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ASIGNATURA

Geografía Económica

TEMA DE INVESTIGACIÓN
Geografía Ganadera en Colombia

PRESENTO POR:
Luz Esther Acosta
4141710032
Juan Davis Lambis
4141710043
Juan Antonio Mendoza
4141710040

DOCENTE:
Keren Brunal

Cartagena De Indias D. T. y C. 06 de junio de 2019


LA GANADERÍA BOVINA EN COLOMBIA
Objetivo:

Identificar las zonas con mayor producción ganadera en el país resaltando la


importancia de estas en la economía nacional.
INTRODUCCION.
La noción de ganadería se utiliza con relación al ganado: el grupo de animales de
carga o trabajo que se desplazan y se alimentan en conjunto. El término puede
indicar al conjunto de ganados de un productor o de una zona, o a la actividad
consistente en la cría y la comercialización de estas especies.
Como actividad económica, la ganadería se basa en la explotación de animales
domesticables con fines productivos, aprovechando su carne, cuero, leche, etc. El
sujeto dedicado a la ganadería recibe el nombre de ganadero.
La ganadería colombiana durante muchos años ha estado determinada por
diferentes sectores como el agropecuario, el comportamiento del mercado, la
evolución económica del país entre algunos otros, todos estos pueden favorecer o
afectar la productividad y por supuesto la rentabilidad de este sector.
El que este sector crezca o decrezca depende en gran medida de las diferentes
alternativas tecnológicas que vallan llegando y que sean adquiridas por los
productores dependiendo de su capacidad económica.
Aunque resulta de gran importancia resaltar que las ganancias de este sector
dependen en gran medida del componente humando, como su disponibilidad la
calidad del suelo, el capital para invertir y lógicamente del conocimiento que se
tenga en esta materia.
Zonas ganaderas en Colombia
En este trabajo nos enfocaremos en la ganadería bovina la cual tiene mayor
presencia en los departamentos de Antioquia, Córdoba, Casanare, Meta y
Santander.
El departamento de Antioquia es líder en producción bovina debido a varios factores
relacionados con las condiciones climáticas propias del departamento y la
especialización de los sistemas productivos de acuerdo a sus zonas. Mientas que
Córdoba a pesar que no es líder en el sector es una de las regiones ganaderas más
importantes del país, con muchas riquezas naturales cuenta con dos ríos, el Sinú y
el San Jorge, así mismo posee una diversidad tanto en ciénagas como en represas,
esto le permite desarrollar la agricultura, pesca y sobretodo, la ganadería. Según un
artículo del heraldo del 29 de octubre de 2018 Montería es catalogada como la
capital ganadera de Colombia, este calificativo se debe a que es la región que
aporta el 1,79% a la economía nacional, es por eso que el departamento de Córdoba
se considera como la región del país mejor posicionada en cuanto al sector
ganadero se refiere, según datos suministrado por la Cámara de Comercio de
Montería, la economía de esta región, en gran medida, depende de la agricultura,
pesca y silvicultura, pero se destaca la gran relevancia que tiene para la región la
ganadería.
Casanare es uno de los departamentos más importantes en materia ganadera del
país. La amplia existencia que tiene, la zona geográfica en la que está ubicada el
departamento, y las opciones en materia alimenticia que tienen los bovinos, lo hacen
muy atractivo para los inversionistas, así mismo en el departamento del Meta la
ganadería es una de las actividades económicas más importantes ya que hace parte
de su cultura. Por ultimo tenemos al departamento de Santander al cual resaltamos
su importancia porque es un departamento con alto potencial y tiene bastantes
áreas de oportunidad para hacer crecer el hato bovino regional y a su vez producir
crecimiento a escala nacional. Esto va a representar resultados como mayor
producción de carne y de leche, mayor eficiencia en el sistema de producción y
mayor retorno de la inversión de manera más eficiente y rápida.
REGIONALIZACIÓN
En Colombia la ganadería se desarrolla a lo largo y ancho de toda la geografía
nacional. La actividad se desarrolla en regiones ganaderas bien definidas:
