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La ley de la oferta y demanda es un modelo económico básico postulado para la formación

de precios de mercado de los bienes dentro de la escuela neoclásica y otras afines,1


usándose para explicar una gran variedad de fenómenos y procesos
tanto macro como microeconómicos. Además, sirve como base para otras teorías y modelos
económicos.23

Índice

 1Formulación básica
o 1.1Orígenes del modelo
 2Teoría fundamental
o 2.1La curva de oferta
o 2.2La curva de la demanda
o 2.3Cambios en la demanda y cantidad demandada
o 2.4Ejemplo: oferta y demanda en una economía de 6 personas
 3Generalizaciones
 4Críticas y limitaciones del modelo
 5Oferta y demanda empresariales
o 5.1La oferta de la empresa
o 5.2La demanda de la empresa
o 5.3La elasticidad de la demanda
 6Véase también
 7Referencias
 8Enlaces externos

Formulación básica[editar]
El modelo en su versión más sencilla se basa en la relación entre el precio de un bien y las
ventas del mismo, y asume que en un mercado de competencia perfecta, el precio de
mercado se establecerá en un punto —llamado punto de equilibrioprecio— en el cual se
produce un vaciamiento del mercado, es decir, todo lo producido se vende y no queda
demanda no satisfecha. El postulado de la oferta y la demanda implica tres leyes:4

1. Cuando, al precio corriente, la demanda excede la oferta, aumenta el precio.


Inversamente, cuando la oferta excede la demanda, disminuye el precio.
2. Un aumento en el precio, disminuye tarde o temprano la demanda y aumenta la oferta.
Inversamente, una disminución en el precio, aumenta tarde o temprano la demanda y
disminuye la oferta.
3. El precio tiende al nivel en el cual la demanda iguala la oferta.
En economía el modelo generalmente se usa en conjunto con el tanteo walrasiano.567
Naturalmente cuando falla algunas de las asunciones el comportamiento observado y el
predicho resultan algo discrepantes, se han intentado versiones más complicadas del modelo
substituyendo los supuestos básicos por otras asunciones lógicamente menos restrictivas,
pero en esos casos el modelo puede llegar a ser notoriamente más complicado. Como sucede
en la teoría del oligopolio, por ejemplo.

Orígenes del modelo[editar]


A pesar de que el modelo es generalmente atribuido a Alfred Marshall8 (debido a que ese
autor formalizó, analizó y extendió su aplicación), el origen del concepto es anterior.
La expresión ‘oferta y demanda’ fue acuñada por James Steuart Denham en su obra Estudio
de los principios de la economía política, publicada en 1767. Adam Smith usó esta frase en su
libro de 1776 La riqueza de las naciones, y David Ricardo, en su libro Principios de política
económica e impositiva de 1817, tituló un capítulo "Influencia de la demanda y la oferta en el
precio".Fue explicada en 1730 por el economista Irlandés Richard Cantillón, en su "Ensayo
sobre la naturaleza del comercio en general" en el capítulo II de la segunda parte.
En La riqueza de las naciones, Smith asume, en general, que la demanda es relativamente fija
en el plazo corto y mediano (dependiendo últimamente de la cantidad de personas), y que,
consecuentemente, es únicamente la oferta la que hace que el precio suba o baje. Conviene
recordar que en aquellos tiempos las empresas eran pequeñas, y solo podían contribuir, cada
una, fraccionalmente a satisfacer la demanda. Esto, junto a la existencia de libre competencia,
hacia que los precios de mercados disminuyeran al máximo posible, tendiendo al costo de
producción, el que, a su vez, depende de consideraciones técnicas, no de la demanda.
David Ricardo va aún más lejos afirmando: «Por abundante que sea la demanda, nunca
puede elevar permanentemente el precio de una mercancía sobre los gastos de su
producción, incluyendo en ese gasto la ganancia de los productores. Parece natural por lo
tanto buscar la causa de la variación del precio permanente en los gastos de producción.
Diminuyase esos y (el precio de) la mercadería debe finalmente decaer, auméntense y
seguramente subirán. ¿Qué tiene todo eso que ver con la demanda?».-9
Durante los últimos años del siglo XIX surgió la escuela de pensamiento marginal. Este campo
fue iniciado por Stanley Jevons, Carl Menger y Léon Walras. La idea principal es que el precio
se establecía a partir de la demanda: los consumidores solo pagan lo que consideran
adecuado por la utilidad que perciben recibirán de los bienes, cualquiera sea el costo de
producción. Esto fue un cambio sustancial respecto a las ideas de Adam Smith sobre la
determinación del precio de venta.

