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DEMANDA DE AMPARO

HONORABLE SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA:

VICTOR ENRIQUE AMAYA CHINCHILLA mayor de edad, abogado del


domicilio de San Salvador, con tarjeta de identificación de abogado uno nueve
siete cinco siete y documento único de identidad número cero tres tres seis ocho
nueve uno; actuando en mi calidad de apoderado general juridicial del señor
RAFAEL VICENTE TRIGUEROS HECHT a VOS atentamente EXPONGO:

1. LEGITIMACIÓN DE PERSONERÍA

Que tal y como lo compruebo con la fotocopia certificadas de los


testimonios de poder general judicial otorgado a mi favor, soy apoderado
general judicial del señor RAFAEL VICENTE TRIGUEROS HECHT, mayor de edad,
Empresario, del domicilio de San Salvador, con documento único de identidad
número cero nueve seis cero ocho siete dos – seis, que en adelante denominare
como mi mandante.
En este sentido, con claras y precisas instrucciones de nuestra
representada, venimos a demandar en proceso de amparo al juzgado de lo civil
de Santa Tecla, Departamento de la libertad, por la emisión de la sentencia de
fecha veintidós de noviembre de dos mil siete a las diez horas y cincuenta
minutos del día veintidós de noviembre de dos mil siete en el juicio ejecutivo
mercantil con referencia 145-EM-07.

2. AUTORIDAD DEMANDADA
En la presente demanda de amparo, la autoridad demandada es el juzgado
de lo civil de Santa Tecla, Departamento de la libertad y el ejecutor de embargos
Ricardo Antonio García Prieto Parada.

3. ACTOS CONTRA LOS CUALES SE RECLAMA.

Los actos que se reclaman en el presente proceso de amparo son los


siguientes:

3.1 La emisión de la sentencia de fecha veintidós de noviembre de dos mil


siete a las diez horas y cincuenta minutos del día veintidós de noviembre de dos
mil siete en el juicio ejecutivo mercantil con referencia 145-EM-07, normas por
medio de las cuales se condena al señor RAFAEL VICENTE TRIGUEROS HECHT así
como a la sociedad RTH, S.A. de C.V. o R.T.H., S.A. de C.V., a pagar la sociedad
EXPORTADORA LIEBES, SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE, que se
abrevia EXPORTADORA LIEBES, S.A. de C.V., la cantidad de doscientos cuarenta
y un mil quinientos tres dólares con ochenta centavos de dólar de los Estados
Unidos de America. Ya que nunca se realizó en debida forma el emplazamiento
a mi mandante y se siguió el proceso declarándolo rebelde o contumaz.

3.2 La emisión del mandamiento de embargo emitido por el juzgado de lo


Civil de Santa Tecla a las diez horas y cincuenta y siete minutos del día
diecinueve de abril de dos mil siete.

3.3 La resolución de fecha veintiuno de abril de dos mil siete mediante la cual
el ejecutor de embargos Ricardo Antonio Garcia Prieto Parada traba embargo
sobre dos bienes del señor RAFAEL VICENTE TRIGUEROS HECHT amparado en un
título que no corresponde.
3.3 La resolución de fecha tres de junio de dos mil trece mediate la cual el
ejecutor de embargos Ricardo Antonio Garcia Prieto Parada traba embargo
sobre cinco mil setecientos cuatro acciones del señor RAFAEL VICENTE
TRIGUEROS HECHT de la corporación apolo, S.A. de C.V..

Como explicare a lo largo de esta demando en los anteriores actos


procesales existen graves violaciones a derechos constitucionales las cuales
dejaron en indefensión a mi mandante.

4. CATEGORÍAS CONSTITUCIONALES VIOLENTADAS

El acto reclamado es inconstitucional por transgredir las siguientes categorías


jurídicas:
4.1) Derechos de audiencia y defensa establecidos Art. 11 de la
Constitución de la República (en adelante Cn.);
4.2) Derecho a la seguridad jurídica, previsto en el Art. 2 Cn.
específicamente en su concreta manifestación del derecho a la
interdicción de la arbitrariedad estatal; y
4.3) Derecho de propiedad, consagrado en los Arts. 2 y 103 Cn.

