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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD “GRAN MARISCAL DE AYACUCHO”


NÚCLEO PUERTO ORDAZ
ESCUELA DE DERECHO
DERECHO PENAL III
C2S1

Ley Especial Contra Delitos Informáticos.

Facilitador: Integrantes:

Gómez, Luis Espinoza, Miguel C.I. 26.969.524


Torrealba, Lidsayli C.I. 28.415.990

Ciudad Guayana, Mayo de 2019


INTRODUCCIÓN

Los delitos informáticos quedan paulatinamente enmarcados dentro de una


necesaria expansión a nuestro ordenamiento jurídico, más específicamente el
derecho penal, haciendo claro su vínculo con lo que respecta a un “delito”. El
sociólogo Ulrich Beck, expone de manifiesto que las sociedades modernas aparecen
actualmente como verdaderas sociedades de riesgo, en las cuales los efectos
adversos del desarrollo de la tecnología, la producción y el consumo adquieren
nuevas dimensiones y provocan riesgos masivos a los ciudadanos, la
comercialización de productos peligrosos o la contaminación ambiental. De tal
manera que, desde hace un tiempo la relación entre el internet y el Derecho ha sido
difícil de esclarecer, no sólo por la evidente trascendencia del nuevo formato de
comunicación que se presenta con el impacto mundial que posee el internet, con su
amplia difusión, su inminente recepción por parte de los usuarios que se presta para
el desarrollo de las más variadas conductas ilícitas aun cuando van intrínsecas con
delitos tradicionales como el fraude, el robo, chantaje, falsificación y la
malversación de caudales públicos, con el desarrollo de la programación, los delitos
informáticos se han vuelto más frecuentes, sofisticados y ello no solo concierne al
ámbito penal.
En los últimos tiempos, la destrucción de una cosa mueble de cierto valor resulta en
una conducta penalmente típica, mientras que si se trata de la destrucción de los
datos contenidos en un ordenador, que pueden consistir en una valiosísima
información científica, cultural y educativa, o inclusive afectiva, resultan ser
conductas que no están del todo previstas en el código penal, por lo que para evitar
esta especie de vacío legal, y contribuir a la vociferante era de información en la
que vivimos y se desenvuelve nuestra sociedad venezolana, la creación de una
legislación penal en materia informática se hace necesaria y presente con la “Ley
Especial Contra Los Delitos Informáticos.”
DESARROLLO

Antes de establecer las definiciones importantes sobre delitos informáticos es


importante tener claro las definiciones de delito y fraude. Por delito en un plano
sustancial tal y como lo señala el ilustre penalista venezolano Dr. Alberto Arteaga
Sánchez, se debe entender “Como un hecho que, en sí mismo o por su forma,
lesiona intereses fundamentales de la sociedad, intereses que se consideran
básicos para la existencia, conservación y desarrollo del conglomerado social.”
Por fraude se puede entender en general como “engaño, abuso, maniobra
inescrupulosa.” Luego de haber dado una referencia de lo que es delito es
importante resaltar cuales son los elementos integrantes del mismo según el ilustre
penalista Cuello Calon, los cuales son los siguientes:
-El delito es un acto humano, (acción u omisión).
-Dicho acto humano ha de ser antijurídico, debe lesionar o poner en peligro un
interés jurídicamente protegido.
-Debe corresponder a un tipo legal (figura de delito), definido por la ley, ha de ser
un acto típico.
-El ha de ser culpable, imputable a dolo (intención) o a culpa (negligencia), y una
acción es imputable cuando puede ponerse a cargo de una determinada persona.
-La ejecución u omisión del acto debe estar sancionada por una pena.