"Tijeras de Marshall". P = precio. Q = cantidad producida. D (línea azul) = demanda. S (línea roja) =
oferta.

Este modelo fue criticado más tarde por Alfred Marshall en su Principios de economía.10
Marshall re-introduce a la visión marginalista, a través de la metáfora conocida como
las tijeras de Marshall, la consideración del efecto de la oferta, formalizando el modelo de la
oferta y la demanda.
Podríamos con la misma sensatez discutir acerca de si es la hoja superior o la inferior
de una tijera la que corta un pedazo de papel que si el valor está controlado por la
utilidad o por el costo de producción.11
Desde finales del siglo XIX, esta teoría de la oferta y la demanda se ha mantenido
prácticamente inamovible. La mayoría de los estudios posteriores se han centrado en
buscar adecuar el modelo a situaciones más reales, incorporando aspectos tales como
los costes de transacción, la racionalidad limitada o incluso el principio de no racionalidad,
etc. basados en la percepción que es el caso que la situación real del mercado
corresponde a una de competencia imperfecta.
Por ejemplo –desde las primeras décadas del siglo XX– una variedad de autores, tales
como Joan Robinson,12 Edward Hastings Chamberlin;13 Heinrich Freiherr von
Stackelberg, Jan Tinbergen, Wassily Leontief, etc., introdujeron una serie de
adecuaciones o modificaciones parciales a la formalización de Marshall.
(ver oligopolio y oligopsonio, Teoría de la Competencia monopolística, Competencia de
Stackelberg; Teorema de la telaraña, etc.)

Teoría fundamental[editar]

Excedente de los consumidores y los productores en el punto de equilibrio para las curvas de
oferta y demanda.

El modelo establece que en un mercado libre, la cantidad de productos ofrecidos por los
productores y la cantidad de productos demandados por los consumidores dependen del
precio de mercado del producto. La ley de la oferta indica que la oferta es directamente
proporcional al precio; cuanto más alto sea el precio del producto, más unidades se
ofrecerán a la venta. Por el contrario, la ley de la demanda indica que la demanda es
inversamente proporcional al precio; cuanto más alto sea el precio, menos demandarán
los consumidores. Por tanto, la oferta y la demanda hacen variar el precio del bien.
Según la ley de la oferta y la demanda, y asumiendo esa competencia perfecta, el precio
de un bien se sitúa en la intersección de las curvas de oferta y demanda.14 Si el precio de
un bien está demasiado bajo y los consumidores demandan más de lo que los
productores pueden poner en el mercado, se produce una situación de escasez, y por
tanto los consumidores estarán dispuestos a pagar más. Los productores subirán los
precios hasta que se alcance el nivel al cual los consumidores no estén dispuestos a
comprar más si sigue subiendo el precio. En la situación inversa, si el precio de un bien es
demasiado alto y los consumidores no están dispuestos a pagarlo, la tendencia será a que
baje el precio, hasta que se llegue al nivel al cual los consumidores acepten el precio y se
pueda vender todo lo que se produce.15

La curva de oferta[editar]
Artículos principales: Oferta y Curva de oferta.
La segunda ley enunciada (ver II arriba) establece que, ante un aumento en el precio de
un bien, y asumiendo un mercado competitivo, la cantidad ofrecida de ese bien va a ser
mayor; es decir, los productores de bienes y servicios aumentarán la producción. Esto es
generalmente referido como “Ley de la oferta”.16

Curva de oferta típica.

