Você está na página 1de 14

Evidencia de una cuenca paleozoica de antepaís media-tardía

y un cambio paleolatitudinal significativo, Andes centrales


Los datos devónicos-pérmicos del oeste de Bolivia y las regiones adyacentes se utilizan
para construir una paleogeografía de los Andes centrales. Cuatro fases caracterizan el
historial de sedimentación. (1) El depósito clástico marino poco profundo ocurrió a través
del Devónico (Lochkovian-Frasnian), con un aumento de la sedimentación en el tiempo
Emsian-Eifelian. La distribución de las litofacies y los espesores de sedimentos indican
principalmente una fuente occidental. Endémico, La fauna de alta latitud (> 55 ° S) con
varias originaciones de megafauna en Bolivia también contiene organismos
característicos del norte de África y el noreste de Estados Unidos (megafaunas del
Devónico medio y palynomorfos del Devónico tardío).(2) La sedimentación más reciente
del Devónico-Carbonífero temprano (Famennian-Viséan) se caracteriza por glaciomarina
y sedimentación fan-deltaica. Los clastos se derivan de las unidades sedimentarias
subyacentes y rocas andesíticas, graníticas y tofáceas. (3) En el Carbonífero medio
(Serpukhovian – Bashkirian) se produjo hiato en la sedimentación, su edad y duración
varían en toda la región.(4) La deposición de siliciclasticos y carbonatos se produjo en el
período pérmico tardío carbonífero medio (moscoviano-artinskiano). Los clásticos se
derivaron de una fuente occidental. Las rocas carbonatadas (formación Copacabana) se
depositaron in situ, en bajas latitudes (≤ 25˚ S lat). Se deduce que la sedimentación del
Devónico ocurrió en la corteza continental en un antepaís ajuste, con un arco magmático
occidental. Restauración de los batolitos de San Nicolás (circón U-Pb, 425 y 394–388Ma)
en relación con las cuencas del Devónico sugiere que pueden haber constituido el arco
magmático. Las cuencas intra-arco pueden haber existido cerca de la costa actual de Perú.
Después del hiato carbonífero medio, la sedimentación continuó en una región de arco
posterior, aunque la diferenciación de las distintas cuencas carboníferas y pérmicas, la
intrusión de plutones dentro de la cuenca a lo largo del rumbo, y las fallas extensionales
en el Pérmico Tardío indican cambios importantes en la configuración tectónica,
posiblemente incluyendo una reorientación de la placa de subducción a un ángulo bajo.
Las incertidumbres en la interpretación de la configuración tectónica se introducen por el
registro estratigráfico incompleto, que se oculta en el Altiplano y la Cordillera Occidental,
y por la historia indefinida de las interacciones del límite de la placa, como el posible
movimiento de deslizamiento post-deposición y la erosión tectónica a lo largo del margen
de la placa.

RESUMEN
El estudio de la secuencia del Devónico a Pérmico del oeste de Bolivia y zonas adyacentes
permite la reconstrucción de la paleogeografía de una parte de los Andes Centrales, cuya
historia sedimentaria puede dividirse en cuatro fases. (1) Sedimentación siliciclástica en
una cuenca marina somera durante la mayor parte del Devónico (Lochkoviano a
Frasniano),con un aumento de la sedimentación durante el Emsiano y Eifeliano. La
distribución de facies y el espesor de sedimentos indican un área fuente situada hacia el
oeste. La fauna endémica de latitudes altas (> 55˚ S), con algunos taxones característicos
de Bolivia, se mezcla con organismos característicos del norte de África y NE de Estados
Unidos (megafaunas en el Devónico medio y palinomorfos en el Dévonico superior).(2)
La sedimentación del Devónico tardío y carbonífero inferior (Fameniano a Viseano) está
caracterizada por depósitos glaciomarinos y de abanicos deltaicos. La composición de los
clastos es de rocas sedimentarias de las unidades subyacentes y de granitoides, andesitas
y tobas volcánicas.(3) Durante el Carbonífero medio (aproximadamente Serpukhoviano
y Bashkiriano) tiene lugar una interrupción en la sedimentación, de edad variable según
las zonas, que resulta en la erosión parcial o total de la secuencia del Carbonífero y
Devónico subyacente. (4) Durante el Carbonífero superior y hasta el Pérmico medio
(Moscoviano a Artinskiano) tiene lugar sedimentación mixta siliciclástico-carbonatada.
Las areniscas indican un área fuente al oeste. Las rocas carbonáticas fueron depositadas
en latitudes bajas (≤ 25˚ S). La sedición del Devónico tuvo lugar en un ambiente tectónico
de antepaís situado entre un arco magmático marginal al oeste y un cratón al este. La
posición de los batolitos de San Nicolás en Perú (fechada en 425 y 394–388 Ma) en
relación con la cuenca sedimentaria sugiere que estes plutones han formado parte del arco
magmático. Los depósitos devónicos del SW de Perú constituirían el relleno de cuencas
de intra-arco, mientras que faltaría el registro sedimentario de la zona proximal de la
cuenca de antepasados, probablemente cubierto bajo el Altiplano y la Cordillera
Occidental. La reorganización de la cuenca e intrusión de plutones durante el Carbonífero
y Pérmico, así como la tectónica extensional durante el Pérmico superior,indican reajustes
e interrelaciones entre los bordes de placas posiblemente relacionados con
desplazamientos pasivos y disminuciones de ángulo de subducción de la placa.

