Você está na página 1de 33

AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN

1688/2012.
QUEJOSO Y RECURRENTE:
**********.

PONENTE: MINISTRO JOSÉ RAMÓN COSSÍO DÍAZ


SECRETARIA: MIREYA MELÉNDEZ ALMARAZ

México, Distrito Federal. La Primera Sala de la Suprema Corte de


Justicia de la Nación, en la sesión correspondiente al día ocho de agosto
de dos mil doce, emite la siguiente:

SENTENCIA

Mediante la que se resuelve el amparo directo en revisión 1688/2012,


interpuesto por ********** contra la sentencia dictada el dieciséis de mayo
de dos mil doce por el Octavo Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Primer Circuito, en el juicio de amparo directo 88/2012.

I. ANTECEDENTES

1. **********, **********, **********, ********** (en adelante **********) demandó


de **********, en la vía especial hipotecaria, el vencimiento anticipado del
plazo pactado en el contrato de apertura de crédito con interés y
garantía hipotecaria de **********; en consecuencia, el vencimiento
anticipado del plazo acordado en el convenio modificatorio de **********,
el pago total del crédito original, las mensualidades vencidas, los
intereses ordinarios y moratorios, sus accesorios legales y los gastos y
costas del juicio.

2. La Juez Cuadragésimo Séptimo Civil del Distrito Federal, a quien


correspondió el conocimiento del asunto, registró la demanda con el
número de expediente ********** y ordenó el emplazamiento del
demandado, quien al dar contestación adujo, en lo esencial, que la falta
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

de pago de las mensualidades vencidas obedeció a la pérdida de su


empleo, caso en el cual debió surtir efectos la “cláusula de apoyo
Infonavit”, por virtud de la cual el Instituto del Fondo Nacional de la
Vivienda para los Trabajadores (en adelante INFONAVIT) debió
responder con los fondos que integran la subcuenta de vivienda, lo que
dicho Instituto dejó de hacer. En ese tenor, el enjuiciado solicitó el
llamamiento a juicio de esa institución, en calidad de demandado, por
ser parte integrante de un litisconsorcio pasivo necesario, petición que le
fue denegada. No obstante, se le llamó como tercero.

3. El juicio se resolvió por sentencia de diecinueve de agosto de dos mil


once, en donde la juzgadora acogió las pretensiones de la actora, con
excepción del pago de erogaciones mensuales vencidas, intereses
ordinarios y primas de seguros.

4. Tanto la actora como el demandado interpusieron sendos recursos de


apelación en contra de tal decisión, de los que conoció la Primera Sala
Civil del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal con los
números de toca ********** y **********, en cuya resolución de siete de
diciembre de dos mil once se modificó la sentencia apelada. Esto,
respecto de los intereses ordinarios que ********** demandó en la
demanda de origen.1

5. La demandada promovió juicio de amparo directo contra ese fallo, en


donde, además de precisar como acto reclamado la sentencia de
segunda instancia y alegar en su contra cuestiones de legalidad, señaló
también como acto reclamado destacado la inconstitucionalidad de los
artículos 705 y 714 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal.

6. Demanda de amparo. De ésta conoció el Octavo Tribunal Colegiado en


Materia Civil del Primer Circuito, cuyo Presidente ordenó formar el
expediente respectivo y registrarlo con el número D.C.88/2011;
1
La resolución de siete de diciembre de dos mil once constituye el acto reclamado en el amparo directo.

2
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

asimismo, en acuerdo plenario de ocho de febrero de dos mil doce


decretó de oficio la separación del juicio de amparo indirecto del que
correspondía conocer al juez de distrito en turno, con relación al acto
reclamado consistente en la resolución que confirmó el auto que no
admitió la reconvención contra el INFONAVIT. Asimismo, dejó de tener
como acto reclamado destacado la inconstitucionalidad de los artículos
705 y 714 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal,
esto, en atención a la técnica que rige en el juicio de amparo directo; no
obstante, dejó en claro que la calificación de los conceptos de violación
expresados en torno a ese tema se haría en la parte considerativa de la
sentencia que, en su momento, se llegara a dictar.

7. Resolución del juicio de amparo. El dieciséis de mayo de dos mil


doce, el Octavo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito
resolvió negar el amparo solicitado. El recurso de revisión promovido
contra tal fallo constituye la materia por analizar en esta instancia.

8. Interposición del recurso de revisión. El escrito respectivo fue


presentado el cuatro de junio de dos mil doce ante la Oficina de
Correspondencia Común de los Tribunales Colegiados en Materia Civil
del Primer Circuito. Recibidos los autos en este Alto Tribunal, por auto
de Presidencia de ocho de junio siguiente el recurso se admitió a
trámite, se registró con el número 1688/2012 y se turnó al señor Ministro
José Ramón Cossío Díaz, integrante de la Primera Sala del propio
órgano, en virtud de que el tema planteado corresponde a la
especialidad de esa Sala. En proveído de dieciocho de junio posterior, el
Presidente de esta Primera Sala ordenó el avocamiento del asunto y la
devolución de los autos al ministro ponente para la elaboración del
proyecto de resolución correspondiente.

II. COMPETENCIA

9. Esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es


competente para conocer del presente recurso de revisión, en términos

3
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

de lo dispuesto por los artículos 107, fracción IX, de la Constitución


Política de los Estados Unidos Mexicanos; 84, fracción II de la Ley de
Amparo; 21, fracción III, inciso a) de la Ley Orgánica del Poder Judicial
Federal, y en relación con los puntos segundo y cuarto del Acuerdo
General número 5/2001, emitido por el Tribunal Pleno de este Alto
Tribunal, de fecha veintiuno de junio de dos mil uno, publicado en el
Diario Oficial de la Federación el veintinueve del mismo mes y año, en
virtud de haberse interpuesto en contra de una sentencia dictada por un
Tribunal Colegiado de Circuito, en la que se planteó la
inconstitucionalidad de los artículos 705 y 714 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, cuestión que
corresponde a la materia de especialidad de esta Sala.

10. Por otro lado, debe decirse que el recurso de revisión fue interpuesto
oportunamente, pues la sentencia se notificó a la parte quejosa el
veinticuatro de mayo de dos mil doce, surtió efectos al día hábil
siguiente, por lo que el plazo de diez días que el artículo 86 de la Ley de
Amparo prevé para interponer el recurso de revisión, transcurrió del
veintiocho de mayo de al ocho de junio de dos mil doce. Por lo tanto, si
el presente recurso de revisión fue presentado el cuatro de junio ante la
Oficialía de Partes Común de los Tribunales Colegiados en Materia Civil
del Primer Circuito, debe concluirse que su interposición fue oportuna.

III. PROCEDENCIA

11. En primer lugar, se debe analizar si el presente asunto reúne los


requisitos de importancia y trascendencia a que se refiere el artículo
107, fracción IX de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, así como el punto Primero del Acuerdo General Plenario
5/1999, que aparece publicado en el Diario Oficial de la Federación de
veintidós de junio de dicho año, para verificar si es o no procedente el
recurso de revisión que nos ocupa, sobre lo cual es necesario que se
reúnan los siguientes supuestos:

4
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

11.1. Que en la sentencia recurrida se haya hecho pronunciamiento sobre


la constitucionalidad de una ley, tratado internacional o reglamento,
o se establezca la interpretación directa de un precepto
constitucional, o que, habiéndose planteado alguna de esas
cuestiones en la demanda de amparo, se haya omitido su estudio; y

11.2. Que el problema de constitucionalidad entrañe la fijación de un


criterio jurídico de importancia y trascendencia, a juicio de la Sala
respectiva.

12. En relación al primero de los requisitos, éste se encuentra satisfecho, en


virtud de que en su demanda de amparo, el quejoso impugnó la
constitucionalidad de los artículos 705 y 714 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal.

13. Por lo que se refiere al segundo de los requisitos mencionados, el propio


punto Primero del Acuerdo en cita señala que, por regla general, se
entenderá que no se surten los requisitos de importancia y
trascendencia cuando exista jurisprudencia sobre el problema de
constitucionalidad hecho valer en la demanda de garantías, así como
cuando no se hayan expresado agravios o, en su caso, éstos resulten
ineficaces, inoperantes, inatendibles o insuficientes y no haya que suplir
la deficiencia de la queja, o bien, en casos análogos.

