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Iglesia Cristiana Maranatha Puerto Ordaz

INDICE
Número de página y Lección
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03-La Gran Comisión


05-Evangelismo y salvación
07-Cómo compartir a Cristo
09-Ministros de la Reconciliación
11-La redención
14-Declaraciones Doctrinales y Cinco pasos para ser salvo
18-La Oración
22-Adoración y alabanza
25-El amor de Dios
28-La bendición de diezmar y ofrendar
31-La importancia de la Palabra
33-Transformación y Victoria por la Palabra
34-Conflicto espiritual
37-Una persona espiritual
39-La Obra del Espíritu Santo
41-El Bautismo del Espíritu Santo
43-Los dones del Espíritu Santo
45-La tentación
48-Caminando en santidad
50-Autoridad Espiritual
52-Fidelidad
54-Paternidad espiritual
57-Sanidad Divina
58-¿Por qué nos reunimos? La unidad
60-La segunda venida de Cristo
63-La armadura de Dios
65-El Ayuno
67-El Pacto matrimonial
70-Ministerios de la Iglesia
72-Bautismo en agua y presentación de niños
74-La idolatría
76-La Cena del Señor
78-Las falsas doctrinas

LA GRAN COMISIÓN

Texto: Mat.28:19-20
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Introducción: Dios el Padre ha puesto la responsabilidad en cada uno de los creyentes, para ser los canales por
los cuales trasmitir su amor al mundo. De modo que el creyente que verdaderamente ha experimentado y conocido
lo inmenso del amor de Dios, reconoce su responsabilidad y voluntariamente se dispone a ser un instrumento en
sus manos para proclamar este sublime mensaje de amor.

Puntos de estudios:
1.- La Gran Comisión.
Cristo nos da la orden de llevar a todo el mundo su mensaje de esperanza y salvación. Por tanto no es una opción,
es un mandato para los siervos de Cristo. En Mat. 24:14 dice: “Y será predicado este evangelio del reino en todo
el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin”. Jesús se ha comprometido con Su
Palabra y Él no volverá a la tierra sino hasta que su iglesia haya llevado el evangelio a cada grupo étnico, en cada
idioma y a todas las razas de todo el mundo.
Por lo tanto, la gran comisión comienza con el evangelismo y la conversión, y continúa con el discipulado. El
objetivo de Cristo era reproducirse a sí mismo en sus discípulos y, a través de ellos, replicar su vida a través del
mundo.

2.- Jesucristo es la expresión del amor del Padre.


La evidencia o prueba más genuina que tenemos del amor de Dios hacia el mundo es Jesús. En 1Jn:4:9 dice: “En
esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo”, para que
vivamos por El”. Dios mostró su amor con un acto o un hecho, al enviar su unigénito; lo que indica que el amor
de Dios se constituyó en una acción de su parte primeramente, para que el mundo pudiera recibirlo. Una expresión
de abnegación al enviar su único hijo y el poner su misma esencia en el mundo: imagen de un Dios de bondad y
misericordia. Jn. 3:17 “Porque no envió Dios a Su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo
sea salvo por él”

3.- El discipulado.
Cuando hablamos de discipular nos estamos refiriendo al cumplimiento del mandato bíblico que consiste en ir
por todo el mundo predicando el evangelio, formando seguidores y bautizándolos e incorporándolos al Cuerpo
de Cristo, que es la Iglesia, con la finalidad de impactar el mundo a través del Poder de Dios. La palabra discípulo
proviene del latín discipulus, y significa aprendiz, imitador de su maestro, el equivalente a la palabra griega
mathetes. Como cristianos, debemos ser discípulos de Jesús, esto es, seguidores de sus enseñanzas, procurando
nuestro crecimiento en Cristo a través de la Palabra de Dios. Cada nuevo creyente debe convertirse en un
instrumento de poder en las manos de Dios, un verdadero seguidor de Cristo que llegue a la unidad de la fe y del
conocimiento del Hijo de Dios, de manera que prevalezca y nunca vuelva atrás.

4.- Debemos enseñar a los nuevos convertidos:


4.1.- Que han recibido vida eterna. 1Jn. 5:11-12 / Jn. 5:24 Jesús fue enviado al mundo para manifestar el amor
del Padre y para llevar la culpa de nuestros pecados; y por su obediencia recibimos la misma vida de Dios. Dios
nos ha prometido vida eterna. Para obtener esta promesa tenemos que creer en el testimonio de Dios, que nos ha
dado a través de su hijo Jesús. Toda persona que por incredulidad en la palabra o las promesas no recibe este
testimonio, permanece en muerte por tanto el amor de Dios no se puede manifestar en el individuo.
Pues el amor de Dios se revela en nosotros por fe en nuestro Señor Jesucristo, por el cual disfrutamos la vida
abundante o vida eterna.
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4.2.- Que deben congregarse. Sal.133 / He. 10:25 Enseñar al nuevo convertido las bendiciones que produce el
congregarse, para aprender la Palabra de Dios y alabar a Dios en comunión con los hermanos en la fe. Para esto
deben buscar una iglesia donde se predique la Palabra conforme a la Biblia
4.3.- Que deben comenzar a leer la Palabra y ser discipulados- Mediante esta práctica van a llegar a conocer a Su
Dios y conocer todas las promesas y bendiciones que como hijos de Dios han heredado y pueden disfrutar.
4.4.- Que deben bautizarse en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo Como un acto de obediencia y
declaración de fe se realiza el bautizo en agua. Mt.28:19, donde el mismo Señor Jesucristo dice: "Por tanto, id, y
haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo”.

EVANGELISMO Y SALVACIÓN

Texto: Hch. 26:17-18


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Introducción: Podemos atribuir la condición crítica en que se encuentra el mundo actualmente a la ceguera
espiritual; esto indica carencia de luz. Como creyente se nos ha delegado una gran comisión.
Hemos sido enviados al mundo con la misma misión que Dios envió a Jesús y que Jesús envió a sus discípulos y
al Apóstol Pablo.

Puntos de estudios:
1.- Abrir los ojos de los pecadores.
La palabra de Dios enseña, y nuestras experiencias lo confirman, que la única forma de abrir los ojos a un pecador
es por medio del nuevo nacimiento, Así como una criatura en el vientre de la madre no se puede ver hasta que
nace a la luz, de igual manera el pecador; sus ojos no son abiertos hasta que recibe la nueva creación. Hay casos
de creyentes que sólo se le abren los ojos a la luz, pero necesitan la revelación. En la medida que nuestros ojos
sean abiertos, entonces podremos ayudar a otros a recibir luz espiritual.

2.- Para que se conviertan de las tinieblas a la luz.


Toda persona que no ha hecho decisión por el Señor Jesucristo está bajo el control de las tinieblas.
El plan eterno de Dios es la reconciliación de todas las cosas; esto implica, que todo aquello que es tinieblas reciba
la luz de Dios. Donde hay pecado él quiere manifestar su justicia; donde hay ignorancia quiere dar revelación; en
la enfermedad manifestar salud; en el fracaso dar éxito; en la derrota dar victoria; en la pobreza dar prosperidad,
etc.

3.- Pasar de la potestad de Satanás a Dios.


Cuando nosotros presentamos el Evangelio (buenas nuevas) a los perdidos, les estamos llevando su libertad. Antes
de aceptar a nuestro Salvador, éramos cautivos y estábamos sujetos a las leyes de Satanás (Ef.2:2). En el momento
que la persona cree es librado de esa potestad/autoridad y trasladado al reino de luz (Col.1:13). Hay un proceso
de crecimiento espiritual en el creyente cuando los ojos son abiertos, y las leyes del reino de Satanás, como la ley
del pecado y de la muerte no operan en la persona. Ahora somos controlados por la ley del Espíritu de vida en
Cristo Jesús (Ro.8:2).

4.- Para que reciban por fe perdón de pecados.


El mensaje de Jesús consistía en darse a conocer al mundo como la provisión de Dios para la remisión/perdón de
los pecados por medio de Él. De igual forma nos ha encomendado a nosotros como creyentes la responsabilidad
de trasmitir este mismo mensaje a los pecadores. Para que por medio de la fe en su sangre reciban perdón de
pecados y sean reconciliados con Dios y librados así mismo de la condenación del diablo. (Lc. 24:46-47)

5.- Para que reciban la herencia.


Dios no quiere que quedemos niños, su meta es que crezcamos a una edad adulta para que estemos aptos para
participar de su herencia. (Col.1:12) Esta herencia la encontramos en la palabra.(Hch.20:32) Aunque el testador
del testamento murió, no obstante con su resurrección ratificó/validó tu derecho a la herencia; para que nosotros
disfrutemos todos los beneficios provistos en la cruz y así confirmar sus promesas.
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CÓMO COMPARTIR A CRISTO

Texto: Jn.4:39

Introducción: Es natural para un cristiano que ha recibido a Cristo como salvador personal querer compartir con
otros la vida victoriosa que está experimentando. Cuando una persona se llena del gozo de la salvación que Cristo
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da, es normal que este se desborde tratando de compartir con otros lo que se ha recibido. El mundo está sediento
de esa agua de vida que Cristo da; y el que reciban a Cristo depende en gran manera que nosotros sepamos
compartirlo.

Puntos de estudios:
1.- Necesidad de experiencia personal – Jn.1:40-42
Nadie puede compartir a Cristo a menos que primero haya tenido una experiencia viva de salvación. Sólo puede
compartir efectivamente a Jesús aquellos que lo han experimentado; porque estamos conscientes que las palabras
no son suficientes para hablar de Cristo. Como nuestra experiencia es una experiencia del Espíritu Santo, es
dinámica y nos ayuda a transmitirles a otros el cambio que ha sido hecho en nosotros; porque una realidad
espiritual solo puede compartirse en el espíritu. Es por esto que las personas que mejor comparten a Cristo son
los recién convertidos porque comparten vida y no letra. No hay ningún impedimento para que un nuevo
convertido predique a los perdidos; es más, ellos pueden y deben hacerlo.

2.- Dependiendo del Espíritu Santo – Jn.3:6


El Espíritu Santo viene para glorificar a Jesús, por lo tanto Él va a capacitarnos para compartir a Cristo con los
que no son salvos. Es el Espíritu Santo quien trae convicción; y él es quien nos provee el enfoque apropiado para
presentarles el evangelio a diferentes personas. Si dependemos del Espíritu Santo podemos usar sus dones para
suplir las necesidades del pecador, y como consecuencia éste va a creer en un evangelio sobrenatural.

3.- Concéntrese en Jesús – 1Co.2:1-2


Una de las estrategias que usa Satanás cuando le estamos hablando a un pecador es enredarnos en otros temas que
no tienen que ver nada con la persona de Jesús, lo que causa que perdamos nuestro tiempo. Cuando usted comparta
a Jesús manténgase hablando de su vida, de su muerte, de su resurrección y de lo que Él hace ahora por nosotros
a la mano derecha del Padre. Si el pecador insiste en tocar otros temas complicados de la Biblia como el infierno
o la trinidad, no trate de explicar, solamente hágale ver su condición de hombre perdido y que la única solución
es recibir a Jesús como su Salvador personal. Esto es muy saludable espiritualmente cuando hablamos con
personas que tienen un trasfondo de religiones falsas. Un ejemplo de esto lo tenemos en el Apóstol Pablo cuando
estuvo en Atenas predicando, trato de usar filosofía y hubo muy pocas conversiones. Es por eso que ahora él dice
a los Corintios, “a ustedes solamente le quiero presentar a Cristo crucificado”, y tuvo un gran éxito en Corinto.

4.- Comparta a Cristo con Mansedumbre – 1P.3:15


Nunca debemos dar la impresión de que nos sentimos superiores a la persona que le estamos ministrando, porque
entonces ella se va a poner a la defensiva, y no va a recibir nada. Otro error es tratar de impresionar a la persona
con mucho conocimiento bíblico; esto lo que hace es confundir a la persona. La palabra dice que estemos listos
para presentar con mansedumbre defensa de la esperanza que hay en nosotros. Cuando hacemos este el Espíritu
Santo entra en operación y se encarga de la situación, porque no estamos dependiendo de nuestra fuerza humana
o nuestro intelecto sino del poder de Dios.

5.- Presente el plan de salvación con simpleza – Ro.10:9


Nuestra misión es presentarle a Cristo como la única respuesta al pecador y decirle lo que la Biblia dice; que si él
cree en el corazón que Dios levantó a Cristo de los muertos y lo confiesa con la boca, él será salvo. Este no es el
momento para instruir a las personas o decirles que deben dejar de hacer o que deben de hacer. Tenga fe que si la
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persona hace lo que Ro.10:9 dice, es salva, y por favor créale a la persona y no cuestione su decisión. Deje los
resultados al Espíritu Santo.

6.- Ministre con Compasión – Mt.9:36


La mejor manera de tener éxito compartiendo a Cristo es sentir compasión por los perdidos. Es por eso que
siempre le debemos hablar a los perdidos sobre el amor de Dios; porque es esto lo que los lleva al arrepentimiento
(Ro.2:4). Esto es contrario a lo que se ha practicado de que si hablamos primero del juicio de Dios a las personas,
van a tener miedo y van a aceptar a Jesús; pero bien sabemos que estas conversiones no duran porque fueron
hechas bajo una emoción, no bajo convicción del Espíritu Santo. El que comparte a Cristo debe sentir ese amor y
esa compasión que siente Dios, de forma que el pecador pueda ver a Dios en la persona que le está presentando a
Jesús.

7.- Sea un inspirador contagioso.


Si el que comparte a Cristo no muestra alegría, gozo y paz; no podrá provocar a otro para que él quiera recibir a
Cristo. Yo recomiendo que aprendas la regla de las tres “P” cuando compartas a Cristo. Tú conversación debe ser
“Positiva”, debe ser “Poderosa” y debe ser “Práctica”. Presenta a un Jesús que va a cambiar la vida negativa del
pecador en una vida de victoria; y háblale del poder del Espíritu Santo para hacer en él lo que él no puede hacer
por sí mismo. Por último, háblale de que Jesús es un Dios práctico que quiere ayudarle en todas las áreas de su
vida; en lo espiritual, lo intelectual, en lo físico, en las relaciones familiares y aun en su vida social y económica.

MINISTROS DE LA RECONCILIACION

Texto: 1P.2:9 / 2Co.5:19

Introducción: Una de las cosas que más ha afectado la efectividad de la iglesia a través de las edades, es la
diferencia que se ha establecido entre el ministerio y los miembros. Es una de las áreas en las cuales la iglesia
tiene que ser restaurada; para que pueda ministrarle efectivamente a un mundo perdido. Una de las cosas que el
Espíritu Santo le está diciendo al ministerio en este tiempo es que deje que los miembros empiecen hacer muchas
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de las funciones que hasta ahora se creía que solamente las debía hacer el pastor. Esto será posible cuando cada
creyente descubra que es un ministro.

Puntos de estudio:
1.- El problema histórico.
La iglesia nació con la participación de todos los miembros en la evangelización y el cuidado de todos los
creyentes. Encontramos en el libro de Hechos que no solamente los apóstoles ministraban; sino que todos los
creyentes estaban envueltos en la obra del ministerio. Ellos tenían la conciencia de que eran el cuerpo de Cristo
aquí en la tierra y funcionaban de acuerdo a esta realidad. Aunque había cinco ministerios especializados en
distintas áreas; esto no impedía que cada creyente descubriera su don y lo pusiera a la disposición de la iglesia.
Mientras la iglesia hizo esto estuvo creciendo y estuvo llena de la dinámica del Espíritu. Cuando la iglesia
estableció una casta de sacerdotes y redujo a los miembros a meros espectadores, la iglesia cayó en lo que se
conoce como la “edad oscura”. En esta época fue que la iglesia cayó en todos los errores doctrinales que hoy
vemos en la iglesia católica y que aún se perciben en ciertas iglesias evangélicas o protestantes. Vemos hoy que
el Espíritu Santo les está devolviendo a los miembros su participación en el ministerio del cuerpo de Cristo.

2.-Somos Ministros de la Reconciliación. / 2Co. 6:1-2


Cada uno de los que ha recibido la salvación, se convierte en un ministro de la reconciliación, en un anunciador
de Jesús, de buenas nuevas de salvación. Al recibir Su Misericordia tenemos en nosotros mismos suficiente
evidencia (por el conocimiento de la palabra) para reconciliar al mundo con Dios y desmentir las intrigas y
maquinaciones del diablo en contra de nuestro creador. Pues en el principio Dios creó al hombre para tener
comunión con él y que éste reflejara su carácter. Solamente la consecuencia del pecado anuló su propósito y trajo
separación entre el hombre y Dios. La palabra nos enseña que el carácter de Dios es amor (1Jn.4:8) y en (Jn.3:16)
dice que “de tal manera amo Dios al mundo”; indicando aquí la grandeza de su amor para ser movido a compasión
y misericordia y de este modo restaurar la condición caída del hombre, por su amor y su bondad. “Y todo esto
proviene de Dios, quién nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación”.
2Co.5:18-21

3.-Razones bíblicas que prueban que cada creyente es un ministro:


3.1.- Somos embajadores: Por tanto debemos ir y predicar la Palabra “a tiempo y fuera de tiempo” y tener presente
que para cada persona hoy es el día aceptable de salvación. 2Co.5.20 “Así que, somos embajadores en nombre de
Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios”.
3.2.- Somos sacerdotes: La pasión que sentimos por Cristo crea el anhelo de que otros lo conozcan. 1P.2:9: “Mas
vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las
virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable”
3.3.- Somos testigos de Cristo: Todos los que hemos conocido Su Gracia, Su Misericordia, Su amor y tenemos al
Espíritu Santo de Dios, podemos y debemos testificar al mundo de sus maravillas” Hch.1:8: “Pero recibiréis
poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en
Samaria, y hasta lo último de la tierra”.

4.-Lo práctico de que cada creyente sea un ministro (entiéndase que ministro describe un siervo que se da a otras
personas ayudándolas; no describe en la Biblia una posición eclesiástica).
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a- Vive más cerca de los pecadores y puede alcanzarlos.


b- Hace de cada creyente un participante y no un espectador.
c.- Cuando el creyente tiene que dar, se ve obligado a crecer.
d.- Cuando el creyente evangeliza y ve los logros, se siente realizado en Cristo. Sólo predicando la Palabra a cada
alma, podemos establecer el Reino de Dios en la tierra.
e.- Cuando cada creyente es un ministro, es que verdaderamente la iglesia funciona como cuerpo de Cristo. Esta
es la única forma de evangelizar todo el mundo en un período de tiempo más corto. Y produce un crecimiento en
la Iglesia. Recordemos que Jesús dijo en la parábola de la gran cena: “Dijo el señor al siervo: Ve por los Caminos
y por los vallados y fuérzalos a entrar, para que se llene mi casa” “Lc.14:23 / “Porque el Hijo del Hombre vino a
buscar y a salvar lo que se había perdido” Lc.19:10

LA REDENCIÓN

Texto: Ef. 1:7 / He. 9:11-15

Introducción: La verdad de la redención es una de las verdades básicas que todo creyente debe conocer y entender
para vivir una vida cristiana efectiva y en victoria. Si hay algo que nos asegura nuestra posición de victoria sobre
Satanás, es saber que hemos sido redimidos de su poder. Los redimidos de Jesús deben continuamente alabarle
por esta libertad tan gloriosa.
La salvación no es todo el propósito de Dios, para una vida, es sólo el comienzo de una carrera espiritual, hay un
propósito eterno en Cristo Jesús, un plan de Dios para la tierra: traer la imagen de Dios a la tierra, por medio del
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hombre. Recuperar el diseño original del hombre, aquel que Dios le dio a Adán, éste lo perdió; pero Cristo lo
recuperó en la Cruz para nosotros.
Toda persona que reciba a Jesús como su salvador, tiene la responsabilidad de pararse en frente de las obras del
mal, a favor de los hombres y dirigirlos a recuperar su status espiritual. Los creyentes deben tomar la
responsabilidad de orar por los demás, para cumplir el propósito eterno para el cual fue salvo. Recibir a Cristo no
tiene ningún costo, pero tiene la responsabilidad de aprender a orar e interceder por otros.

Puntos de estudio:
1. ¿Qué es redención? – Ef.1:7
La palabra redimir significa “comprar.” El término era usado específicamente con referencia a la compra de la
libertad de un esclavo. La aplicación de este término a la muerte de Cristo en la cruz, significa exactamente eso.
Si somos “redimidos,” entonces nuestra condición previa era la de esclavitud. Dios ha comprado nuestra libertad,
y ya no estamos bajo la esclavitud del pecado o de la ley del Antiguo Testamento.
Uno de los propósitos de la muerte de Jesucristo en la cruz fue el redimirnos de la maldición que había sobre la
raza humana, como consecuencia del pecado de Adán. La Biblia dice que Cristo nos redimió de la maldición de
la ley; y esto fue hecho posible porque en el madero, Cristo fue convertido en maldición. Esto es Cristo es nuestro
sustituto perfecto, y al El morir en la cruz tomó mi lugar; por lo tanto El tomo todo tipo de maldición al cual yo
estaba sujeto como consecuencia del pecado.
Debido a esto hemos sido redimidos de la autoridad de Satanás y hemos sido trasladados al Reino de Jesucristo,
no por méritos propios, sino por la Gracia de Dios Cuando una persona recibe el sacrificio de Cristo en la cruz,
desde ese momento en adelante Satanás no tiene ningún derecho legal sobre la persona. Aunque esto es cierto, el
cristiano tiene que saber esto y reclamarlo por medio de la fe, porque Satanás no suelta fácilmente las personas
que él ha poseído por tanto tiempo.

2.-El medio de la redención – 1P.1:18-19


El único medio posible para ser redimido de la autoridad de Satanás es la sangre de Cristo. Por razón del pecado
de Adán, los hombres están bajo la autoridad legal de Satanás y él puede ejercer ese dominio sobre ellos. Como
Jesucristo es el cordero de Dios para la redención de toda la raza humana y esto es hecho mediante su sangre;
desde que Cristo murió en la cruz, toda persona que cree en el poder de la sangre de Jesús, es declarado justo ante
Dios (2Co.5:21). Es por eso que Satanás odia la cruz y la sangre de Jesucristo porque ahí el perdió el derecho
legal sobre toda la humanidad.

3.-Las bendiciones de la redención – He.9:11-15


La redención es eterna, lo que indica que no termina el día que fuimos salvos. El problema del creyente es que ha
enfatizado solamente el hecho de que fuimos redimidos; pero Ef.1:7 dice; “que tenemos redención por su sangre”.
Es bueno saber de qué fuimos redimidos, pero es más importante conocer a donde nos lleva esta experiencia de
redención. El creyente puede vivir continuamente creciendo en los beneficios de la redención de acuerdo a la fe
que ejerza en lo que Cristo hizo por él.
No hay límites en lo que se puede disfrutar como consecuencia de haber sido redimido por la sangre de Cristo.
Esta .redención no envuelve solamente perdón de pecados, sino que va más allá, porque erradica (borra)
totalmente la naturaleza pecaminosa del hombre, que es la responsable de que el hombre peque. En el antiguo
testamento había perdón de pecados, pero en el nuevo la sangre de Cristo borra los pecados; o sea, que no hay
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ningún “récord” de que tú has pecado después de ser lavado con la sangre de Cristo. Es por eso que el nuevo
pacto es superior al antiguo pacto. Por medio de esta redención entramos en las siguientes experiencias:
a- Tenemos vida eterna – 1Jn.5.11
Todos los hombres están muertos en delitos de pecados como consecuencia del pecado de Adán, fue el
pecado de Adán lo que produjo que él muriera espiritualmente. Es por esta razón que a menos que se
resuelva primero el problema del pecado, no se puede resolver el problema de la muerte espiritual. Como
Jesucristo hizo expiación con su sangre por nuestros pecados, esto resuelve de una vez y por todas el
problema de la muerte espiritual en el momento que una persona recibe el sacrificio de Jesús en la cruz
sus pecados son remitidos y desde ese momento el individuo es libre de la maldición de muerte espiritual
y entonces recibe una nueva vida; la vida de resurrección de Jesucristo. Es esto lo que nos garantiza vida
eterna y nos garantiza la resurrección de nuestros cuerpos mortales.
b.- Redimidos de la enfermedad – 1P.2:24
Directa o indirectamente la enfermedad es consecuencia del pecado porque antes de que el hombre pecara
no existía ningún tipo de enfermedad. Esto prueba que la enfermedad no se origina en Dios y tampoco es
su voluntad para los hombres. Por lo tanto, en el momento en que Dios cargo en Cristo todos los pecados
de la humanidad, juntamente liberó a los hombres de la maldición de la enfermedad. Ahora los hombres,
en base a la sangre de Cristo pueden reclamar sanidad y salud para sus cuerpos porque la autoridad del
diablo sobre sus vidas ha sido quitada. Es por eso que 1P.2:24 dice que como Cristo llevó nuestros pecados
por eso ahora podemos decir que por su llaga fuimos sanados. Esto es una confirmación de Is.53:5 y
Mt.8:17.
c.- Redimidos de la pobreza – 2Co.8:9
Si consideramos a Adán en los primeros capítulos de la Biblia lo encontramos como un hombre próspero,
disfrutando la abundancia que Dios proveyó para su existencia. Es digno notar que antes de que el hombre
fuera creado por Dios, ya Dios le había preparado todas las cosas necesarias para su sostenimiento.
Tenemos que admitir que la pobreza y la necesidad son una maldición sobre la raza humana como
consecuencia del pecado. En la cruz, Cristo se hizo pobre al llevar esta maldición con el propósito de que
nosotros fuéramos enriquecidos. Esto es parte de la bendición de Abrahán que debe alcanzar a los que han
sido redimidos de la maldición de la ley. No tengamos miedo en reclamar lo que es nuestro sabiendo que
nuestro Dios es el dueño del oro y de la plata.
d. Redimidos del fracaso – Ro.8:32; 1P.1:3-4
Mirando la cruz desde el punto de vista humano fue un fracaso; donde Jesucristo quedó imposibilitado de
hacer nada, aun de protegerse así mismo. Esto tenía que ser así porque allí, coronado de espinas (un tipo
de la maldición) y colgado entre ladrones (dos fracasados), tuvo que beber nuestra amarguras de
desánimos, desprecio y fracasos cuando tomo hiel con vinagre. El propósito de esto fue devolverle al
hombre una nueva oportunidad de levantarse con una visión de éxito y de victoria; para que el sea feliz y
para que haga feliz a aquellas personas con las cuales el entra en contacto.

e. Redimidos del temor a la muerte – He.2:14-15


El temor mayor del pecador es morir, porque en su interior él está lleno de incertidumbre en cuanto a su
destino eterno. En el momento que una persona recibe el perdón de pecados, la paz de Cristo, la paz de
Dios inunda su ser porque sabe sin lugar a dudas que su eternidad está asegurada con Dios, y que ni aun
la muerte podrá separarnos del amor de Cristo. Además tenemos la seguridad de la resurrección del cuerpo
como parte de nuestra redención eterna.
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Entonces, ser redimido es ser perdonado, santificado, justificado, bendecido, liberado, adoptado y
reconciliado con Dios y con la imagen de Dios en nosotros.