Figura 1: Geografía de las


montañas de los Andes centrales y
regiones adyacentes discutidas en
este documento.
Figura 2: Mapa tectónico
simplificado de Bolivia, con
dominios tectono-estratigráfico. 1,
altiplano; 2, Huarina pliegue y
correa de empuje; 3, Cordillera
Real; 4, Tarija-Teoponte;5,
pliegue subandino del norte y
cinturón de empuje; 6, central y
cinturones plegables y de empuje
del sur de los Andes;7, brasileño
proteger. Empujes (del español):
CANP, principal empuje andino;
CCR, empuje Cordillera Real;
FCC, empuje de Coniri. (Después
de Sempere, 1987, 1990.)

INTRODUCCIÓN
Varias síntesis recientes de estratigrafía devónica, bioestratigrafía, tectónica y eventos
ígneos en Bolivia, Perú, y el norte de Chile (Figura 1) permiten una reconstrucción
tentativa de eventos paleozoicos medios en esa región. Autores anteriores (p. Ej., Ahlfeld
y Branisa, 1960) habían sugerido que las gruesas rocas clásticas del Devónico en la región
se depositaran en un entorno "geosinclinal". Otro trabajo ha apoyado un margen pasivo
durante el tiempo devónico (Zeil, 1979), Los Andes centrales bolivianos comprenden una
serie de dominios tectonoestratigráficos limitados por fallas (Sempere et al., 1988) (ver
Figura 2), que son sustancialmente diferentes de las divisiones fisiográficas anteriores
utilizadas en la literatura geológica boliviana (Ahlfeld y Branisa, 1960; Russo,
1966;Rodrigo y Castaños, 1978). Estos dominios muestran un acortamiento tectónico y
un desplazamiento relativo distintos como resultado de la orogenia andina cenozoica
(Sheffels, 1990;Roeder y Chamberlain, 1995).Sin embargo, no deben confundirse con los
terrenos alóctonos porque todos han estado vinculados al menos desde principios del
Paleozoico y no son exóticos en América del Sur. Con respecto a estos dominios, el
Paleozoico medio y tardío del Altiplano septentrional está expuesto en el tercio norte de
la unidad Charasani-Ayoma-Atocha, también llamado cinturón de pliegue y empuje de
Huarina (Figura 2). La tectónica estructural principal de este cinturón es el apilamiento
de rocas sedimentarias del Ordovio Superior-Triásico Inferior en una serie de pliegues y
empujes fuertemente imbricados que bordean el sur-oeste. El cinturón de Huarina está
separado del dominio de la Cordillera Real hacia el noreste por el empuje de la Cordillera
Real y del dominio del Altiplano hacia el suroeste por el empuje de Coniri. Aunque la
secuencia de sedimentos se erosionó y se deformó parcialmente durante la orogenia
hercínica de Dalmayrac et al.(1980) y Martínez (1980), la mayor parte del tectonismo
tuvo lugar durante las diversas fases andinas (es decir, mucho más jóvenes) de
deformación.

Se ha sugerido que las rocas sedimentarias paleozoicas en el Altiplano de Bolivia son el


resultado del relleno complejo de una cuenca de arco posterior de tendencia noroeste que
abarca la mayor parte de formaciones de los actuales Andes centrales (Sempere, 1989).
Cierre de la cuenca, junto con fallas de elevación y empuje durante el ciclo orogénico
andino mesozoico y cenozoico, resultó en la construcción de la actual Cordillera de los
Andes. La sobreimpresión de esta deformación complica el estudio de la historia pre-
andina del margen occidental de Gondwana.