En cuanto a la Comisión Europea se centró en un concepto amplio de “Delito


informático” Al indicar que es “cualquier delito que de alguna manera implique
el uso de la tecnología de la información”.
Ningún organismo, se ha atrevido a dar una definición concreta, que integre todos
los elementos de un delito informático, toda vez que se puede pecar por no incluir
elementos propios de este delito, o por el contrario confundirlo y caer en otro tipo
de delito que no es precisamente el informático, o muchas de estas definiciones no
tienen en cuenta que la tecnología no se queda inmóvil, lo cual hace necesariamente
que se replantee el concepto, entonces observando todos los tropiezos anteriores, se
propone esta definición que también está abierta a ser modificada por los devenires
propios del desarrollo de la sociedad. Entonces tenemos que Delito informático es:

“Toda conducta típica, antijurídica y culpable, que atenta contra el bien jurídico
de la información, y para su consumación se valen de sistemas electrónicos,
informáticos y telemáticos”.

En cuanto a un delito computacional, diremos que es “una conducta en que los


medios informáticos, y telemáticos son utilizados para atacar bienes jurídicos los
cuales ya se ha reconocido su protección por el Derecho Penal”. Un ejemplo de
ello, es el hurto y la estafa cometidos por medio de la transferencia electrónica de
fondos, o cualquier otro medio electrónico. Entonces vemos como el delito
informático, afecta a un nuevo bien jurídico tutelado, que en este caso es la
información, en sus diferentes etapas, almacenada, tratada, transmitida por medio de
los sistemas automatizados de datos.

Si bien, existen actividades delictivas que se realizan por medio


de estructuras electrónicas que van ligadas a un sin número de herramientas delictivas
que buscan infringir y dañar todo lo que encuentren en el ámbito informático: ingreso
ilegal a sistemas, interceptado ilegal de redes, interferencias, daños en
la información (borrado, dañado, alteración o supresión de data crédito), mal uso de
artefactos, chantajes, fraude electrónico, ataques a sistemas, robo de bancos, ataques
realizados por hackers, violación de los derechos de autor, pornografía infantil,
pedofilia en Internet, violación de información confidencial y muchos otros.

En Venezuela, se concibe como bien jurídico la protección de los sistemas


informáticos que contienen, procesan, resguardan y transmiten la información.

En el 2010 se promulgó la Ley Especial Contra los Delitos Informáticos, la cual


tiene como función proteger, prevenir y sancionar los delitos que se cometan a través
de las tecnologías de la información (Internet, software, bases de datos,
telecomunicaciones, celulares, etc.) Esta Ley está compuesta por 32 artículos en los
cuales se señalan cinco clases de delitos:

 Contra los sistemas que utilizan tecnologías de información;

 Contra la propiedad;

 Contra la privacidad de las personas y de las comunicaciones;

 Contra niños, niñas y adolescentes y;

 Contra el orden económico.

Venezuela, es uno de los pocos países en Latinoamérica, que


consagra una legislación completa e integral sobre delitos informáticos. Esta ley
recoge las definiciones propias de los delitos informáticos y sus componentes.

De esta manera el legislador define cada una de las conductas antijurídicas y esta
serie de acontecimientos sociales trae como consecuencia la creación de distintos
organismos que regulan todas y cada una de las conductas, entre las cuales se pueden
mencionar la División Contra Delitos Informáticos del Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC), el cual se encarga de la investigación
y prevención de los delitos informáticos, al igual que el Ministerio Público el cual
tiene a disposición los siguientes:

“…El Estado dispone de organismos para prevenir e investigar los crímenes


informáticos y tecnológicos, los cuales analizan, preservan, presentan
evidencias y apoyan las investigaciones judiciales, y prestan respaldo técnico
al Ministerio Público y a otros organismos de seguridad.

La Dirección de Asesoría Técnica Científica e Investigaciones del Ministerio


Público apoya a los fiscales, con asesoría técnica, orientación y parámetros
para el seguimiento de lo relacionado con delitos electrónicos.

También se cuenta con el Sistema Nacional de Gestión de Incidentes


Telemático de la República Bolivariana de Venezuela, cuyo objetivo es la
prevención, detección y gestión de incidentes en los sistemas informáticos de
la administración pública, así como asesorar a los responsables de las
tecnologías de información y comunicación.