4. RELACIÓN DE LAS ACCIONES U OMISIONES EN QUE CONSISTE LA VIOLACIÓN

5.1 Elementos de hecho.-

El dos de abril de dos mil siete el Licenciado Otto Rafael Aviles Bernal
acudió al juzgado de lo civil de Santa Tecla a demandar a mi mandante en
conjunto con la sociedad RTH S.A. de C.V., conocida como R.T.H. S.A. de C.V.
en base al Código de Procedimientos civiles actualmente derogado (en
adelante Pr.C.) tomando de base para la acción veinte pagares todos con
fecha de vencimiento el día dieciséis de enero de dos mil siete, y cada uno por
la cantidad de doce mil setenta y cinco dólares con diecinueve centavos de
dólar de los Estados Unidos de America, la referencia del mencionado proceso
ejecutivo es la 145-Em-07.

En dicho proceso en la resolución del día diecisiete de abril de dos mil siete se
admitió la demanda y a su vez se decretó embargo sobre los bienes de mi
mandate y con fecha diecinueve de abril de dos mil trece se libró el respectivo
mandamiento de embargo al ejecutor de embargos Ricardo Antonio Garcia
Prieto Parada.

Posteriormente mediante auto de fecha veinticuatro de mayo de dos mil siete


se ordena a que se notifique el decreto de embargo para que sirva de legal
emplazamiento y se libró exhorto al Juzgado Segundo de lo Mercantil de San
Salvado para diligenciar el emplazamiento a los demandados.

Dicho emplazamiento fue diligenciado por el Secretario Notificador del juzgado


Segundo de lo Mercantil el día tres de Julio del año dos mil siete, si embargo
dicho emplazamiento nunca fue notificado en legal forma a mi mandante. Es
aquí honorable sala cuando se produce una violación constitucional de tan
magnitud vicia todo el proceso ejecutivo puesto que en la esquela de
notificación en ningún momento aparece la firma de mi mandante a pesar de
que el notificador manifiesta haber entregado personalmente a mi mandante.

Consecuencia de la grave inconstitucionalidad que se produjo en dicha esquela


mi mandante nunca supo del proceso y por ende nunca tuvo la oportunidad
procesal de contestar la demanda y defenderse. Debido a lo anterior se le
declaró rebelde en dicho proceso en la resolución de fecha veintitrés de julio de
dos mil siete, se tuvo por contestada la demanda en sentido negativo y en
adelante se continuó inconstitucionalmente el proceso sin la participación de mi
mandante.

A su vez es necesario además narrar que durante la duración de dicho


proceso se emitió un mandamiento de embargo a las diez horas y cincuenta y
siete minutos del día diecinueve de abril de dos mil siete y con fecha veintiuno
de abril de dos mil siete mediante el ejecutor de embargos Ricardo Antonio
Garcia Prieto Parada traba embargo sobre dos bienes de mi mandante
erróneamente amparándose en una PRIMERA HIPOTECA a favor de Exportadora
Liebes, S.A. de C.V. cuando el título base que fundamentaba el proceso
ejecutivo eran veinte pagares.

El inconstitucional juicio ejecutivo en completa indefensión de mi


mandante siguió su curso y en fecha veintidós de noviembre de dos mil siete el
Juzgado Civil de Santa Tecla emitió fallo en la cual se condena a mi mandante
y a la sociedad RTH, S.A. de C.V. o R.T.H., S.A. de C.V. a pagar a la sociedad
exportadora Liebes, sociedad anónima de capital variable la cantidad de
Doscientos cuarenta y un mil quinientos dólares con ochenta centavos de dólar
de los Estados Unidos de America, más el interés moratorio del cinco por ciento
a partir del 16 de enero del 2007.

Entre otras actuaciones varias que sucedieron posteriormente con fecha


treinta de mayo de dos mil trece el juzgado de lo civil de santa tecla, emitió un
nuevo mandamiento de embargo nuevamente a favor de Ricardo Antonio
García Prieto Parada, dado que los bienes que le habían sido embargados a mi
mandante se consideraron insuficientes. Y con fecha tres de junio de dos mil
trece dándole cumplimiento al mandamiento de embargo el ejecutor de
embargos trabó un embargo sobre cinco mil setecientos cuatro acciones
propiedad de mi mandante de la corporación apolo, S.A. de C.V.