CINCO PASOS PARA SER SALVOS y DECLARACIONES DOCTRINALES

Texto: Ro.10:8-13

Introducción: El propósito de esta enseñanza es doble: guiar cualquier persona que no conoce al Señor a
conocerlo como señor y salvador; y enseñarle a los ya creyentes cómo compartir el plan de salvación en una forma
fácil y concisa. Es muy importante que se tenga un conocimiento sólido de cómo ser salvo. Muchas veces se ha
complicado el proceso de la salvación; lo que ha impedido que a muchas personas se les prive del privilegio de
ser hijos de Dios. Esta palabra nos va a establecer en la fe y nos dará seguridad de nuestra propia salvación.
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Puntos de estudio:
1.- Reconocer que soy un pecador: Ro.3:23
La Biblia dice que por cuanto todos pecaron, todos están destituidos de la gloria de Dios. Este punto clave para
poder llegar a ser salvo. Toda persona, no importa que se considere buena o mala, tiene que llegar a darse cuenta
en un momento determinado que ante los ojos de Dios que es un pecador totalmente perdido. Es muy difícil para
las personas (especialmente los buenos y moralistas) aceptar que en ellos, no hay suficientes buenas obras que
pueda ameritar el que ellos sean salvos.
Aceptar que el hombre es un pecador, implica destruir todas las fortalezas humanas que la persona tiene y que la
presentan como buena ante los ojos de los hombres. La Biblia dice que en Adán todos pecaron y que están todos
muertos en delitos y pecados, hasta que vengan a recibir la vida de Jesús. (Ro.5:12).

2.- Reconocer que no puedo salvarme a mí mismo, la salvación es por la Gracia de Dios: Ro.3:28
El hombre tiene que llegar a la conclusión que todas sus buenas obras son consideradas por Dios como trapo de
inmundicia. El hombre no tiene nada, ni puede hacer nada por sí mismo para ser justo o para llegar al cielo. El
intento del hombre desde que pecó en el Edén ha sido cubrirse el mismo con un vestido de hojas (sus propias
obras) en vez de recibir la provisión de Dios, que es el derramamiento de la sangre. La Biblia dice en Ro.3:28:
“Y que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley”. Gá.3:11 dice: “Y que por la ley ninguno se justifica
para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá” Todo esto implica que el hombre tiene que echar a
un lado todas sus ideas e intentos de salvarse, y recibir el único para salvarse Jesucristo el hijo de Dios y su
sacrificio en la cruz del calvario. Ro.3:24: “Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención
que es en Cristo Jesús”
La Biblia dice que la salvación es un regalo (gracia) de Dios, que no hay nada que las personas podamos hacer
para merecerlo. Esta Salvación, este regalo, se recibe al recibir a Jesucristo en nuestro corazón, como nuestro
Salvador, el Cristo, el Cordero de Dios, nuestro Redentor y Señor, quien pagó por nuestros pecados, en la Cruz
del Calvario. Ef.2:4-5: “Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando
nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos".

3.- Arrepentimiento: Ro.2:4


La palabra arrepentimiento significa cambiar de mente o dar media vuelta; en otras palabras, un cambio radical
de dirección. Después que el hombre acepta las dos cosas mencionadas anteriormente, tiene que estar dispuesto
a cambiar su modo de pensar y empezar a pensar en armonía con lo que Dios dice en su palabra. Contrario a lo
que se ha enseñado, lo que nos guía al arrepentimiento no es la severidad e ira de Dios, sino las riquezas de su
benignidad, paciencia y longanimidad. Cuando el pecador es enfrentado por medio de la palabra con la benignidad
y misericordia de Dios, la Biblia dice que eso nos guía al arrepentimiento. Ahora sí, que el amor de
Dios nos ha cautivado; estamos dispuestos a empezar una nueva vida.

4.- Creer en Jesucristo.- Ro.10:9-10


Cuando escuchamos la palabra de Dios, ésta nos inspira fe en el corazón para que creamos (pongamos toda nuestra
confianza en Jesucristo, como el único camino a Dios). Hch.4:12 dice: “Y en ningún otro hay salvación; porque
no hay otro Hombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos”. En 1Ti. 2:5 dice: “Porque hay
un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre”. Cuando el hombre acepta en su
corazón que es justificado por la fe en la muerte y resurrección de Jesucristo, es entonces que acontece el milagro
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del nuevo nacimiento. Por eso la Biblia dice que hay que creer en el corazón dos cosas: Que Dios levantó a Cristo
de los muertos y que Dios es solamente mi Justicia.

5.- Confesar que Jesús es el Señor – Ro.10:9-10


Lo que sella nuestra salvación es confesar con la boca que Jesús es mi Señor. Con esto le estoy testificando a
Satanás y a sus demonios, que he renunciado totalmente a su señorío sobre mi y ahora Jesucristo se ha convertido
en mi nuevo dueño. Es importante la confesión porque con ella se establece mi salvación ante Dios, ante los
hombres y ante Satanás. Sabemos que en todo esto está envuelta la obra del Espíritu Santo, que es el que nos trae
convicción de pecado y quien nos dirige a creer en Jesús como el único Salvador. El hombre que sinceramente
hace esto es salvo, pues la escritura dice: Ro.10:11 “Todo aquel que en él creyere, no será avergonzando”.

Declaraciones doctrinales: (Solo se leerán, porque en el transcurso del discipulado se ampliarán los temas).
1. Creemos que la Biblia es la palabra inspirada y es nuestra única regla de fe, doctrina y conducta.
(2P.1:21 / 2Ti.3:16-17)

2. Creemos en un Dios trino, manifestado en tres personas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; (2Co.
3:14 / Mt. 3:16-17).

3. Creemos en la Deidad de Jesucristo, su nacimiento virginal, su muerte redentora, su resurrección


corporal, su ascensión a la diestra de Dios Padre; (1Ti.3:16). Reconocemos el señorío de Jesucristo
sobre todas las cosas en el cielo, la tierra y debajo de la tierra; (Fil.2:9-10).

4. Creemos que el hombre fue creado en un estado de justicia y santidad, y que cayó y vive en un estado
de muerte espiritual hasta que sea redimido, por medio de la fe y en la gracia de Dios y por la sangre
del Señor Jesucristo; (Ro.3:23-25 / Efe.2:1-2 ).

5. Creemos en la inhabilidad del hombre parar salvarse a sí mismo, por medio de obras meritorias y
religiosas; y que sólo puede llegar a Dios, por medio de su fe en la gracia de Dios, en la obra perfecta
y completa de nuestro Señor Jesucristo; (Ef. 2:8-9 / Ro. 5:1-2).

6. Creemos en el Bautismo en agua por inmersión, como un tipo de la muerte y resurrección del creyente,
y como una manifestación de fe y obediencia a la ordenanza del Señor Jesucristo; (Mt.28:19). No
creemos que el bautismo tenga algún poder salvador o regenerador, sino como “La aspiración de una
buena conciencia hacia Dios” (1P.3:21 / Ro. 6:3-4).

7. Creemos en el Bautismo en el Espíritu Santo como una experiencia posterior, separada de la salvación,
el cual es necesario para operar en una vida de poder, manifestar los dones del Espíritu y hacer las obras
de Dios en la tierra; (Lc.3:16 / Hch.1:8 ).
8. Creemos que la iglesia está compuesta por todo aquellos que invocan el nombre del Señor Jesucristo y
viven una vida separada del pecado. La iglesia es un organismo espiritual instituido por el mismo Jesús, y
como tal, es su representante en la tierra.

9. Sus miembros tienen la sagrada responsabilidad de trabajar, contribuir y orar para su continuo
crecimiento. La iglesia tiene el derecho divino de expulsar miembros que se constituyen en una amenaza
para la salud de la iglesia. (Ef.1:22-23 / Hch.2:41-42 / Mt.16:18-19 / Mt.18:15-20).
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10. Creemos en la práctica continua de la Santa Cena, como un recordatorio de la muerte de Jesús y como
una experiencia viva y actual con el Señor y con los miembros de su iglesia; (Mt.26:26-29 / 1Co.11:23-
34).

11. Creemos que la voluntad de Dios es la santificación del creyente, como producto de la vida de Jesús
en él, la autoridad de la Palabra y el poder del Espíritu Santo; (Gá.2:20 / Jn.17:17 / 1Co.6:11).

12. Creemos que para agradar a Dios y ser sus testigos aquí en la tierra, el creyente nacido de nuevo debe
vivir una vida de separación del mundo y sus prácticas pecaminosas. Todo lo que tenga apariencia de
pecado debe ser evitado como un testimonio a los pecadores de que somos el pueblo escogido de Dios.
(1P.2:9 / Mt.5:16 / 1Jn.2:15-17 / 2Ti.2:19-21 / 1Ts. 5:22 / Stg.4:4-5). Por lo tanto, no aceptamos que los
ministros y miembros de la iglesia sean miembros activos de asociaciones secretas, como la logia
masónica (Ef.5:8-13).

13. Creemos que la voluntad perfecta de Dios es la sanidad física de todos los creyentes y se recibe por fe
y por imposición de manos; (Isa. 53:4-5 / 1P. 2:24-25; Stg.5:14-15).

14. Creemos que los cinco ministerios de Efesios 4:11: Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastores y
Maestros son básicos y fundamentales para el buen funcionamiento y crecimiento de la Iglesia del Señor
Jesucristo; (Ef.2:20 / 1Co.12:28).

15. Creemos que la misión de la iglesia es la evangelización local, nacional e internacional, de acuerdo al
mandamiento de nuestro Señor Jesucristo; (Mt.28:19-20 / Hch. 1:8).

16. Creemos en adorar, alabar al Señor en espíritu y en verdad, por medio de las manifestaciones sugeridas
y aprobadas por la palabra de Dios; (Jn.4:23-24 / Fil. 3:3; Sal.150).

17. Creemos que la familia es la base fundamental de la sociedad y de la iglesia; (Gn. 2:21-24 / Ef. 5:21-
33).

18. Creemos en las siguientes prácticas basadas en la autoridad de las sagradas Escrituras:
a.- Presentación de niños al Señor (no bautismo de infantes) como un acto de fe del pacto de los
padres, y como una identificación pública del niño con la iglesia. (Mt.19:13-14 / 1Co.7:14).
b.- Diezmo y ofrendas como el único medio autorizado por Dios para sostener su obra. (Mt.2:10 /
2Co.9:5-14).
c.- El pacto matrimonial: Creemos en la santidad del matrimonio instituido por Dios

19. para la preservación de la raza humana. En cuanto al divorcio creemos que es tolerado por Dios desde
el Antiguo Testamento, pero no autorizado. Nos suscribimos a la enseñanza de Jesús de que la única razón
legal para el divorcio en el creyente es la fornicación de uno de los cónyuges. (He.13:4 / Ef. 5:25-33 /
1Co.7:1-5).

20. Creemos que los creyentes son santificados en la sangre de Jesús, al morir en el Señor, ellos van
inmediatamente a un lugar, El Cielo, llamado El Paraíso; pero los pecadores que mueren después de haber
rechazado a Jesucristo como Señor y salvador van a un lugar llamado Infierno, donde son atormentados
hasta el día de la segunda resurrección, para ir al juicio final (Fil.1:20-23 / Ro.14:7-9 /
Mt.23:33 / Ap.20:13).
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21. Creemos en la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo en forma corporal y visible, en la
resurrección de los muertos, en el establecimiento de su reino milenial, en el juicio final para todos los
hombres y en los cielos nuevos y tierra nueva, donde moraremos eternamente con Dios. (1Ts.4:13-17 /
Hch.1:11 / Ap.21:1-4).

22. Reconocemos que el gobierno humano es una institución puesta por Dios para la preservación del
orden, paz, seguridad y bienestar y reconocemos, sin venerar, los símbolos patrios del mismo; (Ro.13:1-6
/ 1P.2:13-14).

LA ORACIÓN

Texto: 1Ts.5:17-18

Introducción: Todo creyente después de haber nacido de nuevo, si quiere cultivar una vida saludable en el
Espíritu y quiere crecer espiritualmente, debe aprender la importancia de la oración como medio para entrar al
mundo Espiritual.

Puntos de estudios:
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1. ¿QUÉ ES ORACIÓN? - Sal.25:14 / Jn.17:3


Oración es comunión con Dios. Si condicionáramos nuestra mente para ver la oración como una cita de amor con
nuestro Padre Dios y con nuestro Señor Jesucristo; la oración cambiaría de ser una rutina o un ejercicio religioso
a una experiencia espiritual dinámica. Al entrar en la presencia de Dios por medio de la oración, vamos a entrar
en comunión con Dios, o sea, en un contacto espiritual directo. El Sal.25:14 dice: “la comunión íntima de Jehová
es con los que le temen, y a ellos hará conocer su pacto”

2.- IMPORTANCIA DE LA ORACION -2Cr.6:19 / Sal.65:2


2.1.- Dios está atento a tu oración - Pr.15:29
Por alguna razón muchos creyentes no saben que Dios escucha la oración de sus hijos, pero la palabra de Dios
nos asegura que los ojos del Señor están puestos sobre los justos y sus oídos atentos a sus oraciones.
2.2.- Dios contesta tu oración - Stg.5:17
Tenemos la seguridad de que él nos oye; sino que él mismo que nos oye también nos concede las peticiones que
le hacemos. Como creyente, tenemos que desarrollar esta confianza en ÉL; que cuando pedimos alguna cosa
conforme a su voluntad, él nos oye y si ya sabemos que captamos su atención, entonces tenemos fe que tenemos
las peticiones que le hayamos hecho. Jesús fue muy claro en cuanto a esto cuando dijo en Mr.11:24: “Por tanto,
os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis y os vendrá”.
2.3.- Oración es escuchar a Dios - Jn. 5:19-20
Estamos envueltos en una guerra espiritual con las fuerzas satánicas y no podemos luchar en nuestra mente o
nuestra fuerza física. Necesitamos desesperadamente los recursos del Espíritu Santo, para pelear la buena batalla
de la fe. Muchas veces fracasamos en las batallas espirituales porque ignoramos un principio muy importante en
la oración y es el principio de escuchar a Dios, para recibir guía e instrucciones de Dios de cómo hacer las cosas,
esta es el área más descuidada de nuestra oración porque no tenemos que hacer nada de mas y aparentemente es
una pérdida de tiempo, pero si queremos hacer obras de Jesús, tenemos que hacerlo como Jesús lo hacía. Primero
el oía y veía al Padre hacer las obras y después Jesús iba y las hacía. Si aprendemos a escuchar a Dios,
cometeremos menos errores.

3.- ¿CÓMO ORAR?


3.1.- Ora de acuerdo a la Palabra - Jn.15:7 / 1Jn.5:14
La razón por la cual la vida de oración de muchos creyentes es un desastre es porque no basan su oración en lo
que dice la palabra. La palabra es nuestra base de fe para pedirle a Dios lo que por derecho nos corresponde como
hijos.
3.2.- Ora, dirigiéndote al Padre - Jn.16:23
Jesucristo fue el que nos enseñó que nosotros no le pidamos a él nada en este día del nuevo pacto sino que le
pidamos al Padre directamente y él nos lo concederá. La razón para esto es que la Biblia dice que toda dádiva
viene del Padre..., ora a tu Padre que está en secreto..., mi Padre pues suplirá todo lo que os falta. En el orden de
Dios es el Padre quien tiene todas las cosas que nosotros necesitamos porque Cristo dijo en Mt.7:11, que el Padre
que está en el cielo es quién dará buenas cosas a los que le pidan. Está claro en estas escrituras que siempre
debemos dirigir nuestra oración y nuestras peticiones al Padre. Esto es una ley espiritual básica para que tu vida
de oración funcione.
3.3.- Ora en el Nombre de Jesús – Jn.16:23-24
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Jesucristo nos dio la seguridad que cuanto pidamos al Padre en su nombre, el Padre nos lo dará. El nombre de
Jesús es la llave que abre los tesoros del Padre. Cuando usamos ese nombre, inmediatamente tenemos audiencia
con el Padre para pedirle todas las cosas que necesitamos.
Podemos decir que el nombre de Jesús es un poder legal que nos autoriza a recibir del Padre como si nosotros
fuéramos el mismo aquí en la tierra. Cuando tú oras al Padre en el nombre de Jesús, el Padre te escucha y te
contesta porque legalmente es Jesús quién está orar al Padre.
3.4.- Ora con la ayuda del Espíritu Santo – 1Co.2:12
Son muchas las bendiciones que Dios tiene para nosotros; pero a causa de la tradición y la ignorancia religiosa
no sabemos que son nuestras. El Espíritu Santo que es nuestro ayudador en todo, quiere revelarnos todas las cosas
que Dios ha prometido para nuestro bien espiritual y material. La Biblia dice que nosotros hemos recibido el
Espíritu de Dios para que sepamos lo que Dios nos ha concedido. Por lo tanto, para tener una vida efectiva en la
oración hay que tener una constante comunión con el Espíritu Santo. Ora en lenguas para edificar tu santísima fe
y orar con gemidos indecibles

4- ¿POR QUÉ ORAR?


4.1.- Para que todos los hombres sean salvos – 1Ti.2:4 / Tit.2:11
Como creyente somos responsables de orar por la salvación de todos los hombres, porque para eso Jesús al mundo
amo. La voluntad de Dios es que todos los hombres sean salvos; y no sólo que sean salvos sino que vengan al
conocimiento de la verdad. No hay ninguna prueba bíblica que apoye la doctrina de que algunos pueden ser salvos
y otros no. Tit.2:11 dice: “Porque establece que la gracia de Dios se ha manifestado para la salvación a todos los
hombres.” Somos responsables de una ofensiva continua; orando e intercediendo por todos los hombres que aún
no conocen a Jesús como el Señor de sus vidas.
4.2.- Por el mandamiento de Jesús – Mt. 6:6 / Mt.6:10 / Ro.14:17
Tenemos que orar para no caer en tentación; así que, Jesús nos enseño a orar para que nuestras necesidades sean
suplidas, para que su reino se manifieste en la tierra y para que podamos vivir una vida de victoria sin caer en la
tentación. Si somos discípulos de Jesús, debemos obedecer lo que Él nos ha mandado en el área de la oración. La
manifestación del Reino de Dios incluye la sanidad de los enfermos y la liberación de demonios. Podemos llegar
a la conclusión de que la manifestación de reino de Dios, envuelve poner todos los enemigos de Jesús por estrado
de sus pies. Debemos orar para que el reino de Dios se manifieste sobre todas las áreas de nuestra vida, sobre
todas las personas y sobre todo el mundo; con justicia, gozo y paz.
4.3.- Para que todas nuestras necesidades sean suplidas – 1 Ti.6:17 / Fil.4:19
Tenemos que ver a Dios como un Padre bueno, con las manos repletas de regalos y bendiciones para compartirlas
con todos sus hijos. Hacer Oración por nuestras necesidades espirituales, físicas, económicas y familiares. Si
hemos establecido una comunión estrecha con el Padre, tendremos confianza para pedirle con fe sin pensar que
él nos va a negar o a rechazar lo que le pedimos.
Jesucristo nos mandó a pedir; nos dijo que si pedimos, recibimos; que si buscamos, hallaremos y que si llamamos
se nos abrirá; y enseguida nos dio la promesa: Mt. 7:11 “Que Dios dará buenas cosas a los que le pidan porque
Él es un Padre Bueno”. En el cielo no hay escasez de nada, por lo tanto, pedirle a Dios que supla la cosas que nos
hacen falta es orar que la voluntad de Dios que es hecha en el cielo, sea también hecha en la tierra. Por tanto,
podemos orar por nuestras necesidades para darle al reino de Dios y compartir con los pobres. Recuerda que lo
que tú pidas tiene que estar dentro del marco de la voluntad de Dios a fin de que puedas tener fe para
recibirlo.Mt.7: 7-11
4.4.- Para interceder por otros – Jn.17:9,20
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Cuando oramos y satisfacemos la necesidad del corazón de Dios, disfrutamos su comunión y hemos pedido para
nosotros; tenemos ahora que movernos a orar por otras personas que necesitan nuestra intercesión. Tenemos el
ejemplo de Jesús en Jn.17, como antes de El ir a la cruz, pasó un tiempo con el Padre, intercediendo intensamente
por sus discípulos, porque él sabía los peligros a los cuales ellos iban a estar expuestos. Debemos interceder por:
4.4.1.- La salvación de los perdidos 1Ti.2:3-4
La voluntad de Dios es clara en la palabra en el sentido de que Jesucristo murió para salvar todos los
hombres y todos pueden serlo. Dios no tiene un grupo predestinado para salvación como algunos enseñan
erróneamente. Lo único que impide que los pecadores sean salvos es el control que el diablo ejerce sobre
ellos por medio de los demonios. Nosotros como creyentes tenemos el poder para atar los demonios en la
tierra y Dios ha dicho que él los ata en el cielo. Cuando oramos, el Espíritu Santo entra en operación,
desnudando al pecador de su propia justicia y de sus argumentos vanos en contra de Dios. Con la ayuda
de las armas espirituales y con la ayuda del Espíritu Santo, las fortalezas que Satanás ha edificado por
años y años en la mente del pecador serán destruidas, dejando al pecador en una posición de humildad
para recibir la palabra de Dios.

4.4.2.- Por pastores y ministros: Debemos orar por nuestros pastores y ministros para que:
*Sean fortalecidos en su hombre interior para ser ministros competentes del Nuevo Pacto y sean llenos
continuamente del Espíritu Santo a fin de que ministren en la unción del Espíritu y manifiesten la Gloria
de Dios Ef.3:16 / Ef.1:1.
*Reciban espíritu de sabiduría y revelación en el conocimiento de Cristo. 2P.1:2-3.
*Hablen con denuedo Su palabra. Hch.4:29
*Dios confirme Su palabra en ellos con sanidades, señales y prodigios. Hch. 4:30
*El ángel del Señor los proteja de hombres perversos malos, y destruye toda arma forjada por el diablo
contra ellos y su familias. 2Ts.3:2:
*Sean prosperados en espíritu, alma y cuerpo, y que todas sus necesidades económicas sean suplidas de
acuerdo a Sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.

4.4.3.- Por los que están en eminencia: Porque esto es bueno y agradable delante de Dios, nuestro Salvador
(1Ti.2:2-4) “Si usted como cristiano quiere agradar a Dios pondrá líderes de su nación primero en su lista
de oración”

4.4.4.- Por nuestra nación: Debemos entender que nuestro país necesita una intervención de Dios. Pablo
dijo que se hagan “rogativas, oraciones, peticiones”. La oración es, por supuesto, una oración hecha por
otros, y esta escritura se está refiriendo a orar, o interceder por otros. Jer.29.7
4.4.5.- Por avivamiento: La oración es el elemento indispensable para traer avivamiento a una iglesia y a
una nación. Dios siempre ha movido hombres a orar fervientemente cuando él quiere derramar su Espíritu
en una forma especial sobre la tierra. El tiempo que estamos viviendo demanda creyentes consagrados que
se den a buscar el rostro del Señor para que seamos visitados de nuevo con el Espíritu Santo.
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ALABANZA Y ADORACION

Texto: Sal. 22:3 / Sal. 150

Introducción: La adoración y la alabanza son armas espirituales con las que no sólo se vence al enemigo sino
que conquistamos el corazón de Dios. Debemos entonces recordar que la palabra de Dios dice: “…Dios habita en
medio de la alabanza de su pueblo” (Sal.22:3). Por otra parte, cuando Cristo fue tentado en el desierto, en una de
sus repuestas dice: “Al Señor tu Dios adorarás y a él sólo servirás” (Lc.4:8, Mt 4:10). Hay que profundizar
entonces en estos aspectos para que permanezcan en nuestra vida espiritual, con el fin de agradar a Dios y tener
victoria, entendiendo la diferencia que existen entre ellas y cómo debemos usarlas correctamente.
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Puntos de estudio:
1.- ¿Qué es la ALABANZA?
Alabar significa resaltar una cualidad de algo o alguien para congraciarse. En otras palabras, la alabanza es la
forma de expresión de los creyentes cristianos para darle la gloria y la honra a Dios.
También se puede decir que es la expresión que se usa para llegar a la presencia de Dios, como también una
estrategia de Dios para obtener victorias, como lo fue para Israel, que bajo la guía del Espíritu Santo derrumbó
los muros de Jericó (Jos.6:5) o para traer liberación, como sucedió con Pablo y Silas (Hch.16:24-25).