1. Zona Norte o Llanuras del Caribe: conformada por los departamentos de
Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena, Sucre y norte de
Antioquia. La región está dedicada en su gran mayoría a la ganadería de
carne y doble propósito (carne y leche).
2. Zona del Valle del Magdalena y Región Andina: incluye los departamentos
de Boyacá, Caldas, Cundinamarca, Huila, Norte de Santander, Santander,
Tolima y sur de Antioquia. Predomina la ganadería de leche y doble
propósito.
3. Zona del Valle del Río Cauca: que comprende los departamentos de Cauca,
Valle del Cauca, Quindío y Risaralda.
4. Regiones del Sur: integrada por Vaupés, Putumayo, Caquetá y Nariño. Es
una región con algunas perspectivas para ganadería de leche en Caquetá,
Sibundoy (Putumayo) y Nariño.
GEOGRAFÍA GANADERA EN COLOMBIA
Debido a la topografía colombiana, las tierras dedicadas a la ganadería son muy
variables, pero permiten hacer una división en dos grandes grupos -las tierras de
valles o mesetas planas y las de pie de monte-. La primera agrupación se puede a
su vez subdividir en: primero las tierras de la costa (o valles de ríos con acceso a la
costa, tales como el Sinú y el interior del gran valle del Magdalena), segundo las
mesetas del interior tales como Bogotá, que se extiende hasta los llanos de Boyacá,
y tercero los grandes y poco desarrollados e inhabitados llanos o “pampas” del
Orinoco, al oriente de la cordillera Oriental, que no cuenta prácticamente con
ninguna forma de acceso a los mercados y de la cual sería casi imposible exportar
ganado bajo las presentes circunstancias.
Las condiciones en las primeras subdivisiones mencionadas son básicamente
tropicales. Estas tierras están constituidas sobre todo por los valles de los ríos Sinú,
Magdalena, Cauca y Patía, y los distritos de poco desarrollo hacia el interior, como
son la región al sur de la Sierra Nevada de Santa Marta y la cercana al río Cesar.
El Valle del Cauca no es tropical como los demás valles mencionados, debido a su
situación en el interior, entre las estribaciones de la cordillera Occidental y la gran
cordillera Central, con una altitud de 3.000 pies sobre el nivel del mar. No obstante,
las condiciones para la ganadería en el valle del río Cauca son muy similares a
aquéllas de las regiones tropicales mencionadas.
En estos distritos, las tierras estaban cubiertas originalmente por vegetación tropical
y se daban las maderas nobles que se han ido derribando para desmontar el
terreno. Fue necesario, además, sembrar pasto artificial como el Brachiaria y el
pasto Guinea y poner cercos alrededor de los nuevos pastizales. Las garrapatas y
las enfermedades cunden, razón por la cual el ganado debe ser tratado con sueros
inmunizantes para la prevención de enfermedades.
En la segunda subdivisión -la que corresponde a las mesetas de interior como la de
Bogotá y a menor escala la de Popayán y Pasto y la reciente ubicada en Neiva- el
clima es mucho más fresco y la altitud oscila entre los 7.000 y los 9.000 pies, con
extensiones de tierra más abiertas, con pasto corto de mejor calidad y propiedades
alimenticias. En estas tierras prima la importación de razas. En Bogotá, por ejemplo,
se le da mucha atención a la ganadería y al mejoramiento de los hatos ya sea de
razas criollas o seleccionadas. En la gran mayoría de los casos, el ganado no es
para la exportación, debido a los altos costos del transporte y las grandes distancias.
La producción se proyecta para los mercados locales.
En la tercera subdivisión se ubican los llanos, en donde, de nuevo las condiciones
son diferentes. Las grandes estribaciones de la cordillera Oriental se funden en el
suelo for- 194 Colombia: manual comercial e industrial mando grandes planicies
bañadas por vertientes de muchos ríos y quebradas afluentes del Orinoco. Aquí se
encuentran cientos de miles de acres de tierra plana, la mejor para el levante de
ganado, con agua proveniente de los ríos Casanare y Meta, que desembocan a su
vez en el río Orinoco. El Casanare es el sector de mayor desarrollo de la ganadería
en esta región en la actualidad y se cree que hay más de 300.000 cabezas de