Figura 3: Litoestratigrafía devónica, carbonífera y pérmica, Andes centrales y


regiones adyacentes. (De Newell et al., 1953; Díaz, 1959; Eckel, 1959; Dalmayrac,
1977;Isaacson, 1977; Marruecos, 1977; Isaacson et al., 1985; Oller y Sempere, en
Duarte, 1989; Bahlburg y Breitkreuz, 1991; Starck et al., 1993.)

ESTRATIGRAFÍA
DEVÓNICO SECUENCIA SILICICLASTICA
Los datos estratigráficos básicos del Devónico boliviano esenciales para las
reconstrucciones paleogeográficas están bien establecidos (Isaacson, 1975, 1977;Oller y
Sempere, en Duarte, 1989; Starck et al., 1993) y se muestran en la Figura 3.La mayor
parte de la secuencia clástica gruesa es principalmente de edad tardía temprana (Emsian)
y temprana del Devónico medio (Eifelian), aunque la información más reciente de
ammonites (Babin et al., 1991) y palynomorphs (Le Hérissé et al., 1992; Racheboeuf et
al., 1992) sugiere que también están presentes las rocas de Givetian, Frasnian (?) Y
Famennian. Como hay pocos megafósiles, los palinomorfos en la parte superior de la
secuencia sugieren la presencia del límite naisiano de Famennian-Tour (Lobo-Boneta,
1987; Vavrdová et al., 1991).Las unidades de Frasnian están presentes en las regiones
sub-andinas y subsuperficiales del este de Bolivia y Perú (Barrett e Isaacson, 1988;
Isaacson y Sablock, 1990). Las litologías primarias en la secuencia boliviana occidental
y central son (en abundancia decreciente) limolita, arenita de cuarzo, lutita y lutita
(Isaacson y Sablock, 1988). Las areniscas feldespáticas se encuentran en el sur de Bolivia
(Isaacson, 1975). En el norte de Chile (región del desierto de Atacama), El conglomerado
de aguas someras del Devónico Medio-Carbonífero Inferior se borra y las litharenitas
contienen clastos de andesita y diorita (Davidson et al., 1981; Isaacson et al., 1985;
Isaacson y Sablock, 1988). Además, superior (?) Las turbiditas devónicas en el norte de
Chile muestran una fuente (macizo de Arequipa) al norte-noroeste (Bahlburg, 1985;
Breitkreuz y Bahlburg, 1985; Bahlburg et al., 1986).

Las áreas fuente (Figuras 4, 5) para la secuencia boliviana son el macizo ancestral de
Arequipa (Isaacson, 1975; Boucot et al., 1980; Laubacher et al., 1982), el altiplano puna
del noroeste argentino, y probablemente el escudo brasileño (Isaacson y Sablock, 1988,
1990). Estas áreas suministraron sedimentos al centro-noroeste, sur y este de Bolivia,
respectivamente.Los componentes principales de los estratos parecen reflejar diferencias
de composición en estos terrenos fuente. En el Altiplano de Bolivia, las areniscas
maduras, de grano fino del Alto Devónico sugieren fuentes mixtas tanto del craton como
del arco magmático, con poca reelaboración.
El macizo de Arequipa era en gran parte siálico (Bellido y Guevara, 1963; Cobbing et al.,
1977; Dalmayrac et al., 1980) y puede haber sido parte del "continente del Pacífico" de
Miller (1970)."La montaña de la Puna está compuesta de rocas ígneas magmáticas del
Ordovícico superior (Davidson et al., 1981; Coira et al., 1982; Palma et al., 1987). (Estas
terrazas se discuten más adelante.) La Puna también influyó en los eventos deposicionales
de Atacama (Chile), incluso los depósitos clásticos de aguas someras que se propagan
hacia el oeste con una fuente de terreno magmático cercano (Davidson et al., 1981;
Isaacson et al., 1985).El escudo brasileño es comparativamente similar al macizo de
Arequipa (Dalmayrac et al., 1980).Orogenia plegado y metamorfoseado Devónico y fly
fly paleozoico inferior en el centro de Perú, aunque estos efectos no son evidentes en las
secuencias bolivianas y devónicas del norte de Chile. Además, parte de la secuencia
devónica puede haberse erosionado en el centro de Perú,y clástico carbonífero inferior
(Tournaisian) rocas superpuestas inconformables (Mégard, 1973).La evidencia de
orogenia disminuye lejos (este-sureste) del centro de Perú,tal que solo existe una ligera
angularidad entre las rocas devónicas y carboníferas en Bolivia (Laubacher, 1974, 1977;
Isaacson, 1975).