Además, el Centro Nacional de Informática Forense, el cual es un laboratorio


para la obtención, análisis, preservación y presentación de evidencias
relacionadas con las tecnologías de información y comunicación…”

También la ley hace una especial aclaración en cuanto a terminología anglosajona o


de poca cotidianidad utilizada en el desarrollo de la misma, en concordancia al
artículo 9 de la constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en donde se
estipula el uso del castellano como idioma oficial.

Delitos contra los sistemas que utilizan tecnologías de información:

Los delitos contra los sistemas que utilizan tecnologías de información (TIC) están
contemplados en el capítulo I de la Ley. Los mismos abarcan desde el acceso
indebido a las TIC hasta el espionaje cibernético. Estas faltas pueden implicar penas
que van desde un (1) año de prisión hasta diez (10) años, más el pago de una multa en
Unidades Tributarias (UT).

-Acceso Indebido a Sistemas: El artículo 6 de la Ley, explica lo referente a la


intromisión indebida en un sistema muy a pesar de las advertencias que tiene de área
restringida. Ejemplo: cuando el empleado de un banco o gerente de seguridad entra a
una base de datos y obtiene información ilegalmente con la finalidad de lucrarse
indebidamente.

-Sabotaje o Daño a Sistemas: Referenciado en el artículo 7, hace énfasis en la


intención que tenga aquella persona, al destruir, dañar, modificar o realizar cualquier
acto que tenga como fin alterar el funcionamiento de un sistema que utilice
tecnologías de información, también prevé su respectiva sanción si el medio para ello
es la introducción o transmisión de un virus o programa análogo.
-Favorecimiento Culposo: El artículo 8 va concatenado al expuesto con antelación,
acá se explica que el delito se comete por imprudencia, negligencia, impericia e
inobservancia y la sanción es atenuada en relación a la sanción del delito precedente.

-Espionaje Informático: Articulo 9, expone básicamente la utilización de programas


de espionaje que se desarrollan en función a el registro de todo lo que se realiza en
una computadora a fin de obtener beneficios, o información que pueda poner en
peligro la seguridad del Estado con la revelación de asuntos confidenciales.

-Falsificación de Documentos utilizando sistemas: Tipificado en el artículo 12 de la


presente ley, prevé la alteración, modificación y eliminación de documentos
incorporados a un sistema de información, ya sean calificaciones, antecedentes,
registros, adquirirá su respectiva sanción así como una agravante en caso de hacerlo
en busca de beneficio propio o para un tercero.

Delitos contra la propiedad:

En esta tipología unos de los delitos informáticos más comunes son:

La obtención indebida de bienes o servicios mediante el uso de tarjetas inteligentes


(tarjetas de crédito, de débito o de identificación) será penado con prisión de dos (2) a
seis (6) años más una multa de 200 a 600. Por lo tanto, quienes adquieran un producto
o servicio (telefonía, televisión por cable, hospedaje, etc.) a través del uso de una
tarjetas de crédito, de débito o de identificación sin la aprobación del titular será
castigado conforme a lo establecido por la Ley.

Asimismo, el manejo fraudulento de tarjetas inteligentes, así como la creación,


clonación o incorporación ilícita de datos a registros, listas de consumo o similares,
será penado con prisión de cinco (5) a diez (10) años más una multa de 500 a 1.000
UT. La misma pena recibirán quienes se beneficien de este delito.

Por ejemplo: en estados como Nueva Esparta, se utiliza una tarjeta inteligente
para el pago del pasaje estudiantil, quienes creen, dupliquen o hagan uso de
esta tarjeta de firma indebida recibirán la pena prevista en esta Ley. Cabe
destacar que la apropiación y adquisición indebida de tarjetas inteligentes, es
penada con prisión de uno (1) a cinco (5) años más una multa de 10 a 50 UT.

-Hurto haciendo uso de medios tecnológicos: Tipificado en el artículo 13, define la


sustracción de datos, el delito informático más común ya que es fácil de cometer y
difícil de descubrir. No requiere de conocimientos técnicos de informática ya que
puede realizarlo cualquier persona que tenga acceso a las funciones normales de
procesamiento de datos en la fase de adquisición de los mismos.

