hecho por un tutor administrador, con ese carácter, y su


administración ha cesado en la época de la restitución, la restitución debe hacerse a la
persona representada o al nuevo administrador, según sea el caso (Artículo 1769).

Lugar de la restitución
Véase Artículo 1.770

Momento de la restitución
Véase Artículo 1.771

El secuestro

Artículo 1.780.- “El secuestro es convencional o judicial”.

El secuestro convencional
Es aquel depósito que las partes acuerdan para que una cosa, mueble o inmueble, se
ponga en manos de un tercero (depositario) mientras dura el litigio que va a decidir a
quién pertenece la cosa. El depositario no puede ser liberado de su obligación sino
con el consentimiento de las partes litigantes que decidieron el depósito, o por alguna
causa justificada. (Garay y Garay, 2009, p. 153).

Véase además Artículos 1781 al 1784.

El secuestro judicial
Consiste en el depósito de bienes muebles o inmuebles ordenado por el Juez para
asegurar que los bienes no desaparezcan, se dañen o corran peligro cuando se dan
situaciones contenciosas. El Juez nombra un depositario el cual recibe una
remuneración por la guarda de los bienes en secuestro (Garay y Garay, 2009, p. 154).

Véase además normas contenidas en los Artículos 1785 al 1787 del Código Civil y 599 del
Código de Procedimiento Civil.

Referencias

- Garay, J.; y, Garay, M. (2009). Código Civil Comentado. (Vol. 5). Caracas, Venezuela:
Corporación AGR, S.C.
- Marín, A. (1998). Contratos. (Vol. III). Mérida, Venezuela: Consejo de Publicaciones de la
Universidad de Los Andes.
- Montes, A. (2005). Curso de Derecho Romano. Derecho de Obligaciones. (2ª ed.). Caracas,
Venezuela: Departamento de Publicaciones, UCV
- Tribunal Supremo de Justicia. (2011). [Portal en línea]. Disponible:
http://jca.tsj.gov.ve/decisiones/2009/julio/530-14-10.949-S2-129-09.html [Consulta:
2011, Agosto 27]
- Tribunal Supremo de Justicia. (2011). [Portal en línea]. Disponible:
http://merida.tsj.gov.ve/decisiones/2010/abril/2116-14-AH11-V-2003-000134-.html
[Consulta: 2011, Agosto 27]

Você também pode gostar