PERIODONCIA
Volumen 11
Número 1
Enero-Marzo 2001
M. Vila Biosca1
J.Mª Marcet Palau2
1 Médico Estomatólogo. Especialista en Correspondencia:
Cirugía oral y Maxilofacial. Dr. M. Vila Biosca
Jefe del Servicio de Cirugía Maxilofacial Servicio Cirugía Maxilofacial
del Hospital General de Cataluña H.G.C. San Cugat del Vallés
2 Médico Estomatólogo. Barcelona.
Prótesis implantosoportada.
Jefe del Servicio de Estomatología del
Hospital General de Cataluña
RESUMEN
La colocación de implantes en una sola fase qui-
rúrgica, se ha demostrado clínicamente como una téc-
nica predecible y por consiguiente utilizable en nues-
tra práctica habitual, siempre bajo condiciones con-
troladas.
Asimismo, la extracción de dientes con la inserción
de implantes en el mismo acto quirúrgico también es
una técnica fiable, siempre y cuando se respeten unos
parámetros básicos de actuación.
En este artículo presentamos ambas técnicas qui-
rúrgicas con la modificación de implantes inmedia-
tos postextracción no sumergidos, y los parámetros
clínicos que nos han inducido a pasar de intervenir
quirúrgicamente de una forma frecuente, siempre que
sea posible, a los pacientes con edentulismos parcia-
les, de dos fases quirúrgicas a una fase quirúrgica y
a la colocación de implantes directamente en el lecho
de una extracción.
PALABRAS CLAVE
Una fase quirúrgica; Pilares temporales de cicatri-
zación; Periotest; Sellado alveolar.
Oseointegración
35
De una sola fase quirúrgica al
implante inmediato
postextracción no sumergido.
Concepto de cirugía
intra-alveolar. Casos clínicos
INTRODUCCIÓN
Los humanos nos caracterizamos por la búsqueda
constante de la innovación. Esta inquietud o incon-
formismo es lo que hace que el hombre evolucione
en todos los campos de la técnica y de la ciencia.
Reglas básicas, en este caso de la implantologia qui-
rúrgica, que seguiamos hace 16 años, se rompen y dan
paso a nuevas técnicas que resultan ser efectivas.
Por otra parte los propios pacientes, imbuidos en
la dinámica de la vida actual, se tornan menos pacien-
tes y más impacientes, solicitando o exigiendo más
rapidez en los tratamientos y más comodidad. De ahí
que se comience a hablar con seriedad de la carga
inmediata y de otras técnicas quirúrgicas como las que
presentamos, cuya misión es intentar reducir la dura-
ción de los tratamientos con las mínimas interven-
ciones quirúrgicas, por tanto aumentando la confor-
tabilidad del paciente, sin menoscabar la importan-
cia que tiene la obtención del éxito final. El riesgo con-
trolado y basado en la evidencia clínica es la clave de
muchos tratamientos actuales. Si las técnicas avanza-
das conllevasen una disminución importante de la tasa
de éxitos inmediatos y a largo plazo, deberían ser dese-
chadas y volver a los inicios.
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36 Esto no es así, y tanto los implantes en una sola fase
quirúrgica bajo condiciones controladas, como los
implantes inmediatos postextracción también preser-
vando unos principios básicos, consiguen la osteoin-
tegración y la finalidad de su razón de ser, la susten-
tación de una prótesis dental.
El objetivo de este artículo es presentar una serie
de casos clínicos, con dos técnicas quirúrgicas distin-
tas: implantes en una sola fase quirúrgica e implantes
inmediatos postextracción (cirugía intra-alveolar) sin
necesidad de levantar colgajos mucoperiósticos, ni uti-
lizar membranas ni injertos óseos.
CASOS CLÍNICOS
Se presentan dos tipos de casos clínicos, interrela-
cionados entre sí, de forma que las conclusiones de la