Figura 4: Mapa paleogeográfico de los Andes centrales para la época tardía del
Devónico temprano (Emsian). Los principales elementos estructurales responsables
de las cuencas boliviano-peruanas incluyen el terreno de la Puna magmática
volcánica acumulada del Ordovícico tardío,macizo siálico de Arequipa (con sus
batolitos devotos tempranos de San Nicolás) y escudo brasileño. (Latitudes de
Isaacson y Sablock, 1990.) La “cuenca de Bolivia” (Frutos y Tobar, 1975; Suárez-
Soruco y Lobo-Boneta, 1983) incluye la cuenca del Beni (Díaz, 1959), cuyos
márgenes aún no se han definido.La "cuenca del Perú" (Mosmann et al., 1986, su
figura 11) incluye las cuencas Ucayali y Madre de Dios, esta última posiblemente
con desarrollo estratigráfico limitado en el Devónico temprano (Isaacson et al.,
1995).La orogenia del noroeste de Perú, propuesta por Isaacson (1989), aparece
como una montaña en la reconstrucción de deMelo (1988).
Figura 5: Mapa paleogeográfico de los Andes centrales para la época del Devónico
medio (Eifeliano-Givetiano). La transgresión, el hundimiento y la deposición
máximos se encuentran dentro de las cuencas en este momento, como lo demuestra
la sedimentación dentro de las cuencas de Solimoes y Arce (da Silva, 1988).La
cuenca Madre de Dios también recibió sedimentación significativa en este momento
(Isaacson et al., 1995).

DEVÓNICO TARDÍO-DIAMICTITAS CARBONÍFERAS INFERIORES Y


ROCAS RELACIONADAS
Ubicada sobre lutitas marinas poco profundas (Formación Colpacucho) y en la base de la
Formación Cumaná en el Altiplano norte de Bolivia, se encuentra una unidad de
diamictita (Figura 6),que se puede rastrear durante más de 30 km a lo largo de la huelga
desde la Isla del Sol hasta Cumaná (área del Lago Titicaca), con un espesor variable de
60–70 m (Díaz y Lema, 1991a).Está fechado como Famennian (pusillites – lepido phyta
palynozone) por Vavrdová et al. (1991, 1993), y puede continuar en el Tournaisian. Los
clastos dentro de la diamictita son subangulares a bien redondeados y varían desde arena
gruesa hasta rocas. Los clastos están compuestos de arenita de cuarzo, granitoide,
cuarcita, conglomerado y roca volcánica intermedia (Díaz et al., 1993).Su composición
variable, junto con algunos clastos estriados y facetados, sugiere una fuente terreno
glaciada heterogénea. Hay dos asociaciones principales de litofacies. El inferior está
dominado por lutita laminada con caída de rocas, interpretado como sedimento
suspendido en balsa y hielo depósitos a continuación, depositado sobre una base erosiva,
se encuentra una diamictita maciza con soporte de matriz con lentes de piedra arenisca
deformada y rocas de hasta 2 m de largo. Esto es interpretado como el resultado de una
deposición subglacial en el margen de una masa de hielo parcialmente flotante,con
resedimentación por procesos de movimiento de masas posdeposicionales (hundimiento
subacuático), junto con reelaboración parcial por corrientes.Esta diamictita puede ser el
primer signo de glaciación paleozoica tardía en América del Sur.La reconstrucción
paleogeográfica de la región durante el período carbonífero temprano sugiere que el
orógeno eohercínico en elCordillera Real es una posible fuente de terreno (Dalmayrac et
al., 1980). Unidades clásticas carboníferas medio-bajas de esta área (formaciones de
Cumaná y Kasa) (Figura 7) muestran una glaciación continua del terreno fuente durante
gran parte de esta secuencia.

