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Juegos tradicionales

Integrantes:
Marcelys Acosta Montaño
Karina Garcia Moreno
Milton Mejía Acosta
Leisber Samper Zúñiga

Doc. Roberto Sanchez

Institución Educativa Escuela Normal Superior De Corozal


Formación Complementaria
Sem III

Pueblo Viejo – Magdalena


2019
Juegos
Tradicionales

Introducción
A lo largo de la historia, en nuestro país han estado presentes los juegos tradicionales, símbolo importante de nuestra cultura, y que han sobrevivido hasta llegar a la actualidad
gracias a la transmisión de generación en generación (de padres a hijos, de boca a boca, día tras día). Creemos que nuestra obligación es tratar por todos los medios que tengamos
a nuestro alcance el que estos juegos tradicionales perduren en el tiempo y sigan siendo identificador cultural de generaciones posteriores. Son señas de identidad cultural, por lo
que perderlos significaría perder parte de nuestra cultura. No obstante, cada vez estos juegos van cayendo más en el olvido. Los padres ya no tienen tanto tiempo para jugar con
sus hijos. La emigración de los habitantes de los pueblos a las grandes ciudades hace que los juegos tradicionales, que se desarrollaban en el ámbito rural (campos, placetas, aire
libre...), donde se conocían todos, pierdan fuerza al carecer las urbes de lugares apropiados y seguros para llevarlos a cabo. Un problema añadido que dificulta su práctica, es
la aparición de juegos más recientes y modernos, los videojuegos, que incitan en cierto modo al autismo (pues el niño no comparte sus juegos y se auto margina de forma inconsciente)
y la lucha de las empresas por anteponer unos juegos sobre otros.

¿Qué son los juegos tradicionales?

Los juegos tradicionales son aquellos juegos típicos de una región o país, que se realizan sin la ayuda o intervención de juguetes tecnológicamente complicados, solo es necesario el
empleo de su propio cuerpo o de recursos que se pueden obtener fácilmente de la naturaleza (piedras, ramas, tierra, flores, etc.), u objetos domésticos como botones, hilos,
cuerdas, tablas, etc.
Los juegos tradicionales les permiten a los niños conocer un poco más acerca de las raíces culturales de su región; contribuyendo a la preservación de la cultura de un país, y en
donde quedan resumidas las experiencias colectivas de generaciones, creando un medio bonito de enseñanza en donde el niño se enriquece jugando. Son una fuente de transmisión de
conocimiento, tradiciones y cultura de otras épocas; el hecho de reactivarlos implica profundizar en las raíces y poder entender mejor el presente.
Todos en algún momento de nuestra vida hemos utilizado el juego como vía de escape de la realidad en que vivimos, si bien estos se dan, sobre todo, en la etapa infantil, e juego
está presente a lo largo de la vida de cada uno y en todas las etapas vitales del ser humano. En el juego, el niño experimenta sentimientos de control y omnipotencia que le
permite reducir sus ansiedades y afrontar de forma más adecuada la situación. Consideramos el juego como medio para superar los constantes traumas que se dan en la infancia,
aunque creemos que esta perspectiva también es aplicable al adulto, pese a que el adulto no lo utilice en la medida que lo utiliza el niño.

