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Evaluación psicológica.

Concepto y definición de evaluación psicológica

TEMA 1. CONCEPTO Y DEFINICIÓN DE EVALUACIÓN PSICOLÓGICA

1. ANTECEDENTES HISTÓRICOS

A) INICIO DE LAS PRUEBAS PSICOLÓGICAS

1) Primeros antecedentes
Las primeras pruebas rudimentarias se situarían alrededor del año 2200 a.C. Los
emperadores chinos las empleaban para seleccionar a los funcionarios públicos.

2) Inicio de las pruebas psicológicas


El comienzo de las pruebas psicológicas, tal y como las conocemos hoy, nacieron en Alemania y
Gran Bretaña a finales del siglo XIX con los siguientes autores experimentalistas:
a) Wilhem Wundt (1832-1920): Fundó el primer laboratorio psicológico en 1879 en Leipzig,
Alemania. En 1862 experimentó con su medidor del pensamiento.
b) Sir Francis Galton (1822-1911): Pionero de la nueva psicología experimental en la Gran
Bretaña del siglo XIX. Principal responsable del inicio del movimiento psicométrico. Galton es
uno de los principales seguidores de Charles Darwin (1809-1882). Fue el primero en la aplicación
de los principios evolucionistas al estudio del hombre. Contribuyó especialmente a la Evaluación
psicológica por su interés en las diferencias individuales).

Galton tomó muchas ideas de Darwin y los procedimientos psicofísicos utilizados por Wundt,
adaptándolos a medidas psicométricas sensoriomotoras simples que sirvieron para recoger
miles de datos de sujetos. Estas medidas eran tanto del campo conductual como del físico:

Pruebas conductuales: Medían fortaleza de la prensión ejercida con una mano determinada
con un dinamómetro, capacidad pulmonar medida con un espirómetro, agudeza visual, tono más
alto audible, velocidad de soplo y tiempo de reacción tanto para estímulos visuales como
auditivos.

Medidas físicas: Evaluadas estatura, peso, longitud y anchura de la cabeza, longitud del brazo,
longitud del dedo corazón y del antebrazo, entre otras.

c) Alphonse Bertillon (1853-1914): Partiendo de los datos antropométricos, se interesa por las
discrepancias individuales. Ideó un sistema de identificación policial a partir de una cantidad
exhaustiva de graduaciones de diversas partes del cuerpo con el objeto de establecer una pauta
para cada delincuente. Creó una ficha de filiación, en la cual hizo figurar cierta cantidad de
medidas invariables para un individuo. Procedimiento con buena acogida en ese momento, pero
después se comprobó su ineficacia.

d) James McKeen Cattell (1860-1944): Universidad de Columbia. Estudió con Wundt y Galton.
Hizo estudios sobre tiempo de reacción (1880-1882). Estaba interesado en el estudio de las
características generales de la mente. Creó su propio laboratorio de investigación y diseñó
una serie de pruebas que eran extensiones y añadidos a la batería de Galton.
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Cattell (1890), inventó el término test o prueba mental en su trabajo Mental Tests and
Measurements, se describía su programa de investigación y detallaba los 10 tests mentales para
su administración con población general.

Otros autores:

 Clark Wissler (1870-1947): Investigó para demostrar que los resultados de los tests mentales
podían pronosticar el desempeño académico, sin embargo, llegó a la conclusión de que esto no
era así. Debido a esto, los psicólogos experimentales abandonaron el uso del tiempo de
reacción y de la discriminación sensorial como medidas de la Inteligencia.

 Lightner Witmer (1867-1956): Interesado en el estudio de las diferencias Individuales,


aunque se centró en la aplicación práctica de los conocimientos psicológicos. Witmer
funda la primera clínica psicológica (1896), siendo el nacimiento de la psicología clínica y él el
creador del término Psicología Clínica. Al inicio no disponía de pruebas específicas de
evaluación y utilizaba solamente la entrevista. Después, aparecen los tests y crea el Witmer
formboard y el Witmer cilindres. Focalizó su trabajo en la evaluación de conductas
específicas de los sujetos con vistas al tratamiento de dichas conductas.

 Charles Edward Spearman (1863-1945): Aplica los métodos correlacionales a la


investigación de la inteligencia. Publica “General Inteligence, objectively determined and
measured” (1904), cimentando las bases de la teoría psicométrica. Autor de la primera gran
teoría de la inteligencia, denominada teoría de los dos factores (un factor general y varios
factores específicas).

Teoría de los dos factores: La capacidad representada en el factor general (factor g) está
relacionada con todas las tareas intelectuales, mientras que las capacidades representadas en
los factores específicos se relacionan con tareas sencillas. En los años 30, este esquema
bifactorial será sustituido por un modelo multifactorial representado por Thurstone.

B) PRIMERAS PRUEBAS DE EVALUACIÓN DE LA INTELIGENCIA

1) Alfred Binet (1857-1911). Escala de Binet-Simon

Binet diseñó la primera prueba de inteligencia en 1905, con la finalidad de identificar a


aquellos niños que no podían aprender a través de los métodos normales y deberían pasar de las
clases ordinarias a una educación especial de acuerdo con su capacidad intelectual. Comenzaron
las clases de educación especial.

Para este fin, se solicitó a Binet y sus colaboradores que diseñasen una “prueba”. Fue la
primera escala formal para evaluar la inteligencia de los niños.

La escala de Binet de 1905 tenía sus diferencias respecto a otras anteriores en los siguientes
aspectos:

 Tenía como fin evaluar el desarrollo mental general del niño con un grupo heterogéneo
de tareas. La finalidad no era la medición, sino la clasificación.
 Era una prueba breve y práctica (menos de una hora).
 Esta prueba media de forma directa el factor esencial de la inteligencia, es decir, el juicio
práctico. Este juicio práctico puede definirse como “sentido común, Iniciativa o facultad para
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

adaptarse”. Para estos autores, “juzgar bien, comprender bien y razonar bien son las fuentes de
la inteligencia”.

La escala se componía de 30 tareas, desde las pruebas sensoriales simples hasta las
abstracciones verbales complejas. Veamos:

 Evaluaba la gama completa de la inteligencia (retraso mental grave hasta los niveles
superiores o superdotados).
 Las pruebas muy sencillas evaluaban los niveles intelectuales más bajos.
 Las tareas tenían importantes cargas hacia las habilidades verbales.

Binet y Simon no ofrecieron en su escala de 1905 un método preciso para llegar a una
puntuación total. Este autor pensaba que se podía aumentar el rendimiento intelectual a
través de un entrenamiento especial, por eso, recomendó cursos de rehabilitación de
ortopedia mental para aquellos sujetos que ofreciesen puntuaciones bajas en los tests.

Binet (1908), hizo una revisión de la escala añadiendo el concepto de Edad Mental. La E.M.
proporcionaba una puntuación total del sujeto a la prueba.

Edad mental: Medida del rendimiento en el test de inteligencia ideada por Binet que indica la
edad en que por término medio las personas normales resuelven ese mismo número de
problemas. Por ejemplo, un niño de 9 años de edad cronológica obtenía una E.M. de 6 años en
esa Escala, tenía un retraso de 3 años.