El principal episodio glacial que afectó a Gondwana durante el Paleozoico tardío tuvo
lugar desde Serpukhovian (Namurian A) hasta Sakmarian,con dos episodios menores en
Famennian y Viséan (Veevers y Powell, 1987).La evidencia de los dos episodios cortos
proviene de depósitos marinos y no marinos en Brasil y el noroeste de África, así como
de trabajos recientes en Bolivia (Vavrdová et al.,1991, 1993).

La base de la Formación Cumaná en la Isla del Sol tiene produjo abundantes especímenes
de microfósiles orgánicos,incluyendo Retispora lepidophyta y Umbellasphaeridium
saharicum (Vavrdová et al. 1991, 1993).Estas ocurrencias, junto con Hymenozonotriletes
explaatus (y la ausencia de Verrucosisporites nitidus) da un Famennian tardío (Fa 2c-
d),palynozone PL (pusillites-lepidophyta) edad para la diamictita.Debido a que las
muestras originales se tomaron como reconocimiento, el muestreo incompleto en esta
localidad no ha permitido un rango de edad superior para la diamictita.Datación de
estratos equivalentes en Mina Matilde (unos 40 km al norte de la Isla del Sol en la orilla
este del lago Titicaca), dónde la diamictita no existe, sugiere que la transición fameniana
y tournaisiana está presente.

UNIDADES SILICICLÁSTICAS CARBONÍFERAS


Los depósitos carboníferos en el Altiplano se acumularon en una cuenca de tendencia
noroeste-sureste.Las cadenas montañosas al este y al oeste de la cuenca suministraron
sedimentos durante parte del Carbonífero.El carbonífero incluye depósitos de los grupos
Ambo y Titikaka.Las formaciones de Cumaná, Kasa y Siripaca (Figuras 3,7) acumulación
récord en el tardío Famennian-late Viséan (Rösler y col., 1989), y las formaciones bana
Yaurichambi y Copaca registran acumulación en el Kasimovian–Artinskian (Sakagami
et al., 1986; Sempere, 1987, 1990).El Grupo Ambo del Perú está asociado con el cambio
climático regional y la inestabilidad tectónica en las áreas que proporcionan sedimentos
a la cuenca carbonífera. Estos depósitos, junto con depósitos glaciares en las cuencas de
Solimöes, Amazonas y Parnaiba de Brasil, representan un período importante de
glaciación en gran parte de Gondwana (Veevers y Powell, 1987).En el área del Altiplano,
los rangos adyacentes desarrollaron una capa de hielo que existió durante el difunto
Famennian, Tournaisian y parte de Viséan. Las diamictitas dispersas que se acumularon
en una configuración delta del ventilador (Formación Kasa) registra la retirada gradual
de los glaciares a los rangos. Aumento de la entrada de sedimentos y tasas de subsidencia
posiblemente relacionadas con la actividad en el arco magmático también influyó en los
patrones de acumulaciónen la formación Kasa. El carácter localmente disconforme de la
base de este ciclo probablemente se relaciona con los procesos erosivos y deposicionales
típicos de un entorno de glaciomarina, en lugar de emersión y erosión subaerial. Además
del carácter erosivo de los flujos de gravedad y los transportes de masas comunes en un
entorno de glaciomarina,Es posible desarrollar discontinuidades erosivas en ambientes
marinos profundos durante los períodos glaciares como resultado de las corrientes de
densidad de fondo de las áreas glaciares
adyacentes (Johnhijo, 1974).

Figura 6: Litologías detalladas de la


Formación Cumaná en la Isla del Sol. La
deposición fameniana representa un
estante restringido con litoclastos en balsa
de hielo en aumento. Espesor en metros;
Las áreas negras representan piedra de
barro.
Figura 7: Perfiles verticales típicos de depósitos carboníferos en el norte del
Altiplano de Bolivia. Secciones: 1, área de Copacabana (Hinchaka, Santa Ana,
Siripaca, Belén); 2, Cumaná;3, Calamarca; 4, Carabuco; 5, Ancoraimes; 6,
Yaurichambi; 7, Colquencha Los números duales indican formaciones: 1.2,
Formación Copacabana (también Pérmico en parte; ver Figura 11); 2)1, Formación
Yaurichambi; 1.3, Formación de Siripaca; 1.2, Formación Kasa; 1.1, Formación
Cumaná (ver Figura 10). D, Devoniano.Símbolos litológicos: a, caliza (con dolomita
y arenisca); b, lutita, incluido el carbón (Formación Siripaca); c, arenisca, incluido
el conglomerado;d, diamictita, conglomerado y arenisca.

