Você está na página 1de 4

45505 Dialectología Española

Cristina de Nazaré
2004/2005
EL NAVARRO.

-Es la primera vez que en un manual de dialectología tiene entrada el navarro.


La precaria atención merecida suele situarse bajo “navarro-aragonés” (por una visión integradora, pues
dentro del espacio geográfico pertinente, las coincidencias son considerables). Actualmente apenas se
menciona el dialecto navarro, pese a haberse mantenido la entidad Navarra.
El motivo de esta omisión puede radicar en el desconocimiento de su existencia, de una variedad dialectal
diferenciada. De ahí la falta de un nombre específico.
El autor considera el navarro como dialecto de transición entre el aragonés y el castellano.

El sentimiento idiomático medieval y su pérdida.


-Las causas de marginación hasta hace poco del navarro: falta de fuentes documentales, su pronta
desaparición y el olvido de su existencia en la misma Navarra.
-El navarro desapareció con rapidez a comienzos del S.XVI, igualado, más que sustituido, por el castellano,
en virtud de un proceso de convergencia (surgiendo así la falsa creencia de que en Navarra se hablaba
castellano antiguo).
-a diferencia del aragonés, no se mantuvo en los ámbitos rurales ni desarrolló una literatura pseudopopular.
Sólo entrando en el presente siglo se componen, escasos en número y calidad, algunos cuadros
costumbristas y narraciones breves.
-Hubo una vivencia idiomática manifestada reiteradamente en la sociedad medieval. ( los fueros generales
de Navarra,1237; el acta de proclamación de reyes de Felipe III y su esposa, 1329; la coronación de Carlos
III, 1390).

Origen del romance navarro.


-Hubo romanización del territorio navarro.
La actual Ribera del Ebro, al comenzar la conquista, estuvo ocupada por pobladores celtas. Esto pudo
influir en que la latinización de toda la zona meridional se efectuara de forma rápida, dada la afinidad entre
el celta y el latín. En el 75 a.C. Pompeyo acampó junto a la vascona Iruña. Sus aledaños presentan
topónimos de origen latino. Existe una sólida base para fundamentar la aparición de una lengua románica.

-Con excepción de la zona ribereña, el romance navarro nace en un medio vascohablante, en él se


desarrolla, y a través de él, a su costa, se difunde social y localmente: situación primigenia común con el
castellano
-hay diversos argumentos a favor de un principal centro originario (sin rechazar la posibilidad de varios
focos iniciales). Podría ser el Tramo medio de Aragón, Yesa, Javier, Sangüesa, Lumbier, Aibar y
especialmente el monasterio de Leire.
Hasta bien entrado el S.IX, los caudillos pirenaicos iniciadores del reino de Pamplona habían sufrido
ataques o tolerado protectorados tanto de francos como de árabes (= complejidad política y militar).
Coexisten nombres vascos, romanos, visigodos y árabes.
-1ª Época_ hasta el S.IX, la familia Arista, procedentes del NE, son los que ostentan el poder político en
Pamplona.
-2º Época_ Sancho Garcés I (905-925), de la dinastía Jimena, inaugura una nueva época. Impresionante
expansión territorial, con su decisiva repercusión lingüística

-otro factor preciso: el peso cultural de los monasterios riojanos, que serán poderosos centros de influencia
religiosa, cultural y social. Los códices riojanos vinculan con los monarcas visigodos a los navarros.
La relevancia del monasterio de Leire.
-otro aspecto: la zona examinada era paso obligado a la trashumancia ganadera. Los montañeses acabarían
siendo receptores y difusores del romance en sus valles pirenaicos.

Caracterización del Navarro.

1
45505 Dialectología Española
Cristina de Nazaré
2004/2005
-los primeros documentos presentan el navarro más próximo al aragonés que al castellano. Sin embargo se
fue separando del aragonés para coincidir con el castellano.
-Características:

-Grafías exclusivas del navarro = quoa [kwa], guoa [gwa] con algunas variantes (qoa, goa…)

-conoció variantes en la diptongación de E > je, O> we, apenas en apelativos, más en topónimos: portiallu,
duanna (1043) furia (1072).
La pronta fijación de las soluciones je, we, se acercan más al castellano que al aragonés.

-conserva –iellu (como el aragonés).

-persistencia de la vocal final no absoluta, que reduce la variedad de grupos consonánticos finales (es una
diferencia relevante con el aragonés).
-o final = se conserva.
-e final = se pierde si está precedida de dental, alveolar, lateral, nasal y vibrante, a veces
palatal. (=castellano)
-se pierde también tras algunos grupos consonánticos como en aragonés:
-nt (adelant) participios de presente, adverbios en -ment.
-rt (cort, muert, part)

-Conservación de –mb (lamber, palomba) es el rasgo más característico. (ajeno al castellano y al aragonés,
pero compartido por el riojano)

-Mantiene los grupos iniciales CL- (clamar), PL- (plagar). (como el aragonés)
(su conversión en –ll, puede considerarse como efecto de tardía sustitución castellanizante, no de un
proceso interno.

_Persistencia de la F- inicial.
-su desaparición moderna ha de atribuirse a la castellanización, pues algunas palabras poco amenazadas
por la sustitución castellana perduran aún: fornillo, foz, fillezno.