Delitos contra la privacidad de las personas y de las comunicaciones:

Los delitos contra la privacidad de las personas y las comunicaciones son los
siguientes:

 Quien viole de la privacidad de la data o información de carácter personal que

se encuentre en un sistema que utilice las tecnologías de información sin la


autorización de su dueño será penado con prisión de dos (2) a seis (6) años y
multa de 200 a 600 UT.

 La violación de la privacidad de las comunicaciones, es castigado con prisión

de dos (2) a seis (6) años y una multa de 200 a 600 UT.

 Aquellos que revelen, difundan o ceda indebidamente parcial o totalmente

datos o información obtenidos mediante sistemas que empleen las tecnologías


de información, será sancionado con prisión de dos (2) a seis (6) años y una
multa de 200 a 600 UT. En consecuencia, quienes hagan pública las imágenes,
audio o información personal de otro, recibirá dicha pena. Un caso muy
común de este delito se puede ver en las redes sociales como Facebook,
Twitter o YouTube, en las cuales se cargan videos e imágenes personales que
en su mayoría son utilizados como bromas, pero que violan lo establecido en
este artículo.
En nuestro país muchos cibercafés o cybers violan la privacidad de las
comunicaciones de sus clientes, a través del uso de software o aplicaciones que le
permiten monitorear desde sus ordenadores lo que está realizando la otra parte.
Asimismo, guardan el historial de las conversaciones de éstos.

-Violación de la Privacidad de la Data o Información de Carácter Personal: El


Articulo 20, se refiere, a la persona que de manera premeditada se imponga, maneje,
cambie o borre la existencia de la data o información que estén contenidas en un
ordenador o cualquier sistema que utilice tecnologías de información sin previo
consentimiento de su dueño, estará trasgrediendo o vulnerando los derechos de esa
persona a quien le fue violada su privacidad. Ejemplo: Ingresar al correo electrónico
de una persona y sacar al escarnio público, fotos o mensajes.

-Violación de la Privacidad de las comunicaciones: El artículo 21, se refiere a la


intersección de llamadas telefónicas, o cuando se interceptan las señales de radios
comunicadores, reproducción, modificación de cualquier programa de televisión sin
la debida autorización de la planta televisora productora. En síntesis, indica lo
correspondiente a la interferencia en una señal de transmisión o comunicación ajena.

Delitos contra niños, niñas y adolescentes:

Entre los delitos informáticos contra los niños y adolescentes se encuentra la difusión
o exhibición de material pornográfico sin realizar previamente la debida advertencia
para que se restrinja el acceso a niños, niñas adolescentes, será penado con prisión de
dos (2) a seis (6) años más una multa de 200 a 600 UT. Es decir, quienes usen las
tecnologías de información para vender, exhibir o transmitir material pornográfico sin
advertir que está prohibido el acceso para menores de edad, deberá ser sancionado
conforme a lo establecido en la Ley.

Por otra parte, la exhibición pornográfica de niños o adolescentes es penado con


prisión de cuatro (4) a ocho (8) años más una multa de 400 a 800 UT. En este sentido,
quienes por medio del uso de tecnologías de información, emplee a un niño, niña o
adolescente o su imagen, con fines exhibicionistas o pornográficos, será penado
conforme a lo establecido anteriormente.

Uno de los casos más comunes de delitos contra menores es la publicación de


imágenes personales, de un amigo o de un familiar a través de las redes sociales, sin
la autorización de los mismos; con el fin de humillar, burlar, insultar o afectar el
honor y la reputación de éstos. En la mayoría de las ocasiones dichas acciones
obedecen al bullying o acoso escolar al son sometidos algunos niños o adolescentes,
por parte de sus propios compañeros. Este delito es penado conforme a lo estipulado a
la presente ley y la Ley Orgánica para la Protección de niños, niñas y Adolescente.

-Difusión y Exhibición de material pornográfico: El artículo 23, explica que todo


aquel que exhiba, difunda, transmita o venda por cualquier medio de material
pornográfico en cuya elaboración hayan sido utilizados menores de edad o incapaces,
aunque el material tuviere su origen en el extranjero o fuere desconocido, será sujeto
de sanción según lo estipulado en la presente norma.