No es necesario proponer cambios en el clima, la tectónica o el área fuente para explicar


las diferencias en la composición modal y las características de textura entre los granos
finos, areniscas ricas en cuarzo del miembro inferior de la Formación Kasa y las areniscas
feldespáticas de su miembro superior. Se ha demostrado que clasificación hidráulica,
reelaboración actual, y diferencial de los procesos de meteorización presentes en las zonas
costeras y las plataformas clásticas poco profundas pueden dar lugar a tales
diferencias.(Mack, 1984; Dickinson, 1988). Estos procesos se ven reforzados por la
reelaboración de tormentas y olas. Suttner y col.(1981) presentaron algunos ejemplos
interesantes de modificación de petrofacies debido a diferentes ambientes sedimentarios,
comparando abanicos aluviales y depósitos de repisas clásticas. Llegaron a la conclusión
de que la misma área de procedencia, pero una distancia de transporte y un ambiente de
depósito diferentes pueden dar lugar a diferentes petrofacies. Este estudio de caso es
similar a lo que se encuentra en la Formación Kasa.

El entorno deposicional y la composición modal de las areniscas feldespáticas gruesas en


la Formación Kasa se vieron muy afectadas por el clima frío y la escasa vegetación
durante el Deposición de hierro como lo demuestran los pocos fósiles de plantas que se
encuentran en ella.Azcuy y Suárez-Soruco (1984) mencionan equisetae, lycopsidae y
frondas de plantas monopinnadas de la Formación Kasa, que asignaron a
Nothorhacopteris.Este género ha sido encontrado en la Formación Kaka (Figura 3), que
tiene un inicio conjunto palinológico carbonífero, un conjunto reciclado del Devónico
tardío, y una ausencia total de polen de esperma gymno.La transición del Kasa a la
Formación Siripaca, sin embargo, marca un cambio importante en la grafía paleogeo y
paleoclimática de la cuenca. incluyendo la desaparición de los glaciares a medida que
aumentaron las temperaturas, un aumento en la cubierta vegetal y una reducción del alivio
en las áreas de origen. El cambio climático resultó del movimiento de esta parte de
Gondwana a latitudes más bajas (Caputo y Crowell, 1985; Veevers y Powell, 1987;Díaz
et al., 1993). Durante este mismo período, sin embargo, la imagen paleoclimática global
cambió a una de enfriamiento general (Veevers y Powell, 1987; Sablock, 1993).

HIATO CARBONÍFERO MEDIO


La Formación Siripaca representa el llenado de la cuenca de Bolivia y la regresión
paleozoica final al norte o noroeste.En la península de Copcabana, esta formación tiene
un lecho de carbón pequeño (1,5 m de espesor). Su edad y rango no se conocen, aunque
ha sido excavado para uso local.Durante el Serpukhovian y Bashkirian, un período de
intensa erosión subaerial y no deposición seguido en el Altiplano, mientras que la
deposición continuó en las cuencas adyacentes del centro y sur del sur andino (Grupo
Macharetí) y el norte de las regiones subandinas (Formación Kaka (Sempere,
1990).Como resultado de la retirada hacia el norte, la brecha estratigráfica registrada por
la inconformidad carbonífera media es bastante variable.Esta regresión final
probablemente esté relacionada con dos eventos globales que tuvieron lugar durante la A
de Namur o Viséan tardío a Serpukhovian (Saunders y Ramsbottom, 1986),que fueron
producidas por el inicio del episodio glacial principal en Gondwana (Veevers y Powell,
1987).

CARBONÍFERO SUPERIOR – PÉRMICO INFERIOR


CARBONATOS Y SILICICLASTICAS
La deposición marina se reanudó en el Kasimovian (o incluso antes en el Bashkirian;
Isaacson et al., 1995) cuando ocurrió la transgresión representada por las formaciones
Yaurichambi y Copacabana. La transgresión avanzó lentamente, a medida que los mares
avanzaban desde el norte. Los cambios progresivos en el nivel base local produjeron una
capa de fluvial, deltaico,y depósitos costeros (formación Yaurichambi) en la base del
secuencias transgresivas. Las orientaciones paleocorrientes son de varias direcciones en
esta secuencia, registrando una reorganización importante del sistema de drenaje de la
cuenca (Sempere et al., 1986; Marocco et al., 1987;Barrios y Beccar, 1988).Los depósitos
transgresivos llenaron la paleotopografía recién creada,produciendo depósitos con
espesores variables en la costa este del lago Titicaca al norte y en la Zona de Colquencha,
a 60 km al sur de La Paz, en el Altiplano. Los paleoles en la formación Yaurichambi
indican un calor clima durante esta parte de la evolución de la cuenca, continuando con
la acumulación de depósitos de carbonato en la Formación Copacabana.