14. En este sentido, debe decirse que el recurso que ahora se resuelve es
procedente, ya que como se dijo, en los conceptos de violación se
impugnó la constitucionalidad de los artículos 705 y 714 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, estudio que omitió el
tribunal colegiado con el argumento de que el quejoso no cumplió con el
principio de definitividad, es decir, no agotó los recursos ordinarios que
procedían en contra de las resoluciones en las que se aplicaron las
disposiciones que califica inconstitucionales; de ahí que declaró
inoperantes los conceptos de violación respectivos, de manera que
subsiste el tema de inconstitucionalidad planteada.

5
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

15. Por otra parte, si bien el tribunal de amparo apoyó su decisión en la tesis
emitida por esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, con el rubro: “INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES EN
AMPARO DIRECTO. CUANDO EL PRIMER ACTO DE APLICACIÓN
DE LA NORMA IMPUGNADA SE ORIGINE DURANTE EL TRÁMITE
DEL JUICIO NATURAL, ES NECESARIO QUE EL QUEJOSO
PREVIAMENTE AGOTE LOS RECURSOS ORDINARIOS”, dicho
criterio constituye una tesis aislada, de manera que no puede servir de
base para desestimar, desde luego, los agravios del recurrente, sobre
todo si se considera que en este tipo de asuntos, los inconformes están
en posibilidad de cuestionar la veracidad de las afirmaciones realizadas
por el tribunal colegiado, en torno a la impugnabilidad de los actos de
aplicación o a la circunstancia de que, en efecto, no hayan interpuesto
los recursos ordinarios procedentes, de manera que es necesario
analizar los agravios para constatar la aplicación de dicho criterio.
Asimismo, para el caso de que se supere la inoperancia decretada, cabe
destacar que en cuanto a las disposiciones de las que se cuestiona su
constitucionalidad, no existe criterio emitido por este Alto Tribunal, por lo
que se justifica el conocimiento del asunto por esta Primera Sala.

IV. CONSIDERACIONES Y FUNDAMENTOS

16. Cuestiones necesarias para resolver el asunto. Éstas corresponden a


los conceptos de violación, la resolución del Tribunal Colegiado y los
agravios expresados por el recurrente, los que se sintetizan a
continuación.

17. Conceptos de violación. Primero. La negativa a llamar a juicio al


INFONAVIT, en su carácter de demandado (ante la existencia de un
litisconsorcio pasivo necesario) declarada en el toca civil de apelación
********** mediante resolución de ocho de julio de dos mil once, que
confirmó el auto de veinticuatro de mayo del mismo año, constituye una

6
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

violación a las leyes rectoras del procedimiento. En ese tenor, la


sentencia definitiva de siete de diciembre de dos mil once, que soslayó
dicha violación y remitió al apelante a lo resuelto en aquel toca,
transgrede los artículos 8, 14, 16 y 17 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, por las razones siguientes:

17.1 La intervención del INFONAVIT era necesaria para la debida


integración de la relación jurídico-procesal; de ahí que la
afirmación de que la reconvención únicamente es procedente
contra la actora en el principal es ilegal.

17.2 La decisión de la autoridad responsable quebranta lo dispuesto en


el artículo 192 de la Ley de Amparo y deja en estado de
indefensión al quejoso, ya que dicho tribunal no aplicó, aun cuando
se invocó en agravios, la jurisprudencia 1a./J. 71/2010 emitida por
la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación con
el rubro: “RECONVENCIÓN. PUEDE HACERSE VALER SOLO
CONTRA LA PARTE ACTORA, NO CONTRA TERCERAS
PERSONAS, PERO CUANDO EXISTEN SITUACIONES DE
LITISCONSORCIO NECESARIO, AQUELLA INCLUYE A TODOS
LOS LITISCONSORTES, SIN QUE DEBA RECURRIRSE LA VIA
ESPECÍFICA LEGALMENTE PREVISTA PARA LLAMAR A
JUICIO A TERCEROS.”, en la que se prevé que los integrantes de
un litisconsorcio necesario no pueden ser conceptuados como
terceros, pues comparten el mismo interés del demandado en vía
de reconvención; de manera que, sin la integración de esa relación
procesal no es posible pronunciarse respecto al fondo del asunto,
al tratarse de un presupuesto procesal.

17.3 Lo resuelto en la sentencia reclamada infringe el derecho de


audiencia y el principio de cosa juzgada, pues se deja de
considerar que en el contrato de apertura de crédito, base de la
acción, consta que la accionante fungió como representante del
INFONAVIT para el otorgamiento del crédito, específicamente, en

7
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

la “cláusula de apoyo Infonavit”; de ahí que debió ordenarse el


emplazamiento a juicio del instituto para evitar la promoción de
futuras demandas con motivo de sentencias cuyas consecuencias
pueden ser graves o desventajosas para otros intereses y atentan
contra las garantías de expedites en la impartición de justicia y
debido proceso legal.

17.4 La escisión de las causas decretada por la autoridad responsable


(en la parte que sostuvo “…para el caso de instaurarse y probarse
lo que aduce el ahora apelante respecto de dicha responsabilidad
del instituto de referencia, bien puede repetir en su contra cuando
exista determinación de autoridad competente”) es inexacta, pues
lo correcto era dictar una resolución inhibitoria, dejando a salvo los
derechos para plantearlos en una nueva demanda.

18. Segundo. Los artículos 714 y 705 del Código de Procedimientos


Civiles del Distrito Federal son inconstitucionales. Dichos preceptos
fueron aplicados en el auto de doce de octubre de dos mil once, al
desecharse el recurso de apelación interpuesto contra el auto dictado en
audiencia de nueve de agosto de dos mil once, en el toca de apelación
**********. La inconstitucionalidad planteada se sustenta en los siguientes
argumentos:

18.1 La incorrecta abstención de ordenar emplazamiento a juicio con


el carácter de demandado de un integrante del litisconsorcio
pasivo necesario, por tratarse de una parte compleja, se traduce
en la inconstitucionalidad de la ley.

18.2 Los artículos 714 y 705 del Código de Procedimientos Civiles del
Distrito Federal prevén la interposición del recurso de apelación
de tramitación inmediata y obligan al recurrente a expresar, desde
luego, los agravios que considere le causa la resolución
impugnada. En el caso específico, el apelante no expresó
agravios lo que dio lugar a que se desechara la apelación.

8
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

18.3 En el proceso legislativo que dio lugar a la reforma del artículo


714 del código adjetivo no se advierte justificación para que al
interponerse el recurso de apelación contra las resoluciones
dictadas en juicios especiales, el inconforme deba expresar los
agravios que tenga contra la decisión impugnada, con
apercibimiento de su desechamiento en caso de no procederse
de esa manera, por lo que la norma es inconstitucional.

18.4 En opinión del inconforme, tal precepto es contrario a las


garantías de audiencia, debido proceso legal y acceso a la
jurisdicción, ya que no prevé la posibilidad de prevenir al
recurrente que incurrió en alguna inexactitud al interponer el
recurso y en vez de ello, ordena su desechamiento, lo que
ocasiona desequilibrio procesal, en franca violación al artículo 14
constitucional al tratarse de una sanción rigorista; lo anterior ya
que se limita injustificadamente la posibilidad de defensa al
permitirle cuestionar el acto impugnado con la expresión
inmediata de agravios y no a partir de la trascendencia que tal
acto habrá de tener en la sentencia definitiva.

18.5 Además la reforma a tal disposición es inconstitucional porque no


se justificó de forma alguna la reducción del plazo para recurrir
correctamente la resolución material del recurso, de manera que
obliga a expresar agravios en un plazo reducido que imposibilita
la capacidad de recurrir correctamente la resolución materia del
recurso.

18.6 El peticionario del amparo sostiene, además, que ambos


artículos (705 y 714 del referido ordenamiento procesal) son
contrarios al artículo 17 de la Carta Magna, porque impiden
acceder a una justicia pronta, expedita, completa y eficaz ya que
contemplan un recurso restrictivo que obstaculiza el acceso a la
tutela judicial efectiva.