Importancia del juego tradicional

Resulta de gran importancia para el desarrollo del presente trabajo explicar brevemente cómo se define el concepto de juego tradicional y diferenciarlo de los juegos populares
y autóctonos que tan íntimamente han ido ligados al mismo, haciéndose necesario el conocimiento de sus diferencias, para no confundir sus significados. Son varios los autores que
definen los juegos tradicionales. Para Ófele “los juegos tradicionales son aquellos que son transmitidos de generación en generación, en forma oral, que continúan perdurando,
manteniendo su esencia". Como podemos observar ambos autores destacan la transmisión, como característica principal de dichos juegos. Sin embargo, Pere La vega, resalta otras
cualidades de los mismos: "aproximarse al juego tradicional es acercarse al folklore, a la ciencia de las tradiciones, costumbres, usos, creencias y leyendas de una región. Resulta
difícil disociar el juego tradicional del comportamiento humano, el estudio del juego folklórico de la etnografía o etología". Para nosotros el sentido de juego tradicional se
aproximaría más hacia aquellas actividades lúdicas que reflejan y mantienen viva la cultura de sus participantes, gracias a su transmisión de generación en generación (de padres
a hijos, de boca a boca, día tras día). Hasta hace poco se realizaba una diferenciación errónea entre juego tradicional y popular. Se denominaban juegos tradicionales a los juegos
que eran realizados por los adultos de las clases altas de la sociedad, los cuales eran considerados cultos y aristócratas. Por otra parte, se denominaban juegos populares a los
juegos practicados por el pueblo bajo. Hoy en día esto no tiene sentido, ya que esa gran diferenciación de clases y de hábitos en los juegos, no resulta tan diferente como en
otras épocas. Hay que resaltar que todo ha pasado a llamarse juego tradicional.

Diferencia entre juego tradicional y autónomo

la diferencia entre juego tradicional y autóctono no tiene que dar lugar a equívoco. Lo autóctono es lo típico, lo característico de una zona determinada. Es decir, si un juego ha
nacido en una zona determinada se dice que es autóctono de dicha zona, no ha sido traído de otro lugar. Habrá variantes a su alrededor, pero el juego autóctono seguirá siendo de
la zona originaria. El juego tradicional, a diferencia del autóctono, puede haber llegado de otro lugar y una vez allí comenzar a pasar de generación en generación y ser considerado
juego autóctono, aunque no haya sido originado en esa zona, simplemente cumpliendo con la transmisión de éste a través de distintas generaciones, de forma predominantemente oral
(Trigo, 1994). Un ejemplo claro son las distintas modalidades de juegos de pelota que hay en España (desde la pelota vasca hasta la pilota valenciana). Estos juegos de pelota
desarrollados en la Edad Media, originariamente venían de las regiones nórdicas, como Francia, y se fueron introduciendo en nuestro país de norte a sur. Se han ido asentando y
en cada región ha sufrido su evolución, dándole el carácter propio que los define como tal. Al principio llegaron como juegos tradicionales, pero sufrieron una evolución propia en
cada lugar, originando un juego concreto con carácter particular, por lo que acabó denominándose deporte autóctono de la región. Y al igual que ha pasado con los juegos de pelota,
lo ha hecho con el resto de deportes. Unos se han institucionalizado más (normalización deportiva), y otros no han sufrido este proceso y se han quedado en mero juego.

Beneficios

Estos son algunos beneficios de los juegos tradicionales

 Fomentan la sociabilización: el juego es una de las mejores formas de relacionarse socialmente, los niños que viven en un entorno cercano se ponen de acuerdo para
salir a jugar, o basta que salgan a la calle para que se acerquen otros niños y jueguen juntos Fomentan la sociabilización: el juego es una de las mejores formas de
relacionarse socialmente, los niños que viven en un entorno cercano se ponen de acuerdo para salir a jugar, o basta que salgan a la calle para que se acerquen otros
niños y jueguen juntos.
 Desarrollo físico: el nivel del sedentarismo en los niños sumado a malos hábitos alimenticios, hacen que cada vez haya más obesidad infantil con los problemas que eso
conlleva en un futuro. Cuando los niños juegan corren, saltan, bailan, trepan, esquivan, reptan, etc., lo que les permite mejorar sus capacidades físicas, tales como
fuerza muscular, coordinación, velocidad y resistencia.
 Creatividad e Imaginación: no hace falta tener un juguete elaborado o muy costoso. Los juegos desarrollan el uso del propio cuerpo o de los elementos que nos ofrece
la naturaleza (arena, piedras, ramas, etc.). Con la imaginación, además se pueden convertir objetos en desuso o reciclados, que terminan siendo para los niños un
verdadero tesoro.
 Diversión sin fronteras: los juegos tradicionales se pueden realizar en cualquier momento y en cualquier lugar, y muchas veces no se necesita ningún implemento.
 Sentido rítmico: a través de muchos juegos, danzas y bailes, el niño se familiariza con las pausas asociadas al movimiento y le aporta sentido rítmico al cuerpo, mejorando
su conciencia corporal.
 Seguridad personal: los juegos fomentan la seguridad en sí mismos y hacen que los niños se desenvuelvan con más facilidad con los demás. Tienen que confiar en los
demás compañeros y este vínculo les refuerza la seguridad en ellos mismos.
 Vivencias: los niños se relacionan con sus pares, con quienes comparten inquietudes y pensamientos y vivencian experiencias y aventuras inolvidables fuera del entorno
familiar.
 Crea lazos de amistad: los lazos de amistad que se forman a través del juego a veces duran para toda la vida. Los amigos de juego de la infancia, pasado el tiempo, los
recordamos con un cariño muy especial, al igual que todos los recuerdos de esa etapa de nuestra vida.
 Son atemporales: los juegos pasan de padres a hijos, pueden sufrir algunos cambios, pero la esencia es la misma.