2.- ¿Cómo se expresa la alabanza?


La alabanza se puede expresar a través del cuerpo, ya sea danzando, remolineando, gritando de júbilo, saltando,
aplaudiendo, cantando, llorando u otra manifestación. Por medio de la alabanza se puede cambiar una atmosfera
espiritual de opresión; apartamos toda influencia del diablo y permitimos que la presencia de Dios se acerque.
Por ello, la Biblia habla en el Sal.22:3, que Dios habita, permanece, en medio de la alabanza de su pueblo. Dios
le agrada que le alabemos por lo que él hizo, hace y hará.

Citas de Alabanzas:
*Hch.16:24-25: Pablo y Silas a pesar de haber sido encarcelados, después de haber sido azotados, en vez de
quejarse, de lo profundo de su alma, comenzaron a cantar alabanzas a Dios y a orar. Fue tal el sacrificio de
alabanza que hicieron, que Dios envió un terremoto que abrió las puertas de las cárceles y soltó las cadenas de
TODOS los presos, trayendo con esto una gran liberación, no sólo para Pablo y Silas, sino para los que lo rodeaban
e incluso, la salvación a los carceleros.

*Cuando se alaba a Dios, se puede provocar a Dios un “de repente” que traerá como consecuencia la bendición
de Él sobre nuestras vidas.

*2Cr.20:20-22: El rey Josafat fue sitiado por el enemigo, pero por estrategia de Dios fue movido a colocar cantores
al frente de la batalla y les indico que cantasen y alabasen a Dios. En el mismo momento en que los levitas
cantantes comenzaron a entonar con alegría himnos de alabanzas, el Señor creó confusión entre los enemigos
haciendo que ellos mismos se mataran y trayendo una gran victoria a su pueblo.

* Gn.29:35: La primera vez que aparece la palabra alabanza en la biblia fue cuando Lea dio a luz en su cuarto un
hijo llamado Judá, que significa “alabanza a Dios”. La alabanza se manifiesta como un agradecimiento por lo
recibido de Dios. De esta tribu, desciende David quien fue un gran reformador en su época de la alabanza como
nunca, tanto así que Dios prometió en este tiempo restaurar el tabernáculo caído de David, refiriéndose con esto
a la alabanza de su pueblo. Así mismo, Nuestro Señor Jesús proviene de esta Tribu, tanto así que se le llama, el
León de la Tribu de Judá (Ap.5:5).

*Sal.150: Un canto de alabanza y una guía de lo que Dios pide, se manifiesta en este salmo. Piden que se le alabe
en su santuario, en su majestad, por sus hechos poderosos, por su grandeza infinita, con trompeta, con arpa y
salterio, con danza, con flautas e instrumentos de cuerda, con platillos sonoros y vibrantes…todo lo que respire
alabe al Señor. En Ef.1:12, que Dios nos hizo, para alabanza de su gloria. Sal.50:23 / Sal.95:2 / He.13:5. En
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definitiva, la alabanza es el medio y atmósfera que se respira en el cielo y en todo aquel que ha nacido de nuevo.
Debemos tener una actitud siempre de alabanza y agradecimiento a Dios.

3.- ¿QUÉ ES LA ADORACION?


Adorar significa, venerar, postrarse, inclinarse, servir, obedecer, reverenciar con honor a Dios. Se puede definir
entonces, que la adoración es la actitud o intención interna del corazón del hombre para Dios, es una forma de
vida y no implica un tiempo determinado solamente. En el Antiguo Testamento, la primera vez que se menciona
la palabra adoración es en Gn.22:5, cuando Abraham va a entregar a su hijo como adoración a Dios. Esto implica
entonces una obediencia mediante un acto voluntario y es la manifestación más grande que cualquiera puede darle
a otro ser. El hecho de tener a un Dios implica que es con el propósito de adorarle. Aun los paganos entienden
esto, ya que ellos adoran a sus dioses, inclinándose ante ellos. Para que algo se convierta en dios sólo requiere
que se le adore. Por ello todo lo que servimos y adoramos se convierte en nuestro Dios. Lo que (tu) adoras es tu
Dios, y si es tu Dios, requiere de tu adoración.
En el pasaje de la tentación de Jesús, en Mt.4:8-10 “Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró
todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares. Entonces
Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás”. En este encuentro
se perfila una lucha de Satanás para demandar la adoración que le pertenece a Dios. Ese es el plan del enemigo,
apartarte de la adoración a Dios, y por consiguiente, que le adores a él. Es cierto que podemos trabajar para Dios
sin el corazón, pero es imposible adorarle propiamente sin que lo hagamos desde lo más profundo del corazón.
No podemos ver la adoración como algo incidental o adicional, sino como el centro de mi existencia. Podemos
decir: “Te adoro Señor porque te amo, y te sirvo porque te adoro”. Dios hace una demanda, según Jn. 4:22-24
“Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación viene de los judíos.
Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque
también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en
verdad es necesario que adoren”.

Diferencias Básicas entre Alabanza y Adoración

ALABANZA ADORACION
Se le alaba por lo que Él hizo, hace y hará Se le adora por lo que Él es Implica música como complemento No
implica, necesariamente música. Es una forma de expresión Es una intención y una actitud del corazón Si soy
alabador no necesariamente soy adorador.
Si soy adorador implica que soy alabador. Nos lleva a la presencia de Dios Es una forma de vida para permanecer
en la presencia de Dios.
Existe alabanza para Dios y los hombres. Pero la adoración se le pertenece exclusivamente a Dios, aunque se le
puede dar a hombres y cosas por error…
Se alaba con el cuerpo y el alma Se adora en el espíritu. Todo lo que respira alaba al Señor Sólo adoran los
verdaderos adoradores que aman a Dios.

Conclusión: La alabanza y la adoración son complementarias y no independientes. Al ser utilizadas o empleadas


como un todo se logra el propósito de intimar con Dios y ocupar el lugar que en un principio tenía el Diablo o
Luzbel ante Dios, cuando fue creado y cuyo propósito era alabar y adorar constantemente a Dios. Ahora Dios ha
trasladado esa función a sus Hijos y por ello somos el blanco del enemigo; sin embargo, fuimos llamados a esto
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y si esta verdad tan importante es revelada a nuestras vidas plenamente, no sólo agradaremos constantemente a
Dios, sino que obtendremos victorias… porque “si Dios es con nosotros quien contra nosotros”.

EL AMOR DE DIOS

Texto: Ef.5:1-2 / 1J.3:1

Introducción: La Escritura nos manda a que imitemos a Dios, ya que somos sus hijos; y se espera de los hijos
que sean como sus padres. La característica principal de Dios es amor, por lo tanto Dios espera que sus hijos
exhiban esta característica o rasgo. La razón por la cual Dios dio a Su Hijo fue por amor: Jn. 3:16 “De tal manera
amó Dios al mundo que dio a su único Hijo, para que todo aquel que en él crea no se pierda mas tenga vida eterna”

Puntos de estudio:
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1. El Amor de Dios hacia nosotros - Se manifestó de tres formas: perdón, restauración y restitución.
1.1 Perdonando: Dios perdonó nuestros pecados. En Mt.6:12 en el modelo de oración del Padre Nuestro,
nos dice que….perdonas nuestros pecados, así como también nosotros perdonamos a quienes nos ofenden…
Lo primero que se manifiesta en la vida del creyente cuando recibe a Jesús como su Señor y Salvador es que
experimenta el gozo de la salvación, que no es más que el alivio de que mis pecados han sido perdonados y
echados a lo profundo del mar y Dios ya no se acuerda de eso. De esa misma forma tenemos que ser, perdonar a
los demás las ofensas que nos hagan. Con ello, prácticamente se nos dice que no hay nada que nos pueda ofender
y que nosotros no tengamos que perdonar. La base del amor es el perdón.
El amor está definido en la misma Palabra como: sufrido, benigno, que no se irrita, no guarda rencor, no se
envanece, no busca lo suyo, todo lo cree, todo lo soporta, todo lo espera, todo lo da, el amor no dejará de ser. Tres
cosas permanecen hasta ahora: la Fe, la Esperanza y el Amor, pero de todas, la más importante es el amor.
1.2 Restauración: Dios no sólo nos perdona, sino que nos restaura; es decir, nos devuelve o nos hace de
nuevo todo. De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es y todas las cosas viejas pasaron y he aquí
son hechas nuevas. El perdón de Dios trae sanidad interior a nuestra alma y espíritu. Debemos de restaurar nuestra
comunión con nuestros semejantes, hermanos y enemigos y así cumplir la Ley de Cristo. El primer mandamiento
nos enseña que lo primero que debemos hacer es: amar a Dios por sobre todas las cosas y el segundo es amarás a
tu prójimo como a ti mismo.
1.3 Restitución: Nos devuelve el lugar y posición que desde antes de la fundación del mundo nos dio. Nos
convierte en sus Hijos y por lo tanto herederos de las promesas de Dios, es decir nos coloca en el lugar correcto
y con toda la autoridad conferida por Jesús en nuestras vidas. Así mismo, debemos nosotros devolver al que
hemos ofendido lo que dañamos y aun con creces. Cuando Zaqueo, jefe de los publicanos fue llamado por Jesús,
lo primero que hizo después de haber sido perdonado, fue perdonar, restaurar y restituir al agraviado. En el caso
de Zaqueo devolvió al que le había robado el doble, dando a entender que se gestó en él la operación del nuevo
nacimiento.

2. El amor de Dios en nosotros Ro.5:5


Hemos escuchado a muchos cristianos pidiendo que Dios les de amor y esto no está en armonía con la revelación
de la Palabra de Dios, porque de acuerdo a la misma, el día que nosotros nacimos de nuevo, el Espíritu Santo de
Dios derramó su amor en nuestros corazones. Por lo tanto si esto es así; nuestro corazón es una represa del amor
de Dios, esperando para ser manifestado en cualquier oportunidad que sea necesario.
La prueba principal que hemos nacido de nuevo de acuerdo a la Palabra de Dios es que se va a manifestar el amor;
por eso dice: "Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos". La
Escritura es muy clara, el que no ama, permanece en muerte espiritual y no ha recibido vida eterna; porque cuando
uno es salvo, la vida que recibe es la vida de Dios, la cual se reproduce en nosotros; y Dios es amor.

3. Cómo manifestar el amor de Dios 1Jn. 3:14-15; 4:7-8


La forma de manifestar el amor de Dios es como lo hizo Cristo que por amor se entregó a sí mismo. Nosotros
andaremos en amor en la medida en que nos entreguemos a otros. Este asunto es tan importante que 1Jn.3:1 nos
dice que el amor nos fue dado para que seamos llamados hijos de Dios. Así que podemos decir; que el amor de
Dios en nosotros es lo suficientemente poderoso para, enfrentarse a cualquier situación y provocación que venga
de afuera; porque la Palabra dice: "Mayor es el que está en vosotros que el que está en el mundo”. Teniendo
comunión con el Espíritu Santo y revelación de la Palabra, podremos caminar en el amor de Dios.
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Contrario a lo que se cree, el amor debe ser lo natural para el creyente, porque en 1Jn.4:7 nos manda a que nos
amemos unos a otros y nos da la razón para esto: nos dice que el amor es de Dios y si nosotros hemos nacido de
Dios, tenemos la capacidad dentro de nosotros para amar. Otra vez la Palabra es muy enfática, enseñando que si
la persona no ama, no ha conocido a Dios, porque Dios es amor. De la misma forma que esperamos ver en nuestros
hijos nuestros rasgos, características y que se parezcan a nosotros, en el ámbito espiritual, Dios espera, que si
hemos nacido de Él, seamos como Él y en consecuencia amemos como Él ama.

4. El amor es un fruto. - Juan 15:8-9


Muchas veces pensamos que el amor es un fruto del Espíritu Santo, pero no es así; el amor es un fruto que nace
en nuestro espíritu, en la nueva creación (Gál. 5:22). Cristo dijo que Él es la vid y nosotros los pámpanos (ramas);
el fruto no crece en la vid, sino en las ramas; esto es, en nosotros. Jesucristo nos dio el secreto de llevar mucho
fruto de amor, y es permaneciendo en una constante comunión con Él, que es la vid. Él dijo: "Separados de mí,
nada podéis hacer", necesitamos estar pegados a la vid para llevar mucho fruto y seamos así sus discípulos. Esto
de llevar fruto es tan importante que Jesucristo dijo en Jn.15:8: "En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis
mucho fruto y seáis así mis discípulos”. En Gá.5:22-23 encontramos el fruto del Espíritu con sus correspondientes
manifestaciones, las cuales son resultado de la vida de Cristo reproducida dentro de nosotros. Así que,
básicamente, lo que hace que un cristiano sea espiritual es que anda en el amor de Dios.

5. Perfeccionados en amor - 1Jn.4:15-18


Es cierto que no podemos recibir más amor del que tenemos, pero sí podemos ser perfeccionados en la
manifestación de su amor en nosotros. Hay dos cosas que nos perfeccionan en amor:
*Guardar su Palabra.
La Palabra de Dios es la expresión de un Dios de amor, por lo tanto, en la medida en que su Palabra more
en nosotros, vamos a ser perfeccionados en el amor de Dios: es decir que la Palabra es el agente de Dios,
ara perfeccionamos y maduramos en el amor de Dios.
*Ejercitándole.
El amor se perfecciona por el ejercicio. Cada vez que alguien nos opone o nos odia y nosotros
permanecemos en amor, estamos siendo perfeccionados en él. Con el amor pasa como con la fe: algunos
creen que la fe es solamente aprender textos bíblicos, pero cuando llega la prueba o la tribulación, se
niegan a caminar en fe y de esta forma nunca serán perfeccionados en ella. Asimismo, hasta que nuestro
amor no sea retado y amenazado, no seremos perfeccionados totalmente en el camino del amor. Cada día
hacemos una decisión de amar a Dios con todo el ser, y así como le amamos como lo más supremo en
nuestra vida, el obedecer su voluntad y sus palabras es una delicia, no una carga. Jn. 14:21.
6.- El amor, la mejor forma de evangelizar Jn. 13:34-35
El mundo religioso está totalmente confundido sobre qué es lo que nos identifica como cristianos; y distintos
grupos tienen distintas formas de identificar a los cristianos; sea por doctrina, práctica o mandamientos. No
negamos que estas cosas son importantísimas, pero Jesucristo, enfáticamente enseñó que el mundo va a darse
cuenta de nosotros cuando nos amemos los unos a los otros; es más, en esto conocerán todos que somos sus
discípulos. Esto es, que hay la posibilidad de que aun la gente que no cree en Dios, noten ese amor; aquel que nos
mostramos los unos a los otros. Cuando el mundo vea esta manifestación, entonces, van a creer, no por lo que
decimos, sino por lo que hacemos. Es por eso que Satanás, sabiendo esto, hace todo lo que está a su alcance para
neutralizar nuestro testimonio de amor; trayendo contienda y división en el mismo cuerpo de Cristo. El amor
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rompe todas las barreras, el amor echa fuera el temor. Hablemos al mundo de la misericordia infinita de Dios que
está disponible para todo aquel que entregue su vida al Señor. Dios es bueno y para siempre es Su Misericordia.

LA BENDICIÓN DE DIEZMAR Y OFRENDAR

Texto: Mal.3:6-12

Introducción: El diezmo es la décima parte que separamos para Dios, de todo aquello que recibimos como regalo
o salario. Podemos considerarlo como un pacto de bendición económica entre Dios y sus hijos. Además de esto,
está bajo los principios de dar y recibir; por lo tanto, no debemos verlo desde una actitud legalista o condenatoria,
sino desde una actitud de fe y gracia para que recibamos la bendición de Dios.
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Puntos de estudio:
1.- El Diezmo
1.1.- Volveos a mí.
Dios considera el diezmo como algo muy espiritual; tanto así, que él no darlo, es considerado por Dios como
apartarse de sus leyes. Aquí Dios le está diciendo al pueblo que se vuelva a Él; o sea se arrepienta, y como
resultado Dios se va a volver a ellos. Dios está indicando que la forma de volverse a Él, es no robarle más los
diezmos y las ofrendas, y hacer una decisión de traerlos a Dios.
Dios no separa el diezmo de la persona; por lo tanto, el no dar los diezmos, en un sentido, te separa de Su
bendición.
1.2.- Traed todos los diezmos.
Dios le dice al pueblo de Israel que la maldición había caído sobre ellos porque no estaban trayendo los diezmos
al alfolí. No es que Dios los estuviera maldiciendo. Sino que al no cumplir las leyes de Dios, se estaban saliendo
de la bendición de Dios y entrando en un terreno donde el enemigo podía hacerle daño. Dios dice que traigamos
todos los diezmos (todos) al alfolí de su casa, que es la iglesia. Este es un mandamiento, no una opción que Dios
nos da.
1.3.- Derramaré sobre vosotros bendición.
El cristiano que no diezma pierde la bendición de Dios, y posiblemente, la salvación. Dios promete que como
consecuencia de traer todos los diezmos, podemos ponerlo a prueba. Él ha prometido abrir las ventanas de los
cielos y derramar bendición en abundancia. Si tú traes los diezmos y haces tú parte, entonces Dios hará la suya,
que es enviarte bendición. La Biblia dice que la bendición de Jehová es la que enriquece y no añade tristeza con
ella. Entiéndase por esto que no importa lo que tú trates de hacer para prosperar ignorando estos principios de
traer los diezmos y las ofrendas; sin la bendición de Dios, no te va a funcionar. Cuando tú diezmas, estás haciendo
a Dios tu socio principal; es decir, tu accionista número uno, por lo tanto, Él no va a permitir que el negocio donde
él tiene acciones fracase.
1.4.- Reprenderé al devorador.
Sabemos que el devorador de nuestra economía es Satanás, ya que él viene a robar, matar y destruir. El mismo
diablo que te aconseja que no diezmes, es el mismo que después que no lo haces, te destruye. Él sabe que esto es
una puerta abierta por la cual él puede entrar con derecho legal y destruir no sólo tu economía, sino también tu
familia, salud y aún tu vida espiritual. Esto es así porque el no diezmar es resultado de una actitud espiritual de
avaricia y egoísmo, la cual te puede destruir si a tiempo no la arrancas de tu vida. En toda la Escritura, Dios nos
manda a reprender al diablo, pero en este caso especial tenemos la gran promesa que Él mismo va a hacerlo por
nosotros.
Ahora imagínate, tú reprendiendo al diablo desde la tierra y Dios reprendiéndole desde el cielo. No hay forma
que el diablo se escape, cuando tú y Dios se ponen de acuerdo.
1.5.- Seréis tierra deseable:
Como consecuencia de estar diezmando, vamos a prosperar y a ser bienaventurados, aun la gente que no es
creyente va a notarlo y va a desear lo que nosotros tenemos. Un cristiano feliz y próspero es el mejor testimonio
de Dios al mundo. Recuerda que en el Antiguo Testamento, Dios escogió a Israel para que fuera la envidia de las
naciones; pero ahora en el Nuevo Pacto, Dios nos ha escogido a nosotros (la iglesia) para que provoquemos a
celos a los no creyentes. Si tú no has estado diezmando, arrepiéntete de ello y vuélvete a Dios ahora mismo, y
empieza a reclamar su bendición sobre todo lo que tú tocares. Ahora estás listo para recibir su bendición.

2.- Ofrendas
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La ofrenda no es el diezmo, está por encima del diezmo. La ofrenda es el reconocimiento sincero y de corazón,
de las bendiciones recibidas de Dios. La ofrenda es una forma maravillosa de adorar a Dios. Es aquello que das
simplemente porque amas a Dios. 1Cr. 29:9: “Y se alegro el pueblo por haber contribuido voluntariamente; porque
de todo corazón ofrecieron a Jehová voluntariamente”

3.- Primicias
Las primicias son los primero frutos de la cosecha o de las bendiciones que recibimos; son consagradas en su
totalidad a Dios en reconocimiento y acción de gracias, porque estos frutos y bendiciones provienen de Dios. Con
las primicias se honra a Dios. Pr. 3:9-10: “Honra a Jehová con tus bienes y con las primicias de todos tus frutos;
y serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto.” El mandato es: Honra a Jehová
con tus bienes, con tus riquezas, con lo que tienes, con las primicias de todos tus frutos, los primeros frutos, las
primeras ganancias, las primeras bendiciones, de todo ¡LO PRIMERO ES PARA DIOS! La recompensa es: Que
Dios llenará tus graneros con abundancia; tus graneros se llenarán a reventar, tus depósitos rebosarán, tu empresa
o negocio serán bendecidos con abundancia, tu cuenta bancaria, tus ahorros estarán llenos.
Tendrás abundancia. Esta ofrenda es entregada al Pastor o sacerdote según lo dice la Palabra. Ez.44: 30: “Y las
primicias de todos los primeros frutos de todo, y toda ofrenda de todo lo que se presente de todas vuestras
ofrendas, será de los sacerdotes; asimismo daréis al sacerdote las primicias de todas vuestras masas, para que
repose la bendición en vuestras casas”.

4.- Semilla:
Es una ofrenda que das con nombre específico: si deseas una casa, un carro o la salvación de un familiar, colocas
una semilla esperando una cosecha. Cada cosecha debe tener su semilla. La semilla es multiplicada, pero sólo
cuando se siembra. En 2Co.9:10 “Y el que da semilla al que siembra y pan al que come, proveerá y multiplicará
vuestra sementera y aumentará los frutos de vuestra justicia” 2Co. 9:6-7

5.- Pacto o compromiso (voto):


Es aquello que prometes a Dios de una manera especial, por una circunstancia, situación o necesidad. Es algo
bien delicado, pues Dios es un Dios de pacto, que cumple su Palabra y espera lo mismo de ti. Ec.5:4-5: “Cuando
a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla, porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que
prometes, mejor es que no prometas y no que prometas y no cumplas”. Son promesas que haces a Dios Nm.21:2
/ Gn.28:20-22 / Jue.11:30 / Nm.30:2 / Dt.23:21 / Hch. 5:1-11 / 1S.1:10-11: Ana hizo voto con Dios, Ana hace
esto porque no tenía hijos y Penina, su rival, siempre la presionaba y la humillaba por esta razón. En su tiempo
era una deshonra ser estéril.
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LA IMPORTANCIA DE LA PALABRA

Texto: Jn.8:31-32 / Stg.1:25

Introducción: Todo creyente que ha nacido de nuevo por el poder del Espíritu Santo ha sido libre de todo el
poder del enemigo, porque está escrito en Col.1:13:“...el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y
trasladado al reino de su amado Hijo”. Esta libertad es resultado de la redención que tenemos en Cristo por su
sangre. Legalmente, Satanás no tiene ninguna autoridad sobre el creyente; pero él no respeta esa libertad. El
creyente necesita dos cosas para poder ser libre: primero, adquirir conocimiento de que es libre por la Palabra (el
documento legal de nuestra libertad), y luego ejercer por la fe esa libertad. La Biblia es la voz de Dios dándonos
instrucciones para que vivamos una vida victoriosa y podamos heredar las promesas.
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Puntos de estudios:
1.- Nacidos por la Palabra - Lc.1:38 / Stg.1:18 / 1P.1:23
La Palabra es la semilla incorruptible de Dios. Cuando oímos la palabra de Dios y la recibimos con fe, nuestro
espíritu nace de nuevo. Es por medio de la Palabra que Cristo es implantado en nosotros, lo que nos convierte en
Nueva Creación. Sucede exactamente en la persona, lo que aconteció en María cuando tuvo la visitación del ángel
y ella dijo: “hágase conmigo conforme a tu palabra”.

2.- Creemos por la Palabra - Mt.4:4 / 1P.2:1-2


Cuando la Palabra penetra en el creyente, alumbra y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón
(He.4:12), de forma tal, que quedamos desnudos y tenemos que reconocer la necesidad de un cambio que sólo se
opera por el oír con fe la Palabra de Dios. En la misma forma que la comida nos provee crecimiento físico, la
Palabra de Dios es el alimento espiritual que hace crecer nuestro espíritu, por esto, es necesario leerla diariamente.
Jesús dijo: “Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”.

3.-Permaneciendo en la Palabra – Mt.28:19 / Jn. 15:4 / Jn. 15:7


Notemos que Jesús les estaba hablando a los judíos que habían creído en Él. Lo que prueba que después de creer
en Jesucristo, es necesario permanecer en Su palabra. Podemos entender esto como que el creyente tiene que
disciplinarse a vivir, estar y pensar en la Palabra. Esto es muy importante, porque cuando Jesucristo dio la gran
comisión en Mt.28:19 dijo: “Id, y haced discípulos”, explicándonos en el próximo verso que esto se consigue;
“enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado”. Un discípulo es quien recibe una enseñanza. El
Espíritu Santo va a usar la Palabra para enseñarnos acerca de Jesucristo.

4.- Conociendo la Palabra – Ef.6:14


La Palabra capacitará al creyente para conocer la verdad, o sea, la realidad de todas las cosas, sean éstas
espirituales o naturales. Satanás es el padre de mentira y para poder luchar contra él efectivamente tenemos que
conocer la verdad. De esta manera Jesús venció la tentación del diablo en el desierto (Mt.4:4-11). También Pablo
dijo en Ef.6:14: “Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad…”. Si estamos ceñidos con la verdad,
las mentiras del diablo nunca podrán movernos de nuestra fe en nuestro Señor Jesucristo.

5.- Nos da conocimiento y revelación de Dios.


