SERÁN MIS TESTIGOS.

MANUAL DEL CATEQUISTA

INTRODUCCIÓN

La catequesis de adultos al servicio de la iniciación a la vida cristiana, se debe entender como

un proceso que integra una catequesis de experiencia de Dios, y de ejercicio de la vida cristiana. Esto
implica un cambio de una catequesis principalmente teórico y doctrinal, hacia una catequesis más
vivencial. (Card. Claudio Hummes).

El modelo de la iniciación cristiana es el catecumenado bautismal, de tal manera que una

catequesis iniciática es una catequesis en clave catecumenal. Es una catequesis que tiene una fuerte
dimensión litúrgico-sacramental. Está íntimamente unida a la liturgia de los tres sacramentos de
iniciación y es una fuerte vivencia de comunión eclesial.

Un aporte significativo de esta catequesis es la dimensión misionera. “El verdadero discípulo

que hace experiencia de Dios en Jesucristo, siente dentro de sí la pasión misionera de anunciar a los otros
lo que vive, lo que ha experimentado, para conducir siempre más personas a un encuentro con Cristo”
(Card. Claudio Hummes).

Esta dimensión misionera se complementa con un fuerte sentido de compromiso por la

transformación de la sociedad a la luz de los principios del evangelio y de la Doctrina Social de la
Iglesia.

La iniciación es un camino que recorre el adulto y el joven, que llamados a la fe por el primer
anuncio y el kerigma, se han encontrado personalmente con Cristo y responden a esa gracia dando su
adhesión de fe y conversión, que los lleva a hacer una experiencia de vida cristiana, se insertan
activamente en la comunidad eclesial, animados por la gracia, por su respuesta a la llamada a la fe y por
su compromiso de ser testigos del evangelio.

La catequesis de inspiración catecumenal sigue las cuatro etapas del catecumenado bautismal,
adaptándolas a las circunstancias concretas del grupo de adultos, sean catecúmenos o catequizandos. Y
celebra cada etapa alcanzada en lo que se llama “paso de etapa”, en la que la libre respuesta del
catequizando es la clave.

Las cuatro etapas son:

1
 • El PRECATECUMENADO, en el que se presenta el primer anuncio, como llamada a la fe e
invitación a la conversión. Paso: ingreso al catecumenado.

• El CATECUMENADO propiamente dicho, período de catequesis integral, en el que se busca

profundizar la fe inicial, nacida de la respuesta del encuentro con Cristo y de la llamada a la conversión.
Paso: petición de los sacramentos y aceptación del párroco.

• El tiempo de PURIFICACIÓN E ILUMINACIÓN, catequesis en torno al bautismo, corresponde

con el tiempo litúrgico de la cuaresma; es el momento ahondar en el sentido compromiso bautismal y de
la vivencia cristiana (texto “Felices los que…..”). Concluye con la celebración de los sacramentos de la
iniciación o la renovación solemne de las promesas bautismales.

 El tiempo de la MISTAGOGÍA, o catequesis de la comunidad. Se desarrolla durante el

tiempo pascual e implica la profundización de la vida creyente en la comunidad cristiana por la vivencia
sacramental y el testimonio.

En Venezuela, hemos elaborado un itinerario de iniciación a la vida cristiana de los adultos,

“Serán mis testigos”, que desarrolla el camino catecumenal anteriormente descrito.

