Benemérita Escuela Nacional de Maestros

Planeación y Gestión
Castillo Cortés Guadalupe Sujey
4° 9
La práctica educativa.
Cómo enseñar

Las secuencias didácticas y las secuencias de contenido

“La exposición de un tema, la observación, el debate, las pruebas, las ejercitaciones,

las aplicaciones, etc., pueden tener un carácter u otro según el papel que se atribuye
en cada caso al profesorado y alumnado, la dinámica grupal, los materiales
utilizados, etc.” (Zabala Vidiella, 2000, pág. 53).

“Podemos considerar que, frente a un modelo generalmente expositivo y

configurador de la denominada clase magistral, ha surgido una diversidad de
propuestas en las cuales la secuencia didáctica se vuelve cada vez más compleja”.
(Zabala Vidiella, 2000, pág. 54).

“Poner sobre la mesa los instrumentos que nos permitan introducir en las diferentes
formas de intervención aquellas actividades que posibiliten una mejora de nuestra
actuación en las aulas como resultado de un conocimiento más profundo”. (Zabala
Vidiella, 2000, pág. 54).

“Una vez identificadas las secuencias de contenido, el siguiente paso consiste en

relacionarlas con el conocimiento que tenemos sobre los procesos subyacentes al
aprendizaje de los diferentes contenidos según su tipología.” (Zabala Vidiella, 2000,
pág. 81).

“En cuanto a la atención a la diversidad, debemos tener en cuenta que, en un

aprendizaje de hechos, si los alumnos son suficientemente mayores, la atención
siempre recae en los propios alumnos” (Zabala Vidiella, 2000, pág. 83).

“Dado que los conceptos y principios son temas abstractos, requieren una
comprensión del significado y, por consiguiente, un proceso de elaboración
personal”. (Zabala Vidiella, 2000, pág. 83)

“Actividades que posibiliten el reconocimiento de los conocimientos previos, que

aseguren la significatividad y la funcionalidad, que. sean adecuadas al nivel de
desarrollo, que provoquen una actividad mental, etc. Las secuencias de contenidos
conceptuales tienen que contemplarlas todas”. (Zabala Vidiella, 2000, pág. 83)
“Las actividades deben partir de situaciones significativas y funcionales, a fin de que
el contenido pueda ser aprendido con la capacidad de poder utilizarlo cuando sea
conveniente”. (Zabala Vidiella, 2000, pág. 84)

“La secuencia debe contemplar actividades que presenten los modelos de

desarrollo del contenido de aprendizaje”. (Zabala Vidiella, 2000, pág. 84)

“Para que la acción educativa sea lo más beneficiosa posible, es necesario que las
actividades de enseñanza/aprendizaje se ajusten al máximo a una secuencia clara
con un orden de actividades que siga un proceso gradual”. (Zabala Vidiella, 2000,
pág. 84)

“Se requieren actividades con ayudas de diferente grado y práctica guiada. El orden
y el progreso de las secuencias de enseñanza/aprendizaje, en el caso de los
contenidos procedimentales, estarán determinados, la mayoría de las veces, por las
características de las ayudas que se irán dando a lo largo de la aplicación del
contenido”. (Zabala Vidiella, 2000, pág. 85)

“El trabajo independiente es, por un lado, el objetivo que se persigue con la práctica
guiada y, por el otro, se asume en su verdadera complejidad cuando se aplica a
contextos diferenciados”. (Zabala Vidiella, 2000, pág. 85)

“Las características de los contenidos actitudinales y el hecho de que el componente

afectivo actúe de forma determinante en su aprendizaje hacen que las actividades
de enseñanza de dichos contenidos sean mucho más complejas que las de los otros
tipos de contenido”. (Zabala Vidiella, 2000, pág. 85)

Opinión: Realmente esta lectura es muy buena, en lo personal a veces no tenemos

en cuenta que no siempre ni todos los contenidos se enseñan de la misma manera,
y que tenemos que tomar en cuenta todo lo que conlleva a su aprendizaje, que
depende de la ayuda se dará un aprendizaje, que no todo es repetición.

Referencias
Zabala Vidiella, A. (2000). La práctica educativa. Cómo enseñar. España: Graó.