5.2 Elementos de derecho.-

Previo al inicio de nuestra exposición, debemos acotar lo siguiente:

5.1) De conformidad al art 595 Pr.c. la notificación del decreto de embargo


hecha al ejecutado, equivale al emplazamiento para que éste comparezca a
estar a derecho y a contestar la demanda dentro del tercer día. En la esquela
del emplazamiento no aparece la firma de mi mandante como notificado y no
se hace ninguna referencia de porque no firmo, contradictoriamente se
manifiesta que le fue entregado personalmente.

En este sentido via jurisprudencia en el proceso de amparo 38-S-96. ha


manifestado: “Sobre tal punto, corresponde aclarar que los actos procesales de
comunicación, aún el emplazamiento, no son, desde una perspectiva
constitucional, categorías jurídicas con sustantividad propia, sino que las mismas
se incardinan en el derecho de audiencia, en tanto que al consagrarse en la ley
procesal un determinado medio de realización de un acto procesal de
trascendencia en el trámite procedimental, o de incidencia en el ejercicio del
derecho de defensa, la realización contraria a Constitución del específico acto
procesal de comunicación deviene en una vulneración del citado derecho de
audiencia, pues en tal caso supone negar la esencia misma de la finalidad de
los actos de comunicación.

Es conveniente aclarar que la connotación constitucional de la adecuada


realización de los actos procesales de comunicación no supone que cualquier
infracción a las formalidades que rigen a éstos implican transgresión
constitucional. Ahora bien, si se trata de una formalidad esencial, cuya
inobservancia incide negativa y gravemente en las oportunidades de defensa
de quien será afectado por la decisión estatal, la observancia o cumplimiento
de la misma adquiere connotación constitucional y, en consecuencia, la
realización de un acto procesal de comunicación en coexistencia con
condiciones que carecen de razonalibidad o proporcionalidad respecto de los
fines que lícitamente puede perseguir el legislador, deviene en violatoria de la
normativa constitucional.”

En el caso que se nos presenta la trasgresión constitucional fue de tal magnitud


que no se notificó a mi mandante el acto procesal de comunicación más
importante de es decir el emplazamiento. Debido a la falta de notificación mi
mandante nunca se pudo enterar que existía un proceso en su contra y no pudo
ejercer sus derechos de audiencia y defensa establecidos en el art 11 Cn.

5. VIOLACIÓN A LAS ESFERAS JURÍDICAS CONSTITUCIONALES

En aras de clarificar nuestra exposición, el presente apartado abordará las


violaciones a las esferas jurídicas constitucionales de nuestra mandante
partiendo de la tesis que todo el juicio ejecutivo y las actuaciones posteriores son
inconstitucionales debido a que nunca se le notificó a mi mandante el
emplazamiento en debida forma. Bajo este orden de ideas, desarrollaremos en
un primer momento la violación a los derechos de audiencia y defensa.
Continuaremos exponiendo las violaciones al principio de seguridad jurídica.
Posteriormente discurriremos sobre la transgresión al derecho de propiedad de
mi mandante.
5.1) Violación a los derechos de audiencia y defensa