El objetivo del itinerario es: ofrecer a los adultos las orientaciones, ámbitos y medios que
favorecen la conversión y la adhesión a Cristo, el crecimiento y maduración de la fe, la participación en
la comunidad eclesial y la opción de un proyecto cristiano de vida, según el Evangelio.
1ª Etapa: Precatecumenado
El objetivo de esta etapa es: descubrir el sentido de la vida en el encuentro con Jesucristo vivo,
como llamada a la fe y a la conversión.
Es clave comprender que esta etapa NO es de catequesis, por eso la metodología difiere en
aspectos esenciales de la propia del resto de las etapas.
La finalidad de la etapa precatecumenal es acercase a los creyentes y no creyentes, bautizados
no iniciados y no bautizados, desde las experiencias más hondas del ser humano al encuentro con la
persona de Jesús resucitado, rostro y manifestación del amor infinito de Dios para cada uno de nosotros.
Por lo tanto es importante no hacer saltos ni dar por supuesto nada.
El momento clave de la etapa es la PROCLAMACIÓN DEL KERIGMA. Nuevamente hay que
decir que esta proclamación tiene unas características propias. Unción y testimonio, alegría y fuerza en el
Espíritu. “Lo que hemos visto, oído, sentido… se los anunciamos” (I Jn 1,1 y sig). El catequista se
2
prepara para proclamar el kerigma en la oración que le reviva su encuentro personal con Jesús, y toma
conciencia de la asistencia particular del Espíritu Santo para este encuentro, que es particularmente
vivencial, y que acompaña a los participantes a hacer la misma experiencia de descubrir el rostro
personal de Dios en Jesús.
La finalidad de esta etapa es la base irrenunciable de toda respuesta de fe: el encuentro con Jesús
vivo.
Toda catequesis necesita dar un tiempo para el encuentro, la conversión y la adhesión de fe. Solo
a partir la conversión a Jesús y el deseo de conocerlo para seguirlo, comienza la catequesis (ver DGC 66,
67, 82 entre otros). El texto de apoyo para la etapa es: “UNA BUENA NOTICIA”
2ª Etapa: Catecumenado
El objetivo de la etapa es: favorecer un proceso de personalización y profundización de la fe.
Después de dar el paso de adhesión a la fe y pedir hacer el camino de iniciación a la vida
cristiana con el catecumenado, comienza el tiempo de la catequesis integral (catecumenado) como
desarrollo gradual de esa fe inicial.
Al finalizar esta etapa el catecúmeno/catequizando tendrá que hacer una opción, seguir adelante
y pedir los sacramentos para ser parte de esa comunidad de seguidores de Jesús, la Iglesia, pedir renovar
las promesas del bautismales; o dejar el camino de fe por sentir que no se está suficientemente capacitado
para el compromiso que implica.
3ª Etapa: Iluminación y purificación
La celebración del paso en el que la Iglesia responde a la petición de renovar las promesas
bautismales (o de ser admitido a la celebración de los sacramentos de la iniciación cristiana), consiste en
la acogida en la comunidad cristiana y un tiempo para consolidar el encuentro con Jesús y expresarlo en
la participación a los sacramentos, el ingreso a la comunidad y la vida nueva en Jesús.
La etapa de iluminación y purificación, se inicia con el rito llamado de elección.
El Ritual de Iniciación Cristiana de Adultos indica que la Cuaresma es el tiempo más apropiado
para la preparación al bautismo, porque “es tiempo para renovar a la comunidad de los fieles junto con
los catecúmenos por la liturgia y la catequesis litúrgica, mediante el recuerdo o la preparación del
Bautismo, y por la penitencia (SC1 109). Así dispone a los catecúmenos para celebrar el misterio pascual,
que los sacramentos de la iniciación aplican a cada uno (AG2 14)”3.

