Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
* \ 1<
t/l *
Quijote i y Sancho Panza
EU
{ *
A t "•
t
I Í?
VITORIA
1905
i
J
DON QUIJOTE
"2"
SANCHO PANZA
VITORIA
POE
VITORIA
1905
-A la conciencia humana
DON QUIJOTE.
. A la socarronería humana
SANCHO PANZA.
¿PARTE PRIMERA
FESTIVIDADES
Al Exorno. Señor Ministro de la Gober¬
nación española.
»
y te dejas morir sin que nadie te mate, entres otra vez en
»la gloria de que sales ahora : hacerte maestro de escuela en
»España. »
Y en efecto, aquí me tiene vuesa merced de maestro
de escuela, y 110 creáis, señor mío, que he cargado con esta
cruz, más pesada que la del Grorbea, porque unos cuantos
ilusos hayan dicho que yo fui un pedagogo y mi libro una
Pedagogía, no, señor Excelentísimo ; es que yo he disfrutado
de la gloria y aquello no se parece á nada, sino á sí mismo, y
»
porque está atenido á la miseria de su paga, que viene tarde
» ó nunca fvuesa merced, Sr. Besada, sabrá si esto de « nunca »
» va á ser ó no cierto, que en lo de tarde ya lo sabemos), ó á lo
»
que garbeare por sus manos con notable peligro de su vida y
» de su conciencia ; y á veces suele ser su desnudez tanta, que
» un coleto acuchillado le sirve de gala y de camisa, y en la
tierra y del cielo, que fué quien dijo : Paz sea en esta casa.
Mi paz os doy, mi paz os dejo, paz sea entre vosotros, digo que
(1) Nota importante.—Compuesto este trabajo antes de la «caída» del Sr. Besa¬
da, vea el nuevo Ministro de la Gobernación Sr. García Prieto si se le aplican ó no
estas «coplas.»
(2) Que es el alegado en contra mía.
14 Juan Fernández Carrero
«
Cualquier otra nueva contribución, renta ó impuesto que las
»
leyes de presupuestos sucesivas establezcan SERÁN OBLIGA -
» TORIOS & las provincias vascongadas y la caritidad que las
»
corresponda satisfacer al Estado, se liará efectiva por los
» medios que el G-obierno determine, oyendo previamente á las
»
respectivas Diputaciones provinciales. »
Y como la ley de presupuestos de 28 de Septiembre de
1898 estableció en su artículo 16 la nueva contribución ó im¬
puesto de mi gratificación, la obligación contraída por el fue¬
ro vascongado obliga á la diputacion provincial de álava á
pagarme las 500 pesetas anuales por mi trabajo diario en los
estudios y prácticas del Magisterio, por los medios que el Go¬
bierno determine, oyendo préviamente á dicha Diputación. Y
como el Gobierno ha oído repetidamente á la Diputación y
ha determinado (también repetidamente) que el medio de
pagarme sea esta Diputación directamente, aquí se está fal¬
tando al compromiso contraído solemnemente por el fuero
» ciones
oficiales, informes laudatorios y los once premios ex-
»traordinarios que el « caballero de los Leones » traía en
» su coleto como trofeos de sus
campañas educativas y lite-
» rarias en
pró de los niños desvalidos y tirados por esas ca-
»lies, y en desagravio y desfacimiento de los tuertos causados
» á la
justicia, á la ley, á la conciencia, á la educación, á la
» enseñanza yá la verdad. » Y como todo esto no era bastan-
»te hemos tenido que suplantar la verdad oficial, consignada
» en expediente, para que el «Ingenioso Hidalgo » sea aquí
»encarcelado y rotulado además con este epitafuero :
» Es salvaje de Esparta,
un
»
y ante su tenacidad
»
por que triunfe la verdad,
»
que un rayo de Dios lo parta. »
detenerme si se trata de
una aventura caballeresca, héme
Don Quijote.
FORMALIDADES
TRAEMJO PREMIADO
quiero acordarme?....,,
LEMA :
t en Madrid á 23 de Abril de
16(6.
Señores :
El acto de entrar el
pensamiento ajeno para salir
en
consiguiente.
Fundo esta modesta opinión mía en que la palabra
« conocida, » á
pesar de haberse inventado, según San Agus-
24 Juan Fernández Carrero
tín, para decir con ella lo que se siente, muchas veces expre¬
samos con ella lo que no sentimos ; es decir, que los hombres
« No te metas en dibu-
» ni en saber
pidas aje-
»
que en lo que no va ni vie-
»
pasar de largo es cordu- »
26 Juan Fernández Carrero
II
decir en su inciso
« de
cuyo nombre no quiero acordarme... »,
yo no lo he leído, pero he oído referir algo sobre ello que no
me ha satisfecho del todo, ni tampoco le habrá satisfecho al
III
primera aventura
dos los siglos: sin el Sr. Alonso Quijano y sin la cárcel de Ar-
gamasilla de Alba es casi seguro que no tendríamos El Qui¬
jote, libro que ha merecido los honores de una definición se¬
IV
SEGUNDA AVENTURA
él solamente.
¡ Desdichado de mí! En la primera aventura me rom¬
pieron la lanza, en la segunda he perdido el palo con que
torné á la lucha literaria, y ya no me queda otra cosa que las
manos para combatir en pró de la conquista de mi probable
escasos y que por el pronto nada podía hacer, pero que vería
Don Quijote y Sancho Panza en Vitoria 35
desgracia.
Qué suposición es esa ?—La hipótesis existe, pero como
yo no he podido hallarla voy á arrebatársela á quien la haya
encontrado, y voy á hacer más, porque voy á oficiar de dios
Saturno : me voy á comer á mi hija querida, la hipótesis, que
es lo único que resta ya á mi indigente voracidad, y en prue¬
HE DICHO.
25 de Abril de 1905.
Sr. D. Eduardo de Velasco, presidente de la Diputación provincial de Alava.
Excmo. Sr. D. Vicente González de Echávarri, vicepresidente de la Comisión provincial.
• *
rrespondiente al tema, y por cuyo favor les estoy agradecido en sumo grado, pues la
Don Lorenzo de Miranda sobre la significación del segundo premio en la «justa lite¬
raria. »