Você está na página 1de 7

COMUNICACIÓN ASERTIVA Y MANEJO DE EMOCIONES EN ADOLESCENTES

DE LOS GRADOS OCTAVO, NOVENO Y DÉCIMO DE LA INSTITUCIÓN


EDUCATIVA ANORÍ

OBJETIVO: Crear espacios psicoeducativos en torno a la comunicación asertiva y el


manejo de emociones en adolescentes de los grados octavo, noveno y décimo de la
institución educativa Anorí bajo la metodología del taller reflexivo.

JUSTIFICACIÓN TEÓRICA:Las emociones son alteraciones súbitas y rápidas que


experimentamos desde nuestro estado de ánimo, la mayoría de veces por ideas, recuerdos o
circunstancias. Algunas de las más comunes son: la ira, la tristeza, el temor, el placer, la
sorpresa, el disgusto, la vergüenza y el amor, aunque este último es considerado también un
sentimiento. Todas ellas son muestras de sensaciones fugaces, que vienen y van, como ya
dijimos, de acuerdo al estado de ánimo en el que nos encontremos; sin embargo, de ellas se
desprenden los sentimientos que son sensaciones más duraderas y perdurables en términos
de temporalidad y a través de diversas circunstancias.

Podemos evidenciar que la ira, el enojo, la irritación, el odio y el resentimiento, son


emociones negativas que experimentamos de acuerdo a nuestro estado de ánimo, es decir
que, si estamos molestos con alguien o por algo, o en ambas circunstancias, reaccionamos
demostrando las mismas; sin embargo, dichas emociones juegan un papel muy dañino en la
vida de los seres humanos, ya que debido a ellas realizamos actos de los cuales después nos
arrepentimos y casi nunca podemos reparar.

Por lo general, a pesar de que a nuestra mente lleguen pensamientos de infringir un daño
inmediato, al pasar unos instantes reflexionamos y actuamos de acuerdo a nuestros
principios éticos y valores inculcados; y dichos instintos bárbaros se quedan en nuestra
imaginación y hacen parte de las fantasías que quedarán en nuestro subconsciente, y que
nunca llevaremos al plano de lo real y físico.
El control de las emociones no es una tarea fácil, lo que debemos hacer es que estas
emociones jueguen a nuestro favor; la clave está en utilizarlas de forma inteligente, para
que trabajen en beneficio propio, de modo que nos ayuden a controlar nuestra conducta y
nuestros pensamientos, con el objetivo de obtener mejores resultados. Gracias a la
plasticidad de nuestro sistema nervioso podemos aprender, apropiarnos de ciertas
habilidades emocionales que brinden en el plano personal un rendimiento más óptimo y
mejores relaciones interpersonales y por consecuencia, una mejor calidad de vida, ya que
no entramos en conflicto con nosotros mismos ni con el otro.

Algunas de las recomendaciones que podemos ofrecer para descubrir, crear y mantener los
buenos hábitos que promuevan el fortalecimiento de la Inteligencia emocional son:

Aprender a escuchar antes de reaccionar: Cuando nos tomamos el tiempo de


analizar la información que estamos recibiendo y realizamos una retroalimentación
adecuada, podemos entender los motivos por los cuales se produjo una situación
determinada y podemos tomar los correctivos necesarios y adecuados para su
manejo.

Practicar la empatía: es decir ponernos en los zapatos del otro para poder
entenderlo desde su propia realidad. Cuando pensamos en el otro y nos
preocupamos por su situación, podemos llegar a apoyarlo sintiendo lo que él sentiría
o pensaría ante determinada situación, además podremos evitar su sufrimiento a
través de la comprensión y la solidaridad.

No personalizar todo lo que nos dicen, ni pensar que es una agresión directa a
nuestro ser: Cuando alguien nos dice algo que nos suene ofensivo o desagradable,
no debemos tomarlo tan a pecho, ni considerarlo como algo desafiante, simplemente
escuchamos y le damos la valoración que consideremos a la justa medida, sin
necesidad de dejarnos alterar negativamente por ello. Dar un manejo total y
consciente a nuestras emociones a través de la práctica continúa. Debemos aprender
a conocernos y entendernos a nosotros mismos para poder a conocer y entender a
los demás. Cuando logramos el autoconocimiento, somos capaces de lograr el
autocontrol, pues tenemos conciencia de todo aquello que nos afecta, o nos causa
malestar; así mismo lo que nos pone de buen humor y nos alegra la existencia, lo
podemos manejar a nuestro favor. Con la práctica continua de las acciones y
pensamientos positivos, logramos tener control sobre los momentos negativos y por
lo tanto sobre nuestras reacciones ante dichas emociones.

Autocontrolándonos a través de la respiración y la relajación: Cuando


experimentamos un estado de ansiedad o angustia, o cuando sentimos ira,
impotencia o cualquier emoción negativa, podemos controlarla respirando pausada
y tranquilamente y evocando recuerdos gratos que nos den paz interior y
tranquilidad.

Practicar el valor de la tolerancia y el entendimiento a nuestros semejantes: Si


entendemos que todos los seres humanos, pensamos, actuamos y reaccionamos de
forma diferente ante situaciones similares, lograremos entender que no hay verdades
absolutas y que lo que para mí es evidente y no tiene duda, tal vez para los demás no
lo sea tanto.

Ser asertivos al momento de comunicar nuestras inconformidades, haciéndolo


directamente con quien corresponde, en el momento justo, en la justa medida y por
la causa justa.

