EDUCACIÓN UNIVERSITARIA, CIENCIA Y TECNOLOGÍA UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LOS LLANOS OCCIDENTALES EZEQUIEL ZAMORA SAN CRISTÓBAL – ESTADO TÁCHIRA
El Cumplimiento de los Deberes Formales se concibe como la correcta aplicación del programa de tributos, los cuales se encuentran orientados a desarrollar y fortalecer la cultura tributaria de las organizaciones enmarcadas dentro de la sociedad, una de las principales estrategias organizacionales debe ser cumplir con la planificación tributaria al 100%, es decir, acatar con exactitud las obligaciones ante la administración nacional en relación a los deberes formales producto de sus operaciones comerciales que se ejecutan normalmente, como resultado de la actividad económica que desarrollan, así como de la equilibrada relación que se debe mantener con la administración tributaria. Estas obligaciones se centran en el establecimiento de la diversidad de directrices cimentadas para cumplir los plazos de cancelación de los deberes formales, con la finalidad de evitar multas, penalizaciones e inclusive el posible cierre de la operatividad de las empresas. Los Contribuyentes por otra parte, deben suministrar de forma eventual o periódicamente, la información que con carácter general le requiere el ente Administrativo Tributario. Dicha información será utilizada única y exclusivamente para fines tributarios, debiendo suministrarse en la forma, condiciones y oportunidad que determine el organismo regulador. Estos impuestos, tasas y contribuciones se encuentran establecidos en cuerpos normativos inscritos en leyes especiales tributarias, en las cuales se crea la obligación impositiva y se establecen los contribuyentes que estarán obligados a cumplirla, así como todo un esquema de control que coadyuva a la percepción dineraria por parte del sujeto activo acreedor del tributo.
Las obligaciones que corresponden a los contribuyentes pueden ser
de tipo material y formal, las materiales corresponden al pago del tributo y las formales a los deberes formales que éstos deben cumplir por mandato de la Ley tributaria que crea el impuesto, la contribución o la tasa. Los deberes formales sirven de apoyo a las labores de control del tributo, ejercidas por la Administración Tributaria a favor del sujeto activo acreedor del importe fiscal, de tal forma que éstos facilitan la labor de vigilancia y seguimiento que se efectúa para garantizar el cumplimiento de la obligación material o de pago del tributo. El cumplimiento de los Deberes Formales es una estrategia de carácter coercitivo que deben cumplir todas las organizaciones, con la finalidad de enterar y cancelar las obligaciones tributarias, razón por la cual el Estado como ente propulsor de la aplicación de la cultura tributaria debe ejecutar una diversidad de programas y acciones que garanticen la correcta divulgación de los debes que impone la actuación entre el sujeto activo (la nación) y los sujetos pasivos (las organizaciones que deben cumplir los deberes) en función de los lineamientos establecidos y controlados para guiar la operatividad organizacional. Los Deberes Formales vienen siendo las obligaciones impuestas por el Código Orgánico Tributario Venezolano o por otras normas tributarias a los contribuyentes, responsables o determinados terceros, los cuales persiguen el principio de progresividad; se deben hacer cumplir por todas las personas naturales y jurídicas que desarrollan actividad económica dentro del país. El Ejecutivo Nacional, podrá establecer factores de descuentos por los pagos que se efectúen en forma anticipada ante la cancelación formal de los tributos establecidos.
