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EL SECTOR INDUSTRIAL

El Ministerio de la Producción (PRODUCE) es el ente rector del sector industria en el Perú. Una de las
herramientas de gestión del sector es el reglamento de protección ambiental para el desarrollo de
actividades de la industria manufacturera, norma central que integra las obligaciones y mandatos que tienen
que cumplir las empresas industriales manufactureras en materia de protección ambiental. El reglamento
establece los lineamientos de la política ambiental del sector, así como las obligaciones específicas de los
titulares de actividades industriales, sea que recién vayan a iniciar operaciones o que las hayan venido
realizando antes de la aprobación de esta norma.

Siguiendo el esquema de los reglamentos de protección ambiental previos, el reglamento de protección


ambiental del sector industrial se centra en el estudio de impacto ambiental (EIA) y en el programa de
adecuación y manejo ambiental (PAMA), dándoles un contenido coherente con la normatividad vigente,
pero enfatizando su carácter preventivo y la importancia de que la población se involucre en la toma de
decisiones.

Si bien la industria manufacturera es no sólo clave para el desarrollo, sino a su vez intensiva en mano de
obra y generación de empleo, el Perú no ha podido desarrollar una industria sólida capaz de competir con
la industria manufacturera de países vecinos como Colombia y Venezuela. Asimismo, muchos de los
procesos industriales son obsoletos y grandes generadores de impactos ambientales, a lo que se debe
agregar los impactos significativos generados por el sector industrial informal.

Este sector tiene subsectores, como los de cemento, papel, curtiembre, textil y fundición, que son industrias
que utilizan numerosos recursos naturales y que generan impactos ambientales, especialmente aquellas
que no tienen una adecuada cadena productiva. Según el censo manufacturero del 2007, solo el 7.4% de
las empresas manufactureras del país cuenta con algún EIA.

Una de las primeras decisiones en materia ambiental en el sector industrial fue la de priorizar los
subsectores en los cuales se procedería a realizar la adecuación ambiental. Considerando que el sector
industrial incluye a más de 40 subsectores, se procedió a priorizar algunos pocos, quedando todavía varios
subsectores en los que no hay una obligación de adecuación ambiental (a excepción de ciertos casos
contemplados en la normatividad).

Este es el caso del sector industrial maderable, donde la mayor regulación ambiental se da en la etapa de
conservación y extracción del recurso forestal, dejando desatendida la regulación ambiental en la industria
forestal maderable. Esto es aún más preocupante si consideramos que la manufactura de maderas y
papeles representa el 17,3% del sector industrial. A ello, debe agregarse que, este no es el único subsector
desatendido, ya que de acuerdo al Censo Nacional de Establecimientos Manufactureros 2007, sólo un 7,4
% de las empresas manufactureras cuentan con Estudios Ambientales. 13 En esta medida, se requiere con
urgencia seguir trabajando para implementar adecuadamente la normatividad ambiental en el sector
industrial manufacturero.

Asimismo, aún es necesario reforzar el régimen de fiscalización y sanción a cargo de PRODUCE, a efectos
de ejercer una fiscalización ambiental adecuada y acorde con las necesidades del sector. También queda
pendiente la definición de una escala de infracciones y sanciones.

La apuesta del Estado peruano respecto de la producción más limpia14, se dio desde el año
2002, cuando se estableció el Centro de Eficiencia Tecnológica (CET), que en estuvo financiado
por la Agencia de Estados Unidos para la Ayuda Internacional (USAID) y la Secretaría de Estado
de Economía de la Confederación Suiza (SECO) por medio de la gestión del Consejo Nacional
del Ambiente (CONAM). Posteriormente, en una segunda fase, en mayo del 2007 se relanzó
una nueva imagen y denominación de la institución, denominándolo, Centro de Ecoeficiencia y
Responsabilidad Social (CER Perú), con el apoyo de la SECO. El CER Perú tiene como objetivo,
promover la competitividad de las empresas e instituciones peruanas a través de propuestas
innovadoras y buenas prácticas ambientales y sociales.
La SECO consciente de que las empresas no siempre están dispuestas a invertir en tecnologías
más limpias cuando el período de recuperación de la inversión es más largo comparado con las
inversiones «normales», creó el Fondo de Crédito Ambiental, cuyo objetivo principal es
incrementar el atractivo de las inversiones en producción más limpia, estableciendo una Línea
de Crédito Ambiental que garantizará hasta el 50% del crédito otorgado por los bancos,
además de ofrecer reembolsos parciales de hasta el 40% del capital invertido, luego de que el
CER Perú verifique la reducción de agentes contaminantes en el proceso productivo, como
resultado de la inversión financiada. Para calificar a la Línea de Crédito Ambiental, el proyecto
de inversión debe incorporar la adquisición de un equipo o tecnología nueva y moderna,
relacionada con la reducción de emisiones, reducción del consumo de agua y/o energía.