9
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

19. Tercero. En opinión del quejoso, la calificación de las posiciones


formuladas en la audiencia de nueve de agosto de dos mil once, para el
desahogo de la prueba de confesión a cargo del representante del
banco actor constituye una violación a las leyes rectoras del
procedimiento que transgrede sus derechos fundamentales, por lo
siguiente:

19.1La decisión adoptada vulnera lo dispuesto por los artículos 311,


312 y demás relativos del Código de Procedimientos Civiles del
Distrito Federal, en tanto que el Juez natural calificó
erróneamente el pliego de posiciones exhibido para el desahogo
de la confesión a cargo de la actora en el principal, demandada
reconvencional y la tercera llamada a juicio. Al respecto, el
quejoso explica, respecto de cada una de las posiciones que
fueron descalificadas por el juez a quo, en que consistió la
inexactitud en su calificación.

19.2No obstante lo anterior, la sala responsable desechó el recurso de


apelación interpuesto en contra de esa determinación, proceder
que el peticionario del amparo considera violatorio de sus
derechos fundamentales.

19.3La juez debió hacer uso de sus facultades indagatorias, puesto


que la indebida calificación de posiciones ha dejado al principal,
actor reconvencional y apelante, en absoluto estado de
indefensión, más aún que tal desechamiento trascendió al
resultado de la decisión definitiva.

20. Cuarto. La sentencia reclamada es violatoria de los artículos 14, 16 y 17


de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ya que en
su dictado, la sala responsable incurre en una incorrecta valoración de
pruebas, de acuerdo con los razonamientos que enseguida se
exponen:

10
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

20.1No atiende a la obligación que el artículo 402 del Código de


Procedimientos Civiles para el Distrito Federal impone a los
juzgadores, en el sentido de que la evaluación de pruebas debe
estar delimitada por la lógica y la experiencia, esto es, su análisis
debe realizarse de manera conjunta respecto de todos los
elementos de prueba con atención a las máximas de la
experiencia y a la sana crítica.

20.2Los documentos ofrecidos en original que demuestran la situación


laboral del enjuiciado (para que operara la “cláusula de apoyo
Infonavit”) no fueron objetados; de ahí que merecían plena
eficacia probatoria, no obstante ello, la autoridad responsable
pasó inadvertida esa situación.

20.3Al contrario de lo resuelto por el tribunal de apelación, no


proceden intereses moratorios sobre intereses ordinarios, y
aunque esté convenido en una clausula del contrato, debe
implicarse por ilícito.

21. Sentencia recurrida. El Tribunal Colegiado, en resolución de dieciséis


de mayo de dos mil doce, calificó de inoperantes e infundados los
conceptos de violación por las siguientes razones:

21.1 En contra de la resolución que confirmó el auto que no admitió la


reconvención procedía el juicio de amparo indirecto. En
consecuencia, es inoperante el concepto de violación tendente a
combatir dicha determinación.

21.2 Las inconformidades que atañen a la violación a las leyes del


procedimiento que alega el quejoso, en cuanto al desechamiento
de la apelación verificado en el toca **********, como
consecuencia de que el recurrente no expresó agravios son
inoperantes. Esto, porque en contra de tal decisión del tribunal
de alzada procedía el recurso de reposición previsto en los
artículos 686 y 687 del Código de Procedimientos Civiles para el
Distrito Federal.

11
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

21.3 No es válido emitir decisión sobre la inconstitucionalidad de los


artículos 705 y 714 del Código de Procedimientos Civiles para el
Distrito Federal que, afirma el quejoso, se le aplicaron en el auto
de doce de octubre de dos mil once en el que se desechó el
recurso de apelación interpuesto contra la resolución dictada en
la audiencia de nueve de agosto del mismo año (cuyas
inconformidades se enderezaron a combatir la calificación de las
posiciones formuladas para el desahogó de la confesión a cargo
de su contraria y del tercero llamado a juicio).

Lo anterior, ya que el quejoso no cumplió con el principio de


definitividad previsto en los artículos 158, 159, 161 y 166, fracción
IV, de la Ley de Amparo puesto que no agotó los recursos
ordinarios que procedían en contra de la resolución donde se
aplicaron los preceptos que califica inconstitucionales, que en el
caso es el recurso de reposición previsto en los artículos 686 y
687 del mismo código, por lo que estimó inoperante dicho
concepto de violación.

21.4 En cuanto a la valoración incorrecta de las probanzas, el tribunal


colegiado declaró infundado en una parte, e inoperante en otra, el
concepto de violación respectivo. Lo infundado del alegato se
apoyó en que, al contrario de lo sostenido por el quejoso, en
opinión del tribunal colegiado, la autoridad responsable sí efectuó
el análisis correspondiente, en tanto que la inoperancia se
produjo porque, respecto de esa valoración, el peticionario del
amparo no expresó inconformidades dirigidas a combatir las
consideraciones del tribunal de alzada.

21.5 Finalmente, el tribunal colegiado sostuvo que la Sala responsable


no incurrió en violación de garantías al afirmar que procedía el
pago de los intereses generados, tanto ordinarios como
moratorios y que justificó a partir de las diferencias que existen
entre unos y otros, pues mientras que los primeros derivan del

12
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

préstamo e implican la obtención de una cantidad como ganancia,


los segundos provienen del incumplimiento en la entrega de la
suma prestada y consisten en la sanción que se impone por la
entrega tardía del dinero de acuerdo a lo pactado en el contrato,
por lo que pueden coexistir. Apoyó su decisión en la
jurisprudencia emitida por esta Primera Sala, del rubro:
“INTERESES ORDINARIOS Y MORATORIOS EN EL JUICIO
EJECUTIVO MERCANTIL. COEXISTEN Y PUEDEN
DEVENGARSE SIMULÁNEAMENTE.”2.

22. Agravios. El recurrente los endereza en contra de la decisión adoptada


por el tribunal colegiado en relación a la desestimación de los conceptos
de violación expresados sobre la pretendida inconstitucionalidad de los
artículos 705 y 714 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal, y sustancialmente son los que enseguida se sintetizan:

22.1 La sentencia de dieciséis de mayo de dos mil doce que le negó el


amparo, transgrede lo dispuesto por los artículos 21, 23, 24, 24,
27, 73, 74, 76-bis, 77, 131, 158, 190 de la Ley de Amparo;
además de lo contenido en los artículos 79, 80, 87, 93 del Código
Federal de Procedimientos Civiles.

22.2 Aduce la ilegal abstención de estudio y pronunciamiento del


Tribunal Colegiado respecto de los conceptos de violación
tendentes a combatir la constitucionalidad de los artículos 705 y
714 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal.

22.3 Considera que los artículos impugnados son contrarios al artículo


14 constitucional ya que priva al gobernado de impugnar una
determinación judicial, lo que se traduce en una violación a la
garantía de audiencia.

22.4 El recurrente también aduce que la resolución impugnada es


incongruente porque considera inoperantes los conceptos de
violación que se enderezaron para acreditar la
2
Jurisprudencia 1a./J. 29/2000, publicada en la página 236 del Tomo XII, noviembre de dos mil, del Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época.

13
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

inconstitucionalidad de los artículos bajo el argumento de que no


se agotaron los recursos, lo que es inexacto porque, para alegar
la inconstitucionalidad de un artículo no es requisito agotar
recurso alguno que prepare la violación procesal sino que
basta y sobra que la norma sea aplicada por la autoridad para
que el tribunal emprenda su examen.

22.5 Al contrario de lo aducido por el tribunal colegiado los artículos


705 y 714 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal son inconstitucionales, además de que, en su opinión, no
es necesario cumplir con el principio de definitividad, ya que no es
admisible obligar al quejoso a someterse a las normas cuya
obligatoriedad impugna.

22.6 Considera que el tribunal colegiado se abstuvo de analizar los


conceptos de violación relativos a la inconstitucionalidad de leyes
bajo el supuesto de que no hubo afectación a las garantías
porque no se combatió el acto de aplicación, lo que demuestra
que dicho tribunal confunde derechos sustantivos con derechos
procesales.

22.7 El agraviado también estima que la fracción XIII de la Ley de


Amparo no debe interpretarse aisladamente, sino armónicamente
con la fracción XII del mismo precepto, el cual da la opción al
quejoso de interponer el recurso o impugnar desde luego la
constitucionalidad en el juicio de amparo indirecto con motivo del
primer acto de aplicación. Lo anterior, sin distinguir si se trata o no
de resoluciones judiciales.

