No es sencillo ponerse en los zapatos de otro y pretender entender cuáles

son sus pensamientos con respecto a algo, sin embargo, es bastante claro que
este país no va a progresar mientras se encuentre en medio de una guerra
interna y miles de personas mueran a causa de ella, y si bien muchas personas
no están estrechamente relacionadas con esta tragedia, es algo que concierne
a cada colombiana. Es una tragedia que se ha ido desarrollando en frente
nuestro.
Intentando ponerme en el papel de víctima de este conflicto armado,
considero que la reforma rural integral es un gran paso tanto para los territorios
que han sido víctimas de la guerra, las personas involucradas que tienen que
vivir en la miseria y grandes dificultades, como lo es para el progreso del país.
La participación política, aun cuando no es la idea más convincente y llena
de dudas en cuanto a la dirección a la que se dirige el país, en definitiva es mejor
saber con exactitud cuáles son los ideales de los grupos armados al margen de
la ley y poder llegar a concesiones con ellos con el objetivo de acabar con este
conflicto armado de más de medio siglos y que además lleva a cuesta la vida de
muchas personas, la desdicha de muchas otras y el vivir en condiciones
precarias a otras miles, y no solo eso, una guerra que le cuesta millones al país
y que no le permite progresar.
Si bien es elección de cada quien el iniciar con el consumo de drogas, es
sumamente importante acabar con el problema de narcóticos en el país, de
alguna forma presentarles alternativas de siembra a los propietarios d esos
cultivos y sobre todo brindarle el apoyo a los consumidores, darles la oportunidad
d redireccionar sus vidas y convertirse en una mejor versión de sí mismos.
Aunado a lo anterior es sumamente trascendental, no solo realizar
acuerdos sobre las victimas sino cumplirlos, acuerdos que permitan a estas
víctimas sobrellevar la pena y el dolor, salir adelante con una buena calidad de
vida, restituciones que no se lleven años, mientras estas personas pasan
dificultades esperando que el gobierno haga algo al respecto.
Por ultimo pero no menos importante la implementación y verificación de
cada uno de los ítems del acuerdo de paz debe ser constante y debe estar en
anos de personas integras que se aseguren que todo vaya de acuerdo a lo
acordado.
 Si bien es cierto que todos el reconocimiento y los cambios no lograran
borrar cada dolor, pena, miedo y las pesadillas de las personas que han tenido
que vivir en carne propia las consecuencias de esta guerra interna por la que ha
pasado el país en más de 50 años, el saber que no habrán más de estas
personas, mas perdidas, mas miseria, más miedo, les da esperanza.
Esperanza en un futuro próspero e igualitario, un futuro lleno de
oportunidades para las generaciones venideras, un futuro sin ver y sentir como
perdemos una pierna por culpa de una mina antipersona, un futuro donde no
tengamos que dejar nuestro hogar.