Lo anterior es conceptualizado en la curva de oferta, que es la representación gráfica de la


relación –o elasticidad– existente entre el precio de un bien y la cantidad ofrecida del
mismo.17
La pendiente de esta curva determina cómo aumenta o disminuye la cantidad ofrecida de
un bien ante una disminución o un aumento del precio del mismo. Se
denomina elasticidad precio de la oferta al grado de variación de la cantidad ofrecida a
una modificación en el precio. Esta va desde una respuesta totalmente inelástica (línea
vertical) significando que la producción no responde a cambios en precios a una
totalmente elástica (línea horizontal), significando qué cambios en la producción son
mayores qué cambios en los precios.
Las determinantes de esa elasticidad incluyen: facilidad o no de adquirir Insumos.
Existencia o no de capacidad excesiva de producción y/o inventarios acumulados.
Complejidad del proceso de producción, o relativa dificultad de implementar extensiones o
modificaciones a ese proceso, incluyendo el tiempo y costo necesario para implementar
esas modificaciones. Consideraciones más generales acerca de la posición de la empresa
en relación al mercado, incluyendo posible conveniencia de simplemente tomar ventaja
del aumento de precios, etc.
Debido a que la oferta es proporcional al precio, las curvas de oferta son, generalmente
pero no siempre, crecientes.18
Además, y debido a la ley de los rendimientos decrecientes, la pendiente de una curva de
oferta puede ser decreciente (es decir, suele ser una función cóncava), aunque no
necesariamente. Un ejemplo es la curva de oferta del mercado laboral. Generalmente,
cuando el salario de un trabajador aumenta, éste está dispuesto a ofrecer un mayor
número de horas de trabajo, debido a que un sueldo más elevado incrementa la utilidad
marginal del trabajo (e incrementa el coste de oportunidad de no trabajar). Pero cuando
dicha remuneración alcanza ciertos niveles, el trabajador puede experimentar la ley de los
rendimientos decrecientes en relación con su paga. La cantidad de dinero que está
ganando hará que otro aumento de sueldo tenga poco valor para él. Por tanto, a partir de
ese punto podría dedicar menos horas al trabajo a medida que aumente el salario,
decidiendo invertir su tiempo en ocio. Encontramos un ejemplo de esto en los sueldos de
los miembros de los Consejo de administración. Mientras es relativamente fácil motivar a
trabajadores manuales o profesionales a trabajar horas extras, es difícil motivar a los
miembros de esos consejos, cuyas “horas de trabajo” generalmente van desde una
reunión (matinal o de tarde) una vez al mes a cinco o seis, o incluso una o dos veces al
año1920 con salarios que van desde, para empresas pequeñas, “un salario de retención” de
entre 5000 a 10 000 dólares anuales y “bonos de asistencia” entre 500 y 2000 por cada
reunión que se asista, más “reembolsamiento” por "gastos de viaje", etc,21 a salarios tales
los 250 000 libras esterlinas anuales (el menor entre los directores del grupo
bancario Barclays), el cual, sin embargo, es aumentado por “pago de buen manejo”
(performance related pay) a 10,7 millones de libras esterlinas anuales,22 eso, sin contar
una variedad de bonus por "lograr objetivos", ganancias en "opciones" de acciones, etc.
Es fácil ver como remuneraciones a ese nivel no producen la motivación necesaria para
desempeñar funciones con la debida atención, lo que terminó en la Crisis económica de
2008-2011.
Este tipo de curvas de oferta ha sido observado también en otros mercados, como el
del petróleo: después del récord del precio provocado por la crisis de 1973, los EE. UU.
disminuyeron su producción de petróleo.23

La curva de la demanda[editar]
Artículos principales: Demanda (economía) y Curva de demanda.

La curva de demanda representa la relación entre la cantidad de un bien o conjunto de


bienes y servicios que los consumidores desean y están dispuestos a comprar en relación
al precio del mismo, suponiendo que el resto de los factores se mantienen constantes. La
curva de demanda es por lo general decreciente, es decir, a mayor precio, los
consumidores comprarán menos. Esto es generalmente conocido como la “ley de la
demanda”.24

Curva típica de demanda.