22.8 Al respecto, invoca el artículo 114, fracción III, de la Ley de


Amparo para justificar que es hasta la última resolución que debe
promoverse el juicio de amparo cuando se reclama la
inconstitucionalidad de leyes, al no ser un acto de imposible
reparación y al haberse promovido contra una sentencia
definitiva. En relación a esas afirmaciones, éstas se extraen de

14
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

los razonamientos expresados en la tesis aislada (superada)


I.8o.C.37 K de rubro y texto siguientes:

“LEYES, AMPARO CONTRA, CON MOTIVO DE SU


APLICACIÓN EN UN PROCEDIMIENTO JUDICIAL. ES
OPTATIVO AGOTAR RECURSOS ORDINARIOS. Del
artículo 73, fracción XIII, de la Ley de Amparo, se
desprende que previamente a la promoción del juicio
constitucional contra una resolución judicial, el quejoso
debe agotar los recursos o medios ordinarios de defensa
que la ley le conceda, a menos que se trate de actos que
importen privación de la vida, deportación, destierro o
cualquiera de los prohibidos por el artículo 22
constitucional. Ahora bien, esta norma no rige la
procedencia del amparo contra leyes y los casos de
excepción a que se refiere no deben considerarse los
únicos en que no es necesario satisfacer el principio de
definitividad, debiendo interpretarse tal precepto de
manera armonizada y congruente con el párrafo tercero
de la fracción XII del mismo artículo, de la que claramente
se colige que tampoco es necesario cumplir el
mencionado principio cuando se reclama la
inconstitucionalidad de una ley con motivo del primer acto
de aplicación, al concederse al interesado la opción de
hacer valer el recurso o impugnar desde luego la ley en el
juicio constitucional. En efecto, esta última disposición,
introducida en la Ley de Amparo a raíz de la reforma de
treinta de abril de mil novecientos sesenta y ocho, se
inspiró en la jurisprudencia que había establecido la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, basada en que
el examen de la constitucionalidad de las leyes era de la
incumbencia de los tribunales de amparo y en que sería
contrario a derecho obligar al quejoso a que se sometiese
a las disposiciones de una ley cuya obligatoriedad
impugnara por considerarla violatoria de la Constitución, y
es evidente que estos principios son válidos con
independencia de la materia de la ley o del acto
reclamado y de que se trate o no de una resolución
judicial, por lo que la opción que concede la mencionada
fracción XII no tiene por qué entenderse inaplicable
respecto de actos de los tribunales judiciales, al no haber
razón lógica que permita esa distinción. No es óbice que
en la misma fracción XIII no se haya textualmente
incluido, como excepción al principio de definitividad, la
hipótesis en que se reclama la inconstitucionalidad de
una ley, porque además de que las normas de un
ordenamiento legal no deben interpretarse aisladamente,
sino de manera congruente con las restantes del propio

15
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

ordenamiento, debe tenerse en cuenta que en la época


en que se promulgó la Ley de Amparo (publicada en el
Diario Oficial de la Federación de diez de enero de mil
novecientos treinta y seis), la fracción XIII del artículo 73
ya se refería al principio de definitividad en tratándose de
resoluciones judiciales, en tanto que la fracción XII nada
señalaba respecto de la posibilidad del agraviado, de
optar entre promover el amparo contra el primer acto de
aplicación o agotar el recurso ordinario, y fue la
jurisprudencia la que introdujo una excepción al citado
principio de definitividad, eximiendo al quejoso de agotar
recursos ordinarios, jurisprudencia que aunque finalmente
se reflejó en el artículo 73, fracción XII, de la Ley de
Amparo, conforme al decreto publicado en el Diario
Oficial de la Federación con fecha treinta de abril de mil
novecientos sesenta y ocho, y no precisa y literalmente
en la fracción XIII, ello en nada altera el sentido normativo
del precepto, en cuanto concede al perjudicado la opción
de que se viene haciendo mérito, sin distinguir si se trata
o no de resoluciones judiciales, y menos aún es causa
suficiente para desatender los motivos que inspiraron
aquella jurisprudencia y posteriormente la reforma legal,
en el sentido de que el análisis de la constitucionalidad de
las leyes es competencia exclusiva de los tribunales de
amparo y en que no es jurídicamente admisible obligar al
quejoso a que se someta a las normas cuya
obligatoriedad impugna. Por tanto, tratándose del amparo
contra una ley con motivo de su aplicación en un
procedimiento judicial, el quejoso puede optar entre
interponer el recurso o medio de defensa legal ordinario
que corresponda, o bien, impugnar desde luego la ley en
juicio de amparo; en la inteligencia de que lo anterior no
significa que se considere procedente el amparo indirecto
contra actos en juicio cuya ejecución no sea de imposible
reparación, por el solo hecho de impugnarse la ley
aplicada, pues a ese respecto el párrafo final del artículo
158 de la Ley de Amparo establece que la cuestión de
inconstitucionalidad de la ley sólo podrá hacerse valer en
el amparo directo contra la sentencia definitiva o
resolución que pone fin al juicio; y tampoco implica que
en tratándose de actos judiciales dentro de un
procedimiento de ejecución de sentencia, proceda
siempre de inmediato el amparo contra el primer acto de
aplicación de la ley, toda vez que en esa hipótesis y en
términos del artículo 114, fracción III, de la Ley de
Amparo, la inconstitucionalidad de la ley no puede
plantearse sino hasta que se dicte la última resolución en
el procedimiento de ejecución, salvo que el acto tenga

16
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

autonomía propia y destacada o esté desvinculado de la


ejecución propiamente dicha.” 3

22.9 Finalmente, en opinión del quejoso el artículo 714 del Código de


Procedimientos Civiles para el Distrito Federal es inconstitucional
e incongruente ya que obliga al apelante a expresar agravios en
el escrito de apelación en un plazo muy reducido, lo cual es
contrario a la garantía de audiencia prevista en el artículo 14 de la
Carta Magna. Asimismo estima incorrecta la distinción que prevén
los artículos impugnados respecto de juicios ordinarios y
especiales.

V. ANÁLISIS DE AGRAVIOS

23. Éstos resultan infundados en una parte e inoperantes en otra.

24. En primer término es necesario precisar que, al contrario de lo que


afirma la recurrente en el agravio que en esta ejecutoria se identifica
como 22.6, el tribunal colegiado no afirmó que fuera innecesario el
análisis de la inconstitucionalidad de leyes planteada en conceptos de
violación, como tampoco sostuvo que no hubo afectación a las garantías
de la quejosa con motivo de la aplicación de los artículos 705 y 714 del
Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, antes bien, lo
que consideró el tribunal de amparo –en relación al tema de la
inconstitucionalidad de leyes– fue que la peticionaria del amparo no
agotó el recurso ordinario que procedía en contra del auto en que fueron
aplicadas las normas de las que pretende se declare su

3
Dicha tesis aislada fue publicada en la página 1485 del Tomo XXI, mayo de dos mil cinco, del Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, la cual contendió el la Contradicción de Tesis 57/2005-PS
resuelta por la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en sesión de nueve de noviembre de
dos mil cinco, por unanimidad de cuatro votos y dando lugar a la tesis de jurisprudencia 1a./J. 168/2005,
publicada en la página 40 del Tomo XXIII, enero de dos mil seis, del Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta, Novena Época, de rubro: “AMPARO CONTRA LEYES. PROCEDE EN LA VÍA INDIRECTA
CUANDO SE IMPUGNA LA INCONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 693 DEL CÓDIGO DE
PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL DISTRITO FEDERAL, VIGENTE EN 2004, CON MOTIVO
DE SU PRIMER ACTO CONCRETO DE APLICACIÓN.” Además del criterio contenido en la
Contradicción de Tesis 8/2006-PL resuelta en sesión del Tribunal Pleno de nueve de abril de dos mil siete por
unanimidad de diez votos, dando lugar a la tesis de Jurisprudencia P./J. 78/2007, publicada en la página 5 del
Tomo XXVI, diciembre de dos mil siete, del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, de
rubro: “AMPARO CONTRA LEYES CON MOTIVO DE SU PRIMER ACTO DE APLICACIÓN
DENTRO DEL PROCEDIMIENTO. PROCEDE EN LA VÍA INDIRECTA SIEMPRE Y CUANDO
CAUSE UN PERJUICIO DE IMPOSIBLE REPARACIÓN.”.

17
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

inconstitucionalidad, situación que tornaba inoperantes los conceptos de


violación y, por ende, le impidieron emitir una decisión de fondo al
respecto; de ahí que tales aseveraciones formuladas por la quejosa son
inexactas, lo que genera su inoperancia.