efectividad del tratamiento del primero llevan al ini-
cio del tratamiento del grupo siguiente:
1. Implantes en una sola fase quirúrgica en maxilar
superior con reborde alveolar ya consolidado para
recibir fijaciones, utilizando dos tipos de implantes
(Astra-tech y Bicon TPS®).
2. Implantes inmediatos postextración no sumergidos.
Concepto de cirugía intraalveolar.
Tipo 1
Todos los clínicos que llevamos años colocando
implantes, hemos observado en ocasiones la exposi-
ción espontánea de un implante submucoso durante
el periodo de cicatrización, incluso en pacientes sin
prótesis provisional que pueda haber presionado la
encia, sin que ello haya conllevado ningún riesgo para
la osteointegración siempre que el paciente haya man-
tenido un correcto nivel de higiene y no haya habido
sobrecarga prematura del implante (Fig. 1).
Por otra parte existen desde hace años en el mer-
cado internacional, implantes que por su propio dise-
ño, han sido concebidos para dejarlos expuestos duran-
te la primera cirugía.
Esto nos llevó, basándonos en la amplia literatura
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no sumergido. Concepto de cirugía intra-alveolar. Casos clínicos
Figura 1. Implante expuesto espontáneamente.
internacional, a iniciar tratamientos en el maxilar uti-
lizando implantes (AstraTech®), conectándolos direc-
tamente a su pilar de cicatrización y por tanto deján-
dolos destapados y expuestos en la primera y única
fase quirúrgica.
La peculiaridad estriba en que los dos primeros
pacientes del grupo uno, una vez seleccionados con
las características que más adelante se apuntan, fue-
ron protocolizados y estudiados con una serie de pará-
metros, de los que se pudo extraer una hipótesis de
trabajo. Para ello se seleccionaron dos pacientes con
las siguientes características:
• Pacientes desdentados parciales del maxilar
• No fumadores
• No portadores de prótesis provisional removible
• Colaboradores y motivados
• Con cantidad y calidad ósea aceptable o buena
Paciente 1. Mujer de 36 años de edad, a la que se
le colocaron 2 implantes.
Paciente 2. Varón de 55 años de edad, al que se
le pusieron 6 implantes (Figs. 2 y 3).
Los parámetros que se valoraron fueron la higiene,
la reacción de los tejidos blandos, la estabilidad clí-
nica de los implantes y el sonido a la percusión y los
controles radiográficos. Pero dada la subjetividad y
dificultad de dar un valor real o práctico a estos datos
para valorar el proceso de osteointegración, se recu-
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Figura 2. Cirugía con los implantes colocados antes de enroscar
el pilar de cicatrización.
Figura 4. Tejidos blandos a los 15 días.
rrió al Periotest(12), para poder finalmente plasmar en
un gráfico los datos numéricos fiables, que nos tra-
dujesen nuestras impresiones clínicas.
Tanto la paciente 1 como el paciente 2 mantuvie-
ron los tejidos blandos sanos, no hubo dolor al inten-
to suave de movilización de los implantes, ni dolor
a la percusión y mantuvieron un sonido timpánico
correcto, sensación de confort por parte del pacien-
te y sensación subjetiva del cirujano de la buena mar-
cha del proceso de osteointegración (Figs. 4 y 5).
Los controles se realizaron al retirar los puntos de
sutura, a los 30 días y a los 90 días.
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no sumergido. Concepto de cirugía intra-alveolar. Casos clínicos
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Figura 3. Pilares colocados durante la primera cirugía.
Figura 5. Tejidos blandos a los 15 días.
Sin embargo las mediciones con el PT fueron dis-
