Universidad: Universidad Peruana Unión

Facultad: Ciencias de la Salud

Escuela: Psicología
Estudiantes: Sheyla Eliana Maldonado Ferrua

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RESUMEN DE MENTE CARÁCTER Y PERSONALIDAD TOMO 1

Todos necesitamos conocer el organismo más maravilloso: el cuerpo humano. La mente tiene
que ser disciplinada, educada, preparada; porque los hombres han de prestar servicio a Dios,
en maneras diversas que no están en armonía con la inclinación innata. Se debe educar y
desarrollar cada facultad mental y física, el mecanismo humano que ha comprado Cristo, a fin
de que podamos usarlo de la mejor manera posible. Dios toma a los hombres como son, y los
educa para su servicio, si ellos quieren entregarse a él. El Espíritu de Dios, recibido en el alma,
vivifica todas sus facultades. Bajo la dirección del Espíritu Santo, la mente, consagrada sin
reservas a Dios, se desarrolla armoniosamente, y queda fortalecida para comprender y cumplir
lo que Dios requiere. La ciencia de una vida cristiana pura, íntegra y consecuente se obtiene
mediante el estudio de la Palabra de Dios. El pecado no sólo nos aparta de Dios, sino que
destruye en el alma humana el deseo y la aptitud para conocerlo. La misión de Cristo consiste
en deshacer toda esta obra del mal. El tiene poder para vigorizar y restaurar las facultades del
alma paralizadas por el pecado, la mente oscurecida, y la voluntad pervertida. Abre ante
nosotros las riquezas del universo y nos imparte poder para discernir estos tesoros y
apropiarnos de ellos. Satanás está trabajando silenciosamente para confundir la mente de los
que conocen la verdad con la introducción de sentimientos y ejemplos engañosos. A menos
que se arrepientan y se conviertan, los que están viviendo vidas divididas, profesando servir al
Señor pero al mismo tiempo procurando llevar adelante sus propios planes -planes que
retardan precisamente la obra por la que Cristo dio su vida. La buena salud, mentes sanas, y
corazones puros no son considerados como de primera importancia en los hogares. Muchos
padres no educan a sus hijos para ser útiles y para cumplir sus deberes, por lo tanto en las
escuelas deberíamos preocuparnos a que se eduquen los niños para una vida venidera, que lo
formato en esta tierra, pueda servirnos para el mundo nuevo. La mente debe ser adiestrada
por medio de pruebas diarias hasta lograr hábitos de fidelidad, hasta obtener un sentido de las
exigencias de lo recto y del deber por sobre las inclinaciones y los placeres. Las mentes así
educadas no vacilarán entre lo correcto y lo equivocado, como si fuera una caña mecida por el
viento; pero tan pronto como el problema se presenta ante ellas, descubren de inmediato el
principio que está involucrado, e instintivamente eligen lo correcto sin debatir largamente el
asunto. Son leales porque se han adiestrado por medio de hábitos de fidelidad y de verdad.