Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
El presente artículo tiene como objetivo considerar algunas cuestiones acerca de una
preocupación personal con relación de cómo la tecnología es una dimensión más a
considerar en la construcción de la subjetividad. Construcción de la subjetividad,
constitución del sujeto, en un contexto mediado siempre por la tecnología. Tecnología
inmersa tan naturalmente en nuestra vida que ciertamente pasa casi desapercibida
ante nuestros ojos, y sin embargo está presente en cada uno de nuestros actos
cotidianos, aún en los más íntimos de nuestra vida.
Esto sucede porque la tecnología es una producción del sujeto humano por excelencia
y su producción está en relación con las condiciones de vida y es también el modo en el
cual las sociedades determinan las formas por las que se constituyen sus sujetos;
sujetos plausibles de integrarse a sistemas que le otorgan un lugar. En la sociedad
contemporánea, hay que re-visitar estas producciones a la luz de contextos diferentes
donde han cambiado, entre otras, la concepción del tiempo, del espacio, y del propio
cuerpo. Se habla de un tiempo atemporal, de un tiempo sin tiempo, de la sociedad de la
información, como nuevos modos de nominar a esta época. En esta época también
esta presente la exigencia de una formación permanente, exigencia provocada por una
de las más relevantes de las tecnologías y que algunos ya se refieren a ella como la
"revolución de la información". Este contexto debe ser considerado para re-pensar la
construcción de nuevas subjetividades.
1
Es indispensable, al referirse a la tecnología, definirla desde una perspectiva social, con
un componente ético y moral, y por ende ideológico y político. Desde ésta concepción
nos interesa más el proceso social y técnico por lo cual se constituyen las tecnologías,
que abordar a éstas en sí mismas y que en consecuencia, nos interesan más las
acciones que los producen que los artefactos o productos en sí mismos. La tecnología
como construcción, como producción social no se reduce sólo a artefactos u objetos
materiales, o a comprarlos para consumirlos, sino que lo tecnológico se constituye
como parte de lo cotidiano, como actividad humana que produce y consume con mayor
o menor grado de conciencia.
2
Es en el contacto con parte de esta cultura tecnológica, las tecnologías de la
comunicación y la información, desde donde, particularmente en nuestra época, es
cuando emerge una nueva subjetividad, denominada subjetividad mediática. ¿Cómo
impactan estas tecnologías en el espacio del aula, en el tiempo escolar, en la escuela?
Como hemos dicho, estas tecnologías han modificado sustancialmente el tiempo y el
espacio, desde un tiempo lineal a un tiempo de gran velocidad y de un espacio material
a un espacio virtual o espacio de los flujos (Castells, 1996).
Construcción de la subjetividad
El concepto de producción, de construcción o de constitución de subjetividad no es tan
solo un concepto psicoanalítico, sino sociológico, y así lo estamos considerano. La
producción de subjetividad hace al modo en el cual las sociedades determinan las
formas por las que se constituyen en sujetos; sujetos plausibles de integrarse a
sistemas que le otorgan un lugar.
La producción de subjetividad hace a un conjunto de elementos que van a devenir en
un sujeto histórico, social. Por esto, la producción de subjetividad es del orden político e
histórico al decir de Bleichmar, S (2005)
Para los adultos-docentes que fueron constituidos en otra época, en otra subjetividad
pedagógica, resulta complejo producir una activación interna cognitiva y afectiva que
mueva hacia otros caminos a los sujetos–alumnos. Las nuevas generaciones formadas
en la subjetividad mediática, privilegian la percepción sobre la conciencia. Su interés se
activa por otros estímulos sensoriales. Es desde aquí desde donde hay que repensar
estas nuevas subjetividades, las denominadas subjetividades mediáticas. Estas están
construidas sobre la base de una nueva concepción del espacio y del tiempo, de una
jerarquización del cuerpo, de lo estético sobre lo ético; de la velocidad de la mirada
sobre la escritura. Se trata de una construcción donde las sensaciones, las
percepciones, las imágenes se anticipan antes que la lenta tarea de la conciencia
reflexiva. Esas subjetividades parecen estar más propensas a los juegos2 que a otro
tipo de actividades, pensamientos o conocimientos.
¿Qué pasará entonces en el aula? No se si puede aportar muchas respuestas… tal vez
cada uno podrá armar su propia receta, incluyendo nuevos ingredientes, nuevos modos
de emplatar la comida (es decir, el conocimiento) para que el deseo de alimentarse sea
provocado por la imagen que estimula el manjar construido con diferentes alimentos,
colores y sabores (conocimientos, actividades, interrogantes, medios tecnológicos,
entre otros ingredientes). ¿Y si pensamos recetas nuevas con nuevos medios
tecnológicos y nuevos modos de promover el aprendizaje? ¿Qué pasará si a la receta
la imaginamos, no como algo que deba ser aplicado de igual modo ante todos los
comensales-alumnos, sino para agradar de manera particular a cada uno de los que se
sienten en la mesa-pupitre? ¿Qué sucederá si la miramos desde otra perspectiva?
