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EL PROCESO DE ENSEÑANZA – APRENDIZAJE APLICADO EN LA DOCENCIA

UNIVERSITARIA.

La docencia universitaria en la actualidad se ha venido transformando en una carrera donde


el “Docente” abandona su puesto como un simple tutor para convertirse en un participe de las
clases activas en compañía de sus estudiante, este cambio ha hecho que los mismos alumnos
también sean capaces de tomar las riendas de una clase donde el profesor termina siendo un oyente
o espectador de las teorías y planteamientos realizados por el estudiantado. Las clases activas y
participativas se han convertido entonces en un modelo a seguir por los distintos sistemas
educativos internacionales.

El significado de la DOCENCIA UNIVERSITARIA en realidad se podría resumir en una


palabra: la profesionalidad. Un buen docente universitario es un gran profesional. Eso tiene un
sentido especialmente relevante. ¿En qué consiste entonces? Con una palabra quiere decirlo todo,
pero, al parecer la profesionalidad es, por un lado la eficacia, y por otro la eficiencia, no acaba de
aclarar el núcleo fundamental de una buena docencia.

Ahora bien, una vez conocido el significado de lo que es un docente universitario,


procederemos a analizar cuáles son las concepciones del aprendizaje implementadas por un
profesional docente para enseñar conceptos teóricos, el proceso de aprendizaje a través de los años
se ha mejorado en cuestiones de cambios dentro del aula de clases, un buen docente universitario
debe de saber que para crear un vínculo directo con sus estudiantes primero que todo debe romper
las barreras de estudiante – profesor; es decir, los estudiantes deben sentir una mejor relación con
su tutor, pues el tutor necesita inspirarles las confianza necesaria para que ellos mismos sean
capaces de interpretar los conceptos y debatir teorías dentro de la misma aula de clase.

En este orden de idea conoceremos cuales son las estrategias y concepciones que
intervienen dentro de este proceso de enseñanza humanístico.

“Los enfoques e investigaciones desde el ámbito de la psicología educativa sobre


los mecanismos del aprendizaje en los seres humanos han tenido gran incidencia
en cómo enseñar, es decir en cómo lograr aprendizajes; una preocupación que,
evidentemente, es propia de la pedagogía. Las diversas teorías del aprendizaje que
se han ido forjando y, consecuentemente, las diversas concepciones del proceso
de enseñanza-aprendizaje se han ido convirtiendo en una cuestión clave alrededor
de la cual se han ido articulando, a lo largo de los últimos tiempos, los elementos
de cada tendencia educativa.” CONCEPCIONES DEL PROCESO ENSEÑANZA –
APRENDIZAJE. – DOMINGO BLÁZQUEZ SÁNCHEZ.

Como acabamos de leer, en la actualidad la pedagogía se centra en dos requerimientos


importantes los cuales son, ¿Cómo aprenden los individuos? Y ¿Cómo ensenarles mejor? El trabajo
académico de los especialistas en educación se fija en la posición que este mismo toma al momento
de explicar el proceso de aprendizaje a sus estudiantes, para esto usa como punto de partida las
distintas teorías del aprendizaje de las cuales se derivan las teorías de la enseñanza moderna; es
decir, que la psicología del proceso del aprendizaje humano es el resultado de las propuestas
pedagógicas sobre cómo se ha de actuar para conseguir el aprendizaje.

En palabras más castas el aprendizaje del estudiante será garantizado siempre y cuando el
profesional docente implemente la teoría correcta de enseñanza. Cuando a un estudiante se le es
brindado un concepto teórico de forma incorrecta este mismo estudiante no será capaz de entender
o captar la idea principal de lo que se le está tratando de enseñar, es entonces cuando el docente
debe explorar diversas alternativas de enseñanza para que el estudiante pueda entender dichos
conceptos, pues al final el estudiante no es el que está fallando si no el método empleado por el
profesor.

“No hay nada más práctico que una buena teoría (…) las buenas teorías suelen surgir en
el contexto de la práctica” KURT LEWIN.

Lógicamente un profesional en docencia universitaria recién graduado o forman no tienen


todavía una concepción clara de cómo enseñar, pues no todos los contextos son los mismos, es la
practica la que le brinda la experiencia necesaria para saber que método elegir, siempre y cuando
sea el mismo profesional docente el que conozca las distintas técnicas de aprendizaje para poder
impartir conocimiento al estudiantado.
Tocando un poco el tema sobre lo que es la concepción actual del proceso de enseñanza –
aprendizaje, podemos abarcar los paradigmas utilizados dentro de los procesos de enseñanza,
siendo estos el Paradigma conductual y el Paradigma cognitivo. El paradigma es un punto de
partida o, mejor, un esquema de partida, una fórmula básica o esencial a partir de la
cual se desarrolla una propuesta o pensamiento científico.

El conductismo se centra en la conducta del ser humano, el comportamiento observable, es


este su verdadero objeto de estudio, lo que no es observable no será estudiado.

Los conductistas conciben el aprendizaje como un proceso de formación de


conexiones entre estímulos y respuestas. Hay un esquema básico que explica
toda la conducta humana, es el esquema Estímulo-Respuesta-Refuerzo. Toda
conducta humana es la respuesta a un estímulo. El premio o el castigo refuerzan
positivamente o negativamente unas determinadas respuestas.