2) William Lewis Stern (1871-1938)

Stern (1912), subrayó que un retraso de 3 años podía tener diferentes significados,
dependiendo de la edad cronológica. Por ejemplo, un niño de 5 años que funciona a un nivel
de 2 años de edad tiene una alteración mayor que uno de 13 años que funciona a un nivel de 10
años.

Stern dijo que un Cociente de Inteligencia, calculado a partir de la división de la Edad Mental
entre la edad cronológica, daría una mejor medida del funcionamiento relativo de una
persona en comparación con individuos de su misma edad.

3) Henry Herbert Goddard (1866-1957)

Goddard (1910), tradujo al inglés la escala Binet-Simon de 1908 para administrarla en Estados
Unidos.

Se administró la Escala en EE.UU a más de 1.000 escolares con las normas y criterios de
aplicación franceses originales. Se encontró que el 3% de la muestra fueran “débiles mentales”
y se les marginó de la sociedad.

Muchos psicólogos vieron que esta nueva prueba no era apropiada para sujetos no
angloparlantes, analfabetos o sordos, entonces empezaron a surgir multitud de escalas de
ejecución no verbales.

Knox (1914), desarrolló las siguientes pruebas de ejecución no verbales:

 Prueba con rompecabezas de madera.


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 Sustitución de dígitos por símbolos (conocida actualmente como clave de números en el WAIS).
 Diseños con Cubos (1920), que requería que la persona ensamblara cubos pintados para
reproducir un patrón (también muy popular por su inclusión en el WAIS).

Prueba Porteus de Laberintos (Porteus, 1915): Consiste en una serie graduada de laberintos
en los cuales deben evitarse los callejones sin salida, mientras se traza un camino desde el
principio hasta el fin.

4) Lewis Madison Terman (1877-1958)

Terman (1918), dio a conocer las pruebas de inteligencia a partir de su revisión de la escala de
Binet-Simon. Este autor la llamó la nueva Stanford-Binet, con una amplia revisión.
Innovaciones:

 Inclusión en la prueba del Cociente de Inteligencia propuesto por Stern, determinando


multiplicarlo por 100 para eliminar las fracciones.
 Se utilizó la abreviatura C.I. para referirse al cociente intelectual.

La Stanford-Binet (SB) fue el prototipo de test de inteligencia durante muchos años (las
nuevas pruebas se validaban siempre en términos de sus correlaciones con la prueba de
Terman), siendo su última revisión de 2003.

Ya en los años 50, la Stanford-Binet se veía desplazada por las escalas Wechsler para la
evaluación de la inteligencia.

Una de las ventajas importante de las escalas de Wechsler frente a las de Terman era que
además del C.I. Total, las escalas Wechsler proporcionaban de 10 a 12 puntuaciones de
subtarea y un C.I. Verbal y otro C.I. Manipulativo.

Las versiones anteriores de Stanford-Binet, sólo proporcionaban una puntuación general de


resumen, el C.I. global. Esta desventaja se superó a partir de la 4ª versión de la Stanford-
Binet.

Una de las ventajas de la SB en relación a otras pruebas de evaluación de inteligencia es que


resulta más adecuada para la evaluación psicométrica del retraso mental.

5) David Wechsler (1896-1981)

Wechsler pudo compensar los problemas que presentaba el concepto de Edad Mental de
Binet. Veamos:

 Binet estimó la edad mental como una variable para medir las habilidades de los niños en
díferentes edades, pero comprobó que la ejecución no se incrementa en función de la
edad más allá de los 15 años, y esa edad dependía de las tareas.
 El concepto de Edad Mental no tiene efectos prácticos después de los 15 ó 16 años, ya
que las puntuaciones medias no aumentan a esa edad de un modo significativo.
 Para que una Edad Mental resulte significativa es necesario señalar siempre la edad
cronológica del sujeto, como indicó Terman al utilizar el concepto de C.I. Este concepto hacía
difícil comparar el funcionamiento intelectual de sujetos de distintas edades cronológicas porque
la inteligencia se desarrolla a ritmos distintos a diferentes edades.
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Para solucionar estos problemas, Wechsler hace lo siguiente:

 Varía el concepto de C.I. Para él, los C.I. se obtienen tipificando las puntuaciones al comparar
los resultados directos de cada sujeto con las puntuaciones alcanzadas por los sujetos de la misma
edad. Este C.I. indica cuánto se aparta, por encima o por debajo del resultado medio de los sujetos
de su grupo de edad.
 El C.I. de 100 se considera la puntuación total media de cada edad y la desviación típica
tiene un valor de 15.
 Una ventaja sustancial de este método consiste en que la variabilidad del C.I. es constante de
uno a otro intervalo de edad. Un cierto C.I. tiene siempre la misma significación con respecto a las
personas de su grupo de edad.

C) LAS GUERRAS MUNDIALES Y EL DESARROLLO DE PRUEBAS COLECTIVAS

1) Primer Guerra Mundial (1914-1918)

La 1ª Guerra Mundial propició la aparición de las pruebas colectivas de administración más rápida.
Fue uno de los acontecimientos históricos que más importancia ha tenido en el desarrollo del
psicodiagnóstico.

Robert Mearns Yerkes (1876-1956), profesor de psicología en Harvard, propuso al Gobierno y al


Ejército que todos los reclutas deberían hacer una prueba de inteligencia con la finalidad de
clasificación y asignación.

Yerkes compuso un Comité de Examen de Reclutas para desarrollar un grupo de pruebas para
la evaluación de los soldados. Yerkes presidió el Comité e incluyó a Goddard y Terman. Surgieron
2 pruebas colectivas:

 Army Alfa: Se componía de 8 pruebas de contenido verbal para administrar a reclutas que
tenían desde un funcionamiento promedio hasta uno superior.
 Army Beta: Prueba colectiva no verbal diseñada para administrar a analfabetos y reclutas cuyo
primer idioma no era el inglés. Se componía de varias pruebas visoperceptivas y motoras:

2) Segunda Guerra Mundial (1939-1945)

Durante la Segunda Guerra Mundial se desarrollaron las pruebas de aptitud.

Definición pruebas de aptitud: Miden capacidades más especificas y delimitadas que las de
inteligencia. Mientras que las pruebas de inteligencia evalúan una inteligencia general, las
pruebas de aptitudes miden:

 Pruebas de una sola aptitud: Medirá exclusivamente un dominio de capacidad.


 Batería de pruebas de aptitud múltiple: Proporcionará las puntuaciones de varias áreas de
capacidad.

Los requerimientos de la Segunda Guerra Mundial para seleccionar urgentemente personal muy
cualificado (pilotos, ingenieros de vuelo, copilotos, etc.) planteó la necesidad de contar con
pruebas de aptitudes más especializadas, diseñando una batería de aptitud con 20
pruebas que se aplicaba a los varones que aprobaban las pruebas de selección preliminares.
Muchas de estas medidas se utilizan todavía ampliamente en ejército.

Todo ello, y el desarrollo de la tecnología del análisis factorial propició la aparición de los tests de
Aptitudes Generales. Veamos:

 Batería de Aptitudes Diferenciales (DAT), George K. Bennet (1947): Fue la primera batería
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

integrada para la evaluación de distintas Aptitudes Generales. Se empleó para la orientación a los
alumnos de enseñanza secundaria norteamericanos.
 Test de Aptitudes Mentales Primarias (PMA), Louis Leone Thurstone: Según Fernández
Ballesteros este test fue anterior al DAT, ya que una versión inicial fue en el año 1941.