Objetivos

El objetivo principal del presente trabajo es justificar la presencia de estas manifestaciones lúdicas en la sociedad actual e investigar sobre su relación con la educación física
escolar. Los juegos tradicionales no están institucionalizados, y sus normas pueden ser variadas según las necesidades de los participantes (edad, complexión, sexo, carácter...).
De este modo se da pie a la creatividad, a tener el poder de modificar y así adaptar estos juegos a las necesidades de sus participantes. Es importante resaltar el sentido que
las personas dan actualmente a la transmisión de sus prácticas lúdicas. La dimensión pedagógica de una práctica hoy no se puede implantar sin destacar los valores y funciones
simbólicas que le acompañan. Los juegos son también una herencia que como un arte de vivir favorecen el bienestar colectivo. El conocimiento de los juegos tradicionales es, desde
este punto de vista, muy enriquecedor para fomentar una educación actual pero también una formación de futuro.

El juego tradicional en la sociedad

Los juegos tradicionales son un elemento importante de la cultura de cada país. Su conocimiento y puesta en práctica conserva la esencia de sus valores, impidiendo su pérdida. A
lo largo de los años, la utilización de los juegos tradicionales dentro del ámbito escolar, se ha ido perdiendo debido a la mala transmisión de éstos por parte de profesores y la
comunidad educativa. Esto ha sido debido, entre otros factores menos relevantes, a la pérdida de transmisión oral de la cultura popular en las casas, la calle, etc. Cada vez
resulta más difícil el volver a retomar la enseñanza de ésta cultura en las escuelas, debido al gran fenómeno de globalización, que provoca la pérdida de las particularidades de
esta cultura de los juegos tradicionales en los distintos pueblos. Desde diferentes áreas se está intentando recuperar la enseñanza de los juegos, pero está resultando
verdaderamente costoso recuperarlos y mantenerlos. El cambio en las sociedades y los hábitos de vida, han hecho que en la mayoría de los pueblos y ciudades se pierdan las
costumbres de los juegos tradicionales en las calles (por gran tránsito, poca seguridad,) El conjunto de juegos, canciones o poesías populares que conforman la denominada tradición
oral se encuentran sometidos a una profunda crisis, que se agudiza por momentos en una sociedad regida por el consumismo y la tecnología. Rueda (en Herrador et al, 2004: 30)
afirma: "hoy los espacios y lugares en que frecuentemente se producían y expresaban estos juegos y canciones infantiles, casi siempre ubicados en las calles y las plazas del
pueblo, están desapareciendo de forma alarmante quedando reducidos prácticamente al ámbito escolar". Uno de los principales factores que influyen en la pérdida de la cultura
oral de los juegos tradicionales, lo encontramos dentro del seno familiar. Hoy en día los padres trabajan, casi no tienen tiempo de estar con sus hijos, como afirma Trigueros
(2002), y se les dedica menos tiempo del aconsejable. La socialización primaria (o llevada a cabo por la familia) ha perdido relevancia para cobrarla la secundaria (o llevada a
cabo por la escuela), hecho que lleva a la pérdida de tradiciones culturales dentro de la familia.
El juego ha sido y será siempre un elemento imprescindible en el área de la educación física, por su gran efecto socializador, capacidad de diálogo, decisión grupal, estrategia,
etc. El juego se ha utilizado tanto en deportes individuales como colectivos, como parte de una sesión específica o de un calentamiento. Sin embargo, en el área de educación