El CER Perú ha establecido que las pequeñas y medianas empresas se pueden asociar y realizar
conjuntamente un programa de producción más limpio aprovechando las economías de
escala. Sin embargo, debe reconocerse que en el sector industrial, las empresas del sector
industrial son en su mayoría micro empresas15, por lo que se requiere establecer los
mecanismos que permitan a estas empresas acceder a este tipo de fondos.

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14 Producción más Limpia (PML, o prevención de la contaminación) es un método para prevenir el impacto negativo derivado
por el proceso productivo. Intenta reducir o eliminar la creación de la contaminación por perseguir las buenas prácticas, el mejorar
la eficiencia en los procesos, el reciclaje y el reuso de materiales y efluentes, y el uso de tecnologías limpias. En:
http://www.cer.org.pe/facipub/upload/publicaciones/1/71/preguntas%20frecuentes%20ecoeficiencia.pdf

15 Según la clasificación de las empresas manufactureras por personal ocupado, se observa que el 96,4% de empresas del sector
industrial son de tamaño micro empresas (1 a 10 trabajadores), el 3,2% pequeñas empresas (11 a 100 trabajadores), y el 0,4 %
medianas y grandes empresas (100 a más trabajadores).

http://www.legislacionambientalspda.org.pe/

La Asociación de Bancos del Perú (Asbanc) informó hoy que, respecto a la participación de los
distintos sectores económicos en el total de créditos empresariales, los créditos a la industria
manufacturera representaron el 24.21% del total al primer mes del 2015.
En segundo lugar, se ubican los préstamos al comercio con 22.70%, seguido de las actividades
inmobiliarias, empresariales y de alquiler, con 11.78%, transporte, almacenamiento y
comunicaciones con 7.11%, electricidad, gas y agua con 5.69%, y minería con 5.38%.
Respecto a los sectores que registraron mayores tasas de crecimiento, destaca construcción.
Sus créditos llegaron a S/. 4,872 millones en enero de 2015 y registraron una disminución de
0.54% frente a diciembre de 2014, pero un aumento de 22.26% respecto a enero de 2014.

El avance de estos créditos, el mayor registrado el mes pasado, se explica por un mayor ritmo
de obras viales, centros comerciales, construcción de oficinas empresariales, así como de
departamentos y condominios multifamiliares.
Los créditos bancarios otorgados al sector educaciónmostraron un claro comportamiento
creciente en el último cuatrimestre, y a enero de 2015 sumaron S/. 1,945 millones. Este monto
fue mayor en 3.44% al obtenido en diciembre de 2014 y en 14.01% frente a lo registrado en
enero de 2014.
De acuerdo a cifras del Área de Estudios Económicos y Estadística de Asbanc, que recopila
información de 17entidades bancarias, la tendencia mostrada por estos créditos estaría en
línea con la creciente inversión y el marcado dinamismo en el mercado educativo, en el que se
vienen dando importantes adquisiciones y expansiones, tanto en colegios como institutos
superiores y universidades.
Los créditos a la industria manufacturera también mantuvieron una tendencia creciente.
Llegaron a sumar S/. 31,199 millones al cierre del primer mes del 2015, saldo mayor en 0.06%
respecto al observado en diciembre 2014, y en 11.33% frente a enero de 2014.

El avance mostrado en el último año se explica principalmente por la expansión del


financiamiento de subramas como la de fabricación de productos minerales no metálicos
(32.20%), fabricación de productos químicos (23.29%) y de productos de caucho y plástico
(19.71%).

Por otro lado, en cuanto a los créditos empresariales otorgados por la banca comercial a los
diferentes sectores económicos, estos sumaron S/. 128,878 millones a enero de 2015, mostrando
un avance de 0.14% frente a diciembre de 2014, y de 9.16% con respecto a enero de 2014.
Tomando en cuenta las previsiones de un mayor ritmo de crecimiento para el presente ejercicio,
así como la próxima puesta en marcha de importantes proyectos de infraestructura (Gasoducto
del Sur, Línea 2 del Metro de Lima, aeropuerto de Chincheros, entre otros), esperamos que los
créditos empresariales registren en el 2015 un ritmo de crecimiento más alto que el año previo.

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