En el presente apartado abarcamos la violación de dos derechos


constitucionales que se le cometieron a la esfera jurídica de mi mandante, el
motivo por el cual se abarcan ambos derechos se exponen en un solo apartado
es por la íntima relación que existe entre ellos. En sentencia pronunciada en el
amparo 658-2008, el veintiuno de octubre de dos mil nueve este tribunal
manifestó: “En reiterada jurisprudencia –verbigracia, en la sentencia de amparo
ref. 864- 2002 pronunciada el 4/VI/2005- se ha sostenido que las personas tienen
derecho a que los procesos jurisdiccionales se desarrollen con total respeto de
las categorías constitucionales procesales. Así, nuestra Constitución en su artículo
11 ha reconocido el denominado derecho de audiencia, en virtud del cual
previo a limitar o privar de un derecho a una persona debe tramitarse un proceso
o procedimiento en el que se le permita razonablemente su intervención a fin de
que conozca los hechos que lo motivaron y de tal manera tenga la posibilidad
de comparecer e intentar desvirtuarlos. En ese sentido, los procesos
jurisdiccionales deben encontrarse diseñados de tal manera que potencien la
intervención del sujeto pasivo. b. De lo anterior se deriva que el derecho de
defensa está íntimamente vinculado al derecho de audiencia, pues cuando
éste establece que en todo proceso o procedimiento se tiene que otorgar –de
acuerdo a la ley o en aplicación directa de la Constitución– al menos una
oportunidad para oír la posición del sujeto pasivo –principio del contradictorio–,
no cabe duda que todas las oportunidades de defensa a lo largo del proceso
también son manifestaciones o aplicaciones in extremis del derecho de
audiencia.”

Retomando la jurisprudencia que acabamos de citar el derecho de audiencia


radica en que para privar un derecho a una persona se le debe permitir
razonablemente su intervención. En el proceso ejecutivo que se le siguió a mi
mandante en su contra se le coartó por completo su derecho sus derechos de
audiencia y defensa ya que nunca se le notifico en debida forma el decreto de
embargo que en este caso cumple la función de emplazamiento.

Debido a que nunca se le notificó el emplazamiento en ningún momento se


enteró que se le seguía un proceso en su contra y nunca pudo intervenir a ejercer
su defensa. Se le declaró rebelde, fue sentenciado al pago de la cantidad de
doscientos cuarenta y un mil quinientos tres dólares con ochenta centavos de
dólar de los Estados Unidos de America y posterior se procedió a la ejecución de
sus bienes.

En relación a la importancia de los actos procesales de comunicación esta


honorable sala manifestó en el amparo 658-2008, el veintiuno de octubre de dos
mil nueve: “Los actos de comunicación tienen una relevancia trascendental
pues son condicionantes de la eficacia del proceso, y se consideran efectivos
no sólo en razón de la observancia de las formalidades legales sino,
esencialmente, en cuanto que los mismos cumplen con la misión de garantizar
la defensa de los derechos de las partes en un plano de igualdad, de tal manera
que la notificación sirva a su objetivo principal, cual es el permitir un
conocimiento más que formal, es decir, real comunicación del acto o resolución
que la motiva, para que la persona destinataria de la misma pueda disponer lo
conveniente con el objeto de defender sus derechos y de esta manera evitar
toda situación que genere indefensión.”

En conclusión honorable Sala en el presente caso la omisión de la notificación


del decreto de embargo a mi mandante constituye una violación constitucional
de tal magnitud que le impidió poder defenderse por completo en el proceso
ejecutivo que se tramitó en su contra declarándolo rebelde, de esta forma se le
negó su derecho y audiencia siendo tal violación de una trascendencia
constitucional que puede ser vista por esta honorable sala en amparo.