25. En otro orden de ideas, en opinión de la recurrente, el tribunal colegiado


analizó los conceptos de violación expresados en relación a la
inconstitucionalidad de los artículos 705 y 714 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, como si se tratara de un
tema de legalidad, lo que considera le genera un agravio, al haberse
confundido las cuestiones sobre derechos sustantivos con los aspectos
procesales.

26. Para dar respuesta a esos motivos de disenso, es oportuno mencionar


las consideraciones que sustentaron el amparo directo en revisión
105/2012, resuelto por esta Primera Sala en sesión de veintidós de
febrero de dos mil doce, sobre la regulación del planteamiento y estudio
de la inconstitucionalidad de leyes en amparo directo.

27. Inconstitucionalidad de leyes en amparo directo. Del análisis de los


artículos 158 y 166, fracción IV, de la Ley de Amparo se advierte, en lo
que interesa a este estudio, que el juicio de amparo directo procede
contra sentencias definitivas, laudos o resoluciones que pongan fin al
juicio, dictados por tribunales judiciales, administrativos o del trabajo,
respecto de los cuales no proceda ningún recurso ordinario por el que
puedan ser modificados o revocados, en el que podrá impugnarse en
vía de conceptos de violación la inconstitucionalidad de las leyes,
tratados internacionales o reglamentos que se hubieren aplicado en
perjuicio del quejoso en el trámite del procedimiento del juicio natural o
en la sentencia, laudo o resolución reclamados 4.
4
Tal fue el criterio sustentado por la Segunda Sala de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación al emitir la
jurisprudencia número 2a./J. 98/2002, publicada en la página doscientos setenta y uno, del Tomo XVI,
septiembre de dos mil dos, del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, que dice: "REVISIÓN EN
AMPARO DIRECTO. SU PROCEDENCIA DEPENDE NO SÓLO DE LA EXPRESIÓN DE
CONCEPTOS DE INCONSTITUCIONALIDAD EN LA DEMANDA SINO, ADEMÁS, DE QUE LOS
ARTÍCULOS IMPUGNADOS SE HAYAN APLICADO EN PERJUICIO DEL QUEJOSO E INFLUIDO
EN EL SENTIDO DE LA RESOLUCIÓN RECLAMADA. De la interpretación armónica de los artículos
107, fracción IX, de la Constitución General de la República, 83, fracción V, de la Ley de Amparo, 10, fracción
III, y 21, fracción III, inciso a), de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, se desprende que el

18
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

28. En el preciso tema de la inconstitucionalidad de leyes, el artículo 73,


fracción XII, del mismo ordenamiento dispone que, cuando en contra del
primer acto de aplicación de la ley de la que se afirma su
inconstitucionalidad (verificado dentro del juicio) proceda el juicio de
amparo directo, el quejoso deberá estarse a lo dispuesto en el artículo
166, fracción IV, párrafo segundo de la Ley de Amparo. Las
disposiciones mencionadas, en la parte que corresponde al tema de la
inconstitucionalidad de leyes, son del siguiente tenor:

"ARTÍCULO 158. (…) Cuando dentro del juicio surjan


cuestiones, que no sean de imposible reparación, sobre
constitucionalidad de leyes, tratados internacionales o
reglamentos, sólo podrán hacerse valer en el amparo
directo que proceda en contra de la sentencia definitiva,
laudo o resolución que ponga fin al juicio”.

ARTÍCULO 73. El juicio de amparo es improcedente:

(...) XII. Contra actos consentidos tácitamente, entendiéndose


por tales aquéllos contra los que no se promueva el juicio de
amparo dentro de los términos que se señalan en los artículos
21, 22 y 218.

(…) Cuando contra el primer acto de aplicación proceda algún


recurso o medio de defensa legal por virtud del cual pueda ser
modificado, revocado o nulificado, será optativo para el
interesado hacerlo valer o impugnar desde luego la ley en juicio
de amparo. En el primer caso, sólo se entenderá consentida la
ley si no se promueve contra ella el amparo dentro del plazo
legal contado a partir de la fecha en que se haya notificado la
resolución recaída al recurso o medio de defensa, aun cuando
para fundarlo se hayan aducido exclusivamente motivos de
ilegalidad.

recurso de revisión en el juicio de amparo directo procede, entre otros supuestos, cuando en la demanda de
amparo se hubiere impugnado la constitucionalidad de una ley, de un tratado internacional o de un reglamento,
pero esta hipótesis requiere, de acuerdo con lo previsto por los artículos 158, último párrafo y 166, fracción IV,
de la Ley de Amparo, no sólo de la existencia de un concepto de violación en contra de la constitucionalidad de
alguna disposición jurídica sino, precisamente, en contra de aquella o aquellas que se hayan aplicado en perjuicio
del quejoso en la secuela del procedimiento del juicio natural o en la sentencia definitiva, laudo o resolución que
hubiere puesto fin al juicio, e influido en el sentido del respectivo fallo, haciendo subsistir ese perjuicio pues lo
resuelto en ellas, es lo que finalmente causa agravio, ello, porque la intervención de la Suprema Corte de
Justicia, en el análisis de la constitucionalidad de leyes o reglamentos o en la interpretación directa de un
precepto de la Constitución Federal, precisa, en todos los casos, de la actualización de un agravio o lesión en la
esfera jurídica del particular, dimanado de la aplicación de las disposiciones jurídicas, que sea susceptible de
reparación."

19
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

Si en contra de dicha resolución procede amparo directo,


deberá estarse a lo dispuesto en el artículo 166, fracción IV,
párrafo segundo, de este ordenamiento."

“ARTÍCULO 166. La demanda de amparo deberá formularse


por escrito, en la que se expresarán:

(…) IV.- La sentencia definitiva, laudo o resolución que hubiere


puesto fin al juicio, constitutivo del acto o de los actos
reclamados; y si se reclamaren violaciones a las leyes del
procedimiento, se precisará cuál es la parte de éste en la que
se cometió la violación y el motivo por el cual se dejó sin
defensa al agraviado.

Cuando se impugne la sentencia definitiva, laudo o


resolución que hubiere puesto fin al juicio por estimarse
inconstitucional la ley, el tratado o el reglamento aplicado,
ello será materia únicamente del capítulo de conceptos de
violación de la demanda, sin señalar como acto reclamado
la ley, el tratado o el reglamento, y la calificación de éste
por el tribunal de amparo se hará en la parte considerativa
de la sentencia;…”

29. Las normas transcritas prevén la procedencia del juicio de amparo


directo cuando el quejoso pretenda refutar la constitucionalidad de una
ley cuyo primer acto de aplicación se haya verificado dentro del juicio y
su ejecución no sea de imposible reparación; así como el trámite que el
peticionario ha de observar en su impugnación. En especial el artículo
166, fracción IV, párrafo segundo, de la Ley de Amparo señala que
cuando se impugne la sentencia definitiva, laudo o resolución que
hubiere puesto fin al juicio por estimarse inconstitucional la ley, el tratado
o el reglamento aplicado, ello será materia únicamente del capítulo de
conceptos de violación.

30. En ese tenor, cuando en la demanda de amparo directo se alega la


inconstitucionalidad de la ley, esto solamente podrá plantearse como
concepto de violación; de ahí que el análisis que debe realizar el tribunal
colegiado en torno a ese tema corresponde al estudio de los conceptos
de violación respectivos y cuyo resultado deberá verse reflejado en la
parte considerativa de la sentencia, análisis que se encuentra sujeto a
que se satisfagan los requisitos que la propia ley establece.

20
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

31. Así las cosas, son infundados los conceptos de violación en los que el
quejoso manifiesta que el tribunal colegiado analizó la
inconstitucionalidad de leyes expuesta como si se tratara de un tema de
legalidad y que dicha autoridad confundió el aspecto sustantivo con las
cuestiones de índole procesal, pues en realidad dicha autoridad de
amparo ciñó su actuación a lo que dispone la ley para el análisis de los
planteamientos de constitucionalidad de leyes en el juicio de amparo
directo, en el cual no son actos reclamados destacadamente, ni la ley
estimada inconstitucional por el quejoso ni su acto de aplicación, y los
órganos legislativos no tienen el carácter de autoridades responsables,
sino que la impugnación se concreta a hacer valer la inconformidad en
los conceptos de violación, y su acogimiento en la sentencia, podrá
conducir únicamente a declarar la inconstitucionalidad del acto de
aplicación y a decretar las consecuencias que correspondan al interior
del proceso, como, por ejemplo, la reposición del procedimiento.

