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Después de que Luis Pérez Gutiérrez, gobernador de Antioquia, expidiera un decreto para

controlar el consumo de drogas en espacios públicos, se desató una serie de opiniones


sobre la medida. La Asamblea Departamental no estuvo ajena a la discusión, algunos
miembros vieron con buenos ojos el decreto y otros lo calificaron como absurdo para
solucionar la problemática de adicción a las drogas y el narcotráfico en la región.
El mandatario expuso el pasado sábado 20 de julio, en su discurso de conmemoración de
la Independencia de Colombia, un decreto que busca restringir el consumo de sustancias
psicoactivas en los espacios educativos, deportivos y públicos de uso cotidiano de niños,
niñas y adolescentes en todos los municipios del departamento.

Quien incumpla el decreto recibirá una multa de 16 a 32 salarios mínimos diarios vigentes.

De acuerdo con el decreto, se restringe el consumo de droga entre las 6:00 a.m. y 8:00 p.m.
en el entorno de 100 metros a la redonda de los establecimientos educativos que prestan
los servicios de buen comienzo, preescolar, básica y media. Además, se prohíbe el uso de
marihuana y sustancias psicoactivas en escenarios deportivos y parques públicos de 6:00
a.m. a 10:00 p.m. en todo el departamento.

Para Norman Correa, diputado de la Asamblea Departamental por el Partido de la U, la


medida es afortunada para los antioqueños porque podría alejar a las personas del
consumo y la venta de sustancias psicoactivas.

El espacio público debe ser para educar y no para pervertir o inducir a niños, niñas y
adolescentes a malas prácticas de vida. Con la restricción del uso de drogas en parques,
escenarios deportivos y colegios se promueve la convivencia y la armonía social.

“El espacio público debería ser un lugar libre de jíbaros y consumidores que dan mal
ejemplo. Este es un decreto que no solo es benéfico para los niños, también lo es para los
padres de familia que buscan un lugar de esparcimiento y de unión con sus hijos. De esta
manera, nos aseguramos que ellos dispongan de los sitios de encuentro ciudadano no
como lugares de consumo de sustancia psicoactivas, sino como lugares de encuentro
familiar y de recreación”, afirmó Correa.

Por su parte, el diputado por el Polo Democrático, Luis Eduardo Peláez, aseguró que el
decreto va en contra de la Constitución y de la Corte Constitucional al modificar el Código
de Policía. Reiteró que la competencia de restringir las libertades de las personas está a
cargo del Congreso de la República y el Presidente.
El gobernador y quienes firmaron el decreto están haciendo extralimitación de sus funciones
“El gobernador y quienes firmaron el decreto están haciendo extralimitación de sus
funciones. A todas luces, este decreto es ilegal. Vamos a tomar dos acciones que
estaremos informando el próximo lunes 29 de julio. Presentaremos una acción de nulidad
ante el Tribunal Administrativo de Antioquia y una denuncia por extralimitación de funciones
ante la Procuraduría General de la Nación”, expresó el diputado.

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