-Exhibición Pornográfica de Niños o Adolescentes: El articulo 24 hace un especial


énfasis, de gravedad a todo aquel que utilice a menores de edad en cualquier medio
que involucre las tecnologías de información, con fines o en espectáculos
exhibicionistas o pornográficos, tanto públicos como privados, así como para elaborar
cualquier clase de material pornográfico.

Protocolos Internacionales que sancionan la Pornografía Infantil:


Se puede argumentar que la pornografía infantil es un problema multi-jurisdiccional
y que sólo un enfoque global mediante leyes uniformes puede tener impacto sobre
esta problemática, a fin de evitar que las diferentes posturas de las legislaciones
nacionales sobre pornografía infantil permita que los perpetradores concentren sus
esfuerzos en jurisdicciones con regulaciones inexistentes o más laxas.
Los tres principales instrumentos jurídicos internacionales que se ocupan de la
pornografía infantil son:
-El Protocolo facultativo sobre la venta de niños, la prostitución infantil y la
utilización de niños en la pornografía;
-El Convenio sobre Ciberdelincuencia del Consejo de Europa;
-El Convenio del Consejo de Europa para la protección de los niños contra la
explotación y el abuso sexual.
Estos tratados contienen definiciones específicas de delitos, así como disposiciones
que exigen castigo para las conductas criminalizadas.
La Convención sobre los Derechos del Niño, tiene por objeto garantizar una
amplia gama de derechos humanos para los niños, incluyendo derechos civiles,
culturales, económicos, políticos y sociales, pero también incluye disposiciones
relativas a la explotación sexual infantil. El artículo 34 de esta Convención
establece claramente que los Estados partes deben tomar medidas preventivas para
hacer frente a la explotación sexual de y abuso sexuales de niños, llevando adelante
las acciones de alcance nacional, bilateral y multilateral para prevenir la
explotación de menores en espectáculos o materiales pornográficos.

El Protocolo facultativo sobre la venta de niños, la prostitución infantil y la


utilización de niños en la pornografía entró en vigor el 18 de enero de 2002 y define
a la pornografía como “toda representación, por cualquier medio, de un niño
dedicado a actividades sexuales explícitas, reales o simuladas, o toda
representación de las partes genitales de un niño con fines primordialmente
sexuales”, para luego exigir en su artículo 3 inciso 1 c) que los Estados Partes
tipifiquen como delito la pornografía infantil, ya sea cometida en el país o en el
extranjero y de forma individual u organizada.

El Convenio sobre la Ciberdelincuencia, con la esperanza de implementar un


enfoque cooperativo y uniforme para el enjuiciamiento de los delitos cibernéticos.
Dentro del artículo 9 del Convenio, en su inciso 1, establece la obligatoriedad de los
Estados Partes de tipificar la producción de pornografía infantil para la distribución
a través de un sistema informático, el ofrecer o poner a disposición pornografía
infantil a través de un sistema informático, el adquirir pornografía infantil, para
uno mismo o para otra persona y el poseer pornografía infantil en un sistema
informático o en un medio de almacenamiento de datos informáticos. Es importante
aquí ver como la sola posesión esta efectivamente tipificada como delito.

El mismo Consejo de Europa estableció la Convención para la Protección de los


Niños contra la Explotación Sexual y el Abuso Sexual, también conocida como la
Convención de Lanzarote, un tratado internacional que se centra en garantizar el
interés superior de los niños a través de la prevención del abuso y la explotación, la
protección y asistencia a las víctimas, el castigo a los autores, y la promoción de la
cooperación nacional e internacional. Esta Convención se abrió a la firma el 25 de
octubre de 2007 y entró en vigor el 1 de julio 2010.
Con respecto a la pornografía infantil la Convención de Lanzarote, en su artículo 20
inciso 1 exige a los Estados Partes tipificar como delito la producción de
pornografía infantil, el ofrecimiento o puesta a disposición de pornografía infantil,
la distribución o transmisión, la posesión de pornografía infantil y el acceso, con
conocimiento, a través de tecnologías de la información y de la comunicación.