Existen diferentes tipologías de contribuyentes; los ordinarios, son los
que por su actividad ejecutan operaciones que constituyen hechos imponibles de conformidad con la ley; los especiales, conformados por aquellos sujetos que han sido expresamente calificados y notificados por la administración tributaria, atendiendo al nivel de ingresos brutos anuales. Estos sujetos pueden ser o no entes públicos, empresas privadas, personas naturales o jurídicas; y, puede que sean o no contribuyentes ordinarios del Impuesto al Valor Agregado, lo cual dependerá no de su calificación como contribuyente especial, sino del hecho de que estén o no sujetos al Impuesto y que realicen o no los hechos imponibles. Los contribuyentes formales son todos aquellos sujetos que realicen exclusivamente actividades u operaciones exentas o exoneradas del impuesto, sólo están obligados a cumplir con los deberes formales qué corresponden a los contribuyentes ordinarios, pudiendo la Administración Tributaria, establecer características especiales para el cumplimiento los deberes o simplificarlos; y los contribuyentes ocasionales las empresas públicas, institutos autónomos y entes descentralizados y desconcentrados de la República, Estados y Municipios; así como las entidades que aquellos pudieren crear, cuando realicen los hechos imponibles contemplados o establecidos en el basamento de Ley.
Las normas jurídicas que regulan el sistema tributario y amparan el
cumplimiento de los deberes formales, están contenidas en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y el Código Orgánico Tributario. La Carta Magna de forma especial hace referencia al Sistema Tributario en sus artículos 133, 316 y 317, los cuales expresan que toda persona tiene el deber de coadyuvar a los gastos públicos mediante el pago de impuestos, tasas y contribuciones; el sistema tributario procurará la justa distribución de las cargas publicas según la capacidad económica del contribuyente, atendiendo al principio de progresividad, todo impuesto, tasa y contribución debe estar establecidos formalmente en la ley. Los deberes formales los podemos contemplar en el Código Orgánico Tributario en su artículo 155, el cual señala la obligación de: Llevar en forma debida y oportuna los libros y registros especiales, conforme a las normas legales y los principios de contabilidad generalmente aceptados, referentes a actividades y operaciones que se vinculen a la tributación y mantenerlos en el domicilio o establecimiento del contribuyente y responsable, tal es el caso de los libros de compras y ventas para los contribuyentes del IVA o el libro de ajustes fiscales para los contribuyentes del ISLR. Inscribirse en los registros pertinentes, aportando los datos necesarios y comunicando oportunamente sus modificaciones, tal es el caso del RIF y el NIT. Colocar el número de inscripción en los documentos, declaraciones y en las actuaciones ante la Administración Tributaria, o en los demás casos en que se exija hacerlo. Solicitar a la autoridad que corresponda permisos previos o de habilitación de locales. Presentar, dentro del plazo fijado, las declaraciones que correspondan. Emitir los documentos exigidos por las leyes tributarias especiales, cumpliendo con los requisitos y formalidades en ellas requeridos, dentro de los cuales incluimos las facturas y los comprobantes de retención. Exhibir y conservar en forma ordenada, mientras el tributo no esté prescrito, los libros de comercio, los libros y registros especiales, los documentos y antecedentes de las operaciones o situaciones que constituyan hechos imponibles. Contribuir con los funcionarios autorizados en la realización de las inspecciones y fiscalizaciones, en cualquier lugar, establecimientos comerciales o industriales, oficinas, depósitos, buques, aeronaves y otros medios de transporte. Exhibir en las oficinas o ante los funcionarios autorizados, las declaraciones, informes, documentos, comprobantes de legítima procedencia de mercancías, relacionadas con hechos imponibles, y realizar las aclaraciones que les fueren solicitadas. Comunicar cualquier cambio en la situación que pueda dar lugar a la alteración de su responsabilidad tributaria, especialmente cuando se trate del inicio o término de las actividades del contribuyente. Comparecer ante las oficinas de la Administración Tributaria cuando su presencia sea requerida. Dar cumplimiento a las resoluciones, órdenes, providencias y demás decisiones dictadas por los órganos y autoridades tributarias, debidamente notificadas.
Los ilícitos formales y sus sanciones, se encuentran desarrollados en los
artículos 99 al 108 del Código Orgánico Tributario. El artículo 182 del Código Orgánico Tributario, establece que: “Las declaraciones presentadas por los contribuyentes o responsables podrán ser verificadas por la Administración Tributaria con el fin de realizar los ajustes respectivos. A su vez, corroborar el cumplimiento de los deberes formales previstos en este Código” Mientras que artículo 185, señala que: “Si en el momento de verificar las declaraciones por parte de la Administración Tributaria se comprueba diferencia entre los tributos autoliquidados o en las cantidades pagadas, se efectuaran ajustes respectivos mediante resolución.
