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Elementos que destacan de venezuela

1. Crisis económica aguda

La reducción constante de las importaciones fue un factor determinante y generador de


desabastecimiento de los rubros claves de alimentación, aseo personal, medicina y otros.
Esto, combinado a la inflación más alta del mundo, se redujo a 1660 %, según la última
proyección del Fondo Monetario Internacional.

Acuerdos económicos desacertados, aunados a la baja de los precios del petróleo


que castigaron a la nación desde el 2014, desempleo, sueldos deficientes para cubrir la
canasta básica de alimentación y largas colas para adquirir alimentos dieron como
resultado: miles de venezolanos con hambre.
2. Lucha de poderes

La coalición de derecha venezolana tomó posesión mayoritaria del Parlamento en enero


de 2016, tras vencer al gobierno de Nicolás Maduro en elecciones para elegir nuevas
autoridades de la Asamblea Nacional; desde entonces, ambos bandos han protagonizado
una pugna de poderes, caracterizada por medidas del Ejecutivo Nacional para
neutralizar competencias de la nueva asamblea.

La sentencia mencionada al inicio de este escrito se ha convertido en la más radical


desde entonces, “pulverizando” las competencias de los diputados opositores.

3. ¿Derechos Humanos?
La crisis de carácter humanitaria, pérdida de valores, delincuencia galopante y sistema
carcelario deplorable. Según el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), al menos
28 mil muertes se produjeron en manos de la violencia durante el 2016.

También aumentaron las violaciones por parte de las fuerzas del orden a ciudadanos,
ajusticiamientos y encarcelamientos sin órdenes judiciales, represión, extorsiones y
allanamientos.

La protesta está contemplada en la Constitución venezolana como una actividad de libre


ejercicio, mientras se mantenga bajo los parámetros de la paz. La represión por parte del
ejército y los cuerpos de seguridad sólo agitan e incentivan la escalada de violencia.

4. Persecución a líderes políticos


Pensar diferente y hacerlo de conocimiento público es traición, al menos así lo
considera el Gobierno Bolivariano, quien lleva 17 años de mandato, y ha hecho gala de
técnicas de persecución contra líderes de derecha que gozan del respaldo de un
porcentaje importante de la población, los cuales se han volcado en denunciar la gestión
del gobierno chavista.

El caso más relevante: el dirigente de Voluntad Popular, Leopoldo López, fue apresado
desde febrero de 2014 en el centro penitenciario de Ramo Verde, en la capital
venezolana. El exalcalde de Chacao —municipio del área metropolitana de Caracas—,
permanece recluido tras ser condenado a 14 años de cárcel por presunta instigación a la
violencia en el marco de la manifestación antigubernamentales de 2014.

Miles de instituciones y ONG's nacionales e internacionales han instado al gobierno de


Nicolás Maduro a liberar al dirigente, peticiones que han sido ignoradas en su totalidad.
5. Retraso en procesos electorales y diálogos fracasados

En 2016, la oposición venezolana impulsó un referendo revocatorio al primer


mandatario venezolano, proceso descartado y suspendido por el poder electoral
(CNE), debido a “irregularidades” en la recolección de la voluntad popular a través de
firmas en las calles. Por ello, millones de venezolanos acudieron todos los días a
mostrar su rechazo a la gestión actual. En respuesta a esto, la oposición solicitó el
adelanto de los comicios presidenciales pautados para finales de 2018, pero Maduro
rechazó el requerimiento de inmediato; a esto se le añade el hecho de que las elecciones
de gobernadores cuenta con, al menos, seis meses de atrasos, lo que viola las leyes
electorales.

Otro punto son los fracasados intentos de diálogo por parte de la oposición y el
gobierno, gestiones que contaron con acompañamiento de organizaciones
internacionales como la UNASUR y el Vaticano. De tales conversaciones surgieron
contradicciones y acusaciones de ambos bandos de violar los acuerdos, lo
que generó frustración y molestia en los venezolanos que confiaron en esa mesa de
negociaciones.

En días recientes, Nicolás Maduro realizó un llamado a la oposición a retomar el


diálogo y mostró su intención de acceder a las elecciones regionales, acción que para los
líderes opositores no es más que un táctica de distracción para “ganar tiempo” en la silla
presidencial.

Venezuela continúa en una contienda sin fin por el logro de estabilidad y la


recuperación de una nación que fue modelo de prosperidad en políticas de crecimiento y
avance, pero hoy se encuentra estancada en una crisis humanitaria, pues toda dictadura
provoca caos.

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