ganado. Algunas fincas tienen hasta 20.000 cabezas en una sola propiedad. Existen
en total unas 200 fincas dedicadas a la ganadería, de las cuales hay algunas que
solo tienen unas pocas cabezas de ganado y unos cuantos caballos. Al parecer la
dificultad en estos llanos es el aislamiento y la dificultad de acceso a los mercados.
El ganado no puede llevarse ni siquiera al mercado de Bogotá, debido a la gran
distancia y a las dificultades del viaje, que requiere el paso por la cordillera.
Es importante la distinción entre los términos “llanos” y “selvas”; los llanos designan
las planicies abiertas y sin árboles que se extienden por la cuenca del Orinoco,
mientras que las “selvas” hacen referencia a sectores madereros muy al sur del
país, cuyos ríos desembocan en el Amazonas. Muchas descripciones maravillosas
de estos llanos pueden ser leídas y escuchadas en el país en las que se describe
una región de ilimitada riqueza en total subdesarrollo, mientras que otras historias
hacen referencia a su fertilidad e incalculable valor. Evidentemente, hoy por hoy
estas tierras no se reconocen como un factor económico dentro de la riqueza
nacional, debido a su localización distante e inaccesible y es lejana, para el país y
el mundo, su posible productividad. Existe en esta región un pasto natural, largo y
abundante, pero se considera que no es buen alimento para el ganado. Las vastas
zonas permiten la ganadería extensiva y pueden convertirse en una gran despensa
para generaciones futuras, pues las extensiones de tierra de los Estados Unidos,
Argentina y otros países, están siendo cada vez más utilizadas para la agricultura.
A la fecha existen muchas dificultades y desventajas, entre las cuales se mencionan
las siguientes, (1) la distancia de los mares y el hecho de estar “desconectados” del
resto del país por el encierro de las grandes montañas, sobre las cuales no existen
carreteras ni caminos de penetración, (2) los grandes pantanos y tierras cenagosas,
(3) el clima pestilente, (4) la ausencia de un clima predecible, con estaciones
definidas. Durante ocho meses del año, hay exceso de lluvias, período en el cual
las tierras se anegan, convirtiéndose literalmente en lagos de gran extensión, y el
ganado debe ser conducido a partes altas o a las colinas. Durante la temporada
seca, las quebradas y arroyos se secan (dejando a su paso pantanos fangosos y
charcos de lodo) y queda la región sin agua, por lo cual el ganado debe ser llevado
a los planos
En la segunda división de áreas ganaderas se podría incluir la gran variedad de
tierras localizadas sobre el nivel de los valles, constituida por estribaciones, cuestas
y laderas de las altas montañas desde 4.000 hasta 10.000 pies de altura sobre el
nivel del mar. Aquí se encuentra ganadería a baja escala, es decir, que no existen
grandes hatos ni tierras con cercos. Cerca de las montañas se encuentran pueblos
y caseríos en los que se siembra pasto artificial para asegurar un buen ganado y
producción de leche. Esto se aplica, en particular, en el Departamento de Antioquia.
El ganado que se encuentra en las regiones montañosas es siempre de más baja
calidad que el de los valles y el engorde promedio es de 600 a 800 libras, mientras
que un novillo de 5 años de edad del Cauca o del Sinú alcanza las 1.000 o las 1.200
libras de peso. Las enfermedades se esparcen con facilidad y el ganado necesita
vacunación frecuente. También abundan las garrapatas, junto con otras plagas que
afectan el ganado.
¿Qué tipo de raza bovina debería tener de acuerdo al piso térmico?
Debido a su ubicación geográfica, Colombia presenta todos los pisos térmicos. Por
esta razón, es importante que los ganaderos tengan claras las razas que mejor se
adaptan a las condiciones que hay en la región en que se encuentran y así obtener
de ellas altos niveles productivos. El país cuenta con una gran variedad de paisajes
y climas, pues su territorio se extiende sobre la Cordillera de los Andes y las
diferentes alturas influyen en la diversidad de vegetación y en la fauna. A pesar de
ser un país tropical, también tiene zonas de temperaturas bajas en las regiones más
elevadas.
El piso térmico cálido