física, como apunta La vega (Trigueros): el juego tradicional ha sido y sigue siendo uno de los principales marginados debido a que el deporte de masas es el contenido preferido
de la misma y hasta ahora se ha venido utilizando como un medio metodológico para obtener objetivos puramente motores o corporales y no para un fin en sí mismo". Por otro lado,
dentro del contexto escolar, tanto profesor como alumno buscan en los juegos tradicionales únicamente diversión y entretenimiento, totalmente aceptable, pero a nuestro entender
insuficiente. El juego tradicional es más que un medio o recurso metodológico con un fin ajeno a él mismo, tiene valor intrínseco y es por tanto un medio educativo de primer orden
debido a su función de culturización, conservación y transmisión de los valores profundos de la cultura popular. La desaparición de los juegos tradicionales por parte de unas
generaciones a otras sería un efecto negativo, ya que estos aportan valores muy importantes a los niños, los cuales no van a obtener estos valores por medio de ningún otro juego.
Para que esto no ocurra y para que se le dé la importancia que merece, el juego tradicional, como afirma Trigueros (2002), no tiene que aparecer en el currículum y pasar
directamente a la clase de educación física, sino que tiene que estar presente en los diferentes niveles de concreción curricular". La posibilidad de enriquecer el currículum
escolar, con los juegos tradicionales, lleva implícito el conocimiento de las necesidades de los recursos y espacios que nos proporciona el análisis del contexto. Una buena selección
de los mismos debe ser acorde a la realidad de la práctica y de los alumnos. En esta sociedad de consumo y capitalismo, el marketing y la publicidad transforman nuestros juegos
tradicionales en algo que dista mucho de sus orígenes. Se hace por tanto necesario luchar desde dentro de las escuelas para convertir los juegos tradicionales en un objeto de
estudio dentro del proyecto curricular. No debemos dejar que se pierda nuestra cultura ya que forma parte de la vida de cada uno de nosotros y de las siguientes generaciones.
Los juegos tradicionales son un aspecto socializador importantísimo, ya que están íntimamente relacionados con la comunicación, siendo éste un elemento esencial en los juegos. Esta
comunicación es la que lleva al acercamiento entre las personas, entre los niños y sus profesores y entre los propios niños, intentando que esto nos lleve a resolver y evitar que
surjan problemas de agresión y falta de integración. Otra ventaja de los juegos tradicionales es la posibilidad de modificar sus reglas o crear otras nuevas. Esto nos va a permitir
adaptar los juegos a todos los niños si surgen diferencias y evitar los problemáticos enfrentamientos. Los juegos llevan a la unión de los niños, evitando la agresión, debido a que
tienen que unirse formando grupos, colaborando para obtener los objetivos. "El carácter social de los juegos es una característica indiscutible de los mismos. Los juegos tradicionales
no escapan a ella y menos aún si tenemos en cuenta el intercambio que suponen no solo entre niños y niñas sino también entre generaciones", (Ófele). La transmisión de dichos
juegos de generación en generación no es solo de forma oral, sino también escrita y a través del arte.

Clases de juego

Existen varias clases de juego:


 Juegos o formas jugadas individuales. La participación de los individuos persigue un objetivo individual.
 Juegos colectivos. Los individuos participan y se ayudan mutuamente para conseguir un objetivo común.
 Juegos mixtos: combinación entre ambos.