Los Delitos Contra el Orden Económico:

Los delitos contra el orden económico, son los siguientes:

La apropiación indebida de propiedad intelectual es penada con prisión de uno (1) a


cinco (5) años y una multa de 100 a 500 UT. Por lo tanto, quienes reproduzcan,
modifiquen, copien, distribuyan o divulguen un software o cualquier otra obra
mediante el uso de sistemas que empleen tecnologías de información serán castigados
conforme a lo antes señalado.

Un ejemplo de este delito es la copia de artículos o post en sitios web, así como el
robo de aplicaciones u otra obra intelectual. En este sentido, al tomar el trabajo
intelectual de carácter público de otra persona, se debe especificar siempre el autor o
la fuente del mismo.
Asimismo, la oferta engañosa de bienes o servicios es otro tipo de delito especificado
en la Ley. Este se lleva a cabo a través de la oferta, comercialización y provisión de
bienes y servicios, mediante el uso de tecnologías de información, bajo información y
alegatos falsos, atribuyéndole características inexistentes a éstos, perjudicando a los
compradores. Quienes incurran en este delito serán penados con prisión de uno (1) a
cinco (5) años y multa de 100 a 500 UT, sin perjuicio de la comisión de un delito más
grave.

Ejemplo: En una reconocida página de web de compra-venta se ofrecen diferentes


productos y servicios, que en algunos casos reseñan datos o características falsas con
la intención de engañar al comprador. Como lo es en el caso de la venta de un celular
como nuevo cuando en realidad es usado, o que éste puede ser usado con ciertas
aplicaciones cuando no es así.

-Apropiación de Propiedad Intelectual: El Artículo 25 de la ley explica, que la falta


a la propiedad intelectual es violentar a un derecho patrimonial
de carácter propio, incurre en un delito aquel que use o explote en forma industrial y
comercial las invenciones o innovaciones, tales como un producto técnicamente
nuevo, una mejora a una máquina o aparato, un diseño original para hacer más útil o
atractivo un producto o un proceso de fabricación novedoso; también abarca la
capacidad creativa de la mente: las obras literarias y artísticas, los símbolos, los
nombres, las imágenes y privilegios. El titular de la propiedad intelectual tiene la
facultad para evitar que cualquier persona tenga acceso o haga uso de su propiedad
sin su consentimiento.

-Oferta Engañosa: El Articulo 26 de la ley, condena la atribución de características


falsas a un producto haciendo su promoción a través de internet, está tipificación
delictiva tiene como fin garantizar la legitimidad de las ofertas que se hagan a través
de las nuevas tecnologías de información así como asegurar la identidad absoluta
entre lo que se le ofrece y lo que efectivamente recibirá el consumidor, se afirma que
el interés jurídico protegido es fundamentalmente la libertad de elección del
consumidor y el trafico jurídico de bienes legítimos, determinando la prohibición
absoluta de hacer publicidad a bienes cuyo origen no está garantizado y cuya calidad
es dudosa dada la falsedad que sobre sus características atributivas en donde se
publicita.

Al terminar la exposición de los delitos tipificados en la Ley, sus respectivos artículos


y sanciones, la principal observación de carácter general sobre la misma, es que al
igual que otras leyes venezolanas, las sanciones no son proporcionales a los delitos,
es decir, en el caso de artículos como el número 24, la pena es demasiado reducida
para la naturaleza del delito, y así sucede con otros artículos más donde el crimen
puede generar daños graves contra personas naturales, jurídicas o los propios
intereses nacionales y la pena es irrisoria para castigar al perpetrador o a los
involucrados.

Otro punto en consideración es la extraterritorialidad que profesa la ley, al tratarse de


delitos que pueden cometerse en cualquier parte del mundo, en cualquier momento,
es preocupante la manera en que el texto legal pretende actuar ante la comisión de
ellos, solo tomando parte cuando afecte directamente al territorio nacional, cuando es
cometido afuera del mismo y si el responsable de los mismos no ha sido juzgado o
sentenciado por tribunales extranjeros. Entonces, esto representa otra deficiencia en
cuanto a legislaciones nacionales y su aplicación, nuestro país cuenta con una gama
de textos, funcionales de no ser por la situación que nos atañe, y la cantidad de trabas
que se encuentran en el camino procesal.