D) PRIMERAS PRUEBAS DE PERSONALIDAD

Las primeras pruebas de personalidad aparecieron en la 1ª Guerra Mundial.

Robert Sessions Woodworth (1869-1962): Diseñó un instrumento para detectar a los


soldados que fueran susceptibles a los cuadros neuróticos. Creó el Woodworth's Personal
Data Sheet (Hoja de Datos Personales de Woodworth, 1914).

Este instrumento contenía 116 preguntas que se podían contestar marcando si o no. La mayoría
de las preguntas implícaba sintomatología bastante grave.

Desventajas:

 Un sujeto con alteraciones psicopatológicas podía ocultarlas sin que se detectara.


 Un sujeto asintomático con la intención de dar una mala impresión, podría categorizarse como
incapaz para el servicio militar.

DEFINICIÓN Y CONCEPTO DE LA EVALUACIÓN PSICOLÓGICA (Ballesteros)

A lo largo de la historia se han utilizado indistintamente varios términos para referirse a ella, entre
otros: medición, psicodiagnóstico y evaluación psicológica. Se han utilizado los tres hasta 1970 en
el que destaca la denominación evaluación psicológica sobre las otras dos. Concretamente en
España aparece por primera vez en los manuales con esa denominación en 1982, ya que en 1981
en la Universidad Autónoma de Madrid hubo una reunión de muchos profesionales de la materia y
se llegó a un acuerdo para variar el nombre de la asignatura “psicodiagnóstico” por el
de “Evaluación psicológica”.

Término de medición:
En un principio la psicología se basó en la medida y eso fue esencial para el desarrollo de la propia
psicología y también para el campo de la evaluación, pero hoy en día hay un área específica que se
ocupa de la medida, la psicología matemática, que en sus funciones se diferencia claramente de la
evaluación.
La medición es el uso de métodos cuantitativos para medir las respuestas de las que se infieren la
existencia y la intensidad de los procesos psicológicos. Dentro de los procesos de la evaluación
psicológica se efectúan muchas medidas, de hecho, la aplicación de tests consigue la obtención de
una gran cantidad de medidas acerca del sujeto, pero la evaluación es algo más complejo que la
obtención de medidas. Este sería el término que en el momento actual quedaría más alejado de lo
que entendemos por evaluación psicológica ya que sólo sería una parte de esta.

Término psicodiagnóstico:
Aparece por primera vez en 1921 en el nombre de un libro que es: “Psicodiagnóstico de la
personalidad a través de los test de Rorschach”, aparece asociado al diagnóstico de la
personalidad. El término diagnóstico está tomado del vocablo griego que significa “conocer
acabadamente”, si lo aplicamos a la personalidad sería conocer completamente a la personal para
reconocer al sujeto. Como es un término tomado de la medicina, la estado muy marcado su
enfoque hacia la enfermedad, hacia el déficit, pero el psicodiagnóstico se ocupa tanto de los
déficits como del estudio de las capacidades límites máximas (intenta analizar tanto lo deficitario
como lo sobrante, los límites). Además tiene una segunda afección que es lo que tiene que ver con
la predicción, ya que el psicodiagnóstico además de medir establece valores predictivos de cara a
la persona. El psicodiagnóstico hace referencia a la globalidad del sujeto, ya que interesa estudiar
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

al sujeto en su complejidad, su objetivo está más allá de la aplicación de test ya que quiere
conocer por completo el funcionamiento psicológico utilizando tanto tests como otras técnicas de
evaluación.

Término Evaluación Psicológica:


Es el más moderno en aparecer, nace del deseo de separarse del psicodiagnóstico, asociado a la
medicina. En España se utiliza en 1982.

El resumen del concepto hecho por Pervin sería: “Un proceso de recopilar información y
extraer conclusiones acerca de los rasgos, habilidades, capacidades, funcionamiento
emocional y problemas psicológicos del individuo. Es la base de la investigación y el
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

desarrollo de teorías de personalidad, psicología diferencial, psicopatología, así como de


psicodiagnóstico y tratamientos”.

La evaluación se entiende como una parte del psicodiagnóstico. Esta definición de Pervin sirve para
describir muy bien la evaluación y diferenciarlo de otros términos.
La equivalencia entre psicodiagnóstico y evaluación no es igual, el término psicodiagnóstico lo
utilizan más los modelos psicodinámicos y psicoanalíticos, sin embargo, el término evaluación se
utiliza más en el modelo conductual y en el modelo congnitivo - conductual.

El proceso de psicodiagnóstico es independiente del tratamiento, es decir, para poder orientar al


sujeto y llegar a la actuación se requiere antes la realización de un diagnóstico, se hace en dos
pasos, no es un contínuo. Sin embargo en el modelo conductual y en el congnitivo - conductual, se
aplica el tratamiento a la vez que se dictamina el diagnóstico.
Síntesis de ambas concepciones tomando como equivalentes psicodiagnóstico y
evaluación: Es una labor integradora en la que la persona es objeto de estudio y valoración a
través de diferentes manifestaciones de su conducta: De los procesos, niveles, contenidos y
componentes de la conducta, entendida como una totalidad actuante en y desde una situación, un
contexto y un ambiente...Lo valorado es tanto lo normal o adaptativo, como lo anormal o
desadaptativo, lo sobrante y lo defectual, los aspectos susceptibles de cuantificación y los
cualitativos.

Plantea la evaluación como “un proceso de duración limitada que se basa en una relación
bipersonal. Tiene como objetivo lograr el conocimiento, la descripción y la comprensión
de la personalidad de un sujeto. Se apoya en una serie de técnicas para lograr ese
objetivo. Se centra en algún tema concreto que es el que origina la demanda de
intervención por parte del psicólogo y debe incluir aspectos del pasado, del presente y
del futuro”.

Esta definición hace referencia a la duración, a la temporalidad ya que hace falta un espacio de
tiempo para recoger información del sujeto a estudiar en diferentes momento vitales, para que la
información no esté sesgada por un acontecimiento actual. Además el proceso temporal es
necesario para que el sujeto se implique en su propio proceso de evaluación y pueda sentirse como
una sujeto activo y no como un mero objeto de estudio.
Generalmente para un proceso de evaluación completo se requieren entre 6 y 8 sesiones (esto
sería una situación ideal), de 50 minutos a 1 hora cada una. Se suelen distribuir en 2 o 3 sesiones
por semana de manera que en un plazo de 3 semanas el proceso de evaluación haya concluido.

Son más duraderos los procesos con niños y adolescentes que con adultos porque con los primeros
se incluye además la entrevista con los padres, lo que implica de 3 a 4 sesiones más de lo habitual.
El mismo caso ocurre con adultos psicóticos que también requieren de sesiones con los padres,
tutores u responsables ya que no pueden sostenerse por sí solos. Salvo estos casos las sesiones
son como ya hemos indicado.

Por ultimo se realiza la “entrevista de devolución” que es una entrevista con el sujeto (o con sus
responsables, según el caso) donde se le expone la evaluación realizada, suponiendo el cierre del
proceso diagnóstico.