Por medio del conocimiento y estudio de la Palabra podemos conocer a un Dios creador del cielo y tierra, y
soberano Señor de todas las cosas, que es a su vez bueno y misericordioso, lleno de justicia, amor y gracia, Jn.3:16
/ 1Jn.3:1. Conocemos sus atributos y también aprendemos que es accesible a nosotros, Jer. 33:3 / Sal.145:18 / He.
4:16

6.- La verdad que nos hace libres – Gal.5:1 / Col. 2:14


Cuando el creyente no lee su carta de libertad que es la Palabra, especialmente el nuevo testamento, no se entera
de la victoria obtenida por Jesús para él. Satanás nunca va a informarle a un creyente que Dios lo hizo libre. Él
tiene que descubrirlo al buscar la Biblia. A continuación se dan algunos ejemplos de cosas de las que has sido
libre:
*Muerte espiritual y pecado.
*Enfermedad
*Opresión demoníaca
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*Miseria.

“Estad, pues firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud”.
Gal.5:1

TRANSFORMACIÓN Y VICTORIA POR LA PALABRA

Texto: Col.3:16 / He.4:12

Introducción: Jehová Dios le dijo a Josué que si quería tener éxito en todos los asuntos de su vida tenía que
disciplinarse a meditar en la Palabra de día y de noche. Como Dios es un Dios de éxito, al meditar en su Palabra,
nosotros vamos a ser partícipes de esta parte de su naturaleza. Si quieres puedes hacerlo, y vivir por encima de
todos los problemas.

Puntos de estudios:
1.-Hace producir frutos – Jn.15:7-8 / 1Jn.2:5
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Cuando la Palabra está en nosotros, sin lugar a dudas, produce frutos en nuestras vidas. Nos capacita para poder
enseñar, corregir; nos da sabiduría y también produce gozo y paz para que vivamos en una continua alabanza;
asimismo, por medio de ella, manifestamos el fruto del Espíritu.

2.-Somos edificados por la Palabra – He.20:32 / Mt.7:24-25


La palabra es el agente creador de Dios, ya que por ella fueron formados los mundos. En la misma forma, ella
edifica dentro de nosotros la vida de Jesucristo. Una vida fundada en la Palabra nos va a capacitar para resistir las
tormentas que amenazan nuestra vida espiritual.

3.-La Palabra renueva mi mente – Ro.12:2 / Stg.1:21


Nuestra mente es como una computadora que ha sido programada por años para el pecado, la enfermedad, la
pobreza, el fracaso y el negativismo. La única forma de cambiar nuestra mente es reprogramándola con las
promesas de la Palabra de Dios. La transformación de todo nuestro ser (espíritu, alma y cuerpo) viene como
consecuencia de la renovación mental y es entonces, cuando podemos descubrir cuál es la voluntad de Dios para
nuestras vidas.

4.-Recibimos fe por la Palabra – He. 11:6


La Biblia dice que el justo por su fe vivirá, y también dice que a cada creyente Dios le dio una medida de fe. Esta
fe puede crecer, si constantemente escuchamos la Palabra de fe. Sólo así podemos agradar a Dios, “Pero sin fe es
imposible agradar a Dios…”.

CONFLICTO ESPIRITUAL

Texto: 1P 2:9

Introducción: Existen dos reinos claramente definidos en la Palabra de Dios: el Reino de Dios (Col.1:13) y el
reino de Satanás (Jn.16:11 / Ef.2:2). Estos reinos establecen un “Conflicto Espiritual". Para entender bien qué
significa este conflicto, recordemos el plan de Dios para nosotros, para el mundo. El enviar a su Hijo no fue un
capricho, una casualidad, algo que pasó y ya. El apóstol Pablo nos dice muy claramente que Dios tiene un plan,
un propósito final: Ef.1:7,10 "En quien tenemos redención, por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas
de Su gracia… hacer que todo tenga a Cristo por Cabeza, lo que está en los cielos y lo que está en la tierra". El
plan de Dios en Cristo es establecer su Reino en toda la creación, no sólo en los seres humanos, sino también en
las fuerzas espirituales buenas y malas del universo. El plan de Dios es poner orden y poner su
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Reino sobre todo lo que ha creado.


El plan de Satanás es impedir el plan de Dios, o al menos, atrasarlo lo más posible. Este es el más furioso de todos
los conflictos. Aún en las guerras modernas las armas son físicas, pero no es así en una batalla espiritual; el
conflicto se desarrolla dentro de cada creyente, en su espíritu, mente y emociones. La vida de cada creyente es un
conflicto espiritual diario contra las fuerzas del enemigo que quieren destruir y neutralizar la efectividad de los
hijos de Dios. Muchas veces queremos que esto no tenga nada que ver con nosotros. Pero esta no es la voluntad
del Señor, en Lc.11:23 leemos: "El que no está conmigo, está contra mí, y el que no recoge conmigo, desparrama".
Estamos en un equipo o en el otro. Tenemos que tener esto muy claro: No hay espectadores. Definiremos las
características de los dos reinos, porque es necesario conocer quién es nuestro Dios y quien es
Satanás.

Puntos de estudios:
1.- El Reino de los Cielos o de la Luz, conformado por:
*La Trinidad Divina: Padre, Hijo y Espíritu Santo
*Arcángeles, ángeles, serafines y querubines, como el ejército de Cristo. Los arcángeles son los más poderosos,
la Biblia habla de dos: Miguel, que comanda las huestes angelicales que pelean contra los huestes de maldad.
Dn.10:13 / Ap. 12:7, y Gabriel, mensajero especial de la presencia de Dios, Lc.1:16 / Lc.1:19-20; son ángeles que
están a la disposición de Dios para obedecer Su Palabra.
Los querubines están ante la presencia de Dios Números 7:89 y los serafines son adoradores Is.6:1- 7.
*La Iglesia Ef.3:10 y 1:22.

1.1.-Atributos de Dios: Están contenidos en la Escritura e indican aspectos de su carácter.


1.1.1.- Dios es omnipotente (Todopoderoso):
“Porque nada hay imposible para Dios”. Sólo Dios es todopoderoso y nadie puede hacer nada sin su
consentimiento. Satanás tuvo que tener su autorización para tocar a Job. Job Cap.1 y 2.
1.1.2.- Dios es omnipresente (Presente en todo lugar)
Esto quiere decir que puede estar presente en todas partes a la vez. Los ojos de Jehová están en todo lugar, mirando
a los malos y a los buenos. Pr.15:3. El salmista David exclamo: Sal.139:7 ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a
dónde me iré de tu presencia? Esto es sólo una característica de Dios, nadie más es omnipresente.
1.1.3.- Dios es omnisciente (Todo lo sabe y lo conoce)
El conocimiento de Dios es perfecto; no tiene que razonar o reflexionar, o descubrir cosas, o aprender
gradualmente, puesto que tiene conocimiento total del pasado, presente y futuro. Job 42:1- 3 / Job 21:22 / Sal.
147:5. Satanás, tanto como otros seres espirituales, puede desplazarse por cualquier lugar (Job.1:7) y a gran
velocidad (Lc.10:18), pero eso no significa de modo alguno que sea omnipresente, y por lo tanto, sólo puede estar
en un lugar a la vez. Tampoco lo sabe todo, pese a su astucia y corrompida sabiduría (Ez. 28:17) Evitemos
otorgarle más facultades que las que tiene, pero tampoco ignoremos sus maquinaciones. (2Co. 2:11). No debemos
prestarle nuestra boca para ser usada para hablar en contra de la Palabra de Dios, ni para nosotros ni para nuestros
semejantes. Somos llamados a bendecir. Dios es el creador de todo lo que existe, incluyendo a Satanás y sus
demonios.
1.2.- El Cielo: este es el lugar donde Dios habita. Los justos (quienes reciban el sacrificio de Jesús en la
cruz) están destinados a la vida eterna en la presencia de Dios Jn. 14:2-3 La esperanza del Cielo transforma nuestra
perspectiva sobre la muerte. Las Escrituras en ningún lugar nos enseñan que como creyentes estamos inmunes o
debemos negar la realidad de la pena que puede traer la muerte. Pero, en Cristo compartimos Su victoria sobre la
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muerte; nos entristecemos, pero no nos entristecemos como aquellos que no tienen esperanza (1Ts. 4:13), sino
más bien como aquellos que están seguros de un día reunirse con los seres queridos que han partido antes, de
recibir un cuerpo glorioso que nunca se debilitará o se descompondrá, de entrar en una nueva vida asombrosa más
allá de nuestros sueños más extraordinarios, y de estar por siempre con el Señor Ap. 21:3-4

2.- El reino de las tinieblas


Es el ejército de las tinieblas, comandado por Satanás Ef.6:12. Éste instaló su gobierno y organizó su ejército de
la misma manera como él lo había conocido cuando estaba con Dios: Príncipes, Potestades, Gobernadores,
Huestes. Principado, gobierna una región o territorio, tiene a su servicio una legión de demonios. Potestades las
que combaten en el aire en las regiones celestes. Gobernadores de las tinieblas y huestes de maldad. Este reino
opera en el mundo Jn. 12:31.
2.1.- El Infierno
De nuestra decisión depende nuestro futuro eterno: la vida eterna en el infierno o la vida eterna al regreso de Jesús
en el cielo. Es urgente, por consiguiente, que prediquemos el Evangelio mientras queda tiempo, para que nadie
muera, como dice Ef. 2:12:"sin Dios y sin esperanza en una vida venidera” En Ap. 21:8, el Señor Jesús deja
implícito que el Infierno es un lugar terrible de dolor, puesto que dice que ahí hay lloro y crujir de dientes
(Mt.13:42)
*El infierno es un lugar de extremo sufrimiento: Ap. 20:10
*Recuerdo y remordimiento (Lc.16:19-31)
*Es un lugar de tormento (Lc.16.23)
*Es un horno de fuego (Mt.13:42)
*Es un lago de fuego (Ap.20:10 y 15)
2.2.- Ángeles caídos, demonios
Todos los ángeles eran justos y santos cuando fueron originalmente creados. Ellos adoraban y servían al único
Dios verdadero. Después, algunos ángeles se rebelaron contra Dios junto con Satanás y perdieron su posición
como ángeles. Ellos se convirtieron en parte de una fuerza del mal llamada ángeles caídos. Dios los expulsó del
cielo junto con Satanás, lo dice Ap.12:7-9. Los demonios siguen las órdenes dadas por su príncipe: Satanás.
Podemos resumir las actividades de los demonios diciendo que ellas siempre están dirigidas en contra de Dios,
Su plan, y Su pueblo. Los demonios son usados por Satanás para atacar la Palabra de Dios, tu adoración a Dios,
tu caminar con Dios, y tu obra para Dios. No hay que temerles a ellos porque Dios nos dio la victoria, este conflicto
tiene un fin seguro: la destrucción absoluta del reino de las tinieblas y el establecimiento del Reino de los Cielos.
Tenemos armas poderosas para enfrentarlos y vencerlos, mientras el desenlace final llega:
*El Nombre de Jesús
*La Sangre de Cristo
*La Palabra de Dios
*Atar y desatar
*La armadura espiritual

Ap.12:11. “Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y
menospreciaron sus vidas hasta la muerte”.
…SOMETEOS A DIOS, RESISTID AL DIABLO Y HUIRÁ DE VOSOTROS…
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UNA PERSONA ESPIRITUAL

Texto: 1Co.13

Introducción: Hay muchas falsas concepciones en cuanto a qué es una persona espiritual. Muchas veces, tenemos
la tendencia a medir la espiritualidad de las personas por las apariencias, considerando así la espiritualidad de la
persona de acuerdo a las expresiones de la carne. Creemos que la persona que más se sacude, grita, habla más
lenguas o la que hace más alarde de lo que Dios hace es espiritual, y confundimos actividad con espiritualidad.
Dentro de la iglesia no es el lugar más apropiado para determinarlo; es más bien, observando su conducta en el
hogar y en el trato diario con el prójimo que pudiera hacerse.

Puntos de estudios:
1.-Camina en amor – 1Co. 13
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Una persona espiritual permite que el carácter de Cristo que está en su espíritu salga y se manifieste hacia fuera.
La persona no es espiritual porque manifieste muchos dones, sino de acuerdo a 1Co.13, es espiritual cuando
manifiesta el amor de Dios. El amor es el atributo mayor de Dios y Él espera que nosotros como imitadores suyos,
manifestemos la compasión, la misericordia y el amor y que estemos dispuestos a perdonar las faltas de los demás;
esto demuestra madurez espiritual.

2.- Tiene discernimiento – He.5:12-14


Los que han alcanzado madurez, como mencionamos antes, son los que han alcanzado espiritualidad. Estos son
los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal. Han llegado a tener
control de la carne tal, y alcanzando un control de andar en el espíritu, que tienen total dominio de sus cinco
sentidos; por tanto, no son controlados por lo que oyen, por lo que ven, o por lo que sienten. Es decir, que sus
sentidos están disciplinados y entrenados por la Palabra de Dios que vive dentro de ellos, de manera que en
cualquier situación responden y disciernen rápidamente lo que es bueno o malo sin pensarlo. Hay una reacción
inmediata en la persona cuando algo anda mal; esto es lo que llamamos acción y reacción, que tiene sus sentidos
ejercitados y puede discernir la Palabra de Dios. Asimismo, tampoco permite que el diablo le ponga un texto en
contra de otro texto para traer turbación o confusión.

3.-Restaura con espíritu de mansedumbre – Gá.5:25-26 / Gá.6:1


Hay personas que restauran, pero sin espíritu de mansedumbre. Lo hacen desde un punto de vista de superioridad,
poniéndose a sí mismos de ejemplo como espirituales. Otros se dedican a descubrir las faltas de los hermanos.
También están aquellos que tienen complejos de Espíritu Santo y le quieren decir al pastor como tratar con los
niños o con los carnales. Lo menos que tienen estas personas es una actitud de amor, compasión, mansedumbre;
sino más bien, tienen un espíritu legalista, farisaico y están disfrazados de espiritualidad, que no es más que seudo-
espiritualidad. En cambio, el que es espiritual restaura al que cae con espíritu de mansedumbre, porque dice la
Palabra: Gá.6:1 “Considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado”. Para esto se requiere la
paciencia como prueba de ser espiritual.

4.-Juzga todas las cosas – 1Co. 2:14-15


La palabra juzgar aquí significa, discernir. En este caso no significa que la persona espiritual discierne las personas
sino cosas, o sea puede ver en el mundo espiritual. Un ejemplo de esto es Cristo, cuando dice la escritura que él
no tenía necesidad de que nadie le dijera nada del hombre, porque él sabía lo que había en el corazón del hombre.

5.-No causa división – 1Co.3:3; Jud.1:19


Creemos que una persona carnal es la que aún está practicando el pecado en forma de adulterio, borracheras u
otros, pero no se reduce a esto solamente, porque vivir de acuerdo a las obras de la carne hace a la persona ser
carnal. La persona que es espiritual busca la unidad del cuerpo de Cristo; pero la que tiene celos, envidia, entre
otros, es carnal y se convierte en causa de disensión. En Jud.1:19 dice que las personas que causan división no
tienen al Espíritu, porque son controladas por los cinco sentidos, indicando esto que no son espirituales.

6.-Manifiesta humildad – Fil.2:3-8


Una persona espiritual no trata de exaltarse a sí misma, o de conseguir una posición. Tampoco trata de buscar
reconocimiento, o que le vean, pues sabe que su exaltación no viene del oriente ni del occidente, ni del norte o
del sur, sino que viene del Señor. La persona humilde está dispuesta a esperar en Dios. El resultado de la humildad
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en la persona espiritual es que humillándose, será exaltada. Una persona espiritual tiene la humildad para ser
corregida y la disposición para cambiar todo aquello que no esté de acuerdo al diseño de Dios. Pr.15:32: "El que
tiene en poco la disciplina menosprecia su alma; Mas el que escucha la corrección tiene entendimiento."

LA OBRA DEL ESPÍRITU SANTO

Texto: Jn.14:16-17

Introducción: El Espíritu Santo es el agente comisionado por Dios para ejercer la obra que Él quiere hacer en el
creyente, capacitándolo y transformándolo a Su imagen por medio de la revelación de la Palabra.

Puntos de estudios:
1.- Es el Consolador – Jn.14:16
Mientras Jesús estuvo entre sus discípulos, Él mismo fue su consolador, pero ahora, Él se iba y era necesario
enviar otro consolador, el cual es, el Espíritu Santo. Este es el cumplimiento de la palabra profética en Is.51:3. La
referencia que el Apóstol Pablo hace en 2Co.1:4 se efectuará en el creyente a través del Espíritu Santo. Dice que
Él nos consuela en todas nuestras tribulaciones. (¡Dios dice: “en todas”!)

2.- Nos enseña todas las cosas – Jn. 14:26


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Cuando el creyente no sabe qué hacer o cómo hacer tal o cual cosa, debe recibir al Espíritu Santo, pues Él nos
enseña todas las cosas. Esto se refiere a cualquier otro asunto, sea referente a los espirituales o a los que concierne
a nuestra vida cotidiana.

3.- Nos recuerda la Palabra del Señor – Mt.13:11


Para esto es necesario que el creyente tenga una disciplina diaria en la lectura de la Palabra. Al poner la Palabra
en su espíritu, en el momento necesario, esa Palabra es recordada por el Espíritu Santo para aplicarla a cualquier
situación.

4.- Nos guía en toda verdad – Jn. 16:13


La tarea del Espíritu Santo es guiarnos a toda verdad, no a una media verdad, sino a toda. Nosotros como creyentes
tenemos que estar dispuestos a recibir su guía; Él no empuja a nadie. Nos va a dirigir de acuerdo a la Palabra de
Dios, porque esta fue inspirada por el Espíritu Santo, y por lo tanto, nunca va a contradecir lo que está escrito.
Esto indica que todo lo que no está de acuerdo con la palabra de Dios (sean sueños, visiones o profecías) debe ser
rechazado, porque no es de Dios. El mismo apóstol Pedro nos dice: que aunque ellos oyeron la voz de Dios en el
monte santo, dando testimonio acerca de Jesucristo, él nos dice que la palabra profética es más segura que esto, a
la cual hay que estar atentos.

5.-Nos hará saber todas las cosas que habrán de venir –Jn. 16:13
El Espíritu Santo nos revela cosas en cuanto al futuro. Esto no es practicar adivinación sino lo que la palabra
señala como la palabra profética. Si tuviéramos una verdadera comunión con el Espíritu Santo, Él nos revelaría
muchas de las cosas que habrán de venir. En Hch. 11:27-28 y Dn.10:14 encontramos que un ángel es el que está
dando la visión profética, esto es lo que ahora haría el Espíritu Santo, pues ésta es su función, revelar las cosas
que han de venir.

6.-Es nuestro ayudador – Ro. 8:26


Cuando nosotros no sabemos cómo pedir en oración, el Espíritu Santo nos ayuda. En Stg.4:3 leemos: “Pedís, y
no recibís, porque pedís mal…”, el Espíritu Santo nos ayuda en nuestras debilidades. Él nos indica qué pedir y
cómo pedir; también nos ayuda a tomar decisiones, a ser pacientes, nos ayuda a amar, a tener gozo, paz, y mucho
más. Solamente es necesario dejarse ayudar por Él, no lo haga usted sólo, recurra a su ayudador.

7.- Ser dirigidos por el Espíritu Santo


Todo creyente debe tomar esta palabra en serio para aplicarla a su vida. La iglesia primitiva crecía fortalecida por
el Espíritu Santo. De igual modo el creyente, cuando es fortalecido por el Espíritu Santo para estar firme en contra
de todas las asechanzas del enemigo. Jesús dijo a sus discípulos que cuando viniera el Espíritu Santo recibirían
poder, entonces serían sus testigos. De igual forma nosotros somos investidos de ese poder y somos fortalecidos
para hacer la obra del Señor y poder vivir victoriosamente.
Un consejo importante para tomar decisiones guiadas por el Espíritu Santo, es que no importa cuán espiritual
seamos, la Biblia nos dice que no seamos sabios en nuestra propia opinión y que sepamos que el Espíritu de Dios
está en otros hermanos, los cuales oran y se preocupan por el bienestar de Dios para tu vida. He.13:17 dice que
Dios nos ha puesto líderes y pastores, los cuales velan por nuestras almas; y creemos que si Dios los ha puesto,
Dios también los ha dotado de cierta percepción espiritual para poder cuidar a aquellos que están bajo su cuidado.
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Podemos decir que el velar por nuestras almas, se refiere a discernir que no seamos dirigidos por nuestra mente,
sino por nuestro espíritu.

EL BAUTISMO DEL ESPÍRITU SANTO

Texto: Jn.14:16-17

Introducción: Toda persona que ha hecho una decisión para salvación por fe en el Señor Jesucristo, no debe
conformarse o quedarse con la experiencia de la salvación. Como creyentes, ya somos elegibles para ser
participantes de las promesas que Dios nos ha hecho en Su Palabra. A través del estudio de la Palabra podemos
observar seguido a la salvación está la promesa del bautismo en el Espíritu Santo, el cual podemos pedirlo y
recibirlo por fe. La Palabra nos enseña que es el bautismo en el Espíritu Santo lo que nos capacita para ejercer el
poder, dominio y autoridad que se nos ha delegado como hijos de Dios en contra de toda fuerza del enemigo.
Cuando el creyente es investido de ese poder, es sellado y fortalecido para manifestar una vida abundante y
victoriosa de Dios; y para ser un buen testigo de Jesucristo.

Puntos de estudios:
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1.-La Promesa: Dios lo prometió en su Palabra, en Mt.3:11


*La profecía de Joel – Joel. 2:28-29
*El anuncio de Juan el Bautista – Lc. 3:16
*La promesa de Jesús – Lc. 24:49
*¿Para quién es la promesa? – Hch. 2:39
*La seguridad de que Dios quiere darla – Lc. 11;10-13

2.-El Propósito – Hch.1:8


*Recibir el poder del reino de Dios (Dominio de Dios ) – Hch.4:33
*Anunciar el evangelio con señales y milagros – Hch.5:12
*Vivir una vida cristiana victoriosa, manifestando los dones de Espíritu Santo (la manifestación de los dones
empieza como consecuencia de edificarse por medio del lenguaje del espíritu). 1Co.14:4,12

3.-Cómo recibir el bautismo del Espíritu Santo


Es importante entender que no hay un patrón o método fijo para recibirlo, ya que toda persona lo recibe diferente,
sin embargo necesitas lo siguiente:
3.1.- Haber nacido de nuevo, porque el mundo no puede recibirlo - Jn.14:17
El primer paso que una persona tiene que dar para ser bautizado con el Espíritu Santo es recibir al Señor Jesucristo
como su salvador personal. Esta decisión es vital en la vida de la personas ya que mientras la persona no ha hecho
esta decisión está en tinieblas y no conoce no percibe las cosas de Dios o del espíritu. Una vez hecha la decisión
la persona se convierte en hijo de Dios y esto lo hace participante de su naturaleza divina (2 P.1:4). Cuando esto
ocurre en la persona, esta nueva posición le da el privilegio de hacerlo elegible para recibir la promesa; pues la
escritura dice que el que se une con el Señor un espíritu es con él. De modo que toda persona que ha nacido de
nuevo debe desear ser bautizado con el glorioso bautismo del Espíritu Santo porque es una promesa hecha a todos,
sin acepción de personas. (Hec.24:49)
3.2.-Creer que es la provisión de Dios para ti – Lc.24:49
El próximo paso para ser bautizado con el Espíritu Santo es creer que esto es la provisión que Dios ha hecho para
ti. La palabra creer significa: estar persuadido de una cosa, o sea, a sentir o dar por hecho las verdades reveladas
por Dios. Si Jesús en Hch.1:5 aseguró a aquellos que estaban con él antes de su ascensión que dentro de no muchos
días serían bautizados con el Espíritu Santo, tenemos que creer también nosotros que esa misma promesa sigue
en pie para cada uno que ha creído en él .
Es interesante notar que de todas las promesas que Jesús hizo, ésta fue la primera que recibieron aquellos que
creyeron en él cuando estaban en el aposento alto; lo que nos da a entender cuan significativo es que el creyente
reciba esta experiencia en su vida, ya que ésta le capacita con el poder de Dios para vivir una vida victoriosa,
Podemos deducir que esa vida victoriosa en el creyente está basada en creer las promesas de Dios y posesionarse
de ellas, ósea, hacerlas suyas porque son la provisión o la herencia que Dios nos ha dado.
3.3.- Hay que pedirlo – Lc.1:10-13
Tenemos que reconocer que una de las cosas más sublimes y más gloriosas que el creyente recibe de Dios es el
Espíritu Santo. Siendo él la tercera persona de la Trinidad, debe considerarse como un honor y un privilegio en
la vida del creyente que Dios ha determinado que este con su divino poder tenga morada en el corazón del hombre.
Ahora bien, el espíritu santo es muy dócil y reverente; no fuerza o hace entrada donde no se le invita, aunque sí
toca sutilmente al corazón para entrar. Por esto tenemos que pedirlo a Dios, desearlo y estar en una actitud
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receptiva y dispuesta para recibirlo. Si lo pedimos, Dios no nos lo va a negar, sino que proseguirá a dárnoslo
porque es un Padre bueno y debemos estar en una actitud receptiva y dispuesta para recibirlo.
3.4.-Recibirlo por Fe – Gá.3:4
La escritura es muy enfática en cuanto a que la vida del creyente es una vida de fe Ro.1:7. Aunque Dios nos ha
hecho la promesa de Espíritu Santo, no obstante cuando le invitamos tenemos que recibirlo por fe, ya sea que lo
recibimos a solas o que lo recibamos por medio de la imposición de manos de otro creyente lleno del Espíritu. En
el proceso para recibir el Espíritu Santo por fe, se aplica el mismo principio que se aplica para recibir la salvación.
Pues en la misma forma que se cree que Jesucristo entra en nuestro corazón cuando lo recibimos como salvador,
así mismo ocurre con el Espíritu Santo de Dios cuando lo invitamos. Una vez que hayamos pedido con fe
creyendo, tenemos que aceptarlo como hecho. Pues la palabra dice que 2Co.1:20: “porque todas las promesas de
Dios son en el Sí y en el Amén” y ésta no es una excepción.