tintas en ambos pacientes.
La paciente 1, mantuvo siempre valores negativos,
(Fig. 6), observándose una ligera pérdida a los 30 días
con una recuperación a los 90 días.
El paciente 2, positivizó los valores correspon-
dientes a dos implantes a los 30 días hasta valores
de 4 y 3 del PT (Fig. 7), lo que nos hizo temer, a
pesar de sus signos clínicos favorables, por la via-
bilidad de esos dos implantes. Afortunadamente a
los 90 días todos los valores volvían a ser negati-
vos.
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Figura 6. Evolución del P.T. de la primera paciente.
Observamos que clínicamente no hubo ningún
problema aunque las mediciones del PT nos hicie-
ron pensar en una posible hipótesis de trabajo: A los
treinta días los valores de las mediciones se habí-
an hecho algo positivas en todos los implantes, sobre
todo en dos de ellos que habían sobrepasado el
umbral cero y eran francamente positivas.
Progresivamente se produjo una negativación de los
valores de todos los implantes entre los 30 y los
90 días ¿cuál era el motivo de dichos cambios?
Pensamos que una posible razón sería que la corti-
cal ósea pudiera perder consistencia durante el pri-
mer mes de cicatrización alrededor de la cabeza del
implante. Otra razón posible podría ser que los
implantes estuviesen sometidos durante la mastica-
ción a unas cargas involuntarias, incluso con dife-
rencia de unos a otros.
De todas formas con una muestra tan pequeña no
se pueden extraer conclusiones definitivas. Lo que si
sacamos en claro es que todos los implantes perdían
algo de estabilidad subclínica durante los primeros 30
días; así pues se llegó a la conclusión que este primer
mes de cicatrización es fundamental para la supervi-
vencia y el buen curso de la osteointegración de los
implantes.
Como consecuencia del aumento de los valores del
PT, utilizamos en el tercer caso un diseño de implan-
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no sumergido. Concepto de cirugía intra-alveolar. Casos clínicos
Figura 7. Evolución del P.T. en el segundo paciente.
te que pudiera minimizar los riesgos provocados por
la prematura carga involuntaria del implante con la
masticación.
Así pues utilizamos implantes Bicon TPS® con pila-
res de cicatrización ligeramente más anchos que el diá-
metro del implante, de tal forma que el pilar se apo-
yara directamente sobre la cortical ósea y no dejara
transmitir fuerzas verticales o sagitales directamente al
implante (Figs. 8, 9, 10 y 11).
El protocolo quirúrgico fue el mismo y los pará-
metros clínicos valorados a lo largo de la evolución
los mismos, excepto las mediciones con el PT, debi-
do a que el pilar está apoyado directamente sobre la
cortical ósea en esta técnica quirúrgica. Los resultados
clínicos finales con este grupo de pacientes fueron
igualmente satisfactorios.
La curiosidad clínica de este caso es que el implan-
te Bicon TPS se coloca sumergido unos dos o tres milí-
metros en el interior del foramen fresado y que el pilar
de cicatrización es hemisférico o redondo. Así pues,
una vez insertado el implante y el pilar en posición,
el pilar queda en absoluto contacto con la cortical
alveolar y entre el pilar y el implante queda una
pequeña área virtual en forma de diábolo la cual se
rellena espontáneamente de sangre.
El mencionado coágulo se organiza e inicia un pro-
ceso de neoformación ósea.
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Figura 8. Imagen prequirúrgica. Figura 9. Fresado del lecho del implante. Figura 10. Tejidos blandos cicatrizando.

