Você está na página 1de 15

Curso: religión

Docente: Jesús contreras


Alumna: Cinthia Carol Anahua Cormilluni
Grado y sección: 2 ° “B”
TACNA – PERU
2019

1
Historia de la Catedral de Tacna
1.(26 de octubre de 1978).
El Barrio Cívico de la ciudad de Tacna, en Perú, tiene su centro en el sector de San
Martín-Callao y Blondel, con la plaza, el Arco de los Héroes, la gran fontana francesa de
los dioses del mar y la inconfundible postal de fondo representada por la Iglesia Matriz
o Catedral de Tacna, declarada Monumento Histórico por resolución suprema del 26 de
octubre de 1978.

Remontándonos por el hilo histórico, se sabe que el primer templo tacneño importante
se hizo levantar por el primero de los curas párrocos que tuvo la ciudad, don Pedro
Téllez, tras la fundación de la parroquia local el 17 de octubre de 1613. Posteriormente,
Melchor Méndez, el quinto párroco, hizo construir en 1679, un nuevo el templo
dedicado a San Pedro, Patrono de Tacna.
Faltaba mucho aún para que apareciera el templo matriz, ya en tiempos republicanos.
Sucedería que Perú firmó los controvertidos negocios con la Casa Dreyfus & Hnos. en
1869, cuando la crisis monetaria contrastaba diametralmente con la riqueza que
generaba la industria del guano en las covaderas de Tarapacá. Justo en el año anterior,
el 13 de agosto de 1868, había ocurrido el fatídico terremoto que destruyó e inutilizó la
vieja iglesia tacneña, además de echar abajo a gran parte de la ciudad y de su gemela
Arica.

2. (1868-1872),

A inicios del Gobierno de José Balta y Montero (1868-1872), el contrato con Dreyfus fue
renovado contra la oposición del Ministro de Hacienda don Francisco García Calderón, razón
por la que acabó reemplazado por Nicolás de Piérola, uno de los precursores del acuerdo. Con
ello, la casa comercial comprometió grandes ventas de guano a Europa y enormes empréstitos
de la banca judeofrancesa que, entre otras cosas, sirvieron para avances en obras públicas. Los
pagos serían compensados con los derechos para extracción de las covaderas.
Cuentan autores como Fortunato Zora Carvajal, en "Tacna: historia y folklore", que los recursos
obtenidos por el nuevo contrato permitieron a Perú iniciar un período de mejoramientos en

2
edificios públicos, ferrocarriles y otras obras. Uno de los planes fue levantar la nueva Catedral
de Tacna, tan recientemente arruinada.
Información reunida por la académico peruana Darci Gutiérrez Pinto, en su trabajo tesista
"Gustave Eiffel en Perú: 1870-1890" (de quien hemos hablado ya al referirnos al caso
del Puente de Fierro de Arequipa), particularmente de los "Anales del Cuerpo de Ingenieros del
Perú" de 1874, confirman que hubo un primer proyecto "que empezaba a desquiciarse",
debiendo ser detenido y demolido a poco de haber comenzado las obras, en 1872, para dar
inicio a otro que había sido aprobado por la administración anterior y que fue encargado a un
arquitecto de apellido Miecznikowski, durante ese mismo año. Empero, por la protestas de la
supervisora Junta Central de Ingenieros y Arquitectos del Estado, se consideró la obra de
dimensiones demasiado pequeñas en informes de enero de 1873, siéndole traspasada más
tarde por el Gobierno al ingeniero y arquitecto de origen polaco Maximiliano Miney (o Mimey,
en algunas fuentes), como veremos más abajo.