Comprende alturas entre los 0 y 1.000 metros sobre el nivel del mar, msnm, con
una temperatura media de 25° a 30°C. Estos territorios cubren cerca de 913 mil
km2, lo que corresponde al 80 % del territorio nacional. En este piso se encuentran
las llanuras costeras del Pacífico y el Caribe, los valles del río Magdalena, Cauca y
Cesar, así como las extensas llanuras del Orinoco y el Amazonas. Según la
Asociación Colombiana de Criadores de Ganado Cebú, Asocebú, Colombia cuenta
con cerca de 40 millones de hectáreas dedicadas a la actividad ganadera. Más de
un 60 % de estos terrenos están ubicados en altitudes menores a los 1.000 msnm.
En este clima predominan las razas cebuinas como Brahman, Guzerá, Gyr, y sus
cruces. Según datos de la Encuesta Nacional Agropecuaria, por lo menos el 95 %
del hato nacional tiene genética cebuina. Por ejemplo, los ejemplares Brahman se
adaptan más a las condiciones tropicales y son más longevos. Reconocidos por su
producción de carne, se encuentran sobre todo en la región Caribe, en el Magdalena
Medio, en los Santanderes y en los Llanos Orientales, En este clima también se
puede encontrar la raza Gyr, que es originaria de Brasil y se destaca por su
producción. Además, tienen habilidad para sobrevivir, crecer y reproducirse
eficientemente en el trópico colombiano.
En cuanto a la raza Guzerá, hay cerca de 15 mil 900 cabezas registradas en el país,
distribuidas en el Magdalena medio, el Eje cafetero y la Costa Atlántica. Esta
especie se adapta fácilmente a medios adversos, y resiste variaciones térmicas de
5 a 45°C. Generalmente, habita en tierras semibajas, con precipitaciones anuales
entre 500 y 650 mm. Es ideal para la zona tropical seca en cualquier topografía.
También se puede cruzar con el Holstein para obtener el Guzolando, que funciona
en ambientes similares.
En clima cálido también se dan las razas criollas, como son el Romosinuano y el
Hartón del Valle. El primero tuvo su origen en el valle del río Sinú, que corresponde
a la zona de Bosque seco tropical, con una temperatura media de 27,5°C y 1.200
mm de precipitación anual. El segundo tuvo su asentamiento en el valle del río
Cauca, un afluente que constituye la división de las cordilleras Central y Occidental.
Este valle, con altura promedio de 950 msnm, tiene una temperatura media de 24°C
y precipitación anual de 644 a 1.636 mm. Germán Palomino, propietario de la
hacienda Verona, ubicada en Zambrano, Bolívar, se ha dedicado a la cría de estos
ejemplares y de sus cruces, por su rusticidad a las difíciles condiciones del clima
cálido “El 90 % de nuestra ganadería es Hartón puro. Es un animal de pelo corto,
totalmente adaptado al trópico. Además, tiene una alta capacidad de dejar preñadas
a las vacas. Usted puede colocar un toro Hartón a 80 vacas, y se las preña todas
sin ningún problema”, aseguró.
Los animales que mejor se adaptan al clima templado
El piso térmico templado es aquel que se encuentra entre 1.000 m y 2.000 m y una
temperatura media entre 17° y 24° C. En el país, este piso corresponde al 10 % del
territorio, que corresponde a 114 mil km2, ubicándose en las zonas bajas de las
montañas.
Una gran parte de la región Andina tiene clima templado, en zonas como el Eje
Cafetero y departamentos como Antioquia, Boyacá, Cundinamarca y Nariño. Aquí
se desempeña de gran manera la raza Simmental, que se destaca por ser de doble
propósito. Aunque en Colombia se encuentran toros puros en pastoreo en todos los
pisos térmicos, desde el nivel del mar hasta los 3.000 msnm, los núcleos puros se
encuentran principalmente desde los 800 msnm en adelante. Esta especie se
concentra en la zona centro, en departamentos como Risaralda, Quindío y Valle del
Cauca, y en Antioquia. Según datos de la Asociación de Criadores de Ganado
Simmental-Simbrah y sus Cruces, Asosimmental, de los 69 mil animales registrados
en el país, cerca del 30 % está ubicado en este departamento. (Lea: Razas
Simmental y Simbrah se posicionan en Antioquia)
Actualmente, hay una población de más de 2.800 animales puros, que corresponde
al 12 % del ganado criollo del país. El 77 % de ganado BON se encuentra en
Antioquia, Risaralda y Caldas.