Venezuela sí ha dado un paso importante en la legislación penal que regula los delitos
informáticos pero que debe continuar con su evolución para enfrentar las exigencias
de un mundo en proceso de globalización.

Como se explica con anterioridad, el desarrollo de nuevas tecnologías es inminente, y


es por ello difícil para el Derecho adaptarse a los pasos agigantados en que las
mismas crecen, al tratarse de una ley promulgada en el año 2001, es de notarse que
los términos utilizados y las conductas delictivas, por no volver a mencionar las
sanciones, han quedado obsoletas, algunas de las definiciones estipuladas son
inconclusas e incompletas, debería haber una revisión a fin de incluirse más términos
que permitan abarcar y accionar sobre otros medios informáticos y las redes sociales,
bajo las cuales también se cometen muchos delitos condenados por esta ley.
CONCLUSIÓN
Un delito informático es considerado el delito del siglo XXI, puede ocasionar
grandes pérdidas de dinero, afectar la privacidad de las personas, promover la
difusión de contenido explicito e inmoral, entre otras consecuencias, que al final del
día siguen intrínsecas con los avances de la tecnología.
La legislación venezolana ha hecho esfuerzos reconocibles por contrarrestar esta
problemática e investigar las conductas delictivas, para reunir así sus sanciones en
la Ley Especial Sobre Delitos Informáticos, aun existiendo esta, se es necesaria la
creación y la adaptación de los instrumentos legales a la constante innovación
tecnológica obliga a un cierto dinamismo en cuanto al manejo de lo que tenga que
ver con la informática.
Al tratarse de un factor con carácter trascendental, siempre se va a requerir mayores
conocimientos en las nuevas tecnologías y la cantidad de violaciones que suscitan a
las normas jurídicas tipificadas, las cuales permitirán tener un marco referencial
aceptable para el manejo de las situaciones que puedan presentarse. Aunque nuestro
país goza de un mecanismo completo, vale decir que ha quedado obsoleto, no
contempla muchos delitos que existen en la actualidad y no es suficiente para bajar
los índices de la delincuencia informática.
La evolución es real, no se puede escapar de ella, por ello es imperante también
apelar por la cooperación internacional, una legislación que pueda funcionar en
distintos países para combatir la delincuencia informática e ir a la par en todo el
continente.
Sin lugar a dudas, se hace necesaria una investigación específica que pretenda
reformar el ordenamiento jurídico a fin de ahondar en la problemática y controlar la
característica trasnacional que posee el delito informático y sus diversas variantes.
BIBLIOGRAFÍA:

Ley N°48. Ley Especial contra Delitos los Delitos Informáticos. Gaceta Oficial
Nro.37.313, martes 30 de octubre de 2001.

Arteaga Sánchez, Alberto: Derecho Penal Venezolano, 7ª ed., Paredes Editores,


Caracas, 1995, p.125.

Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, Gaceta Oficial No.5435


Extraordinaria, jueves 30 de diciembre de 1999.

Balanta, Heidy: Aproximación Legal a los Delitos Informáticos Una Visión de


Derecho Comparado (Visitada 1 de Mayo del 2019)
<https://es.scribd.com/doc/34849363/Aproximacion-legal-al-tratamiento-de-los-
Delitos-informaticos-en-Colombia>

Rosende, Eduardo E: Derecho Penal e Informática, especial referencia a las amenazas


lógico informáticas. Editorial: Fabián d. Di Plácido. Buenos Aires, 2008. p. 295,296

Cruz de Pablo, José Antonio: Derecho Penal y Nuevas Tecnologías. Aspectos


Sustantivos. Editorial Grupo Difusión, Madrid 2006. p.11.

Delitos Informáticos: (Visitada 1 de Mayo de 2019).


<https://www.venelogia.com/archivos/10459/ >.

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