3. 1871-1875

Es aquí donde comienzan las confusiones sobre la historia del edificio, pues si bien es
muy posible que hayan participado de él varios autores y que miembros de la propia
Junta Central tuvieran gran protagonismo en el proyecto, en la Memoria de Obras
Públicas presentada al Supremo Gobierno por la misma, el 25 de julio de 1874, la junta
señala que los planos aprobados por decreto supremo del 23 de septiembre de 1871,
pertenecían a un señor de apellido Larrieu.
Aunque no he podido confirmar la fuente, éste es un posible dibujo del proyecto de la
Catedral de Tacna basado en la propuesta Eiffel, mucho más marcado en su estilo
neorrenacentista y romanticista que el resultado actual. Fuente imagen:
Skyscrapercity.com, grupo de discusión "Tacna: Muestra urbana y fotos de
caminantes".
La catedral, aún a medio construir, en el libro "Tacna y Arica bajo soberanía chilena",
de Carlos Varas, en 1922.
La fachada del templo en nuestros días, con su iluminación nocturna.
La extendida creencia en Perú, sin embargo, asegura que la famosa casa francesa de
Alexandre Gustave Eiffel, la Eiffel & Cie., se hizo cargo del proyecto y de los planos.
Esto sucedía casi al mismo tiempo que se le pedía a la misma oficina tomar también el
proyecto de la Catedral de Arica, otra obra que había sido destruida en el terremoto con
maremoto de 1868.
La propuesta original de la Junta Central encargada a Eiffel, consistía en un edificio de
78 metros de largo por 32 metros de ancho en el crucero, con un domo central con
arcos de ojiva a 37 metros de altura, además de otros menores distribuidos en lo alto
hasta el ábside, dotados de linternas para iluminación y ventilación de los interiores.
Todo concebido en metal (vigas, ojiva, muros, módulos interiores, columnas, etc.), el
peso total de la catedral se calculaba en unas 700 toneladas.
Por otro lado, la propuesta que hizo Eiffel no reutilizaba los restos del templo anterior,
como finalmente se hizo, sino que proponía un diseño de edificio totalmente nuevo e
independiente, que no corresponde exactamente al que vemos hoy, salvo en parte de
sus materiales estructurales y planta, lo que significa que su origen estaría en otros
planos. Empero, la investigación de Darci Gutiérrez informa que esta compañía
parisina se había adjudicado las dos primeras secciones de la obra que ya veremos,

3
aunque su propuesta fuera muy semejante a la actual iglesia, de acuerdo a lo que se
observa en algunas versiones publicadas en la prensa.
Sin embargo, la Junta Central enfrentó una reacción inesperada: la población tacneña
se había opuesto a la intención de construir una iglesia en entera ferretería modular,
como era esperable del estilo más característico de Eiffel, exigiendo que el templo fuese
diseñado y construido con materialidad más tradicional, como la piedra canteada y el
adobe. Y aunque el problema ya se había querido zanjar con una ley de 1869 que
priorizaba en los planes la reconstrucción del templo, la discrepancia y los debates
persistieron por algunos años más alargando el punto de inicio de las obras. Así, la
Junta Central había considerado, en 1872, que las peticiones de los tacneños eran sólo
fruto de la ignorancia y del desconocimiento del oficio.
Todavía en 1873, los ingenieros insistían al gobierno con el argumento de la actividad
sísmica, en la conveniencias de construir con materiales y procedimientos más
novedosos como metal y ladrillo contrarios a la voluntad popular, según se desprende
del "Informe de la Construcción de la Iglesia Matriz de Tacna al Ministro de Estado en
el Despacho de Gobierno, Policía y Obras Públicas", de ese mismo año.
Las intenciones de no desechar lo que se había construido antes tampoco prosperaban
y así se llamó a la Junta Central para formular nuevas propuestas, en respuesta a sus
observaciones de ese mismo año. Se llegó así a una nueva, esta vez con planos de Tadeo
Strujemski, que requería de mayor espacio para el atrio y el ábside, por lo que se debió
pedir autorización para despejar y retirar unos 60 metros más atrás del frontis.
Para concluir la obra, sin embargo, se acabó descartando la propuesta de metal y
ladrillo, lo que fue un triunfo para la voluntad popular en Tacna. La confusión
reaparece aquí, pues la búsqueda de los planos adecuados dio resultados con el
mencionado arquitecto Miney, proyectándose un presupuesto de 200.000 soles de 48
peniques para la misma. Mas, aunque la propuesta Eiffel fuera descartada, veremos que
el Gobierno Supremo llegó a un contrato con la casa francesa para que ésta se hiciera
cargo de una importante parte de la obra.
A mayor abundamiento, Miney había ofrecido a la Junta Central una de las dos
propuestas presentadas en 1873, tras paralizarse los trabajos anteriores del templo en
vista de sus inconvenientes dimensiones, como dijimos. En general, el proyecto
resultante era parecido al de Eiffel, incluyendo su trazado en planta, pero
modificándose en parte los materiales y el aspecto de los techados. Esto significa que la
famosa agencia francesa sí estuvo en los antecedentes históricos del templo,
finalmente, sirviendo de base a la propuesta del siguiente arquitecto y a las estructuras
de materiales metálicos usados tras llegar desde Francia.
Por otro lado, y como señala Darci Gutiérrez, a pesar del descarte de aquella propuesta,
la Casa Eiffel de todos modos fue contratada para hacerse cargo del terraplén y la
albañilería y de la parte metálica o de arquitectura estructural en hierro para la obra,
conocidos como los lotes 1 y 2, que se licitaron por remate en 1875.