La Holstein, la raza más conocida de lugares en los que predomina el frío


El piso térmico frío se ubica entre los 2.000 y 3.000 msnm, y posee una temperatura
que va entre los 12 y los 17°C. Cubre 93 mil km2, que equivalen al 7.9 % de la
extensión total del país. En este clima, la raza Holstein predomina en zonas como
en el Altiplano cundiboyacense y departamentos como Cauca y Putumayo. Cuando
se hacen cruces, puede encontrarse en el trópico bajo. (Blog: Recomendaciones
para criar ganado Holstein).Esta especie se trabaja para lecherías especializadas.
De acuerdo con las bases de datos de la Asociación Holstein de Colombia, en el
país hay un millón 500 mil cabezas con esta especie, la cual puede llegar a producir
entre 20 y 22 litros de leche diariamente.
Se han encontrado ganaderías dedicadas a esta raza en alturas superiores a los
3.000 metros, como en Cundinamarca. Los toros tienen una buena estructura y
amplitud torácica, lo que les permite captar mejor el oxígeno, que es menos
abundante en esta altura.
“La Holstein no aguanta alturas de más de 2.800 o 3.000 metros sobre el nivel del
mar, porque les da muy duro. A una raza Ayshire no le da tan duro y una Normando
sí se comporta muy bien a esas alturas”, sostuvo. En efecto, a pesar de que la raza
Normando pura se ha desarrollado en una gran variedad de climas y altitudes, un
estudio determinó que el 69,5 % de una muestra de ejemplares se comportó mejor
entre los 2.000 y 3.000 msnm. (Galería: Normando, una raza que vale por dos) De
igual manera, el altiplano Cundiboyacense y el departamento de Caldas reúnen el
86,3 % de los animales, y el 29 % se ubican por encima de esta altura. Se pueden
encontrar en zonas más bajas, en cruces con ganado cebuino, lo que resulta en una
mayor precocidad, mejor producción lechera y aptitud materna.
La experiencia de la ganadería en páramo
Este piso térmico es el que comprende áreas situadas entre los 3.000 y 4.000
msnm. Las temperaturas varían de 6 a 12°C. Abarca 23 mil km2, que corresponden
al 2 % del territorio nacional. Se localiza en la parte superior de las montañas.
En este punto, la raza más adaptada es la Normanda, que por su rusticidad y aptitud
para transformar de forma económica los forrajes de poca calidad en carne y leche,
le permiten adaptarse como raza pura por encima de los 1.800 hasta los 4.200
msnm. Sin embargo, para el médico veterinario, lo más importante en estos casos,
no es solamente la elección de la raza, sino también el manejo que se les da a las
reses. (Lea: La estrategia para conseguir un manejo integral de la vaca de cría)
Esta variedad de pisos térmicos le permite a Colombia una amplia posibilidad a la
hora de desarrollar la ganadería bovina por lo cual es de vital importancia que el
empresario ganadero tenga conocimiento de estos factores para una mayor
productividad de la actividad.