No es necesario colocar autoinjertos ni heteroinjer-

tos para rellenarlo. Tampoco está indicado el uso de
membranas, ya que el propio pilar de cicatrización
actua de membrana rígida e impide la invasión de los
tejidos blandos.

Tipo 2

El segundo grupo de pacientes son aquellos que

precisan la colocación de un implante inmediato post-
extracción no sumergido en el mismo acto quirúrgi-
co.
Siguiendo la misma filosofía de trabajo, con el pro-
pósito de minimizar la cirugía y acortar los tratamien-
tos(1,9), hemos venido practicando la colocación de
implantes inmediatamente en un lecho de extracción
modificado, concepto que resumimos como cirugía
intra-alveolar cuando no levantamos colgajo muco-
perióstico.
Figura 11. Tejidos blandos al retirar el Precisamos un implante que tenga diversos diá-
pilar de cicatrización.
metros y longitudes para que una vez fresado el alve-

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Figura 12. Fresado óseo hasta el suelo del seno maxilar.
Figura 14. Pilar de cicatrización acoplado sellando el reborde
alveolar.
olo, la máxima superficie diametral del implante se
mantenga en contacto con el hueso fresco. A su vez
necesitamos también que el sistema tenga diversos
pilares de cicatrización o temporales que nos permi-
tan sellar la entrada al alveolo, de forma que el pro-
pio pilar actúe,como ya hemos mencionado, de pseu-
domembrana rígida taponando el foramen e impi-
diendo la invasión prematura de los tejidos blan-
dos.
Para conseguir nuestro propósito de tratamien-
to, también utilizamos el implante impactado y
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Figura 13. Implante de 6 mm de diámetro hundido 3 mm por
debajo del reborde alveolar.
Figura 15. Pilar de cicatrización nuevo. Estado de los tejidos
blandos a los 30 días.
recubierto de plasma spray de titanio (9) (Bicon
TPS®).
Este implante tiene diversos diámetros hasta un
máximo de seis milímetros.
A su vez tiene pilares de cicatrización «tallables»
hasta seis milímetros y medio y con diversas alturas.
Repetimos que la peculiariedad de este implante, lo
que se adecúa a nuestras necesidades, es que se colo-
ca de dos a cinco milímetros hundido por debajo de
la cresta ósea, y a su vez el pilar de cicatrización una
vez colocado queda separado del implante unos dos
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Figura 16. Pilar definitivo. Figura 17. Corona definitiva cementada.

Figura 19. Tejidos blandos con uniones hemidesmosómicas.

milímetros. Estas propiedades consiguen poder fresar

Figura 18. Radiología al año de carga, sin pérdida del hueso
neoformado.
el alveolo hasta un diámetro en el que una vez intro-
ducido el implante, éste contacte totalmente en su perí-
metro con hueso, y, colocando conjuntamente el pilar
de cicatrización adecuado podemos sellar la entrada
al foramen practicado o al alveolo. Dentro del mismo
quedará un espacio virtual entre el implante y su pilar
que se rellena por sí mismo de sangre, la cual neo-
formará hueso sin la necesidad de emplear ni injertos
ni membranas.

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Figura 20. Fractura doble radicular. Figura 21. Exodoncia y fresado intraalveolar.

Presentamos tres casos clínicos

Paciente 1. Paciente del sexo femenino de

45 años de edad, que presentaba una fisura corono-
radicular del segundo bicúspide superior dere-
cho.
La distancia desde la cresta alveolar al suelo del
seno era de 11 milímetros.
El plan de tratamiento consistía en practicar la exo-
doncia convencional, y el resto radicular con ciru-
gía intra-alveolar mínimamente invasiva. A continua-
ción, fresar el alveolo justo hasta el suelo del seno
maxilar, y colocar un implante de seis milímetros Figura 22. Pilar inmediato temporal sin sutura.
de diámetro por ocho de longitud insertando a la vez
un pilar de cicatrización tallable de seis milímetros y
medio. Se talló el pilar por mesial y distal, para que nitivo tallable, se tomaron las impresiones y se colo-
cupiera en el espacio de extracción y sellase el perí- có la corona definitiva (Figs. 16 y 17).
metro de la cresta alveolar (Figs. 12, 13, 14 y 15). Al año de carga del implante se observa en la radio-
Se aplicaron puntos de sutura para recolocar las papi- grafía intraoral el mantenimiento del nivel correcto del
las. hueso que se neoformó en su día y se comprueba
A los dos meses de la colocación del implante y su radiográficamente el contacto metal -hueso de todo el
pilar temporal, se sustituyó éste por otro de inferior implante (Figs. 18 y 19).
diámetro observando la cicatrización de la encía en Paciente 2. Paciente también del sexo femeni-
muy buenas condiciones. Como ya hemos menciona- no, de 20 años de edad, que presentaba doble frac-
do anteriormente no fue necesaria la utilización de tura radicular de un incisivo central por traumatis-
ningún tipo de injerto óseo, ni de membrana. mo deportivo. Las expectativas de la paciente eran
Transcurridos los seis meses se colocó el pilar defi- poder llevar lo más pronto posible una corona uni-