32. Principio de definitividad. En relación a este tema, la quejosa afirma


que es inexacta la conclusión del tribunal colegiado porque, para
reclamar la inconstitucionalidad de un artículo no es requisito agotar
recurso alguno que prepare la violación procesal sino que basta y sobra
que la norma sea aplicada por la autoridad para que el tribunal
emprenda su examen.

33. Ese motivo de agravio es infundado pues, al contrario de lo que sostiene


el recurrente, no basta que en la demanda de amparo se expresen
conceptos de violación en contra de la norma que se considera
inconstitucional para que el tribunal de amparo emprenda su examen,
antes bien, es necesario atender a las reglas previstas en la Ley
Reglamentaria de los artículos 103 y 107 constitucionales respecto del
acto de aplicación.

34. Esto es así porque, en términos del artículo 158 parte in fine, cuando se
impugna la constitucionalidad de una ley, cuyo acto de aplicación

21
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

(surgido dentro del juicio) no sea de imposible reparación ésta sólo se


podrá hacer valer en el juicio de amparo directo que se promueva contra
la sentencia definitiva o la resolución que ponga fin al juicio, en el cual ni
la ley estimada inconstitucional por el quejoso ni su acto de aplicación
constituyen actos reclamados destacadamente, como tampoco los
órganos legislativos tienen el carácter de autoridades responsables, sino
que la impugnación se concreta a hacer valer la inconformidad en los
conceptos de violación y su acogimiento en la sentencia puede conducir
únicamente a declarar la inconstitucionalidad del acto de aplicación y a
decretar las consecuencias que correspondan al interior del proceso.

35. Al respecto, debe partirse de la siguiente premisa fundamental: cuando


se promueve un juicio de amparo en contra de una ley o reglamento con
motivo de su aplicación concreta en perjuicio del quejoso, la autoridad
de amparo no puede desvincular el estudio de la ley o reglamento del
que concierne a su aplicación, pues es ese acto el que causa perjuicio al
promovente del juicio, y no por sí solos, considerados en abstracto, la
ley o el reglamento; de ahí que la autoridad de control constitucional
debe analizar, en principio, si ha lugar a analizar el acto de aplicación
impugnado, pues de no acontecer así, la decisión que se adopte
respecto de ese acto trascenderá a lo que deba decidirse sobre la
norma impugnada.

36. Dicha premisa corresponde con lo que este Alto Tribunal ha resuelto en
el sentido de que la estrecha vinculación entre el ordenamiento general
y el acto concreto de su aplicación impide examinar al uno
prescindiendo del otro, esto, por tres razones fundamentales:

a) La improcedencia del juicio en cuanto al acto de aplicación


necesariamente comprende a la ley o reglamento;

b) La negativa del amparo contra estos últimos, por estimarse


que no adolecen de inconstitucionalidad, debe abarcar el acto
de aplicación, si el mismo no se combate por vicios propios; y

22
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

c) La concesión del amparo contra la ley o el reglamento, por


considerarlos inconstitucionales, en todo caso debe
comprender también el acto de su aplicación.

37. Tal es el contenido que informan las jurisprudencias y tesis aisladas


siguientes:

“LEYES O REGLAMENTOS, AMPARO CONTRA,


PROMOVIDO CON MOTIVO DE SU APLICACION. Cuando se
promueve un juicio de amparo en contra de una ley o
reglamento con motivo de su aplicación concreta en perjuicio
del quejoso, el juez no puede desvincular el estudio de la ley o
reglamento del que concierne a su aplicación, acto éste que es
precisamente el que causa perjuicio al promovente del juicio, y
no por sí solos, considerados en abstracto, la ley o el
reglamento. La estrecha vinculación entre el ordenamiento
general y el acto concreto de su aplicación, que impide
examinar al uno prescindiendo del otro, se hace manifiesta si
se considera: a) que la improcedencia del juicio en cuanto al
acto de aplicación necesariamente comprende a la ley o
reglamento; b) que la negativa del amparo contra estos últimos,
por estimarse que no adolecen de inconstitucionalidad, debe
abarcar el acto de aplicación, si el mismo no se combate por
vicios propios; y c) que la concesión del amparo contra la ley o
el reglamento, por considerarlos inconstitucionales, en todo
caso debe comprender también el acto de su aplicación. 5

“LEYES, AMPARO CONTRA. REGLAS PARA SU ESTUDIO


CUANDO SE PROMUEVE CON MOTIVO DE UN ACTO DE
APLICACIÓN. Conforme a lo dispuesto en la jurisprudencia
número 221, visible en las páginas 210 y 211 del Tomo I del
Apéndice al Semanario Judicial de la Federación, compilación
1917-1995, cuyo rubro dice: "LEYES O REGLAMENTOS,
AMPARO CONTRA, PROMOVIDO CON MOTIVO DE SU
APLICACIÓN.", cuando se promueve un juicio de amparo en
contra de una ley o reglamento con motivo de su aplicación
concreta en perjuicio del quejoso, el Juez de Distrito no debe
desvincular el estudio de la disposición impugnada del que
concierne a su acto de aplicación. De ahí que el juzgador de
garantías debe analizar, en principio, si el juicio de amparo
resulta procedente en cuanto al acto de aplicación impugnado,
es decir, si constituye el primero que concrete en perjuicio del
peticionario de garantías la hipótesis jurídica controvertida y si
en relación con él no se actualiza una diversa causa de
improcedencia; de no acontecer así, se impondrá sobreseer en
5
Sustentada por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en la página
doscientos diez, del Tomo I, del Apéndice de mil novecientos noventa y cinco, Materia Constitucional,
Séptima Época.

23
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

el juicio respecto del acto de aplicación y la norma impugnada.


Por otra parte, de resultar procedente el juicio en cuanto al acto
de aplicación, debe analizarse la constitucionalidad de la
disposición impugnada determinando lo conducente y,
únicamente en el caso de que se determine negar el amparo
por lo que corresponde a ésta, será factible abordar el estudio
de los conceptos de violación enderezados por vicios propios,
en su caso, en contra del acto de aplicación; siendo incorrecto,
por ello, el estudio de estas últimas cuestiones antes de
concluir sobre la constitucionalidad de la norma reclamada”. 6

38. En relación a la preparación de la violación a las leyes del


procedimiento, en los artículos 159 y 161 de la Ley de Amparo se
impone al quejoso la carga de agotar los recursos ordinarios que
procedan contra los actos de aplicación, cuando éstos se verificaron
durante el trámite del procedimiento. Al respecto, en lo que interesa a
este asunto, las disposiciones mencionadas prevén lo siguiente:

“Artículo 159. En los juicios seguidos ante tribunales civiles,


administrativos o del trabajo, se considerarán violadas las leyes
del procedimiento y que se afectan las defensas del quejoso:

(…) III.- Cuando no se le reciban las pruebas que legalmente


haya ofrecido, o cuando no se reciban conforme a la ley; …”

“Artículo 161. Las violaciones a las leyes del procedimiento a


que se refieren los dos artículos anteriores sólo podrán
reclamarse en la vía de amparo al promoverse la demanda
contra la sentencia definitiva, laudo o resolución que ponga fin
al juicio.

En los juicios civiles, el agraviado se sujetará a las siguientes


reglas:

I. Deberá impugnar la violación en el curso mismo del


procedimiento mediante el recurso ordinario y dentro del
término que la ley respectiva señale.

II. Si la ley no concede el recurso ordinario a que se refiere la


fracción anterior o si, concediéndolo, el recurso fuere
desechado o declarado improcedente, deberá invocar la
violación como agravio en la segunda instancia, si se cometió
en la primera.
6
Tesis: P. XVII/99, emitida por el Pleno de este Alto Tribunal, visible en la página treinta y cuatro, del
Tomo IX, abril de mil novecientos noventa y nueve, del Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta, Novena Época

24
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

Estos requisitos no serán exigibles en amparos contra actos


que afecten derechos de menores o incapaces, ni en los
promovidos contra sentencias dictadas en controversias sobre
acciones del estado civil o que afecten el orden y a la
estabilidad de la familia”.