4.-Hablar en otras lenguas como el Espíritu te dé que hables - Hch.2:4


Hay una declaración que Jesús hizo en cuanto a los efectos que tendría el creyente bautizado con el Espíritu Santo;
dijo: “... de su interior correrán ríos de agua viva”. Tenemos bastantes ejemplos en las Escrituras que demuestran
este hecho seguido con la tremenda manifestación de hablar en otras lenguas (Hch.2:33, 10:46, 19:6). La persona
que anhela ser bautizada tiene que permitir que de su interior corran ríos de agua viva. Hay personas que se les
hace difícil recibir esta gloriosa experiencia porque están esperando ser estimulados por alguna fuerza exterior
sin percatarse de que la experiencia y las evidencias tienen su origen dentro y de ahí se manifiestan hacia fuera,
con la señal de las nuevas lenguas.

LOS DONES DEL ESPÍRITU SANTO

Texto: 1Co.12

Introducción: la palabra “don” significa “gracia especial para hacer una cosa” (sinónimo: habilidad) y todos
hemos sido dotados de dones o talentos desde nuestro nacimiento. Estas habilidades serían los dones obtenidos
naturalmente. Ej. El don para la música, el teatro, el hacer negocios, entre otros. Estos no dependen de nuestra
relación personal con el Espíritu Santo. En cambio, al revisar la palabra don espiritual, en el griego "don" significa
"carisma": es gracia, una facultad milagrosa, o un favor espiritual. Es algo que el creyente no merece ni puede
obtener por fuerza propia. Son dones del Espíritu; por lo tanto, es una operación del Espíritu Santo a través del
creyente, una manifestación del Espíritu en el creyente, es diferente al fruto del Espíritu, que es el resultado del
trabajo del Espíritu Santo en nosotros. En el capítulo 12 de 1Co. Pablo nos habla acerca de la importancia de los
dones espirituales y explica que hay diversidad de dones pero que el Espíritu es el mismo, repartiendo a cada uno
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en particular como Él quiere, siendo la manifestación de estos dones para provecho y edificación de la Iglesia.
1Co.14.12 “Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para edificación
de la iglesia…” A continuación hablaremos de los 9 dones del Espíritu Santo, según 1Co. 2:1-5 / 1Co.12:4-11

Puntos de estudio:
1.- Palabra de sabiduría
Palabra de consejo, de dirección, motivación y exhortación de Dios no se gana con estudio o experiencia. Es la
aplicación adecuada de la Palabra de Dios. Ej.: tentación de Jesús en Mt.4:1-11 / Mt. 22:15-22. El apóstol Pablo
en Hch.23:6-10

2.- Palabra de ciencia


Revelación sobrenatural sobre verdades que no se conocen, Dios revela cosas, personas lugares, etc. El apóstol
Pedro Hch.5:3, supo que Ananías estaba mintiendo.

3.- El don de la fe
Habilidad dada por Dios para creer a Dios por lo imposible. No es la medida de fe, dada a todos y que es impartida
al ser salvos y crece a medida que vivimos conforme a la Palabra. Este don va más allá, trae a operación el
milagroso poder de Dios. Cuando el don de la fe está presente, la duda está ausente. No hay incredulidad.1R.17:1
Elías dice que no lloverá sino es por su palabra y en 1R.18:36- 38, cae fuego para encender el holocausto.
Hch.20:7-12.

4.- Dones de sanidades


Curación de enfermedades incurables por el conocimiento humano y restauración total de la salud.

5.- Hacer Milagros


Un milagro es un hecho visible que sobrepasa los poderes de la naturaleza y de todo ser creado. Es realizar hechos
no explicables por las leyes naturales. Los milagros son parte de la naturaleza de Dios. Moisés divide las aguas
en Ex.14:21. Jos.10:12-14 (se detiene el sol y la luna). Y Jesús:
*Cambia el agua en vino- en Caná (Jn. 2).
*Pesca milagrosa (Lc. 5). (Jn. 21)
*Calma la Tempestad (Mt. 8; Mc 4; Lc. 8).
*Multiplicación de panes (Mt. 14; Mc 6; Lc. 9; Jn. 6). (Mt. 15; Mc 8).
*Camina sobre las aguas (Mt. 14; Mc. 6; Jn. 6).
*Hija de Jairo (Mt. 9; Mc. 5; Lc. 5).
*Lázaro (Jn. 11).

6.- Profecía
Es la habilidad especial que Dios da a sus hijos para recibir y comunicar un mensaje de Dios a una persona, a un
grupo o a una congregación. Debe estar siempre de acuerdo a la Palabra y debe servir para: edificar, exhortar y
consolar 1Co.14:3 / Hch.2:18. En 1Co.14:32, los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas, por lo cual
debe hacerse en orden y no para avergonzar a nadie.

7.- Discernimiento de espíritu


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Es una percepción sobrenatural, habilidad especial, dada por el Espíritu Santo para distinguir el espíritu o espíritus
que se manifiestan a través de alguien o en una situación. Existen tres fuentes espirituales y operacionales en el
universo: (1) Dios, (2) los demonios, (3) el espíritu humano. En este caso, el don de discernimiento de espíritus
nos ayuda a averiguar de qué fuente proviene cualquier manifestación espiritual. Hch.16:16-18.

8.- Género de lenguas


Don sobrenatural de hablar en otro lenguaje sin haberlo aprendido, Hch.2:4. Pueden ser lenguas terrenales, como
cuando sin conocer el idioma de los visitantes, los discípulos testificaron a los extranjeros y lenguas angelicales.
Este don es diferente al hablar en lenguas, en el don de género de lenguas Dios da un mensaje, ya sea por
interpretación de lenguas o cuando entendían las personas en el libro de Hechos y oían hablar de las maravillas
de Dios, Hch2:11. El hablar en lenguas, habla el espíritu del hombre a Dios es manifestación del bautizo del
Espíritu Santo 1Co.2:2,4 / Jud.20. El hablar en lenguas no es interpretado y puedes hacerlo cuando quieras. Las
lenguas son por señal a los incrédulos 1Co.14:21-22.

9.- Interpretación de lenguas


Es la capacitación sobrenatural dada por el Espíritu Santo para interpretar lenguas desconocidas a la lengua
conocida de la congregación. No es traducción. El intérprete no entiende la lengua hablada.
La interpretación es tan sobrenatural como el hablar las lenguas. No obstante, por medio de este Don del Espíritu
somos capacitados para exponer a la congregación el significado de lo que se dijo en lengua desconocida. De esa
manera, la congregación puede ser edificada al recibir la interpretación en su propio idioma.
Los dones deben ser usados de acuerdo a las instrucciones de 1Co.14:26-27.

LA TENTACION

Texto: 1Co.10.13

Introducción: Para que el creyente pueda enfrentarse con autoridad a los dardos encendidos que envía Satanás
contra su vida espiritual, necesita una revelación del mundo espiritual para así poder tener victoria especialmente
en el área de la tentación. Creyentes mal informados se convierten en el blanco fácil del diablo para ser engañados
y así caer en tentación. Hay que crear una conciencia de que la tentación es real y tenemos que saber tratar con
ella. Es de suma importancia saber cuáles son las causas y raíces de la tentación en la vida del creyente. Hay
creyentes que están viviendo su vida espiritual y peleando como el que tira golpes al aire porque no entienden
cuál es el lugar de Dios y cuál es el lugar de Satanás en lo que refiere a la tentación. Una de las razones por las
cuales la tentación es real para el creyente es que para Cristo lo fue. Jesús, como hombre, fue tentado en todo,
según nuestra semejanza, pero sin pecado. Si Satanás se atrevió tentar a Jesús, sabiendo que era el Hijo de Dios,
¿no hará lo mismo con los creyentes? La tentación mayor de Jesús vino antes de entrar en su gran nueva dimensión
en la vida cristiana. Jesús salió victorioso en el poder del Espíritu Santo.
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Tú puedes hacer lo mismo, si resistes hasta el fin en el nombre de Jesús. Ser tentado no es pecado, el pecado está
en caer en la tentación.

Puntos de Estudio:
1.- La tentación es parte de la vida cristiana – Stg.1:14
En seguida que una persona nace de nuevo despierta a la realidad de que tiene un enemigo que quiere arrebatarle
lo que ha recibido de Dios. Mientras la persona no es salva, no tiene conocimiento de la lucha espiritual que
tenemos los creyentes. Todo creyente es tentado por razón de que a Satanás no le gusta lo que él tiene de Dios.
La tentación viene para quitarle al creyente todo lo que ha recibido de Dios, y en esta forma impedir que la
voluntad de Dios se haga en la tierra y su reino sea manifestado. Así que, ningún creyente está exento de la
tentación, sea niño, sea carnal o sea espiritual.

2.- Dios no tienta a nadie, Satanás es el tentador


El carácter de Dios es amor, por lo tanto él no es responsable de tus tentaciones y tribulaciones.
Dios nunca tienta al creyente porque Dios no puede ser tentado por Satanás. Stg.1:13 Bajo ninguna circunstancia
Dios se somete a las insinuaciones y demandas de Satanás para tentar al creyente.
Ahora, Dios siendo sabio aprovecha el proceso de la tentación para probarle al diablo la fidelidad del creyente y
para desarrollar carácter espiritual en él mismo. Uno de los títulos o nombres que la Biblia le aplica a Satanás: la
serpiente antigua es el tentador. Mt.4:1, el propósito de tentar al creyente es usarlo como un medio para que haga
su voluntad. Aunque Satanás es el tentador, el creyente tiene una gran responsabilidad en el proceso; ya que si
permite que en su vida haya áreas no sometidas a la Cruz de Cristo, caerá en la tentación que le presenta el diablo.
Santiago dice que cada creyente es tentado cuando de su propia concupiscencia (deseos fuertes hacia el pecado)
es atraído y seducido. Sucede un tipo de relación en la que Satanás fecunda la concupiscencia y ésta da a la luz el
pecado y el pecado cuando es consumado da a luz la muerte.

3.- Los deseos de la carne, los deseos de los ojos, la vanagloria de la vida 1Jn.2:16
Hay tres (3) áreas que Satanás usa en nosotros para seducirnos al pecado. Esto le ha sido efectivo, porque Satanás
lo usó con Adán y Eva, lo usó con el Hijo de Dios; y el apóstol Juan nos dice en su carta que lo usará con todos
los creyentes.
3.1.- Cuando hablamos de los deseos de la carne se entiende que es todo aquello que nuestra naturaleza
carnal quiere por encima de la voluntad de Dios. La carne está en completa enemistad contra Dios, de tal manera
que ni aun se sujeta a la ley de Dios Rm.8:7. Es por eso, que de acuerdo a Gá.5:17, la carne lucha contra el espíritu
y el espíritu contra la carne. En el creyente hay una constante lucha entre lo que su espíritu desea; las cosas altas
y sublimes de Dios y lo que su carne desea; las cosas bajas y pecaminosas del mundo. El diablo tentó a la mujer
usando el árbol que era bueno para comer, y tentó a Jesús sugiriéndole que convirtieran las piedras en pan. Aquí
podamos observar que el plan de Satanás es aun recurrir a los deseos legítimos para hacernos pecar contra la
voluntad de Dios.
3.2.- Los deseos de los ojos: los ojos son ventanas del alma y Satanás quiere usarlos para sus propósitos
porque él conoce mejor que nosotros el poder de la visión. Dios le ha dado al hombre la habilidad de visualizar y
éste escoge usarlo para bien o para mal. Eva comió del árbol que era agradable a los ojos y no pudo resistir la
tentación. Satanás usó el mismo recurso con Jesucristo cuando lo llevó al monte alto y le dio una visión de todos
los reinos de la tierra. Si tu cuidas las cosas que tú ves con tus ojos y las que piensas (las que ves con tu
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subconscientes); Satanás no podrá usar los deseos de los ojos para hacerte pecar. David dijo en un Salmo: “No
pondré cosa injusta delante de mis ojos”.
3.3.- La vanagloria de la vida. La definición de “vanagloria” es: soberbia, orgullo o deseo de
reconocimiento. Una persona entra en la vanagloria cuando quiere demostrar que es algo que en realidad no es.
La vida nos provee muchas oportunidades para caer en este engaño de Satanás. El diablo le hizo ver a Eva que el
árbol codiciable era para alcanzar sabiduría y que ella sería como Dios. Cuando Satanás tentó a Jesús para que se
sometiera a lo que él le ordenaba: le dijo Mt.4:6 “Si eres hijo de Dios, échate abajo…”.
Tenemos que cuidarnos aun, de que tratando de guardar nuestra reputación espiritual, accedamos a las tentaciones
del diablo. Recuerda que el orgullo viene antes da la caída. Mantente siempre en una actitud de adoración a Dios
y dándole gloria a Él por todas las cosas y Satanás no podrá tentarte a esta área.

4.- Victoria sobre la tentación


Dios ha provisto en su Palabra los medios para que el creyente tenga victoria sobre todas los ataques que Satanás
envía contra él. Hay tres (3) cosas que tú debes saber cuando estás siendo sometido a tentación:
a -Dios siempre da la salida en la tentación.
b.- Cristo es poderoso para librar a los que son tentados.
c.- Dios sabe librar de tentación a los piadosos.
4.1.- Mantente en oración – Mt.26:41.
Jesús dijo que si no nos mantenemos en oración caeremos en tentación .Oramos para pedirle a Dios ayuda para
recibir los recursos del poder de Dios para poder vencer la tentación. Recuerda que como él padeció siendo
tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados; siempre y cuando que éstos se acerquen a él en fe.
4.2.- Di la Palabra – Ap.12:11
Un creyente lleno de la Palabra estará preparando con la espada del espíritu para enfrentarse a Satanás cuando él
viene con insinuaciones negativas para hacerlo pecar. Cuando tú seas tentado no le vengas al diablo con
argumentos o razonamientos; Eva hizo eso y sucumbió a la tentación. Sigue el ejemplo de Jesús, que en los tres
(3) aspectos en los que fue tentado le contestó al diablo con la frase “escrito está”
4.3.- Recordar la infinita Gracia de Dios
Nos acercamos al trono de Gracia, confesamos nuestras debilidades, la sangre de Cristo nos limpia y seguimos
caminando hasta alcanzar la victoria, con la ayuda del Santo Espíritu de Dios. 1Jn.2:1 “Hijitos míos, estas cosas
os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el
justo”
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CAMINANDO EN SANTIDAD

Texto: 1P.1:14-19

Introducción: Aunque los creyentes hemos sido declarados justos y santos por medio de la sangre de Jesucristo;
tenemos una responsabilidad de caminar en santidad de forma que podamos agradar a Dios y ser usados para su
gloria aquí en la tierra. No podemos conformarnos meramente con nuestra posición ante Dios, sino que Dios
espera que actuemos lo que ya él depositó en nosotros cuando nos hizo nueva creación.

Puntos de estudio:
1.- Dios demanda santidad – Ex.19:6
Una de las características de Dios es que Él no cambia. Él es el mismo hoy que ayer. En el Antiguo Testamento
Dios exigía que su pueblo fuera santo para que pudiera recibir sus bendiciones. En Éx.19:5-6 Dios le dice a su
pueblo que son responsables de oír su voz y guardar su pacto y entonces ellos serían su especial tesoro. Aquí
encontramos una promesa de Dios para su pueblo donde él espera que ellos sean un reino de sacerdotes y gente
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santa. La razón por la cual Dios espera que su pueblo sea santo es que Dios es santo. La palabra “santificación”
significa “separación”, indicando esto que el pueblo de Dios ha sido separado para servirle a Dios.

2.- Practicando la santidad – 1P.1:14


La clave a la santidad es la obediencia a Dios; esta Escritura nos dice que si somos hijos obedientes a Dios lo
demostremos no conformándonos a los deseos que teníamos antes cuando estábamos en la ignorancia del pecado.
Esta obediencia viene como resultado del temor y el amor a Dios. Cuando tenemos a Dios, vamos a respetarlo y
no hacemos aquellas cosas que son opuestas al carácter santo de Dios. Una de las crisis del cristianismo moderno
es que se ha perdido el sentido de reverencia y de temor santo a Dios; y muchas veces se ha abusado de la gracia
de Dios y de la libertad que tenemos en Cristo. Pablo nos dice en 2Co.7:1: “… limpiémonos de toda contaminación
de carne y espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios”. La palabra no recomienda, sino exige que:
“como Dios es santo también nosotros seamos santos en todas nuestra manera de vivir”.
Hasta que el creyente no haga esta transición de renovar su mente con la palabra de Dios y rechazar toda su vieja
conducta a la luz de la Palabra, nunca podrá verdaderamente caminar en santidad con Dios. Pedro nos dice que
consideremos el precio que se pagó por nuestra santificación; este precio es la sangre de Cristo para que podamos
verdaderamente perfeccionar la santidad en el temor de Dios.
No hay excusa porque ya Dios nos hizo santos y somos responsables de demostrar y practicar lo que ya somos en
la nueva naturaleza.

3.- ¿Cómo puedo caminar en santidad?


Ninguna disciplina me hace santo, pero no puedo ser irresponsable en la fe. Una cosa sí hemos de tener clara y es
que para ser santo debemos primero desear serlo. Debemos profundizar en la Palabra, para ser transformados a la
imagen de Jesús, yendo de gloria en gloria. El Espíritu Santo nos ayuda a convertir nuestras áreas débiles en áreas
fuertes. Él es nuestra suficiencia en la obra de edificar el carácter espiritual, de formarlo de acuerdo con la
semejanza divina. Cometemos un grave error cuando pensamos que somos capaces de modelar nuestra propia
vida. Nunca podremos por nosotros mismos vencer la tentación. Necesitamos la ayuda del Espíritu Santo de Dios.
Rm.8:26. La santificación es un proceso, que poco a poco se realiza en nosotros, de vez en cuando puedes tropezar,
pero cuando tropieces, debes caer de rodillas, pedir perdón a Dios, debes apropiarte del perdón, levantarte y
continuar caminando como Jesús quiere que camines. La gracia de Dios nos ayuda a vivir en santidad, y además
nos brinda la oportunidad para levantarnos del pecado. Pr.24:16 / He.4:16 / 1Jn.1:9

4.- Resultado de caminar en santidad – He.12:14 / 2Co.6:14-18


Estamos viviendo los tiempos de la consumación de todas las cosas y Dios ha dicho que él va a presentarle a
Jesucristo una esposa sin manchas y sin arruga, ósea una iglesia gloriosa. Esto da a entender que para manifestar
la gloria de Dios tenemos que andar en santidad. Escrito esta en He.12:14: “que sin santidad nadie verá al Señor”,
en otras palabras, que los creyentes que se nieguen a andar en santidad no van a ver la manifestación de la Gloria
de Dios aquí en la tierra.
Aunque este verso se ha usado con otros propósitos para traer condenación, tenemos que verlo en su contexto
donde nos esté hablando de la gloria que hay en el monte de Sión donde Dios está y para poder manifestar esa
gloria tenemos que andar en santidad.
La razón principal que Dios quiere que caminemos en santidad es que él quiere caminar entre nosotros y
manifestar una gloria tan y tan grande que nunca en ninguna época de la historia el mundo ha visto. En 2Co., es
donde Pablo enseña sobre la gloria mayor del nuevo pacto; y es por eso que cuando llega al Cap.6 el nos da la
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clave para que esa gloria se manifieste entre nosotros. El nos dice que no podemos tener compañerismo con la
injusticia, porque nosotros somos el templo del Dios viviente. El propósito eterno de Dios para este templo es
llenarlo de su gloria de modo que las naciones sean atraídas hacia El. Dios nos promete que si nos santificamos
él habitará y andará entre nosotros, nosotros seremos su pueblo, él nos recibirá, él será para nosotros por Padre;
y nosotros entraremos a disfrutar a lo máximo nuestra posición de hijos e hijas como nunca antes. Es por eso que
él nos dice: “que puesto que tenemos tales promesas nos limpiemos de toda contaminación y caminemos en
santidad”. Amén.

LA AUTORIDAD ESPIRITUAL

Texto: Rom.13:1-2

Introducción: El asunto de autoridad es algo que Dios ha instituido y ha incluido en su plan eterno para el hombre
porque Él es un Dios de orden. Siendo El la autoridad suprema, ha establecido y exige que cada persona se someta
a las autoridades establecidas para provecho y beneficio de la misma raza humana. Dios ha delegado su autoridad
en los líderes de la iglesia y también en aquellos que están en autoridad en las instituciones públicas que vigilan
por el orden y el bien de la humanidad. La palabra establece que toda autoridad viene de parte de Dios y el que
se opone a esto a Dios mismo se opone. (Ro.13:1).

Puntos de estudios:
1.- ¿Qué se entiende por autoridad?
La autoridad es la potestad que tiene alguien para dirigir u ordenar. Una de sus características es que se puede
delegar a otra persona. Vemos en la Biblia que desde tiempos antiguos Dios delegó esta autoridad a diferentes
personas para que pudieran ejercer gobierno sobre pueblos y sobre la Iglesia. Ef. 4:11.
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2.- Dios y la autoridad


Dios tiene la autoridad suprema, por derecho propio, emanada de la perfección y esencia misma de su glorioso
ser. Más que tener autoridad. Dios es autoridad. Todo grado de autoridad que existe es sólo una delegación de
autoridad de parte de Dios (Ro. 13.1). El Padre dio al Hijo autoridad (Jn. 5:27 / Mt. 28:18) Jesucristo es el Creador
de todas las cosas, visibles e invisibles, y entre ellas algunas formas de autoridad tales como tronos, dominios,
principados y potestades, las cuales, además, subsisten en Él. (Col.1.15-17).

3.- Cadenas de autoridad


Dios mismo ha establecido diferentes secuencias o cadenas de autoridad y sujeción. El Reino de los Cielos se
basa en principios de autoridad espiritual.
3.1.- Cristo-Iglesia: Cristo amó a su iglesia y se entregó a sí mismo por ella. Los redimidos de Jesucristo
somos nacidos de nuevo e incorporados a la iglesia que es el cuerpo de Cristo, del cual El mismo es la Cabeza o
Autoridad. La iglesia se debe en sujeción a Aquél que murió y resucitó por ellos (2Co. 5:14)
3.2.- Iglesia: Dios estableció diferentes liderazgos dentro de Su Iglesia y nos insta a obedecerles y
honrarles He.13:17 / 1Te.5:12-13. En la iglesia la autoridad descansa en valores espirituales, en una vida y un
testimonio, no meramente en una condición de mando. Los que reconocen autoridad sobre ellos, pueden ejercer
autoridad sobre otros (Mt 8: 9). La autoridad delegada implica responsabilidad, es decir, la persona tiene un
trabajo que realizar, y debe comprometerse a hacerlo, a servir con mayor dedicación. Mt.20:26. La autoridad debe
ser bien ejercida y, en consecuencia, reconocida, respetada y obedecida
3.3.- Marido-mujer: Dios creó luego a la mujer, para que fuera coheredera con el hombre de la gracia de
la vida (1P.3:7), y estableció que la mujer estuviera sujeta a su marido. La familia quedó así bajo un doble
principio de autoridad: el hombre a Dios, bajo la orden de amar a su mujer como a sí mismo, y la mujer sujeta a
su marido y bajo la orden de respetarlo y amarlo.
En algunos casos, estos principios de amor y sujeción establecidos por la autoridad de Dios son no sólo
descuidados, sino contradichos y hasta despreciados y burlados. Las consecuencias son nefastas para la familia:
divorcios, odios, problemas síquicos, afectación de los hijos y del orden social en general (Ef. 5.21-33; Col. 3.18-
19).
3.4 Padres e hijos: Dios manda a los hijos que obedezcan a sus padres y los honren (Ef. 6.1-3). Pero a su
vez los padres reciben el mandamiento de Dios de no provocar a ira a sus hijos y de criarlos en el camino de Dios
(Ef. 6.4). Hay padres que abusan de su autoridad y hay hijos que se rebelan contra la autoridad, aun contra la
ejercida legítimamente por los padres (Col.3:20-21)
3.5.- Gobernantes-gobernados: El conjunto de familias constituye una sociedad o nación y se requiere
nuevamente la autoridad de algunos y la sujeción de otros. Rey y súbditos, gobierno y ciudadanos, nos dan una
idea cabal de este nuevo y necesario eslabón para la vida social. La autoridad gubernamental ha sido dada por
Dios para garantizar el orden y asegurar el bienestar y la protección general de los ciudadanos y de los desvalidos.
Dios nos manda a que oremos por las personas que están en ejercicio de la autoridad 1Ti.2:1-4. También Dios
nos ordena que nos sujetemos a las autoridades Ro.13:1 al 3 (y esto fue escrito cuando el nefasto Nerón era el
Emperador de Roma). No podemos resistir a los que gobiernan sin estar resistiendo, a la misma vez, a Dios que
es el que pone y saca a los gobernantes Dn.2:21

4.- Obediencia a las autoridades delegadas.


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El concepto de obediencia es inseparable del de autoridad. Dios trata con la rebelión en forma radical y absoluta
para exterminar de su pueblo un espíritu que pueda contagiar a toda una familia, iglesia o nación. Como Dios
considera el pecado de rebelión como si fuera hechicería, el castigo es el mismo: muerte o la expulsión de la
persona fuera del pueblo.