Juegos

 Carrera de sacos
 El pañuelo

 La gallinita ciega

 La rayuela (peregrina)
 Balón prisionero (el timbo)

 Canicas (bolinche)

 La aceitera (agacha el bote)

 La lleva
 La carta

 Bolos

 Trompos
 La cuerda (pita)

 Las cometas

Conclusión
El juego ha tenido desde sus orígenes un papel importantísimo en el desarrollo y la socialización del ser humano, por ello un claro objetivo de la Educación Física, y, por tanto,
un claro objetivo nuestro, como futuros ejecutores de esta disciplina, es recuperarlo e introducirlo en la misma. Pensamos que la Educación Física debe esclarecer sus prioridades
y sus principios, ya que estos han quedado enturbiados por la desorientación que han sufrido algunos de sus componentes, como claro ejemplo, la mayoría de los deportes. Pero la
Educación Física no sólo queda formada y establecida por los deportes, en ella se contemplan mucha variedad de actividades que enriquecen y hacen de la Educación Física una
disciplina necesaria en la vida de las personas, y por tanto, necesaria en el currículum escolar. Una de estas actividades que han hecho rica a la Educación Física, y deben seguir
haciéndola, son los juegos tradicionales, que proporcionan a lo físico el sentido de gozo y disfrute de la actividad y que, como acabamos de comentar, se contrapone y prevalece
sobre otros sentidos que le están otorgando la inclusión y práctica de otras actividades. Con ello, la intención no es hacer entender que queramos que estas otras actividades
tengan que ser desligadas de la Educación Física, sino, más bien, nuestro punto de vista es que estas otras actividades deberían ser reconducidas, al menos en uso del ámbito
escolar; que habría que dar más importancia, hasta entonces, a las actividades que mantienen su sentido inalterado, enriqueciendo a la Educación Física en valores positivos y
haciendo de ella una disciplina que respeta los principios y prioridades establecidos. Es importante recuperar la transmisión de los juegos por sus contenidos morales, socializadores,
educativos y culturales. Transmiten valores profundos de cultura popular. Animan al niño o a cualquiera de sus participantes a implicarse en la actividad motriz. Facilitan las
relaciones sociales. Ayudan a conservar las tradiciones de una forma lúdica y divertida. Como dato anexo, quisiéramos aportar que la totalidad de los componentes del grupo de
trabajo somos totalmente conscientes de la pérdida que está produciéndose del juego tradicional. Somos plenamente conscientes debido a que hemos estado inmersos en el cambio tan
rápido que está sufriendo la sociedad en general, debido al progreso y la modernización. Algunos de nosotros hemos disfrutado de una infancia caracterizada por la práctica del
juego, disfrutando de éste hasta altas horas de la noche, y prevaleciendo ante maquinaria que simula la práctica del mismo. Otros, por el contrario, y debido a vivir engrandes
ciudades, disfrutaban del juego tradicional cuando el horario lo permitía, normalmente fines de semana, y sustituyendo el juego por las maquinarías antes citadas. También es cierto
que se da diferencia de edad entre los componentes, pero esto lo hace todavía si cabe más curioso, ya que entre el más mayor y el más joven existe una diferencia de edad de 6
años, sin embargo y tras diversos comentarios, hemos podido llegar a la conclusión y resolver que en esos 6 años de diferencia la sociedad ha sufrido un cambio bastante notorio.
Un claro ejemplo de esto, era que había juegos que el de mayor edad había practicado a lo largo de toda su infancia y que el más joven ni siquiera conocía el nombre. De ello no
se pueden extraer conclusiones definitivas y resolutorias, pero sí que creemos son ejemplos que pueden ayudar al lector a darse cuenta de algunas de las cosas que se han tratado
en el trabajo.

Referencias bibliográficas

TRIGO AZA, Eugenia. “Aplicación del juego tradicional en el currículo de Educación Física”. Vol. I y II. Barcelona.
LAVEGA BURGUÉS, P. “Juegos y deportes populares tradicionales.” Inde, Barcelona.
OFELE, M.R. “Papel social de los juegos tradicionales. Proyecciones pedagógicas”. Tándem. Didáctica de la Educación Física, 2003.
MORENO MARTINEZ, Ramiro. “Juegos tradicionales y escuela” Anaya, 1999.
GUTIÉRREZ GARCÍA, Carlos. “Los juegos tradicionales” Educación Física: propuestas para el cambio, 2003.
GIMENO MARTÍN, Saturnino. “Los juegos populares como recurso didáctico para la educación física”. Revista de ciencias de la educación, 1998.
IMERONI, Andrea. “Juego como medio educativo” Revista de Educación Física, 1989.

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