4
La catedral, aún a medio
construir, en el libro "Tacna y
Arica bajo soberanía chilena",
de Carlos Varas, en 1922.

Turísticos símbolos del


Barrio Cívico de la ciudad,
donde se realizan desfiles y
actos públicos.

La extendida creencia en Perú, sin embargo, asegura que la famosa casa francesa de Alexandre
Gustave Eiffel, la Eiffel & Cie., se hizo cargo del proyecto y de los planos. Esto sucedía casi al mismo

5
tiempo que se le pedía a la misma oficina tomar también el proyecto de la Catedral de Arica, otra obra
que había sido destruida en el terremoto con maremoto de 1868.

La propuesta original de la Junta Central encargada a Eiffel, consistía en un edificio de 78 metros de


largo por 32 metros de ancho en el crucero, con un domo central con arcos de ojiva a 37 metros de
altura, además de otros menores distribuidos en lo alto hasta el ábside, dotados de linternas para
iluminación y ventilación de los interiores. Todo concebido en metal (vigas, ojiva, muros, módulos
interiores, columnas, etc.), el peso total de la catedral se calculaba en unas 700 toneladas.
Por otro lado, la propuesta que hizo Eiffel no reutilizaba los restos del templo anterior, como
finalmente se hizo, sino que proponía un diseño de edificio totalmente nuevo e independiente, que no
corresponde exactamente al que vemos hoy, salvo en parte de sus materiales estructurales y planta, lo
que significa que su origen estaría en otros planos. Empero, la investigación de Darci Gutiérrez
informa que esta compañía parisina se había adjudicado las dos primeras secciones de la obra que ya
veremos, aunque su propuesta fuera muy semejante a la actual iglesia, de acuerdo a lo que se observa
en algunas versiones publicadas en la prensa.
Sin embargo, la Junta Central enfrentó una reacción inesperada: la población tacneña se había
opuesto a la intención de construir una iglesia en entera ferretería modular, como era esperable del
estilo más característico de Eiffel, exigiendo que el templo fuese diseñado y construido con
materialidad más tradicional, como la piedra canteada y el adobe. Y aunque el problema ya se había
querido zanjar con una ley de 1869 que priorizaba en los planes la reconstrucción del templo, la
discrepancia y los debates persistieron por algunos años más alargando el punto de inicio de las
obras. Así, la Junta Central había considerado, en 1872, que las peticiones de los tacneños eran sólo
fruto de la ignorancia y del desconocimiento del oficio.
Todavía en 1873, los ingenieros insistían al gobierno con el argumento de la actividad sísmica, en la
conveniencias de construir con materiales y procedimientos más novedosos como metal y ladrillo
contrarios a la voluntad popular, según se desprende del "Informe de la Construcción de la Iglesia
Matriz de Tacna al Ministro de Estado en el Despacho de Gobierno, Policía y Obras Públicas", de ese
mismo año.
Las intenciones de no desechar lo que se había construido antes tampoco prosperaban y así se llamó
a la Junta Central para formular nuevas propuestas, en respuesta a sus observaciones de ese mismo
año. Se llegó así a una nueva, esta vez con planos de Tadeo Strujemski, que requería de mayor
espacio para el atrio y el ábside, por lo que se debió pedir autorización para despejar y retirar unos 60
metros más atrás del frontis.
Para concluir la obra, sin embargo, se acabó descartando la propuesta de metal y ladrillo, lo que fue
un triunfo para la voluntad popular en Tacna. La confusión reaparece aquí, pues la búsqueda de los
planos adecuados dio resultados con el mencionado arquitecto Miney, proyectándose un presupuesto
de 200.000 soles de 48 peniques para la misma. Mas, aunque la propuesta Eiffel fuera descartada,
veremos que el Gobierno Supremo llegó a un contrato con la casa francesa para que ésta se hiciera
cargo de una importante parte de la obra.
A mayor abundamiento, Miney había ofrecido a la Junta Central una de las dos propuestas
presentadas en 1873, tras paralizarse los trabajos anteriores del templo en vista de sus inconvenientes
dimensiones, como dijimos. En general, el proyecto resultante era parecido al de Eiffel, incluyendo su
trazado en planta, pero modificándose en parte los materiales y el aspecto de los techados. Esto
significa que la famosa agencia francesa sí estuvo en los antecedentes históricos del templo,
finalmente, sirviendo de base a la propuesta del siguiente arquitecto y a las estructuras de materiales
metálicos usados tras llegar desde Francia.
Por otro lado, y como señala Darci Gutiérrez, a pesar del descarte de aquella propuesta, la Casa Eiffel
de todos modos fue contratada para hacerse cargo del terraplén y la albañilería y de la parte metálica
o de arquitectura estructural en hierro para la obra, conocidos como los lotes 1 y 2, que se licitaron
por remate en 1875.