De este paradigma conductual se desprende un sistema de enseñanza muy breve, los


modelos de enseñanza conductista se preocupan específicamente por los resultados de la actividad
educativa entendidas como comportamientos observables en los alumnos. Utilizando la
uniformidad y la generalización, los conductistas buscan el producto final, el conductismo entonces
tiene como propósito modificar de forma eficaz los comportamientos de los alumnos, obligándolos
a todos en su totalidad a comportarse y pensar igual, no obstante el conductismo ha realizado
aportes muy importantes en cuanto a métodos didácticos de aprendizaje, los cuales aún e siguen
utilizando.

Entonces el conductismo nos dice que el rol del docente es el de ser la única autoridad
dentro del salón de clases, el único capaz de impartir conocimiento, como un general que dirige a
su ejército, entonces los estudiantes quedan como los soldados por decirlo retóricamente, no tienen
ninguna responsabilidad salvo a portarse bien y seguir las directrices del profesor.
Desgraciadamente esto es un modelo un poco retorico y arcaico que se sigue utilizando no solo en
las universidades si no que también en la mayoría de los colegios e instituciones educativas, donde
los estudiantes son vistos como un grupo generalizado donde todos deben aprender lo mismo
utilizando el mismo método, solo para saber si al final hubieron ganadores o perdedores, mientras
que no se fijan en centrarse de manera más enfocada en el diseño de una mejor estrategia para
suministrar el conocimiento, los docentes solo llegan, dan una clase y se marchan, no existe
preocupación alguna por el nivel de entendimiento del estudiante, el cual solo se verá reflejado
durante los procesos de evaluación de los mismos.

Entrando aún más en las concepciones, ahora nos enfocaremos en definir el Paradigma
Cognitivista, el cual a diferencia del conductual este no solo se centra en el proceso de aprendizaje,
si no que también se enfoca en que es lo que lo produce (lo que estimula el aprendizaje en el
estudiante), como dice el texto anterior mente citado de las concepciones, los cognitivistas son
como “cirujanos sin bisturí”

“…se preocupa por los procesos humanos internos que dice que no pueden ser
diseccionados con un bisturí, que no pueden reducirse a una cuantificación experimental tales
como la comprensión, el razonamiento y el pensamiento; esta familia se interesa
por los procesos psicológicos –intelectuales, anímicos, emotivos, etc…”

A los cognitivistas les interesa saber no sólo cuándo se produce un aprendizaje


en qué condiciones sino sobre todo cual es el proceso que lo produce. A los
cognitivistas no les interesa alterar o producir conductas observables sino descifrar
los procesos psicológicos que, en todo caso, pueden desencadenar una conducta observable.

A los cognitivistas y de aquí proviene el nombre que les identifícales interesa


principalmente indagar cómo los humanos adquirimos conocimientos
y no únicamente cuando elaboramos conductas más o menos inteligentes.

Los cognitivistas promueven hablar de los procesos, del entorno o ambiente, de los
contextos, de la diversidad, de la interacción, de la transversalidad entre otros…

Esta familia psicopedagógica es la que empezó a hablar de los procesos de aprendizaje


como un proceso “Activo” y de participación. El estudiante pasa a ser de un receptor que solo se
llenaba de conocimiento para luego ser evaluado, a ser un actor dentro del proceso de aprendizaje
activo. En este caso no como una actividad física o motora, si no como una actividad intelectual,
donde los estudiantes y el profesor están en el mismo nivel dentro del salón de clases.

En este orden de ideas el profesor tiene como labor escuchar, consultar, motivar, facilitar,
y orientar. Su participación en decisiones sobre actividades del aprendizaje dentro del aula de
clases, nunca como alguien que impone sus soluciones frente a los alumnos, si no como un grupo
centrado tomar estas decisiones. Su papel también está el de tomar la iniciativa y ayudar a los
alumnos más débiles y proponer las actividades de aprendizaje con las cuales los estudiantes se
sientan cómodos. Para los estudiantes el conocimiento implicara una manera particular de
vincularse con el saber.

Como profesional universitario y una vez leído estos enfoques, podemos afirmar que en la
practica el paradigma cognitivista es el mejor recurso para tratar de generar y estimular el
conocimiento en los estudiantes, es bien sabido que las clases activas y participativas generan
mejores resultados que aquellas clases donde el estudiante es estigmatizado y forzado a solo ser un
espectador de cosas que él considera sin sentido alguno.

Usando las distintas técnicas de aprendizaje, un profesional en docencia universitaria será


capaz de estimular el conocimiento en sus alumnos, esto mediante debates, clases propositivas,
charlas, simposios, prácticas de campo, exposiciones libres de pensamiento.

De esta manera se le da al estudiante la posibilidad de defender sus conocimientos y


debatirlos con sus compañeros, como docente universitario nuestro papel sería el de escuchar,
motivar y orientar en la búsqueda de un conocimiento definitivo.

Por último y a manera de conclusión, podemos decir que una vez analizados estos enfoques
el docente universitario es capaz de captar las estrategias pedagogías necesarias para
implementarlas dentro de sus planes de aula.

Como docente universitario me guiare en mis objetivos académicos y de enseñanza con el


enfoque cognitivo y humanista, tomando como eje las clases activas y participativas. Dejando a un
lado el rol como docente y centrándome como un compañero de clases de mis estudiantes.

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