1
Constitución sobre la Sagrada Liturgia: Sacrosanctum Concilium
2
Decreto sobre la Actividad Misionera de la Iglesia: Ad Gentes
3
RICA, Observaciones Previas, 21
3
 El objetivo de la 3ª etapa es: ahondar en la experiencia cristiana, en la oración y el seguimiento
de Jesús como camino para vivir el compromiso bautismal.
La catequesis de este tiempo se centra en los sacramentos de la iniciación, particularmente en el
bautismo, y en la penitencia para los ya bautizados.
Se trata de ayudar a descubrir el sentido de la iniciación sacramental y que el
catecúmeno/catequizando llegue a una mejor comprensión y valoración de los signos sacramentales de la
comunidad cristiana.
Las celebraciones señaladas en el Ritual se intensifican en esta etapa y tienen lugar en el marco
de la celebración eucarística de la comunidad cristiana: los escrutinios que se realizan el 3°, 4° y 5°
domingo de Cuaresma y las entregas del Símbolo de la Fe (Credo) y de la Oración Dominical
(Padrenuestro).
4ª Etapa: Mistagogía
El RICA describe este tiempo de la siguiente manera:
“Concluida la etapa precedente, la comunidad juntamente con los neófitos progresa, ya con la
meditación del Evangelio, ya con la participación de la Eucaristía, ya con el ejercicio de la caridad, en la
percepción más profunda del misterio pascual y en la manifestación cada vez más perfecta del mismo en
su vida.”4
La descripción se ajusta al objetivo de la cuarta etapa en el itinerario Serán mis testigos:
Consolidar la vivencia del seguimiento de Jesús por la celebración sacramental, la participación en la
comunidad cristiana, y la capacitación para afrontar desde la fe las situaciones complejas de la realidad.
La lectura orante de la palabra de Dios, la participación en la celebración litúrgica de la
comunidad, y los encuentros catequéticos conforman la experiencia de esta etapa culminante. Particular
importancia tiene el conocimiento de la vida parroquial, de sus grupos y movimientos así como de la
acción pastoral, a fin de que puedas descubrir la vocación y ministerio al que te sientes llamado a vivir en
la parroquia5.

4
RICA, Orientaciones previas, 37
5
RICA: Por la misma razón que en el caso de los catecúmenos, la preparación de estos adultos
requiere tiempo prolongado (cfr. Observaciones previas, n. 21), para que la fe infundida en el
Bautismo pueda crecer, llegar a la madurez y ser grabada plenamente por medio de la formación
pastoral que se les proporciona; y conviene que su vida cristiana sea confirmada por la oportuna
enseñanza que se les propone, por la catequesis adecuada a ellos, por el trato con la comunidad de
los fieles y por la participación en algunos ritos litúrgicos. (296)
4
 Al terminar el itinerario de iniciación el catequizando se integra en las tareas y misión de
edificación de la Iglesia y la sociedad6.
Los contenidos de esta última etapa se organizan en torno a la identidad de la mistagogía. Así
los temas comienzan por el área cristológica, sigue la litúrgica, y la comunitaria, para ir al área
antropológica y cerrar con la moral y la de espiritualidad.
El aspecto celebrativo del itinerario en esta etapa se centra en la eucaristía dominical y en el
sacramento de la reconciliación. La participación en la liturgia de la comunidad tiene la doble finalidad
de ayudar a integrar activamente al grupo en la asamblea litúrgica y animar con su testimonio a los fieles
que frecuentan la parroquia.
El proceso de iniciación cristiana concluye con una celebración de envío en la que los
catequizandos expresan su compromiso en la comunidad y son enviados a la misión.

LA METODOLOGÍA
Hay una diferencia en la metodología de la etapa precatecumenal, con el resto de las etapas, y
esto es comprensible ya que la primera etapa se inscribe en el anuncio misionero, mientras el resto del
itinerario es catequético propiamente dicho.
El KERIGMA: el método antropológico se adapta a las características particulares de la etapa
previa a la catequesis y que conduce al encuentro con Dios en Jesús resucitado, invita a la conversión y a
la adhesión de fe.
Los pasos del proceso de cada encuentro siguen el método antropológico: VER-JUZGAR-
ACTUAR-CELEBRAR.
Para esta etapa se ha hecho una modificación para no adelantar el proceso, en atención a la
experiencia gradual del encuentro con Jesús Resucitado.
VER: toma de conciencia de la realidad humana y a partir de ella se invita a profundizar en las
preguntas más hondas y significativas de toda persona.
JUZGAR: el “abrirse al mensaje cristiano” es desde el testimonio de los discípulos de Emaús,
no tratados como “lectura de la Palabra de Dios”, sino la experiencia de personas que pasan por
situaciones muy humanas.
ACTUAR: en este caso no se habla de compromiso sino de continuar profundizando y mirando
la vida.

