Você está na página 1de 4

UNIVERSIDAD JORGE TADEO LOZANO

MAESTRÍA EN ESTÉTICA E HISTORIA DEL ARTE


SEMINARIO DE HISTORIOGRAFÍA DEL ARTE EN COLOMBIA Y
LATINOAMÉRICA
NATHALIA LÓPEZ ZAMBRANO
OCTUBRE DE 2016

“La inercia natural del hombre sólo se supera con el deseo, y nada se hace a
menos que sea deseable.” (Kubler, 1988)

Tomando como partida el texto: La Configuración del Tiempo escrito por


George Kubler, y para proponer un comentario crítico de los mismos, es relevante
establecer el panorama que plantea éste:

Kubler, inicia el texto reflexionando acerca de la forma en que nos hemos


propuesto el tiempo como práctica, como concepto, y en su configuración,
entendiéndose éste, como una estructura adherida a todo nuestro habitar; que de
manera intrínseca al sistema de las cosas, y los elementos hacen vida,
conformando realidad en sincronía con lo inserto en el mundo.

Es viable considerar, el planteamiento de diferentes tiempos, ya sean en


ejecución, en prospectiva, en acción; unos son los tiempos destinados y diseñados,
mientras que otros, serán los utilizables, los consumidores y consumibles, los
objetos, la arquitectura, las prendas, los utensilios, tendrán tiempos destinados tanto
para su duración como para su usabilidad; sin embargo pensar en la prospectiva del
tiempo, inherente a situaciones más intangibles y problemas de carácter metafórico,
acarreará contextualizarnos en cuanto a su entorno próximo, es por tanto que la
cuestión estaría en pensar sobre el tiempo en el arte y más allá de ésto, el tiempo
en la imágen o parafraseando al autor, en las cosas sin utilidad.
En el campo del arte, el área de conservación se preocupa por preservar no
sólo la pieza, sino en considerar el tiempo transcurrido como un elemento más, cuyo
valor debe ser considerado un componente relevante que hace parte y aporta a la
obra. En tal caso, el efecto del tiempo sobre la muestra, se considera, de manera
independiente al tiempo que tenga cronológicamente la pieza, es decir uno es el
efecto del tiempo y otro el alcanzado, de este modo obtenemos una variedad de
tiempos que bien pueden hallarse en otras instancias y materialidades.

Para el autor, pensar el tiempo (y lo que implica esto, según los


planteamientos del escritor,) no puede ceñirse a una cuestión numérica o si se
quiere científica, el tiempo obedece a un lenguaje y relaciones, mismas que
comienzan a polemizar con el origen de los objetos, es allí cuando el concepto de
réplica para el autor, conlleva a una problematización del tiempo inmanente; “las
réplicas pueden reflejar directamente magnitudes tales como riqueza, población y
energía”. (Kubler, 1988), por tanto, dimensionar la vinculación del tiempo hacia la
serialidad y el original, pre supondrá, por una parte la contextualidad requerida de la
pieza original para ser, así como por el lado de la réplica la dependencia referencial
de su objeto original para conllevar y narrar su existencia como secuencia que es.

De acuerdo a lo anterior, vincular esta idea de percepción y concepción del


tiempo, con la narración biográfica del artista, haciendo hincapié en las carentes
emociones de las que pueden prescindir la vida de un artista, pero que si bien,
pueden abstraerse y saberse contar, la narración será exitosa y hará memorable a
su portador. Sin embargo, de acuerdo a esto, el autor propone dos modos de
observar los protagonistas de la historia del arte, a los que preliminarmente
considerará como “Innovadores”.
En primera instancia, están los “precursores” aquellos que generan
escenarios y en segundo lugar, los “Rebeldes”, aquellos que trabajan a partir y con
lo que disponen a la mano, considerando transformar su entorno.
De acuerdo a lo anterior, es relevante aclarar que también en estas instancias
son aplicables al concepto de “original” y “réplica”, entendiéndose el precursor, como
aquel sin copia y el rebelde como la multiplicación de motivos y razones que están
destinados a desarrollarse entre las masas.

Pero Kubler, trae a colación otro término que dibuja más características al
definir al hombre, tanto en la antigüedad como en la actualidad y son los tipos
“Versátiles”, aquellos que generalmente surgen de los desplazamientos sociales y
las problemáticas coyunturales que implican transformaciones existenciales.

Por lo anterior, es pertinente aclarar que para el autor, los términos que
logran definir el comportamiento y pertinencia del hombre dentro de su contexto
temporal, es un efecto que no se logra deslumbrar fácilmente, de hecho sugiere que
es el historiador aquel que a través de su percepción panorámica de los hechos,
logra abordar con claridad lo sucedido.

Es entonces cuando para referenciar estos hechos, y luego de realizar la


revisión a la lectura procuró hallar un caso que pueda ejemplificar los conceptos, y
en tanto me propongo distanciarme de las referencias clásica y artísticas, que el
autor propone en el texto, es entonces cuando viene a mi el mundo de la moda, su
tendencia y continuidad cíclica y personajes que como Coco Chanel, lograron estar
entre las fronteras de lo “rebelde” y lo “precurso”, un área donde el tiempo si bien
marca distancias y nodos temporales, continuamente se somete al reciclaje
conceptual y formal.

FUENTES DE INFORMACIÓN

● Kubler, G. (1988). La Configuración del Tiempo. ---: Editorial


NEREA.

Você também pode gostar