39. La finalidad de preparar la violación a las leyes del procedimiento estriba


en lograr una solución ante las autoridades ordinarias que conocen de la
causa antes de acudir al medio extraordinario de defensa que
representa el juicio de garantías, pues se parte de la base de que el
recurso ordinario que procede en su contra puede dar lugar a que
el acto de aplicación se modifique, revoque o anule y con ello
resulte la intrascendencia de la norma que se califica de
inconstitucional7, de otra manera, es decir, de no agotarse los recursos
ordinarios o medios de defensa correspondientes, se entiende que esa
aplicación se encuentra consentida, pues aun por cuestiones de
legalidad puede ocurrir que la reparación de la violación se lograra y en
esa medida la inconstitucionalidad de la ley ya no trascendería al
resultado del fallo definitivo, de manera que el agotamiento del recurso
tiene esa función preventiva o de solución previa al juicio de garantías.

40. En ese tenor, siendo la regla general que en contra de los actos que
constituyen una violación a las leyes del procedimiento deben agotarse
los recursos ordinarios que procedan en su contra, de acuerdo con el
artículo 11 del Código Civil Federal, las excepciones deben ser
expresamente enunciadas en la propia ley; sin embargo, el caso
específico de la inconstitucionalidad de la ley aplicada en un proceso
judicial, en un auto que no es de ejecución irreparable, no se ubica en
alguna de las excepciones a la obligación de preparar las violaciones
que constan expresamente en el artículo 161 de la Ley de Amparo”.

41. Tales consideraciones dieron origen a la tesis aislada que es del tenor
que ahora se reproduce:

7
Énfasis añadido.

25
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

“INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES EN AMPARO


DIRECTO. CUANDO EL PRIMER ACTO DE APLICACIÓN DE
LA NORMA IMPUGNADA SE ORIGINE DURANTE EL
TRÁMITE DEL JUICIO NATURAL, ES NECESARIO QUE EL
QUEJOSO PREVIAMENTE AGOTE LOS RECURSOS
ORDINARIOS. Los artículos 158, 159, 161 y 166, fracción IV,
de la Ley de Amparo, disponen que el estudio de la
inconstitucionalidad de leyes planteada en el juicio de amparo
directo, está sujeto a que el quejoso haya agotado los recursos
ordinarios y medios de defensa procedentes contra el acto de
aplicación. Lo anterior, porque los preceptos mencionados
disponen que el juicio de amparo directo procede contra
sentencias definitivas, laudos o resoluciones que pongan fin al
juicio; y que el quejoso puede impugnar, vía conceptos de
violación, la inconstitucionalidad de las leyes, tratados
internacionales o reglamentos que se hubieren aplicado en su
perjuicio en el trámite del procedimiento del juicio natural o en
la sentencia, laudo o resolución reclamados; sin embargo, para
que el tribunal de amparo emprenda su examen es necesario
atender las reglas relativas al acto de aplicación previstas en
dicha ley, pues en términos del artículo 158, in fine, cuando se
impugna la constitucionalidad de una ley, cuyo acto de
aplicación, surgido dentro del juicio, no sea de imposible
reparación, ésta sólo podrá hacerse valer en el amparo directo
contra la sentencia definitiva o la resolución que ponga fin al
juicio, cuyos efectos únicamente impactarán al interior del
proceso, de manera que la autoridad de amparo no puede
desvincular el estudio de la ley o reglamento del que concierne
a su aplicación, pues dicho acto es el que causa perjuicio al
promovente. Por lo que respecta a la reclamación de la
violación a las leyes del procedimiento, en el mencionado
artículo 161, se impone al quejoso la carga de agotar los
recursos ordinarios procedentes contra los actos de aplicación,
cuando éstos se verificaron durante el trámite del
procedimiento, con el fin de que, antes de acudir al juicio de
garantías, las autoridades que conocen de la causa logren una
solución, pues el recurso ordinario que procede en su contra,
aun por cuestiones de legalidad, puede modificar, revocar o
anular el acto de aplicación y, en esa medida, la
inconstitucionalidad de la ley no trascendería al fallo definitivo;
de lo contrario, al no agotarse los recursos ordinarios o medios
de defensa correspondientes, se entiende que la aplicación de
la ley se encuentra consentida. Consecuentemente, cuando al
promoverse el juicio de amparo directo en contra de la
sentencia definitiva se haga valer la inconstitucionalidad de
alguna ley, cuyo primer acto de aplicación se originó durante el
trámite del juicio, es necesario que la quejosa agote los

26
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

recursos procedentes contra dicho acto, a fin de cumplir con el


principio de definitividad.”8

42. En tales circunstancias, ha lugar a concluir que no es ilegal la decisión


del tribunal colegiado, antes bien, tal como lo afirmó, el quejoso tiene la
carga de agotar los medios ordinarios de defensa que procedan contra
las resoluciones en las que se haya aplicado la norma que se piensa
inconstitucional antes de acudir al juicio de garantías (con la posibilidad
de que al quedar sin efectos el acto de aplicación sea innecesario
impugnar la constitucionalidad de la norma aplicada) y una vez resueltas
las instancias respectivas, el quejoso podrá entonces impugnar en el
juicio de amparo directo la inconstitucionalidad de la ley que le fue
aplicada en la resolución o acto de origen, si sus efectos aún persisten;
en el entendido de que su planteamiento ha de formularse en el capítulo
de conceptos de violación; de ahí que, cuando al promoverse el juicio de
amparo directo en contra de la sentencia definitiva y se haga valer la
inconstitucionalidad de alguna ley, cuyo primer acto de aplicación se
originó durante el trámite del juicio, es necesario que la parte quejosa
haya agotado los recursos ordinarios procedentes en contra de ese
primer acto de aplicación, a fin de cumplir con el principio de
definitividad, tal como resolvió la autoridad de amparo, esto, con las
salvedades que establece la Constitución en su artículo 107, fracción III,
inciso a), similares a las que la propia Ley de Amparo prevé en el último
párrafo de su artículo 161, que a la letra dicen:

“Artículo 159. En los juicios seguidos ante tribunales civiles,


administrativos o del trabajo, se considerarán violadas las leyes
del procedimiento y que se afectan las defensas del quejoso:

(…) III.- Cuando no se le reciban las pruebas que legalmente


haya ofrecido, o cuando no se reciban conforme a la ley; …”

8
Tesis: 1a. XC/2012 (10ª), emitida por la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
visible en la página mil noventa y nueve, del Tomo VIII, mayo de dos mil doce, del Semanario Judicial
de la Federación y su Gaceta, Décima Época

27
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

“Artículo 107. Las controversias de que habla el artículo 103


de esta Constitución, con excepción de aquellas en materia
electoral, se sujetarán a los procedimientos que determine la
ley reglamentaria, de acuerdo con las bases siguientes:

(…) III.- Cuando se reclamen actos de tribunales judiciales,


administrativos o del trabajo, el amparo sólo procederá en los
casos siguientes:

a) Contra sentencias definitivas, laudos y resoluciones que


pongan fin al juicio, ya sea que la violación se cometa en ellos
o que, cometida durante el procedimiento, afecte las defensas
del quejoso trascendiendo al resultado del fallo. En relación con
el amparo al que se refiere este inciso y la fracción V de este
artículo, el Tribunal Colegiado de Circuito deberá decidir
respecto de todas las violaciones procesales que se hicieron
valer y aquéllas que, cuando proceda, advierta en suplencia de
la queja, y fijará los términos precisos en que deberá
pronunciarse la nueva resolución. Si las violaciones procesales
no se invocaron en un primer amparo, ni el Tribunal Colegiado
correspondiente las hizo valer de oficio en los casos en que
proceda la suplencia de la queja, no podrán ser materia de
concepto de violación, ni de estudio oficioso en juicio de
amparo posterior.

La parte que haya obtenido sentencia favorable y la que tenga


interés jurídico en que subsista el acto reclamado, podrá
presentar amparo en forma adhesiva al que promueva
cualquiera de las partes que intervinieron en el juicio del que
emana el acto reclamado. La ley determinará la forma y
términos en que deberá promoverse.

Para la procedencia del juicio deberán agotarse previamente


los recursos ordinarios que se establezcan en la ley de la
materia, por virtud de los cuales aquellas sentencias definitivas,
laudos y resoluciones puedan ser modificados o revocados,
salvo el caso en que la ley permita la renuncia de los recursos.