Plantea varios problemas técnicos tanto alargar como acortar las sesiones innecesariamente
porque dificulta el proceso diagnóstico

En algunos casos se acorta excesivamente, llegando a su caso límite en la sesión única donde a
través de entrevista o test se hace la evaluación. No hay ninguna técnica que pueda sustituir al
conocimiento del sujeto, eso requiere únicamente tiempo. La entrevista no debe ser única porque
los procesos psicológicos de manifiestan en el tiempo de manera que los diferentes momentos es
lo que nos va a dar una idea más aproximada de lo que es el sujeto. Cuando la sesión se acorta
excesivamente, el psicólogo tiene que cubrir la información que le falta con imaginación y
deducción e intentado rellenar las lagunas de su conocimiento, de manera que pone en el
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resultado mucho más de su mundo personal y no del sujeto, cometiendo así una falta ética y
técnica. Otro problema que genera un funcionamiento corto es que se crea dependencia por parte
del sujeto ya que la una información que le queda al sujeto del psicólogo es que es un ser
omnipotente que lo sabe todo y que no necesita ni hablar con él para saber lo que le ocurre, esto
se presta a un error ya que el sujeto tiene que estar activo en las sesiones y mediante este
procedimiento o se muestra pasivo o se muestra rebelde. Cuando esto pasa en casos con niños, los
padres tienden a desentenderse del niño en pro del psicólogo.

Cuando se alarga la sesión, el sujeto puede tener la sensación de haberse convertido en un


conejito de indias, en un mero objeto de estudio, las falacias que suele crearse el sujeto son de
incurabilidad, de enfermedad, siente que no va a salir nunca de ahí. Por otra parte, se le somete a
un exceso de pruebas y un exceso de información que después es muy difícil de sintetizar.
También se confunde lo que es un proceso diagnóstico con lo que sería un proceso
pseudoterapeútico, y es pseudoterapeútico porque se genera en el sujeto la fantasía de que esta
siendo evaluado cuando en realidad sólo se está procediendo a una recogida de información. Todo
esto incide negativamente en la relación sujeto - psicólogo.
Sin duda el mejor proceso de evaluación es que recoge la mayor información pertinente (es decir,
únicamente la información necesaria para la evaluación) en el menor tiempo posible.

En la definición también se hace referencia a que la evaluación se basa en una relación


bipersonal. Esto hace referencia a que se basa en dos roles, el de sujeto y el de psicólogo. Lo
normal es que se asigne sólo una persona a cada rol, pero puede ocurrir que dos o más personas
desempeñen un mismo rol. En el caso del rol de psicólogo puede haber más de un psicólogo y
entonces el equipo sería el encargado de analizar a esa persona, todos los miembros deben
siempre hablar en representación del grupo y han de estar todos presentes en la entrevista final.
Lo que implica el rol del psicólogo es la labor de entender y conocer en profundidad al sujeto para
poder explicarle que es lo que necesita, que es lo que le pasa, como funciona, cual sería el
procedimiento para lograr sus objetivos…También el psicólogo en su rol, se compromete a guardar
el secreto profesional (que se establece en su código deontológico) y está obligado a mantener un
respeto respecto al sujeto, ya que el psicólogo no es superior a su paciente, en todo caso es
complementario
El rol de sujeto también puede implicar uno, dos o más sujetos, por ejemplo una pareja o un hijo
esquizofrénico y su madre, pero en todo caso se unirían en un mismo rol. Lo que se espera del
sujeto es que acuda puntualmente a sus sesiones, que responda a las preguntas que el psicólogo
haga, ya que van a servirle de ayuda para saber cual es su problema. Se espera que suministre
toda la información complementaria necesaria para el proceso (informes escolares, médicos, etc…).
También se espera de él que abone sus honorarios (se le explica la forma de a hacer la forma de
pago, ya sea directa o indirectamente) y sobretodo que se implique activamente en el proceso, ya
que es su proceso.

El psicólogo generalmente habla de usted al paciente para marcar los límites y la relación que
piensa establecer. Esta relación entre los dos se llama “relación transferencial”, “alianza
terapeútica” o “raport”, si no se crea un vínculo suficientemente sólido no hay un trabajo
psicológico satisfactorio.
El proceso de evaluación es un proceso de investigación basado en el método científico hipotético
- deductivo, cuyo objetivo sería que mediante una serie de hipótesis se llegara a la resolución de
un problema.
Para llevar esto adelante se llevarán a cabo una serie de técnicas, la principal es la entrevista y
también la batería de test (que consta de test proyectivos, psicométricos y métodos clínicos). Para
llevar a cabo la evaluación en función de las entrevistas iniciales se selecciona qué método se va a
utilizar, en qué orden y con qué frecuencia.

En la definición que hemos tratado, también se incluyen elementos del pasado, presente y
futuro. Los elementos del pasado hacen referencia la historia clínica del sujeto, la “anagesis” que
es una entrevista de reconstrucción de la vida del sujeto, la historia de su desarrollo evolutivo, son
aspectos diacrónicos. Los aspectos del presente se basan en el momento actual del sujeto, el
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

momento sincrónico. Y por último los momentos futuros se realizan de cara a la predicción, al
pronóstico de cómo puede evolucionar ese sujeto.
También en la definición se dice que la evaluación se va a centrar en un tema específico, a eso se
le llama “motivo de consulta”. Para hacer un diagnostico general se utilizan técnicas generales,
pero para el motivo de consulta se utilizan técnicas de evaluación específicas que permitan
entender ese motivo. Se intenta relacionar el problema concreto con el funcionamiento general del
sujeto.

LA EVALUACION PSICOLOGICA

La Evaluación psicológica en distintos contextos aplicados es la tarea más frecuentemente


realizada por los psicólogos (Fernández Ballesteros, 1994). La constante en todos los contextos en
los que se aplica la evaluación consiste en una serie de actividades de exploración, medida o
análisis de comportamientos o fenómenos psicológicos relativos a un sujeto, o grupo especifico de
sujetos, y que ello se realiza mediante un proceso de indagación y toma de decisiones. La
diversidad se encuentra en que tales actividades se realizan con variados propósitos, en contextos
diversos. Por lo tanto, no es nada excepcional entender que tal pluralidad de actividades, contextos
y objetivos psicológicos hayan determinado que a lo largo del tiempo y de los distintos medios
culturales, las acciones evaluativas hayan adoptado distintas denominaciones.

Por otra parte, la evaluación psicológica incluye la aplicación de tests o técnicas de evaluación, es
decir, independientemente del objetivo o contexto de evaluación, han de ser aplicados una serie de
dispositivos de medida o análisis en los que basar los juicios emitidos. La evaluación es un término
más amplio que el correspondiente a la mera aplicación de tests, debido a que connota la
integración y valoración de la información recogida.

La Evaluación Psicológica se considera como una subdisciplina de la psicología científica. La


diferencia fundamental entre psicología y evaluación psicológica se encuentra en el objeto de
estudio. Mientras que la psicología estudia la conducta humana con el fin de llegar a establecer los
principios generales que en ella rigen, la evaluación se dirige al estudio científico de un sujeto
como ente individual, y por extensión, también a un grupo específico de individuos. Así mismo, el
objetivo de la Evaluación es verificar si los principios generales establecidos por la Psicología en
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

sus distintas especialidades se dan en un sujeto, con los objetivos aplicados de descripción,
diagnóstico, orientación y/o tratamiento. Esto se consigue mediante ciertas tecnologías con las que
dan cuenta la fiabilidad y validez de las unidades de análisis comportamentales.