En rigor, sin embargo, su propuesta para la Catedral de Tacna nunca llegó a ejecutarse, así que
muchas de las cerca de 40 toneladas de material ferretero y estructural que alcanzaron a llegar a la
ciudad para el abortado proyecto de la Junta Central, acabaron siendo utilizadas en la construcción
de puentes o vendidas por avisos en los periódicos, según consigna la mima investigadora y
arquitecto.

6
El frente del templo, visto desde la plaza. Se
puede advertir por el aspecto de la
materialidad que el pórtico central, con su
frontón y pilastras, pertenecen a una fase

Vista de costado, por calle Blondel.

Constructiva posterior a la de las torres

preferible y económico aprovechar lo que hay a


medio hacer antes que empezar una edificación
nueva.

7
continuar los trabajos haría falta el plano, pero este inconveniente no sería insuperable para un
arquitecto ilustrado".

Costado izquierdo de la Catedral, por calle Callao (Fuente imagen: Perutoptours.com


Miney, por su parte, había proyectado un gran edificio de dos torres-campanarios y planta de
crucero, con mucha influencia neoclásica y especialmente neorrenacentista, aunque con líneas fáciles
de reconocer en la estética de ciertos templos franceses, juzgando las imágenes que por entonces se
publicaron anticipando su aspecto. Hubo mucha atención del autor, además, en otorgarle al templo
rasgos de monumentalidad y realzar la obra como el edificio más importante y alto de la ciudad, pero
ajeno a los rasgos modernistas que había pretendido imprimirle la escuela de arquitectura en hierro
francesa.
Los trabajos de construcción comenzaron el 6 de marzo de 1875, y es aquí donde reaparece Eiffel:
fueron tomados por el contratista ingeniero Carlos Petot, representantes de la mismacompañía de
francesa, bajo la dirección del mencionado arquitecto Strujemski. Se ejecutaron así por la empresa
belga Moisant, Laurent, Save & Cie., subcontratada por la Eiffel, y se cumplió honorablemente con la
voluntad tacneña de utilizar material de piedras canteadas, extraídas de los cerros Intiorko y Arunta,
sobre armazones interiores de hierro y acero que asegurarían su resistencia a los terremotos.
Sin embargo, la firma encargada de las obras comenzó a tener dificultades financieras que llevaron a
detener los trabajos en 1878, posiblemente por falta de presupuesto y urgencias derivadas del
terremoto del año anterior, pero en lo que se creía iba a ser sólo una postergación pasajera, ya que
gran parte del material necesario había llegado ya a Tacna. A la sazón, las obras aún se hallaban bajo
la mitad de lo proyectado, pero los cimientos, niveles inferiores, zócalo de piedra y torres estaban
avanzados.