6
BOROBIO D., Catecumenado e iniciación cristiana. Un desafío para la Iglesia hoy. Centro de Pastoral Litúrgica, Barcelona 2007,
pág. 65
5
 CELEBRAR: no se hace todavía “oración cristiana” ni de lectura de la Palabra de Dios, esto
vendrá a partir de la 2ª etapa cuando se entre en la catequesis propiamente dicha. Hablamos de “celebrar
la vida”, con palabras humanas y textos de otras personas en búsqueda.
La CATEQUESIS de las tres etapas siguientes desarrolla el método antropológico de la siguiente
manera:
VER: es el momento en que el catequista ayuda al grupo a conectar la situación histórica con su
realidad existencial y las preguntas de significado de los hechos que surgen cuando se ahonda en ellos.
Partir de la realidad ha de ser llegar a los sentimientos e interrogantes que hay en el corazón humano que
busca el sentido de lo que acontece en la fe. (“Partimos de la realidad”)
JUZGAR: La Palabra de Dios ilumina todo el acto catequético y es el elemento que da conexión
a todos los demás7. La Palabra ilumina la vida. En un clima propicio para la escucha, la reflexión y el
diálogo ella es proclamada. El Dios de la revelación se hace presente en medio del grupo con señales,
personas, gestos que vienen contenidos de forma especial en su palabra.
El juzgar lleva a la síntesis que conjuga textos bíblicos y explicaciones sencillas que dan cuerpo
a lo que creemos. (“Nos abrimos al mensaje Cristiano)
ACTUAR: Acoger la Palabra en la vida conlleva la respuesta en el compromiso transformador.
El catequista ayuda con sugerencias para que brote de los catequizandos la necesidad de encaminar la
vida a la luz del evangelio, en la respuesta de fe. Es iniciación a la vida de seguimiento y testimonio.
(“Respondemos con la vida”)
CELEBRAR: es el momento de la respuesta festiva y orante a la Palabra recibida y al encuentro
con la persona de Jesús. Este momento es esencial para la iniciación en la vida de oración y liturgia de la
Iglesia. El encuentro catequético tiene como cierre una celebración en la que todos los responden
festivamente a la Palabra recibida. (“Celebramos nuestra fe”)

UNA PALABRA SOBRE LA PLANIFICACIÓN

Se puede asumir como fecha que ayuda a determinar los tiempos del itinerario la fecha de la
Vigilia Pascual del año subsiguiente al inicio de la catequesis de adultos.
Por ejemplo, si se va a comenzar a partir de septiembre 2014, la fecha de la Vigilia Pascual de
2016 es: sábado 26 de marzo.
En la semana del Miércoles de Ceniza 2016 (10 de febrero) se realizará la celebración de la
“elección” y comienzo de la etapa de Purificación e Iluminación.

7
CEEC: Catequesis de la comunidad, 288, EDICE, Madrid. 1983
6
 Por tanto a partir de octubre 2014 se da inicio al Precatecumenado que durará entre dos y tres
meses (hasta diciembre o enero 2015).
La celebración de ingreso al catecumenado (a la catequesis) es a finales de enero o principios de
febrero y el catecumenado ha de durar todo el 2015 hasta inicio de febrero de 2016.
Con este calendario amplio se distribuyen los encuentros, las celebraciones y los pasos de etapa.
La mistagogía comienza enseguida después de la Pascua y se extiende hasta el mes de junio o
julio (la celebración de envío no está asociada a Pentecostés).