La evaluación psicológica tiene en cuenta la existencia de varios factores que pueden alterar los
resultados obtenidos o la percepción de sucesos o eventos desde el punto de vista del evaluador.
Estos factores incluyen la reactividad, donde un sujeto cambia su comportamiento al sentirse
observado y aumenta o disminuye en función de la motivación del sujeto para cambiar, el
falseamiento, donde el sujeto miente deliberadamente para presentar una imagen mejor de sí
mismo, y finalmente la deseabilidad social, en el cual un sujeto miente inconscientemente para el
mismo fin.

El Informe de la Evaluación Psicológica

Existen una serie de recomendaciones o aspectos clave a considerar en la elaboración de informes


psicológicos clínicos. Dichas recomendaciones emanan de la consideración de las leyes, normas,
estándares y guías técnicas más actuales. Se indican 10 puntos clave: poseer la cualificación
adecuada, respetar la dignidad, libertad, autonomía e intimidad del cliente, respetar y cumplir el
derecho y el deber de informar al cliente, organizar los contenidos del informe, describir los
instrumentos empleados y facilitar la comprensión de los datos, incluir el proceso de evaluación,
las hipótesis formuladas y justificar las conclusiones, cuidar el estilo, mantener la confidencialidad
y el secreto profesional, solicitar el consentimiento informado y proteger los documentos.

Así mismo, el informe ha de servir de vínculo de comunicación, teniendo en cuenta que su


contenido ha de ser comprensible para los destinatarios (puentear) sin perder su carácter
científico, a la vez de que ha de ser contrastables por otros psicólogos. Además de dar
recomendaciones, y no quedarse solo en una descripción, se debe evitar el informe BARNUM (o
generalización placebo), es decir, un informe ambiguo. Los informes pueden ser de varios tipos,
bien basados en una teoría (útil si el evaluador y el destinatario son del mismo modelo), basados
en técnicas (los resultados son fácilmente replicables por otros científicos) o basados en el
problema a solucionar (redactados y estructurados en función de los objetivos de la evaluación).
Los resultados de la evaluación siempre han de ser incluidos en el informe y expuestos al sujeto
evaluado con la única excepción encontrada en si la información contenida puede ser perjudicial
para él. Se debe explicar el informe oralmente al destinatario, además de por escrito, con el fin de
solucionar dudas o problemas.

La Entrevista

La técnica de evaluación más extendida y utilizada es la Entrevista, debido a su aplicabilidad a una


gran variedad de campos. Según Pope, la entrevista es “un encuentro hablado entre dos individuos
que comporta interacciones tanto verbales como no verbales…basado en una diferenciación de
roles entre los dos participantes. A aquel al que se asigna mayor responsabilidad en la conducción
de la entrevista se le llama el entrevistador; al otro, entrevistado…los objetivos de la entrevista
como un sistema diádico son generalmente determinados por el entrevistador”. Permite la
evaluación de individuos difícilmente evaluados por otros medios (invidentes, analfabetos,
retrasados mentales, etc.).

La entrevista puede tener dos objetivos; bien la de investigación, o la de intervención, bien


evaluativo y con el propósito de intervención. También se pueden clasificar por el grado de
estructuración. Las entrevistas no estructuradas son sin guión y se suelen utilizar mayormente en
las primeras sesiones. Las Semi-estructuradas contienen un marco de referencia del entrevistador
al entrevistado y permiten la expresión libre del sujeto con preguntas abiertas, mientras que las
Estructuradas constan de preguntas cerradas (si/no) y focalización en función de lo que se requiere
únicamente. Lo óptimo es tener un balance entre preguntas abiertas y preguntas cerradas con el
fin de que el entrevistado no se sienta interrogado, y evitar sugerir respuestas en la formulación de
las preguntas, además de ajustar el nivel del lenguaje al del entrevistado.
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

La recogida de información durante la entrevista no debe interferir en la misma, por lo tanto se


tiende a utilizar técnicas audiovisuales, técnicas de escucha o técnicas no directivas de entrevistas
(incluyen actividades como la clarificación, paráfrasis, reflejo, resúmenes por el entrevistador), etc.
Las técnicas directivas parten del marco de referencia del entrevistador y tienen como finalidad
ejercer una influencia sobre el entrevistado. Incluyen el sondeo (preguntas abiertas para identificar
en que consiste el problema), afirmación de capacidad para llevar a cabo una determinada acción,
confrontación (manifestación verbal de la existencias de incongruencias), interpretación,
instrucciones, encuadre (dar información al sujeto de que expectativas puede tener acerca del
problema) e información.

La Observación

Todo el proceso de evaluación lleva implícito algún tipo de observación intencionada del
comportamiento de personas o eventos. Esta observación sistemática va a variar según los
objetivos y así, los datos obtenidos se interpretaran dependiendo del modelo. Existen varios
objetos en la observación, la primera de los cuales son los continuos de comportamiento, que
incluye la observación durante un largo período de tiempo real sin interrupciones. También existe
la observación de atributos, propio del modelo de los rasgos y psicodinámico, donde a través de la
conducta manifiesta se infieren determinados dinamismos inconscientes. En estos dos modelos, la
conducta de por sí no tiene valor, sino que ésta les es concedido por medio de inferencias de algún
rasgo interno. Sin embargo, la observación de conductas incluye lo manifiesto a niveles verbal,
motor y fisiológico. El modelo de interacciones trata de la observación entre dos o más personas o
entre una persona y su ambiente. Finalmente, la observación de los productos de la conducta
evalúa los resultados de las conductas de una persona. Este objetivo se puede dividir en productos
de conducta de ejecuciones del pasado y del presente, con la diferencia de que lo producido en el
pasado es libre del efecto de reactividad. Hay tres tipos de productos de conductas pasadas;
medidas de erosión (destrucciones o daños observables en el ambiente producidos por
consecuencia de la conducta del sujeto), medidas de huella (observación de los resultados de una
conducta plasmada en el consumo), y medidas de archivo (documentos que se pueden archivar e
informes).

Durante la observación se han de medir cuantitativamente la ocurrencia, frecuencia, y duración


bien desde el inicio al final, el intervalo entre la presentación de un estímulo y la respuesta
(Latencia) o el intervalo entre las manifestaciones sucesivas (Intervalo Interrespuesta). Las
dimensiones cualitativas a tener en cuenta son la intensidad o magnitud de la conducta y la
adecuación. Estas unidades de medida pueden ser registradas de una variedad de maneras y una
forma es utilizando registros narrativos, que tratan de la toma de nota de todo lo expuesto durante
el período de exploración. También están las escalas de apreciación o calificación que es una
técnica de registro más sistematizado en la cual una persona en el entorno del sujeto a evaluar
conforma el rol de “juez experto”. Para catalogar la conducta, se suelen utilizar registros de
conductas (formulados por una lista de conductas muy operativizadas con las que el evaluador
observa la frecuencia y ocurrencia de dichas conductas) y matrices de interacción (matrices de
doble entrada en la que se registran interacciones personales).