5. Rebelión contra la autoridad espiritual


Toda rebelión empieza como rebelión en contra de Dios .Cuando Coré, Datán y Abiram se rebelaron contra la
autoridad de Moisés, creyeron que sólo se estaban oponiendo a un jefe humano, a un hombre como ellos mismos;
y llegaron a creer que estaban haciendo realmente la voluntad de Dios. Pero al rechazar el instrumento escogido
por Dios, rechazaron a Cristo e insultaron al Espíritu de Dios
a.- Fueron irrespetuosos con Moisés y Aarón. Puede que hayan sido muy honestos en lo que decían, pero
les faltó ver la autoridad del Señor. (Num.16:3).
b.- Lo que Coré y su séquito dijeron estaba basada en la razón y la conjetura. (Num.16:5). Nadie puede
rechazar la autoridad delegada de Dios con una mano y recibir a Dios con la otra.
c.- Dios eliminó la rebelión de su pueblo – Num.16:21-22 .La rebelión es un principio infernal.
Como esta gente se rebeló, se abrió la puerta del Seol. La rebelión abre las puertas del infierno, no para
sacar sino para tragar. (Nm.16:32-33). La rebelión es abominación a Dios, le recuerda el primer caso de
rebelión, dirigido por Satanás, que se originó en el cielo.

Satanás es conocido como el padre de la Rebelión, como el príncipe de la potestad del aire, el espíritu que opera
en los hijos de desobediencia. Ef.2:2 Cuidemos nuestro corazón de albergar cualquier semilla de rebelión, “de
toda cosa guardada, guarda tu corazón, porque de él mana la vida”: y si hemos caído en esta situación, corramos
al Trono de la Gracia y arrepintámonos, la sangre de Cristo nos limpiará y no lo hagamos más!!

FIDELIDAD

Texto: 1Co.4:1-2 / 2Ti.2:2

Introducción: De acuerdo al plan Dios de establecer su reino sobre la tierra por medio de la iglesia; es
indispensable que esta cumpla los requisitos establecidos en la palabra, para que este propósito tenga su designado
cumplimiento. Entre algunas de las características que describen la iglesia de nuestro Señor Jesucristo, la iglesia
que llevará estos propósitos a su realización será una iglesia que está comprometida y totalmente entregada al
servicio de Dios, formada por personas fieles e integras. En su definición la palabra “fidelidad” tiene una
explicación bastante extensa y describe en su totalidad el carácter del creyente. Significa: una persona que cumple
sus compromisos, es constante, dedicado, es perseverante, es responsable, confiable, leal, veraz, invariable,
puntual, sincera, etc. A continuación tres áreas importantes en las cuales el creyente que desea agradar a Dios y
ser eficaz debe demostrar fidelidad.

Puntos de estudios:
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1.- Fidelidad al Cuerpo de Cristo/Iglesia – Col.1:2 / Mt.25:23


Uno de los aspectos más importantes en el Reino es la fidelidad. Dios está buscando gente fiel que se entregue a
su servicio para Él entregarle su Reino. Uno de los ejemplos de fidelidad más vivos que tenemos hacia Dios y su
obra es el Apóstol Pablo 1Ti.1:12. Como miembros del cuerpo de Cristo, también Dios espera de nosotros que
seamos íntegros en toda nuestra manera de vivir. La fidelidad es una de las cualidades principales para ser
promovidos en el reino de Dios, pues es la fidelidad es una de las cualidades principales para ser promovidos en
el reino de Dios, pues es la fidelidad la que mantiene la unción sobre el creyente. La persona que es fiel a la iglesia
nunca piensa en que puede recibir de la iglesia como individuo, sino piensa en que puede aportar a ella. Tiene
una constante actitud de dar a la iglesia y reconoce que es siervo de Dios y de la iglesia; no piensa que
Dios o la iglesia es su sierva. Hace más de lo que se le pide, no espera que lo manden y está dispuesto a hacer aun
aquellas cosas que no le gustan, pues por encima de todo está su fidelidad al cuerpo. Tengamos presente que no
es lo que decimos lo que nos hace fiel sino lo que hacemos.
Nuestra fidelidad se deja ver cuando practicamos el principio de ser fieles en cosas pequeñas e insignificantes.

2.- Fidelidad al Ministerio – Ex.33:11


Aparte de nuestra fidelidad a la iglesia como cuerpo de Cristo, debemos reconocer que el Ministerio que Dios ha
escogido como cabeza visible, también merece nuestra fidelidad y nuestra ayuda. Un ejemplo clara de lo que
verdaderamente es fidelidad al ministerio lo vemos en el ministerio de Moisés; cuando él se cansó en la batalla,
Aarón y Hur sostenían sus manos; cuando nuestra fidelidad hacia el ministerio es probada y esto se reflejará en
nuestra conducta. Josué mismo pasó por un proceso de fidelidad absoluta al siervo de Dios y no protestó que
quizás se estuvieran aprovechando de él como algunos creyentes creen. El tenía una percepción clara de su
posición y tenía una actitud de aprender del líder. En la misma forma que Josué hizo con Moisés, cualquier
persona que desea crecer espiritualmente y tener un ministerio efectivo, lo logrará siguiendo de cerca a sus
pastores, no para criarlos, sino para aprender de ellos e imitarles. La recompensa que Josué recibió por su fidelidad
Jos.1:1 vino después de practicar el principio: “en lo poco fuiste fiel….”

3.- Fidelidad a los hermanos – 1Co.10:24 / Fil.2:3-4


Al hablar de fidelidad no solamente debemos pensar de fidelidad en relación con la iglesia como cuerpo de Cristo
y el ministerio que dirige, sino también a la actitud que tenemos en relación con los demás personas
individualmente. La fidelidad siempre envuelve dos personas o más, o sea, ser fiel envuelve mi contacto con otras
personas; y esto quizás con personas que “no me gustan”. Una característica importante en una persona fiel en
relación con las demás personas es que no piensa en su propio beneficio sino en el del otro. Valora lo que los
demás hacen, o sea, en función individual; y no lo critica. No cree que lo que él/ella hace es lomas importante. El
individualismo y la infidelidad son los peores enemigos del cuerpo de Cristo/Iglesia; ambas son causas de
división, y afectan al cuerpo de Cristo. Por lo tanto, debemos orar para que el Señor nos haga personas fieles,
pues es tan importante como ser santos.
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PATERNIDAD ESPIRITUAL

Texto: Mal.4:5-6 / Lc. 1:17

Introducción: Parte del plan de Dios para la humanidad es la restauración de todas las cosas, dentro de las cuales
está el devolver la paternidad a su lugar original y apropiado, tanto en la iglesia como en las naciones y la familia
(Hch. 3:21), a fin de perfeccionar a los santos para realizar Su obra. El volver el corazón de los padres hacia los
hijos y los hijos hacia los padres es una señal de los últimos tiempos.
Al hablar de paternidad espiritual es necesario recordar que por sobre todas las cosas, los que hemos recibido a
Cristo como Señor de nuestra vida, somos hijos de Dios. Esta relación está por encima de cualquier otra relación
de paternidad, incluyendo la relación de paternidad natural. Dios es Padre de todos, como resultado de esta
relación de hijos de Dios, todos somos hermanos, pues somos hijos del mismo Padre Celestial. Sin embargo,
aunque esta es una verdad eterna, también es cierto que en virtud del desarrollo espiritual y del llamado de Dios
para algunos de sus hijos, en la Iglesia hay algunos que han sido constituidos para ser padres espirituales.
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Puntos de estudios:
1.- La paternidad espiritual es diseño de Dios
La base del Reino de Dios es la paternidad. Dios nos revela que Él es un Padre que no nos abandona, que está con
nosotros todos los días en nuestra vida. Él nos ama, es nuestro Padre y nosotros somos sus hijos.
La paternidad también es el fundamento sobre el cual Dios edificó la estructura de la sociedad, la iglesia, la
política, el gobierno de las naciones. Dios creó tres instituciones humanas: la familia, la iglesia y la nación. El
principio de funcionamiento de cada una de ellas es el principio de la autoridad paternal:
1.- En la familia Dios constituyó como cabeza de ella al padre de familia.
2.- En la nación Dios formó cada nación a partir de un padre, como en el caso de Israel:
Abraham padre de Isaac, Isaac padre de Jacob, Jacob padre de cada uno de los patriarcas de las 12 tribus de Israel.
Al formar a las naciones a partir de un padre, era porque Dios quería que la nación funcionara bajo el principio
del carácter y autoridad paternal. De hecho, a los fundadores de las naciones, y a sus máximas autoridades el
mundo les llama los padres de la patria. En griego, la palabra patria, patriarca y padre vienen de la misma raíz
griega: “pater”.
3.- La iglesia, de acuerdo a la Escritura, es una iglesia de hijos (Jn. 1:12 / Ro. 8:14-17). Jesús llamó a sus
discípulos hijos (Jn. 13:33 y 21:5)
Pablo así entendió su ministerio (1 Co. 4:15, 1 Ts. 2:5-12), y Juan también, llamando a todos aquellos que estaban
bajo su autoridad como “hijitos” (1 Jn.). La esencia de la autoridad de la iglesia, la autoridad apostólica, es una
autoridad paternal, que Jesús delegó en sus discípulos.

2.- La paternidad espiritual en la Biblia


La palabra y la historia de la iglesia están llenas de hombres que fueron padres espirituales:
*El mejor ejemplo Jesús (Juan 3:17, 4:34, 6:38, 12:50) Siempre hizo lo que su Padre le mandó a hacer;
cumplió Su ministerio bajo la dirección y el ejemplo del Padre.
*Abraham: (Ro.4:12) El primer padre espiritual en la Biblia fue Abraham el “padre de la fe”.
Fue un hombre llamado por Dios con la responsabilidad de levantar una generación. Debemos notar que el nombre
original de Abram antes de su pacto con Dios significaba “padre exaltado” y después Dios le cambio su nombre
a Abraham, que significa “padre de multitudes” En ambas formas el hecho es muy significativo porque fue
escogido por el Señor para ser un padre.
*Moisés y Josué - En Ex 33:7-11) Josué empezó como el siervo de Moisés, aprendiendo de Moisés,
quedándose en la presencia del Señor, y siendo preparado para el liderazgo. Al fin de la vida de su vida, en Deut.
34: 9, Moisés impuso las manos sobre este mismo Josué, y lo ungió para ser el próximo líder sobre Israel.
*Eliseo y Elías: (2 R.2:12) Esto es probablemente el mejor ejemplo de la paternidad espiritual del Antiguo
Testamento. Dios mandó al profeta Elías para ungir a Eliseo como profeta. Cuando Elías encontró a Eliseo, él
tiró su manto sobre él, y este se quedo con Elías, y le sirvió fielmente. Eliseo tuvo que estar dispuesto a despojarse
de sí mismo y a recoger el manto para operar en el espíritu de su padre. Practicó y reflejó características que
recibió de su padre Elías, que lo llevaron al éxito en su ministerio.
*Los "hijos de los profetas” (2R 6) Eran los profetas jóvenes que estaban en adiestramiento, recibiendo
discipulado de los profetas los cuales ministraban en aquella época. No solamente aprendieron por la enseñanza
del profeta, sino también por el ejemplo de su vida y su ministerio.
*David: Debemos recordar que cuando la Biblia habla de los padres, no necesariamente está hablando de
los padres biológicos. Por ejemplo, a David se le nombra como el padre de muchos de los reyes que le siguieron
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en el trono. Sin embargo, algunos de aquellos vivieron más de diez generaciones después del Rey David. Se
refiere también a David como el padre de Cristo, ¡aunque vivió 28 generaciones antes de Cristo!
*Pablo y Timoteo: (1 Co.4:17 / 1 Ti.1:2), Pablo tuvo muchos hijos espirituales, pero el más conocido de
ellos probablemente fue Timoteo. Empezó ambas de sus cartas a este hijo, saludándole como un hijo verdadero
en la fe. En 1 Ti. Pablo había pasado tiempo con Timoteo, al instruirle, aconsejarle y ministrar con él. Entonces,
cuando fue el tiempo justo, envió a Timoteo para ministrar solo, mientras continuaba su relación con él de padre
e hijo.

3.- Características de un padre espiritual:


*Transmite vida. Los padres espirituales, al igual que los padres naturales, transmiten vida a sus hijos, la
vida de Dios. Lo hacen al cubrirlos espiritualmente, al interceder por ellos, al imponerles manos, al entrenarlos
en el ministerio, etc. La vida espiritual se transmite al engendrar los hijos, al dar a luz ministros, siervos de Dios.
1 Co 4:15.
*Un padre te enseña en la verdad, te aconseja, te guía, te alimenta espiritualmente, forma el carácter de
sus hijos a la imagen de Cristo, por medio de la predicación y enseñanza de la Palabra de Dios. La formación de
hijos es algo que demanda tiempo, paciencia y determinación. La formación de los hijos espirituales conlleva el
sufrir dolores de parto. Gal 4:19.
*Un padre es ese que se invierte a sí mismo, el que invierte dones, talentos recursos, tiempo, energía,
dinero en otros para llevarlos a su propósito, a su destino, ese es un padre espiritual, que desarrolla el potencial
que hay en sus hijos, los lleva a conocer su llamado y la razón de su existencia. Gn. 28:1.
*Es un líder, es el que va adelante, el que muestra el camino, no el que controla sino que da confianza y
motiva a seguir adelante. Dios pone un hombre para dirigir, es decir, un líder a quien le entrega la visión, un padre
es un mentor, es un guía, es un ejemplo. Nm. 27: 16-17.
Aquel que no tenga estas características no es digno de llamarse padre, así lo dijo Jesús en Mt. 23:2-9, refiriéndose
a los fariseos, dando a entender como los fariseos daban cargas difíciles de llevar al pueblo, cargas que ellos no
cumplían y mandaban a hacer cosas que ellos mismo no hacían; a éstos no se les puede llamar padres, porque un
padre enseña con ejemplos.

4.- Beneficios de la paternidad espiritual


*Derecho a herencia: La relación de padre a hijo da derecho a heredar, la misma Palabra que Dios ha
depositado y revelado en el padre espiritual es la que será transferida al hijo (Is. 59:21) como herencia de su padre
espiritual. Ro.8:17 / Gá. 4:7 / Col.1:12.
*Los hijos reciben la misma autoridad y unción del padre espiritual para continuar la obra de Dios a través
de ellos y estos lograrán que no se extingan los avivamientos, como lo hizo Eliseo con Elías, abriendo las aguas
del mismo modo. Dios tomó del espíritu de Moisés y lo colocó en los 70 ancianos de Israel. Nm.11:16-17
*Disciplina: El padre que ama a sus hijos los disciplina (pero no deja de amarlos). Es una forma de
corrección diferente marcada por el amor paternal. El amor del Padre nos da seguridad y confianza, pero también
formará nuestro carácter espiritual, que nos ayudará a enfrentar nuestros errores y defectos y a fortalecer nuestras
virtudes y celebrar nuestros aciertos. He. 12:5-8.
*Bendición y protección: El padre espiritual tiene la palabra de bendición para habilitar al hijo para que
le vaya bien en la vida en todos los aspectos, tal como Dios bendijo a Adán en el Edén. Gn. 9:21-29
*
Nos da identidad: Nuestro nombre nos da identidad y sentido de pertenencia a una familia. En otras
palabras sabemos de dónde venimos, donde estamos y a donde vamos según nuestro propósito. Ef. 3:15.
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La Biblia indica que del Padre recibe nombre toda familia en el cielo y en la tierra

LA SANIDAD DIVINA

Texto: Sal.103:1-3 / Is.53:4-5

Introducción: A pesar de los argumentos y creencias equivocadas que tienen algunos grupos religiosos en cuanto
a la sanidad divina hoy, nosotros por la Palabra de Dios sabemos y entendemos que la sanidad es la voluntad de
Dios par el creyente Por consiguiente no debemos abrigar pensamientos de que para morirte hay que estar enfermo
o que Dios nos envía enfermedades para así glorificarse. Debemos tener presente que Dios ha escogido aquí un
pueblo para morada suya en el cual manifestar su gloria y que en la misma forma que él ha hecho provisión para
limpiar sus pecados también ha hecho provisión para mantenerte sano. La razón principal para estar sanos es para
que podamos servir mejor a Dios, lo cual aquellos que están incapacitados por enfermedades no pueden hacer.

Puntos de estudios:
1.- “Yo soy tu Sanador” - Ex.15:26
Uno de los nombres redentores con los cuales Dios se reveló al pueblo de Israel cuando sacó al pueblo de Egipto
es “Jehová tu sanador” (RAPHA). Es de suma importancia que descubramos en la Palabra y que lo pongamos en
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nuestro espíritu el hecho de que no solamente Dios nos salva sino que también nos sana. La Palabra “tú” es muy
personal. Indicando que él es sanador personal tuyo.
La enfermedad recompensa de los impíos o sea es el premio de la injusticia y Dios no envía enfermedad a sus
hijos. Por esta razón ningún creyente debe aceptar ningún tipo de enfermedad.

2.- Envió sus Palabras y los sanó - Sal. 107:2 / Pr. 4:20.21
Dios es la Palabra y la Palabra es Dios. Esta tiene sanidad por si sola porque la palabra contiene el Espíritu y la
vida de Dios. Lo único que necesita una persona para ser sano es vida. Como la enfermedad es un principio de
muerte, el mejor tiempo para sanar es cuando uno está sano, memorizando y confesando todas las promesas de
sanidad. Donde se predica la Palabra la gente se sana, pues la Palabra corta la enfermedad, trae vida y anula el
principio de muerte.

3.- La sanidad es parte del sacrificio expiatorio de Cristo - Is.53:4-5


Muchas veces la tradición y la enseñanza negativa han impedido que recibamos la Palabra de Dios tal como es.
Pero a pesar de lo que algunos teólogos dicen, la sanidad es parte del sacrificio expiatorio de Cristo en la cruz.
No es algo aparte de la salvación. La Palabra “salvación” en el original griego significa “protección completa”.
Si yo como creyente puedo declarar que soy salvo.

POR QUÉ NOS REUNIMOS

Texto: He.10:23-25

Introducción: Una de las cosas que la Biblia establece muy claro es la necesidad de que toda persona que recibe
a Cristo como Salvador, se integre inmediatamente a ser parte de una iglesia que esté funcionando de acuerdo a
la Palabra y la unción del Espíritu. Una de las formas más efectivas de traer la manifestación del poder de Dios
en una congregación, es cuando el mayor número de personas se unen alrededor de un propósito o meta con un
mismo corazón y una misma mente. Sólo el Espíritu Santo puede hacer esto al renovar nuestra mente con la
palabra de Dios y librarnos del individualismo egoísta que nos impide fluir unidos, como el cuerpo de Cristo que
somos. A continuación daremos razones muy importantes para crear conciencia de porque nos reunimos como
iglesia.

Puntos de estudio:
1.- Porque somos el cuerpo de Cristo – 1Co.12:12,26-27
En la misma forma que Cristo operó en la tierra por tres años por medio de un cuerpo físico; hoy operando por
medio de su cuerpo espiritual, que es la iglesia. Ese cuerpo está compuesto de muchos miembros los cuales somos
nosotros. Como miembros de ese cuerpo, tenemos que unirnos y reunirnos para que podamos armonizar unos con
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los otros y así tener una manifestación completa del cuerpo de Cristo. Si tú eres un miembro de ese cuerpo, eres
responsable de funcionar dentro de él y cooperar para su edificación y crecimiento.

2.- Para estimularnos unos a otros – He.10:24-25


Esta es la escritura básica que nos amonesta a no dejar de congregarnos como algunos tienen por costumbre. La
razón que se nos da es que cuando nos congregamos, nos estimulamos unos a otros.
Esto implica que ningún hombre es una isla y necesita el apoyo y estímulo de otras personas. Cuando nos reunimos
suplimos esta necesidad al ayudarnos unos a otros y orar por las necesidades de otros.
Nos necesitamos unos a otros. Tú necesitas a tu hermano y a tu hermana en la iglesia.

3.- Para crecer juntos por medio del estudio de la Palabra


Es cierto que tú puedes leer la Biblia por ti solo, pero la fe viene por el oír la palabra de Dios (Rhema: palabra
viva). Cuando venimos a la reunión de la iglesia y escuchamos la Palabra predicada bajo la unción del Espíritu
Santo, vamos a crecer juntos unos con otros. Esta Palabra nos capacitará para hacer la voluntad de Dios en nuestras
vidas y así contribuir al crecimiento, tanto nuestro como el del cuerpo de Cristo.

4.- Para recibir bendiciones de Dios – Sal.133


La unión y reunión de los hermanos hace que el aceite de la unción descienda sobre la iglesia y también hace que
la lluvia del Espíritu caiga sobre el monte de Sión. Cuando esto sucede, allí envía Jehová bendición y vida eterna.

5.- Para unirnos en alabanza – Ro.15:5-6


Tenemos que tener presente que el propósito primordial de Dios al crearnos fue para que le alabáramos. Como
tal, debemos entender que el objetivo principal por el cual un pueblo se congrega debe ser con el fin de alabar y
magnificar su nombre. La alabanza unida es una de las expresiones más altas que un pueblo puede ofrecer a su
creador junto con la acción de gracias. Además, en el plan de Dios la alabanza tiene una diversidad de funciones
para efectuar en la congregación a favor de los santos. La alabanza es la responsable de traer la presencia de Dios
al pueblo. Pues Dios se mueve soberanamente por medio de su Espíritu Santo en medio de un pueblo que ha
descubierto el principio de estar unido en alabanza (2Cro.5:13). Otro aspecto de la alabanza es que tiene la
potencialidad de confundir a los enemigos. El pueblo que descubre estas cosas se esforzará para abundar en
alabanza y vivirá en una victoria continua.

6.- Para que cada uno practique el don que ha recibido – 1P.4:10 / Ef.4:16
Cada persona en la iglesia es diferente y a cada uno Dios ha dado una gracia especial para que la use como su
aportación para edificación de la iglesia. Hay creyentes que nunca se preocupan por descubrir ese don (influencia
divina de parte de Dios) que les ha sido dada para beneficio del cuerpo de Cristo y otros lo descuidan no
atribuyendo ninguna importancia. Esta negligencia en los creyentes priva la iglesia de abundar en los dones para
su enriquecimiento espiritual. Como buenos administradores de la gracia de Dios, cada uno que ha recibido
gratuitamente un don le ha sido entregado para suplir una necesidad en ese cuerpo de creyentes y no debe
reprimirlo, en 2Ti.1:6 o descuidarlo según 1Ti.4:14, sino ponerlo en operación para que en alguna forma haga
participe a los demás de la multiforme gracia de Dios a fin de que todos juntos sean edificados y reciban
crecimiento espiritual.
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LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO

Texto: Ap.22:12

Introducción: La Biblia concluye en su última página con un grito de júbilo en el espíritu del apóstol Juan
diciendo: “El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve Amen; si, ven, Jesús”. No existe
otra doctrina más preciosa y consoladora para el cristiano, que esta hermosa e irrefutable verdad: Cristo viene
otra vez.