4.1879 - 1911
La postergación se prolongó y sobrevino el estallido de la Guerra del Pacífico en 1879, pasando la
ciudad a manos chilenas con la Batalla del Alto o Campo de Alianza de Tacna, el 26 de mayo de 1880.
No es real, entonces, que la guerra misma haya detenido las obras, como aseguran algunos autores en
nuestra época, pues las labores estaban paralizadas desde antes a causa de las cuestiones económicas
y de las revueltas políticas. No obstante, ciertamente el estado beligerante y el drástico cambio
administrativo alargaron por mucho tiempo más el retraso, pasando décadas en que el edificio se
vería sólo como una estructura con sus dos torres paralelas, sin las cúpulas, rodeada del murallón
pero con sus naves abiertas y destechadas, sin divisiones intermedias ni las arcadas interiores.
En un informe de 1911, presentado por el parlamentario, periodista y escritor Anselmo Blanlot Holley
al Gobierno de Chile e intitulado "Memoria sobre Tacna y Arica", se lee una intresante descripción
del edificio y de las obras pendientes que se sugiere retomar a la brevedad, consejo que seguramente
no fue acogido por la incertidumbre sobre la permanencia de la ciudad en la soberanía
chilena. Citado por Carlos Varas en "Tacna y Arica bajo soberanía chilena", decía allí Blanlot:
"La terminación de los trabajos de la Iglesia Matriz de esta ciudad se impone con caracteres de
urgencia no sólo porque no hay templo alguno que se halle en condiciones de servicio, sino porque
día a día se aumenta el riesgo de que destruya lo edificado o se deteriore hasta convertirse en
inservibles las piezas de fierro destinadas a la construcción del edificio.
Corrió a cargo de la construcción de aquel edificio el ingeniero francés señor Petot. El plano fue
confeccionado por Eiffel, el famoso constructor de la torre que lleva su nombre.
El estilo de la Iglesia, a juzgar por las murallas de circunvalación y las torres, es hermosísimo. En
un sótano que existe bajo el piso del templo se encuentran la piezas de fierro destinadas a la
techumbre, pilares y ornamentación. La acción del tiempo habrá tal vez desperfeccionado los
ajustes de algunos de esos materiales pero la casi totalidad, según ha podido verse, se halla en buen
estado. En todo caso el arreglo o reposición sería relativamente fácil.
La solidez de la obra de piedra es admirable: desde 1876 a 1877, en que se paralizó la obra por el
agotamiento de los fondos o incuria del Gobierno peruano, se mantienen las murallas y las torres
sin el más leve desperfecto, no obstante los grandes temblores que ha habido durante ese
interregno.
Nada justificaría que se dejara destruir por la acción del tiempo una obra llamada a ser, en su
género, una de las más bellas del país. Tarde o temprano habrá que construir un templo parroquial

8
.

Estatua de Juan Pablo II,


poca semanas después de su
inauguración

Vista hacia el fondo, en


dirección al acceso y al coro
(Fuente imagen:
Tripadvisor.com).

