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El arte como medio de pensamiento

a través de la historia

Dentro de todo el análisis que Van Alphen desarrolla sobre los conceptos de arte, historia y
estética, plantea la visión de Huber Damisch en la cual éste se refiere al pensamiento del
arte, es decir a que el arte piensa, y por ende lleva al espectador a pensar sobre la obra.

El arte debe tener una postura crítica ( que es la manera como se toma en los estudios de la
estética moderna) que además parte de los objetos culturales que de alguna manera, toman
un papel de “agente activo” dentro de la cultura, ya que a través de los objetos podemos
entender el pensamiento de un pueblo.
De ésta manera Alphen parte de una afirmación dada por éste filósofo e historiador Huber
Damisch, de que el arte “piensa”. Así, nos explica que la obra de arte como conocimiento
crítico, pone al concepto de estética como otro elemento más dentro de el desarrollo de la
razón.

Ernts Van Alphen nos habla además, de cómo el arte adquiere un valor semiótico planteado
también por Christoph Menke, en donde reduce las formas de la obra a elementos del signo
conformados por el significado y el significante, donde el conocimiento estético va ligado a
lo que se entiende como significantes, los cuales conllevan a la comprensión del
significado, en donde el espectador se pregunta de verdad que significa la obra o si en
realidad significa algo.
Todos estos significantes dependen también del valor estético que se les da de acuerdo a
quien observa la obra, porque lo que nos muestran además en el texto, es la estética del arte
como agente activo, ya que produce aspectos universales en donde se vinculan elementos
filosóficos y transhistóricos.
Debido a que el significante nunca puede sr definitivamente
identificado en el proceso del conocimiento estético, sino que
siempre se pierde en una fluctuación interminable, el puente
que define el signo comprensible en el conocimiento estético
se quiebra entre las dos dimensiones de la representación
semiótica. (p.36)

Entonces nos hacen ver que las fracturas estéticas conducen a nuevos significantes y esto
hace que el arte se convierta en autónomo, es decir que no solo es el reflejo de una época
dada o de un momento específico, sino que conduce a un conocimiento.
Nos hace buscar nuevas conexiones entre significado y significante ya que las
representaciones dadas dependen de cada punto de vista del espectador que la analiza.
Entonces la afirmación de que el arte piensa y que lleva al espectador a pensar, lo convierte
en un medio de expresión cultural.

Para Damisch, por lo que nos plantea Van Alphen, el arte piensa porque es el artista quien
lo realiza, es él quien piensa, y ese pensamiento lo transmite a través de la obra, esto lo
lleva entonces a ser una reflexión del pensamiento del artista, de esta manera el arte no solo
toma el papel de la manifestación de un pueblo en una época determinada sino, desde un
punto de vista filosófico e intelectual, pasa a ser un acto de pensamiento.
De ésta manera nos presenta también su postura de que la estética dentro del aspecto
filosófico se relaciona de manera directa con el concepto de belleza, entonces Damisch
plantea que cuando pensamos en ese termino, es muy difícil de definir.
Por esta razón, toma dos visiones totalmente opuestas a partir de dos enfoques planteados,
uno por Kant y otro por Freud.

En el caso de Freud encuentra que el autor asume que no tiene mucho que decir, aunque por
el texto, Damisch ve que Freud establece un nexo entre la belleza y las emociones que se
nos producen internamente, es decir, que para nosotros, según Freud, lo bello se liga al
sentimiento.
“Belleza” y “encanto” son, originalmente, los atributos del
objeto sexual. Es preciso mencionar que, sin embargo, los
genitales, cuya visión siempre es excitante, raramente se han
considerado como algo hermoso; La cualidad de la belleza
parece, más bien, estar vinculada a ciertos caracteres sexuales
secundarios. (p. 83)

Por el contrario para Kant, el gusto, es el poder de definir si algo es bello o no. Ya no
ligado al sentimiento, sino más al conocimiento estético que se tenga sobre lo que se está
viendo o analizando.

Damisch a partir del estudio de los textos de los autores mencionados, concluye que el arte
se convierte en un elemento atractivo tanto en la parte estética como en el campo del
conocimiento. Se da cuenta que el arte atrae físicamente al espectador, el cual genera
definitivamente, una conexión con la obra a partir de los diferentes signos, significados y
significantes que se presentan dentro de lo que el espectador encuentra en el arte.
Vemos entonces que el arte no es solo un reflejo de la sociedad, de un momento, de una
época, sino el pensamiento del artista que queda implícito en la obra y que genera
articulaciones entre un momento y otro, creando conexiones para el entendimiento del
estudio de la historia, y que al ser un elemento tomado también desde el punto de vista
filosófico, ayuda a analizar al arte y los estudios visuales y culturales, desde otras
perspectivas.

Presentado a: Jairo Montoya


Presentado por: Marcela Reyes
Mayo de 2018
Ultimo trabajo
“¿Qué historia, la historia de quien, historia con qué propósito?

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