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Figura 23. Tejidos blandos a los 30 días.
Figura 25. Rx a los 90 días. Hueso neoformado.
taria similar al diente que iba a perder (Figs. 20 y
21).
Por tal motivo se procedió al mismo método de tra-
tamiento esta vez colocando un implante de cinco milí-
metros de diámetro por once de longitud, siguiendo
el eje axial del incisivo pero fresando mas hacia pala-
tino para no debilitar la tabla externa. En el mismo
acto quirúrgico se conectó un pilar temporal y no fue
necesario suturar las papilas (Fig. 22).
Al mes de la intervención se retiró el pilar para
observar la evolución de los tejidos blandos, conclu-
yendo que la mejor manera de preservar los tejidos
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no sumergido. Concepto de cirugía intra-alveolar. Casos clínicos
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Figura 24. Corona provisional.
tanto blandos como duros con su contorno fisiológi-
co, es no perderlos (Figs. 23 y 24). A los seis meses de
la extracción dental se le colocó una corona provi-
sional.
Radiográficamente (Fig. 25), se observa claramen-
te la neoformación ósea que se ha producido alrede-
dor de la cabeza del implante.
Paciente 3. Paciente de 42 años de edad que pre-
cisaba la exodoncia de un resto radicular del primer
bicúspide superior derecho.
Mediante la técnica de cirugía intraalveolar, se
extrajo el resto radicular y se utilizó el lecho alveo-
lar de la raíz palatina para fresar aumentando y uni-
ficando el diámetro de la perforación hasta 5 milí-
metros.
A continuación se colocó un implante de 5 x 11
TPS, con un pilar redondo de cicatrización ligeramente
mas ancho que el implante. Observamos la reacción
de los tejidos blandos durante la cirugía,y a los cua-
renta días de la intervención (Figs. 26, 27, 28 y 29).
Asimismo, en el control radiográfico a los 40 días
se observa que el pilar de cicatrización todavía con-
tacta con la cortical ósea en fase de remodelación; o
sea, que está cumpliendo su misión, sellar e impedir
la invasión de tejidos blandos de cicatrización hacia el
interior, y también puede observarse el inicio de for-
mación ósea que paulatinamente se acerca a la cabe-
za del implante (Fig. 30).
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Figura 26. Preoperatorio.
Figura 28. Cirugía intraalveolar.
DISCUSIÓN
Desde nuestro punto de vista, debemos poder ofre-
cer a nuestros pacientes todas las posibilidades de tra-
tamientos quirúrgicos con implantes dentro de nues-
tra consideración ética, buscando la última finalidad
del tratamiento que no es ni más ni menos que la
obtención de la integración del implante y por tanto
el éxito quirúrgico.
Por otro lado, cuanto más simple y cuanto menos
morbilidad tenga el tratamiento, mejor para el
paciente, y también para nosotros, ya que obtene-
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no sumergido. Concepto de cirugía intra-alveolar. Casos clínicos
Figura 27. Exodoncia, resto radicular.
Figura 29. Tejidos blandos a los 40 días.
mos un buen resultado con el mínimo gasto de
tiempo.
La duración del tratamiento es un factor que el
paciente valora especialmente. En los implantes en
una sola fase quirúrgica, aunque aparentemente el
tiempo de cicatrización es el estándar, el tiempo glo-
bal de tratamiento también se acorta, dado que no
existe segunda fase quirúrgica con el consecuente
periodo, aunque corto, de maduración de tejidos blan-
dos antes de poder iniciar las fases de selección de
pilares y toma de impresiones. También siguiendo el
propio criterio del profesional y dependiendo del
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Figura 30. Rx a los 40 días.
paciente y de su valoración clínica, se podrá cargar el
implante prematuramente antes de los estándares
medios.
Creemos que numerosos implantes se pueden uti-
lizar en una sola fase quirúrgica, acoplando sus pila-
res de cicatrización. En nuestra exposición solo hemos