La observación puede ocurrir en situaciones naturales o artificiales. Las naturales incluyen la


realización de la observación en el medio cotidiano donde se desenvuelve el sujeto, por lo tanto,
tienen más validez externa y menos validez interna que la observación en situaciones artificiales,
que se da en ocasiones o situaciones cuando no es posible la observación natural. Una situación
artificial se puede crear con técnicas de role-playing, accesorios (utilizando videos, fotografías,
etc.), con tests situacionales, creaciones imaginativas y tests psicológicos de ejecución.

La Auto-observación y Auto-informes

Ésta técnica evaluativa obliga al sujeto a atender deliberadamente su conducta y registra toda la
información en algún tipo de registro. Se requiere educación previa para el sujeto con el fin de
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

completar estos registros adecuadamente y con precisión. Las técnicas de auto-observación se


suelen utilizar para conductas íntimas, modalidades de respuesta (pensamientos, expectativas…),
conductas precedidas por reacciones internas, etc. Los procedimientos y técnicas utilizadas
incluyen los de lápiz y papel , autorregistro, gráficos, dispositivos mecánicos, técnicas
cronométricas (medir duración de conductas) y técnicas electrónicas (audio, video, etc.).

Los Autoinformes son utilizados como técnica de registro en las que se pone en uso la auto-
observación para acceder a los procesos encubiertos. Recogen información de rasgos, dimensiones
o factores de personalidad mediante, por ejemplo, tests de personalidad o cuestionarios. También
son útiles para determinar ciertas estructuras y procesos cognitivos como creencias, expectativas y
percepciones (por ejemplo, el locus de control). Pueden emplear preguntas estructuradas (formato
cerrado), semiestructuradas (con pauta sobre la información requerida) y no estructuradas, lo cual
influye en el tipo de respuesta dada: abierta, dicotómica (si/no), escalares (elige una opción) o
ipsativas (asignación de orden de preferencia entre las opciones dadas). Los resultados obtenidos
han de poder ser contrastados empíricamente para demostrar validez y fiabilidad.

Técnicas para la Evaluación

La categoría de técnicas objetivas ha sido utilizada para encuadrar muy variados instrumentos que
pueden definirse como aquellos procedimientos de recogida de información de eventos psicológicos
observables o amplificables mediante aparatos que permiten una administración, registro,
puntuación y análisis objetivo sin la intervención del evaluador, en los dominios cognitivo, motor y
psicofisiológico. Esta definición incluye el concepto de instrumentación cognitiva que evalúan
variables cognitivas observables como los tiempos de reacción la percepción de verticalidad,
aprendizaje discriminativo, etc. La instrumentación motora sirve para medir la coordinación
psicomotriz, es decir, la precisión, rapidez y organización espacial en la ejecución de tareas. De
manera similar, la instrumentación psicofisiológica registra las relaciones entre la fisiología del
organismo humano y la conducta, es decir, las respuestas psicofisiológicas producidas mediante
dispositivos eléctricos o mecánicos.

Las técnicas de calificación, también llamadas subjetivas comprenden aquellos procedimientos de


recogida de información que presentan las siguientes características: en primer lugar, la fuente de
datos puede ser el propio sujeto que se clasifica a sí mismo o a objetos. Así mismo, el tipo de
material suele ser semiestructurado y no enmascarado, es decir, que el material no está tipificado,
es flexible y se adapta a los objetos que se persiguen en cada caso. La respuesta del sujeto es
voluntaria y por lo tanto puede ser falseada ya que se suele percibir la finalidad de la tarea, y el
tipo de tarea que es requerida es la de descripción y clasificación del propio sujeto.

También se utilizan técnicas proyectivas, en las que se parte de que el sujeto cuenta con una
estructura básica y estable de personalidad, integrada por dimensiones, rasgos o construcciones
organizadas de forma idiosincrática. La organización de esta estructura requiere distintos niveles
de profundidad en su análisis, el cual permite la predicción del comportamiento entendiendo la
relación existente entre los inobservables de la personalidad y las manifestaciones conductuales.
Además, ya que el sujeto no es consciente de la relación entre sus respuestas y su mundo interno,
es difícil falsear estas. Estas técnicas suponen la observación del individuo mediante tareas
estandarizadas; tales situaciones pueden ser entendidas a modo de técnicas de manipulación, la
variable independiente es la personalidad (su estructura o atributos internas) y las variables
dependientes las respuestas del sujeto ante tales estímulos. Las técnicas proyectivas se pueden
clasificar como estructurales, temáticas, expresivas, constructivas o asociativas, según el
contenido de las tareas a realizar.
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

La Evaluación en Distintas Áreas Psicológicas

La Evaluación de la Personalidad:

Las personas se suelen presentar con una determinada apariencia externa y cada cual quiere
saber qué hay detrás de esa primera impresión. La Psicología pretende conocer las personas de tal
manera que sea posible, mediante su análisis en un momento dado, predecir su conducta futura
desde una perspectiva científica y, por lo tanto, el concepto o constructo que mejor cubre esa
necesidad de conocimiento del sujeto es la personalidad, que comprende aquello que permite
prever las tendencias estables de una persona a comportarse de una determinada manera en
diferentes situaciones. Como todas las teorías de la personalidad suponen diferencias individuales y
generan formas de evaluación de esas diferencias, las más utilizadas por la evaluación incluyen
aquellas que han ofrecido criterios para la clasificación de los individuos en función de sus
características y que hayan sido útiles en la obtención de conocimientos explicativos de la conducta
humana.
Aunque la explicación de la conducta se hace desde muy diferentes perspectivas, aparecen siempre
unas variantes en la raíz que funda el comportamiento, y naturalmente, estas diferentes
perspectivas aparecen también en el ámbito de la evaluación. Así en primer lugar, la evaluación de
tipos y temperamentos se asienta en marcos teóricos que basan el comportamiento en el cuerpo, y
que este es lo que genera temperamentos, caracteres y constituciones, es decir, el cuerpo como la
explicación última de toda conducta. En segundo lugar, los que sostienen el origen mental de la
conducta evalúan procesos subjetivos, en la mayor parte de las ocasiones, vertidos en el lenguaje,
por lo que la observación se centra en la conducta verbal. Esto se considera en la evaluación de la
personalidad desde criterios racionales y empíricos, en las que los procedimientos más extendidos
dentro de las pruebas verbales se incluyen las entrevistas, inventarios y cuestionarios (ej, el
MMPI), contrastando los resultados con métodos psicométricos. También están los marcos teóricos
que explican la conducta por emociones, y evalúan conflictos utilizando el método de observación
de proyección. Por último, los que explican las conductas por las circunstancias ambientales tratan
de observar las relaciones funcionales y observan fundamentalmente la conducta motora.