2
Lash, S. (2005) Crítica de la información. Ed. Amorrortu. Capítulo 12, tercera parte.
4
parte de la cultura debe aprender a utilizar esos instrumentos mediadores que no sólo
se tomarán del entorno, sino que deben ser interiorizados por él. Dichos instrumentos
exigen el desarrollo de una serie de procesos psicológicos tales como el pensamiento
crítico, la reflexión y la contrastación, entre otros. De este modo cada uno va
construyendo su subjetividad, su singularidad, va tomando conciencia de si mismo.
leer
escribir
pensar
proponer
Los seres humanos vivimos en un entorno transformado por nosotros mismos y por los
artefactos que fueron producidos por generaciones anteriores. La función básica de
esos artefactos es la de relacionar a los seres humanos con el mundo físico, natural y
con los demás seres humanos (mundo socio-cultural). Como consecuencia de ello, los
seres humanos viven simultáneamente en el doble mundo natural y artificial.
La cultura, en este sentido, debe ser considerada como el más importante medio de la
existencia humana. En la sociedad contemporánea, no podemos negar la incidencia de
la cultura tecnológica, y en concreto, al gran avance de las tecnologías de la
información y la comunicación. Éstas han generado diversas herramientas, que lenta
pero firmemente avanzan y se entretejen con nuestras vidas. En consecuencia,
constituye un verdadero desafío enseñar tecnología a través de la tecnología. Será
necesario entonces pensar cómo utilizar los entornos virtuales o los diferentes modos
de conectividad, por ejemplo, sin dejar de reflexionar acerca de su incidencia en los
vínculos humanos, en las interacciones, en los intercambios, en los afectos, en el
propio desarrollo del pensamiento. Las tecnologías digitales y los medios audiovisuales
ofrecen nuevas e infinitas potencialidades para la transmisión de saberes. Igualmente,
es necesario aprender a superar los temores que ellas provocan, las resistencias al
cambio dentro de la comunidad escolar y reconocer así que es importante una
transformación radical, desde las formas de representación y percepción de lenguajes,
hasta los modos y medios de información que se utilizan.
5
Sin embargo, uno de los problemas más difíciles con el que nos enfrentamos frente a
estas tecnologías, es determinar acerca de cuál es el impacto de estas tecnologías en
la familia, en la escuela, y, -como consecuencia ineludible- en los sistemas políticos,
económicos y científicos. Para ello, pensemos en el cambio de algunos rituales o
actividades sociales significativas que adquirieron relevancia en estos últimos años: el
amigo era la persona con la que compartíamos una salida, el estudio, una conversación
cara a cara. Hoy, se puede tener “un millón de amigos” con los que intercambiar
impresiones acerca de una película, el comentario de un artículo, una noticia, en el
Twiter o en Facebook, sentado frente a la computadora. Las actividades sociales, las
actividades que hacíamos frente a otros, actividades del ámbito de lo público, hoy
podemos concretarlas en la privacidad del hogar. Lo que antes era privado, ahora lo
podemos ver, conocer y hasta participar virtualmente en la computadora, en las redes
sociales, en la televisión. Los reality shows son la más clara expresión de lo que
expongo.
Nos referiremos ahora no sólo a leer los procesos del percibir y comprender la
escritura; a interpretar lo impreso o lo escrito a través del conocimiento de los signos; o
interpretar y comprender algo que está oculto dentro del propio texto. Leer es
comprender la totalidad de lo que se percibe, de lo que pasa a nuestro alrededor, de lo
que le pasa a otro, de lo que me pasa a mí, de lo que hago y de lo que hacen los otros,
es decir la realidad, la vida. Leer y escribir son modos de comunicación social, porque
tienen que ver con la conformación de los sujetos. Leer y escribir no son sólo actos
individuales, sino el componente clave de la comunicación social. Actualmente no sólo
leemos y escribimos textos sino también música, graffiti, imágenes, mensajes de texto,
información en distintos medios, utilizando Internet, etc. Leer implica prácticas muy
diferentes, según lo que se lea, para qué se lea y donde se lo haga. Generalmente leer
se asocia a una función instrumental ligada a la tarea escolar o laboral. Hay aquí una
sola perspectiva sobre la lectura. Para la tradición educativa, leer es sólo leer un texto,
leer es fundamentalmente leer en la escuela.
Un sujeto, como sujeto social, también debe saber leer en esas múltiples dimensiones
para interpretar una información, un hecho o un suceso. Debe saber leer para
participar, para criticar, para proponer, para tener palabra, para tener un lugar como
ciudadano. Pero no sólo hay que saber leer, sino también escribir desde esta
perspectiva. Esto es la posibilidad para tener voz y voto en las decisiones personales o
colectivas.