Al reclamarse la sentencia definitiva, laudo o resolución que


ponga fin al juicio, deberán hacerse valer las violaciones a las
leyes del procedimiento, siempre y cuando el quejoso las haya
impugnado durante la tramitación del juicio mediante el recurso
o medio de defensa que, en su caso, señale la ley ordinaria
respectiva. Este requisito no será exigible en amparos contra
actos que afecten derechos de menores o incapaces, al estado
civil, o al orden o estabilidad de la familia, ni en los de
naturaleza penal promovidos por el sentenciado; …”

28
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

“Artículo 161. Las violaciones a las leyes del procedimiento a


que se refieren los dos artículos anteriores sólo podrán
reclamarse en la vía de amparo al promoverse la demanda
contra la sentencia definitiva, laudo o resolución que ponga fin
al juicio.

En los juicios civiles, el agraviado se sujetará a las siguientes


reglas:

I. Deberá impugnar la violación en el curso mismo del


procedimiento mediante el recurso ordinario y dentro del
término que la ley respectiva señale.

II. Si la ley no concede el recurso ordinario a que se refiere la


fracción anterior o si, concediéndolo, el recurso fuere
desechado o declarado improcedente, deberá invocar la
violación como agravio en la segunda instancia, si se cometió
en la primera.

Estos requisitos no serán exigibles en amparos contra actos


que afecten derechos de menores o incapaces, ni en los
promovidos contra sentencias dictadas en controversias sobre
acciones del estado civil o que afecten el orden y a la
estabilidad de la familia”.

43. Así como las excepciones previstas en el artículo 73, fracción XIII, segundo
párrafo, que dice:

“Artículo 73. El juicio de amparo es improcedente:


(…)XIII.- Contra las resoluciones judiciales o de tribunales
administrativos o del trabajo respecto de las cuales conceda la
ley algún recurso o medio de defensa, dentro del
procedimiento, por virtud del cual puedan ser modificadas,
revocadas o nulificadas, aun cuando la parte agraviada no lo
hubiese hecho valer oportunamente, salvo lo que la fracción VII
del artículo 107 Constitucional dispone para los terceros
extraños.

Se exceptúan de la disposición anterior los casos en que el


acto reclamado importe peligro de privación de la vida,
deportación o destierro, o cualquiera de los actos prohibidos
por el artículo 22 de la Constitución;”

44. Por otro lado, tal como aduce el recurrente, el supuesto descrito en la
fracción XII del artículo 73 de la Ley de Amparo en el sentido de que es

29
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

optativo para el gobernado impugnar desde luego la inconstitucionalidad de


la ley o agotar el recurso contra el acto de aplicación es la regla que debe
aplicarse para la procedencia del juicio de amparo indirecto en el que se
reclama destacadamente tanto el acto de aplicación como la ley, sin que sea
el caso de aplicarla para la impugnación de la ley en amparo directo, cuya
regulación es diferente, según se explica en la tesis aislada P. VIII/2005
emitida por el Pleno de este Alto Tribunal, de rubro y texto siguientes:

“AMPARO CONTRA LEYES. SUS DIFERENCIAS CUANDO


SE TRAMITA EN LAS VÍAS INDIRECTA Y DIRECTA. Las
características que distinguen a esas vías tratándose del
amparo contra leyes radican, esencialmente, en lo siguiente: a)
En el amparo indirecto la ley es uno de los actos reclamados y
las autoridades legisladoras participan en el juicio como
autoridades responsables, mientras que en el amparo directo la
ley no puede constituir un acto reclamado ni se emplaza como
autoridades responsables a sus autores; b) En la vía indirecta
el amparo concedido contra la ley produce la consecuencia
práctica de invalidarla por cuanto hace al quejoso, por ende, no
se le aplicará mientras esté vigente; en tanto que en la vía
directa el amparo se concede única y exclusivamente en contra
de la sentencia, laudo o resolución reclamada y no contra la
ley, por tanto, la concesión solamente vincula a desaplicar la
ley en ese caso concreto, pero no impide que se le vuelva a
aplicar al quejoso; c) En el amparo indirecto pueden rendirse
pruebas para demostrar la inconstitucionalidad de la ley,
mientras que en la vía directa no existe tal posibilidad, aun
cuando el quejoso pueda apoyarse en las pruebas ofrecidas
ante la responsable para demostrar tal inconstitucionalidad; d)
En el amparo indirecto promovido sin agotar antes algún medio
de defensa ordinario, el Juez de Distrito tiene amplias
facultades para determinar la improcedencia del juicio; en
cambio, en el amparo directo (y en aquellos amparos indirectos
promovidos después de haberse agotado un medio ordinario
de defensa) deben respetarse los presupuestos procesales que
ya estén determinados por la autoridad responsable, tales
como el interés jurídico, la legitimación, la personalidad,
etcétera; e) En el amparo indirecto los Tribunales Colegiados
de Circuito, a partir de las reformas constitucionales de 1994 y
1999, así como de la expedición de diversos Acuerdos
Generales emitidos por el Pleno de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación, como el 5/2001, participan como órganos
de segunda instancia en virtud de la delegación de
competencia que les hace este Alto Tribunal, conforme a la
cual, en determinadas condiciones, resolverán sobre el fondo
del asunto y sus decisiones serán terminales; por su parte, en

30
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

el amparo directo esos órganos son de primera instancia y sus


sentencias también son revisables por la Suprema Corte,
solamente en la materia de constitucionalidad de leyes o
interpretación directa de la Carta Magna; f) En el amparo
indirecto sólo pueden interponer revisión, en defensa de la
constitucionalidad de la ley, los titulares de los órganos de
Estado a quienes se encomiende su promulgación, o quienes
la representen, en tanto que en el amparo directo, como ya se
dijo, no participan los órganos legiferantes y, por ende, no son
ellos quienes pueden interponer la revisión; en cambio, en
muchos casos, la autoridad que aplicó la ley figura como
tercero perjudicado y puede, con ese carácter, hacer valer
dicho recurso; y, g) En el amparo indirecto el Juez de Distrito
resuelve sobre la suspensión de los actos reclamados,
mientras que en el directo esa decisión le corresponde a la
autoridad responsable.”9

En esas circunstancias, son inoperantes los conceptos de violación en


los que se exponen las razones por las que, en concepto del quejoso,
los artículos 705 y 714 del Código de Procedimientos Civiles para el
Distrito Federal son inconstitucionales, ante el obstáculo que existe para
emprender el estudio de esos alegatos.

VI. DECISIÓN

45. En las relacionadas condiciones, dado que los agravios expresados por
la recurrente resultaron inoperantes en una parte e infundados en otra y
no existe queja deficiente que suplir, procede desestimar el recurso y
confirmar la sentencia recurrida.

En consecuencia, esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de


la Nación;

RESUELVE:

PRIMERO. Es infundado el recurso de revisión a que este toca se


refiere.

9
Consultable en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo XXI, marzo de dos mil cinco, página
5, Novena Época.

31
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

SEGUNDO. En lo que es materia de este recurso de revisión, se


confirma la sentencia que negó el amparo al quejoso.

Notifíquese; con testimonio de esta resolución, vuelvan los autos al


Tribunal Colegiado de origen y, en su oportunidad archívese el
expediente como asunto concluido.

Así lo resolvió la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de


la Nación, por unanimidad de cinco votos de los señores Ministros:
Jorge Mario Pardo Rebolledo, José Ramón Cossío Díaz (Ponente),
Guillermo I. Ortiz Mayagoitia, Olga Sánchez Cordero de García Villegas
y Presidente Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.

Firman el Ministro Presidente de la Sala y el Ministro Ponente, con


el Secretario de Acuerdos que autoriza y da fe.

PRESIDENTE DE LA PRIMERA SALA

MINISTRO ARTURO ZALDÍVAR LELO DE LARREA.

PONENTE

MINISTRO JOSÉ RAMÓN COSSÍO DÍAZ.

SECRETARIO DE ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA

LIC. HERIBERTO PÉREZ REYES.

32
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1688/2012

En términos de lo previsto en los artículos 3°, fracción II, 13, 14 y 18 de la Ley


Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta
versión pública se suprime la información considerada legalmente como reservada o
confidencial que encuadra en esos supuestos normativos.

33

Você também pode gostar