Los determinantes de la demanda de un individuo son el precio del bien, el nivel de renta,
los gustos personales, el precio de los bienes sustitutivos, y el precio de los bienes
complementarios.
La pendiente y forma de la curva de la demanda representa la Elasticidad precio de la
demanda, con extremos en una línea vertical (demanda inelástica, representando el caso
en el cual el cambio en la demanda es menor que el cambio en los precios) y una línea
horizontal, o demanda elástica, con cambios en demanda superiores a los cambios en los
precios (por ejemplo, en un mercado perfectamente competitivo, el aumento de precios
por una empresa puede llevar a que esa empresa pierda todo sus ventas)
Como se ha dicho antes, la curva de demanda es casi siempre decreciente. Pero hay
algunos ejemplos de bienes que tienen curvas de demanda crecientes. Un bien cuya
curva de demanda es creciente se conoce ya sea como un bien de Veblen o bien de lujo;
o como un bien de Giffen o un bien inferior. El ejemplo clásico de estos últimos, proveído
por Alfred Marshall25 son los alimentos básicos, cuya demanda viene definida por la
pobreza, que no permite a sus consumidores consumir comida de mejor calidad. Según
aumenta los precios ya sea de alimentos o generales, los consumidores no se pueden
permitir adquirir otros tipos de alimentos, por lo que tienen que aumentar su consumo de
alimentos básicos.

Cambios en la demanda y cantidad demandada[editar]

El gráfico muestra un incremento de la demanda desde D1 hasta D2, provocando un aumento del
precio y de la cantidad producida.

El precio de un producto del mercado está determinado por un equilibrio entre la oferta (lo
que se está dispuesto a producir a un precio determinado) y la demanda (lo que se desea
comprar a un precio determinado). El gráfico muestra un incremento de la demanda desde
D1 hasta D2, provocando un aumento del precio y de la cantidad producida relativas.
Cuando más gente desea algo, la cantidad exigida en todos los precios tenderá a
aumentar. Esto es un aumento en la demanda. La demanda creciente se puede
representar en el gráfico como la curva a la derecha, porque en cada punto del precio, se
exige una mayor cantidad.
Este aumento en demanda hace que la curva inicial D1 se desplace a la nueva curva D2.
Esto sube el precio de equilibrio de P1 al P2. Esto levanta la cantidad del equilibrio de Q1
a Q2. Inversamente, si la demanda disminuye, pasa lo contrario, se va de la curva D2 a
D1. La demanda es lo que desea el consumidor, cuando sube la demanda aumentan los
precios. EJ: la demanda de helados en un día común y corriente puede ser 40 unidades,
pero en día de calor la demanda de helados puede ser 100, esto es porque hay más
personas que desean consumir helados debido al calor, aun cuando el precio del helado
no ha variado. Pero como aumenta la demanda de helados lo más probable es que este
suba su precio.
La cantidad demandada es lo que se está dispuesto a consumir a un precio determinado
EJ: si se tienen 30 dólares y el helado vale 15 dólares, la cantidad demandada a ese
precio será de dos helados, pero, si el precio del helado disminuye a 10 dólares ahora
habrá un aumento en la cantidad demandada ya que ahora se podrán consumir tres
helados (uno más que antes): la cantidad demanda aumentó porque disminuyó el precio.
Resumiendo: si baja la demanda, bajan los precios y, por lo tanto aumenta la cantidad
demandada. De forma contraria, si aumenta la demanda suben los precios y disminuye la
cantidad demandada.
Ejemplo: oferta y demanda en una economía de 6
personas[editar]
El modelo de oferta y demanda se puede estudiar mediante individuos que interactúan en
un mercado. Supóngase una economía simplificada en la que participan los seis
individuos siguientes:

 Alicia está dispuesta a pagar 10 euros por una habitación.