Como se muestra en la Figura 8, la formación Copacabana en el noroeste de Bolivia


muestra una compleja interacción de areniscas, lutitas terrígenas, varias calizas,
dolomitas, caliches, y otras litologías (Isaacson et al., 1993). Las litofacies cambian
significativamente en distancias cortas, tanto en la sección superior como en dirección
oeste-este.Para simplificar, hemos dividido la formación en dos unidades principales: la
unidad inferior, que comprende los ciclos 1 y 2, y la unidad superior, que comprende los
ciclos 3 y 4 (Figura 8). La unidad inferior tiende a estar dominada por rocas siliciclásticas,
mientras que la unidad superior es principalmente carbonatos.

Comenzando en una superficie de caliche de relieve moderado (30–40 cm) (en


Yampupata y Yaurichambi), de grano fino se depositó arenisca, seguido de gris verdoso
limolita (tuffaceous) con lechos delgados (2–3 m) de lutita de carbonato extensamente
bioturbada.Lo siguiente son areniscas canales, con lutitas bioturbadas más persistentes
(que contienen grandes braquiópodos productoides) y piedras de limo verde que las
siguen. Otro caliche se produce en limolita-arenisca, seguido de lima-limo-wacke con tela
fenestral y estructuras de tipis.Una arenisca de grano grueso y de lecho cruzado extenso
(¿bajío?) Que se encuentra por encima de otro caliche termina las litofacies inferiores. En
Ancoraimes (noreste de la península de Secciones de Copacabana), los resultados
iniciales sugieren menos obvio calichesasí como alternando areniscas más delgadas y
Wackestone-Packstone carbonatos. La separación de las dos litofacies básicas es otro
caliche, seguido de arenisca lenticular de grano medio, lutita y dolomita de arena
laminada rica en conchas,sugerente de tempestitas. Sigue la piedra de barro verde,
laminada, volcánica (Isaacson et al., 1995), puntuada por piedra de fango-piedra de barro
bien biotur bated y fosilífera.Verde, con cama cruzada,arenisca de grano grueso (incluida
algo de litharenita) entremezclada con arcilla y arenisca menor (con conchas de
braquiópodos estables en la actualidad) comprenden los lechos superiores de esta unidadt.
Varios caliches también ocurren. Una importante bioturbadas y fosilíferas packstone –
grainstone limita la secuencia en Yampupata, donde pueden faltar los lechos superiores.

Las unidades que recubren la Formación Copacabana son variables.Donde la erosión


significativa no es aparente, presumiblemente por sistemas fluviales que depositan
areniscas, Hay un cambio gradual a las litologías de carbonatos dominados por silicona y
menores (como en Cumaná).Un complejo conjunto de litologías termina en la formación
Copacabana.
Usando varias características que indican exposición subaerial según lo definido por
Flügel (1982) y Esteban y Klappa (1983) ciclos eustaticos dentro de la formación de
Copacabana son aparentes Las características incluyen tela fenestral, estructuras de tipis
y caliches.Sin embargo, lo que complica los ciclos son aparentes ajustes tectónicos de la
cuenca. Por eemplo, los ciclos 1, 2, y 4 (Figura 8) Tiene influjos terrígenos desde el oeste
que pueden haber llenado abruptamente la cuenca, de modo que sustituyeron los sistemas
de depósito menos profundos por otros ligeramente más profundos. El ciclo 3 contiene
piedra arcillosa lagoonal, lo que indica inactividad temporal en el área (s) de origen
occidental. Sugerimos que incluso con solapamiento marino pérmico temprano (Vail et
al., 1977), La cuenca deposicional del noroeste de Bolivia mantuvo una posición cercana

al nivel del mar.

Figura 8: Litoestratigrafía, bioestratigrafía y nomenclatura estratigráfica previa de


la Formación Copacabana (Carbonífero tardío-Pérmico temprano), oeste de
Bolivia. Los ciclos, hiatos, caliches (triángulos) y petrología sedimentaria son como
se discuten en este artículo y en Isaacson et al.(1993).

Você também pode gostar