Producción del ganado bovino y factores ambientales en las regiones


El ganado bovino tiene relaciones complejas con los paisajes en que se establece
y con sus diferentes componentes, reflejando no solo las lógicas económicas de la
producción pecuaria sino las interacciones ecológicas, e importantes valores
culturales como se presentará en este escrito. Los paisajes ganaderos son la
expresión de interacciones entre el medio natural y las actividades humanas que
involucran a los bovinos y a una gran diversidad de cultivos asociados, áreas
naturales y diversos tipos de vínculos sociales de uso y apropiación simbólica de la
base biofísica, los cuales terminan conformando múltiples entornos que cambian en
el tiempo y el espacio y, son controlados por factores diferentes, pero altamente
relacionados.
Los paisajes intervenidos por la ganadería bovina son difíciles de diferenciar
formalmente en su dimensión espacial, pues no tienen una dinámica regular, se
transforman en el tiempo debido a diversos factores y varían en función de
complejas y numerosas formas de decisión. Las transformaciones en las unidades
de paisaje se expresan como resultado de cambios de composición (cobertura del
suelo), cambios de las configuraciones (geométricos y/o topológicos) o cambios
contextuales (Gaucherel et al. 2012), por tanto no hay una configuración única del
paisaje ganadero
La ganadería bovina es señalada frecuentemente como una de las causas del
deterioro ambiental global y de destrucción de los ecosistemas; sin embargo, las
transformaciones de los paisajes en que se desarrollan son diversas en su carácter
y alcance. La detección de los cambios y de la persistencia de los mismos debe
basarse en estudios de caso regionales y en análisis espaciales y temporales, solo
así se puede dar cuenta de las principales variaciones en la frecuencia y magnitud
de la transformación
La ganadería en Córdoba.
Córdoba es una de las regiones ganaderas más importantes del país, con muchas
riquezas naturales cuenta con dos ríos, el Sinú y el San Jorge, así mismo posee
una diversidad tanto en ciénagas como en represas, esto le permite desarrollar la
agricultura, pesca y sobretodo, la ganadería.
Para la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) se evidencia que Córdoba
es el segundo departamento con más especies bovinas del país, con 1’942.770
cabezas. El primer puesto lo conserva el departamento de Antioquia.
Justamente dentro del sector pecuario, el ganado bovino participa a nivel nacional
con el 85,9 por ciento, seguido por los caballos que representan el 3,5 por ciento y
por los búfalos que participan con el 3,3 por ciento.
Según datos del Dane, el sacrificio de ganado vacuno en Córdoba alcanzó en el
primer trimestre de este año la cifra de 74.532 cabezas que se traducen en un
aumento del 9,5 por ciento con relación al mismo periodo del 2017.
Córdoba es uno de los departamentos con mayores envíos de carne al resto del
mundo. Dentro de su oferta exportadora, el segundo producto es la carne bovina,
tanto congelada como refrigerada, con una participación de 10,7 por ciento.
Montería es catalogada como la capital ganadera de Colombia, este calificativo se
debe a que es la región que aporta el 1,79% a la economía nacional, es por eso
que el departamento de Córdoba se considera como la región del país mejor
posicionada en cuanto al sector ganadero se refiere, según datos suministrado por
la Cámara de Comercio de Montería, la economía de esta región, en gran medida,
depende de la agricultura, pesca y silvicultura, pero se destaca la gran relevancia
que tiene para la región la ganadería.
Este departamento es uno de los productores y exportadores de carne bovina más
importantes a nivel nacional e internacional. Esta actividad sigue creciendo
significativamente en el departamento, lo cual contribuye directamente con el
crecimiento y desarrollo económico de la región.
La producción de leche es otra línea de este subsector, en Colombia del total de
cabezas, 3’428.202, están dedicadas a esta actividad. Córdoba ocupa el tercer lugar
en producción de leche y destina 136.729 cabezas de ganado.
Los terrenos del departamento de Córdoba son productivos y actos para el
desarrollo de la ganadería. Su suelo ha sido propicio para la producción de reses,
ya que contiene diferentes minerales y nutrientes los cuales son fundamental en el
complejo proceso de producción ganadera. Las zonas más fértiles del departamento
que se pueden resaltar son el valle y la zona alta del San Jorge y las sabanas
sinuanas.
El tema de los nutrientes de suelo es muy importante para lograr un ganado de
calidad ya que Córdoba es una potencia nacional en producción de carne y es por
eso que se necesita que las reses tengan más alimento para consumir.
Los productores cordobeses de ganado se han preocupado por que este sea de alta
calidad y en la actualidad es reconocido en el sector tanto nacional como
internacional, por tal razón el ganado cordobés es muy apetecido y muchos
ganaderos de otras regiones del país se dirigen a Montería a la hora de comprar
ganado de cría.
En Córdoba se trabaja en el mejoramiento los sistemas silvopastoriles intensivos
para la producción de carne natural, que muestran el potencial que existe y a la vez
mejoran la sostenibilidad ambiental y el ingreso de los grandes y pequeños
ganaderos, estos últimos esperan que el estado los apoye con los recursos
económicos suficientes para que se pueda realizar adecuadamente la totalidad del
proceso productivo.
Conclusión
En Colombia la ganadería es muy importante ya que se practica en con doble
finalidad la de producir carne y leche para el consumo humano, además es un país
que por su diversidad climática es apto no solo para un tipo de raza en los que a
ganado bovino se refiere.

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