presentado pacientes de una sola fase quirúrgica en
el maxilar superior, en edentulismos parciales, y que
no son portadores de prótesis provisionales removi-
bles, exceptuando la paciente joven del central supe-
rior que llevó un provisional aliviado.
Intentamos que el pilar de cicatrización sobresal-
ga muy poco de la encía una vez ésta cicatriza.
En cuanto a la colocación de implantes inmediatos
postextracción, algunos autores dejan cerrar previa-
mente los tejidos blandos, reinterviniendo al paciente
a los pocos días o semanas una vez obtenida una encía
cicatrizada, con la intención de poder volver a cerrar
por primera intención. Consideramos que esta siste-
mática no puede considerarse un implante inmedia-
to postextracción.
Otros colocan un injerto libre de encía que cierre
la mucosa(2). En todos los casos revisados en la lite-
ratura, cuando se coloca un implante inmediato pos-
textracción, la meta inicial es conseguir que el implan-
te esté en contacto diametralmente y en su máxima
superficie con hueso; por tal motivo en la mayoría de
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no sumergido. Concepto de cirugía intra-alveolar. Casos clínicos
los casos se menciona el injerto óseo y las membra- 45
nas de RTG(3-15).
En los casos clínicos presentados, no se pretende
cerrar la encía, sino mantenerla en su estado inicial.
No se usan injertos óseos, con la convicción de que
la sangre acumulada en el espacio virtual entre la cabe-
za del implante y el pilar temporal, sin contacto con
el exterior neoforma hueso por sí misma. Se ha de
tener en cuenta que el pilar temporal no sella la aper-
tura herméticamente durante excesivo tiempo, debi-
do a que por un proceso natural de remodelación ósea,
la cresta alveolar se retrae y redondea ligeramente. En
esta fase los tejidos blandos invaden el interior del
foramen alrededor del pilar; pero como han pasado
suficientes días y dado el especial macrodiseño del
implante, el coágulo interior ya ha iniciado su proce-
so histológico de cambio y puede comenzar la for-
mación ósea. Al final obtenemos o deberíamos obte-
ner el resultado deseado; la cámara interior en su zona
más cercana al implante neoforma hueso que recubre
la cabeza del mismo; y en su zona inferior maduran y
se remodelan los tejidos blandos alrededor del pilar
temporal en forma de copa invertida.
No debe usarse esta técnica en extracciones sépticas,
con focos infecciosos,osteitis, granulomas o quistes, etc.
Está indicada en fracturas de dientes bien sea por la mas-
ticación o por traumatismo moderado, que conserve
la integridad de las tablas óseas, y naturalmente tam-
bién en implantes en una sola fase quirúrgica.
El uso de ésta técnica quirúrgica no pretende des-
virtuar en absoluto el empleo de las membranas ni de
los injertos óseos que todos hemos utilizado. Sin
embargo aporta la posibilidad de simplificación del
proceso con el mantenimiento de las estructuras ana-
tómicas. Nuestra experiencia clínica es limitada aun-
que positiva. Los precursores de la técnica, a parte de
nuestro sentido crítico y expectante, tienen une expe-
riencia amplia en el contexto.
CONCLUSIONES
• Los implantes en una sola fase quirúrgica en maxi-
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46 lar superior son eficaces bajo condiciones contro-
ladas.
• Los primeros 30 días de postoperatorio son impor-
tantes para la viabilidad del tratamiento.
• Si el pilar se apoya en la cortical ósea minimiza el
riesgo de sobrecarga prematura del implante.
• El propio coágulo sanguíneo del paciente aislado
del exterior es el mejor autoinjerto regenerador óseo.
• El concepto de cirugía intraalveolar disminuye drás-
ticamente la morbilidad de la intervención.
• La mejor forma de obtener unos tejidos duros y
blandos lo más parecidos a su forma inicial es no
perderlos de entrada.
• El tiempo total del tratamiento con estas técnicas
y sobre todo con la cirugía intraalveolar se reduce
espectacularmente.