Puntos de estudios:
1.- LA SEGUNDA VENIDA: Esta segunda venida constara de dos etapas:
1.1.- Primero: viene por sus santos 1Ts.4:17, seremos arrebatados en las nubes para recibir al Señor en el
aire y así estaremos siempre con el Señor.
1.2.- Segundo: todo ojo le verá Ap.19 esta describiendo la venida del Señor hasta la tierra, dice desde el
versículo 11-16 “Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y
Verdadero, y con justicia juzga y pelea. Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO
DE DIOS. Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo blanco y limpio, le seguían en caballos blancos
.De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro. Y en su
vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES”.
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2.- ARREBATAMIENTO O RAPTO: 1Ts.4:16-17 / Ap.3:3 / Mt.25:10 / Ap.22:16 / Mt. 25:10


Sucederá en secreto, en “un abrir y cerrar de ojos”, 1Co.15.52, sólo para aquellos que oigan la trompeta de Dios
antes de la Gran Tribulación, viene en secreto. El Señor viene a buscar a la iglesia, la arrebata en el aire y se la
lleva a las moradas celestiales. En Ap.3:3 hablándole a la iglesia dice “vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás
a qué hora vendré sobre ti”. Estos pasajes se relacionan con el arrebatamiento de la iglesia, donde únicamente los
que se van con Él lo verán. Esta misma verdad es confirmada en la parábola de las 10 vírgenes en Mt.25. En
1Ts.4:16-17, nos dice primero resucitarán los muertos en Cristo y tanto ellos como los creyentes que estemos
vivos, recibiremos cuerpos de gloria e iremos a recibir al Señor en el aire, y de ahí el Señor nos llevará a la nueva
Jerusalén, la Celestial. Entonces toda la iglesia comparecerá ante el Tribunal de Cristo como dice
Ro.14:10 “Porque todos compareceremos ante el Tribunal de Cristo”.
En ese tribunal no se juzgarán nuestros pecados, primeramente porque si hubiera quedado un solo pecado
pendiente, no podríamos haber llegado hasta ahí; no olvidemos que esto se está realizando en el cielo. Y en
segundo lugar, y esto es lo más consolador y reconfortante, es que Cristo ya pagó por todos nuestros pecados. El
Tribunal de Cristo será para revisar nuestras obras, todas aquellas que hayan sido realizadas en la carne, por
vanagloria, por competencia, o por cualquier otro motivo que no haya sido la dirección del Espíritu Santo y en
las que no se ha dado toda la Gloria al Señor, todo aquello será quemado; en cambio, las obras que resistan la
prueba del fuego de Dios recibirán recompensa. Allí no estará en juego nuestra salvación, porque hemos leído en
1Ts.4:17, que cuando arrebate a los suyos en el aire,” estaremos para siempre con él”. Pablo también les escribió
a los corintios sobre este magno evento, 2Co.5:10. Luego del juicio, iremos a disfrutar de las Bodas del
Cordero. Ap.19:7 “Gocémonos y alegrémonos y démosle Gloria, porque han llegado las bodas del cordero, y su
esposa se ha preparado. Y a ella se le ha concedido que se3 vista de lino fino y resplandeciente; porque el lino
fino es las acciones justas de los santos”

3.- Segunda Venida:


3.1.- Traslado de la Iglesia a los cielos
Inmediatamente que la iglesia es trasladada a los cielos, a sus moradas celestiales, la tierra entera será envuelta
por un caos mundial debido al desaparecimiento repentino de todos los creyentes que fueron arrebatados. En Ap.
caps. 2 y 3, tenemos toda la historia de la Iglesia aquí en la tierra y comienza el cap. 4 en el verso 1 diciendo:
“Después de esto” ¿Después de qué? Después de la etapa de la iglesia aquí en la tierra, comienzan los
acontecimientos que se relatan en los capítulos siguientes. A partir de aquí, no se vuelve a mencionar la iglesia
en la tierra, porque ella ha sido arrebatada al cielo por el Señor. En los capítulos siguientes encontramos sucesos
que ocurren en el cielo, y otros que tiene como escenario la tierra. Pero hemos de entender que son,
acontecimientos que están ocurriendo simultáneamente, en forma paralela. La Iglesia es llevada a los cielos,
tenemos ese encuentro glorioso con el Señor, todos los creyentes compareceremos ante el Tribunal de Cristo,
luego recibimos las coronas, para finalmente celebrar las bodas del Cordero. Paralelamente a estos
acontecimientos celestiales, aquí en la tierra, todos los que se quedaron, todos los que no se acogieron al plan de
misericordia y salvación que Cristo Jesús ofreció a través de su propio sacrificio en la cruz del Calvario, quedarán
para recibir los justos juicios de Dios, que se mencionan en Ap. cap. 6 al 18.
3.2.- Regreso de Jesús
Después de la gran tribulación regresa Jesús en las nubes, esta vez no aparece en el cielo oculto en las nubes, sino,
que viene con gran gloria y poder. Y ahora sí todo ojo le verá Ap.1:7, porque su venida además se anuncia con
grandes señales en el cielo y se muestra como el relámpago de oriente hasta occidente. Esta vez se presenta como
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el Sol de Justicia, y llega hasta la tierra poniendo sus pies en el monte de los Olivos. En Ap.19 leemos que el
mundo no estará gozoso ni aplaudiendo su regreso, muy por el contario se opondrán y resistirán a su gobierno,
todo lo cual dará origen a una gran batalla que se desarrollará principalmente en el Valle de Meguido, que en
hebreo se llama Armagedón. Como dice Dios en Ap.16:16 “Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama
Armagedón”.
3.3.- Armagedón
Después de la guerra de Armagedón, tendrá lugar el juicio de las naciones Mt.25:31 El Señor, antes de iniciar su
reinado milenial, pone orden mundial. También la bestia y el falso profeta serán lanzados al lago de fuego,
Ap.19:20. En la tierra serán eliminados los gobiernos humanos y Dios establecerá el gobierno directo del Señor
Jesucristo. El milenio de paz y prosperidad concluirá con una gran rebelión mundial, capitaneados por el mismo
Satanás. Y será consumida por el fuego de Dios Ap.20:2-9. Satanás será arrojado para siempre en el lago de fuego
Ap.20:10.

“Diferencia entre rapto y arrebatamiento”


Arrebatamiento o Rapto Segunda Venida
1Ts 4:6-17 Viene por sus santos-1Ts 3:13 Viene con sus santos
1Ts 4:17 Viene en las nubes- Ap 1:7 Viene con las nubes
Ap 3:3 Viene como ladrón- Mat 24:27 Viene con Gloria
Mat 25:10 Los inconversos no lo ven- Ap 1:7 Todo ojo lo verá
Mat 25:10 Viene a buscar a los redimidos- Ap 21:4 Viene a poner fin al pecado
Ap 22:16 Viene como Estrella de la mañana al 4:2 Viene como Sol de Justicia
1Ts 4:6-17 No llega hasta la Tierra.

3.4.- Resurrección
Luego sucede la segunda resurrección en Ap.20.5 dice “Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se
cumplieron mil años” Todos ellos comparecerán ante el gran trono blanco, pero no para saber si serán condenados,
sino para demostrarles porqué fueron condenados. Todos aquellos que rechazaron la obra del Señor Jesucristo y
prefirieron confiar en sus propias obras, a todos ellos Dios les va a mostrar cuales fueron sus obras, y el resultado
inevitable de ello será la condenación eterna, en el lago de fuego y azufre, que corresponde a una 2da muerte,
porque había resucitado para comparecer ante el gran trono blanco, y ahora son arrojados por toda una eternidad,
en el mismo lugar en que se encontrará su líder, Satanás Ap.20:11-15. Esto es el infierno eternamente.

Conclusión: hay señales que anuncian el próximo retorno del Señor, todas ellas extraídas de la Palabra de Dios,
(guerras, terremotos, pestes y enfermedades nuevas), para que estemos alertas y despertemos, porque estas se
levantan como grandes voces anunciando,

¡Aquí viene el esposo! MARANATHA 1Co.16:22


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LA ARMADURA DE DIOS

Texto: Ef.6:10-18

Introducción: Como ciudadanos del reino de Dios que somos, tenemos que estar conscientes que estamos
envueltos en una guerra espiritual con el reino enemigo de las tinieblas. Mientras más rápido nos demos cuenta
de que la victoria de la vida cristiana depende de mantener una constante ofensiva de usar la armadura que Dios
ha provisto para este combate.

Puntos de estudio:
1.- La correa de la verdad
Después de Pablo decirnos que nos fortalezcamos en el señor y decirnos contra quién es nuestra lucha; entonces
nos dice que tomemos toda la armadura de Dios, para que podamos resistir en el día malo. No es coincidencia
que se hace mención de la verdad para proteger nuestros lomos de las mentiras del diablo. Aquí tenemos una
revelación de la palabra de Dios como la verdad absoluta, para vencer las mentiras de Satanás. El es el padre de
la mentira y trata de usarla para doblar nuestra resistencia espiritual. En la misma forma que el soldado protege
su cintura y su columna para no ser doblegado; nosotros también tenemos que tomar la Biblia como la verdad de
Dios para combatir las mentiras de Satanás. Sólo así tendremos una saludable resistencia espiritual.

2.- La coraza de justicia


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Observamos aquí que con la coraza protegemos nuestro corazón; o sea, nuestro espíritu que es la nueva creación.
Una de las estrategias de Satanás es traernos condenación y hacer que dudemos de nuestra posición ante Dios.
Tenemos que saber que somos la justicia de Dios en Cristo y que ya para nosotros no hay más condenación.
Cuando creemos esto y lo confesamos ante Satanás, estamos protegiendo de nuestro corazón de toda condenación
que el trate de infiltrarnos.

3.- El apresto del Evangelio de la Paz


Nosotros somos embajadores del señor Jesucristo y tenemos una misión de compartir el evangelio aquí en medio
del reino de las tinieblas. Por lo tanto. Satanás se nos opone y nos dice que no estamos preparados para hacerlo.
Una parte de la armadura es una preparación espiritual que ya tiene el creyente por ser Hijo de Dios. El creyente
está calzado con el evangelio que es el poder de Dios y con ese calzado puede poner el diablo bajo sus pies y a la
misma vez llevar la paz de la reconciliación de Dios a un mundo perdido. Yo creo que en la misma forma que un
soldado abre puertas a “patadas” para entrar; también nosotros podemos abrir las puertas del Hades con el
evangelio del Reino y establecer la paz de Dios.

4.- El escudo de la Fe
Esto es muy importante porque la palabra dice que lo tenemos sobre todo, ya que las demás partes de la armadura
funcionan base de ésta; ósea, a base de la fe. Tenemos que darnos cuenta que en el conflicto con Satanás y sus
demonios, no podemos hacerlo por sentimientos sino por fe en la integridad de Dios y su palabra. Fe es creer a
Dios y llamar la victoria que no es como si fuese; y en esta forma, podemos apagar todos los dardos de fuego del
maligno. Tenemos que creer la palabra, que no hay dardo encendido que el diablo envíe contra nosotros que
nosotros no podamos repeler en el nombre de Jesús y con la autoridad de la palabra.

5.- El yelmo de la salvación - Ap.12:11.


Esta pieza de la armadura es un casco protector, el cual usamos en la cabeza para proteger nuestra mente de los
ataques espirituales de Satanás. El nos ataca con ideas que son como dardos encendidos en las cuales él quiere
turbar nuestro pensamiento y hacer que pensemos en forma derrotista y negativa cuando estamos envueltos en
conflictos espirituales. La salvación es la protección de la sangre de Cristo, la cual al ponerla en nuestra mente es
una advertencia a Satanás de que somos propiedad privada de Jesucristo (fuimos redimidos por sangre) y por lo
tanto él no puede pasar a hacer daño. ¡Aleluya! Estos le han vencido con la sangre el cordero.

6.-La espada de la Palabra - Apo.12:11


Ahora el Espíritu Santo nos dice que tomemos la Palabra de Dios y la usemos como una espada para una ofensiva
contra Satanás. Entiéndase que aquí se está hablando de tomar la Palabra en nuestra boca y confesarla
audiblemente en contra del problema o situación espiritual que nos está acosando. La Palabra es la espada del
Espíritu, porque el Espíritu Santo usa nuestra boca para decir la Palabra y vencer a Satanás. Jesús lo hizo así
cuando en el monte de la tentación rechazó al diablo tres veces con la Palabra: “Escrito está”. Estos le han vencido
con la Palabra del testimonio.

7.- Orando en el Espíritu


Podrá observar que el propósito principal de ponernos la armadura de Dios es para entrar en oración y en
intercesión a favor de los santos. Intercesión es un conflicto espiritual y no es para niños; es para hombre maduros
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que se han puesto la armadura de Dios. Cuando empezamos a interceder y atar las obras del diablo, es cuando él
nos ataca con las asechanzas más crueles y sucias.
Como ahora tenemos la armadura de Dios puesta, podemos entrar al mundo espiritual e interceder a favor de
todos los santos. Esto lo hacemos más efectivo con la ayuda del Espíritu Santo, cuando usamos el lenguaje del
espíritu y oramos por los santos de acuerdo a la voluntad de Dios. No hay forma que podamos fallar cuando
usamos este tipo de oración.

EL AYUNO

Texto: Is.58:1-24

Introducción: ¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de
opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo? El ayuno es una herramienta bíblica que
está a la disposición de todo creyente.

Puntos de estudio:
1.- Es una ordenanza y práctica bíblica
El ayunar no es una opción en la vida cristiana como tampoco lo es la oración. Jesucristo fue muy claro y enfático
en este aspecto En dos ocasiones Él confirmó la importancia del ayuno en la vida del creyente. En el Sermón del
Monte él dijo Mt.6:16 “Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas”, dando a entender que debe ser
una actividad normal para el creyente. Cuando los discípulos de Juan le preguntaron ¿por qué sus discípulos no
ayunaban? Jesús le contestó que mientras él estuviera con ellos no tenían que ayunar. Después de Jesús decir esto
añadió: “Pero vendrán días cuando el esposo les será quitado y entonces ayunarán”. Jesús mismo nos dio el
ejemplo de lo esencial que es el ayuno. Inmediatamente después de ser bautizado en agua y ser llenos del Espíritu
Santo, pasó 41 días ayunando sólo en el monte. Fue durante este período de tiempo que Él desarrolló carácter
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espiritual al enfrentarse al diablo cara a cara. El resultado de este ayuno lo notamos bien claro en las palabras que
usa Lucas para describir como Jesús descendió del Monte de la Tentación, Lc.4:14 “y Jesús volvió en el poder
del Espíritu a Galilea, y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor”. En una forma u otra el poder está
asociado al ayuno y la oración, por entrar en comunión íntima con Dios, se rompen yugos de incredulidad, por lo
tanto se aumenta la fe y se pueden echar fuera demonios.

2.- Propósitos del ayuno


2.1.- Nos hace sensitivos a Dios
Aunque la fe no viene por el ayuno, cuando ayunamos nuestro espíritu se sensibiliza para oír la voz de Dios y
responder a la misma con mansedumbre. Por eso es más fácil operar en fe después del ayuno. El hombre se coloca
en un lugar espiritual donde Dios puede tratar con él.
2.2.- Comunión especial con Dios
La autoridad espiritual de un creyente dependerá de la comunión que tenga con Dios La comunión íntima de
Jehová es con los que le temen. Y a ellos hará conocer su pacto. Al separarnos de la comida podemos
concentrarnos o poner la mira en las cosas de arriba donde está Cristo sentado a la diestra de Dios, Al acercarnos
a Dios Él se acercará a nosotros.
2.3.- Revelación de La Palabra de Dios
Durante el tiempo de ayuno no tenemos la mente cargada con las cosas del mundo. Por esta razón al Espíritu
Santo se le hace mucho más fácil abrirnos las Escrituras en una nueva forma.
2.4.- Para fortalecer al hombre interior
Cuando el cuerpo descansa al no comer, el espíritu se fortalece en ese tiempo. De manera que tome control y
preeminencia sobre los apetitos carnales del hombre.
2.5.- Para entrar en el mundo espiritual - Mt.4:11
Sólo con un espíritu fuerte podemos romper la barrera y entrar al mundo espiritual por medio de la intercesión.
Es así como logramos descubrir cuáles son las fuerzas que se oponen y resisten a nuestro avance espiritual, y
podemos pelear contra ellos. Cuando ayunamos nos hacemos bien conscientes de dos fuerzas espirituales muy
poderosas. Los demonios y los ángeles. Cuando ayunamos abrimos una ventana espiritual. Si te metes en ayuno
con motivación equivocada tendrás malas consecuencias. El ayuno te abre las puertas espirituales para bien o para
mal.
2.6.- Para recibir una nueva investidura de poder
El período de ayuno es un período de limpieza y auto negación cuando ponemos la carne en el lugar que se
merece. Esto explica por qué aun Jesús cuando regresó de ayunar 40 días, la Biblia dice que volvió en el poder
del Espíritu, Lc.4:14. Cada vez que sientas como que has perdido efectividad espiritual, y sientas como un vacío
de poder, entrégate al ayuno, y saldrás también de ese tiempo de búsqueda en el poder del Espíritu Santo.
2.7.- Para recibir dirección espiritual para situaciones importantes - Neh.1:4
Es más fácil oír la voz de Dios cuando no estamos oyendo la voz de la gente, la voz de la televisión y la voz de
la opinión pública. Este fue el éxito de Nehemías, que no fue a ver al rey hasta tanto no haber pasado un tiempo
de comunión y reflexión en ayuno y oración.
2.8.- Rompiendo yugos de esclavitud
Hay yugos de opresión en la humanidad que la mantiene esclava a Satanás y a sus demonios el primer beneficiado
del ayuno en este respecto es la persona que lo hace. Nadie sabe lo atada que está hasta que se dedica ayunar
aunque sea un día. Son muchos los yugos que pueden ser destruidos cuando nos damos a la búsqueda del rostro
de Dios.
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3.- Tipos de ayuno: Podemos hablar de tres tipos de ayuno:


3.1.- Desde las 6 de la mañana de un día hasta las 6 de la mañana del otro día
3.2.- De 6 de la mañana a las 6 de la tarde
3.3.- Ayuno parcial, el de Daniel. Es aquel de puras frutas y vegetales. No se puede comer nada de carnes.
3.4.- El ayuno puede ser congregacional Joel 2 (de asamblea) o personal. El ayuno congregacional es
convocado por el Pastor, por dirección de Dios y él dicta los motivos y la forma de hacerlo.

4.- Consejos prácticos sobre el ayuno


4.1.- El ayuno personal debes hacerlo solo, el ayuno es para empujarte a un nuevo nivel espiritual.
Jesús se fue lleno y regresó en el poder del Espíritu Santo; es para obtener liberación personal. No te busques dos
o tres. Pues es para sacar cosas de ti. (Jesús estuvo ayunando solo en el monte).
4.2.- El ayuno debe ser acompañado de la Palabra.
4.3.- No debes estar diciéndole a la gente que estás ayunando; hazlo en secreto, no se debe ayunar para
aparentar. Mt.6:16.
4.4.- No debes ayunar para ganar un pleito, para que tu hermano sea avergonzado, para que la gente te
vea, para que Dios te de algo (una casa o un carro), para eso son las semillas. El ayuno no es para manipular a
Dios. No tendrás éxito.
4.5.- Los esposos deben estar de acuerdo para realizar ayunos largos. 1Co.7:5

PACTO DE MATRIMONIO

Texto: Mar. 10:9

Introducción: Creemos en la santidad del matrimonio instituido por Dios para preservación de la vida humana.

Puntos de estudio:
1. EL MATRIMONIO ES UN PACTO
Dios es un Dios de pactos. Él ha hecho pactos con hombres como Noé (Gen. 9:11) Abraham (Gen 17:2,4 y 7),
con naciones (como Israel), con entidades (como La Iglesia) y con la humanidad. Hizo pacto con la humanidad a
través de un mediador, Jesucristo (Heb. 12:24), el mediador del Nuevo Pacto. El matrimonio es considerado por
Dios como un pacto (Prov. 2:17), no es solamente de dos personas, sino que Dios mismo es parte de Él (Mal
2:14). Por ser un pacto, es para siempre. Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre (Mar. 10:9). El
matrimonio no es un contrato matrimonial que pueda revocarse, alterarse, invalidarse o anularse.

2. EL MATRIMONIO FUE DISEÑADO POR DIOS


Fue ideado por Dios: “No es bueno que el hombre este solo, le haré ayuda idónea” (Gen. 2:18). Dios constituyó
el matrimonio en el huerto del Edén como el primer pacto entre hombres (Gen. 2:24) “Por tanto dejará el hombre
a su padre y madre y se unirá a su mujer y serán una sola carne” (Mat. 19:6) “Lo que Dios juntó” es una descripción
de los dos siendo uno solo, cuando una pareja elige casarse, quedan unidos en el plan de unidad divina llamado
Matrimonio.
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2.1 ¿Qué es el Matrimonio Cristiano?


Es importante señalar que no existe matrimonio cristiano si solo uno es cristiano. Dios ordena a los cristianos no
juntarse con incrédulos en ningún tipo de “yugo” (2 Corintios 6:14) un matrimonio entre creyente e incrédulo es
un yugo desigual e inservible. En el antiguo testamento Dios dio enseñanzas que simbolizan esta realidad: no
enyugar buey con burro, no mezclar lana con lino (Deuteronomio 22:10,11) No tienes que preguntar a Dios sobre
su voluntad en cuanto a celebrar matrimonio con un incrédulo, pues está claro en su palabra que no es su voluntad.
Hay quienes afirman que “Dios los dirigió a casarse con un incrédulo para poder ganarlo después”. Lo que sí es
cierto es que en ese caso esta amando mas al incrédulo (a) que a Dios en desobediencia al primero de los
mandamientos: “Amarás a Jehová tu Dios sobre todas las cosas”: e igualmente va a tener problemas con su
“suegro espiritual” ¡el diablo! (Juan 8:44 y 1era Juan 3:8)
Un matrimonio cristiano se compone de dos discípulos de Cristo (varón y hembra) que están obedeciendo sus
mandamientos y permaneciendo en sus palabras (Juan 8:12,31,32) los discípulos de Antioquia fueron los primeros
en ganarse el apodo “Cristianos” ¡sus oídos se parecían tanto a la doctrina que predicaban acerca de Cristo que la
gente los llamaba “pequeños cristos”!
2.2 ¿Qué debe hacer un cristiano si está casado(a) con un incrédulo?
Estar casado con un incrédulo puede ser uno de los retos más difíciles en la vida cristiana. Si un cónyuge se vuelve
cristiano después del matrimonio, las inherentes luchas que vienen como consecuencia de vivir bajo diferentes
autoridades, se vuelven muy evidentes.
Con frecuencia los cristianos que enfrenta esta situación buscan alguna forma de salir del matrimonio,
convencidos que esta es la única manera de honrar verdaderamente a Dios. Son embargo su palabra dice lo
contrario:
Deben permanecer juntos: La Biblia instruye que aquellos que estén casados con incrédulos en 1 Corintios 7:12
al 14 “Si algún hermano tiene mujer que no sea creyente y ella consiente en vivir con él, no la abandone.
Porque el marido incrédulo es santificado en la mujer y la mujer incrédula en el marido; pues de otra manera
vuestros hijos serían inmundos mientras que ahora son santos”
Orar y dar testimonio: Estar casado con un incrédulo no altera la santidad de la relación, así que debe ser la
prioridad de cada cristiano, orar por su esposo o esposa y ser un buen ejemplo, para que la luz de Cristo
resplandezca como luminaria ante el mundo (Filipenses 2:15)
Una esposa cristiana debe tener un corazón dócil, aun hacia su esposo incrédulo (1era Pedro 3:1) permanecer
junto a Dios y confiar en que su gracia a través de la oración y su testimonio actuarán para que su marido sea
ganado a Cristo.
2.3 ¿Por qué debo hacer un pacto matrimonial?
Solo aquellos que están en pacto con Dios tienen acceso a los beneficios del pacto matrimonial diseñado por Dios
(Jer. 32:38-41). Y me serán por pueblo, y yo seré a ellos por Dios. Y les daré un corazón y un camino para que
me teman perpetuamente, para que tengan bien ellos y sus hijos después de ellos. Y haré con ellos pacto eterno,
que no me volveré atrás de hacerles bien, y pondré mi temor en el corazón de ellos, para que no se aparten de mí.
Y me alegrare con ellos haciéndoles bien, y los plantaré en esta tierra en verdad, de todo mi corazón y toda mi
alma.
Dios no reconoce los beneficios para los que no están en su palabra (Efes. 2:12-13). El matrimonio es considerado
por Dios como un pacto, no es solamente de dos personas, si no que Dios mismo es parte de él, como un cordón
de tres dobleces (Eclesiastés 4:12) si alguno prevalece contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no
se rompe pronto.
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Dios constituye el primer matrimonio en el huerto del Edén como el primer pacto entre los hombres (Gen 2:24)
“por tanto, dejará el hombre a su padre y madre y se unirá a su mujer y serán una sola carne” (Mateo 19:6) “Lo
que Dios junto” es una descripción de dos siendo uno solo, cuando una pareja elije casarse, quedan unidos en el
plan de unidad divina llamado Matrimonio. Desde el principio Dios tenía la intención de formar parte del
matrimonio.
El pacto de bendición de Dios con el hombre estaba ligado al matrimonio original del hombre y la mujer (Gen
1:27-28) “Y los bendijo Dios y les dijo: fructificad, multiplicaos; llenad la tierra, sojuzgadla (someterla) y
señoreadla”
Dios no solo quiere estar como testigo en tu matrimonio sino que Él quiere ser parte de tu vida matrimonial
bendiciéndote. Sin Dios el matrimonio es un pacto puramente humano.
Dios bendijo el pacto matrimonial de Adán y Eva y considero que ambos necesitaban su bendición para establecer
una familia, siendo los tiempos de Adán y Eva mucho menos peligrosos y difíciles que los de ahora ¿Cuánto más
necesaria es la bendición de Dios sobre el pacto matrimonial en estos tiempos cargados de problemas económicos,
políticos, sociales, etc.? ¡Necesitamos la bendición de Dios en nuestros matrimonios!
Dios no reconoce los beneficios de su bendición para los que no están en pacto con Cristo (Efesios 2:12-13) “En
aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin
esperanza y sin Dios en el mundo. Pero ahora en Cristo Jesús vosotros que en otros tiempos estabais lejos, habéis
sido hecho cercanos por la sangre de Cristo”

3. EN CUANTO AL DIVORCIO
Nos suscribimos a la enseñanza de Jesús que la única razón legal para el divorcio en el creyente es la fornicación
de uno de los cónyuges. (Heb 13:4/ Efe. 5:25-33 / 1 Cor 7:1-5). Creemos que si alguien se divorció sin tener
conocimiento de la Palabra de Dios, puede rehacer su vida, pues Dios es un Dios de restauración y de perdón y
comenzar una nueva vida bajo los principios bíblicos. El divorcio te aleja de las bendiciones y beneficios del
pacto. Malaquías 2:14.
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MINISTERIOS DE LA IGLESIA

Texto: Ef.4:11

Introducción: Hay una diferencia fundamental entre los cinco dones ministeriales de Ef.4:11 y los dones del
Espíritu Santo de 1Co.12. El no saber establecer la diferencia, ha causado un sinnúmero de errores en la iglesia.
Hay personas que creen, que porque tienen un don del Espíritu, pueden operar en un oficio ministerial. Los dones
del Espíritu están a la disposición de todos los creyentes que están llenos del Espíritu Santo, (1Co.12:7-11). Los
dones ministeriales son llamados especiales que Dios les hace a creyentes para gobernar, alimentar y edificar la
iglesia. Ninguna persona debe cometer el error de entrar en un ministerio porque tiene un don del Espíritu. Los
dones del Espíritu son las herramientas que ayudan al que tiene el ministerio, pero no le da ministerio a quien no
lo tiene. El hecho de que una persona profetice, no lo constituye en profeta; sólo está operando en el don de
profecía. Una persona puede tener dones de sanidades en operación y eso no lo hace un evangelista.

