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1.

Las escrituras son la palabra de


Dios
Por Gerson Moreno

Introducción

Es muy claro para una persona, que al menos se considera cristiana, que la
Biblia se trata de la palabra de Dios, aún para muchos que no asisten a una
iglesia como tal, es fácil que identifique la Biblia como una declaración
supuesta de un Dios.

Sin embargo, a pesar de la certeza que tenga una persona sobre si la biblia
se trata de la palabra de Dios o no, no necesariamente esto indica que la
dicha persona pueda demostrarlo en sí, ni en su propia vida ni con los
argumentos necesarios. Es de esta manera que mediante este pequeño
texto me he propuesto establecer los principios que permiten ver a la
Biblia como la infalible palabra de Dios.

Acerca de la palabra de Dios creemos:

1. La biblia a pesar de ser escrita por hombres en un periodo de 1500


años entre unos 40 hombres entre el antiguo y el nuevo
testamento, lo que implica diferentes épocas y contextos. Sin
embargo, es claro que la única forma en la que no habrían
contradicciones que hicieran del texto algo absurdo y sin una línea
lógica, es si han sido “inspiradas” por alguien o algo, que evidente
traspasara el tiempo, y, como nadie puede vivir un milenio, es claro
que la inerrancia de las escrituras se deben a la inspiración de Dios.
Tal como lo afirma 2 de Timoteo 3: 16.
2. Por el hecho de que hayan sido inspiradas por Dios a través de su
Espíritu y exhaladas a los hombres que las escribieron, nunca serán
de interpretación privada, sino que un solo texto en la palabra de
Dios tiene una única interpretación aunque tenga múltiples
aplicaciones. 2 de Pedro 1: 20-21
3. Por el hecho de haber sido inspirada por Dios, nadie tiene la opción
de quitarle o agregarle información, sin disminuir las verdades que
Dios ha querido que allí estén consignadas o de poner cosas en la
“boca” de Dios que claramente él mismo no ha dicho. “Yo testifico a
todos los que oyen las palabras de la profecía de este libro: Si
alguno añade a ellas, Dios traerá sobre él las plagas que están
escritas en este libro; y si alguno quita de las palabras del libro de
esta profecía, Dios quitará su parte del árbol de la vida y de la
ciudad santa descritos en este libro” Apocalipsis 22:18-19
4. Dado que Dios mismo ha sido el que inspiró la biblia y que no es
posible, que bajo su cuidado y supervisión, le haya sido quitado u
añadido algo que no hace parte de su voluntad revelada es que es
posible afirmar que Jesús afirmó categóricamente que “la palabra
de Dios es verdad” Juan 17: 17.
5. Si su palabra es la voluntad y verdad reveladas de Dios, entonces
deben contener lo suficiente y ser la autoridad última para el
conocimiento acerca de quién es Dios y no hay nada, ni aún
confesiones u otras directrices que puedan añadir o estar por
encima de lo que la Santa Palabra de Dios tiene todo lo necesario
para conocer acerca de quién es Dios, quién es el hombre y cómo
se efectuó la salvación del hombre a través de la obra consumada
de Jesucristo. En medio de esta claridad es evidente que hay
muchas otras cosas que no son tan fáciles de entender pero que
están para que con la minuciosidad del estudio de la palabra
puedan ser descubiertas como “la perla de gran precio”.
6. Si existen aquellas cosas que no son tan fáciles de entender, la regla
número uno de la interpretación bíblica es que ella se interpreta a sí
misma. Es muy claro esto, cuando Jesús mismo es tentado y
responde a la escritura que menciona Satanás con el fundamento
de la cita bíblica.
Mateo 4:5-7 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
5 Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el
pináculo del templo,
6 y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está:
A sus ángeles mandará acerca de ti, m y,
En sus manos te sostendrán,
Para que no tropieces con tu pie en piedra. m
7 Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.

Salmos 119:160 Reina-Valera 1960 (RVR1960)


160 La suma de tu palabra es verdad,
Y eterno es todo juicio de tu justicia.

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