Você está na página 1de 3

Las principales consecuencias de la contaminación del agua pueden ser:

Desequilibrios biológicos. La presencia de ciertos químicos en el agua pueden causar la


proliferación anormal de ciertos microbios o algas, lo cual desbalancea la cadena trófica y
genera competencias anormales que, a la larga, ocasionan la muerte excesiva de ciertas
especies que van a descomponerse añadiendo materia orgánica al agua.

Alteraciones químicas. Los cambios en la química del agua puede llegar a extremos letales, en
los que la fauna y flora locales se extingan o migren hacia otras zonas, causando daños
ecológicos severos.

Impacto climático. Los cambios de temperatura, pH y otras propiedades del agua consecuencia
de sustancias añadidas o sólidos en suspensión inciden en el comportamiento de las masas del
líquido, disminuyendo su evaporación y por lo tanto su precipitación y alterando el clima local.

Contaminación de tierra y aire. La contaminación hídrica no se queda sólo en el agua, sino que
se esparce hacia la tierra y el aire, conforme al ciclo hídrico, en un efecto dominó de
consecuencias impredecibles.

Entre las infinidades de consecuencias derivadas de la


contaminación que el hombre aporta al agua de lagos, ríos y mares,
destaco:

 Desaparición de vida marina y destrucción de ecosistemas


acuáticos.
 Generación enfermedades en la población humana.
 Efectos nocivos en el desarrollo de las especies teniendo en
cuenta el sistema inmunológico, supervivencia y las dificultades
en reproducción.
 Filtraciones de napas subterráneas desde basurales o desechos
tóxicos enterrados.
 Envenenamiento de especies y ecosistemas, por motivos del
consumo del agua o por la falta de ella.
 Falta de agua potable: se trata del problema más urgente
en muchos puntos del planeta y, en el futuro, será más
común de lo que nos gustaría. La contaminación del agua
conlleva la destrucción de muchas fuentes de agua dulce de
donde se obtiene el agua potable, por ejemplo los acuíferos.
Su contaminación conlleva la pérdida de estas fuentes de
agua dulce y, en consecuencia, la creación de zonas que no
tienen acceso a agua potable pese a la presencia de agua
en el subsuelo.
 Encarecimiento de las actividades económicas: otra de
las consecuencias de la contaminación del agua es el
encarecimiento de muchas actividades económicas,
especialmente las relacionadas con la agricultura y la
ganadería, aunque también las relacionadas con la
industria, que usa cantidades ingentes de agua para el
funcionamiento y limpieza de su maquinaria. Al haber
mayores cantidades de agua contaminada en el planeta, el
uso de agua dulce potable se encarece y, en consecuencia,
también todas aquellas actividades económicas que
dependen de su uso.
 Enfermedades no infecciosas: otra de las consecuencias
de la contaminación del agua es la aparición de
determinadas enfermedades no infecciosas en personas y
animales como consecuencia de la presencia de
contaminantes. Un buen ejemplo lo encontramos en la
presencia de metales como el mercurio, el plomo, el
aluminio y el cadmio, que pasan del medio ambiente al
agua y, finalmente, a los océanos. Estos metales pasan a la
cadena alimenticia y, finalmente, llegan al ser humano,
donde están asociados a enfermedades degenerativas y la
aparición de determinados tipos de tumores.
 Enfermedades infecciosas: del mismo modo que el agua
es un medio para distribuir los metales pesados, las
bacterias y otros gérmenes se extienden en este medio con
facilidad cuando las aguas no son tratadas de forma debida.
La consecuencia directa es la aparición de focos de
enfermedades infecciosas en poblaciones concretas que
consumen aguas contaminadas por el agente infeccioso en
concreto.
 Destrucción de ecosistemas y desertización: otro de los
problemas de la contaminación del agua es que, al
contaminar el agua, se contaminan también los suelos. La
consecuencia directa es la destrucción de toda forma de
vida dependiente o asociada a los suelos contaminados,
que terminan por convertirse en desiertos al no poder
albergar en ellos formas de vida.
 Aumento de los flujos migratorios: otra de las
consecuencias de la contaminación del agua es el aumento
de flujos migratorios. Estos flujos migratorios son la
consecuencia de la destrucción y desertización de los
suelos. Al destruir un ecosistema y los suelos asociados a
este, se crean zonas donde la agricultura es sencillamente
imposible. En consecuencia, la economía local termina
cediendo, lo que obliga a las personas de esta área a
emigrar a otras zonas y, de este modo, se crean áreas
contaminadas completamente despobladas como
consecuencia de la contaminación inicial del agua.

En primer lugar, la desaparición de la biodiversidad y los ecosistemas acuáticos. También el ser


humano se ve muy perjudicado a causa de la alteración en la cadena alimentaria y contrae
enfermedades al beber o utilizar el agua contaminada.

Por todo ello, debemos garantizar la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y el


saneamiento para todos, tal y como recoge el sexto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible
adoptados por Naciones Unidas en la Agenda 2030.

Você também pode gostar