_Presencia de G-, J- ante vocal anterior va decayendo sensiblemente.


-es un claro caso de la solución aragonesa a la castellana, con la que además coincide en el tratamiento
del la –D- intervocálica

_La solución –CT- constituye uno de los procesos que mejor muestran la peculiaridad evolutiva del navarro
entre los dialectos vecinos. A la primera fase –it- común, sigue pronto, retrasado frente al castellano,
(alejándose del aragonés), el paso definitivo a –ch-, ampliamente mayoritario desde mediados del siglo
XIII.
-de modo análogo, la palatal central, resultado de -C’L-, y después de –LJ- , va igualando su presencia
con la lateral, hegemónica en aragonés.

-No está aclarado con seguridad el valor fonético de –mpm-, (calompnia, costumpne, dampno) resultado
característico, pero no único, del navarro para –MN-, -M’N- .

-Sobre consonantes y grupos consonánticos finales, véase lo expuesto sobre las vocales finales. Pero:
-En su virtud, el navarro no ofrece plurales en consonante + s, ni en z, procedente de –T’S, como el
aragonés.

-La tendencia a la moción femenina en adjetivos apenas se produce (comuna, silvestres)a diferencia del
aragonés).

2
45505 Dialectología Española
Cristina de Nazaré
2004/2005
-Presentan ambos, alomorfos pronominales en –i: elli, li(s), esti, es(s)i, aquelli, qui, otri (vigente hoy y
característico de la Ribera del Ebro).
-igualmente el posesivo lur,, lures y el indefinido cualque arcaicos.

-cada, seguido o no de otro determinante, precedido o no de a, ofrece construcciones muy peculiares


del navarro, en parte conservadas.

-El navarro desconoció el artículo masculino lo, persistente en aragonés.

-La morfología verbal es extraordinariamente más unitaria que la aragonesa, y cabe identificarla, de modo
global, con la castellana. Por la misma razón que en el plural nominal carece de 5ª persona en –z.

-La tendencia de las áreas peninsulares central y oriental hacia el paradigma en -ir- se manifiesta bien en
navarro, (acollir, atreuir, cogir, leyr, retenir, posseyr, sucedir), más que en el castellano, sin faltar casos de
preferencia por –er (combater, compler, nozer).

-El imperfecto de la 2ª y 3ª conjugaciones aparece siempre sin –b-, en navarro, a diferencia del aragonés,
pero también ofrece, frente al castellano, la práctica inexistencia de -ie- por el etimológico –ía-. (si bien
algunos estudios recientes debilitan un tanto esta antigua creencia.)
-el perfecto no sufre las analogías internas que multiplican sus variantes en aragonés, faltan: amés,
amemos, Amón, ameron, amoron, etc….

-Resulta casi desconocida la diptongación en el verbo ser. Son rarísimos los casos testimonios de yes,
yera…

-Comparten una amplia continuidad del participio de presente (atenient,considerantes, prometientes) con
función verbal o nominal, y gerundios rehechos sobre el tema de presente.

-El navarro conservó durante todo el Medievo, la forma ad de la preposición, lo mismo que enta y
(en)tro(a). En cambio quizás fue superior ultra. Lo mismo de los adverbios encara y ensemble.

-Se percibe una gradación descendente hacia el aragonés al castellano, pasando por el navarro, en el
empleo, persistencia de los herederos de Ibi e Inde. Usos como m’en fui a casa, muy vivos en Huesca, son
muy raros en textos navarros.

-Rotunda disparidad sobre la presencia de –ment(e) si concurre en una secuencia con más de un adjetivo
para formar adverbios. Mientras que en aragonés se une sólo al primero, en navarro aparece en todos
(saluament, seguradament, quitament et francament).

-Oposición de mayor alcance revisten los esquema verbales hipotéticos (siglos XIII – XV), pues el navarro
y el aragonés evidencian una divergencia notable en cuanto a empleo de las diversas formas verbales,
sobretodo en el futuro. En cambio, respecto al castellano, el navarro se muestra mucho más afín.

-El sufijo diminutivo –ico, inusual en Aragón y Navarra hasta fines de la Edad Media, en que se impone por
lo general a –ete, carece de influjo en Navarra antes de determinada estructura: florica, frontonico,tiendica,
al igual que el superlativo: trabajadorísimo.

Plurilingüismo

Peculiar relación del navarro con el vascuence. Salvo onomástica, éste apenas se revela alguna anotación
del siglo XV.
Sin negar la validez de frontera geográfica entre romance y vascuence, en progresivo retroceso hacia el
norte, no se le otorga tanta relevancia como a la social. De la convivencia deriva el empleo actual de

3
45505 Dialectología Española
Cristina de Nazaré
2004/2005
vasquismos (por lo común con el artículo incorporado, como los arabismos) sectoriales en parte ( asca,
celaya, mandarra, osca…)
El aislamiento de los francos a lo largo del camino jacobeo, más la barrera vascuence, mantuvo el
occitano hasta el S-XIV. La sustitución de aquel por el navarro permitió una comunicación que lo absorbió.
Pero salvo préstamos léxicos efímeros y contaminaciones ocasionales en textos, su acción no ha marcado
una impronta específica en Navarra.

Você também pode gostar