La Evaluación de la Motivación:

La evaluación de las variables que determinan la motivación del sujeto hacia la consecución de un
objetivo no sigue siempre el mismo proceso. Según que los objetivos de la intervención psicológica
sean de tipo modificativo, selectivo o clasificatorio, las preguntas a que debe dar respuesta el
proceso de diagnostico psicológico, a fin de posibilitar la mayor validez de las decisiones de
intervención, son distintas. Así, cuando el objetivo de la intervención es la modificación del
comportamiento, se parte del hecho de que un sujeto dado ejecuta una serie de conductas que no
debería realizar o, por el contrario, no actúa como sería normal en unas situaciones dadas. Por
otra parte, cuando el objetivo es la selección o clasificación de sujetos en relación con una o varias
situaciones dadas (ej., selección de personal) se busca el ajuste reciproco entre el sujeto y la
situación. Bajo el titulo de la evaluación de la motivación, se engloban factores como intereses y
valores además de motivos. Las metas definen lo que un sujeto busca conseguir con la realización
de una tarea, lo que le “interesa”, razón por la que en ligar del concepto de meta se han utilizado
con mas frecuencia otros como interés, motivo, valor, etc.
Aunque todos ellos se refieren a procesos comportamentales semejantes, las diferencias de
denominación se deben al contexto en el que se desarrolla o evalúa la conducta. Normalmente, los
intereses se definen por los objetivos hacia cuya consecución se orienta la conducta del sujeto, y
además, también es posible, al igual que se ha hecho en el área de las aptitudes y la personalidad,
determinar científicamente cuáles son los motivos, valores o intereses básicos del sujeto, y no sólo
los que se relacionan con un tipo de situaciones dadas. Aquí se puede incluir la evaluación de los
intereses profesionales (el análisis de las preferencias vocacionales u ocupacionales), la evaluación
de los valores personales e interpersonales (ya que conocer los valores de un sujeto puede servir
para determinar la dirección que tomará su conducta en las situaciones en que las
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

decisiones que tome dependan de aquéllos) y la evaluación de los motivos que afectan al
aprendizaje y al rendimiento
La evaluación de la motivación también engloba la evaluación de las atribuciones y los estilos
atributivos, ya que las expectativas anteceden a la realización del comportamiento y las
atribuciones se dan una vez que éste se ha realizado, con lo que las atribuciones pueden
considerarse como variables dependientes, la consideración del comportamiento como una
secuencia de episodios de conducta ha permitido determinar que las atribuciones especificas y las
tendencias atributivas generalizadas del sujeto (estilos atributivos en relación con hechos pasados
pueden considerarse como variables independientes que influyen sobre las expectativas y
reacciones emocionales del sujeto. De este modo, las causas atribuidas a resultados pueden variar
en primer lugar a si son percibidas como estables o inestables, en segundo lugar, el sujeto puede
percibir la causa a que se atribuye un resultado como ubicada internamente o externamente, Un
ejemplo puede ser la expectativa del resultado de un examen.
Así mismo, la tercera dimensión dentro de la que cabe ubicar las distintas causas de los resultados
es la de controlabilidad (hasta que punto el resultado depende de mi esfuerzo), y la última
dimensión es la de globalidad o especificidad (cuando las causas atribuidas a, por ejemplo, los
fracasos, son internos y estables, afectan de modo global al sujeto, creando bajas expectativas de
éxito en muchas situaciones).
En la evaluación de expectativas, se tiene en cuenta el contenido de las mismas (probabilidad
autopercibida de que el sujeto tiene o no la capacidad o habilidad para conseguir algo), la
magnitud o intensidad de las expectativas (grado de convencimiento de éxito o fracaso) y las
causas de las expectativas (qué variables, bien experiencias, creencias, atribuciones, etc., influyen
en el contenido y magnitud de las expectativas del sujeto).

La Evaluación de La Inteligencia y Las Aptitudes:

En la historia de la evaluación de la inteligencia se han ido formando varios conceptos que se


siguen utilizando actualmente. Uno de ellos es el término aportado por Binet llamado “la edad
mental”, aunque solamente es aplicable en etapas de desarrollo, ya que puede diferir de la edad
cronológica. Posteriormente, Terman y Merrill introdujeron el concepto del cociente intelectual
(C.I.), calculado dividiendo la edad mental por la edad cronológica y multiplicando este valor por
cien. Sin embargo, esta fórmula era imperfecta porque dejaba de ser útil en cuanto se llegaba a la
madurez, es decir, se dejaba de desarrollar la inteligencia, por lo tanto, Wechsler desarrolló el
cociente de desviación que consistía en puntuaciones típicas y centiles que eliminaron el problema
del C.I. El enfoque de estos autores sirvió de base para la creación de un gran número de escalas
destinadas a cuantificar la inteligencia de un sujeto, mediante la realización de varias tareas o
ejercicios, como pueden ser de manipulación verbal y perceptiva, psicomotricidad, etc., a pesar de
que la gran mayoría de las escalas creadas tienen un rango concreto de utilidad basado en la edad
cronológica, es decir, no son aplicables a todas las edades. También existen escalas evaluativas
para individuos con lesiones cerebrales o con algún déficit motor.
Desde el enfoque factorial se planteaba si la inteligencia era una capacidad general, es decir, un
rasgo unitario, o si existían distintos factores o aptitudes que comprendían la inteligencia. La
conclusión final es que existe un rasgo general, pero también hay una serie de aptitudes
conectadas. Desde este mismo enfoque, se defiende que existen distintas aptitudes intelectuales,
el objetivo del cual es aplicar pruebas para evaluarlas o mejorar el rendimiento de un sujeto en
función de sus talentos. Se acepta la existencia de ocho aptitudes especificas que son: la aptitud
verbal (comprensión, fluidez y flexibilidad verbal), aptitud espacial (visualización, relaciones
espaciales o velocidad de rotación, y orientación espacial), razonamiento (inducción; tests de
series, analogías, etc., deducción, y razonamiento), memoria (repetitiva y significativa), cálculo
numérico, aptitud perceptiva (rapidez y precisión), aptitudes psicomotoras (tiempo de
reacción,
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

destrezas manuales, etc.) y finalmente, aptitudes mecánicas. Dependiendo de la aptitud a evaluar,


se aplica una prueba u otra.
Para evaluar aptitudes relativamente independientes que pudiesen ser útiles para fines aplicados al
proporcionar un perfil aptitudinal, se suelen utilizar baterías, por ejemplo, el PMA (Tests de
habilidades mentales primarias) o el DAT (Batería de aptitudes diferenciales). Además, los criterios
para la utilización e interpretación de las pruebas aptitudinales se suelen aplicar para la selección
de personal y orientación.

La Evaluación del desarrollo Intelectual y Social:

La única teoría que ha dado lugar al desarrollo y sistematización de instrumentos de evaluación del
desarrollo intelectual ha sido la de Piaget, por lo tanto se evalúa dentro de este enfoque. Piaget
define la inteligencia como “adaptación” y a “adaptación” como “un equilibro entre la actuación del
organismo sobre su entorno y viceversa”, es decir, un equilibrio entre “asimilación” y
“acomodación”. A fin de que los resultados obtenidos mediante la aplicación de los tests
piagetianos puedan cumplir su función en el campo clínico o pedagógico, es necesario tener en
cuenta los siguientes criterios. En primer lugar, el interés se centra en por qué el niño realiza una
acción, o para qué. También es necesario determinar si el niño tiene capacidad para aprender.
Además de esto, es preciso que el psicólogo sea fiel a los criterios estándar establecidos para
realizar una clasificación del niño en función de los resultados. Los métodos aplicados para
determinar el desarrollo intelectual dependen del estadio en que se encuentra el niño, por lo tanto,
se pueden realizar tres tipos de exploraciones; uno a nivel sensoriomotriz, otro de los niveles
preoperatorio y operatorio, y finalmente la exploración del pensamiento operatorio formal.
Para la evaluación del desarrollo social, se desea conocer hasta que punto un niño ha adquirido
una serie de destrezas o habilidades para adaptarse al entorno, de las cuales se distinguen dos
tipos; habilidades que implican autonomía personal, y habilidades sociales o conducta
interpersonal. Existen varias pruebas, por ejemplo, la edad de desarrollo social de Doll que plantea
que el Cociente Social se calcula con la división de la edad social por la edad cronológica, o la
escala de madurez social de Vineland.