 Fernando está dispuesto a pagar 20 euros por una habitación.
 Cristina está dispuesta a pagar 30 euros por una habitación.
 Nuestra empresa está dispuesta a ofrecer una habitación por 5 euros
 Hoteles Place está dispuesta a ofrecer una habitación por 15 euros
 Hoteles Master está dispuesto a ofrecer una habitación por 25 euros.
Hay muchas transacciones posibles que agradarían a las dos personas implicadas, pero
no todas ellas sucederán. Por ejemplo, hoteles Place y Master estarían interesados en
hacer su negocio a cualquier precio entre 25 y 30. Si el precio fuese superior a 30, Cristina
no estaría interesada, ya que es un precio demasiado alto. Si el precio bajara de 25,
entonces sería Hoteles Master al que no le satisfaría la transacción. Sin embargo, Cristina
descubrirá que hay otros productores en el mercado que están dispuestos a vender por
debajo de 25, con lo cual no negociará con Fernando. En un mercado eficiente, cada
vendedor percibirá el precio más alto posible, y cada comprador pagará el precio más bajo
posible.
Imagínese que Cristina y hoteles Master están discutiendo sobre el precio. Hoteles Master
ofrece un alquiler por 25. Antes de que Cristina lo acepte, hoteles Place lo ofrece por 24.
Fernando no está dispuesto a vender a 24, así que se retira. En ese instante, nuestra
empresa se ofrece por 12. Place obviamente no va a vender a ese precio, con lo que
parece que la venta está decidida. Sin embargo, aparece Fernando y ofrece 14, pero sólo
una persona está dispuesta a vender a ese precio (nuestra empresa). Cristina se entera y
como no quiere perder esta gran oportunidad, ofrece 16 a nuestra empresa por habitación.
Ahora Place también está dispuesta a vender, con lo cual tenemos dos compradores y
dos vendedores a ese precio (nótese que podría haberse establecido cualquier precio
entre 15 y 20). Aquí parece que los cuatro están de acuerdo. Pero ¿qué ocurre con
Hoteles Master y Alicia? Ambos no están dispuestos a negociar entre ellos, debido a que
Alicia sólo está dispuesta a pagar 10 y hoteles Master no desea aceptar nada por debajo
de 25. Alicia no puede mejorar las ofertas de Fernando y Cristina para comprar a nuestra
empresa, con lo cual Alicia no puede negociar con ellos. Master no puede rebajar el precio
de venta tanto como nuestra empresa u hoteles Place, con lo cual ahora ya no puede
negociar con Cristina. En otras palabras, se ha logrado un punto de equilibrio.

Curvas discretas de oferta y demanda.


Se puede dibujar un gráfico con sendas curvas de oferta y demanda a partir de estos
datos.
La demanda sería:

 Una persona está dispuesta a pagar 30 euros (Cristina).


 Dos personas están dispuestas a pagar 20 euros (Cristina y Fernando).
 Tres personas están dispuestas a pagar 10 euros (Cristina, Fernando y Alicia).
La oferta sería:

 Una persona está dispuesta a alquilar por 5 euros (nuestra empresa).


 Dos personas están dispuestas a alquilar por 15 euros (nuestra empresa y hoteles
Place).
 Tres personas están dispuestas a alquilar por 25 euros (nuestra empresa, hoteles
Place y hoteles Master).
La oferta y la demanda coinciden cuando la cantidad negociada son dos habitaciones y el
precio se establece entre 15 y 20. Tanto si nuestra empresa vende a Cristina, y Place a
Fernando, o bien si nuestra empresa vende a Fernando, y Place vende a Cristina, se
podrá llegar a un acuerdo. Sin embargo el precio exacto acordado no puede determinarse.
Esta es la única limitación de este modelo simplificado. Si se traslada este ejemplo a un
mercado de competencia perfecta, con suficientes participantes, entonces el precio sí que
se podría establecer de forma exacta. Por ejemplo, si la última transacción se hizo entre
alguien que estaba dispuesto a vender a 15.50 y alguien dispuesto a pagar 15.51,
entonces el precio podría determinarse con una precisión de un céntimo. Cuantos más
participantes entren en el mercado, más probable será que se encuentre un precio lo más
cercano al punto de equilibrio.
Esta simplificación muestra cómo el precio de equilibrio y la cantidad pueden determinarse
fácilmente mediante una situación fácil de entender. Los resultados son similares a los
que se obtienen cuando se considera que el número de participantes es ilimitado y otros
supuestos establecidos por los mercados de competencia perfecta.

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