UNA PALABRA SOBRE EL CATEQUISTA

La actitud del catequista: maestro o testigo?
El catequista de adultos es un mediador, un facilitador de la experiencia de fe él mismo vive. En
un encuentro de adultos todos son verdaderos interlocutores de la Palabra revelada.
Respetar esto es el fundamento de los encuentros catequéticos de adultos. No sirve la postura de
protagonista, de eje aglutinador, de sabelotodo. Cuando hablamos de mediador estamos haciendo una
llamada a la esencia misma del modelo de catequista: Jesús de Nazaret y su pedagogía para catequizar. El
modelo lo tenemos en la experiencia de los dos de Emaús. Aun siendo él la Palabra, no interfirió en el
proceso de los caminantes. Dejó que ellos cubrieran su camino, anduvieran sus etapas hasta el momento
del descubrimiento de quién era el compañero de camino.
Ser compañero de camino, guía, mediador, no es tarea fácil. La tentación de saltar etapas, de
querer que todos lleguen al mismo tiempo, e incluso ocupar el lugar de Jesús dando normas y marcando
caminos a seguir.
Después que Jesús se revela, desaparece a la vista de los caminantes, y deja el espacio a la
libertad de la persona: los discípulos son los que toman la decisión de regresar y anunciar, se ven urgidos
de llevar el testimonio a los demás, compartir lo vivido en comunidad y seguir caminando.
Caracas, 24 de junio de 2013
María Irene Nesi fma
Directora DECAT-SPEV (2009-2015)

A continuación el esquema global del itinerario: las etapas y los textos correspondientes, las citas bíblicas que
explicitan su orientación y los contenidos que se desarrollan en los encuentros catequéticos. Los temas se agrupan en siente
áreas que abarcan la integralidad de la experiencia cristiana y garantizan esta integridad en cada etapa y permiten evidenciar la
gradualidad en la profundización de la experiencia cristiana.

7
 ESQUEMA GLOBAL DEL ITINERARIO DE INICIACIÓN CRISTIANA CON ADULTOS: “SERÁN MIS TESTIGOS”

ETAPA/ÁREA Texto bíblico Antropológica Bíblica Cristológica Comunitaria Litúrgica Espiritualidad Moral
Precatecumenado “¿Qué es el ¿Quién soy? Cristo da “¿Qué tenemos
“Una buena hombre para Busco una sentido a mi que hacer?”
noticia” que te acuerdes respuesta: vida. El despertar de
Llamada y de él? (Sal 8, sentido de la Primer anuncio la fe.
conversión 5) vida y apertura de Cristo:
a la llamada a la
trascendencia conversión
Catecumenado “¿Y según Por amor creó El amor de Por amor nos La Iglesia es el Por los Llamados a El Código de la
“Luz para todos ustedes, ¿quién Dios al hombre Dios se hace envió a su Hijo pueblo de la sacramentos se vivir la vida Alianza y la
los pueblos” soy yo?” (Mc y a la mujer. presente en un Único. Jesús nueva Alianza, realiza en cristiana: la ruptura. Nueva
Catequesis 8,29) Este amor se pueblo: le realiza la continuadora nosotros la conversión y la ley y pecado.
integral refleja en la habla, lo elige, nueva Alianza de la misión de salvación fe
familia y en la hace alianza Cristo Vivir según la
comunidad con él y el voluntad de
pueblo no es Dios.
fiel
Iluminación y “Si conocieras El amor de La experiencia Jesús nos La confesión Por el Renovados en Una nueva
purificación el don de Dios hace todo de Israel, muestra el de fe en la bautismo Cristo, somos Alianza y una
“Felices los Dios… yo te nuevo en figura de camino comunidad nacemos a una criaturas nueva vida: las
que…” daría agua Cristo Cristo y de eclesial nueva vida nuevas bienaventuranzas
Catequesis viva” (Jn 4,10) nuestra historia del Reino
bautismal –
cuaresmal
Mistagogía “Serán mis Colaboradores Pascua: Jesús Somos En los Llamados a La vida en el
“Un solo testigos “ (Hch de Dios: la resucitado miembros de la sacramentos vivir una Espíritu: ley y
corazón” 1, 8) transformación permanece comunidad de vivimos la vocación y una libertad cristiana
Catequesis de la de la sociedad entre nosotros fe: la Iglesia Alianza y misión
comunidad – y de la historia fortalecemos
pascual los vínculos
comunitarios

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