5.2) Violación al derecho a la seguridad jurídica

Este derecho es contemplado por nuestra norma suprema a través del artículo 2
Cn, el cual reconoce a toda persona el derecho a la seguridad, y a ser
protegida en la conservación y defensa del mismo. En relación a este derecho
esta honorable Sala ha manifestado en sentencia de amparo 28-99 de fecha
veinticinco de abril de dos mil ha manifestado: “De tal manera que para que
exista seguridad jurídica no basta que los derechos aparezcan en forma enfática
en la Constitución, sino que es necesario que todos y cada uno de los
gobernados tengan un goce efectivo de los mismos. Es decir, que desde la
perspectiva del derecho constitucional, la seguridad jurídica es la condición
resultante de la predeterminación hecha por el ordenamiento jurídico, de los
ámbitos de licitud e ilicitud en la actuación de los individuos, lo que implica una
garantía para los derechos fundamentales de una persona y una limitación a la
arbitrariedad del poder público, condiciones indispensables para la vigencia de
un Estado Constitucional de Derecho.(…) La seguridad jurídica constituye pues
un derecho fundamental que tiene toda persona frente al Estado y donde existe,
respecto de éste, el correlativo deber primordial e insoslayable de cumplir real y
efectivamente la materialización de sus actos tendentes a la concreción de las
distintas manifestaciones que tal derecho posee. Claro está que ello entendido
como un deber de naturaleza positiva, traducido, no en un mero respeto o
abstención, sino en el cumplimiento de ciertos requisitos, condiciones, elementos
o circunstancias exigidas por el propio ordenamiento jurídico. De tal suerte que,
sólo así, la afectación de la esfera jurídica del gobernado será válida. Es decir,
que todos y cada uno de los gobernados deben tener un goce efectivo y cabal
de sus derechos.”
La interdicción de la arbitrariedad implica que todo tipo de decisiones
hechas por los órganos del Estado, deben de estar basados en criterios
razonables. Esto conlleva un deber para la Autoridad demandada de actuar en
base a parámetros jurídicos y objetivos, lo cual se traduce en una prohibición de
proceder arbitrariamente sin respeto a los límites formales y materiales que
impone nuestra Constitución. Éstos se encuentran obligados a respetar los límites
que la ley le prevé de manera permisiva para ellos, al momento de realizar una
actividad en el ejercicio de sus funciones

En el presente caso la violación al derecho de seguridad se configura


cuando el juzgado de lo civil de santa tecla no respeta los procedimientos
establecidos y declara rebelde a mi mandante sin haberle notificado
debidamente el decreto de embargo.

5.2) Violación al derecho a la seguridad jurídica

El contenido de este derecho se encuentra en el artículo 2 Cn. cuando


expresamente declara que las personas tienen derecho a la propiedad.
Indicando además el artículo 103 Cn., que se reconoce y garantiza el derecho
a la propiedad privada en función social. Esa honorable Sala ha manifestado en
la sentencia de amparo 344-97 de fecha doce de noviembre de mil novecientos
noventa y ocho que el derecho de propiedad como la facultad que tiene una
persona para disponer libremente de sus bienes, en el uso, goce y disfrute de
ellas, sin ninguna limitación que no sea generada o devenida por la ley o la
Constitución.

A mi mandante se le ha violado su derecho a la propiedad porque


mediante la emisión de la sentencia de fecha veintidós de noviembre de dos mil
siete a las diez horas y cincuenta minutos del día veintidós de noviembre de dos
mil siete en el juicio ejecutivo mercantil con referencia 145-EM-07 se condena a
pagar a mi mandante la cantidad de doscientos cuarenta y un mil quinientos
tres dólares con ochenta centavos de dólar de los Estados Unidos de America
mediante un proceso que es clara y evidentemente inconstitucional.

Posteriormente a la emisión de la inconstitucional sentencia el ejecutor de


embargos Ricardo Antonio Garcia Prieto en fecha veintiuno de abril de dos mil
siete traba embargo sobre bienes de mi mandante y en fecha tres de junio de
dos mil trece nuevamente traba embargo sobre cinco mil setecientos cuatro
acciones del señor RAFAEL VICENTE TRIGUEROS HECHT de la corporación apolo,
S.A. de C.V..

En ese sentido el juzgado de lo civil de santa tecla y posteriormente el ejecutor


de embargos Ricardo Antonio Garcia Prieto despojó a mi mandante de sumas
de dinero y bienes a las cuales no se encuentra jurídicamente obligado a pagar
ya que el proceso por medio del cual se pretende ejecutar a mi mandante es
completamente inscostitucional.

Conclusiones

Los actos procesales de comunicación son el presupuesto esencial para que


las partes tengan conocimiento de las etapas de un proceso y por ende poder
ejercer sus derechos de audiencia y defensa. Entre estos actos destacan como
el más importante el emplazamiento que en el caso de los juicios ejecutivos la
notificación del decreto de embargo es su equivalente.

La importancia de la notificación es de tal trascendencia que apartir de esta


corre el plazo para contestar la demanda y la incomparecencia del
demandado implica trae como consecuencia la declaratoria de rebelde o
contumaz. Es por eso que el emplazamiento es un acto que presupone el
ejercicio de los derechos constitucionales de audiencia y defensa y cualquier
anomalía en este implica una violación de trascendencia constitucional.