La Evaluación del Desarrollo del Lenguaje:

El lenguaje se suele evaluar para detectar o identificar a niños en una población que requieran
atención especial en lo que se refiere al desarrollo del lenguaje, o para la necesidad de establecer
el nivel y el modo de funcionamiento lingüístico del niño, es decir, determinar el nivel evolutivo del
lenguaje. Un tercer motivo para la evaluación puede ser la necesidad de conocer si el programa de
enseñanza ha producido algún cambio y, en caso afirmativo, cuál es su naturaleza y su magnitud.
Para esto se requiere una comparación entre la evaluación en una situación estructurada, y la
evaluación en su ambiente natural. Una de las variables que se evalúan son aspectos como los
distintos niveles de categorización de la experiencia (ya que el lenguaje es un instrumento
mediante el que la experiencia es simbolizada y comunicada), que consta de que hay diversos
niveles de experiencia clasificados jerárquicamente: Sensación percepción imaginación
simbolización conceptualización.
Otra variable implicada es la de los procesos de lenguaje y orden de adquisición, que consta del
lenguaje interior (simbolización sin palabras), recepción auditiva (comprensión verbal), expresión
vocal (producción verbal), recepción visual (lectura), y la expresión visual del lenguaje (escritura).
Así mismo, la tercera variable trata de los aspectos estructurales y funcionales, como pueden ser
los fonéticos o fonológicos, sintácticos, semánticos y pragmáticos. Aún así, la evaluación del
lenguaje hablado puede ser mediante procedimientos no estandarizados y estandarizados.

La Evaluación del Desarrollo Psicomotriz:

La psiscomotricidad hace referencia a la interacción entre la actividad motora y la psíquica, ya que


la información obtenida del funcionamiento motor también da información de actividades
psicológicos, y por lo tanto, intervenciones sobre los aspectos motores pueden influir en el
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

desarrollo cognitivo. Con la evaluación del desarrollo psicomotor se puede tener mayor
conocimiento de las funciones básicas del movimiento y detectar tempranamente una minusvalía.
Las diferentes áreas evaluadas con pruebas como la escala de Brunet-Lezine son la evolución
postural, aspectos de gesticulación, coordinación de movimiento, lenguaje y escritura, etc.
En lo referente a la motricidad gruesa, se evalúan variables como el tono muscular y
funcionamiento, el desarrollo postural y locomoción, la coordinación, el esquema corporal, las
nociones perceptivas básicas (espacio y tiempo) y el alto rendimiento. De manera similar, la
motricidad fina trata de la evaluación de componentes como la prensión (capacidad de una o
ambas manos para retener un objeto con mayor o menor fuerza y precisión) y la manipulación
(manual). Estas capacidades mejoran (en sujetos normales) conforme aumenta la edad. Así
mismo, la coordinación visomotriz engloba el modo segmentado de considerar la coordinación
general, ya que los comportamientos que aquí se complementan requieren la presencia de un
estímulo y producción de una respuesta manual. Los requisitos necesarios son la prensión y visión.

La Evaluación Psiconeurológica:

La psiconeurología comprende la relación entre los procesos psicológicos y los neurológicos


(atención, percepción, memoria, aprendizaje, etc.). Por evaluación psiconeurológica, se entiende
las técnicas indirectas no invasivas que permiten analizar si existen alteraciones en las funciones
psicológicas debido a alguna disfunción cerebral. En función de los resultados nos puede servir
para establecer un programa adecuado de rehabilitación psiconeurológica. Como indicadores de
daño cerebral en técnicas generales de evaluación se utiliza frecuentemente las escalas de medida
de la inteligencia de Wechsler, aunque éste no puede servir para detectar patologías neurológicas,
el psicodiagnóstico de Rorschach y el MMPI. La evaluación psiconeurológica mediante técnicas
específicas son pruebas que se han desarrollado para la evaluación de procesos concretos que
pueden estar afectados por algún tipo de alteración cerebral, y incluyen la escala de memoria de
Wechsler, el test de Retención visual de Benton, el test gestáltico visomotor de Bender y el test de
aprendizaje de California. Las Baterías de exploración neuropsicológica, que permite la evaluación
de distintos procesos psicológicos a la vez, incluyen la batería neuropsicológica de Halstead-
Reitan, el examen neuropsicologico de Luria-Christensen, el Test Barcelona y la batería
idiosincrásicas procesales.

La Evaluación Psicofisiológica

La Psicofisiológica se ha definido como el uso de la medida fisiológica en el estudio de los procesos


psicológicos que subyacen a la conducta y se centra en el registro y análisis de las respuestas
fisiológicas del organismo con el fin de estudiar los procesos psicológicos explicativos de la
conducta. Las respuestas psicofisiológicas forman parte de la conducta total del organismo,
situándose en el mismo nivel que cualquier otro tipo de respuesta utilizada como variable
dependiente en psicología, como el tiempo de reacción o la tasa de aciertos y errores. Sin
embargo, se diferencia de los otros tipos de conducta por su carácter interno, observable
únicamente a través de la aplicación de técnicas poligráficas de registro. Cabe destacar que los
resultados obtenidos por estos aparatos costosos son totalmente objetivos, ya que no se pueden
manipular.
No obstante, la evaluación general del organismo pone en práctica la evaluación psicofisiológica y
activación (drive o impulso de Hull), la activación y personalidad (activación cortical diferencial
para introversión y extraversión; SARA), y el balance autonómico (equilibrio entre el sistema
simpático y parasimpático en cuanto a desinhibición/inhibición emocional). La evaluación específica
del organismo plantea una concepción multidimensional de la activación, y que existen varias
variables autonómicas que funcionan simultáneamente, produciendo el fenómeno denominado
“fraccionamiento direccional”, es decir, que distintas fracciones del sistema nervioso muestran
diferentes direcciones de respuesta. Por lo tanto, se plantea que el supuesto de especificidad
psicofisiológica existe a dos niveles; el nivel situacional e individual. Para la evaluación en el
contexto clínico, se incita la prevención y diagnóstico, ya que las técnicas utilizadas pueden
identificar a personas más susceptibles a determinadas patologías por medio de anotación de las
Evaluación psicológica. Concepto y definición de evaluación psicológica

estereotipias individuales. Esta aplicación de la evaluación también incluye la elección,


preparación y ejecución del tratamiento, además de la eficacia de un tratamiento una vez
finalizado.
Bibliografía

www.comportamental.com

Fernández Ballesteros, R. (2007). Introducción a la Evaluación Psicológica I. Madrid:


Pirámide.

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