9
5.1929 - 1950

Después del larguísimo período de controversia entre Chile y Perú por la cuestión de Tacna y Arica, la
primera ciudad regresó a manos peruanas gracias a la firma del Tratado del 3 de junio 1929, mientras
que la segunda quedó a perpetuidad en las chilenas. La ejecución del traspaso se realizó
solemnemente el 28 de agosto, día en que se hizo celebrar la reincorporación de Tacna con el toque
de una campana provisoriamente colocada en la torre derecha.
También se había colocado un reloj la torre izquierda de la inconclusa catedral, pero por alguna razón
su mecanismo nunca funcionó con mucha precisión y acabó siendo retirado de su primera ubicación.
Desconocemos si aquel reloj o parte de él, sea el mismo que hoy está en esa torre.
Decididos a concluir la obra por tanto tiempo postergada, en la Ley Tacna del 17 de marzo de 1950, el
gobierno del llamado período del Ochenio consideró un presupuesto especial del Ministerio de
Fomento para terminar el edificio, echando mano en gran medida a los denominados fondos pro-
desocupados. La buena noticia fue tomada con júbilo por la paciente comunidad tacneña.
El presupuesto fue estudiado y propuesto por los ingenieros Antonio Jiménez y Víctor León
Bustamante, quienes elaboraron las bases del llamado a licitaciones. La empresa ganadora fue
la Garibaldi Hnos. S.A., del ingeniero Óscar Garibaldi Portocarrero, resultado anunciado el 25 de
abril de 1951, ya en el Gobierno de Manuel A. Odría. Empero, como no se sabía ya del destino de los
planos originales, tuvo que reformularse el diseño del edificio en base a lo que ya estaba en pie de él,
encargándose el proyecto al arquitecto peruano Luis F. Goycochea. La ingeniería, en tanto, quedó
confiada a la oficina de Víctor A. Estremadoyro y Carlos Pérez Reyes.
Las nuevas obras se iniciaron con gran atención de la ciudadanía. Además de piedra, se usaría
concreto en esta última fase de construcción del edificio, sumado a la resistencia de varillas de acero
de 2.800 kilos cada una, que han asegurado su resistencia ante los terremotos. El sábado 28 de
agosto de 1954, en el aniversario 25° de la reintegración de Tacna, la iglesia fue inaugurada y
entregada a la ciudadanía con una gran ceremonia dirigida por el Obispo Carlos Alberto Arce Masías.
La obra entregada a la ciudad tenía un contenido emitivo para sus habitantes: casi 80 años habían
transcurrido desde iniciada la construcción del mismo edificio, en 1875, por lo que debían quedar
poquísimos tacneños vivos que alcanzaron a ver en la tierna infancia los andamios de la primera
etapa.
El aspecto definitivo de la Catedral, entonces, mantuvo el rasgo neorrenacentista que le procuró
Miney, aunque se trata de una iglesia bastante sobria, especialmente en su ornamentación y su
interior. Con su exterior y sus estructuras de piedra calcárea rosácea, abarca unos 2.000 metros
cuadrados y cuenta con una cripta y subterráneos que alcanzan unos 1.000 metros cuadrados
aproximadamente (los trabajos de este nivel se prolongaron por algunos años más). Destaca también
su gran cúpula central. Y aunque la simétrica fachada se imponga a todas las imágenes y ángulos que
permita el entorno de la manzana completa que ocupa, no deja de ser interesante su ábside de cierto
toque neorrománico, hacia la ex Plaza de las Américas y calle Chiclayo.

10
Imagen de San Martín de Porres, junto al altar.

La Virgen de la Macarena.

El Jesús del Gran Poder.


Vista interior de la nave central.