Ambos artículos señalan la potestad que posee la administración
tributaria (SENIAT) de examinar y validar el contenido de las declaraciones presentadas por los contribuyentes o responsables, en el caso de llegarse a encontrar y comprobar diferencia alguna se procederá a ejecutar los ajustes correspondientes mediante una resolución y previa notificación al sujeto pasivo, quien deberá cancelar el monto de la obligación determinada por el organismo rector. El Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en su artículo 11, nos indica que la administración tributaria puede designar como Agente de Retención a quienes por sus funciones públicas o por razón de sus actividades privadas intervengan en operaciones gravadas con el impuesto establecido en esa ley. Los artículos 54 y 57 nos señala que los contribuyentes están obligados a emitir facturas por sus ventas o prestación de sus servicios. Estas podrán ser reemplazadas por otros documentos bajo la autorización de la Administración Tributaria, también detalla los requisitos que debe contener la factura o documento, entre los que podemos encontrar numeración consecutiva de la factura y del número de control, nombre completo, domicilio fiscal del emisor, RIF, nombre del adquiriente, base imponible y monto del impuesto según la alícuota aplicable al igual que el total facturado. Los artículos mencionados hacen énfasis en el control que se debe poseer en el proceso de emisión de facturas, así como en los requisitos de facturación que toda persona natural o jurídica debe tomar en cuenta al momento de ejecutar sus operaciones. Igualmente se establece la potestad que posee la administración tributaria de designar organismos que funcionen como agente de retención de Impuesto al Valor Agregado, todo esto con la finalidad de poder verificar, controlar su aplicación y cumplimiento por parte de los sujetos pasivos; los cuales impone el estado como sujeto activo y controlador de la actividad.
La Fiscalización Tributaria es el acto administrativo emanado del
organismo competente para controlar y realizar la determinación tributaria, con el objeto de comprobar el exacto y correcto cumplimiento de las obligaciones tributarias por parte del sujeto pasivo. Toda declaración hecha por el sujeto pasivo o administrador, se encuentra protegida por la presunción de buena fe, es decir, se toma como cierta la declaración de las personas interesadas, salvo prueba en contrario. El legislador ha establecido en las normas del código orgánico tributario, todo el procedimiento necesario para efectuar las labores de fiscalización o de comprobación de lo declarado por el sujeto pasivo, con la finalidad de declarar la existencia y cuantía de un crédito tributario a favor de la Administración Tributaria, del sujeto pasivo, o la inexistencia de crédito. En aquellos casos en que la actuación fiscal detecta en las actuaciones del contribuyente inconsistencias u omisiones que afectan la capacidad económica o contributiva declarada, queda destruida la presunción de buena fe que inicialmente ampara la declaración del administrado, siendo necesario que el funcionario se encuentre suficientemente dotado de competencia y que sus actuaciones se encuentren enmarcadas dentro de las normas legales y reglamentarias.
Para finalizar la presente investigación, interesante en su pleno
desarrollo, me atrevería a indicar que el SENIAT debe abrir campañas informativas dirigidas a los contribuyentes, en lo que se refiere a deberes formales e ilícitos que pueden cometerse por su omisión, con el fin de minimizar el incumplimiento de los mismos. Los contribuyentes responsables deben mostrar mayor eficiencia en cuanto a los procesos de facturación, control interno, formalidades de los libros y los demás deberes con los que deben cumplir. El SENIAT podría efectuar de manera más consecutiva los procedimientos de verificación del cumplimiento de los deberes formales, con el objeto de que se ejecute correctamente y de esa manera tener un mejor control de la recaudación. BIBLIOGRAFIA
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Año 1999.