Puntos de estudios:
1.- Ministerio de Apóstol - 1Co.12:28 / Ef.2:20-22
Este ministerio fue el primero reconocido por Jesús, ya que los doce discípulos que él escogió los llamó apóstoles,
Lc.6:12-13. El ministerio de apóstol es uno de fundamento, establecimiento y asesoramiento espiritual. Los
apóstoles pueden fundar iglesias, preparar y establecer sus pastores y velar por el buen funcionamiento de las
iglesias que han fundado o que están supervisando. Podemos resumir que al apóstol Dios le da autoridad,
revelación y una palabra, que es la doctrina de los apóstoles, para la perfección de la iglesia. El Apóstol no se
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unge, es llamado y se reconoce por sus frutos. Se mueve en los cinco (5) ministerios; los demás ministerios son
enviados por un apóstol, por alguien que esté en autoridad sobre ellos. Es un Ministerio de hombres. Jesús no
llamó a ninguna mujer. Las mujeres pueden tener cualquier otro ministerio bajo la autoridad de un apóstol.

2.- Ministerio de Profeta – Hch. 15:32 y 21:10


En la Iglesia del Nuevo Pacto el profeta tiene una función muy importante en unión al apóstol.
Ambos son mencionados en Ef.2:21, como los que establecen el fundamento de la iglesia. El profeta le da
dirección a la iglesia y su función es de predicción, amonestación, consolación, confirmación, llamamiento y
corrección y discierne los tiempos que Dios ha puesto en su sola potestad. Siempre trae confrontación acerca del
pecado de la iglesia. Tienen estilo de vidas ministeriales. El profeta debe estar bajo la autoridad de un pastor.

3.- El Ministerio del Evangelista - Hch. 21:8 y 8:5.6


La función principal del evangelista es anunciar el evangelio de las buenas nuevas a los perdidos.
Su ministerio tiene que ir acompañado de señales, maravillas y milagros. Un verdadero evangelista se apasiona
por las almas y produce una explosión del Reino de Dios donde quiera que llegue.

4.- El Ministerio del Pastor - Hch.20:28 / 1P.5:1-3


Jesús se llamó a sí mismo el Buen Pastor que da la vida por las ovejas. Es uno de los más delicados y esenciales,
porque son los pastores los que cuidan, alimentan y dirigen el rebaño. Si Dios lo llamó a ser un pastor, no lo uses
como un trampolín para entrar a otro ministerio, a menos que el Príncipe de los pastores lo decida así.

5.- El Ministerio del Maestro Hch.13:2 / 2T.1:11


El maestro es un oficio ministerial con la habilidad sobrenatural de enseñar la Palabra de Dios por medio del
Espíritu Santo. Este ministerio debe estar bajo la autoridad de un pastor.
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BAUTISMO EN AGUA

Texto: Mt.28:19

Introducción: "Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por
tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo" (Mt 28:18-19). Lea también Hch.2:38. Jesús les ordenó a todos los que creían en Él, que se bautizaran en
agua.

Puntos de Estudios:
1.- ¿Qué es el bautismo?
El bautismo es un acto de obediencia y representa la identificación de la persona con la muerte, sepultura y
resurrección de Cristo. Cuando Cristo nos redime, morimos al pecado y resucitamos a una nueva vida con Él.

2.- ¿Qué simboliza el bautismo en agua?


El acto de sumergirse bajo las aguas y volver a salir a la superficie, es un cuadro que demuestra lo que ha sucedido
en la vida del creyente cristiano. Se muestra en lo natural al mundo lo que ha sucedido en el plano espiritual: un
nuevo nacimiento, una nueva vida. El bautismo simboliza lo que Dios ha hecho por nosotros en la redención.
Cuando Cristo nos redime morimos al pecado y resucitamos a una nueva vida con él. Es un medio por el cual los
convertidos declaran públicamente su entrega a Cristo. Como Cristo murió, yo muero al mundo.
2.1.- Cuando entro al agua, es una simbología de que he decidido morir a mis deseos para vivir con Cristo
- Ro.6:6-7 "sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del
pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado. Porque el que ha muerto, ha sido justificado del
pecado".
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2.2.- Como Cristo fue sepultado, yo soy sepultado juntamente con Él Soy sumergido para simbolizar que
el viejo hombre es sepultado con su vana manera de vivir Es ser sepultados con Cristo a través del bautismo.
Cuando entramos a las aguas, estamos acompañando por la fe la muerte del Señor. En Ro.6:3-4: "¿O no sabéis
que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? Porque somos
sepultados juntamente con él para muerte por él…”.
2.3.- Como Cristo resucitó, yo tengo una vida nueva en Él Al salir del agua resucito para Cristo, 2Co. 5:17
"De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
nuevas". En el bautismo en agua declaramos públicamente que ya no somos parte de la raza de Adán ni del reino
de las tinieblas, sino que somos una creación nueva en Cristo y pertenecemos al Reino de Dios. Ro 6:4-5: "…a
fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida
nueva. Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la
de su resurrección”.

3.- ¿Qué necesitas para bautizarte?


a.- Haber confesado que Jesús murió y resucitó de entre los muertos.
b.- Creer en el Señor Jesucristo, Ro.10:8-10 "... esta es la palabra de fe que predicamos: que si confesares
con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque
con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación." Aquí se establece un orden:
Confesar que Jesús es el Señor, creer que Él venció la muerte porque Dios le levantó de los muertos, y bautizarse.
En la iglesia primitiva se aplicó estrictamente esta palabra: Cada vez que una persona creía y confesaba a Jesús
como salvador, era inmediatamente bautizada. La Palabra no nos dice que para bautizarse haya que hacer primero
un curso de formación o ninguna otra preparación previa sólo nos dice que deben creer de todo corazón.
Mr.16:15-16 "Les dijo: Vayan por todo el mundo y anuncien las buenas nuevas a toda criatura. El que crea y sea
bautizado será salvo, pero el que no crea será condenado".

4.- Bautismo en el nombre del PADRE, del HIJO, y del ESPIRITU SANTO.
Después del bautizo, los creyentes necesitan recibir una enseñanza más detallada y extensa, para convertirse en
verdaderos discípulos, cristianos victoriosos, responsables y maduros que produzcan fruto, alineando su vida a
todo mandamiento de la Palabra de Dios. En la gran comisión Jesús dice en Mt.28:19: "Bautizándolos en el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo". Puesto que éstas son las Palabras del Señor, no podemos estar
equivocados cuando bautizamos en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.

5.- Presentación de Niños.


Es una ceremonia que simboliza que los padres creyentes hacen un compromiso delante de Dios de criar a sus
hijos conforme a la Palabra de Dios y sus caminos. Esto no es bautismo; es una dedicación, una presentación del
niño a Dios, una acción de gracias y de fe, una súplica de bendición divina. Tenemos algunos ejemplos:
*1S.1:27-28 "Por este niño oraba, y Jehová me dio lo que le pedí. Yo, pues, lo dedico también a
Jehová; todos los días que viva, será de Jehová. Y adoró allí a Jehová”.
*Pr.22:6 "Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él."
*Dt.6:6-7 "Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y
hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes."
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*La Presentación de Jesús en el Templo, Jesús también fue presentado. El relato de este hermoso hecho
lo podemos leer en Lc.2:22-39 / Mr.10:13,16. Dejad los niños venir a mi; no se los estorbéis, porque de los tales
es el Reino de Dios.

6.- Bautizo de infantes


En las Sagradas Escrituras no se encuentra, no hay enseñanza, ni ejemplo que autorice el bautismo de niños. El
bautismo neo testamentario es una manifestación de arrepentimiento y fe en nuestro Señor Jesucristo, lo que no
cabe en los que no han llegado al uso de la razón.

LA IDOLATRÍA

Texto: Mt.4:10

Introducción: Idolatría es rendir culto o adoración a cualquier otra cosa o persona distinta a Dios, o bien, es
atribuir a algo o a alguien caracteres propios y únicos de Dios. Es considerado ídolo, toda persona, cosa o bien
material que desplaza a Dios del gobierno de la vida de una persona. Todo aquello que más amamos (dinero,
cosas, personas, etc.) y en lo que confiamos ciegamente, desplazando al Señor del reinado de nuestras vidas, es
un ídolo. Ez.14:1-11.

Puntos de estudio:
1. La idolatría te separa de Dios
Es pecado la idolatría y el pecado nos separa de Dios. En el Sal.115:4-8, habla de lo que son los ídolos y dice en
el verso 8 que los que confían en ellos se vuelven sordos, mudos y no andan, se vuelven como los ídolos, no
encontrarán rumbo, tropezarán en todo lo que hagan porque su mente se ha oscurecido, sus oídos se cierran y no
pueden escuchar la voz de Dios. Pierden la comunión con Dios. Is.45:21 "No hay más Dios que yo; Dios justo y
Salvador; ningún otro fuera de mí". Ex.20:3-5. "No tendrás dioses ajenos delante de mí, no te harás imagen, ni
ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra"

2. La idolatría desata maldición. Dt. 27:15 / Ro.1:21-32


Al no glorificar a Dios, ni honrarlo sino ir tras sus propias concupiscencias, la persona queda expuesta a los
ataques del diablo quien lo llevará a cometer hechos vergonzosos que no convienen, estarán enredados y esclavos
de la mentira por haberse separado de la verdad, la cual los hace libres. La mentira es del diablo, quien hallará
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lugar para poner cautivo de nuevo al creyente por medio de sus engaños: enfermedad, escasez, contienda, vicio,
homosexualidad, temor, divorcios.
Como podemos ver la idolatría genera un gran desorden en las vidas de aquellos que “cambian la verdad de Dios
por la mentira”; esto viene del no reconocimiento del señorío de Dios en el corazón de las personas. Uno de los
pecados que más rechaza nuestro Dios, es la idolatría. La razón es que este pecado en particular trae maldiciones
sobre individuos, ciudades y naciones de una forma tan grande que aun su efecto cae sobre las generaciones
venideras.

3. Diferentes formas de idolatría


Hay otras formas de idolatría más refinadas y en las cuales es más fácil caer incluso para aquellas personas que
conocen la verdad de Dios pues no está basada en cosas tangibles como esculturas, pinturas, talismanes etc. sino
que como la Biblia nos advierte en el siguiente versículo, cualquier cosa que pongamos delante de Dios y ocupe
el lugar de él en nuestras vidas es idolatría veamos: Col.3:5. “Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros:
fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría”. Sin embargo, la idolatría
también se asocia con la pasión vehemente por algo que bien puede ser algún tipo de actividad, tal como el
deporte, el trabajo, la TV, los juegos de video, la novia o el novio, el esposo, la esposa, los hijos, el dinero, entre
otros. Todo aquello que atraiga nuestra atención en forma excesiva es un tipo de idolatría. La avaricia es idolatría
al dinero; para los avaros, el dinero se convierte en su dios.
Debemos de tener cada cosa en su lugar. Todos sabemos que necesitamos dinero, y debemos trabajar para
obtenerlo, pero si en eso se basa toda nuestra vida, en conseguir dinero, tanto que por esto descuidamos a los
nuestros y no tenemos tiempo para Dios, estamos siendo idólatras al dinero.

4. ¿Cómo castiga Dios este pecado?


La Palabra es muy clara en cuanto a esto. ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni
los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones” 1Co.6:9.
Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo
y de Dios.” Ef.5:5. “Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros,
los idolatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre...´´ Ap.21:8.

5. ¿Cómo salir de este pecado?


Todo me es lícito mas no todo conviene, todo me es licito mas no todo edifica”, “todas las cosas me son lícitas,
mas yo no me dejaré dominar de ninguna”. “Todo lo que es verdadero, honesto, justo puro, amable, de buen
nombre, si hay virtud alguna, o digno de alabanza, en esto pensad” (1Co.10:23, 6:12 / Fil.4:8).

Podemos salir fácilmente de esta situación si volvemos a concentrar nuestra atención en el único digno de
alabanza y honor, en el sacrificio de Cristo y en el plan eterno de Dios para la humanidad, desechando nuestros
planes egoístas y asumiendo el propósito de Dios. Así, nuestro deseo estará alineado a la Voluntad de Dios, en
establecer Su Reino de poder en esta tierra y en predicar Su Palabra para que todos los hombres procedan al
arrepentimiento.
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LA CENA DEL SEÑOR

Texto: 1Co.11:23-26 / Mt.26:26-29

Introducción: Estamos anunciando el nuevo pacto, las bendiciones que están disponibles para ti y para mí, por
razón de la victoria del Señor Jesús en la cruz del calvario. Por diversas razones, muchas veces es considerada
como tradicional, que es sólo simbólico, sin vida alguna, realmente no es así. Esto hay que tomarlo por fe, sino
hay fe, usted simplemente comerá un pedazo de pan y tomará un poco de vino.

Puntos de estudios:
1.- El comienzo de la pascua
¿Qué es la Pascua? La Pascua fue la fiesta que se instituyó en Egipto la noche anterior de la salida del pueblo
hebreo de Egipto hacia el desierto. Esa noche les ordenó hacer dos cosas, les dio orden que tomara un cordero, si
la familia era muy grande un cordero por familia, si la familia era pequeña que se juntaran dos o tres familias para
que todos comieran del cordero, con la orden de que no quedara nada y que si algo sobraba tenía que quemarse.
Así mismo deberían comer el cordero antes de salir de Egipto y que tomarían la sangre del cordero y la untarían
sobre los postes y dinteles de sus casas para que el ángel de la muerte no los tocase a ellos, este es el principio de
la Pascua Éx.12:1-11.

2.- El comienzo de la institución de la santa cena


No es coincidencia que Jesús esperó el día de la Pascua, y en ese día de la Pascua, Jesús comió cordero, pero en
ese día de la Pascua iba a ser la última vez que ese cordero tipificaría a Jesús. Pablo nos dice que Cristo es nuestra
Pascua. O sea, no es coincidencia que Jesús instituyera esta cena el día anterior de su crucifixión. Esto es
simbólico, porque Jesucristo fue crucificado durante la época de la cena pascual. Podemos decir que la Cena del
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Señor viene a sustituir la Pascua. En esa noche comieron el cordero, pero también esa noche, hubo un cambio de
pacto, cambio de sangre, cambio de cordero y cambio de sacerdocio. ¡Aleluya! Mt. 26:26-29.

3.- Debemos discernir la santa cena


En los siguientes versículos de este capítulo versículos 27 y 30, hay personas que han interpretado el verdadero
contenido de lo que el Apóstol Pablo realmente quiere decirnos. Debemos entender que si no discernimos el
cuerpo y la sangre, nosotros mismos nos hacemos juicio, no es Dios quien quiere hacernos juicio, Dios quiere que
nosotros discernamos el momento de la santa comunión y para qué es la sangre de Cristo, a fin de que pueda
recibir los beneficios de ambas cosas. Debemos pedirle al Espíritu Santo que nos de revelación de la realidad
espiritual de la Cena del Señor.

4.- Beneficios de discernir el cuerpo y la sangre en la santa cena


¿Sabes por qué hay tantos enfermos y debilitados y muchos duermen en nuestras iglesias? Porque nosotros no
hemos entendido el verdadero significado y seguimos en la creencia que es un mero símbolo. La Biblia dice que
el pan y el vino que comemos son la comunión, la identificación, la “Koinonía”, la intimidad y la relación con el
cuerpo de Cristo.

4.1.- Específicamente en 1Co.11:30-31, nos señala las consecuencias o resultados de no discernir y de no


apropiarnos de los beneficios de comer el pan y tomar el vino. Ahora si cambiamos la ecuación de este versículo
diremos: vengamos a la mesa del Señor, discernamos al tomar la copa y discernamos el comer el pan; por lo cual,
entonces, habrá muchos sanos entre vosotros, habrá mucha fortaleza y habrá muchas personas con larga vida.
Estos beneficios se transforman en derechos al tener el conocimiento exacto de la Santa Cena.
4.2.- En el Sal.105, Dios haciendo gala una vez más de su fidelidad en el cumplimiento de sus promesas
y de sus pactos con el pueblo de Israel, en el versículo 37 dice: “Los sacó con plata y oro; y no hubo en sus tribus
enfermos”. La Biblia nos declara que Dios es el mismo ayer, hoy y por la eternidad. Y hoy a través de este nuevo
pacto recordado en la celebración de la Santa Cena, nuestro Padre Dios cumplirá con más vehemencia las
bendiciones o beneficios de celebrar la Santa Comunión. Cada servicio de comunión debe ser una experiencia
con el Señor Jesús.

5.- Hacedlo en memoria de mí - 1Co.11:24-25


Pablo nos dice que él recibió instrucciones del Señor sobre la Santa Cena indicando esto que es un deber de la
Iglesia Cristiana, celebrar este memorial. Pablo nos aclara que lo que estamos haciendo es anunciando la muerte
del Señor Jesús; esto es, cada vez que comemos el pan estamos anunciando los beneficios de la muerte del cuerpo
de Cristo y cada vez que tomamos el vino estamos anunciando los beneficios de la Sangre de Jesucristo. Los
beneficios son los siguientes: La sangre de Cristo compró el perdón de nuestros pecados, y el cuerpo de Jesucristo
aseguró la sanidad completa de nuestro cuerpo.
En 1Co.11:24-25 Jesús a través de Pablo dice: “… Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido;
haced esto en memoria de mi”. Al pan Jesús le llamó “cuerpo”, “Asimismo tomó también la copa, después de
haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en
memoria de mí”. Podemos nosotros entonces entender que el pan sigue siendo pan y el vino sigue siendo vino;
pero cuando lo tomamos por fe, el pan es el cuerpo de Cristo y el vino es Su sangre.
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6.- Jesús, el pan de vida Jn.6:47-58


El mismo Señor Jesús nos dice en Jn.6:51 “Yo soy el pan vivo que descendió del cielo, si alguno comiere de este
pan, vivirá para siempre…” El Señor nos asegura y enfatiza que este pan, que es su carne, tiene vida. Y más
adelante en el versículo 53 Jesús nos está hablando de símbolos; esto va mucho más allá, Él sabía lo que estaba
diciendo, no mezcló palabras y dijo: “Si no coméis la carne del hijo del Hombre y no bebéis la sangre no tenéis
vida en vosotros”, indicando esto que cuando comes pan y bebes el vino, estás comiendo y bebiendo vida,
confirmando con esto que son símbolos y no un simple recordatorio histórico.

Conclusión: Entonces, es recomendable entender los beneficios de tomar la Santa Cena ya que es un medio de
gracia; es decir, la gracia de sanidad, de salvación, de prosperidad, de fortaleza y de larga vida que se manifiesta
por el pan y el vino. Versículo 56: “El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece y yo en él”

LAS FALSAS DOCTRINAS

Texto: 2 Jn. 9-11 / 1Jn. 4:1-4

Introducción: Como estamos en los últimos días, nosotros como creyentes tenemos que estar conscientes de que
Jesús dijo que se levantarían falsos cristos y falsos profetas con doctrinas de error, con el intento de engañar, si
fuera posible, aun a los escogidos. Como cristianos bíblicos debemos estar preparados para presentar defensa a
favor de nuestra fe y para poder reconocer inmediatamente cuál es el espíritu detrás de cualquier enseñanza.

Puntos de estudio:
Una secta es pues, un grupo religioso separado del resto de los grupos, con una doctrina y organización
independiente. Para ser miembro de la secta hay que aceptar al pie de la letra la infalibilidad de la doctrina y la
autoridad absoluta de los líderes de la secta. No pueden ser cuestionados ni por las escrituras, ni por la razón.

1.- ¿Cómo reconocer una falsa doctrina?


1.1.- Jesucristo no es el centro de la enseñanza - 1Co.3:11
La mejor forma de saber si un grupo es verdaderamente cristiano es preguntándole qué piensan de la persona de
Jesucristo. En la mayoría de las ocasiones te van a contestar que Jesucristo era un buen profeta, un buen maestro,
un buen líder, pero nunca van a aceptar que es Dios. La mayor parte de las sectas falsas casi siempre hablan de
Dios y no mencionan mucho el nombre de Jesús. Este es el espíritu del anticristo que no puede confesar que
Jesucristo ha venido en carne (1Jn. 4:1-3)
1.2.- Ellos aparentan ser el reino exclusivo y sólo ellos tienen la verdadera revelación de Dios 2P.1:20-21.
Parte de las enseñanzas de estos grupos, es que para ser salvo se debe ser parte de su grupo. Es interesante que la
mayor parte de estas sectas que no tienen ni 100 años de existencia se atrevan a decir que solamente por ellos hay
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salvación. Sería bueno preguntarles qué pasó con los cristianos que murieron antes de que ellos aparecieran. Estos
grupos dependen mucho de lo escrito por sus fundadores o líderes hasta llegar al extremo de elevar esos escritos
al mismo lugar de la Palabra de Dios. Dicen tener revelaciones especiales dadas por sueños y visiones.
1.3.- Sumisión absoluta 1P.5:2-3
El cristiano bíblico predica y enseña una sumisión absoluta a Jesucristo y a la Palabra, pero nunca a un líder
humano. En estos grupos se practica la sumisión absoluta para mantener la disciplina y para impedir que nadie
salga de la línea. Un ejemplo de este caso es el caso de Jim Jones en Guyana que envenenó a todos sus seguidores
ofreciéndoles una vida mejor.
1.4.- La salvación es por obras, ley y regulaciones 1 Tim 4:1-4
Estos grupos enfatizan la salvación por medio de las siguientes cosas:
*Conocimiento de la Biblia
*Dietas alimentarias
*Regulaciones en cuanto a días, vestidos, y otros controles de vida.
*Separación absoluta de la sociedad

2.- Principales falsas doctrinas que operan en nuestro país


2.1.- Creciendo en Gracia: Tienen una serie de enseñanzas que están fuera del contexto bíblico:
*Su líder se hace llamar Jesucristo hombre o Anticristo (porque para él los dos son la misma persona)
*Afirman que el diablo fue destruido en la cruz y que ya no existe, por lo tanto no hay infierno.
*Rechazan todos los escritos que no sean los de Pablo como únicos y verdaderos. Los escritos de los demás
apóstoles como Pedro, Juan y Santiago y los evangelios, son considerados por ellos como
"contradictorios”
*Creen en que la salvación no se pierde, son “salvos, siempre salvos”
*Rechazan la doctrina de la trinidad
*Insta a sus seguidores a tatuarse el número 666 porque, de acuerdo con su fe, no es un número satánico, sino de
la sabiduría.
2.2.- La Nueva Era: El movimiento de la Nueva Era cree en:
*Que todos los hombres somos dioses. Que Jesús era un hombre que llegó a ser Dios. Niegan la deidad de
Jesucristo. Dicen que fue un maestro ascendido como Gandhi, Buda, Mahoma
*Que no hay bien ni mal, sino que todo es una experiencia para obtener una conciencia plena.
*Que hay maestros invisibles, espíritus guías, canales, que se comunican con ellos y les instruyen en los secretos
del cosmos.
*En la reencarnación He.9:27
*Practican el yoga, el horóscopo, el tarot, la astrología, meditación trascendental
2.3.- Los Testigos de Jehová: La secta de los testigos de Jehová es una de las más activas (o quizás la más
activa) que encontramos en la actualidad entre nosotros. Son famosos por sus visitas – puerta a puerta- intentando
vender sus libros y revistas, y principalmente, anunciando la inminente llegada del fin del mundo:
*Niegan la Trinidad De este error se desprenden todos los demás. Los testigos no reconocen el misterio principal
de la fe cristiana: la Trinidad. Sí reconocen, como nosotros, que hay un sólo Dios (son monoteístas). Pero no
reconocen al Espíritu Santo ( se refieren a Él como una fuerza) y niegan la divinidad de Jesús .
*Enseñan que sólo los Testigos se salvarán porque sólo ellos obedecen totalmente a Jehová.
*Se prohíbe la Navidad, los cumpleaños, los días de fiesta, votar o participar en la política, servir en el ejército,
saludar la bandera... Creen que toda autoridad fuera de los Testigos viene de Satanás, incluso la autoridad civil.
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*Sólo irán al cielo 144,000.Se apoyan en Ap.7:4-8. Dicen que estos son los elegidos que irán al cielo como
espíritus sin cuerpo. El resto de los fieles quedarán en la tierra con cuerpos resucitados mientras que los
condenados no irán al infierno sino que serán aniquilados (dejaran de existir).

2.4.- La santería:
La Santería es un sistema de creencias que surgió en Latinoamérica, principalmente en Cuba, al sincretizarse o
unirse las prácticas religiosas que llevaron los esclavos africanos y algunas creencias del catolicismo referidas a
los santos, que imperaban por entonces en el nuevo mundo. Se les conoce como "Santeros", devotos de la Religión
Yoruba, originaria de la etnia Yoruba, proveniente de Nigeria.

2.5.- Oración fuerte al Espíritu Santo (Pare de sufrir):


Es una de las pocas “Iglesias” que llamadas “pentecostales” se han alejado del cristianismo para transformarse en
empresas religiosas. Entre las tantas ofertas que tiene la Iglesia Oración Fuerte al Espíritu Santo, se mencionan
agua bendita traída del río Jordán, manto sagrado de Jerusalén, pañuelos benditos de Tierra Santa, Rosa de Sharon
de Medio Oriente, rosas rojas para mejorar la salud, rosas amarillas para conseguir prosperidad económica, aceite
milagroso del Huerto de Getsemaní para ungir fotos familiares, piedras de la tumba de Jesús y pan bendecido que
cura enfermedades, esto hace que las personas quiten su fe en Dios y la concentren en objetos.
Debemos estar alertas y predicar el verdadero Evangelio a toda criatura para que se cumpla la Escritura: “Y
conocerán la verdad y la verdad os hará libres” Jn. 8:32

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