Vista de la nave mayor hacia el altar

11
6.ACTUAL

El interior del templo es de tres naves y cañón central, divididos por arcadas e iluminados
naturalmente desde las linternas y los artísticos vitrales por las filas laterales de vanos.
El altar mayor de mármol, de cuidadosa factura, está consagrado a los santos patronos de la ciudad:
la Virgen del Rosario, al centro, y San Pedro Apóstol, en la parte superior del conjunto.
De entre las demás figuras religiosas y capillas, destaca el venerado santo peruano Martín de Porres,
al costado derecho junto al altar; la imagen del Jesús del Gran Poder, realizada por el artista Antonio
Illanes Rodríguez hacia 1953 (copia de su propia obra homónima en España); y una de la Virgen de la
Macarena atribuida por algunos al malagueño Pedro Pérez Hidalgo. Esta última imagen, sin
embargo, reemplazó a otra más ostentosa y realista de la misma advocación mariana, hecha por José
Alarcón Santa Cruz y trasladada después al Colegio Corazón de María.
La catedral también actual explanada, aunque esta remodelación se llevó algunos arbolitos que
crecían cerca de su frente y que le daban cierto encanto profano, hasta hace no muchos años. Sin
embargo, la existencia de filtraciones en los entubados de aguas del sector de calle Blondel con
antiguos ductos de concreto, ha provocado algunos problemas y desafíos para la mantención del
edificio.
Como dato curioso, cabe recordar que los planos y diagramas guías de Goycochea también estuvieron
perdidos por largo tiempo, hasta que fueron reencontrados y dados a conocer recién en 2014.
Aparecieron en Lima, en un baúl de recuerdos familiares en la casa de doña Edith Sánchez Moreno
Jiménez, viuda del constructor Óscar Garibaldi, donde los halló una sobrina tacneña del arquitecto e
ingeniero, doña Charito Valdivia Sánchez. Ella los mostró al historiador también tacneño Luis
Cavagnaro Orellanda, y así volvieron a ver la luz estos preciados documentos, después de tantos años
durmiendo en el sueño de los justos.
atesora una reliquia relacionada con la beatificación de Juan Pablo II: una ampolla con gotas de
sangre del fallecido papa polaco. Quizás por esto, se ha levantado al medio de la plaza atrás del
templo una estatua de más de dos metros para el Papa Juan Pablo II, que originalmente iba a ser
colocada en Parque Perú. Así, la Plaza de las Américas fue renombrada como Plaza Juan Pablo II
Padre de las Américas, en mayo de 2011, al ser develada la gran escultura sobre un pedestal en un
jardín circular, por los mismos días en que Roma anunciaba la beatificación del fallecido pontífice.
Está acompañada por un monolito de piedra con la famosa frase suya: "SÓLO EL AMOR
CONSTRUYE. EL ODIO DESTRUYE. Juan Pablo II".
A lo largo de su historia y esperas, la catedral ha recibido muchos mejoramientos en interior y en su
entorno, como la demolición de las antiguas viviendas de su costado izquierdo y la construcción de la
actual explanada, aunque esta remodelación se llevó algunos arbolitos que crecían cerca de su frente
y que le daban cierto encanto profano, hasta hace no muchos años. Sin embargo, la existencia de
filtraciones en los entubados de aguas del sector de calle Blondel con antiguos ductos de concreto, ha
provocado algunos problemas y desafíos para la mantención del edificio.
Como dato curioso, cabe recordar que los planos y diagramas guías de Goycochea también estuvieron
perdidos por largo tiempo, hasta que fueron reencontrados y dados a conocer recién en 2014.
Aparecieron en Lima, en un baúl de recuerdos familiares en la casa de doña Edith Sánchez Moreno
Jiménez, viuda del constructor Óscar Garibaldi, donde los halló una sobrina tacneña del arquitecto e
ingeniero, doña Charito Valdivia Sánchez. Ella los mostró al historiador también tacneño Luis
Cavagnaro Orellanda, y así volvieron a ver la luz estos preciados documentos, después de tantos años
durmiendo en el sueño de los justos.

12
DATOS SOBRE LA CATEDRAL

Catedral de Tacna o Catedral de Nuestra Señora del


Rosario

Monumento histórico

(según RS. 281-78-VC-5500 (26 de octubre de 1978) / RM. 0928-80-ED (23 de julio de 1980)1)

Fachada de la catedral de Tacna.

Tipo Catedral

Ubicación Tacna, Perú

18°00′52″S 70°15′07″OCoordenadas:
Coordenadas
18°00′52″S 70°15′07″O (mapa)

Uso

Culto Iglesia católica

Arquitectura

Construcción 6 de marzo de 1875-28 de agosto de 1954

Estilo Neorrenacimiento
arquitectónico 13
Opinión
La catedral de la ciudad de Tacna, tiene una construcción antigua,
donde se ve que hay bastantes insignias del arzobispado y el
Vaticano, la imagen de la Virgen es preciosa y mágica, el padre da
buenas misas, es un lugar espiritual.
Catedral de imponente infraestructura muy grande la iglesia y
hermosa para realizar un recorrido y visitarla de recomendación ir
a la misa y apreciar lo interno que está muy limpio y ordenado.
La Catedral es majestuosa en su fachada, solo la pude ver por
fuera, domina la plaza de Armas, es un buen punto de referencia

14
Bibliografía
 https://urbatorium.blogspot.com/2016/08/la-catedral-de-tacna-una-historia-de.html

 https://www.porconocer.com/peru/catedral-de-tacna.html

 https://www.enperu.org/la-catedral-de-tacna.html

 https://es.wikipedia.org/wiki/Catedral_de_Tacna

 http://proyectos.inei.gob.pe/web/biblioineipub/bancopub/Est/Lib0258/CAP07-01.htm

15

Você também pode gostar