FROM ONE SURGICAL STAGE TO THE INMEDIATE IMPLANT INTRO AN EXTRACTION SOCKET, NOT IMMERSE.
INTRA ALVEOLAR QUIRURGICAL CONCEPT. CLINICAL CASES

ABSTRACT
The placement of implants in one surgical stage is a predictable and useful technique in our normal practice, always under con-
trolled conditions.
However, the inmediate implantation of implants into an extraction socket, is also reliable using conditional parameters.
The authors present their experience in both surgical techniques. Also present the clinical parameters that drives them to fre-
quently operate the partial edentulous patients and the inmediate implantation in extractions sites in one surgical step.

KEY WORDS
One stage surgery; Healing abutments; Periotest; Socket seal.

IMPLANT IMMÉDIAT POST-EXTRACTIONNEL, NON ENFOUI ET EN UN TEMPS CHIRURGICAL. CONCEPT DE CHIRURGIE

INTRA-ALVÉOLAIRE. CAS CLINIQUES.

RÉSUMÉ
La mise en place d’implants en un seul temps chirurgical s’est montrée cliniquement comme une technique prévisible et par con-
séquent applicable à notre pratique habituelle sous réserve de conditions contrôlées.
De ce fait, l’extraction de dents suivie de la pose d’implants dans le même acte chirurgical est aussi une technique fiable si l’on
respecte les paramètres de bases.
Dans cet article, nous présentons les deux techniques chirurgicales avec la modification d’implants immédiats post-extraction-
nels non-enfouis et les paramètres cliniques qui nous ont conduit à passer, de manière fréquente et aussi souvent que possible chez
les patients édentés partiels, de deux phases chirurgicales à une seule phase avec la mise en place d’implants directement dans
un site d’extraction.

MOTS CLÉS
Une seule phase chirurgicale; Piliers provisoires de cicatrisation; Periotest; Fermeture alvéolaire.

DA UNA SOLA FASE CHIRURGICA ALL’ IMPIANTO IMMEDIATO POST-ESTRAZIONE NON SOMMERSO. CONCETTO DI
CHIRURGIA INTRA-ALVEOLARE

RIASSUNTO
La collocazione di impianti in un’unica fase chirurgica é stata dimostrata clinicamente come una tecnica predicibile e utilizzabi-

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le, di conseguenza, nella nostra pratica abituale, sempre sotto condizioni controllate. Di conseguenza, la estrazione di denti con il 47
posizionamento di impianti nello stesso atto chirurgico é una tecnica affidabile, sempre che vengano rispettati alcuni parametri basi-
ci di procedura.
In questo articolo presentiamo le due tecniche chirurgiche con la modificazione di impianti immediati post-estrazione non som-
mersi. Verranno illustrati i parametri clinici che ci hanno indotto a intervenire chirurgicamente nei pazienti con edentulismo par-
ziale, con sempre maggiore frequenza, con operazioni di un’unica fase e il collocamento di impianti direttamente nel luogo di un’es-
trazione.

PAROLE CHIAVE
Unica fase chirurgica; pilastri temporanei di cicatrizzazione; periotest; chiusura alveolare.

DE UMA SÓ FASE CIRÚRGICA AO IMPLANTE IMEDIATO PÓS-EXTRACÇÃO NÃO SUBMERGIDO. CONCEITO DE CIRURGIA
INTRA-ALVEOLAR. CASOS CLÍNICOS

RESUMO
Já se demonstrou clínicamente que a colocação de implantes em uma só fase cirúrgica é uma técnica previsível e, por conse-
guinte, utilizável na nossa práctica clínica habitual, desde que em condições controladas.
De igual modo, a extracção de peças dentárias com colocação de implantes no mesmo acto cirúrgico, também é uma técnica
fiável, desde que se respeitem uns parâmetros básicos de actuação.
Neste artigo apresentamos ambas técnicas cirúrgicas com a modificação de implantes imediatos pós-extracção não submergidos
e os parâmetros clínicos que nos induziram, sempre que seja possível, em pacientes com edentulismos parciais, a passar de duas
fases cirúrgicas a uma só fase, com a colocação de implantes directamente no leito de extracção

PALAVRAS-CHAVE
Uma só fase cirúrgica; Pilares provisórios de cicatrização; Periotest; Encerramento alveolar

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