En el presente caso en el proceso ejecutivo de referencia 145-EM-07 existe un


vicio en la notificación del decreto de embargo ya que no aparece la firma de
mi mandante a pesar que la esquela de notificación el notificador manifiesta
habérsela entregado en persona. La realidad honorable sale es que la
notificación no se le realizó correctamente a mi mandante y este nunca tuvo
oportunidad intervenir en el proceso y ejercer una defensa adecuada lo cual
convierte en inconstitucional el proceso que se siguió en contra de mi mandante.

Consecuencia de lo anterior mi mandante fue condenado en sentencia


definitiva al pago por la cantidad de doscientos cuarenta y un mil quinientos tres
dólares con ochenta centavos y posteriormente el ejecutor de embargos
Ricardo Antonio Garcia Prieto trabo embargos en dos ocasiones sobre los bienes
de mi mandante.

Dado la grave violación de carácter constitucional que se le provocó a mi


mandante al no haberle notificado en debida forma el mandamiento de
embargo todas las actuaciones procesales siguiente son nulas, pero aun mas
relevantes son inconstitucionales puesto se siguieron sin darle oportunidad a mi
mandante que ejerciera sus derechos de audiencia y defensa.

6) Sobre la suspensión de los efectos de los actos impugnados

Consideramos que es urgente y esencial para los efectos de nuestra


pretensión que la medida cautelar de la suspensión de los efectos del acto
reclamado sea ordenada por esa respetable Sala a la brevedad posible, dado
que creemos que el caso en debate tiene los requisitos legales y jurisprudenciales
para tal efecto.

Es menester indicar que para que esa honorable Sala dicte la adopción de
una medida cautelar es necesario que concurran dos presupuestos básicos: la
probable existencia de un derecho amenazado y el daño que ocasionaría el
desarrollo temporal del proceso.

En el caso que hoy nos ocupa, existe una efectiva apariencia de buen
derecho en vista de que las violaciones a derechos constitucionales tienen su
origen y fundamento en la emisión una sentencia y dos embargos que se le
hicieron en bienes de mi mandante en un proceso claramente inconstitucional
ya que se procedió en total ausencia de este sin darle la mas mínima
oportunidad de defensa y audiencia.

Asimismo, puede apreciarse que existe un verdadero peligro en la demora,


porque mi mandante ya fue condenado en una sentencia inconstitucional a la
cantidad de doscientos cuarenta y un mil quinientos tres dólares con ochenta
centavos y posteriormente el ejecutor de embargos Ricardo Antonio Garcia
Prieto trabo embargos en dos ocasiones sobre los bienes de mi mandante. Si no
se dicta la suspensión de los actos reclamados existe el riesgo que se le sigan
embargando bienes a mi cliente en base a una sentencia de carácter que es a
todas luces inconstitucional.

Es necesario entonces que la Sala de lo constitucional decrete la medida


cautelar solicitada para dar plena vigencia al rango constitucional de la función
cautelar de esta jurisdicción
7) Cuantía estimada de la acción.

En sentencia de fecha veintidós de noviembre de dos mil siete a las diez horas
y cincuenta minutos del día veintidós de noviembre de dos mil siete en el juicio
ejecutivo mercantil con referencia 145-EM-07, se condenó a mi mandante a
pagar a la sociedad EXPORTADORA LIEBES, SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL
VARIABLE, que se abrevia EXPORTADORA LIEBES, S.A. de C.V., la cantidad de
doscientos cuarenta y un mil quinientos tres dólares con ochenta centavos de
dólar de los Estados Unidos de América por lo que estimamos la cuantía de la
acción en ese monto.

8) Tercero a quién beneficia los actos impugnados

En el presente caso la sociedad EXPORTADORA LIEBES, SOCIEDAD ANONIMA


DE CAPITAL VARIABLE, que se abrevia EXPORTADORA LIEBES, S.A. de C.V. son los
beneficiados de dichos actos.

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