6
Sin la escritura no hay lectura, y recíprocamente. Sin leer ni escribir será más difícil
decodificar la realidad, para conocerla, comprenderla y transformarla. Esta realidad
ante la cual cada día nos formulamos interrogantes, en donde lo simple se transforma
en complejo al acercarnos a ella. Para vivir plenamente en la sociedad contemporánea,
hay que saber no sólo leer, sino también escribir. Si no leemos o escribimos no nos
podremos integrar socialmente. El conocimiento es la posibilidad de crecimiento
individual y social, y, desde luego, la tecnología posee un lenguaje inherente, que hay
que conocer y manejar. Apropiarse de la lectura es hacer de la palabra
multidimensional un modo de presencia real, un modo de intercambio activo y de
interacción social. Aprender a leer y escribir hoy día es aprender a construir una
escucha y a tener una palabra propia.
Un artefacto o un objeto es como un texto que se puede leer, es como pasar la vista por
lo escrito o impreso comprendiendo la significación de los caracteres empleados; pero
también es como comprender el sentido de cualquier otro tipo de representación
simbólica. Leer el mundo tecnológico es como un proceso detectivesco…se entiende a
través de indicios, de pistas, el proceso creativo de alguien, sus intuiciones, o algo
oculto que le ha sucedido. Leer de esta manera, implica analizar, desagregar para
comprender: se trata de una operación cognitiva frente a un objeto o un proceso o un
sistema; saber leer, interpretar y comprender no solo objetos y procesos, sino todo tipo
de información que se transmite por los distintos tipos de canales informativos, la TV, la
radio, los periódicos, Facebook, Internet y las publicidades, entre otros.
La construcción de las nuevas subjetividades nos obliga a pensar acerca del sentido
que tiene la tecnología, y más específicamente las tecnologías de la información y la
comunicación, en la formación de los sujetos.
Hoy no sólo se es lo que se hace, sino aún, dicho más enfáticamente, se es lo que se
usa. Esto contribuye a la constitución de la subjetividad. Se trata entonces de una
cuestión que debe ser considerada en la escuela.
A veces nuestro sentido común nos engaña al hacernos imaginar que las tecnologías
pueden ser independientes de las otras variables que conforman nuestro ser. Lo obvio
8
se esconde ante nuestros ojos, y, al decir de Andrew Feenberg3, los peces no saben
que están mojados. De igual manera, nosotros no advertimos la dependencia que
tenemos acerca de la tecnología.
3
“Las diez paradojas de la tecnología”. Feenberg es Dr. En Filosofía de la Tecnología en la universidad Simon Fraser de Canadá.
9
Bibliografía
-BLEICHMAR, SILVIA (2009) El desmantelamiento de la subjetividad-estallido del yo.
Colección Psicoanálisis, Sociedad y Cultura. Topía. Bs. As.
- HASSOUN, JACQUES (1996) Los contrabandistas de la memoria. Buenos Aires,
Ediciones de la Flor.
- LELIWA, SUSANA (2008) Enseñar Educación Tecnológica en los escenarios actuales.
Ed. Comunicarte. Córdoba.
-LELIWA, SUSANA (2010) La tecnología una dimensión más a considerar en la
construcción de la subjetividad. VI Congreso de Educación Tecnológica. Instituto
Superior del Profesorado Tecnológico. Córdoba. 14-15 Junio (Memorias).
-LELIWA, S. SCANGARELLO, I (2011) Psicología y Educación. Una relación
indiscutible. Ed. Brujas. Córdoba.
-RODRIGUEZ, PABLO. (2008) De hombres, bestias y máquinas. Revista Ñ. Revista de
cultura.
-FEENBERG, A. 2009. Las diez paradojas de la tecnología. Conferencia dictada en la
Fac. de Cs. Físicas y Naturales de la UNC. Córdoba.
Fuentes electrónicas
- ARCHUF, LEONOR La imagen: Poderes y violencias
http://tramas.flacso.org.ar/articulos/la-imagen-poderes-y-violencias (Consulta 26/03/12).
- DELEUZE, GILLES. Conversaciones. Cap 5. Política 17. Post-Scriptum sobre las
sociedades de control. www.philosophia.cl/ (Consulta: 29/09/2010)
- CASTELL, MANUEL (1996). La era de la información. Vol.1. Alianza Editorial.
Biblioteca Virtual de Ciencias Sociales.
www.cholonautas.edu.pe/modulo/upload/castells/cap5.pdf (Consulta: 23/10/2010)
- BERARDI, FRANCO. Mediamutación. Capítulo: Cultura de los medios y crisis de los
valores humanistas. Revista la Biblioteca.
www.bn.gov.ar/imagenes/revistas/anx9 (Consulta: 10/10/2010).
-LASH, SCOTT. Crítica de la información. Capítulo 12, tercera parte.
www.bahiapsicosocial.com.ar/scott-lash-critica-de-la-informacion/ (Consulta:
09/09/2011).
10
Susana Leliwa
Publicó numerosos artículos, así como el libro Enseñar Educación Tecnológica en los
escenarios actuales, (2008) Ed. ComunicArte. Córdoba.
11