COMUNICACIÓN ASERTIVA

Existen diversas definiciones de asertividad. Ciertos autores consideran la asertividad como


la conducta que posibilita la disminución de la ansiedad, otros la consideran como la
defensa de los derechos propios y algunos como la habilidad para expresar sentimientos y
pensamientos. Riso (1988, p. 45) define la conducta asertiva como: Aquella conducta que
permite a la persona expresar adecuadamente (sin distorsiones cognitivas o ansiedad y
combinando los componentes verbales y no verbales de la manera más efectiva posible)
oposición (decir no, expresar desacuerdos, hacer y recibir críticas, defender derechos y
expresar en general sentimientos negativos) y afecto (dar y recibir elogios, expresar
sentimientos positivos en general) de acuerdo con sus intereses y objetivos, respetando el
derecho de los otros e intentando alcanzar la meta propuesta.

La conducta asertiva es definida por Güell y muñoz (2000) como “ la expresión


apropiada de las emociones en las relaciones, sin que se produzca ansiedad o agresividad.”

Por otro lado, tenemos la definición de Riso (2000) quien explica que una persona es
asertiva cuando tiene la capacidad de ejercer o defender sus derechos personales; por
ejemplo, decir “no”, expresar opiniones contrarias o desacuerdos y manifestar sentimiento
negativo sin permitir que la manipulen, como lo hace la persona sumisa, ni violar los
derechos de otras personas, como lo hace la agresiva.

La asertividad se encuentra dentro de las habilidades sociales y puede ser entendida como
aquel comportamiento a través del cual las personas pueden expresar sus sentimientos,
pensamientos, creencias o necesidades, sin generar daño u ofensa a los demás, permitiendo
de este modo generar oportunidades o espacios propicios para el diálogo y la vinculación
interpersonal.

De forma más clara, encontramos en Rodríguez y Serralde (1991), (citados por Gaeta y
Galvanovskis , 2009) las características más representativas de una persona asertiva:

Una persona asertiva se caracteriza por expresar libremente a través de sus palabras
lo que siente, piensa y quiere; por tener la capacidad de comunicarse con personas
de todos los niveles, de forma abierta, directa, franca y adecuada; esta persona tiene
una orientación activa en la vida; emite juicios de una manera respetuosa e
igualmente acepta sus limitaciones; y puede manifestar libremente sus emociones y
sus sentimientos evitando por un lado, la represión y, por el otro, la expresión
agresiva y destructiva de las mismos.
CRONOGRAMA DE ACTIVIDADES

Actividad Duración Objetivo Materiales


Encuadre grupal 5 minutos Fijar las normas de conducta para la realización del taller N/A
(restringir el uso del celular, pedir la palabra, escuchar,
respetar la opinión del otro.)
La vida en un 15 minutos Para esta dinámica se divide el grupo en dos subgrupos Cinta de enmascarar o tiza
rectángulo iguales y se les pide que ingresen en dos rectángulos
previamente dibujados en el suelo; todos deben ingresar en
el así no tengan mucho espacio y la única condición es no
salirse de él. Tendrán que organizarse en una fila por
estatura, edad, mes de nacimiento o cualquier otra
característica cuantitativa que implique organizarse de
mayor a menor. Al finalizar se crea una reflexión sobre las
dificultades comunicativas y emocionales que se
presentaron al realizar la actividad.
El mándala 20 minutos En los mismos grupos, se le pide a cada participante que Hojas de papel
elija dentro de sus pertenencias 3 elementos que sirvan Elementos para la
para construir un mándala en el suelo al que deben construcción del mándala
nombrar. Se elegirá al azar una persona de cada grupo que Cinta
se encargue de destruir el mándala cuando se le indique en
el momento de la socialización.

Cada grupo compartirá su experiencia en la construcción,


dificultades en la comunicación, nombre y significado del
mándala, también se dialogará frente a la emoción
suscitada por el sabotaje del mándala. Deberán escribir
estas emociones en hojas de papel y ponerlas en el centro
del salón para socializarlas.
CIERRE Y CONCLUSIONES

Abrir espacios de capacitación que permitan a los estudiantes de los grados octavo, noveno
y décimo de la Institución Educativa Anorí favorecerá los procesos de autoconocimiento,
los cuales son indispensables para control de las emociones y la comunicación asertiva con
los demás, ya que es precisamente en la adolescencia, la etapa en la que estos denominados
autos (autoestima, autocontrol, autoconocimiento y otros) se van consolidando.

Las condiciones socio familiares de este grupo poblacional en ocasiones no son


favorecedoras de espacios de reflexión que permitan que cada uno cuestione sus
actuaciones, formas de pensar y de sentir que a su vez permitan mejorar su interacción con
el medio que les rodea, ante este panorama, la Institución Educativa es el lugar en el que se
pueden abrir espacios de construcción personal orientados por personal capacitado, en este
caso las psicosociales de cuatro instituciones del municipio, que por medio de actividades
lúdicas propician espacios de construcción personal y grupal en el que se aprende a regular
las emociones y reconocer las de los otros buscando así el bienestar propio y de los demás.

Referencias:

Cano, S. y Zea, M.(2012) Manejar las emociones, factor importante en el mejoramiento de


la calidad de vida Revista Logos, Ciencia & Tecnología, vol. 4, núm. 1, julio-diciembre,
2012, pp. 58-67 Policía Nacional de Colombia Bogotá, Colombia. Visto en:
https://www.redalyc.org/pdf/5177/517751763003.pdf

Você também pode gostar